Te ame, Te amo y Te amare (+18)(epilogo) (22/11/2013)

Naruto frunció el ceño, molesto ¡Desecho! Aun sin poder creer que Sakura Haruno, su Sakura-Chan, quien horas antes le entrego su cuerpo, ahora lo estaba desechando como cualquier cosa ¿De verdad lo odiaba demasiado como para vengarse?, sea lo que sea, lo mataba de tristeza.

--¿Qué esperas, Naruto?—Pregunto Sakura a un punto de sufrimiento extremo, con un gran esfuerzo de no llorar—Quiero que te largues de Konoha, o al menos de mi casa…
--Sakura-Chan, yo…
--Mi nuevo amante llegara pronto, si no te vas te tocara vernos teniendo sexo—Afirmo la joven mordiendo su labio, apretando el puño con todo el odio del mundo—Solo vete Naruto.
--¡No lo hare!—Grito el rubio muy enojado-- ¡Aquí están mis hijos y con ellos me quedare!
--No son tuyos, son solo míos y quieras o no, tendrás que irte.
--¡Claro que son mío! No los hiciste sola ¿O sí?
--¡No digas tonterías! Solo fue un juego.
--¿Le llamas un juego hacer el amor? ¡Lo siento! Pero yo si lo hice con amor…
--Pues que triste, por que el sexo es igual contigo que con otro. Solo vete.

Sakura miro sin parpadear a Naruto, mostro su rostro más seguro e hipócrita que pudo disimular, trato de suavizar sus facciones tristes y que su voz no sonara tan triste, pero su cabeza ahora no estaba en su cuerpo o en Naruto, su mente vagaba por la preocupación ¿Dónde estará Minato? ¿Hinata cumplirá su promesa? No lo sabía, ni lo sabrá hasta que tenga a Minato en sus brazos.

Por otro lado, Naruto examino detalladamente el rostro y el cuerpo de ella ¿Estaba bien? No lo parecía, tal vez su voz era segura, pero sus manos estaban temblando, sus ojos tenían un aura extraña, unos ojos seguros pero a punto de llorar ¿Sera que algo paso en su ausencia? Tal vez.

--Lo entiendo, Sakura—Concluyo el rubio—Solo querías vengarte ¿No es así? Por eso ni siquiera me escuchaste cuando te dije que te explicaría.
--Vaya, al fin pensaste…

Por un momento, Naruto creyó que lo decía de verdad, después de todo, estaba muy segura de aquello, sus palabras… Tan frías. Entonces Kushina comenzó a llorar y llorar, para lo cual Sakura se dio media vuelta y la tomo en sus brazos para acurrucarla entre sus brazos y arrullarla, y fue cuando Naruto lo vio ¡Sakura no puede ser esa! Algo malo estaba pasando, de eso ya estaba seguro.

--Sakura, sabes que soy fuerte—Argumento el rubio—Soy veloz y puedo encontrar a cualquiera—Miro la habitación-- ¿Dónde está Minato?
--Esta con Ino…
--No—Negó con el rostro y la miro muy serio-- ¿Dónde está Minato?
--Él…
--Mas bien—Agrego el rubio acercándose-- ¿Con quién esta de verdad?

Sakura sentía mucha presión, se sentía fatal y su corazón latía a tanto estrés

--Se lo llevaron, Naruto… Me quitaron a Minato--. Ella dejo caer su cuerpo para romper en llanto, pero Naruto corrió y la tomo entre sus brazos para presionarla contra su cuerpo.
--¿Qué paso, Sakura-Chan?—Pregunto seriamente, abrazándola y secando las lagrimas que escurrían de sus ojos a sus mejillas.
--Tiene a Minato… Se lo llevo y lo lastimara—Ella no dejaba de llorar—Y yo lo permití… ¡Maldición! Se lo llevo, me lo quito…-- las manos le temblaban y la voz se quebraba.
--Tranquila…--Pero Sakura se sentía mal, horrible, inútil y culpable, era su hijo ¿Cómo lo permitió? entonces Naruto alzo su rostro y la beso.

Fue tierno, suave y ligero… Como si por un segundo todas las preocupaciones desaparecieran.

--Sakura—Dijo el rubio separando sus labios de los de ella-- ¡Jamás vuelvas a mentirme! Y sea lo que sea ¡Juntos lo arreglaremos! ¿Entiendes?
--Si—Bajo la mirada—Pero ella dijo que si te enterabas, mataría a Minato…--Oculto el rostro en el cuello de Naruto—Tengo miedo, Minato es tan delicado y yo… y yo…
--Y tu eres fuerte—Afirmo el rubio besando su frente y sonriendo—Ahora cuéntame ¿Qué sucedió?
--¡Hinata!—Afirmo la joven con desgarre—Ella quiere que te vayas con ella a cambio de Minato…
--Entonces eso haremos.


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Minato no dejaba de llorar, y eso a Hinata le molesta, no porque un bebe llorara, sino porque no era su bebe el que lloraba.

