Cambiando mi destino. (C)(+13) CAPITULO 19 y 20 06/12/2014

CAPITULO 17: EL CAMPAMENTO DE LOS BANDIDOS

-Hemos llegado – Anuncio uno de los mercader señalando hacia la entrada de la aldea de la pintura, cuando llegaron al entrada fuera detenidos por unos guardianes - ¿Díganme en que podemos ayudarlos? – Pregunto uno de los guardias – Somos mercaderes que venimos a abastecer a la aldea y ellos son Shinobis de Konoha que fueron contratados por el Sr. Tatsumoto – Respondió el mercader.

-Ya veo, entonces pueden pasar – Dijo el guardia dando el pase a los visitantes – Por cierto en el camino detuvimos a tres bandidos, aquí los dejamos a su custodia – Dijo el rubio para luego entregar a los bandidos que habían derrotado – Bien nos haremos cargo, ustedes dense prisa, el
Sr. Tatsumoto los estará esperando – Los Shinobis asintieron para luego entrar a la aldea.

Al caminar un poco por la aldea los Shinobis se sorprendieron con lo que se encontraron, la aldea se encontraba en terribles condiciones - Me hubiera gustado que ustedes hubieran conocido a esta aldea cuando estaba en su mejor momento, esta aldea lleva su nombre debido a que de aquí han salido los mejores dibujantes del mundo, artistas muy talentosos, incluso teníamos un museo con sus mejores obras, pero ahora el museo está casi vacío, los bandidos se han llevado la mayoría de las pinturas para venderlas – Se notaba la frustración en el viejo mercader.

-Bien no los entretengo más, el despacho del Sr. Tatsumoto se encuentra siguiendo todo este camino – El mercador apunto a una calle – Mientras recorran ese camino se encontraran con edificio verde de tres pisos pegado a la izquierda, ahí pregunten por el Sr. Tatsumoto – Los Shinobis de Konoha agradecieron las instrucciones y se dirigieron al lugar en donde se encontraría con el líder de la aldea de la pintura.

Mientras caminaban vieron muchas casas destruidas, viendo como la gente se ocultaba llena de miedo – Esto es horrible – Comento Shizune viendo con tristeza el estado de la aldea – Tenemos que ayudar a esta aldea, acabaremos con todos eso malditos bandidos, así nuestras llamas de la juventud arderán al máximo – Gai no se encontraba contento con lo que veía.

Naruto se detuvo en una esquina de una intersección de dos calles, ahí se encontraba una niña, de unos 10 años más o menos, al lado de ella se encontraba un estante de madera viejo en donde tenía exhibiendo varias pinturas.

El Uzumaki se acercó a ver las pinturas con detenimiento – Si le interesa una pintura puede llevársela por un buen precio – Dijo la niña viendo como el rubio veía los cuadros – Dime ¿Tu hiciste estas pinturas? – Pregunto Naruto sin dejar de ver las pinturas – Si, sé que no son buenas, pero hice mi mejor esfuerzo, por favor compre una, para poder llevar algo de comer a la casa – Naruto observo a la niña y pudo ver como su rostro reflejaba una enorme tristeza.

-Tus pinturas me parecen hermosas, me llevare esta – El rubio tomo un cuadro en donde estaba dibujado un bello paisaje, un bosque en época invernal, todo estaba cubierto de nieve, sin duda el cuadro era hermoso - ¿Cuánto quieres por él? – Pregunto Naruto – 100 Ryus – Respondió con algo de temor la niña, tal vez temiendo que el Uzumaki no quisiera comprarlo por su “alto” precio.

Naruto saco su monedero con forma de rana, de ella saco unos billetes y se los entregó a la pequeña – Pero estos son 1000 Ryus – Dijo la niña sorprendida por la cantidad de dinero que le dio el rubio – Estoy seguro que tu pintura vale más de 100 Ryus, además creo que algún día te convertirás en una gran artista, y cuando eso pase el valor de esta pintura será más alto ya que es una de tus primeras obras de arte, seré la envidia de todos – Respondió el rubio con alegría logrando que la niña esbozara un pequeña sonrisa.

-Te prometo que las cosas mejorarán en la aldea – Dijo Naruto con confianza mientras acariciaba la cabeza de la niña, enseguida se despidió con una sonrisa para luego empezar a caminar siendo seguido por sus compañeros que habían presenciado todo – Eso fue muy lindo Naruto-Kun – Dijo Shizune viendo el buen corazón que tenía el rubio, Naruto saco un pequeño pergamino de su porta kunais en donde sello su pintura.

-Vaya no creí que fueras tan cursi niño – Dijo Anko tratando de molestar un poco al rubio, pero este no respondió a la burla, pero su expresión se tornó seria y con algo de ira – Tranquilo solo estaba bromeando chico – Anko no se esperaba que Naruto tomará su broma tan en serio – No es eso, solo que cada vez tengo más ganas de pelear con esos malditos desgraciados – Respondió el rubio con seriedad y ansioso de acabar con los que la han causado solo penurias a la aldea de la pintura.

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Mientras tanto en Konoha por unas de sus calles caminaba una hermosa chica, se trataba de Rin Nohara, lucía sería y un poco triste.

-Kakashi no quiso ir a comer conmigo, creo que él no está interesado en mí, tal vez es tiempo de olvidarme de él y seguir adelante – Pensaba Rin para luego divisar más adelante que por la misma calle en la que ella iba, caminaba su otro antiguo compañero de equipo – Es Obito, recuerdo que cuando éramos niños él se la pasaba pidiéndome citas, pero nunca le acepte ninguna, llegue a sentirme mal por eso, él es alguien muy amable y atento conmigo, tal vez deba darle una oportunidad, aunque después de tanto tiempo no sé si siga sintiendo lo mismo por mí, tendré que arriesgarme para averiguarlo – Con esos pensamientos Rin empezó a correr para darle alcance a su amigo.

Pero antes de que pudiera alcanzarlo ve como Obito se detiene en una esquina para encontrarse con una mujer, una hermosa dama de cabellos negros y ojos rojos, se trataba de Kurenai – Hola Kurenai-Chan – Saludo el Uchiha – Vaya llegaste temprano – Comento la mujer Yuhi con alegría – Claro, no iba a llegar tarde a la primera cita de mi vida, no siempre soy invitado por una linda chica – Respondió Obito mientras reía un poco y haciendo sonrojar a la maestra del Genjutsu – Tonto – Murmuro la chica para luego tomar al Uchiha por el brazo – Vámonos ya, quien sabe si alcancemos mesa, al restaurant al que vamos es algo exclusivo – Dijo Kurenai con preocupación – Descuida, hice una reservación - La pelinegra se había quedado sin habla por esas palabras - ¿En serio?¿Cómo lograste eso? Es muy difícil lograr una reservación en ese restaurant – Kurenai estaba realmente sorprendida – Digamos que ser amigo de Naruto-Sempai te hace tener buenos contactos, amigos con gran influencia como la Hokage – Respondió el Uchiha haciendo reír a la mujer.

Rin se encontraba atónita con la escena que había presenciado, Obito iba a tener una cita, no sabía porque pero empezó a sentir un dolor inexplicable para ella en el pecho, y sin saber porque empezó a caminar por donde Obito y Kurenai se habían ido, siguiéndolos sigilosamente, en pocas palabras los estaba espiando.

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En la aldea de la pintura Naruto y su equipo ya se encontraban en el despacho del líder de dicha aldea, Tatsumoto era una persona de unos 45 años más o menos, de cabellera negra larga sujetada en una cola, con un bigote pequeño refinado, y además vestía un traje de color guinda muy elegante, daba la pinta de ser todo un hombre de negocios.

-Me alegran que por fin hayan llegado ninjas de Konoha – Hablo Tatsumoto sentado detrás de su escritorio – Estamos aquí para cumplir lo que nos pidió, nos encargaremos de esos bandidos – Dijo Naruto con confianza – Eso espero, esta aldea ha sufrido mucho por esos desgraciados – El líder de la aldea mostraba una expresión de fastidio.

-Bien antes de empezar queremos que nos diga todos los detalles, todo lo que sabe de esos bandidos, debemos estar preparados para todo – Tatsumoto asintió para luego de un cajón de su escritorio sacar un folder – Dentro de este folder están todos los papeles de todo lo que hemos documentado acerca de esos bandidos – Dijo el pelinegro para luego entregarle el folder al rubio.

-Deseo que se deshagan de esos bandidos cuanto antes, esta aldea está casi en la ruina por culpa de esos malnacidos, así que se los dejo en sus manos – Tatsumoto se mostraba enojado – Descuide nosotros nos encargaremos, por el honor de Konoha le juro que acabaremos con cada uno de los bandidos – Dijo Naruto lleno de confianza – No esperaba menos de los Shinobis de Konoha, esos bandidos tienen los días contados – El pelinegro sonreía con un poco de malicia.

-Bien entonces nos retiramos a preparar el plan de ataque – Dijo Naruto guardando entre sus ropas el folder que le había sido entregado – Bien, que tengan mucha suerte – Les deseo el líder, entonces los ninjas de Konoha salieron del despacho.

Afuera del despacho los Shinobis caminaban por una de las calles – Bien Naruto ¿Qué vamos a hacer? – Pregunto Anko – Primero lo primero – Dicho eso Naruto saco el folder para luego hacerle pedazos - ¿Pero qué estás haciendo Naruto-Kun? – Pregunto Shizune confundida al ver que el rubio se deshacía de toda esa información – Descuiden pronto lo entenderán, ahora tenemos que ir al campamento de los bandidos – Nadie entendía la manera de actuar del Uzumaki.

-¿Cómo sabremos el lugar del campamento si acabas de destruir esos documentos? – Pregunto Anko aun con confusión – Descuiden, antes de llegar a la aldea mande a unos clones a peinar toda la zona, y ya se en donde se encuentra ese campamento, ahora síganme no hay tiempo que perder – Enseguida Naruto salió corriendo a toda velocidad seguido de sus compañeros.

-¿Qué tienes planeado Naruto-Kun? – Pregunto Shizune corriendo al lado del rubio – No muy lejos de aquí se encuentra el campamento, en el hay 30 bandidos, será muy fácil para nosotros deshacernos de ellos, pero quiero que dejemos uno vivo – Empezó a explicar el Uzumaki - ¿Uno vivo? – La ninja medico seguía sin entender – Así es, pero no solo eso, debemos dejarlo escapar y hacerlo parecer como si no nos hubiéramos dado cuenta de que se escapó – Los compañeros del rubio seguían sin entender.

-Solo confíen en mi – Dijo el rubio, los demás decidieron hacerle caso y esperar a que todo fuera revelado a su tiempo – Solo espero que sepas lo que haces chico – Termino de decir Anko mientras todos continuaba moviéndose a toda velocidad a su destino.

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Mientras tanto en Konoha en un lujoso restaurant se encontraba sentados en mesa Obito y la dama de los Genjutsus – Este lugar es genial – Comento Kurenai viendo lo espectacular del lugar- Me alegra que te guste – Respondió Obito con una sonrisa – Sabes nunca creí que llegaría el día en el que yo invitaría a un hombre a salir y no al revés – Dijo Kurenai sorprendida de ella misma - ¿En serio? – Pregunto Obito – Es verdad, a mi normalmente me invitan a salir muchos hombres, pero todos son unos idiotas que solo me quieren llevarme a la cama y cosas así, pero tú eres diferente – Apunto Kurenai viendo fijamente al Uchiha.

-¿Diferente? ¿En qué sentido? – Obito estaba interesando en lo que Kurenai pensaba de él – Desde que nos conocimos pude notar claramente que nunca me viste con alguna malicia, nunca tuviste alguna doble intención conmigo, siempre fuiste sincero y sobre todo gentil – Kurenai le sonreía al Uchiha – Bueno yo siempre trate de que te sintieras a gusto conmigo, y a decir verdad me sorprendió bastante que te acercarás a mí – Dijo el pelinegro recordando el día que Kurenai le pidió ayuda para entrenar.

-¿Qué quieres decir con eso? – Pregunto Kurenai – Sabes bien que desde niño he sido ignorado, tratado como basura, incluso los de mi clan me aborrecían, para ellos yo era alguien indigno de pertenecer al clan Uchiha, y cuando me convertí en shinobi creí que las cosas cambiarían, que empezarían a respetarme, pero no fue así, lejos de mejorar las cosas, empeoraron, siempre viviendo a la sombra de Kakashi – Dijo Obito recordando con pesar parte de su pasado.

-No tenía idea de te sintieras así Obito, lo siento tanto – Se dijo a si misma Rin que se encontraba escondida espiando a la pareja.

-Tú siempre has sido una gran persona Obito, incluso desde niño, recuerda que de no ser por ti Kakashi y Rin hubieran muerto, tú fuiste quien decidió rescatar a Rin cuando fue secuestrada por los ninjas de Iwa, en cambio Kakashi iba a abandonarla para continuar con la misión, y además Kakashi no sería el shinobi que es hoy de no ser por el Sharingan que tú le obsequiaste, ellos te deben tanto – Obito quedo atónito por las palabras de la mujer Yuhi.

