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[+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
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NaruSaku v2.0 :: :: Fan Fic :: FF Cerrados
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Se que voy a sonar repetitivo, ¡¡¡Pero me da igual!!! Muchísimas gracias por los comentarios, de verdad, simplemente no se como expresarlo, en un principio de hecho tenía miedo por el fic, porque considero que a muchas personas Kishimoto nos ha malacostumbrado a su héroe del Disney de hoy dia, el típico héroe que vence al villano cantando o con una frase ingeniosa... Así que el tema de la guerra y la sangre para mí era como un paso en en suelo de madera podrida (por eso de que se puede romper facilmente si pisas mal), después de todo era una idea y una trama que no es la primera vez que la hago (tengo preferencia por los darkNaruto), pero si la primera vez que la hago a gusto propio, como habeis ido viendo, no me he centrado en solo un pj, porque todos forman un conjunto, aunque algunos no hayan tenido protagonismo, son pjs que están vivos, que tienen sus consecuencias, lo malo es que no tengo un repertorio de brazos y mucho menos de tiempo para reflejar la vida de todos, así que, es una de las razones por las que me quiero disculpar, porque se que cuando leeis quereis capítulos largos y sobretodo que no tarde en actualizar, lo se porque yo mismo he sido así de ansioso (aunque no lo haya reflejado en los comentarios) con los fics que me han gustado, así que, en ese aspecto, pido perdón, pero por otro lado pido un poco de comprensión (aunque NADIE me ha metido presión, que conste), soy una persona, tengo limitaciones y energías muy limitadas últimamente... Digo esto porque tal y como lo tenía pensado el fic va atrasado, no atrasado en tiempo, el tiempo es lo de menos, lo puedo seguir mañana igual que dentro de una semana, lo digo por atrasado en capítulos en cuanto a la trama (este capítulo se suponía que iba a ser el 5), porque este es un fic que voy escribiendo conforme hago el post y como dije, mis energías están limitadas, la trama la tengo en la cabeza así que no me golpeeis D:
Ahora en serio, y resumiendo, gracias por la paciencia, los comentarios y las lecturas, se aprecia mucho no, muchísimo.
Este capítulo lo he hecho con esta canción, por si quereis escucharla mientras leeis =)
La visión de Hinata se volvía cada vez más borrosa, el cuerpo le temblaba violentamente por miedo, miedo a lo que estaba viendo, una especia de humareda de color roja y negra que estaba arremolinándose alrededor de la cueva, este iba formando formas serpenteantes que visto desde lejos era lo más parecido a nueve colas incorpóreas, completamente espectrales, colas hechas de chakra que no tenían máyor motivo que el de intimidar al adversario. Pues bien, lo había conseguido fuese lo que fuese lo que estaba saliendo, Hinata se había obligado a sí misma a desactivar el Byakugan, cosa que le pareció raro a sus compañeros, ella al igual que el resto pertenecía al equipo especial de ANBU en el que estaba toda la generación de Sakura, o al menos la gran mayoría.
Kiba por su parte tuvo que reprimir el instinto que le estaba casi obligando a subirse al asustado Akamaru e irse, los otros tres que tenían una menor percepción en cuanto al chakra se trataba simplemente miraban impasibles hacia la cueva ya que la pelinegra había desactivado su técnica ocular debido a un terror que ellos no podrían siquiera llegar a imaginar. Rock Lee, quien tenía menor conocimiento en cuanto a la situación, estaba de pie frente a la cueva con su posición heredada de su maestro, la gran bestia de Konoha, Maito Gai.