--Todo habría sido mejor—Dijo la joven acercándose a Minato l cual estaba sobre una cuna—Si él me hubiera elegido a mí.

Hinata, soltó un suspiro y acaricio la mejilla de Minato, sin embargo, el pequeño solo lloraba derramando lagrimas de aquellos ojos verdes ¡Los fastidiosos ojos de Sakura!

--Pronto regresaras con tu mami, ya no llores—Sonrió—Y no los volveré a molestar nunca más.

Entonces, Hinata tomo su abrigo y salió con la intención de buscar a Naruto, ¡Seguro que ya está deprimido! Seguro que alguien puede llegar y consolarlo.

Camino por varios minutos, recorrió algunos metros en busca de la rubia cabellera de él, pero no encontraba nada, hasta que por casualidad, dio la vuelta en una esquina y choco con él…

--N-Naruto-Kun…--Susurro la chica sonrojándose—Y-Yo quería pedirte perdón, por fingir un embarazo…
--No te preocupes—afirmo.
--¿Estás bien? Te vez, mal…
--Tenias razón—Naruto soltó un suspiro y la miro—Sakura solo jugó por venganza—Bajo la mirada—Cuesta creerlo, pero no quiero verla…

Hinata sonrió mientras pensaba “Así que si lo hizo” y entonces se acerco a Naruto para abrazarlo con mucho cariño, mientras él también la abrazaba rodeándola con sus brazos y presionándola contra su cuerpo.

Naruto sonrió, solo así, logro convencer a Sakura, si él fingía no saber nada y seguir todo el plan de Hinata, pronto Minato volvería a manos de Sakura, cuando eso suceda, el dejaría toda la farsa y se encargaría de Hinata. No la mataría ni la lastimaría, después de todo, Hinata siempre fue su amiga, pero al menos se encargaría de que no los volviera a molestar.

--Vámonos —Sugirió Hinata tiernamente—Volvamos a la vida que teníamos antes de que recordaras ¿Si? Ella no te quiso, jamás lo hizo.
--No lo sé, mis hijos están con ella y aunque me duela…
--¡Los vendremos a visitar!—Dijo la joven con ilusión—Si tanto los quieres podemos venir a verlos, solo vámonos… Por ahora al menos.

Naruto sonrió y la abrazo.

--Bien, vámonos lejos, ahora mismo.
--¿Ahora?—Pregunto Hinata exaltada, aun tenía a Minato en su apartamento—M-Mejor v-vámonos esta n-noche…
--¿Por qué?
--Tengo que empacar…
--Bueno, te ayudo—Tomo su mano y camino en dirección a su apartamento—Así nos vamos lo más rápido posible.
--No Naruto, mejor dile a Tsunade-Sama que te vas conmigo—Hinata se soltó algo nerviosa—Y así en la noche nos vemos en la puerta de Konoha.

Naruto dudo por un momento, en cierto modo, deseaba llegar al apartamento de Hinata y ver a Minato ¡Así podría reclamarle! Pero si ella no se lo permitió, tendría que seguir su juego, al menos hasta que Minato esté en manos de Sakura.

--Me parece bien—Afirmo el rubio—Te veo en la noche y nos marcharemos de Konoha lo más rápido que podamos—Se dio media vuelta—Hinata, no quiero que le digas a Sakura que me voy.

Y así se marcho, ahora solo le quedaba esperar a que oscurezca para ver a Hinata por la noche y asegurarse que Minato esté bien, y así, solo así, podría dejar su farsa, mientras solo iría a comunicarle a Tsunade la situación.

Para la mala suerte de Naruto y buena de Hinata, sus compañeros habían estado de misión, por lo que la intervención de alguno de ellos iba a ser casi imposible, sin mencionar que casi nadie sabía de la situación, él regreso de Hinata había sido a escondidas y el de Naruto aun no llegaba a oído de todos.


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--¡Oh que enojo!—Gruño Ino levantándose de golpe-- ¡Yo la mato!
--Ino Tranquila, era lo mejor…--Sakura suspiro—Ya puedes irte, es algo tarde.
--Volveré—Ino se levanto con Kushina entre sus brazos—Cuidare de ella, ten por seguro que no dejare que nadie se le acerque hasta que todo esté bien.
--Gracias—Sakura sonrió mientras depositaba un beso en la frente de la bebé dormida—Cuídala mucho, Ino.
--¡Claro! ¿Cuándo te he fallado?—Suspiro—Por cierto… Te dije que seducir a Naruto es fácil.
--¡Ino! ¡No es momento de esas cosas!—Gruño la joven sonrojada—Pero gracias.

Ino solo le sonrió y se despidió, ahora se encargaría de cuidar a Kushina y mantenerla en un lugar seguro.