-¿Cómo te enteraste de todo eso? – Pregunto el Uchiha – Mi maestra me lo conto – Respondió la pelinegra y así Obito comprendió como Kurenai estaba enterada de tantas cosas – Obito tu eres alguien muy especial – Mientras decía eso Kurenai puso su mano sobre la del Uchiha – Por favor no dejes que lo que digan los demás te afecte, ellos no saben lo que dicen, eres una de las mejores personas que conozco, nunca cambies – Una lagrima traicionera salió del ojo del Uchiha.

-Muchas gracias Kurenai-Chan- Agradeció Obito mostrando una enorme sonrisa – Pero bueno venimos aquí a pasarla bien, no hablar de cosas tristes – Dijo el Uchiha mientras se secaba con su manga la lagrima que se le había escapado – Es verdad, hay que hablarle al mesero para que tome nuestra orden, con todo esto se me abrió el apetito – Dijo Kurenai para luego tomar el menú y ver que pediría.

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Mientras tanto Naruto y sus compañeros de equipo se encontraban ocultos en unos árboles observando el campamento en donde se alojaban los bandidos que se mantenían saqueando a la aldea de la pintura.

-Asi que este es el campamento – Dijo Anko viendo a los bandidos, unos conversaban entre sí, otros simplemente caminaban de un lugar a otro, otros comían y bebían, libres de preocupaciones – Bien acabemos esto rápidamente, pero recuerden tenemos que dejar uno vivo – Dijo Naruto – Yo me encargó de dejar inconsciente a uno Naruto-Kun – Se ofreció Gai a lo que todos asintieron.
-Bien haremos un ataque directo y rápido, creare todo un grupo de clones, así acabaremos en unos segundos –Diciendo eso el rubio junto sus manos para hacer un sello – Kage Bunshin no Jutsu – Dijo el rubio para crear un grupo de 25 clones – Vaya esa es una gran cantidad de clones – Dijo Shizune sorprendida por ver a tantos clones – Eso no es nada, cuando entreno normalmente creo unos 100 clones, y estoy seguro que puedo hacer más pero nunca lo he intentado, sin con 100 al deshacerlos quedo totalmente agotado, incluso me desmayo y no quiero imaginarme lo que pasaría si hago más – Dijo el rubio como si nada dejando sin habla a sus compañeros.

-¿Qué pasa? – Pregunto el Uzumaki al ver a sus compañeros que se encontraban sorprendidos – Dices eso como si nada, ¿A caso no sabes que el Kage Bunshin es una técnica prohibida? – Dijo Anko con molestia al ver como el rubio se tomaba las cosas a la ligera – Escuche algo de eso pero no preste mucha atención, la academia es muy aburrida – Anko golpeo la frente con la palma de su mano al ver lo distraído que era el Uzumaki – La llama de la juventud de Naruto-Kun arde sin límites, tengo que esforzarme para estar a su nivel – Exclamo Maito con emoción mientras hacía unos ejercicios de calentamiento – Vaya compañeros que tengo – Pensó Anko mientras movía la cabeza de manera negativa.

-Bien entonces ataquemos, Gai te encargo el sobreviviente - Después de dichas palabras todos se lanzaron al ataque, para los bandidos solo vieron como caía sobre ellos una lluvia de kunais y de sebón, y nos que intentaron escapar fueron emboscados por varias serpientes que los enrollaban y los asfixiaban.

-Nos atacan, hagan algo – Dijo uno de los bandidos aterrado al ver como sus compañeros empezaban a caer como moscas, veía como muchos rubios atacaban a sus camaradas impactando una especie de esfera de Chakra mandándolos a volar muy lejos - ¿Qué significa esto? – Se preguntaba el bandido corriendo tratando de escapar lo más lejos posible, pero sin darse cuenta una persona vestida de verde apareció detrás de él para luego darle un golpe en la nuca y haciendo que perdiera el conocimiento.

-Bien, este será el sobreviviente, ahora a terminar con todos los demás – Se dijo a si mismo Gai para luego lanzarse al ataque contra los bandidos que quedaban de pie, los ataques por parte de los Shinobis de Konoha fueron rápidos, precisos y letales, simplemente los bandidos no pudieron hacer nada, más que resignarse a su destino fatal.

Pasado unos pocos minutos ningún bandido quedo en pie – Eso fue rápido, que pena creí que nos darían más pelea, pero resultaron ser unos buenos para nada – Dijo Anko con fastidio - ¿Ahora que Naruto-Kun? – Pregunto Shizune – Debemos esperar a que despierte el bandido que dejamos vivo, pero debemos alejarnos un poco, que no note que lo estamos vigilando – Dijo Naruto empezando a caminar para alejarse un poco del lugar y dejando con interrogantes a sus compañeros.

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En Konoha en una de sus calles iban caminado Obito y Kurenai, la pelinegra iba abrazada del brazo del Uchiha – Este ha sido un día genial Obito – Dijo la Yuhi sonriendo – Si, este día ha sido estupendo, gracias a ti Kurenai-Chan – Agradeció el pelinegro - ¿Pero qué estás diciendo? Si tú fuiste el que consiguió la reservación – Refuto Kurenai – Pero fuiste tú la que me invito a salir, este gran día fue gracias a ti – Obito se encontraba realmente feliz.

-Pues tú también pudiste haberme invitado ¿O no? – Pregunto la pelinegra – Pues siendo sincero, sí había pensado en pedirte una cita, pero no me atrevía, tenía miedo – Kurenai se extrañó con esa revelación - ¿Miedo? ¿De qué? – La Yuhi no entendía – Tenía miedo de que me rechazaras y también de arruinar nuestras amistad, en este tiempo te has convertido en alguien importante para mí, si tú te alejarás no sé qué haría – Kurenai sonrió al ver que como el Uchiha la apreciaba.

-Mira una heladería ¿No quieres un helado Kurenai-Chan? – Dijo Obito apuntado hacia el puesto de helados – Claro, se me antoja uno de fresa – Respondió la mujer – Bien, mira allá hay una banca, ¿Por qué no me esperas ahí mientras voy por los helados? – La pelinegra asintió para luego ver como el Uchiha se iba a comprar los helados.

Kurenai empezó a caminar hacia la banca y justamente antes de sentarse se detiene en seco - ¿Por qué no sales de una ves? Sé que nos has estado siguiendo – Dijo Kurenai a nadie, pero en eso aparece brincando de un tejado una chica de cabellos castaños - ¿Cómo me detectaste? Disminuí al máximo mi Chakra – Pregunto Rin al verse descubierta.

-Llámalo intuición, pero dime ¿Por qué nos has estado siguiendo? ¿A caso nos estabas espiando? – Pregunto la pelinegra con seriedad – Bueno yo… - Rin no supo que contestar – Ya me lo imaginaba, pero dime ¿Por estas interesando en lo que nosotros hagamos? – Volvía a preguntar – Yo solo quiero ver que Obito esté bien, él es mi amigo – Kurenai no se creyó en ningún momento la respuesta de la chica Nohara.

-¿A quién crees que engañas con eso Rin? Las dos sabemos que estas aquí por estas tienes celos – Acuso la Yuhi sorprendiendo a la castaña – Bueno y si fuera así ¿Qué vas a hacer? – Rin no estaba dispuesta a dejarse – Deja a Obito en paz, tú ya tuviste muchas oportunidades de estar con él y siempre los despreciaste, y a todo esto ¿No deberías de estar tras Kakashi? – Esas palabras hicieron sentir mal a la joven Nohara porque sabía que estaban llenas de verdad.

-No sé qué es lo que pretendes Rin, pero Obito merece ser feliz, no permitiré que lo lastimen más – Antes de que Rin pudiera responder hace de presencia el Uchiha con los helados que había ido a comprar – Aquí tienes Kurenai-Chan, el de fresa – Dijo Obito entregándole su helado a la pelinegra – Muchas gracias Obito – Agradeció la mujer recibiendo el helado.

-Oh, Rin no te había visto, pero dime ¿Qué haces por aquí? – Pregunto Obito al percatarse de la presencia de la chica Nohara – Solo pasaba por aquí y decidí saludarlos – Mintió la chica para ocultar que había estado espiándolos y haber estado discutiendo con Kurenai – Por cierto Kurenai-Chan mientras compraba los helados paso una mujer vendiendo rosas y te compre una, creí que te gustaría – Kurenai tomo la rosa para luego aspirar su delicado aroma – Eres tan lindo – Dijo Kurenai para luego acercarse al Uchiha y darle un pequeño beso en la mejilla.

-Me alegra que te haya gustado – Obito se encontraba muy sonrojado por el beso de Kurenai – Bueno yo tengo que irme, nos vemos después chicos – Se despidió Rin, ya no soportaba mirar más, echó a correr para alejarse lo que más pudiera de la pareja - ¿Qué fue lo que paso? ¿Fue algo que dije? – Se preguntaba el Uchiha al ver como su amiga había echado a correr – No es nada, solo que tenía atender un asunto importante y se le estaba haciendo tarde – Le dijo Kurenai para quitarle la preocupación a su cita.

-En fin, ¿Qué te parece si caminamos un rato por el parque Kurenai-Chan? – Pregunto Obito a lo que la joven se le abrazo al brazo – Vamos – Respondió empezando a caminar mientras disfrutaba del momento y empezaba a comer su helado.

Mientras tanto Rin que estuvo corriendo hasta llegar a un campo de entrenamiento – Esto no puede estar pasando ¿Cómo pude ser tan ciega? – Se preguntaba la chica mientras caía de rodillas y lágrimas empezaban a salir de sus ojos – Siempre estuviste a mi lado pero nunca supe verlo, y ahora que descubro que siento algo por ti, ya no estas – Rin se encontraba realmente arrepentida – Pero estoy todavía no termina, no voy a darme por vencida, ahora es mi turno de luchar por ti –La chica se levantó para luego secarse las lágrimas y mostrarse muy decidida – Juro que volveré a ganarme tu cariño, lo juro – Se dijo a si misma llena de confianza.

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En otro lugar un bandido empezó a recobrar el conocimiento - ¿Qué fue lo que paso? – Se preguntaba intentando recordar – Ya me acuerdo, fuimos atacados, no pudimos hacer nada – Se dijo para luego ver que estaba rodeado de cadáveres – Tuve mucha suerte de sobrevivir – Pensó sintiendo que era muy afortunado.

En eso el bandido empezó a escuchar unas voces, y el empezó a caminar sigilosamente para averiguar de donde provenían dichas voces, al ver que se trataban de las personas que los atacaron rápidamente se oculta de tras de una enorme roca – No puede ser, ellos siguen aquí – El bandido se encontraba totalmente aterrado – Creo que no me han visto, esta es mi oportunidad de escapar – Pensó para enseguida salir corriendo las rápido que podía.

Mientras tanto los Shinobis de Konoha continuaban con su charla – Ese idiota ya despertó y comenzó a moverse – Dijo Anko – Bien ahora debemos seguirlo sin que se dé cuenta – Ordeno el rubio comenzando a moverse siendo seguido por sus compañeros - ¿Qué es lo que planeas chico? – Pregunto Anko – Verán no les he contado nada ya que todavía no estoy completamente seguro, pero dentro de poco se los diré todo – Respondió el rubio.

Los Shinobis de Konoha estuvieron siguiendo al bandido durante un rato, en eso ven como el bandido llega a una especie de fortaleza y entra - ¿Qué significa esto? – Se preguntó Anko viendo la gran fortaleza – Miren haya hay una colina, desde ahí podremos ver mejor – Dijo Naruto para luego todos dirigirse a ese lugar.

Una vez todos arriba de la colina todos los Shinobis estaba sorprendidos por lo que veían – Esto no puede ser – Murmuro Shizune sin creer lo que veía, adentro de la fortaleza se encontraba un inmenso campamento lleno de miles de bandidos y también habían muchos ninjas poderosos, todo eso cambiaba las cosas de la misión, el Sr. Tatsumoto tenía que explicar muchas cosas – Esto es peor de lo que imaginaba – Murmuro el rubio sorprendido por el gran campamento de bandidos.

CAPITULO 18: EL FIN DE LOS BANDIDOS

-¿Qué vamos hacer Naruto-Kun? – Pregunto Shizune viendo sorprendida la cantidad de enemigos que había dentro de la fortaleza – Primero les contaré todo – Respondió viendo a los bandidos, como analizando algo – Bien primero me disculpo por no habarles dicho nada hasta ahora y les agradezco mucho que hayan confiado en mí – Dijo Naruto volteando a ver de frente a sus compañeros.

-No hay de que chico pero comienza a explicar que esto es muy confuso – Dijo Anko esperando la explicación de su líder – Bien todo empezó el día anterior antes de salir de la aldea, después de comer ramen me fui a estudiar los documentos de la misión que Tsunade Ba-Chan me dio, y no solo eso, recordando algo de lo poco que Kakashi me enseño, de que debo informarme todo lo que pueda antes de salir de misión, entonces decidí investigar un poco del lugar al que iríamos, es decir, la aldea de la pintura – El rubio empezaba a explicar con detalles.