-Parece que esta vez han mandado a menos...- Dijo una voz desde la cueva, una voz que a Sakura, Kiba y Hinata les sonaba más que cualquier otra cosa, una voz que semanas atrás prácticamente los había humillado. Dicha figura salió de la cueva, estaba en un estado deplorable, la túnica que normalmente llevaba ahora la llevaba destrozada, solo una manga, y el resto de tela estaba hecho para tapar una herida que había tenido en su costado con un nudo en su pecho. De su chaqueta solo quedaba lo que tenía de túnica y sus pantalones estaban agujereados en gran parte, su cuerpo y su rostro estaba ensangrentado, pero debido a que no tenía ningún tipo de herida supusieron que no era suya. -¿No retrocedeis? Bien.-
-Antes de nada... - Dijo Sakura, intentando hacer que el combate tardase un poco más en llegar, mientras se colocaba bien sus guantes. -¿Porqué haces todo esto?-
-¿Necesito una razón para matar? ¿La necesitais vosotros?- Naruto no pudo evitar reirse de forma sádica mientras sacaba un pergamino de su pantalon y lo extendía en el aire, haciendo que de este saliese la espada que tiempo atrás había pertenecido a Zabuza Momochi. El rubio la blandió a una mano, al menos hasta que el costado le dio una fuerte punzada y de forma disimulada la clavó en el suelo. -¿O es que nunca os habeis preguntado porqué matais en las misiones? ¿Realmente se merecían estos ninjas morir?- Esta vez estaba serio, su chakra empezó a desprenderse de su cuerpo, había hablado demasiado ya con ellos. -No necesito razón para matarlos... Ni a ellos ni a vosotros.-
Y sin más se lanzó hacia el que parecía más rarito, hacia Rock Lee, pero este muy al contrario de lo que se podría haber esperado, su enemigo le parecía bastante lento, al menos comparado a como era Maito Gai... Naruto lanzó un potente sablazo horizontal hacia el torso de Rock Lee pero este lo desvió con una patada ascendente, desviando la espada hacia esa dirección, entonces el chico de las cejas raras pasó al ataque, apoyó sus dos manos en el suelo, flexionando los brazos hasta el punto que su cara casi tocaba el suelo y de un potente impulso hizo, a parte de que su cuerpo se elevase para poder alcanzar a su objetivo, que la pierna que había levantado para desviar la espada descendiese con una fiereza poco propia de una persona. El golpe impactó de lleno contra el cráneo de Naruto, incluso el suelo se rompió levemente bajo sus pies y una pequeña cantidad de sangre cayó en este.
Pero la felicidad de aquél certero golpe duró poco. El rubio soltó aquello que le estaba haciendo más lento, la espada, y tomó con ambas manos la pierna de Lee tirando de él, mientras lanzaba un grito. -¡Espero que no aprecies tu Taijutsu!- Y al mismo tiempo asestaba un puñetazo bien cargado de chakra sobre el estómago del moreno. La ropa de su espalda se rompió, los ojos se le tornaron incluso en blanco de la fuerza del golpe, cualquiera que lo viese podría haber dicho que los órganos internos habían reventado, pero tanto Naruto como Lee sabían lo que había pasado,el rubio acababa de pulverizar con su chakra una vértebra por la zona baja de su cuerpo con un solo puñetazo, aunque aquél puñetazo había sido bastante raro.
No pudo evitar salir volando, lo mismo que no pudo evitar caer de espaldas al suelo. Sakura de un rápido movimiento lo interceptó antes de que pudiese siquiera chocar contra un árbol e inmediatamente comenzó a intentar curarlo, pero sin el equipo, nutrientes y refuerzos necesarios aquella herida era algo que había provocado que el muchacho no pudiese siquiera sentir las piernas, Sakura sabía la gravedad de aquella lesión, tal vez no fuesen capases de restaurar aquella vértebra, aunque si que tenían los medios para por lo menos poner una sintética y que su cuerpo no se deformase puesto que actualmente corría un peligro gravísimo de sufrir algún derrame interno ya no solo por algún músculo/órgano que se viese afectado por los roces de una vértebra que había perdido el contacto, sino por el simple daño que había podido sufrir su médula ósea.
-Hijo de perra...- Gruñó Kiba mientras su furia iba creciendo hacia aquél malnacido. De repente empezó a correr junto con Akamaru haciendo un sello para que este se transformase en una copia de él y acto seguido entre ambos formaron un par de tornados, Naruto por su parte empezó a realizar sellos mientras los tornados se acercaban.