Mientras tanto, Sakura se quedaría sola en su casa esperando por Minato, algo preocupada pero una parte de ella ya estaba tranquila, ya no sentía la presión contra su pecho ni tanta preocupación, porque ahora tenía a Naruto apoyándola y eso era mucho en aquellos momentos.

Las horas pasaron tan lentas que por un momento Sakura pensó que nunca llegaría y el pánico se apodero de su cuerpo, el miedo, un temor insaciable de perder a alguien, tal vez Minato no tenía más que algunos meses de a ver nacido, pero ya era su vida.

--Veo que estas muy tranquila—Susurro una voz desde el fondo de la sala de la casa de ella.
--Hinata—Comento la pelirosa segura ¿Si no quien más?-- ¿Dónde está Minato? Cumplí con lo que me pediste…
--Oh eso—Sonrió—Te agradezco por hacer un buen trabajo, ahora te entregare a tu mocoso—Hinata quito la manta de su brazo y mostro a Minato dormido, descansando—Me costó un infierno hacerlo dormir.
--¡No le hiciste nada! ¿Verdad?—Pregunto la pelirosa frunciendo el ceño—Si lo tocaste…
--Tranquila, solo lo arrulle.

El alivio creció en el pecho de Sakura, Minato estaba sano y salvo, eso era perfecto. Estaba a punto de tomar a Minato entre sus brazos, sus ojos se llenaron de felicidad y alivio, entonces Hinata se alejo pesadamente de ella.

--¿Qué?—Sakura la miro extrañada-- ¿Qué te pasa? ¡Dame a Minato!
--Ahora que lo pienso…--Susurro Hinata mirándolo—Si Minato y Kushina viven, entonces Naruto tendrá que venir a verlo y eso no me agrada.
--¿Qué? Pero… ¡Pero tu dijiste que me lo devolverías!
--Bueno—Sonrió—Cambie de opinión.

Sakura sintió que el corazón se le rompía, que lentamente la torturaban de la peor manera y eso, la hizo enojar demasiado.

--Eres…--Susurro bajando la mirada y cerrando el puño—Eres de lo peor Hinata… ¿Por qué?
--Por que el debía estar conmigo...—Susurro mirando a Minato—No importa.

Y tras decir aquello, Hinata alzo la mano concentrando chakra en la yema de sus dedos para presionar precisamente un punto débil en Minato, algo que lo mataría en silencio y dormido, pero eso no lo iba a permitir Sakura ¡Por Kami que no! Así que justo cuando Hinata sentía la victoria en sus labios, Sakura corrió y tomo su brazo con fuerza, apareciendo justo a su lado a una velocidad muy rápida. Ella precioso su brazo contra su mano, la rabia crecía dentro y un ligero dolor domino su vientre.

--¿He?—Hinata la miro—Sakura… ¿Qué haces? ¡No puedes pelear! ¿Lo recuerdas?

Entonces, Hinata trato de zafar su brazo mientras apretaba a Minato contra su pecho y alzaba su pierna para patear el estomago de Sakura, lo cual no logro, puesto que esta dio un salto esquivándolo y soltando a la pelinegro.

--Eso me dolió—Susurro la oji-blanca, colocando a Minato sobre el suelo al otro extremo de la habitación—Muy bien Sakura ¿Quiere pelear? Bien.

Ella, colocándose frente a Minato, coloco sus manos en un estilo de pelea y encendió el Byakugan en sus ojos, entonces Sakura solo se dedico a cerrar los puños, sin mencionar alguna palabra, aun que, realmente no tenía ganas de hablar, solo quería hacerle saber lo que sentía a golpes.

Hinata cargo el crakra en sus manos y corrió hacia Sakura de manera violenta, por lo que esta se dedico a esquivar sus golpes, no podía permitirse hacer un desastre, Minato podía peligrar. Rápidamente Hinata golpe el hombro de Sakura y alzo su pierna para patearla por la quijada, cosa que logro mandando a Sakura por el aire y caer al suelo bruscamente, entonces, Sakura se levanto evitando perder tiempo y corrió a un lado de ella, al legar lo suficientemente cerca cerro sus puños y los unió, saltando sobre su cabeza para golpearla en esta hasta enterrarla en el suelo y si es posible, en la tierra.

--¡No puedes!—grito Hinata al ver a Sakura arriba de ella apunto de golpearla con su puño cerrado-- ¡Si haces fuerzas morirás!

Pero Sakura no la escucho, continuo, sin embargo, Hinata se hizo a un lado a centímetros de ser golpeada, para su suerte logro recibir únicamente el impacto, el suelo se quebró al igual que la tierra debajo de aquello. Sakura alzo la mirada y se aseguro de que Minato estuviera bien, claro, él estaba más lejos de ella…

La pelirosa, miro a Hinata levantándose con seguridad, sin embargo, un dolor interno comenzó a llenarla desde el vientre hasta el estomago, como un ardor pulsante agobiante que la obligo a doblarse y retorcerse en el suelo destrozado, con un grito profundo, en verdad dolía, y más la asusto cuando bajo al mirada y pequeñas gotas de sangre escurría entre sus piernas…

--Morirás si sigues así—Sonrió—Mejor resígnate y cuida de tu hija.
--¡No!—Grito la chica sobre el suelo—Moriremos las dos, Hinata.