-Y en mi investigación me encontré con información que se contradecía con el reporte que me dio Tsunade Ba-Chan, porque encontré notas periodísticas que informaban acerca de los ataques a la aldea de la pintura por parte de bandidos, y que dentro de los bandidos se encontraban ninjas de alto nivel – Todos empezaban a comprender un poco al Uzumaki.

-Ya veo, porque según el reporte de la misión no había Shinobis entre los bandidos – Apunto Shizune – Exacto y se me hizo raro que el Sr. Tatsumoto no dijera nada de eso a la hora de contratar nuestros servicios, entonces fui al despacho de Tsunade Ba-Chan para mostrarle mi descubrimiento y ella llego a la misma conclusión que yo, el Sr. Tatsumoto nos escondió información – Todos asintieron estando de acuerdo con Naruto.

-Entonces Tsunade Ba-Chan me pregunto ¿Si quería seguir con la misión? Y claro que quería, sería más peligrosa pero también más divertida, y sé que se estuvieron preguntando los tres el ¿Por qué fueron asignados a una misión de clase C siendo Jounnin? ¿No es verdad? – Los tres asintieron – Es verdad, de hecho se lo pregunto a Hokage-Sama y me dijo que como estaba desocupada me incluyo en la misión, y creía que realmente era para echarte la mano, ya que ella te aprecia mucho y pensé que te quería ayudar para que lograrás realizar fácilmente tu primera misión como líder pero me equivoque, ya que viendo a todos esos enemigos todo empieza a tener sentido, ya que realmente esta misión es de nivel A como mínimo – Se expresó Anko ahora que tenía algunas dudas aclaradas.

-¿Pero porque el Sr. Tatsumoto nos escondería información? – Pregunto Gai pensando él porque del mal actuar del líder de la aldea de la pintura - Seguramente debido al estado en el que se encuentra la aldea, no tenía dinero suficiente para pagar un misión de más alto rango – Opino Shizune pensando que esa razón era la más viable – Al principio pensé lo mismo, ya que no era la primera vez que un cliente me esconde información acerca de la misión – Dijo Naruto sorprendiendo un poco a todos.

-¿En serio ya te ha pasado antes? – Le pregunto Shizune sin creérselo – Asi es, fue en una misión con mi antiguo equipo, se supone que la misión seria solamente escoltar a un constructor de puentes y protegerlo de unos cuantos bandidos, pero terminamos luchando contras dos poderosos Shinobis, pero aun así logramos salir abantes – Los compañeros de Naruto se encontraban impresionados al conocer a lo que se había enfrentado el rubio siendo solo un Gennin.

-Bueno como les decía, al principio también creía que el Sr. Tatsumoto nos escondió información debido a la falta de dinero pero cambie de opinión cuando lo conocimos – Todos se llenaron de intriga ante las palabras del Uzumaki - ¿Qué fue lo que hizo cambiar de parecer? – Pregunto Shizune – Pues verán, al ser yo un Uzumaki tengo una gran capacidad sensorial, y aunque el Sr. Tatsumoto quiso esconderlo pude detectar un poderoso Chakra dentro de él, es decir, él es un ninja también – Los presentes se seguían sorprendiendo más.

-Si él es un ninja también ¿Por qué no lucho contra los bandidos? – Pregunto Gai al ver que el líder no hacía nada para ayudar a su aldea – Eso es fácil de deducir, el Sr. Tatsumoto está aliado con los bandidos, es parte de ellos – Respondió Naruto – Pero si el Sr. Tatsumoto es parte de los bandidos ¿Por qué contrataría los servicios de Konoha para deshacernos de sus aliados? – Pregunto Anko al ver que la manera de actuar de Tatsumoto era extraña.

-Es lógico, la aldea de la pintura fue una gran mina de oro para esos bandidos, recuerden lo que nos contó el mercader, esa aldea resguardaba una gran colección de arte, ellos empezaron a robar esas pinturas y a venderlas a precios muy altos, todo iba bien para ellos hasta que las obras de arte se acabaron, y debido al miedo que los artistas sentían dejaron de pintar, y la misión que contrató el Sr. Tatsumoto fue un simple montaje, el preparó el pequeño campamento que vimos para que nos hiciéramos cargo de él, y así darle a la gente de la aldea una falsa seguridad para que los artistas volvieran a pintar – Explico el rubio aclarándoles todo a sus compañeros.

-Ese maldito usa a la aldea como a una oveja, ahora que la esquilo quiere prepararla para que le crezca de nuevo la lana y volver a esquilarla – Anko estaba llena de ira hacia el Sr. Tatsumoto – Entonces por eso destruiste la información que nos dio, porque sabías que era falsa – Agrego Shizune comprendiéndolo todo – Así es, me di cuenta que ese reporte iba a estar diseñado solo para dejar ver lo que el Sr. Tatsumoto quería que viéramos – Dijo Naruto dándole la razón a la pelinegra.

-Lo que no entiendo, es que si Tsunade-Sama sabía que el Sr. Tatsumoto escondía información ¿Por qué decidió seguir adelante con la misión? Ella debió exigirle respuestas al Sr. Tatsumoto y el pago por una misión de mayor rango – Pregunto Anko – Creo saber porque – Hablo Shizune – Verán Tsunade-Sama le tiene gran cariño a la aldea de la pintura, ya que ella conoce a algunas personas de ahí y creo que es por eso que ella decidió ayudar a esa aldea – Explico Shizune recordando un poco del pasado de su maestra.

-Estas en lo correcto, así que realmente esta misión está corriendo a cuenta de Tsunade Ba-Chan y por lo cual debemos cumplirla lo mejor posible o de seguro se enfadara mucho – Todos asintieron con un poco de temor recordando el mal carácter de la Hokage – Bien ahora que todo está explicado debemos concentrarnos en el plan de ataque – Dijo Naruto volviendo a mirar hacia la fortaleza empezando a tratar de formular la mejor estrategia.

-¿Qué tienes en mente Naruto-Kun? – Pregunto Shizune la verlo pensativo – Dijiste que eres capaz de hacer 100 clones como mínimo, eso será de gran ayuda – Apuntó Anko recordando cuando Naruto les revelo su gran manejo de los clones de sombra – Si, eso será parte fundamental del plan pero antes tenemos que reducir todo el número de enemigos posibles conservando el mayor Chakra posible y creo saber cómo – Dijo Naruto para luego esbozar una gran sonrisa, sin duda se le había ocurrido una gran idea.

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Mientras tanto en Konoha en uno de los campos de entrenamiento se encontraba Hatake Kakashi reunido con su exalumno Sasuke Uchiha - ¿Qué demonios significa eso de que ya no vas a entrenarme Kakashi? – Pregunto de manera furiosa el Uchiha – Lamento decirte que ya no seré más tu maestro – Respondió el peligris - ¿Por qué no? ¿A caso me asignaran a un mejor maestro? – El peligris solo veía con decepción como el pelinegro solo pensaba en adquirir poder.

-Nada de eso Sasuke, lamentablemente por tu mala actitud con los demás, por tu exceso de soberbia y además tu terrible defecto de sed de venganza y de tu búsqueda de adquisición de poder sin importar el cómo, el consejo de Konoha determino que no te encuentras apto para seguir como shinobi activo por lo cual decidieron darte de baja del sistema – Esas palabras impactaron enormemente al pelinegro.

-No pueden hacerme eso, soy un Uchiha, por lo cual debo ser tratado con el máximo respeto – Reclamo el pelinegro lleno de cólera – Ese es tu principal problema, crees que por pertenecer al clan Uchiha todos están obligados a cumplir todos tus caprichos, y esa no es una actitud digna de un verdadero shinobi, solamente estas dándole más la razón a los del consejo – Sasuke se sentía impotente ante la situación, no creía que eso pudiera estar pasándole.

-Soy el último de los Uchihas, si ese consejo de mierda va a querer que renazca mi clan tendrá que ayudarme a fortalecerme para llevar a cabo mi venganza, si es que quieren que todo el poder del Sharingan regrese a Konoha – Dijo Sasuke con soberbia – Lamento decirte que el consejo de Konoha ya no está muy interesado en el renacimiento del clan Uchiha – Respondió Kakashi volviendo a impactar al pelinegro – Eso no puede ser, el consejo sabe muy bien que el clan Uchiha representa la elite de la aldea, nos necesitan – Intento refutar el Uchiha.

-Pues no es así, ya que Konoha aun cuenta con clanes muy poderosos como el Hyuuga o el clan Kurama por ejemplo, y si de alguna manera se necesitara restaurar al clan Uchiha debo decirte que ya no eres el único miembro de ese clan de la aldea – Sasuke no creía la existencia de otro Uchiha en la aldea – Hace poco regreso a la aldea un viejo compañero mío, un Uchiha, digamos que él estuvo en una misión de largo tiempo y no estuvo en la aldea durante la masacre del clan Uchiha, así que al consejo ya no le eres útil – El Uchiha se había atónito.

-Esto no puede ser, no pueden hacerme esto, soy uno de los mejores ninjas de la aldea – Gritaba Sasuke muy enfadado – Dime Sasuke ¿Por qué la aldea debe apoyarte? ¿Qué has hecho tú para ayudar a la aldea? – Pregunto Kakashi a lo que el pelinegro no pudo contestar – Todo este tiempo solamente has pensado en ti y en tu estúpida venganza, pero eso se acabó, así que Sasuke entrégame tu banda ninja – Al decir eso el Hatake estiro su brazo derecho esperando a que el Uchiha le entregara su identificación como ninja de Konoha.

-Todos se arrepentirán de esto – Termino de decir el Uchiha para quitarse su banda de la cabeza y arrojársela a Kakashi, aunque el peligris pudo atraparla fácilmente – Lo lamento mucho Sasuke – Murmuro el ninja copia mientras veía como Sasuke se alejaba del lugar – Perdóname Itachi, no fui capaz de llevarlo por el camino correcto – Se lamentaba el Hatake sintiéndose un poco culpable por el Uchiha.

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Mientras tanto en las afueras de la gran fortaleza de bandidos, más concretamente en la entrada se encontraban 3 bandidos que habían llegado al lugar, ahora mismo se encontraban conversando con los guardias que custodiaban la entrada al campamento bandido.

-Vaya parece que hubo más sobrevivientes – Dijo uno de los guardias viendo que llegaron otros bandidos – Y parece que apenas lograron salir de esa – Comento el otro guardia viendo como los sobrevivientes tenían muchas heridas, como sus ropas se encontraban empapadas de sangre – Si, fue una verdadera masacre, los que nos atacaron eran muy poderosos, no pudimos hacer nada – Dijo uno de los bandidos sobrevivientes, en su rostro se notaba mucho miedo.

-Pues tuvieron mucha suerte al haber salido de esa con vida, en fin, pasen a descansar y a recuperarse de sus heridas – Dijo uno de los guardias cediéndoles el paso a los sobrevivientes – Gracias, pero juro que nomás que nos recuperemos, haremos que esos malditos que nos atacaron nos la paguen muy caro – Termino de decir unos de los bandidos para luego entrar a la fortaleza acompañado de sus compañeros – Sin duda es un idiota, tiene suerte de vivir y todavía tiene ganas de enfrentarse a los que estuvieron a punto de matarlo – Opino uno de los guardias mientras negaba con la cabeza.

Los sobrevivientes caminaron un poco hasta estar totalmente dentro de la fortaleza, adentro vieron miles de bandidos, veían como algunos peleaban entre sí como método de entrenamiento e incluso de entretenimiento, otros se encargaban de afilar sus armas, unos comían, otros bebían licor y otros dormían.

-Sin duda que son demasiados – Comento uno de los bandidos sobrevivientes contemplando todo el lugar – Es cierto, pero mejor recorramos todo el lugar – Dijo otro de los bandidos, y así los tres se separaron para empezar a recorrer todo el sitio – Es inaudito que exista un nido de ratas como este – Eso eran los pensamientos de uno de los bandidos mientras recorría el lugar, camino un rato hasta que observo algo que le llamo la atención.

-No puede ser – Susurro el bandido viendo como dos personas platicaban, uno era un simple bandido pero el otro era una persona que ya conocía – Imposible ¿Qué hace el aquí? – Se preguntó el bandido sobreviviente – Te digo que esta es mi oportunidad de vengarme de ese niño demonio que me humillo hace tiempo – Dijo la persona que el bandido había reconocido.

-Me gustaría averiguar porque está aquí, pero ahora mi tarea es otro – Dijo el bandido para empezar a alejarse, pasado unos momentos los 3 bandidos se volvieron a reunir – Creo que está todo listo – Dijo uno de los sobrevivientes - ¡No puede ser! ¡Ustedes deberían estar muertos! – Exclamo un bandido que se trataba del que habían dejado escapar los Shinobis de Konoha - ¡Yo vi sus cadáveres! – Volvía exclamar el mismo bandido, esos gritos alertaron a todos que ahora miraban fijamente al trio sospechoso.

