Te ame, Te amo y Te amare (+18)(epilogo) (22/11/2013)

El cielo despejado, perfecto para el  día. Sakura  desprendía una radiante sonrisa indescriptible que alumbraba su mirada enamorada. Estaba enamorada, había esperado ese día meses atrás y más que nada, estaba fascinada con el hecho importante que  rondaba por Konoha: La boda del año, Naruto y Sakura se casan.

Para todos había sido un hecho normal, tal precia que la mayoría sabia que tarde o temprano se casarían, que no causo mucho asombro, sin embargo, fue una noticia que corrió por todos los lugares, a tal grado que hasta los mismo Kages hicieron acto de presencia para felicitarlos.

Era el día tan esperado, Sakura, con el cabello recogido en un moño blanco y un velo cubriendo su rostro, sonreía de oreja a oreja emocionada, ya solo faltaban unas horas para convertirse en: La esposa de Naruto.

--¿Emocionada?—La voz suave y feliz de su amiga llamo la atención de Sakura, la cual con una sonrisa afirmo-- ¿Te ayudo con el vestido?
--Gracias Ino—Sakura abrazo a su amiga, después se separo y la dejo arreglar su vestido.
--¿Cuándo le dirás a Naruto que estas embarazada?—Le pregunto la rubia mientras acomodaba el vestido largo y blanco.
--Se lo diré en la fiesta—Afirmo la chica muy emocionada-- ¿Cómo crees que lo tome?
--Se desmayara… ¡Ese es Naruto!

Sakura no dejaba la sonrisa conmocionada, su emoción no se comparaba con nada igual en su vida y aun mas sabiendo que dentro de su vientre llevaba el fruto de amor entre Naruto y ella, ¿Qué mejor? La guerra había terminado tiempo atrás, su querido amigo Sasuke había regresado y tras unos días de batalla con Naruto al fin ella había aceptado salir con él, años después el resultando de eso…Fue  Una boda.

--¡La novia! ¡La novia!—Las voces de sus amiga entre risas y suspiros victoriosos llenaban aun mas a Sakura de alegría, no podía ser más feliz ni estar más emocionada.
--Sakura…
--¿Tsunade-Sama?—Sakura se giro para encontrarse con una rubia de ojos miel, llena de lagrimas con un vestido dorado, muy pegado y un peinado elegante.
--¡Sakura estoy tan feliz!—La mujer se abrazo fuerte a Sakura con voz melancólica y mirada orgullosa—Siempre supe que estarían juntos y hoy los veo… ¡Que alegría! Les deseo lo mejor…
--Gracias… y-yo también estoy feliz…
--Lo sé… --Tsunade se separo y seco sus lagrimas con una sonrisa—Has feliz a ese chico ¡Y que no se meta en tantos problemas! Ahora tiene una familia que cuidar… --Susurro la mujer tocando el vientre de Sakura—Díselo pronto, estoy segura que Naruto se sentirá inmensamente feliz…
--¡Se lo diré en la fiesta!
--¡Hija!—La madre de la chica entro por la puerta de la habitación donde se hallaba Sakura  arreglándose para su boda-- ¡Que alegría! Te ves hermosa…
--Gracias madre—Sakura sonrió y unas lagrimas de felicidad se asomaron por sus ojos—Estoy tan feliz.
--¡Lo se Sakura! Es tu boda—La mujer de cabellera rubia y ojos verdes se acerco a la joven novia y la abrazo—Tu padre y yo estamos orgullosos y te deseamos lo mejor. Ya no llores, provocaras que tus ojos se hinchen y no creo que quieras llegar así a tu boda.

Sakura miro a todos sus amigas e incluso a su madre, quienes la felicitaron y la aconsejaron entre burlas como “Al fin el Baka se hará hombre” “Cuida de Naruto y aléjalo de todo mal” “Al fin sentó cabeza” y cosas que hacían y emocionaban mas a Sakura por el hecho, estaba enamorada de su mejor amigo y se iba a casar con él, estaba embarazada y su nueva vida comenzaba junto de la persona que ella esperaba… ¿Cómo describirlo? Simplemente perfecto.