Y tras decir aquello se levanto aguantando el dolor, con unas extrañas marcas sobre su frente (desconocida para Hinata) cerró el puño y un aura de poder la rodeo, alzo la mirada segura y corrió hacia Hinata, decidida e ignorando todo. A Hinata solo le dio tiempo de gritar cuando recibió el golpe…


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Naruto estaba en la puerta, la gran entrada de Konoha, esperando por Hinata muy impaciente, se supone que debía llegar desde hace media hora ¿Qué sucedía? ¿Por qué no llegaba? ¿Habrá pasado algo? Sin duda, los malos pensamientos se hicieron presentes.

De pronto, el gran ruido, el polvo y lo atroz inundo la vista y oídos del rubio, quien desde la entrada logro ver un gran impacto a lo lejos, al extremo de la aldea, algo grande se había roto, un golpe, algo que parecía una explosión.

--¡Sakura-Chan!—Grito alterado, seguro de que algo había pasado…


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No lo podía creer, simplemente no se explicaba lo que había ocurrido… Su casa estaba destrozada de un lado, en lado izquierdo estaba abierto junto con el suelo, el polvo hacia la vista casi imposible, por suerte, un lado de casa estaba completo, como si alguien lo había protegido. Fue cuando Naruto, asustado, ¡aterrado! Escucho el chillido de un bebe que provenía dentro de la parte entera de la casa.

Rápidamente corrió y al entrar vio algo que lo dejo helado… Sakura estaba sobre el suelo, su vestido manchado de sangre mientras sus brazos y piernas llenas de polvo, entre sus brazos, lloraba Minato con desgarre cubierto por una manta amarilla llena de polvo.

--¡Sakura-chan!—Grito el rubio para entrar y rápidamente tomarla entre sus brazos y recargarla contra lo que quedaba de pared y así tomar a Minato.
--N-Naruto…--Sonrió la joven muy débil, con pequeñas gotas caer de su labio y los ojos entrecerrados.
--¿Q-Que paso? ¿Por qué estas así?—Él, alterado, aterrado lleno de miedo la miro con cierta desesperación.
--¿Minato está bien?—Pregunto ella, con débil aliento y voz suave.
--Si está muy bien—Afirmo el rubio mostrándole al pequeño bebé entre sus brazos-- ¿Pero qué paso? ¡Maldición, Sakura!
--¿¡Que sucedió aquí!?—Naruto alzo la mirada para encontrarse con unos ojos miel desde el extremo del lugar lleno de polvo y una silueta lejana que se acercaba.

Poco a poco, la silueta se acerco y figuro la figura de una mujer que a poca distancia se identificaba por Tsunade, la cual al ver a Naruto corrió inmediatamente.

--¿Pero qué sucedió?—Pregunto exaltada la rubia.
--¡No lo sé!—Grito el rubio con cierto enojo y preocupación.
--Hinata—Suspiro la rubia débilmente—Quería matar a Minato y yo…--Sus ojos se llenaron de lagrimas—Yo no la iba a dejar…
--¡Pero Sakura, sabes muy bien que tiene prohibido pelear!—Regaño la rubia frunciendo el ceño y agachándose para comenzar a revisar su cuerpo.
--¿Prohibido pelear? ¿Por qué?—En aquellos Naruto se sintió tan, engañado…
--Sakura…--Tsunade suspiro—Su embarazo no fue del todo bien y su cuerpo quedo herido, tenía que guardar reposo mínimo un año porque si no… --Bajo la mirada—Sufriría una hemorragia interna, se desangraría por ello.
--Ya no importa—Protesto la joven quien miro a Naruto—Naruto… Te amo—Sonrió.
--¡No!—Grito el joven mientras sus ojos se llenaban de lagrimas-- ¡No digas eso! Siento que te estás despidiendo… ¡Y no!
--Cuida de Minato y Kushina…
--¡No Sakura-Chan!
--Que sepan que siempre los ame—Comenzó a llorar—Que siempre estaré con ellos y no les des tanto Ramen… Se bueno y compresivo.
--¡Tsunade haga algo!—Naruto miro a Naruto con rabia, pero esta solo cambio la mirada con tristeza.
--Quisiera… Pero su cuerpo esta destrozado por el esfuerzo, no debió pelear…
--¿Qué sucedió?—Grito otra voz a lo lejos, la cual rápidamente se acerco y al ver a Tsunade, Naruto, Sakura y Minato corrió a su lado-- ¡Sakura!
--Ino… ¿Cómo está Kushina?—Sakura la miro y dejo salir un suspiro.
--Está bien, esta con mi padre…--Susurro la rubia llenando sus ojos de lagrima y mirando a Tsunade la cual la miraba con un expresión de:”Lo siento…”
--¿Qué sucedió?—Pregunto el rubio mientras dejaba a Minato en manos de Ino y tomaba entre sus brazos a Sakura y la pegaba a su cuerpo.
--Hinata está viva—Susurro la pelirosa tomando la mano de Naruto—Esta inconsciente al otro lado de eso estoy segura…--Sonrió—Te amo...Naruto.