-Ya nos descubrieron – Dijo uno de los tres bandidos – No importa, nuestro trabajo está hecho – Dicho eso los tres bandidos desaparecieron en una nube de humo - ¡Esos tres era unos impostores! – Grito que bandido con furia - ¡Búsquenlos! – Grito otro – Eso será inútil, porque sin duda alguna esos tres eran clones de sombras disfrazados con un Henge – Aclaro uno de los maleantes que era ninja – Esos malditos ¿Pero a que vinieron aquí? – Se preguntaba otros de los malos – De seguro esos clones fueron creados por los mismos que destruyeron el otro campamento – Dijo el bandido que había escapado – Pero no parece que hayan hecho algo- Dijo comento otro – Tal vez robaron algo, vayan y revisen nuestra bóveda y cuenten si falta dinero – Ordeno uno de los ninjas.

Enseguida fueron a revisar la bóveda – Parece que no falta nada – Dijo uno de los bandidos que revisaba el dinero – Que extraño ¿Qué es lo que planean esos bastardos? Tal vez estaban reconociendo la zona para ejecutar su ataque, maldición debemos prepararnos – Ordeno el ninja preocupado por el plan de los que se habían infiltrado.

Mientras tanto en las cercanías de la fortaleza se encontraban reunidos los Shinobis de Konoha – Los clones ya desaparecieron – Hablo Naruto llamando la atención de su equipo – Entonces cuéntanos ¿Cómo es todo haya adentro? – Pregunto Anko emocionada por combatir – No tendrá caso decirles – Respondió el rubio dirigiendo su mirada hacia la fortaleza.

-¿Entonces para que mandaste a esos clones? Creí que reconocerían la zona – Pregunto Shizune confundida – No mande a los clones para eso, les dije antes que lo primero que haríamos sería reducir el número de enemigos lo más que pudiéramos ahorrando Chakra y a eso mande a los clones – Respondió Naruto con una sonrisa – Explícate – Dijo Anko sin entender – Ahora mismo esa fortaleza es una bomba, con mis clones coloque una gran cantidad de sellos explosivos por todo el lugar, ahora solo debo activarlos – Todos veían sorprendidos al rubio por su gran plan.

-Lo mejor será alejarnos un poco – Comento Gai viendo cómo serían las cosas – Así es – Dijo Naruto para empezar a realizar unos sellos, ante eso sus compañeros empezaron a alejarse del lugar – Ahora malditos pagaran todo lo que le hicieron a la aldea de la pintura – Dijo Naruto ejecutando su ultimo sello, pasado después ver como los sellos empezaban a detonarse generando poderosas explosiones, enseguida el rubio también comenzó a correr para alejarse del lugar.

Naruto corrió hasta llegar con sus compañeros que ya se encontraban a una distancia segura – Bien pensado Naruto-Kun – Felicito Shizune a su capitán mientras veía todas las explosiones que ocurrían en la fortaleza, se alcanzaban a escuchar miles de gritos provenientes de los bandidos, las explosiones no cesaban, y la fortaleza empezaba derrumbarse - ¿Cuántos sellos colocaste chico? – Pregunto Anko viendo como las explosiones seguían y seguían.

-Cientos – Respondió el rubio viendo su obra maestra – Esto es increíble, ese chico ha hecho grandes cosas en esta misión, sin duda alguna este mocoso será grande – Pensó Anko viendo con interés al Uzumaki – Yo que tenía ganas de luchar y poner a prueba mi llama de la juventud, pero no hay duda alguna que la llama de la juventud de Naruto-Kun es superior, tengo que esforzarme más – Exclamo Gai muy emocionado.

-Por cierto Anko-San ¿Qué tan fácil es escapar de la prisión de Konoha? – Pregunto el rubio – Es casi imposible ¿Por qué la pregunta chico? – Pregunto la mujer de las serpientes con interés – En la fortaleza me encontré con Mizuki – Respondió el rubio – Ya veo, pues no tengo idea de cómo logró escapar, tal vez soborno a los guardias – Dijo Anko no creyendo que alguien pudiera escapar de la prisión de Konoha – Bueno eso no importa, si llega a sobrevivir a las explosiones nos encargaremos de él – Dijo el rubio a lo que la mujer asintió.

-Una vez que todas las explosiones terminen debemos ir a revisar y encargarnos de todos los sobrevivientes – Ordeno el rubio – Espero que queden algunos pocos fuertes – Dijo Anko con sadismo mientras era rodeada por una de sus serpientes – Estoy lista Naruto-Kun – Dijo Shizune mostrando sus sebones en sus manos – Esto será fácil – Exclamo Gai mientras hacía ejercicios de calentamiento.

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Mientras tanto en Konoha, Sasuke Uchiha caminaba por los campos de entrenamiento, buscando un lugar para entrenar y sacarse todo la ira que cargaba en ese momento – Esta aldea pagará por lo que me hizo, ya lo verán – Se decía a sí mismo el Uchiha lleno de furia, y en eso el observa como su ex equipo, es decir Sakura y Hinata entrenaban arduamente y el recordó que ellas entrenaban para controlar su elemento afín.

-Hola Sakura – Saludo el Uchiha acercándose a la pelirrosa – Oh eres tu Sasuke – Dijo Sakura al reconocer al pelinegro, a Sasuke se le hizo extraño el comportamiento de la chica, era para que normalmente estuviera emocionada y gritando de alegría por haberle dirigido la palabra, y sobre todo noto que ella no usaba el sufijo Kun cuando dijo su nombre – Bueno venía para ver si querías que entrenáramos juntos – Dijo Sasuke esperando que naturalmente la chica aceptará.

-Gracias por la invitación, pero no gracias, ahora mismo estoy muy ocupada, estoy entrenando para controlar mi elemento, lo siento – Respondió la chica para luego darse la vuelta y regresar a entrenar - ¿Cómo se atreve? Ella debería estar besando el suelo que yo piso – Pensaba el Uchiha enojado con Sakura por haberlo rechazado.

Enseguida Sasuke se acercó a la Hyuuga – Hola- Saludo con simpleza el pelinegro sacando de su concentración a Hinata – Oh, es usted Uchiha-San – Hablo la Hyuuga – Vine a ver si querías entrenar un poco conmigo – Sasuke estaba confiado de que Hinata aceptaría – Lo lamento Uchiha-San, pero ahora mismo estoy haciendo un entrenamiento muy importante – Les respondió la chica dejando atónito al pelinegro por hacer sido rechazado nuevamente.

-Malditas no voy a dejar que se burlen de mi – Exclamo Sasuke activando su Sharingan y lanzándose en contra de Hinata, el pelinegro lanzó un golpe que la Hyuuga apenas pudo esquivar saltando a un lado - ¿Por qué Uchiha-San? – Preguntó la chica de ojos blancos al no entender por qué el Uchiha la había atacado.

-Nadie me da la espalda a mí – Respondió el Uchiha con furia para empezar a realizar sellos con sus manos - ¡Katon Gokyaku no Jutsu! – El pelinegro lanzo una bola de fuego a la Hyuuga que saldo de nuevo para esquivarla, cosa que aprovecho Sasuke para lanzarse en contra de ella y asestarle un buen golpe – Espero que te duela – Dijo Sasuke lanzado su puño pero antes que lograr golpear a la Hyuuga el Uchiha recibió una buena patada en el estómago que lo mando que lanzo un poco hacia atrás.

-¿Qué crees que estás haciendo Sasuke? – Pregunto Sakura enfadada al ver que el Uchiha había atacado a su amiga – Maldita me las vas a pagar- El Uchiha se lanzó en contra de Sakura, entre los dos empezó un combate de Taijutsu, Sasuke creyó que ganaría fácilmente, pero se sorprendió al ver como la pelirrosa esquivaba y bloqueaba sus ataques - ¿Cuándo fue que se hizo tan fuerte este estorbo? – Se preguntaba el Uchiha cesando sus ataques y dando brinco hacia atrás para alejarse un poco.

-Bien ahora veras lo que es ser un Shinobi verdadero – Dijo Sasuke realizando sellos para luego en su mano derecha concentrar Chakra y enseguida en su mano empezaron a generarse unos rayos – Espero que estés lista ¡Chidori! – El Uchiha se lanzó en contra de Sakura para asestarle su gran técnica, pero en eso a un lado de él, aparece Hinata con su Byakugan activado, enseguida la Hyuuga lanzo varias Jukens al Uchiha cerrándole varios puntos de su red de Chakra y haciendo que el Chidori desapareciera.

-Maldita- Exclamo Sasuke todo adolorido por los Jukens que la Hyuuga le propino, y sin esperarse el Uchiha recibe en el rostro una gran patada voladora de Sakura que lo mando a estrellar en contra de un árbol, el pelinegro ya no pudo levantarse, había perdido el conocimiento por el impacto.

-¿Estas bien Hinata? – Pregunto Sakura preocupada por su amiga – Si, estoy bien Sakura-San ¿Y tú? – Hinata le pregunto lo mismo – Si, pero no puedo creer que venciéramos a Sasuke – Comento la pelirrosa viendo derrotado al Uchiha, en eso las dos empezaron a escuchar unos aplausos – Kakashi-Sensei – Dijo Sakura reconociendo a su maestra que se encontraba parado sobre la rama de árbol – Vaya eso sí que fue un gran trabajo de equipo – Felicito el Hatake a sus discípulas – Un momento ¿Usted estuvo viendo todo y no hizo nada? – Reclamo la pelirrosa.

-Sí, lo siento, pero quería comprobar sus avances, y realmente han mejorado mucho en tan poco tiempo – Kakashi sonreía detrás de su máscara – Bien, quiero que descansen, ya mañana continuaran con su entrenamiento, ya fue suficiente para las dos por hoy, yo llevaré a Sasuke con la Hokage, lo más seguro es que se lleve un castigo severo por haberlas atacado – Dijo Kakashi para luego cargar en su hombro al pelinegro.

-¿Qué te parece si vamos a cenar Sakura-San?- Invito la Hyuuga – Claro, me encantaría – Sin duda las dos se estaban volviendo muy buenas amigas – Nos vemos Kakashi-Sensei – Las dos se despidieron para irse a cenar – Naruto realmente eres una inspiración para ellas, solo espero que eso no traiga problemas más adelante – Pensó Kakashi viendo como sus alumnas se alejaban del campo de entrenamiento.

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Mientras tanto en la aldea de la pintura el Sr. Tatsumoto se encontraba reunido con su consejo en una junta.

-Si logramos estos acuerdos tal vez la aldea pueda empezar a levantarse – Dijo uno de los consejeros dando su punto de vista – No lo sé – Dijo el Sr. Tatsumoto mostrando que no le agradaba la idea – Por cierto Sr. Tatsumoto ¿Qué paso con los Shinobis que contratamos? – Pregunto uno de los consejeros – No lo sé, hace tiempo que debieron hacer terminado el trabajo, creo que no son tan buenos como ellos presumen – Respondió Tatsumoto.

-Creo que nos está menospreciando mucho Sr. Tatsumoto – Se escuchó una voz que se trataba del Uzumaki que se encontraba sentado en el marco de la ventana – Vaya al fin volvieron ¿Por qué tardaron tanto? – Pregunto el Sr. Tatsumoto con un poco de molestia – Lo que pasa es que nos tardamos debido a que nos encontramos otro campamento de bandidos más grande – Respondió el rubio acercándose a los presentes.

¿A qué se refiere con eso? – Pregunto uno de los consejeros – Me refiero a que uno de los suyos les ha estado mintiendo y robando desde hace tiempo – Los consejeros se sorprendieron ante la revelación del Uzumaki – Esas son puras tonterías ¿Qué va a saber un extranjero de nuestros asuntos? – Dijo el Sr. Tatsumoto totalmente nervioso - ¿Por qué no dejamos que hable nuestro rehén? - Dijo el rubio para chasquear los dedos.

En eso por la ventana entran los otros Shinobis de Konoha que traían a uno de los bandidos amarrado por varias serpientes – Por favor, Sr. Tatsumoto ayúdeme – Clamo por ayuda el bandido – No sé de qué estás hablando, no sé quién eres – Respondió el Sr. Tatsumoto - ¿Podrían explicarnos esto? – Pregunto uno de los consejeros.

-Es simple, el Sr. Tatsumoto es el líder de los bandidos que han estado atacando y saqueando a esta aldea – Revelo el Uzumaki dejando atónitos a los del consejo – Eso es mentira – Exclamo con furia el acusado – De hecho es fácil de comprobar – En eso el rubio se dirige al rehén para luego señalar un tatuaje que este tenía en su brazo derecho – Este tatuaje lo tienen todos los miembros de los bandidos – Explico Naruto – Sr. Tatsumoto ¿Podría mostrarnos su brazo derecho? – Pregunto el rubio – Eres un maldito, no voy a permitir…- El Sr. Tatsumoto iba a lanzarse en contra del rubio pero antes de que pudiera hacer algo aparecieron unas sebón que se le incrustaron en el cuello haciendo que perdiera el conocimiento.