No hubo palabra alguna por parte del rubio a parte de un leve susurro, solo una posición de manos algo rara para luego empezar a ser tanto Kiba como Akamaru presa de unas fuertes turbulencias que estaban desviándolos de su objetivo. Ambos salieron despedidos, Akamaru hacia un árbol y Kiba contra el suelo se la cueva de la que había salido Naruto llenándose de la sangre y los restos de los ninjas que se suponía que ellos deberían haberse enfrentado. La verdad es que para Naruto estaba siendo aburrido, puesto que sus enemigos estaban haciendo lo mejor que podían y él aún no se había movido, pero por otra parte, se había olvidado completamente de los otros dos que acompañaban al trío de fracasados, tanto era así que lograron pillarle desprevenidos.
-Hakke...- Las palmas de Hinata empezaron a trazar arcos azules, un primer golpe logró elevar a Naruto, de repente, una ráfaga de golpes no mortales empezaron a hacer que el cuerpo del rubio se sacudiese. -¡Rokujuuyonshou!- Y de repente, notó como si su cuerpo estuviese siendo violentamente sacudido de golpe, salió volando hacia un árbol, pero este de repente se deshizo en insectos que atraparon al rubio.
-Ninpo, Dokubömushi (Celda de insectos).- Los insectos parecieron unas fauces gigantescas que se tragaron a Naruto en una suprema oscuridad formada por insectos. Shino miró hacia la cueva los primeros tres segundos. -¡Kiba, ataca ahora!- Era la primera vez que perdía los papeles con su compañero, pero es que estaba atacando y actuando de una forma tan irresponsable que no podía más que mostrar un enfado seguramente incorrecto para la situación.
-Lo se...- Se escuchó desde la cueva, desde esta una gran ráfaga de viento empezó a formarse y de nuevo un tornado salió de esta, pero esta vez, debido a la sangre, el tornado era de color rojo. -¡Gatsuga!- El tornado chocó de frente contra el "árbol" hecho de insectos que estaba aprisionando a Naruto, chocó y atravesó a los bichos llevándose por delante a Naruto, empujándolo hacia el cielo, una vez terminó la técnica, tanto Naruto como Kiba estaban por encima de los árboles, Shino se encargó de ayudar a Kiba apra que no se matase por la caida, pero el rubio siguió cayendo. Desde un árbol, Sakura saltó con su puño bien cargado en chakra y asestó un potente puñetazo en el pecho de Naruto, lo que le extrañó fue que no notó costillas romperse pese a que el cuerpo saliese volando y se chocase con fuerza contra un árbol.
De repente la pelirrosa hizo un sello con una mirada bastante seria mientras caía. -¡Kai!- Y de golpe todo empezó a romperse en cristales al menos hasta que abrió los ojos...
Nadie se había movido del lugar, todo había sido un genjutsu en el que habían sido metido todos. Sus compañeros estaban inconscientes y sinceramente dudaba del hecho de que su enemigo le dejase tiempo amablemetne para ir a despertarlos. De hecho ahora que lo miraba, estaba mejor que cuando había salido de la cueva... Bastante mejor. Lo único que había cambiado del escenario es que casi se había hecho de noche... ¿Cuánto tiempo había estado en el genjutsu?