Y tras decir aquello, sus ojos se fueron apagando, aquel brillo de vida de opaco al igual que su mirada dejando helada… Naruto al ver aquello la sujeto con más fuerza y la pego a su cuerpo para llorar.

--Sakura-chan—Dijo casi sin aliento, con los ojos llenos de lagrimas y sintiendo que el corazón se le destrozaba en mil pedazos, sintiendo que todo fue su culpa y que jamás pudo disfrutar lo que él habría querido, su familia… Desecha por alguien que no supo respetar, por un pequeño detalle, se había ido la persona que mas amaba…

--Naruto…--Susurro Tsunade mientras sus ojos se llenaban de lagrimas—Ahora no puedes dejar a Minato y a Kushina, tienes que seguir, yo me encargare de encerrar a Hinata. Pero tranquilo, estamos contigo.
--Ya lo sé—Susurro sin dejar de llorar—Solo siento que jamás pude decirle lo mucho que la amaba—Acaricio su cabeza—siempre te ame, te amo y te amare…Sakura-chan.

Y así se levanto, seco las lagrimas y miro a Minato entre los brazos de Ino, el dolor podía ser muy grande, podía desear no seguir pero ella le había dejado dos grandes razones para vivir y no podía rendirse, era hora de convertirse en un padre de verdad.

El polvo cubría su vista, apenas podía identificar el lugar o la forma donde estaba ¿Qué había pasado? Aun los recuerdos y lo aturdida que estaba no le permitían establecer algo claro, solo sentía un fuerte y pulsante dolor en su cuerpo, algo que atacaba desde su abdomen hasta su pecho, molesto y fuerte dolor.

--Q-Que…--Susurro mientras su vista se aclaraba, logrando ver ruinas, madera destrozada como algunos utensilios domésticos, entonces recordó todo, Sakura la había golpeado…

Hinata trato de levantar su cuerpo pesado del suelo, la asustaba ver la sangre salir desde su abdomen con aquel trozo de madera clavado ¡Le dolía! Pero aun no saciaba su pregunta más grande ¿Qué le paso a ella? Tenía que admitir que para Hinata era molesto pensar que estaba como si nada, si quiera un golpe, pero jamás pensó lo que vio al llegar, mientras arrastraba los pies de lo pesado que estaban, y miro a Naruto.

Dejo su vista atenta al joven rubio que estaba frente a sus ojos, aun el polvo no dejaba ver muy claro lo sucedido, pero el chillido de un bebé despertaba todo sentido, por muy herida que estuviera ella, ya se sentía en casi los cinco sentido.

Ahí estaba él, pensó Hinata, sobre el suelo y entre sus brazos cargando un cuerpo sin vida, el cuerpo que alguna vez saco sonrisas en él ahora lo llenaba en llanto. Naruto se veía muy triste, Ino cargaba del pequeño que ella trato de herir, mientras Tsunade tomaba con fuerza el hombro del rubio y susurraba algunas palabras que ella no logro escuchar, pero lo que más le impactaba, era ver a su amiga, o al menos a la que alguna vez llamo amiga, tirada sobre los escombros de su casa, sus ojos verdes sin vida y su piel manchada entre el polvo y la sangre y frente a ella a Naruto, su más grande admiración.

Entonces fueron los segundos más largos en la vida de Hinata. No le importo que su cuerpo herido se desangraba lentamente, no le importo que la vieran a pocos metros de ella, no le importo la destrucción que causo, solo se centro en mirar a Naruto, aquel rubio que alguna vez amo con todo su corazón, que adoro y admiro a tantos limites de dar la vida, aquel que sonreía y continuaba con valor, aquel que ahora solo miraba un cuerpo muerto con lagrimas y desesperación, eso que ella convirtió… ¿Por qué? Por egoísta, se repitió la joven sin ánimos.

¿Había sido egoísta? Ni siquiera la respuesta la quería escuchar en sus pensamientos ¿Qué había hecho? Años atrás, pareciera que se lo merecía, que ella tenia más derecho de tenerlo a él que su amiga Sakura, quien lo había rechazado ciento de veces y maltratado, mientras ella suspiraba enamorada por él, pero ahora que la miraba tirada y sin vida, se sentía la peor persona ¿Qué había sido de la chica dulce que alguna vez lo fue? ¿Cambio por amor? No, por egoísmo…

--Naruto…--susurro la rubia entre lágrimas—Hay que llevarnos el cuerpo y arreglar las cosas…
--Tsunade-sama—comento la rubia secando sus lágrimas y tomando con más fuerza a Minato—Sera mejor que dejemos a Naruto un rato solo.