-Gracias Shizune-San – Agradeció el rubio – De nada Naruto-Kun – Respondió la mujer, enseguida Anko tomo un Kunai para luego cortar todo la manga del brazo derecho del Sr. Tatsumoto y mostrar ante todo el consejo el tatuaje que lo marcaba como miembro de los bandidos – Y todo este tiempo creíamos que el Sr. Tatsumoto solo velaba por el bien de la aldea, siendo él la mente maestra de todo lo malo que le ha ocurrido a la aldea – Dijo un consejero decepcionado.

-¿Cómo podremos pagarles esto? – Pregunto otro consejero agradecido por ayuda de los Shinobis – Descuiden todo está cubierto, les dejaremos al Sr. Tatsumoto y al otro bandido a su custodia, les pondremos a los dos sellos supresores de Chakra para que no den problemas – Respondió el Uzumaki – Muchas gracias por todo Shinobis de Konoha, nunca olvidaremos esto – Agradeció el consejero – Bien entonces nos retiramos – Así los Shinobis se retiraron no sin antes colocarles a los criminales sus debidos sellos.

Más tarde en la salida de la aldea los Shinobis de Konoha se preparaba para regresar a su aldea – Bueno con esto podemos decir, misión cumplida – Dijo Anko – Aun no, todavía debemos regresar a la aldea y entregar a nuestro fugitivo – Dijo Shizune viendo como Gai cargaba el cuerpo inconsciente de Mizuki – Es verdad, pero ese idiota es como una cucaracha, sobrevive a todo – Dijo Anko viendo con molestia al antiguo ninja y maestro de academia de Konoha.

-En fin, andando – Ordeno el rubio para empezar a correr y ser seguido por sus compañeros, sin duda esa misión había sido una gran experiencia para Naruto.

CAPITULO 19: LA HERENCIA DE NARUTO

-Bien hecho muchachos – Felicito la Hokage a Naruto y a su equipo que ya habían regresado de su misión – Por cierto en la misión nos encontramos con un fugitivo de Konoha, el ex Sensei de la academia Mizuki – Dijo el rubio - ¿Y qué paso con él? – Pregunto Tsunade – Lo capturamos y antes de venir aquí fuimos a entregárselo a Ibiki Morino para que lo interrogará – Explico el rubio – Bien pensando, sin duda Ibiki le sacará todo a esa sabandija – Dijo la Godaime satisfecha.

-Bien aquí le dejo un reporte de la misión – Enseguida el Uzumaki saco un folder y se lo entregó a la Hokage – Bien, Naruto ahora puedes retirarte a descansar te lo mereces – El rubio asintió para luego dirigirse a la ventana y saltar por ella – Maldito mocoso, muchas veces le he dicho que use la puerta para salir – Se quejaba la rubia.

Ahora en la oficina solo quedaban Shizune, Anko y Gai junto a la Hokage – Bien ahora ustedes quiero que me digan ¿Cómo se desenvolvió el chico en la misión? – Esa era otra de las razones por la cual Tsunade los había enviado a la misión, para que evaluaran el desempeño de Naruto – El chico estuvo excepcional – Hablo primero Anko – El siempre mantuvo la situación bajo su control, de hecho, con lo que nos topamos con otro a cargo la misión hubiera sido más complicada – Sin duda la chica de las serpientes estaba impresionada.

-La llama de la juventud de Naruto-Kun arde hasta el infinito, no tiene comparación, es fuerte, es inteligente, él lo tiene todo – Exclamo Gai maravillado con el rubio – Naruto-Kun es hábil para crear estrategias, siempre logrando sacar la mayor ventaja de la situación, además tiene una capacidad de deducción extraordinaria, pudo descubrir los planes ocultos de nuestros enemigos con tan solo analizar la situación – Apunto Shizune también impresionada con el Uzumaki.

-Lea el reporte que Naruto-Kun le dio, así se dará una idea de lo que es capaz, aunque muy seguramente Naruto-Kun maquillo la información para darnos algo de crédito a nosotros, pero la verdad es que el lo planeo todo, nosotros nada más nos limitamos a seguir ordenes – Dijo Shizune haciendo sonreír a la Hokage.

-Me alegra escuchar eso – Dijo la Godaime – Verán el consejo está muy interesado en el desarrollo de Naruto y ellos esperan un reporte de su primera misión como líder, y será bueno decirles que lo hizo realmente bien y sobre todo que fue evaluado por tres de nuestros mejores Jounnin – La rubia estaba orgullosa del Uzumaki.

-Creí que los del consejo estaban en contra de Naruto – Apunto Anko recordando como siempre el consejo buscaba la manera de usarlo como un arma – Bueno en realidad hay varios líderes de clanes que siempre le tuvieron estima pero por temor a represalias por parte de Danzou, Homura y Koharu no se atrevían a apoyarlo, pero ahora que ellos ya no están ya pueden expresar su apoyo al chico libremente – Explico la rubia.

-Y eso no es todo, en una reunión se revelo los nombres de los padres de Naruto y eso hizo que muchos se arrepintieran del como lo habían tratado – Esas palabras intrigaron a Anko y a Gai - ¿Los padres de Naruto? ¿Quiénes eran? – Pregunto Anko interesada – Bien esto es de alto secreto, no quiero que esta información salga de aquí, Shizune ya lo sabe, en fin, los padres de Naruto son Kushina Uzumaki y Minato Namikaze – Tanto Gai como Anko se sorprendieron enormemente por la revelación.
-Eso explica porque el chico es muy hábil, siendo hijo de ellos no se podía esperar menos de él, y ahora entiendo porque el consejo está interesado en él – Dijo Anko entendiendo muchas cosas – Sabía que Naruto-Kun era especial, su llama de la juventud arde como la de sus padres – Maito estaba emocionado al saber que Naruto era hijo de grandes Shinobis – Bien como les dije antes, esto no debe salir de aquí, ni Naruto quiere que se sepa, él quiere ganarse el respeto de los aldeanos por sus propios méritos y no por ser hijo del Yondaime – Dijo Godaime recalcando la importancia de guardar el secreto.

-Ese chico sin duda es admirable, si tan solo fuera mayor – Comento Anko relamiéndose los labios – Anko-San no digas eso – Dijo Shizune un poco sorprendida por las palabras de la chica serpiente – Oye acepta que si el chico fuera mayor, tú también estarías interesada en él – Pico Anko – Bueno yo… - Shizune se había quedado sin habla y mostrando un gran sonrojo en su rostro.

-Suficiente – Hablo la Hokage deteniendo la escena que se montaba enfrente de ella – Ahora pueden retirarse a descansar – Los Jounnin asintieron para luego retirarse del lugar – Vaya esas chicas, en fin, ahora debo de terminar de afinar los últimos detalles para entregarle a Naruto toda su herencia, estoy segura que se sorprenderá mucho – Se dijo la Godaime mientras revisaba unos documentos.

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Mientras tanto en un campo de entrenamiento se encontraba Tenten practicando su Kenjutsu, ella peleaba contra un clon suyo, la lucha era grandiosa, ambas tenían un kunai y se atacaban mutuamente, al chocar las armas estas generaban algunas chispas por los fuertes impactos.

-Vaya sí que has mejorado mucho – Escucho una voz que la saco de su concentración, Tenten volteo para encontrarse con su rubio amigo – Naruto-Kun has vuelto – Exclamo la chica para deshacer su clon para enseguida salir corriendo y abrazar al chico – Te eche mucho de menos – Dijo la castaña sin romper el abrazo – Yo también Tenten-Chan – Dijo el chico para luego sonreír cálidamente.

-Y cuéntame ¿Cómo te fue en tu misión? – Pregunto la chica rompiendo el abrazo – Creo que lo hice bien, no hubo problemas – Respondió el chico recordando que fue felicitado por la Hokage – Pero cuéntamelo todo, quiero saber todos los detalles – Tenten se encontraba emocionado por saber de las aventuras de su amigo.

-Está bien, pero tengo hambre ¿Por qué no vamos a Ichiraku y ahí te cuento todo mientras comemos? – La chica asintió para luego enseguida comenzar a caminar junto al rubio – Por cierto note que has mejorado mucho tu técnica, me sorprendiste, has mejorado mucho en tampoco tiempo – Comento Naruto recordando lo que alcanzo a ver de la práctica de su amiga – Solo he seguido las instrucciones que me dejaste – Respondió la chica un poco nerviosa y sonrojada por el halago.

-Creo que ya es hora de que aprendas a canalizar tu Chakra en las armas, así les darás más potencia a tus ataques – Dijo Naruto haciendo sonreír a la chica - ¿En serio? Gracias, es algo que he estado esperando – Por la emoción Tenten termino besando al chico en la mejilla – Lo siento Naruto-Kun yo no quise…- Ambos estaban sonrojados por la acción inconsciente de la chica – Descuida Tenten-Chan, no pasa nada – Respondió el chico aun sonrojado.

-¿Qué es esto que siento? – Se preguntaba el chico mentalmente al empezar a sentir una extraña sensación después de recibir ese beso – Tal vez estas empezando a ver a esa chica más que como a una simple amiga – Le comento su inquilino - ¿Cómo sabes eso? – Pregunto – Pues puedo sentir lo que sientes, y este sentimiento que estas experimentando ahora, es muy similar al que sentías cuando estabas con esa chica de cabello rosa – Le respondió el Zorro – Es verdad, pero ¿Qué debo hacer? – Se preguntaba el chico confundido por sus sentimientos – Eso es algo que tú mismo deberás descubrir – Termino de decir Kurama dejando muy pensativo a su Jinchuriki.

-¿Pasa algo Naruto-Kun? – Pregunto Tenten al verlo muy pensativo – No es nada Tenten-Chan, solo que estoy un poco cansando del viaje es todo – Le respondió para luego mostrarte una gran sonrisa haciendo también sonreír a la chica.

Pasados unos momentos, ambos llegaron al puesto de Ramen y se encontraron con Shikamaru y el equipo 10 que también se encontraban comiendo en el lugar – Oh, hola Naruto ¿Cuándo llegaste de tu misión? – Le pregunto el Nara con su típica expresión aburrida – Hace poco – Contesto para luego ayudar a Tenten a sentarse con caballerosidad y después tomar su asiento.

-Viejo sírveme uno con todo – Exclamo el rubio llamando la atención del dueño del local – Hola Naruto-Kun, empezábamos a echarte de menos, nuestro cliente número uno – Dijo Teuchi alegre de volver a ver al rubio – Supe que tuviste tu primera misión como líder Naruto-Kun – Comento Ino viendo con interés al rubio – Así es, luchamos contra unos bandidos en el país de la pintura – Respondió el chico mientras esperaba con ansias su tazón de Ramen.

-¿No fue peligroso? – Pregunto Chouji con preocupación – Eran muchos, pero hicimos un plan tan grandioso que nos facilitó mucho el trabajo – Dijo Naruto recordando su plan utilizando los sellos explosivos en la fortaleza de los bandidos – Tienes mucha suerte cara de zorro, a ti ya te dan misiones emocionantes mientras que a nosotros puras misiones aburridas – Comento Kiba recordando con fastidio la última misión que tuvieron.

-No te quejes Kiba, recuerda que él ya es un Chunnin y nosotros seguimos siendo Gennin – Reprendió Ino a su compañero de equipo – Aquí tienes Naruto-Kun, un ramen con todo, y para tu amiga el de verduras – Teuchi sirvió sus tazones de ramen a Naruto y a Tenten – Muchos gracias viejo – Agradeció el rubio para enseguida empezar a devorar su ramen.

-Yo mañana parto a mi primera misión como líder – Comento Shikamaru con pesadez – Genial, pues que tengas mucha suerte – Dijo Naruto deseándole lo mejor a su amigo – Gracias – Respondió el Nara sin dejar de pensar lo problemático que sería la misión – Oye cara de zorro ¿Qué te parece si un día de estos nos juntamos para entrenar? Me gustaría enfrentarme a un Chunnin – Dijo Kiba viendo con interés y emoción al rubio.

-Claro, solo que sea un día que no tengamos misiones – Respondió el rubio gustándole la idea – Asi me gusta ¿Qué te parece mañana temprano? – Sugirió el Inuzuka – De acuerdo, aunque Tenten-Chan me acompañara, nosotros entrenamos todos los días – Dijo el Uzumaki aceptando – Oigan yo también quiero ir, también quiero entrenarme con ustedes – Dijo Ino esperando que no la dejaran fuera – Claro entre más seamos mejor ¿Por qué no vienes también tu Chouji? – Pregunto Kiba al Akimichi – De acuerdo, no puedo dejar que solo Shikamaru sea el que progrese – Acepto Chouji sin dejar de comer Ramen.