-¿Quién lo iba a decir? Eres le primera persona que conozco que sale por sí sola de uno de mis Genjutsus...- Dijo riéndose Naruto mientras nueve colas empezaban a salir de su espalda. -Siéntete afortunada, te mataré con mis propias manos, no será tu mente la que sucumba a la locura por el dolor o el cansancio, con lo que me gusta ver a la gente con sus mentes rotas...-
La primera pregunta que surgió en la cabeza de Sakura fue referente a las colas, de si eran reales, pero si, lo eran, lo sabía porque aquellas colas no eran precisamente metálicas, podía ver cuando chocaba contra las rocas de la cueva como el pelaje se amoldaba a la propia gruta... De todas formas, no era tiempo para dudar. Realizó un sello y un pequeño rombo apareció sobre su frente, y de aquél rombo unos tatuajes que crubrieron una perte de su cara. Además de eso la pelirrosa realizó un sello con una mano y en esta apareció un bisturí de chakra usado normalmente para fines quirúrgicos, pero sus encuentros con Kabuto le habían enseñado que aquellos bisturís tenían más peligro del que podía tener una katana. Su objetivo en ese momento no eran los músculos del rubio, era la arteria aorta o la carótida, le daba igual que un derrame de ese calibre fuese una muerte lenta y dolorosa, aquél canalla no iba a salir vivo de allí.
-Por favor, que truco más barato.- Dijo Naruto extendiendo una mano, de esta apareció una esfera de color rojo/negro, era chakra suyo mezclado con el chakra del kyuubi. -ESTO es una técnica.-
Naruto se lanzó hacia Sakura, dispuesto a terminar con aquél combate en aquellos mismos instantes, pero aquella no fue su suerte. Lo que para el rubio era un golpe asegurado, Sakura logró esquivar con una eficacia poco propia del ninja promedio con un movimiento de boxeo en el que el atacado inclinaba su cuerpo en dirección contraria al que el atacante realizaba su acción, pero no solo eso, sino que logró acertar al tendón de su mano derecha haciendo que la técnica se dispersase, y ya dicho sea que aquella mano quedase inútil hasta que pudiese descansar un poco. Aquella mano bisturí avanzaba hacia el cuello del rubio, pero este no se quedaba atrás en reflejos, y mucho menos en velocidad y en miembros, tenía todavía 12 para poder defenderse y eso es lo que hizo. Giró su cuerpo haciendo que el bisturí praticamente le rozase la nuca, con este movimiento hizo que una de sus colas se enrollase con una de las piernas de Sakura y esta literalmente fue levantada como si de una pluma se tratase, pero el golpe que recibió con la espalda en el suelo más bien hizo parecer que había caido un piano desde una altura considerable.
-Así que, querías saber porqué mato...- Dijo Naruto mientras bloqueaba los movimientos de Sakura con sus colas. -Es algo muy simple.- Poco a poco la fue levantando, mientras que con su mano sana volvía a formar una de esas esferas. -El mundo ninja tendrá su castigo.- De nuevo intentó impactar una de esas esferas contra Sakura, pero algo hizo que no pudiese. Una especie de agujero negro apareció en su mano haciendo que la esfera desapareciese completamente, y porque tuvo que retirar la mano que si no esta también habría desaparecido.
-Suéltala, Uzumaki Naruto.- Dijo una figura desde lo alto de uno de los árboles, se trataba de Kakashi, quien vestía con su traje de Jounnin, el peliblanco estaba jadeando, no solo porque había ido sin estar completamente recuperado, sino porque su sharingan consumía demasiado chakra.
-Hm, hacía años que no escuchaba ese nombre.- Dijo fijando su atención en el ninja que le había interrumpido. Asfixió con una de sus colas a Sakura hasta dejarla inconsciente y luego simplemente la dejó caer al suelo sin ningún tipo de delicadeza, como si fuese un trapo viejo y usado. -Ya que te has preocupado en descubrir mi nombre, ¿De qué forma deseas que te mate?-
-Esto no es lo que tus padres habrían querido para tí.- Aunque fuese algo bajo, Kakashi quería intentar ver qué tanto le importaba la historia de su pasado a Naruto, cómo podía afectarle si es que le afectaba.
-Decidido, te romperé los huesos y luego te mataré.-
Lo único que pudo ver Kakashi, en su estado actual, era un potente chakra rojo, y luego... Nada.
Espero que os haya gustado, dentro de poco sabreis cómo ha sido capaz Naruto de engañar a estos. xD
Lo dicho, si no os ha gustado, decidlo, si os ha gustado, también.