Tsunade miro a Naruto, quien solo la miraba y tomaba su mano en silencio, tenía que admitir que sin duda esto le afectaba y no ocultaba su tristeza, Naruto estaba deprimido.

--Pude salvarla—Comento el rubio en voz ligera y rota—Pude evitar esto, tal vez si no le hubiera hecho caso y hubiera ido directamente con Hinata, ella estaría enojada pero viva…
--Naruto no te atormentes…
--Solo no tenía que hacerle caso…
--Naruto…
--El verdad estaba feliz—cerro los ojos y las lagrimas cayeron al suelo en gotas pesadas—En verdad creí que seriamos felices para siempre…

Hinata cubrió su boca, el poco polvo que quedaba ya se estaba esparciendo y sin duda la vería en pocos segundos, pero eso ya no le importaba, ahora se sentía mal… ¿Había lastimado tanto a Naruto? Él único hombre que amo, al que le tenía respeto y demasiado cariño, ahora lo había hecho sufrir, si tan solo no hubiera interferido en su boda… Nada hubiera pasado.

Hinata sintió que miles de agujas se clavaban en su pecho, no en su cuerpo, solo en su corazón, cuando la mirada triste de Naruto dejo de ver a Sakura y la miro a ella ¡Y la odiaba! Aquella de las mocas miradas de odio que podía tener Naruto, ahora eran solo dirigidas para ella, al final, solo causo que la persona que más admiraba la odiara…

--¡Que haces aquí!—Le grito Naruto levantándose bruscamente—Vete Hinata… ¡VETE!
--N-Naruto-Kun…
--¡QUE TE LARGUES!—El rubio cerro el puño y se acerco, pero entonces Ino tomo su razón y negó con la mirada—Solo vete… vete…--Bajo la mirada.
--¿Hinata?—Tsunade la miro, el brazo de la joven colgaba lleno de sangre de su hombros, pero su mirada era fija a la del rubio, como si hubiera visto a un fantasma—Estas detenida—Comento con seriedad y acercándose-- ¡No lo puedo creer! No creí que fueras capas…
--Hinata—Ino no la miro bajando la cabeza—Era tu amiga… ¿Por qué?—abrazo a Minato—Llévatela, por favor…

¿Por qué se sentía tan culpable? Tal vez, ¿Por qué causo la muerte de su amiga? ¿Por qué el hombre que ama la odia? ¿Por qué decepciono a todos? ¿O por todo lo demás? La última opción la convencía más que nada, ahora que pensaba las cosas todo era más doloroso, ni ella misma podía creer a lo que llego su locura, su egoísta e hipocresía ¿Por qué había estado tan ciega? Pero el tiempo no retrocede.

--No, Tsunade no me puedo ir—La rubia ignoro al pelinegro, mientras la tomaba del brazo con fuerza y la jaba-- ¡Espero Tsunade-Sama! N-Naruto…
--Hinata aquí no tienes nada que ver—Tsunade por dentro sentía una inmensa necesidad por… ¿Destrozarla? Peor ¿Torturaba? Peor aún… Pero como Hokage no le era permitido más que encerrarla, tenía que ser responsable, así que sus sentimientos seria ocultos.
--¡-N-Naruto-Kun! ¡Espera!—Su fuerzas era tenues, a tal punto que un empujón la derribaba, pero aun así lucho contra la fuerza de Tsunade para llamar la atención de Naruto, el cual, estaba que la mataba ¡Estaba enojado! Furiosos, ninguna descripción explicaba la lluvia de sentimientos que experimentaba en aquel momento, solo sabía que si la veía un poco más, podría hacer algo que no debía.
--Cierra la boca, Hinata—Comento la Hokage con furia en sus palabras.
--Tsunade-Sama e-espere u-un poco… Por favor.
--¿Para qué? ¿Quieres ver su cuerpo? ¡Maldita sea Hinata! No me hagas hacer algo que no debo.
--¡N-Naruto-Kun!—Volvió a gritar Hinata—Y-Y… ¡Yo puedo devolverla!

¿Ella había causado todo eso? Entonces, ella debía arreglarlo, o al menos eso pensaba Hinata, sintiendo un nudo, sintiéndose fatal e inesperadamente culpable, lo que anterior mente jamás había sentido, culpa. Tal vez la sentía ahora y no antes, porque había causado algo que no tenia solución, porque ya no la miraba como un contrincante, sino como una amiga a la cual hizo sufrir, tal vez era una locura, pero ya se desconocía y eso no lo podía permitir, por mucho que amara a Naruto, ¿de qué servía si él la odiaba? Si había destrozado la felicidad de lo que amaba, había logrado destruir su propio amor.

--¿Qué?—Pregunto Naruto, levantándose en un estado completo de shock.