Las campanas sonaban al igual que la música mientras ella bajaba y entraba a la iglesia. El sol brillaba y tal  parecía que alumbraba su sonrisa como diamante, sus zapatillas sonaban a cada paso firme y seguro que daba, su vestido se movía al estilo del viento con el que se apuraba a entrar a la iglesia. Solo la emoción describía su actitud.

Cuando Sakura entro noto las caras largas y preocupadas de todos sus amigos, sus maestros, compañeros y familiares, entonces su sonrisa se borro cuando vio “el lugar del novio” vacio.

--¿Y Naruto?—Pregunto al momento de detenerse.
--No lo sabemos… --Susurro Kakashi, con un traje negro y una rosa resaltando en su pecho—No ha llegado, creímos que ya estaría aquí pero…
--Sakura… --Ino la miro y posos su mano sobre su hombro—Nadie lo ha visto desde la mañana…
--¿Naruto no ha llegado?—Sakura sintió que el corazón se partía en dos, no podía borrar imágenes desastrosas de Naruto herido, lastimado, muerto, en problemas, atrapado o encerrado, cualquiera cosa que lo lastimara-- ¡Y si alguien lo atrapo? ¡Y si están en problemas! ¡Tenemos que ir a buscarlo!—Los ojos de Sakura se llenaron de lagrimas al igual que su corazón comenzó a latir como nunca y su rostro expreso preocupación.
--¡Tranquila!—Ino la abrazo con fuerza—Kiba, Sasuke y Sai ya fueron a buscarlo…
--¡Debo de ir! ¿Y si me necesita?—Sakura se dio media vuelta, pero la firme mano de Iruka la detuvo con una mirada diciendo: “Tranquila”.

Sakura miro a su alrededor, la iglesia adornada con decoraciones de rosas gracias a Ino, con varias personas a su alrededor de vestidos y trajes, la mayoría invitados de ellos dos, Kages de los de mas lugares, amigos que tuvieron alrededor de sus misiones. Todo era perfecto para su boda, todo menos la ausencia del novio.

De pronto los suaves pasos de Sasuke llamaron la atención de Sakura, la cual al verlo corrió hacia él y con una mirada preocupada le dijo:

--Que paso… ¿Y Naruto?

Sasuke alzo la mirada con un gesto triste y doloroso, detrás de él llego Kiba y Sai, de el mismo animo sin ganas de mirar a los ojos de Sakura. ¿Cómo decírselo? ¿Cómo decirle lo que acababan de ver el día de su boda? Para Sasuke la amistad con Naruto y con Sakura ya era un lazo fuerte, desde su regreso se considero un amigo íntimo y le dolía tener que dar esa noticia.

--Sakura… --Sasuke suspiro y cerró los ojos—Naruto no se casara contigo…

El corazón de Sakura se partió en dos pedazos, No… Más bien en miles de pedazos con estillas que la lastimaban desde el interior, no entendía, simplemente no entendí lo que su amigo le quería decir.

--Por qué… --Logro decir la pelirosa con voz cortante-- ¿Le paso algo?—La preocupación de la posibilidad de que Naruto estuviera grave la aterraba.
--Si, él está bien, solo que… --Sasuke se mordió un labio y tomo valor, entonces miro a la pelirosa y seriamente dijo—Él se fue con Hinata.

Sakura lo miro asombrada, sorprendida y aterrada, mientras unas lágrimas se asomaban por sus ojos verdes y su mirada cambiaba a varias fases entre temor y confusión.

--¿Cómo que se fue con Hinata?—Pregunto Ino enojada en tono asombrado.
--Lo vimos en la entrada de Konoha, con Hinata… --Kiba suspiro y continuo hablando—Tenia una mochila de viaje y estaba con Hinata, cuando nos vio nos dijo que te diéramos esta carta… --Kiba inmediatamente le dio un papel arrugado a Sakura, la cual rápidamente la tomo y con fase Shock la abrió.

Sakura arrugo el papel con coraje, con tristeza y decepción, mientras que sus ojos dejaban salir lágrimas a lo exagerado, sin temor de hacer el ridículo frente a todos mientras expresaba su más deseable sentimiento y las ganas de llorar.