Ahora en serio, y resumiendo, gracias por la paciencia, los comentarios y las lecturas, se aprecia mucho no, muchísimo.
Este capítulo lo he hecho con esta canción, por si quereis escucharla mientras leeis =)
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Capítulo 7.- Spiritus tenebrae
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Capítulo 7.- Spiritus tenebrae
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La visión de Hinata se volvía cada vez más borrosa, el cuerpo le temblaba violentamente por miedo, miedo a lo que estaba viendo, una especia de humareda de color roja y negra que estaba arremolinándose alrededor de la cueva, este iba formando formas serpenteantes que visto desde lejos era lo más parecido a nueve colas incorpóreas, completamente espectrales, colas hechas de chakra que no tenían máyor motivo que el de intimidar al adversario. Pues bien, lo había conseguido fuese lo que fuese lo que estaba saliendo, Hinata se había obligado a sí misma a desactivar el Byakugan, cosa que le pareció raro a sus compañeros, ella al igual que el resto pertenecía al equipo especial de ANBU en el que estaba toda la generación de Sakura, o al menos la gran mayoría.
Kiba por su parte tuvo que reprimir el instinto que le estaba casi obligando a subirse al asustado Akamaru e irse, los otros tres que tenían una menor percepción en cuanto al chakra se trataba simplemente miraban impasibles hacia la cueva ya que la pelinegra había desactivado su técnica ocular debido a un terror que ellos no podrían siquiera llegar a imaginar. Rock Lee, quien tenía menor conocimiento en cuanto a la situación, estaba de pie frente a la cueva con su posición heredada de su maestro, la gran bestia de Konoha, Maito Gai.
-Parece que esta vez han mandado a menos...- Dijo una voz desde la cueva, una voz que a Sakura, Kiba y Hinata les sonaba más que cualquier otra cosa, una voz que semanas atrás prácticamente los había humillado. Dicha figura salió de la cueva, estaba en un estado deplorable, la túnica que normalmente llevaba ahora la llevaba destrozada, solo una manga, y el resto de tela estaba hecho para tapar una herida que había tenido en su costado con un nudo en su pecho. De su chaqueta solo quedaba lo que tenía de túnica y sus pantalones estaban agujereados en gran parte, su cuerpo y su rostro estaba ensangrentado, pero debido a que no tenía ningún tipo de herida supusieron que no era suya. -¿No retrocedeis? Bien.-
-Antes de nada... - Dijo Sakura, intentando hacer que el combate tardase un poco más en llegar, mientras se colocaba bien sus guantes. -¿Porqué haces todo esto?-
-¿Necesito una razón para matar? ¿La necesitais vosotros?- Naruto no pudo evitar reirse de forma sádica mientras sacaba un pergamino de su pantalon y lo extendía en el aire, haciendo que de este saliese la espada que tiempo atrás había pertenecido a Zabuza Momochi. El rubio la blandió a una mano, al menos hasta que el costado le dio una fuerte punzada y de forma disimulada la clavó en el suelo. -¿O es que nunca os habeis preguntado porqué matais en las misiones? ¿Realmente se merecían estos ninjas morir?- Esta vez estaba serio, su chakra empezó a desprenderse de su cuerpo, había hablado demasiado ya con ellos. -No necesito razón para matarlos... Ni a ellos ni a vosotros.-
Y sin más se lanzó hacia el que parecía más rarito, hacia Rock Lee, pero este muy al contrario de lo que se podría haber esperado, su enemigo le parecía bastante lento, al menos comparado a como era Maito Gai... Naruto lanzó un potente sablazo horizontal hacia el torso de Rock Lee pero este lo desvió con una patada ascendente, desviando la espada hacia esa dirección, entonces el chico de las cejas raras pasó al ataque, apoyó sus dos manos en el suelo, flexionando los brazos hasta el punto que su cara casi tocaba el suelo y de un potente impulso hizo, a parte de que su cuerpo se elevase para poder alcanzar a su objetivo, que la pierna que había levantado para desviar la espada descendiese con una fiereza poco propia de una persona. El golpe impactó de lleno contra el cráneo de Naruto, incluso el suelo se rompió levemente bajo sus pies y una pequeña cantidad de sangre cayó en este.