Un rato más tarde Naruto y Tenten caminaban por la aldea platicando amenamente – Vaya tu misión sí que fue emocionante Naruto-Kun, haberte enfrentando con tantos bandidos y salir prácticamente sin ningún rasguño, eres de admirar, aunque también me da un poco de envidia, eres un año menor que yo y ya eres un Chunnin mientras yo sigo como Gennin – Dijo la castaña sintiéndose débil en comparación al rubio.

-Vamos Tenten-Chan no es para tanto, recuerda que pude fortalecerme tanto debido a mi método de entrenamiento con el Kage Bunshin, además en todo este tiempo que hemos entrenado juntos has mejorado mucho, seguramente en el siguiente examen ascenderás sin problemas – Animo el chico a su amiga sacándole una sonrisa.

Ambos siguieron caminando hasta que enfrente de ellos aparece una pequeña nube de humo para luego dejar ver a un Anbu – Naruto Uzumaki, Hokage-Sama requiere de su presencia – Aviso el enmascarado – De acuerdo iré enseguida – Respondió el rubio para luego ver como el Anbu desaparecía del mismo modo en el que llego - ¿Por qué no me acompañas Tenten-Chan? No creo que sea importante, acabo de llegar de una misión, no creo que me envíen inmediatamente a otra – La chica asintió para luego acompañar a su amigo a ver a la Hokage.

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En la torre del Hokage la Godaime se encontraba revisando algunos papeles – Todo esta listo, nada más falta que llegue ese tonto para darle lo que le pertenece – Pensó la rubia viendo unos documentos muy importantes, en eso ve que la puerta de su oficina se abre dando paso a Naruto acompañado de Tenten – Hola Tsunade Ba-Chan ¿Me mando… - El rubio no pudo terminar su frase ya que recibió un golpe de la Hokage estrellándolo contra un muro.

- Naruto, te he dicho mil veces que no me digas así y también que toques antes de entrar – Dijo la Hokage con ira – En fin, me alegra que estés aquí, por cierto Tenten ¿Necesitas algo? No recuerdo haberte llamado, tal vez bebí demasiado y lo olvide – Pregunto la Godaime al ver a la chica – Se equivoca Tsunade-Sama, solo vine a acompañar a Naruto-Kun – Dijo Tenten explicando su estadía – Ya veo, en fin, Naruto acércate – Orden la Hokage al ver que el chico ya se había recuperado del golpe.

-Si ¿Qué pasa Tsunade-Sama? – Pregunto el rubio con respeto para evitar ser otra vez golpeado – Te mande a llamar debido a algo muy importante, veras el consejo ya está enterado acerca de la verdadera identidad de tus padres – Dijo Tsunade captando toda la atención de rubio – Naruto ¿Quieres que siga hablando con Tenten presente? – Pregunto la Hokage al no saber si el rubio quería que su amiga se enterará – Continúe, ya le conté a Tenten-Chan sobre eso – Respondió el Uzumaki.

-De acuerdo, bueno el consejo respetó tu decisión de que esa información siguiera en secreto, pero lo que ellos si quieren es que en algún futuro vuelvas a renacer el clan Uzumaki, y desde ahora serás líder de ese clan, pero por tu edad dentro del consejo solo se te permitirá tratar únicamente temas relacionados directamente con tu clan, por ahora no podrás ingerir en temas de otra índole – Dijo Tsunade sorprendiendo un poco al chico.

-Ya veo, bueno ya tenía pensado en su momento volver a reconstruir mi clan, pero me agrada que el consejo me apoye – Dijo el chico alegre con lo sucedido – Bueno supongo que eso es todo – Naruto pensaba que solamente para eso la Hokage lo había llamado – No Naruto, aún hay más – Dijo la rubia para enseguida sacar unos documentos – El consejo decidió que como ahora serás líder de clan que es justo que recibieras la herencia total que te dejaron tus padres – La Godaime le paso unos papeles al rubio junto con una pluma – Nada más firma esos papeles y la herencia es tuya – Naruto estaba atónito.

¿Mis padres me dejaron algo? – Pregunto el rubio al no creérselo – Claro, pero el Sandaime decidió que para protegerte de los enemigos de tu padre no se te dijera nada hasta que te convirtieras en Chunnin o cumplieras 18 años, lo primero que pasará, y como ahora eres Chunnin llegó la hora de que recibas lo que te pertenece - Naruto lentamente firmaba los documentos mientras todavía procesaba lo que ocurría.

-Listo- Anunció el chico al terminar de firmar – Bien ¡Shizune! – Exclamo la Hokage haciendo que por la puerta entrará su asistente - ¿Me llamó Tsunade-Sama? – Pregunto la pelinegra – Quiero que te encargues por un rato de la oficina, voy a ir mostrarle su herencia a Naruto – Dijo Tsunade levantándose de su asiento, Shizune normalmente se opondría ya que comúnmente la rubia buscaba cualquier pretexto para no trabajar, pero por tratarse de la herencia de Naruto lo dejaría pasar.

-Bien Naruto, Tenten acompáñenme – Enseguida salieron de la oficina dejando sola a Shizune que se encargaba del papeleo pendiente – Solo espero que no se desaparezca por el resto del día – Se dijo la pelinegra viendo la montaña de documentos que le esperaban.

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Más tarde en una zona un poco alejada de Konoha, de hecho dentro de un pequeño bosque Naruto y Tenten seguían a la Hokage - ¿A dónde nos llevará Naruto-Kun? - Pregunto la castaña – No tengo idea Tenten-Chan, mi versión futura no me menciono nada de esto – Respondió el chico tampoco sabiendo nada.

-Ya casi llegamos, se sorprenderán – Dijo la Hokage sin dejar de caminar, pasaron unos momentos hasta que llegaron a un claro y donde también se encontraba un pequeño lago – ¿Estas segura que es aquí vieja? Creo que se te pasaron las copas- Menciono el rubio al ver el lugar – Maldito mocoso ya me las pagarás, en fin – Enseguida la rubia empezó a realizar varios sellos con sus manos - ¡Kai! – Exclamo la Hokage después de realizar el último sello.

Enseguida ante la vista de los presentes empezó a aparecer una enorme mansión que ocupaba todo el claro y parte del bosque, el pequeño lago quedaba dentro del jardín trasero - ¡Increíble! – Exclamo el rubio al ver la lujosa casa – Esta es la casa de tus padres, la dejaron oculta con un Genjutsu – Explico la Hokage.

-Síganme – Ordeno la Godaime para luego dirigirse al interior de la mansión, al entrar lo primero que vieron fue una enorme sala, con muebles de los más finos y en una gran pared se encontraba un enorme retrato de los padres de Naruto abrazados - Tu madre sí que era muy hermosa Naruto-Kun – Opino Tenten al ver el retrato – Es verdad – Concordó el rubio sin dejar de ver la imagen de sus padres.

-Bien Naruto como te habrás dado cuenta esta es la sala, cuenta incluso con un gran comedor, aquí podrás recibir a todos tus invitados, además esta mansión cuenta con una enorme cocina totalmente equipada, un dojo, un enorme jardín con lago, 5 baños completos, 15 recamaras, salón de juegos, aguas termales y un pequeño invernadero – Dijo Tsunade dejando con la boca abierta tanto a Naruto como a Tenten.

La Hokage les dio todo un recorrido por la enorme mansión – Este lugar es enorme, una sola recamara es más grande que todo mi departamento – Comento el rubio aun sin creerse que esa mansión ya era suya – Hay otra cosa más Naruto que necesito mostrarte – Dijo la Godaime para dirigirse a una habitación en concreto.

Los tres entraron para encontrarse con una habitación vacía, solo había una enorme puerta metálica en el muro del fondo, la puerta tenía dibujada en toda ella un extraño símbolo.

-Esta es una bóveda, y está hecha especialmente solo para que tú o alguien de tu familia pueda abrirla Naruto – Explicó Tsunade al ver la cara de confusión de los ninjas – Para abrirla solo debes colocar la palma de tu mano sobre el símbolo que esta dibujado en la puerta, ese símbolo es un sello muy poderoso que protege todo lo que se guarda en esa bóveda – Naruto se acercó hacia la puerta de metal, la observo puros momentos para luego colocar su mano tal como se lo había explicado la Hokage.

Enseguida el símbolo empezó a brillar, y posteriormente la puerta metálica empezó a abrirse lentamente – Veamos que hay dentro – Dijo Naruto entrando a la enorme bóveda seguida de Tenten y de la Hokage - ¡Increíble! – Exclamo el rubio al ver el contenido de la gran bóveda, había mucho dinero e incluso oro, y eso no era todo, también había muchos pergaminos que posiblemente guardaban técnicas muy poderosas.

-Como te habrás dado cuenta Naruto, tus padres te dejaron un muy buen porvenir, ahora podrás de disfrutar de toda tu herencia como más desees, pero te aconsejo que no la malgastes – Aconsejo Tsunade – Vaya Naruto-Kun te hiciste rico de un día para otro – Comento Tenten alegre por su amigo – Es verdad, pero regresemos al departamento y traigamos nuestras cosas, mudémonos cuanto antes – Ambos asintieron para luego salir de la bóveda.

-Un momento ¿Entendí bien? ¿A caso escuche que se mudarían los dos? – Pregunto la rubia al no comprender la situación – Lo que pasa Ba-Chan es que debido a que Tenten-Chan ha estado sin equipo no ha podido realizar misiones y no ha podido ganar dinero y su casero la echo de su departamento – Empezó Naruto a aclarar la situación – Y Naruto-Kun me ofreció vivir con él en su departamento – Termino de explicar la castaña.

-Ya veo, aun así me sorprende que vivan los dos juntos, y siento mucho todo lo que has tenido que pasar Tenten, en parte es mi culpa, me he dedicado mucho a otros asuntos que sin querer te deje de lado, pero te prometo que te lo compensare – Dijo Tsunade comprometiéndose con Tenten – Descuide Tsunade-Sama, sé que no es su culpa, es la Hokage, usted debe tener cosas más importantes que hacer que atender a un Gennin, además todo este tiempo he podido entrenar Kenjutsu como siempre lo quise – Dijo Tenten tratando de restarle importancia al asunto.

-Así que conseguiste un maestro de Kenjutsu ¿Quién es? – Pregunto la rubia – No exactamente, Naruto-Kun es quien me ha estado ayudando, él es bueno con el Kenjutsu – Respondió la chica – Ya veo, me alegró por ti, en fin, tengo que irme o Shizune se enfadará, que disfrutes de tu herencia Naruto – Se despidió la rubia para luego irse del lugar.
-Bien Tenten-Chan, vamos a mi departamento por nuestras cosas – Repitió el rubio – No lo sé Naruto-Kun, digo esta es la casa de tus padres, no creo que sea pertinente que yo me venga a vivir aquí, es mejor que yo me quede en el departamento – Dijo Tenten sintiéndose un poco incomoda – Tonterías, este lugar es enorme, me sentiría muy solo sin ti aquí – Dijo Naruto.

-No lo sé – Tenten seguía sin decidirse – Tú decides Tenten-Chan, nos mudamos o continuamos viviendo en el departamento – Tenten se sorprendió, en pocas palabras el chico le había dejado claro que no la dejaría sola – De acuerdo Naruto-Kun tu ganas – La castaña sonreía al ver la gran persona que era su amigo.

CAPITULO 20: HANABI, LA PRINCESA HYUUGA

-Vamos Kiba, puedes hacerlo mejor – Exclamo Naruto viendo como el chico Inuzuka se encontraba enfrente de él jadeando de cansancio, y eso se debía a que estaban entrenando duramente como había quedado el día anterior, ahora mismo Naruto, Tenten y el equipo 10 se encontraban en uno de los tantos campos de entrenamiento.

-En verdad te has hecho muy bueno cara de zorro, me encuentro totalmente agotado y Akamaru desde hace rato que ya no pudo continuar debido al cansancio – Dijo Kiba mirando de reojo hacia un árbol en donde se encontraba su compañero canino descansando bajo la sombra – En cambio a ti te quedan muchas energías para seguir entrenando, me das algo de envidia – El Inuzuka se dejó caer de sentón para descansar.

-Vamos no te desanimes, lo has hecho genial, si continuas de esa manera no cabe duda que te harás muy fuerte y Akamaru no se queda atrás y eso que apenas es un cachorro – Kiba asintió para luego recostarse en el césped -Veamos como lo hacen los demás – Pensó el rubio para luego dirigir su mirada hacia donde se encontraban Ino, Chouji y Tenten los tres peleando con un clon del rubio respectivamente.

-Demonios no he podido hacerte ningún rasguño – Se quejó Ino después de un intento fallido de entrar en el cuerpo del rubio con uno de los jutsus de su clan – Eres lenta Ino, tienes que mejorar tu velocidad, hacerte más ágil, con tu velocidad actual te será muy difícil atrapar a alguien con tu Jutsu – Le comento Naruto haciéndole ver uno de sus puntos débiles.