--Sakura… --La voz preocupante de Ino corto los pensamientos de Sakura, la cual la miro-- ¡No llores!—Ino corrió para abrazarla y cubrir su cara, mientras los demás miraban de una manera extraña la situación.
--La boda se cancela—Susurro Tsunade al omento de levantarse—Lo siento, me temo que la boda se cancela y necesito que dejen a Sakura sola.

Sakura camino a paso lento mientras Ino la llevaba entre sus brazos abrazada a su pecho, sin preocuparle lo mojada que estaba por las lagrimas de su amiga devastada, destrozada ante la noticia: Naruto Uzumaki le había todo el corazón de la peor manera.

Tsunade y Kakashi se ocuparon de limpiar todo y pedir disculpas ante los invitados, mientras daban una excusa tonta como “Hubo un  problema que después discutiremos”, mientras que Sus amigos trataban de alegrar a Sakura, sin embargo esta solo miraba a la nada en Shock.

Así pasaron los días, más bien, una semana… Sakura lloraba y se encerraba en su casa deprimida y tratando de explicarse el por qué de todo… ¿Por qué la había dejado? ¿Por qué de esa manera?, ella recordaba aquellos momentos hermosos que paso con Naruto, cuando él decía amarla y le alegraba la vida con un beso, incluso con una sonrisa, recordaba lo mucho que Naruto se esmeraba por conseguir una cita, o una mirada… ¿Qué había pasado? ¿La había dejado de amar? Simplemente no lo entendí y no lo podía creer, pero esa era su realidad, su futuro esposo, el cual días atrás le había dicho “Te amo” la había dejado plantada en el altar, la había dejado por Hinata  y le había roto el corazón.

--Sakura…

Ino la visitaba diario, al igual que sus otros amigos tratando de levantarle un poco el ánimo, tratando de ver un brillo de vida en aquellos ojos verdes apagados y llenos de lágrimas, incluso sus padres estaban furiosos y a la vez preocupados.

--¡Sakura!—Ino la llamo por segunda vez, ganándose la mirada triste de su amiga-- ¿Cuándo dejaras eso? ¡Ya basta!
--Ino es que yo… --Bajo la mirada—No lo sé…
--Sakura—Ino se sentó sobre su cama y la abrazo—Se que te duele, pero tienes que salir adelante con tu vida… Estas embarazada hazlo por tu hijo… ¡Casi no comes! Eso le hará daño al bebé…
--Mi hijo—se recordó la chica tocando su vientre— Nuestro hijo…—Sus ojos verdes se llenaron de lagrimas una vez más—Íbamos a tener un hijo…
--¡Iban!—Remarco Ino—Ahora vas… Vas a tener un lindo hijo que te necesita desde hoy y siempre ¡Hazlo por el!

Sakura miro a su amiga y toco su vientre. Tenía razón, Naruto la había dejado sola, la había desechado como trapo viejo y la había cambiado, rompiendo toda ilusión y oportunidad, acabando de la peor manera con su amor y cariño. Ella lo amaba, lo extrañaba y necesitaba, pero ahora una criatura indefensa necesitaba de ella y no podía dejarlo solo ¡No como Naruto la dejo a ella! Eso no…Nunca.

--¡Tienes razón!—Sakura se levanto y sonrió—Hare todo por cuidar de mi hijo ¡El me necesita!
--Exacto Sakura—Ino la miro alegre—y todos te ayudaremos, te apoyaremos y cuidaremos a ese niño con mucho cariño, nada le faltara…
--Gracias… --Sakura abrazo a Ino y soltó mas lagrimas de alegría y tristeza, un sentimiento inexplicable.
--¡Esa es la Sakura que conozco! Fuerte….


-----------------------------------------------------------------------------------------Un año después ----------------------------------------------------------------------------------------------


Sakura suspiro resignada mientras daba un descanso.

--¡Vaya que son traviesos!—Dijo la chica al momento de dejar a dos bebes sobre una camilla de hospital, eran pequeños y rubios de ojos azules-- ¡Pero vaya que comieron muchos!

Sakura sonrió y comenzó a quitarle el pañal a uno de ellos, le echo talco y limpio con cuidado y amor, después se fue con el otro, que de igual manera cambio.