Pero la felicidad de aquél certero golpe duró poco. El rubio soltó aquello que le estaba haciendo más lento, la espada, y tomó con ambas manos la pierna de Lee tirando de él, mientras lanzaba un grito. -¡Espero que no aprecies tu Taijutsu!- Y al mismo tiempo asestaba un puñetazo bien cargado de chakra sobre el estómago del moreno. La ropa de su espalda se rompió, los ojos se le tornaron incluso en blanco de la fuerza del golpe, cualquiera que lo viese podría haber dicho que los órganos internos habían reventado, pero tanto Naruto como Lee sabían lo que había pasado,el rubio acababa de pulverizar con su chakra una vértebra por la zona baja de su cuerpo con un solo puñetazo, aunque aquél puñetazo había sido bastante raro.
No pudo evitar salir volando, lo mismo que no pudo evitar caer de espaldas al suelo. Sakura de un rápido movimiento lo interceptó antes de que pudiese siquiera chocar contra un árbol e inmediatamente comenzó a intentar curarlo, pero sin el equipo, nutrientes y refuerzos necesarios aquella herida era algo que había provocado que el muchacho no pudiese siquiera sentir las piernas, Sakura sabía la gravedad de aquella lesión, tal vez no fuesen capases de restaurar aquella vértebra, aunque si que tenían los medios para por lo menos poner una sintética y que su cuerpo no se deformase puesto que actualmente corría un peligro gravísimo de sufrir algún derrame interno ya no solo por algún músculo/órgano que se viese afectado por los roces de una vértebra que había perdido el contacto, sino por el simple daño que había podido sufrir su médula ósea.
-Hijo de perra...- Gruñó Kiba mientras su furia iba creciendo hacia aquél malnacido. De repente empezó a correr junto con Akamaru haciendo un sello para que este se transformase en una copia de él y acto seguido entre ambos formaron un par de tornados, Naruto por su parte empezó a realizar sellos mientras los tornados se acercaban.
No hubo palabra alguna por parte del rubio a parte de un leve susurro, solo una posición de manos algo rara para luego empezar a ser tanto Kiba como Akamaru presa de unas fuertes turbulencias que estaban desviándolos de su objetivo. Ambos salieron despedidos, Akamaru hacia un árbol y Kiba contra el suelo se la cueva de la que había salido Naruto llenándose de la sangre y los restos de los ninjas que se suponía que ellos deberían haberse enfrentado. La verdad es que para Naruto estaba siendo aburrido, puesto que sus enemigos estaban haciendo lo mejor que podían y él aún no se había movido, pero por otra parte, se había olvidado completamente de los otros dos que acompañaban al trío de fracasados, tanto era así que lograron pillarle desprevenidos.
-Hakke...- Las palmas de Hinata empezaron a trazar arcos azules, un primer golpe logró elevar a Naruto, de repente, una ráfaga de golpes no mortales empezaron a hacer que el cuerpo del rubio se sacudiese. -¡Rokujuuyonshou!- Y de repente, notó como si su cuerpo estuviese siendo violentamente sacudido de golpe, salió volando hacia un árbol, pero este de repente se deshizo en insectos que atraparon al rubio.
-Ninpo, Dokubömushi (Celda de insectos).- Los insectos parecieron unas fauces gigantescas que se tragaron a Naruto en una suprema oscuridad formada por insectos. Shino miró hacia la cueva los primeros tres segundos. -¡Kiba, ataca ahora!- Era la primera vez que perdía los papeles con su compañero, pero es que estaba atacando y actuando de una forma tan irresponsable que no podía más que mostrar un enfado seguramente incorrecto para la situación.