Las palabras resonaba ¿Había escuchado bien? ¿O ya deliraba? No lo sabía, solo sintió como una ligera esperanza renacía por muy falsa que fuera. Tsunade se detuvo de golpe, miro a Hinata con el ceño fruncido y furia.

--¿No te cansas de decir mentira?—Pregunto el rubio cerrando el puño y bajando la mirada-- ¿Ahora juegas con tus palabras? ¿No te cansas de ser tan..
--¡Y-Yo puedo salvarla!
--¡Ya está muerta!—Grito Tsunade llena de dolor—Deja de decir estupideces, no puedes traer a nadie después de muerto.
--S-Si puedo…
--¿Enserio?—Un brillo, casi opaco e inusual se reflejaron en los ojos azules de él, eso sin duda lo noto ella.
--Si…
--No la escuches Naruto—Tsunade mordió su labio—Ella se fue, créeme, cuando mueren, nunca regresan…

Por un lado, Tsunade sabía que Hinata mentía o eso pensaba, puesto su experiencia mostraba todo lo contrario, años atrás, cuando la mayoría de sus seres queridos había muerto, nunca, pero nunca logro encontrar algo que los regresara a la vida, y no hablaba de tener a alguien zombie, o algo parecido, hablaba de regresar una vida, algo imposible. Por otro lado, Naruto sentía una ilusión, una ligera llama de emoción en su interior ¿Y si decía la verdad? Tal vez solo lo engañaba, pero ¿Y si no?

--¿Puedes traerla de regreso?—Naruto ignoro completamente a Tsunade, y dirigió la vista hacia Hinata, con cierto enojo combinado con ilusión.

Hinata lo miro por unos segundos ¿La odiaba? Si, de eso estaba segura la mirada se lo decía, evidentemente Naruto la odiaba o al menos quería matarla en aquel momento, y eso le lastimaba. Tal vez y solo tal vez, si por primera vez hace algo bueno… Tal vez si trata de remediar su error, tal vez Naruto la vuelva a ver con una sonrisa-

--Si.
--¿Q-Que necesitas? ¿Cómo lo harás? ¡Maldición no me engañes! Me siento tan… Tan…
--Yo la traeré… --Interrumpió sonriendo.
--Naruto hay que encerrarla ¿No vas a creer en lo que te dice, o si?
--Abuela—susurro casi sin aliento—Si hay la mínima posibilidad y dice lo que hará, quiero que lo intente…

La mirada de todos o al menos de Ino, Tsunade y Naruto, la agobiaban un poco mirándola como un bicho raro, pero se lo merecía, eso y más, pero a veces es bueno equivocarse, cometer errores y ser odiada, eso la ayudo.

Hinata camino, su cuerpo débil le dolía pero aquello no se comparaba con su corazón, por lo que continuo caminando hacia el cuerpo sin vida no muy lejano de ella, le costaba rebasar las trozos de madera rota aunque el polvo ya casi desaparecía por completo y pronto los demás aldeanos, Ambu y ninjas llegaría a ver el atroz que causo.

Al llegar, recargo su cuerpo sobre el suelo soltando un suspiro, se sentía cansada, más bien derrotada y sin ánimos, pero a la vez animada, algo extraño, lo que estaba a punto de hacer le costaría mucho, pero todo sea por remediar su error, después de todo, no le quedaba ya nada por que seguir…

--¿Y qué harás? Sakura está muerta—bajo la mirada—No creo que puedas revivirla.
--Solo es una hemorragia, su cuerpo esta entero—Hinata miro a Sakura, sus labios secos y los ojos cerrados con un tono de piel casi sin color, pálido y grisáceo, como el de todo muerto—No ha pasado ni una hora…y aun tengo chakra, esperaba guardas esta técnica por si algún día N-Naruto-kun, N-Naruto-kun estaba herido de gravedad…

Ella cerró los ojos, ignoro las voces, susurro e incluso insultos de a su alrededor, tal vez Tsunade no le creía y estaba en su derecho, pero si tenía la oportunidad de remediarlo todo lo intentaría, después de todo, a veces se hace locuras por amor. Con delicadeza, ella posos sus manos blancas y débiles sobre el cuerpo de Sakura, respiro hondo y comenzó algo parecido a curar un cuerpo, como si tuviera una herida sencilla.

--Es inútil.
--Secreto de familia—susurro Hinata débilmente—solo se usa cuando de verdad estas dispuesto, no es muy fácil hacerla—Abrió los ojos—Y solo la familia principal conoce el secreto.
--¿Qué secreto?—Pregunto Tsunade, cruzada de brazos.

--Es un secreto—Hinata bajo la mirada y vio como la piel fría tomaba calor, era extraño, nunca pensó usar esa técnica, aquella que su madre le conto tiempo atrás, cuando le dijo que si amaba a alguien podría usar esa técnica para evitar que su sueño se destruya, por que cuando amas, haces lo que sea por verlo feliz ¿Ahora él estaba feliz? Eso esperaba.