Sakura había tenidos a dos gemelos, más bien mellizos, una mujer y un varón, nacidos el mismo día y con gestos igualitos, a  diferencia de que una era niña y el otro niño… ¡Su vida!, Sakura había tenido a sus dos gemelos, los cuidaba todo el día mientras trabajaba en el hospital y los adoraba.

--¡Mírate Minato!—Le dijo el bebé rubio con un trajecito amarillo y un babero-- ¡Has babeado toda tu ropita! –sonrió muy alegre—Ahorita te pondré un trajecito de tigre ¡Te veras hermoso!

Sakura levanto al bebe entre sus brazos y le dio un beso en sus mejillas gorditas. Después lo cambio rápidamente mientras le cantaba una canción de cuna, para así dejarlo dormido y levantar a la pequeña.

--Y tu Kushina, tan limpia y linda como siempre ¡Sin duda se parecen pero son tan diferentes!—La pelirosa beso la frente de la pequeña y la arrullo para dormir.

Desde el día en que le padre de sus hijos la había dejado en el altar, desde aquel día de depresión, Sakura se había jurado dejarlo atrás… y Ahora su vida, lo que la motivaba y para lo que seguía era para cuidar a sus dos pequeños gemelos: Kushina y Minato Haruno, sus dos hijos.

--¡NO!
El grito de Ino llamo la atención de la pelirosa, que extrañada levanto la mirada.
-- ¡Que haces aquí! ¡Lárgate! ¡Vete!—Ino volvió a gritar desde afuera de la oficina en la cual estaba Sakura. Sonaba suplicante y asustada, por lo cual altero un poco a Sakura—Por favor…

Entonces Sakura miro la entrada de la oficina y a paso lento se acerco, de pronto, una persona entro corriendo a el cuarto.

--¡Sakura-Chan!—Grito un rubio, el cual en un salto entro y la miro a los ojos, mientras Ino frenaba detrás de él con esto asustado e incomodo.
--Naruto… --Susurro Sakura.

El estomago se contrajo ante la mirada que recibía de aquellos ojos azules, una mirada llena de sentimientos incomprensibles… Ella suspiro nerviosa, atónita y asombrada al ver al padre de sus hijos frente a ella después de un año.

--Sakura-Chan… --Susurro el rubio, mirándola incrédulo.
--¡Lárgate de aquí Naruto!—Ino se adelanto bruscamente y se coloco frente al rubio—Sakura no te quiere ver…
--¡Necesito hablar con ella!—Suplico el rubio arrugando la nariz, mientras que Sakura miraba su rostro tal como lo recordaba, claro con cabellera rubia, varonil y alto, si, era Naruto.
--¡Pero Sakura no quiere!—Exclamo la rubia tratando de defender, mas bien, proteger a su amiga, después de todo… Aun recuerda las noches que lloro después de la boda, las veces de cadencia depresiva en la que vivía, no quería verla otra vez así.
--Sakura-Chan… --Naruto ignoro a Ino y dirigió su mirada a la pelirosa, la cual lo miro tras unos segundos con cierto nerviosismo e inquietud. Aun en Shock—Tienes que escucharme…

De pronto el suave sonido de un bebé llorar ataco los oídos de la pelirosa, recordando su verdadera situación. Naruto al escuchar el llorar de un bebé, abrió los ojos y dirigió la mirada a la camilla, donde dos pequeños dormían, bueno, uno, ya que el otro había despertado malhumorado. Sakura movió la cabeza de un lado al otro regresando a la realidad, después camino hacia la camilla y cargo entre sus brazos a Kushina, la cual tenía un vestido verde con tonos rosas pastel y lagrimas en sus ojos.

--No tenemos nada que hablar—Comento la pelirosa al momento de dar unos delicados golpes a la espalda de la pequeña.
--Claro que si—Afirmo el chico-- ¿Es nuestra hija?—Naruto miro asombrado, helado e ilusionado, sentimientos extraños lo recorrieron de pies a cabeza al ver a la niña, de a lo máximo un año de edad o menos, con un trajecito y en manos de Sakura.
--Es mi hija—Le remarco la joven dirigiéndole una mirada fría.
--Nuestra… Yo te ayude ¿Lo recuerdas?
--No me interesa, quien la cuida soy yo.