-Lo se...- Se escuchó desde la cueva, desde esta una gran ráfaga de viento empezó a formarse y de nuevo un tornado salió de esta, pero esta vez, debido a la sangre, el tornado era de color rojo. -¡Gatsuga!- El tornado chocó de frente contra el "árbol" hecho de insectos que estaba aprisionando a Naruto, chocó y atravesó a los bichos llevándose por delante a Naruto, empujándolo hacia el cielo, una vez terminó la técnica, tanto Naruto como Kiba estaban por encima de los árboles, Shino se encargó de ayudar a Kiba apra que no se matase por la caida, pero el rubio siguió cayendo. Desde un árbol, Sakura saltó con su puño bien cargado en chakra y asestó un potente puñetazo en el pecho de Naruto, lo que le extrañó fue que no notó costillas romperse pese a que el cuerpo saliese volando y se chocase con fuerza contra un árbol.
De repente la pelirrosa hizo un sello con una mirada bastante seria mientras caía. -¡Kai!- Y de golpe todo empezó a romperse en cristales al menos hasta que abrió los ojos...
Nadie se había movido del lugar, todo había sido un genjutsu en el que habían sido metido todos. Sus compañeros estaban inconscientes y sinceramente dudaba del hecho de que su enemigo le dejase tiempo amablemetne para ir a despertarlos. De hecho ahora que lo miraba, estaba mejor que cuando había salido de la cueva... Bastante mejor. Lo único que había cambiado del escenario es que casi se había hecho de noche... ¿Cuánto tiempo había estado en el genjutsu?
-¿Quién lo iba a decir? Eres le primera persona que conozco que sale por sí sola de uno de mis Genjutsus...- Dijo riéndose Naruto mientras nueve colas empezaban a salir de su espalda. -Siéntete afortunada, te mataré con mis propias manos, no será tu mente la que sucumba a la locura por el dolor o el cansancio, con lo que me gusta ver a la gente con sus mentes rotas...-
La primera pregunta que surgió en la cabeza de Sakura fue referente a las colas, de si eran reales, pero si, lo eran, lo sabía porque aquellas colas no eran precisamente metálicas, podía ver cuando chocaba contra las rocas de la cueva como el pelaje se amoldaba a la propia gruta... De todas formas, no era tiempo para dudar. Realizó un sello y un pequeño rombo apareció sobre su frente, y de aquél rombo unos tatuajes que crubrieron una perte de su cara. Además de eso la pelirrosa realizó un sello con una mano y en esta apareció un bisturí de chakra usado normalmente para fines quirúrgicos, pero sus encuentros con Kabuto le habían enseñado que aquellos bisturís tenían más peligro del que podía tener una katana. Su objetivo en ese momento no eran los músculos del rubio, era la arteria aorta o la carótida, le daba igual que un derrame de ese calibre fuese una muerte lenta y dolorosa, aquél canalla no iba a salir vivo de allí.
-Por favor, que truco más barato.- Dijo Naruto extendiendo una mano, de esta apareció una esfera de color rojo/negro, era chakra suyo mezclado con el chakra del kyuubi. -ESTO es una técnica.-
Naruto se lanzó hacia Sakura, dispuesto a terminar con aquél combate en aquellos mismos instantes, pero aquella no fue su suerte. Lo que para el rubio era un golpe asegurado, Sakura logró esquivar con una eficacia poco propia del ninja promedio con un movimiento de boxeo en el que el atacado inclinaba su cuerpo en dirección contraria al que el atacante realizaba su acción, pero no solo eso, sino que logró acertar al tendón de su mano derecha haciendo que la técnica se dispersase, y ya dicho sea que aquella mano quedase inútil hasta que pudiese descansar un poco. Aquella mano bisturí avanzaba hacia el cuello del rubio, pero este no se quedaba atrás en reflejos, y mucho menos en velocidad y en miembros, tenía todavía 12 para poder defenderse y eso es lo que hizo. Giró su cuerpo haciendo que el bisturí praticamente le rozase la nuca, con este movimiento hizo que una de sus colas se enrollase con una de las piernas de Sakura y esta literalmente fue levantada como si de una pluma se tratase, pero el golpe que recibió con la espalda en el suelo más bien hizo parecer que había caido un piano desde una altura considerable.