--Yo te quite la vida…--Susurro Hinata mirando a Sakura—Yo te la devuelva.

Entonces, una repentina luz brillante sofoco los ojos de todos, como un rayo golpeando la vista e interrumpiendo todo tipo de contacto y tras un grito apagado, Hinata sonrió.


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Los parpados pesaban, el estomago le dolía, luchar contra su cuerpo y su voluntad es una guerra que a ella siempre le costaba vencer ¿Pero qué había pasado? Aun los recuerdos eran borrosos, recordaba la tristeza e incluso el momento en que creyó que era el final, pero ahí estaba aun, viva.

--¿Qué sucedió? ¿Dónde estoy? –Susurro logrando abrir los ojos y mirar una habitación blanca, el viento entrar por la ventana y un gran peso en su vientre causándole dolor.
--¿He?—Una rubia cabellera, con ojeras, se levanto mirándola con sus ojos azules—Despertaste… --susurro casi en shock, con la mirada asombrada casi indescriptible y una sonrisa se figuro en sus labrios-- ¡Has despertado!

Naruto, casi ahogando su grito, la abrazo con fuerza y oculto su rostro en su cuello, sus ojos se llenaron de lágrimas y rápidamente los sollozos llegaron, mientras la chica aun sin recapacitar miraba a la nada… Preguntándose ¿Qué había sucedido?

--Naruto… ¿Por qué lloras? ¿Qué tienes?—Pregunto confundida, aturdida y sin duda aun dolorida.

Naruto alzo la mirada, y tomo su tiempo para reaccionar, estudiando sus facciones, su rostro, aquel que por un momento pensó que nunca mas en su vida volvería a ver.

--Por que creí que te perdería, Sakura-chan—Y la abrazo con ternura, lleno de amor y preocupación, lleno de alegría porque al fin la tenía entre sus brazos-- ¡Nunca!—Gruño sin alejarse-- ¡Nunca más en tu maldita vida, Sakura-han! Vuelvas a hacer algo sin mi ayuda.
--Naruto…

Entonces lo recuerdos regresaron, ya recordaba ¿Pero por que no estaba muerta? ¿Qué sucedió?, por el momento, todas sus duda desaparecieron, al momento que sus ojos se llenaron de lagrimas, su cuerpo se estremeció y con fuerza se abrazo a Naruto para llorar ¿Por qué se sentía tan triste? Aun estaba viva, pero el recordar que por segundos, pensó que se iría y eso le dolía.

--¡No vuelvas a dejarme!—Regaño el rubio alejándose y comenzado a besar su frente, sus mejillas, su nariz y sus labios sin darle tiempo ¡La extrañaba! Y no dudaría en demostrarlo-- ¿Sabes lo que sufrí cuando pensé que te iba? ¡Maldición!

Ella sonrió, aun no entendía, aun no se explicaba nada, pero ya estaba mejor, estaba feliz. Entonces, la puerta se abrió, de donde entro Ino y Tsunade, entre sus brazos estaba Minato y Kushina dormidos, sus dedos dentro de sus bocas y sus mejillas sonrojadas.

--Veo que has despertado—susurro Tsunade—Has dormido una semana.
--¿He? ¿Pero qué paso? No… No entiendo nada.
--No lo entiendo muy bien—Comento Ino sentándose sobre la camilla—Hinata hizo algo extraño… No sé qué paso con ella.
--¿Cómo que no lo saben?—Frunció el ceño-- ¿Aun está viva?
--No lo sé—Interrumpió Naruto—Ella te salvo, no sé que hizo ni donde está.
--Hinata te trajo de regreso, aun desconozco el tipo de técnica que utilizo, pero cuando intentamos verla, tras una ráfaga brillosa, solo te vimos a ti respirando y ella… Ella ya no estaba.—Comento Tsunade—La buscamos pero es como si desapareciera, creo que murió.
--Creo que dio su vida por la tuya—Suspiro—Seria una heroína si no hubiera causado todo, como sea, me da gusto que entendió…
--Hinata—susurro Sakura bajando la mirada y apretando los puños—No lo entiendo.
--No te preocupes—Naruto tomo su barbilla y sonrió—Creo que ella escogió, y al final se arrepintió.

Y tras aquello se acerco y la beso, con ternura, con cariño y muchas otras sensaciones untas, demostrando lo mucho que la extrañaba, lo mucho que la amaba, porque de verdad la amaba.

--¡Hey!—Gruño Ino sonriendo—Hay dos niños presentes aquí.
--¿he?—Sakura se alejo y miro a Kushina y Minato dormidos—Si… Nuestros hijos—Miro a Naruto y sonrió con ternura—Ahora por fin los cuidaremos…
--Juntos—susurro Naruto acariciando su mejilla—Para siempre.
--¡si!--sonrió sonrojada--Por que siempre te ame, te amo y te amare… Naruto.