El dolor del recuerdo hería en lo más profundo de su corazón, para ella, él asunto de Naruto era cosa del pasado, pero al verlo frente a ella una vez más… Recuerda que aun no lo supera, aun no puede olvidar las innumerable de veces que le dijo “Te amo”, las veces que se entrego a él o las veces que trago su orgullo para estar a su lado, pareciera extraño, pero a veces tenía que poner de su parte para continuar con el rubio, y eso ahora la mataba.

--Naruto… --Sakura suspiro pesadamente con un nudo en la garganta-- ¿Qué quieres? ¿Por qué estás aquí? Si planeabas venir como si nada después…
--En cuanto supe que estabas embarazada y que fueron gemelos, Vine—Bajo la mirada—Perdóname Sakura, las cosas no son como crees…
--¿No?—La ira la domino-- ¡Ahora me dirás que estoy loca! ¡Y que no es lo que creo!
--Sakura cálmate, yo…
--¡No Naruto!—Sakura lo miro llena de ira, llena de desprecio y tristeza, una mirada que hace mucho tiempo no reflejaba… Pero eso no era bueno para una madre, no, no podía ser así. —Solo vete Naruto… --Bajo la mirada, escondiendo su boca entre las mejillas de Kushina—Solo vete…
--¡Pero tienes que escucharme!
--¡No quiero escucharte! ¡No quiero verte! No quiero saber nada de ti…
--¡Pero las cosas no son así!
--¿No? Dime… ¿Te fuiste con Hinata el día de nuestra boda?
--Si…
--¡Entonces no digas que no son como las veo!
--Pero yo…
--Naruto será mejor que la dejes…—La voz, aquella voz conocida para el rubio, si, era ella.
--Tsunade-Sama… --Susurro el chico al darse vuelta, para encontrase con los ojos miel de Tsunade.
-- Veo que has regresado—Comento la Hokage cruzándose de brazos—Sakura Puedes retirarte, tienes el día libre—Parpadeo—Naruto a mi oficina…

Ino rápidamente tomo a él otro bebé de la camilla y rápidamente se llevo a Sakura, alejándola del rubio. Entonces Naruto camino hacia Tsunade para dirigirse a su oficina, una vez ahí, alzo la mirada y fue cuando la rubia lo abrazo con fuerza.

--Te extrañamos Naruto…--Comento tras cerrar los ojos—No sabes cuánto—Se separo y se cruzo de brazos-- ¿A dónde demonios te has ido?
--Oba-Chan… --Suspiro metiendo sus manos a sus bolsillos naranja—Es una larga historia. Yo no quería lastimar a Sakura, no quería que me odiara tanto…
--No te odia—Afirmo tristemente—Pero tampoco pretendas que te perdone…
--¡Necesito que me ayudes!—Grito el chico-- ¡Necesito que Sakura-Chan vuelva a ser conmigo como antes! Necesito… Que me perdone.
--¿Por qué te fuiste? Creí que casarte con Sakura era lo que más querías.
--Si—Concluyo el chico—Era lo que más deseaba, es lo que más deseo…

El chico cerró los ojos, mientras los recuerdos dominaban su mente, aquel día, aquella mañana de sábado, cuando justamente se arreglaba para su boda.


-------------------------------------------------------------------------Recuerdo de Naruto --------------------------------------------------------------------------------------