-Yo soy rápido, pero tampoco he logrado golpearte – Dijo Chouji al ver como el clon rubio esquivaba sus ataques y eso que usaba su técnica de agrandamiento en sus puños – Es verdad que eres fuerte y que también tienes buena velocidad pero eres totalmente predecible, atacas sin estrategia solo esperando a tener suerte de conectar algún golpe, debes pensar detenidamente como vas a atacar antes de hacerlo y conocer a tu rival para determinar el método más eficiente de atacarlo – Chouji asintió aceptando su error.

Mientras tanto Tenten mantenía un combate de Kenjutsu en contra del clon que le tocaba, ambos estaban armados con Kunais, la castaña se lanzó en contra del rubio para luego lanzar un ataque directo al rostro, el ataque fue bloqueado, los kunais sacaban chispas al colisionar, Tenten empezó a lanzar más ataques, el clon los bloqueaba o los esquivaba, pero no era que el clon lo tuviera fácil, de hecho se empleaba a fondo, pero pasado unos momentos la castaña fue desarmada.

-Demonios – Exclamo Tenten al verse vencida – Vamos no te enojes, sin duda alguna has mejorado mucho, un poca más y lograrás estar a mi nivel de Kenjutsu, de hecho tuve que crearte un clon nuevo en dos ocasiones porque lograste herirlos y se deshicieron – Tenten sonrió al darse cuenta que realmente había progresado mucho.

-Naruto tenemos que irnos, quedamos con Asuma-Sensei – Dijo Chouji recordando la reunión con su maestro – De acuerdo, nos vemos después – Hablo Naruto – Gracias por este entrenamiento Naruto-Kun, espero que tengamos muchas – Dijo Ino de manera sensual para luego besar la mejilla del rubio y hacerlo sonrojar - ¿Qué se cree esa para besar a Naruto-Kun? – Pensó Tenten llena de celos -Esto no se quedará así cara de zorro, entrenare muy duro y veras que te superare – Término de decir Kiba para luego retirarse con su equipo.
-Yo iré al hospital a ver a Lee, nos vemos más tarde Naruto-Kun – Se despidió Tenten también besando en la mejilla al rubio y haciendo que se volviera a ruborizar – No dejare que se me adelanten – Pensó la castaña mientras se retiraba hacia el hospital.

-Yosh, ahora puedo realizar mi verdadero entrenamiento – Se dijo el Uzumaki para luego crear cientos de clones – Bien ya saben que hacer, andando – Ordeno el Naruto original – Hai – Gritaron todos los clones para enseguida agruparse en varios conjuntos y empezar los distintos entrenamientos para fortalecer áreas específicas.

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Mientras tanto en una de las casas del distrito Uchiha se encontraba Obito pintando las paredes exteriores – Se ve que no le han hecho mantenimiento al distrito, pero mi casa quedara como nueva después de una buena manita de pintura – El Uchiha sonreía ampliamente mientras pintaba su casa – Creo que también debo comprar algunos muebles nuevos, y nuevas plantas para el jardín – Se decía el pelinegro viendo que a su jardín le faltaba algo de vida.

-Oye tu- Escucho Obito una voz detrás de él – Oh eres tu – Dijo el Uchiha al ver a un chico de cabellera negra en la entrada de su jardín – Sasuke ¿Verdad? – Obito trataba recordar el nombre del otro Uchiha que quedaba en la villa – Así es – Respondió el chico con actitud fría - ¿Qué deseas? – Pregunto el mayor – Necesito tu ayuda, he sido expulsado como Shinobi – Empezaba Sasuke a explicar su situación.

-¿Qué esperabas? Atacaste a tus compañeros sin ningún motivo valido – Dijo Obito recordando lo que le conto la Hokage sobre su pariente – Somos Uchihas, merecemos ser tratados con el máximo respeto, ataque a Naruto para demostrarle que soy superior a él y por desgracia había muchos entrometidos – Se trataba de excusar el menor.

-Eres un… Suficiente, dime ¿Qué quieres de mí? – Obito estaba comenzando a enfadarse – Entréname, si nos unimos podremos vengar a todo nuestro clan – Sasuke sonreía lleno de soberbia pensando que el Uchiha mayor aceptaría sin dudarlo – Olvídalo, no te ayudaré a fortalecerte para que lleves a cabo una estúpida venganza – Sasuke se sorprendió al ver que lo rechazaban, sobre todo porque se trataba de alguien de su clan.

-¿Cómo puedes decir eso? Como miembro del clan Uchiha deberías dedicarte a vengarlo y a recuperar su honor – Exclamaba Sasuke lleno de ira – Por ese tipo de pensamientos fue que el clan Uchiha fue llevado al borde la extinción – Dijo Obito confundiendo a su pariente - ¿Qué quieres decir con eso? – Pregunto el menor – Siempre fue conocido que los miembros del clan Uchiha eran personas con una enorme sed de poder, se hicieron de muchos enemigos, era cuestión de tiempo de que alguien los atacara e irónicamente fue alguien del mismo clan – Sasuke se encontraba enfadado al ver que su pariente no lo apoyaba.

-Esto no se quedará así, yo vengare a mi clan, aunque sea lo último que haga y todo aquel que se interponga en mi camino lo pagará con su vida – Sasuke se fue lugar totalmente enfadado – Creo que darlo de baja como Shinobi no será suficiente para aminorar su sed de venganza y poder, ese chico es una bomba de tiempo andante, tendré que hablar con la Hokage acerca de esto, no me fio de él – Se dijo Obito mientras observaba como Sasuke se alejaba de su casa.

Obito decidió continuar con los arreglos de su casa, tardo unas cuantas horas pintando todo lo externo, había decido pintar todo blanco con toques dorados, alejándose de los colores oscuros habituales de las casas del distrito Uchiha, ahora la casa parecía como nueva en comparación con las otras, el pelinegro estaba orgullo de su trabajo pero sabía que aún quedaba mucho por hacer.

Bien ¿Qué hare después? – Se preguntó el Uchiha – Ya se, creo que ahora arreglaré el jardín, pero para eso tengo que comprar unas cuantas plantas - ¿Pero en donde comprare eso? Aun no me habituó a la aldea, ha cambiado mucho – El pelinegro se puso a pensar que podría hacer para mejorar su jardín.

-Hola Obito-Kun – Escucho una voz detrás de él, al voltear se encontró con su antigua compañera de equipo – Hola Rin – Devolvió el saludo – Vaya parece que estas mejorando tu casa, y te está quedando muy bien – Comento la castaña al ver los cambios del hogar de su amigo – Gracias, por cierto sabes ¿En dónde puedo comprar algunas plantas? Quiero arreglar también mi jardín – Pregunto el pelinegro.

-Claro, hay una floristería en el centro de la aldea, es atendido por los Yamanakas – Respondió Rin recordando el lugar en donde había comprado algunas flores para su casa – Que bien, dime ¿En qué lugar exactamente esta? – Obito estaba emocionado – Sígueme, te ayudare a mejorar tu jardín, creo saber qué tipo de flores y plantas caerían de maravilla en este lugar- Dijo Rin visualizando el futuro jardín de su amigo.

-Gracias, yo no tengo idea como crear un jardín bonito, entonces vamos – Ante eso Rin tomo la mano del pelinegro para luego jalarlo y empezar a correr hacia la floristería de los Yamanakas.

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Naruto se encontraba descansando bajo la sombra de árbol después de haber estado entrenando un rato, ya había deshecho a todos su clones quedando muy exhausto.

-Cada vez tengo más resistencia, ya no me desmayo cuando deshago a los clones – Se decía el chico viendo algo de los frutos de su entrenamiento, enseguida el rubio dirigió su vista hacia el cielo contemplando el lento pasar de las nubes – Creo que empiezo a entender por qué a Shikamaru le gusta ver las nubes – Pensó Naruto viendo las hermosas nubes.

Así el chico paso un rato descansando mientras visualizaba a las nubes, estaba tan relajado hasta que unos ruidos lo sacaron de su ensoñación - ¿Qué será eso? – Se preguntó levantándose del suelo y empezar a caminar hacia el origen del ruido, camino un poco hasta llegar al campo de entrenamiento contiguo, al llegar se encontró con una niña de cabellos castaños que se dedicaba a golpear a un tronco.

-Vaya solo es una niña que está entrenando, aunque se me hace algo familiar – Pensó el rubio al ver la chica entrenar - ¿Quién esta ahí? – Pregunto la niña volteando para luego mirar al Uzumaki fijamente con unos ojos que llamaron la atención de Naruto – Tiene el Byakugan, por eso se me hacía familiar, es pariente de Hinata y Neji – Pensó – Perdona, escuche unos ruidos y solo vine a ver de qué se trataba, lamento interrumpirte – Se escuchó el chico para luego dar media vuelta y empezar a retirarse.

-Espera- Llamo la chica - ¿Qué sucede? – Pregunto Naruto deteniéndose y voltear a mirarla – Eres Naruto Uzumaki ¿No es verdad? – El chico asintió como respuesta - ¿Cómo sabes mi nombre? – Pregunto el rubio por que el no conocía a la niña de nada – Es lógico, fuiste el ganador del torneo de los exámenes Chunnin – Respondió.

-Ya veo – Dijo Naruto pensando que tal vez ya era un poco famoso – Siendo sincera contigo, me sorprendiste mucho cuando derrotaste a mi primo, a primera vista no me parecías la gran cosa – Comento la castaña recordando el combate entre su primo y el Uzumaki – Y dime ¿Qué eres de Hinata? – Pregunto el chico.

-Ella es mi hermana mayor – Respondió con seriedad la chica - Que sería ¿En verdad es hermana de Hinata? No se parecen nada – Pensó el chico comparando las formas de ser de las chicas Hyuuga – Bueno ahora si no te importa seguiré con mi entrenamiento – Exclamo la Hyuuga apuntando al rubio con su dedo índice.

-Espera – Dijo el chico acercándose a la niña para luego tomarle las manos -¿Qué demonios crees que haces? – Se quejó la castaña – Tus manos están muy lastimadas – Respondió el Uzumaki viendo con detenimiento las manos de la Hyuuga - ¿Eso a ti que te importa? Vete, necesito continuar con mi entrenamiento – Exclamo la chica tratando de zafarse.

-Dime ¿Por qué estás tan empeñada en entrenar en estas condiciones? Solo te lastimaras más – Pregunto el chico sin soltar a la Hyuuga – Necesito ser fuerte, no lo entenderías – Respondió la chica dando entender que no quería hablar de ello – Ya veo – Dijo con simpleza Naruto para luego empezar a buscar algo en su bolsillo de equipo shinobi - ¿Qué haces? – Pregunto la chica – Atender esas heridas – Enseguida el chico saco unas cuantas vendas.

-No es necesario – La Hyuuga intentaba librarse del rubio – No seas terca, entiendo que quieras ser fuerte, pero si no te cuidas solo lograrás hacerte un mal peor y eso podría repercutir mucho en tu carrera ninja – Al escuchar esas palabras la castaña al instante dejo de moverse – Bien, así está mejor – Con la chica quieta Naruto pudo dedicarse a vendarle las manos tranquilamente.

-Bien con esto bastará, pero te recomiendo que dejes el entrenamiento por hoy – Dijo el chico terminando con las vendas – Gracias – Murmuro la niña con algo de pena – Bien ¿Qué te parece… Es verdad ¿Cuál es tu nombre? – Pregunto el chico al no saber el nombre de la Hyuuga – Me llamo Hanabi, Hanabi Hyuuga – Respondió aun con algo de pena.

-Bien ¿Qué te parece si te acompaño a tu casa Hanabi-Chan? – Pregunto el chico, por su parte la castaña se sorprendió ya que nunca antes la habían llamado con el sufijo Chan – Bueno la verdad es que todavía no tengo deseos de regresar a mi casa – El chico se quedó un poco pensativo confundiendo un poco a la niña – Bueno, yo tengo mucha hambre ¿Qué te parece si vamos a comer? Yo invito – Hanabi se sorprendió por la repentina invitación del rubio.

-No tengo hambre – Hanabi intento negarse pero un ruido proveniente de su estómago la delato – Creo que tu estomago dice lo contrario – Dijo el rubio riéndose de la chica – No te rías – Se quejó la niña – Anda vamos a comer – Insistió el chico – Esta bien, pero comeremos en donde yo diga – Dijo Hanabi comenzando a caminar – Si, si, lo que tú digas – El chico sonreía viendo lo orgullosa que era la niña.

Más tarde Naruto y Hanabi se encontraban comiendo en un local en donde vendían diferentes variedades de pizza, si pizza, algo que sorprendió mucho al rubio ya que él esperaba que la Hyuuga hubiera elegido un restaurante más acorde con su clase, pero no, ahí se encontraban los dos sentados en la mesa de una pizzería.

El Uzumaki veía como la castaña se comía una rebanada disfrutando todo lo que podía del gran sabor del alimento – Delicioso – Exclamo Hanabi después de darle una mordida a su pizza – Vaya se ve que te fascina la pizza – Comento el rubio con una sonrisa – Bueno yo… - La Hyuuga se encontraba avergonzada al mostrar esa faceta suya.