--Te vez tan idiota con esa sonrisa—Comento un pelinegro cruzado de brazos, frente de él estaba un rubio de traje negro con una rosa en su chaleco y su cabellera despeinada mirándose al espejo.
--¡Cállate Teme! Solo estoy feliz…
--Pareces un idiota mirándote al espejo una y otra vez.
--¡Solo quiero verme bien para Sakura-Chan! Hoy será un día inolvidable, yo lo sé…
--Ni que lo digas—Sonrió—Me pregunto que vio ella en ti, estas horrible y tienes poco cerebro.
--¡Hey!
--¡Muchachos dejen de pelear!—Una rubia muy sonriente entro.
--¿Qué haces aquí, Ino? ¿No deberías estar cambiando a mi Sakura-Chan? ¡Te advierto que la quiero lista a la hora en punto!
--Tranquilo Naruto, solo vine por el arreglo de su cabello, lo dejo aquí—La chica busco entre las cosas--¡Aquí esta!—Sonrió y se dirigió a la puerta—Naruto apúrate, ya solo tienes dos horas para que la boda comience.
--¡Ahí estaré!
--Bien Dobe, me tengo que ir, Tengo que avisarles a los demás, te veo en la iglesia en una hora.
Así, Sasuke e Ino salieron de la habitación, dejando a un rubio sonriente en ella, media hora después, una chica de vestido azulado entro, ojos perla y cabello recogido en un moño azul.
--Naruto-Kun… --Naruto se giro para verla y dedicarle una sonrisa.
--Hinata ¿Qué haces aquí? ¿Kiba te envió? Ya supe que tu y el tiene una relación…
--Si, pero he venido porque yo… --Se sonrojo y lentamente se acerco a él—Yo quería desearte suerte… Quería decirte que… --Se detuvo a centímetros de él-- ¿Por qué te casas Naruto-Kun?
--Hinata ¿Estás bien?—El chico abrumado y extrañado retrocedió unos pasos, mientras ella avanzaba a su compas—Hinata creo que no deberías esta aquí, Sakura o Ino pueden llegar y esto se ve comprometedor… es el día de mi boda y…

Entonces sintió un pinchazo en su cuellos, al abrir bien los ojos miro a su alrededor y entre ellos a una chica sonriente, con una jeringa en su mano, algo extraño pensó el chico.

--Pero qué demonios… --Entonces cayó al suelo de golpe perdiendo noción del tiempo, espacio y lugar…
Una hora después…
--Donde… ¿Dónde estoy?—El rubio se levanto delicadamente, estaba una habitación iluminada y una chica a su lado con los ojos llorosos.
--¡Naruto-Kun!—Grito la mujer al verlo—Has despertado… ¡Tenemos que irnos!
--¿Irnos? ¿A dónde? ¿Dónde estoy? ¿Quién eres tú? ¡Hay! Me duele la cabeza…
--Te llamas Naruto Uzumaki... Y—Sonrió—Estamos casados…


------------------------------------------------------------------------------------- Fin del recuerdo de Naruto------------------------------------------------------------------


--Recuerdo eso… Después perdí la memoria momentáneamente—Suspiro—Suena tonto pero cuando desperté, Hinata me dijo que era mi esposa…
--¿Qué?—Tsunade lo miro asombrada ante sus palabras, sonaba ilógico, imposible e irracional, pero ¿Sera verdad?
--Me dijo que éramos esposos y que teníamos que huir de nuestra familia que nos querían separar y que yo me iba a casar con alguien que no amaba—Se encogió de hombros—Le creí, no recordaba nada, a nadie, y me fui con ella… Hice lo que me pidió, escribí una carta y escape de Konoha pensando que era mi esposa—Suspiro—Fui un idiota, debí pedirle alguna manera de comprobación, pero no, me deje llevar…
--¿Tu esposa?—Tsunade, atónita suspiro—No lo puedo creer, Hinata, ella era tan… Como decirlo.
--Hice muchas cosas con Hinata—Naruto bajo la mirada incómodamente—Creí que era mi esposa, viví con ella, dormí con ella y la trate como tal, aun que por dentro no sentía nada, ni su mirada o abrazos, me sentía vació… --Cerro los ojos—Entonces los recuerdos llegaron a mi memoria lentamente… Hasta que recordé todo.
--Y regresaste…
--Hace un mes que recuerdo todo, en cuanto supe lo que paso, me odie—La miro—Pero también me llene de alegría, Sakura-Chan tenía dos gemelos, nuestros hijos.
--Sakura sufrió mucho—Tsunade tomo un trago de Sake—Estuvo en depresión por tanto tiempo… nos costó mucho hacerla regresar a la realidad, debía cuidar a sus dos hijos. Te mentiría si te digo que ahora no le importa—Sonrió—Pero tranquilo chico, te ayudare, sé que cuando le expliques lo que paso entenderá…

--¡Y a eso vine!—Sonrió—A recuperar lo que perdí. ¡Y no me rendiré!
-- Yo te ayudare, aunque tengo una duda… ¿Qué paso con Hinata Hyuga?