-Bueno si, me encanta la pizza ¿Algún problema? – Exclamo enojada pensando que el rubio se burlaba de ella – Ninguno, solo noté que te gustaba mucho – Respondió – Si, es mi comida favorita pero lo malo es que raramente puedo comerla, ya que para el clan este es un alimento de muy baja categoría – Explico la chica con un poco de tristeza.

-Ya veo, pero no importa, cuando quieras podemos volver a venir, yo te invitare con mucho gusto – Hanabi estaba sorprendida por la amabilidad del chico y no pudo evitar esbozar una sonrisa – Bien, pero sigamos comiendo que se nos enfriara la pizza – Dijo el rubio para luego dar una mordida a una rebanada de pizza, la castaña ahora con más confianza empezó a comer rebanada tras rebanada.

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En la casa de Obito, este se encontraba junto con Rin decorando su jardín, ya habían regresado de la floristería de los Yamanakas.

-Vaya eres increíble Rin – Dijo Obito viendo como su jardín empezaba a agarrar forma, sin duda alguna la Nohara sabía lo que hacía – Solo espero que cuides las plantas como se debe, recuerda que hay que regarlas, cuidar que no se llenen de plagas y demás – Dijo la castaña recordando lo descuidado que era su amigo – Espero no olvidarlo – Respondió el Uchiha rascándose su nuca.

-Ayúdame a sacar esta piedra Obito – Dijo Rin que había encontrado una gran piedra enterrada en una de las jardineras – Claro – El pelinegro se colocó al lado de la chica y ambos empezaron a jalar con fuerza, la piedra se encontraba muy atorada – Con más fuerza Obito – Exclamo Rin, la piedra salió de golpe haciendo que ambos se tropezaran.

Rin había quedado arriba de Obito, sus rostros se encontraban muy cercanos, ambos se habían quedado sin habla, sentían el aliento del otro, comenzaban acercarse más y más, listos para unir sus labios.

-No puedo – Dijo Obito apartando con gentileza a la chica – ¿Por qué no? – Pregunto la chica – Estoy saliendo con Kurenai-Chan, y la quiero mucho – Respondió levantándose y alejándose un poco – Yo también te quiero Obito – Confeso la chica dejando atónito al pelinegro – Yo creí… Creí que estabas enamorada de Kakashi, siempre lo preferiste a él – Dijo el Uchiha aun sin creerse lo que la castaña del decía.

-Fui una tonta, estaba cegada que no pude ver la maravillosa persona que siempre estuvo a mi lado, y sé que te hice mucho daño – El pelinegro observaba como su amiga estaba llena de arrepentimiento y las lágrimas amenazaban con salir – No es tu culpa Rin, muchas cosas del corazón son inexplicables, tu solamente seguías a tu corazón – Obito se acercó a su amiga para con un dedo limpiar una lagrima que se le había escapado.

-No sabes cuánto me halaga saber que sientes algo por mí, pero ahora mi corazón lo ocupa alguien más – Rin sentía que su corazón se hacía pedazos, nunca antes se había sentido así, ni cuando Kakashi la rechazaba, no había comparación – Lo siento mucho Rin – El pelinegro se sentía mal porque sabía que lastimaba a su amiga.

-Solo respóndeme una cosa Obito-Kun – De repente la mirada de la chica cambio a una con determinación -¿Qué quieres saber? – El Uchiha trataba de imaginarse lo que su amiga le preguntaría - ¿Ya no me amas ni siquiera un poco? – Esa pregunta dejo mudo al chico que no sabía que contestar.

-Yo… no puedo… Kurenai-Chan – Obito balbuceaba cosas sin sentido – Vamos dímelo, escúpemelo en mi cara, dime que ya no me quieres y dejaré de molestarte para siempre – Rin esperaba con ansías la respuesta, se estaba jugando el todo por el todo – Vamos que esperas, dímelo – El pelinegro seguía sin contestar la pregunta.

-Tu silencio responde a mi pregunta – Dijo Rin internamente alegre porque sabía que aún tenía una esperanza, no todo estaba perdido – Obito-Kun sé que ahora estas con Kurenai y no puedo culparte de ello, la única culpable soy yo – El Uchiha seguía asombrado por la forma de actuar de su compañera – Pero quiero que sepas que no voy a darme por vencida, luchare para volver a ocupar un lugar en tu corazón y estar a tu lado – Se le notaba una gran determinación a la chica.

-Es una promesa Obito-Kun – La chica se acercó al pelinegro para enseguida robarle un beso y salir corriendo – Rin me ha… - Obito no creía lo que su amiga había hecho - ¿Qué puedo hacer? Porque siendo sincero conmigo mismo, Rin siempre ha ocupado un lugar en mi corazón, y siempre lo hará, pero también quiero a Kurenai-Chan ¿Es posible amar a dos personas a la vez? – El Uchiha se encontraba en una gran encrucijada.

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Más tarde Naruto y Hanabi ya habían terminado de comer, pero la chica Hyuuga volvió a comentar que aún no tenía deseos de regresar a su casa, el chico para hacerle compañía y hacerle pasar un día agradable decidió invitarla a otro lado.

Ahora mismo Hanabi se encontraba viendo un gran cartel, se trataba del poster de una película, así es, habían decido ir al cine, Naruto regresaba de ver la cartelera para comentarle a su acompañante las películas que había, pero la vio observar fijamente un gran cartel, se trataba de una película de acción, más en concreto de un súper héroe – “Kitsuneman La Película” ¿Quieres ver esa? – Pregunto el chico sacando de sus pensamientos a la castaña.

-No claro que no – Respondió nerviosa la chica tratando de evitar que el Uzumaki pensará que tuviera gustos un poco infantiles – Mejor veamos esa – Dijo la Hyuuga apuntando a otro cartel – De acuerdo, espera aquí, iré a comprar los boletos – Naruto comenzó a alejarse pero de reojo veía como Hanabi seguía viendo el cartel de la película del superhéroe, se notaba que le fascinaba, el rubio sonrió y continuo hacia la taquilla.
Más tarde Naruto y Hanabi ya se encontraban dentro de la sala, se encontraba oscura pero se escuchaba que había algo de gente – Todavía falta un poco para que empiece la película, iré a la dulcería – Dijo Naruto encargándole su asiento a la castaña – Me traes un chocolate – Dijo la Hyuuga a lo que el rubio asintió.

Hanabi esperaba tranquilamente a que Naruto regresara, con el tiempo su vista fue acostumbrándose a la oscuridad de la sala y empezó a ver a la gente a su alrededor, y se sorprendió un poco al ver a varias personas disfrazadas - ¿Pero qué significa esto? – Se preguntó al ver los singulares disfraces.

Pasados unos momentos Naruto regreso con una charola llena de cosas, varios dulces, refrescos, chocolates, palomitas, etc. – Vaya sí que te gustan los dulces – Comento Hanabi pero en eso vio algo que le llamo la atención - ¿Son vasos de Kitsuneman? – Preguntando tomando uno de los vasos de refresco – Así es, compre un gran paquete donde venían de regalo varias cosas de Kitsuneman, como los dos vasos de refresco – La Hyuuga se encontraba encantada con su vaso.

-También venía esta gorra – Dijo el chico colocándole la gorra de regalo en la cabeza a Hanabi – Esta genial – Respondió la chica con gran emoción – Y por último este antifaz – Dijo el rubio colocándose en su rostro el antifaz – Te pareces mucho a Kitsuneman – Dijo la Hyuuga viendo lo bien que le quedaba el antifaz al rubio.

-Un momento, viendo estos regalos y que hay varias personas disfrazadas de Kitsuneman, eso quiere decir que la película que vamos a ver es… - Hanabi estaba incrédula ante la situación – Así es, veras ya no había boletos para la otra película y pensé que esta sería divertida – Respondió el rubio – Mentiroso, no tienes que ser tan atento conmigo, sé que lo hiciste porque sabias que yo quería verla - Dijo Hanabi viendo que el Uzumaki había escogido esa película a propósito.

-Bueno es verdad, pero ¿Por qué te negaste a verla si te gusta tanto ese personaje? – Pregunto el rubio – Bueno, no quería que pensarás que tengo gustos algo infantiles, creí que pensarías mal de mí – Respondió la chica un poco apenada – Para nada, este día he conocido varias cosas de ti, y cada vez me agradas más – Dijo Naruto sorprendiendo a Hanabi y haciendo que se sonroje un poco.

-Bueno dime ¿Quién es este Kitsuneman? – Pregunto el rubio - ¿No sabes quién es Kitsuneman? Él es un súper héroe que lucha por el amor y la justicia, no puedo creer que no sepas de él, hay muchos mangas y animes de él – Dijo Hanabi incrédula al ver que el chico no sabía nada acerca de su superhéroe favorito.

-Ya veo, se ve que te gusta mucho – Dijo Naruto viendo el rostro de la chica lleno de ilusión – Asi es, de hecho en mi recamara tengo escondidos varios mangas, me gustaría tener más cosas de él, pero mi padre me descubriría y eso sería malo – Dijo la Hyuuga llena de frustración - Pues si quieres podemos comprar varios mangas y animes de Kitsuneman y los guardamos en mi casa, podrías ir cuando quisieras y así no tendrías problemas – Ofreció Naruto.

-¿En serio? – Hanabi estaba fascinada con la idea – Claro – Respondió el chico, en eso la pantalla del cine se enciende – Vaya la película va a comenzar – Dijo Naruto – Es verdad, pon atención porque te aseguro que te gustará Kitsuneman, es alguien muy genial – El chico sonreía al ver como la castaña no apartaba la vista de la pantalla, no quería perderse ningún detalle.


Dos horas más tarde Naruto y Hanabi iban saliendo del cine, la película ya se había terminado, cada uno se llevaba su vaso, la Hyuuga seguía con su gorra puesta y Naruto con el antifaz.

-Estuvo genial la película, Kitsuneman esa asombroso, viste como derroto en un santiamén a todos los esbirros del malvado Baldor – A Naruto le había fascinado la película – Y recuerdas como Baldor intento utilizar al mejor amigo de Kitsuneman para derrotarlo pero su amistad pudo más que el poder del malvado Baldor – Hanabi también se encontraba emocionada por la película que acababa de ver.

-Tenías razón Kitsuneman es genial – Concordó el chico con la Hyuuga – Ves, te lo dije – La chica estaba contenta porque por fin tenía con quien compartir su gusto por el superhéroe – Creo que me hare de todos los mangas y animes de Kitsuneman – Dijo Naruto haciendo que la castaña pusiera cara de soñadora - ¿Verdad que me vas a dejar verlos en tu casa? – Pregunto con emoción – Claro que sí, ya te lo había dicho – Respondió sonriendo el chico al ver a Hanabi tan alegre.

-Bueno ya se está siendo tarde, te acompañare a tu casa – La chica de repente cambio su semblante a uno triste, extrañando en demasía al rubio - ¿Qué pasa dije algo malo? – Pregunto preocupado – No es nada, vámonos – Así ambos empezaron a caminar hacia la mansión de los Hyuuga, pero Naruto observaba como estado de animo de la castaña había cambiado.

A medio camino Naruto se debatía si debía preguntarle a la chica sobre su estado de ánimo – Naruto-Kun quiero agradecerte – Hablo la Hyuuga sacando al chico de sus pensamientos – Gracias a ti este ha sido uno de los mejores días de mi vida – Hanabi se detuvo para quedar viendo de frente al rubio – Por un día pude desconectarme de la terrible realidad que estoy viviendo, olvidarme de todo lo malo y disfrutar de las cosas que más me gustan – Las lágrimas empezaban a brotar de los ojos aperlados de la chica.

-¿Qué es lo que sucede Hanabi-Chan? – Pregunto preocupado acercándose a la Hyuuga – Tengo mucho miedo Naruto-Kun – Hanabi no pudo evitar abrazar con fuerza al rubio y soltase a llorar – Mi padre me ha relegado a la rama secundaria del clan, dentro de pronto será sellada con el sello del pájaro enjaulado – Naruto hizo el abrazo más fuerte al escuchar las palabras de la castaña.

-He entrenado duramente para demostrarle a mi padre que soy digna de pertenecer a la rama principal, pero nunca soy lo suficientemente fuerte para él, además me dijo que dentro de poco ya estaré madura para contraer matrimonio con alguien de otra aldea, que ese matrimonio servirá para fortalecer al clan – Naruto no podía creer lo que escuchaba, como una persona podía ser tan cruel con su propia hija.

-Escúchame Hanabi-Chan – Naruto hizo que la castaña lo viera a la cara – No voy a permitir que te hagan nada, no dejaré que te sellen ni que te usen como moneda de cambio, yo te protegeré, te lo prometo – Ambos se volvieron a abrazar con fuerza, Hanabi se sentía segura en los brazos del Uzumaki, y verlo con el antifaz de su superhéroe favorito le hizo sentir que ella tenía a su propio Kitsuneman para protegerla.