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--¡Sakura por favor! ¿Estás loca? Debería alejarte…
--Lo sé, Ino—Sakura se tiro a su cama dejando salir varios suspiros resignados—Debería odiarlo, y si… ¡No quiero verlo! Pero es el padre de Kushina y de Minato… ¿Cómo les puedo negar un padre?
-- Un padre que nunca estuvo con ellos ¡Te dejo!
--¡El no sabía que estaba embarazada!
--¡Te dejo!
--Ya… No dije que regresaría con él, que lo perdonaría ni que iría corriendo a sus brazos—Frunció el ceño—Solo digo que es una gran oportunidad para que Minato y Kushina conozca a su padre, solo eso…
--¡Has lo que quiera Sakura! Es tu vida y la que sufre eres tú.
--¡Lo vez!, dejare que Naruto vea a Kushina y Minato…
--¡Sakura!—Ino la miro atónita—Solo te lastimas.
-- Ya lo sé—Se levanto con la mirada triste—Cada vez que lo veo, recuerdo muchas cosas… Pero Kushina y Minato no tienen la culpa que yo no quiera a Naruto o que el ya no me ame… Ellos No tiene nada que ver y si Naruto está dispuesto a convivir con ellos ¿Por qué o negaría? Después de todo es su padre…
--¿Por qué no consigues un padre para ellos? ¿Por qué no te enamoras otra vez?
--¿Estás loca?—Sonrió-- ¡No quiero saber nada del amor! Ya no, estoy bien así.
--¿Y si castigas a Naruto?
--¿Castigarlo?
--El te dejo por Hinata… ¿Por qué no lo seduces?—Ino la miro pícaramente golpeándola con el codo—Lo provocas y le haces recordar aquellos momentos que vivieron juntos, así se sentía idiota por dejarte por ella ¿No crees? Es una manera de hacerlo ver que tomo una mala decisión…
--Quieres que seduzca a Naruto para que sufra por dejarme por otra ¿Ese es tu plan? –Sakura miro a Ino de manera incrédula-- ¡Estás loca! Lo menos que quiero es a Naruto en mi vida amorosa ¿Y tú quieres que lo seduzca? Además… Si me dejo por Hinata ¿Qué te hace pensar que podre seducirlo? Si con Hinata tiene más…
--¡Yo sé que si te lo propones podrás! Y no digas eso, Naruto regreso y es por algo ¿No crees? Vino a buscarte… Eso significa que no consiguió algo con Hinata, y suena mal, pero tal vez tu tienes algo que necesita…
--No digas tonterías…
--¡No son tonterías! Solo digo... Él jugo contigo ¿Por qué no puedes jugar tu con él?
--Yo no soy esa clase de persona… No sería capaz de hacerle eso.
--Te creo, pero… ¿No sientes coraje? Yo odiaría a Hinata y a Naruto, él era tu futuro esposo y ella tu amiga –Ino suspiro bajando la mirada—Y los dos te hicieron una mala jugada, yo solo decía que seduzcas a Naruto, no que te acueste con él o que le rompas el corazón… No, yo solo quería que te vistieras lindo y actuaras como toda chica fuerte, sin que te importe o te afecte Naruto, que lo atraigas con un movimiento de caderas para que recuerde lo que dejo ir por tonto.
--Entonces quieres que Naruto vea lo que dejo ir ¿Verdad? –Sakura sonrió-- ¡Eres tan vanidosa y cruel!
--¡Vamos! Será divertido y sirve que aprende... ¿Qué puedes perder? De hecho no deberías hablarle, fue muy cruel lo que te hizo y peor aun… ¡Te dejo en media boda! Hubiera sido mejor si desde el inicio te hubiera dicho que no te amaba, pero lo hizo de la peor manera…
--¡Ya entendí tu punto! –Se encogió de hombros—Si recuerdo ese día… ¿Pero cómo podría verme sexy? No tengo pechos grandes ni cuerpo de modelo, además…. Ya soy madre ¿Cómo puedo verme sexy así?
--¡Es perfecto! Una mami sexy… ¡Hay muchas técnicas para seducirlo! Y más siendo madre resiente…
--¡Como haré eso! Creo que mejor no… No estoy segura—Sakura suspiro— No soy una tipa sexy…
--¡Corrección! Tu eres una mamá sexy –Ino sonrió—Y una mamá Sexy tiene muchas ventajas…