-Así que, querías saber porqué mato...- Dijo Naruto mientras bloqueaba los movimientos de Sakura con sus colas. -Es algo muy simple.- Poco a poco la fue levantando, mientras que con su mano sana volvía a formar una de esas esferas. -El mundo ninja tendrá su castigo.- De nuevo intentó impactar una de esas esferas contra Sakura, pero algo hizo que no pudiese. Una especie de agujero negro apareció en su mano haciendo que la esfera desapareciese completamente, y porque tuvo que retirar la mano que si no esta también habría desaparecido.
-Suéltala, Uzumaki Naruto.- Dijo una figura desde lo alto de uno de los árboles, se trataba de Kakashi, quien vestía con su traje de Jounnin, el peliblanco estaba jadeando, no solo porque había ido sin estar completamente recuperado, sino porque su sharingan consumía demasiado chakra.
-Hm, hacía años que no escuchaba ese nombre.- Dijo fijando su atención en el ninja que le había interrumpido. Asfixió con una de sus colas a Sakura hasta dejarla inconsciente y luego simplemente la dejó caer al suelo sin ningún tipo de delicadeza, como si fuese un trapo viejo y usado. -Ya que te has preocupado en descubrir mi nombre, ¿De qué forma deseas que te mate?-
-Esto no es lo que tus padres habrían querido para tí.- Aunque fuese algo bajo, Kakashi quería intentar ver qué tanto le importaba la historia de su pasado a Naruto, cómo podía afectarle si es que le afectaba.
-Decidido, te romperé los huesos y luego te mataré.-
Lo único que pudo ver Kakashi, en su estado actual, era un potente chakra rojo, y luego... Nada.
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Continuará.- Cadenas falsas.
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Continuará.- Cadenas falsas.
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Espero que os haya gustado, dentro de poco sabreis cómo ha sido capaz Naruto de engañar a estos. xD
Lo dicho, si no os ha gustado, decidlo, si os ha gustado, también.
narusaku4real- Genin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
wrath of naruto y literalmente pobre kakashi..... una ves mas lee, kiba y sakura apaliados, anuque sakura dio mas pelea
moi-06yoyo- Sennin
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cuarto de sakura en su cama con ella
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
me encanto sobre todo la pelea de sakura y naruto espero la conti
saludos
saludos
nacho666- Genin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Que capitulo! Rayos todo era un genjutsu! Pero Sakura pudo salir me gusta que sea asi de fuerte y al parecer tambien es lista, aun asi Naruto sigue estando en un nivel superior, sera que nadie pude plantarle cara y el ritmo?!!
Kakashi a llegado tiempo, eso fue un golpe bajo y al rubio no le gusto. Ha quedado nuevamente en el suspenso y la intriga! Te gusta hacernos sufrir, pero bueno eso nos mantiene con las ansias de la conti.
Que bueno que haz podido actualizar tan pronto.
Kakashi a llegado tiempo, eso fue un golpe bajo y al rubio no le gusto. Ha quedado nuevamente en el suspenso y la intriga! Te gusta hacernos sufrir, pero bueno eso nos mantiene con las ansias de la conti.
Que bueno que haz podido actualizar tan pronto.
hikari uzumaki- Sennin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
mi punto de opinion es este: genial me gusto mucho este fic solo me gustaria que me avisaras cuando saques los proximos capitulos. me encanto. asi como vas tenlo seguro que tendras muchos lectores les dire a mis amigos que lean este fic.
enriqueminato- Chunnin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Que poder el de Naruto, hasta ahora no ha tenido rivales, será Kakashi el primero?, no lo creo, seguramente recibirá su parte de la paliza, pues no creo que a Naruto lo detengan palabras vacías y que ahora mismo carecen de sentido o habrá algo que lo haga detenerse?
Leon- Sennin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Mil no, millones de perdones por la tardanza, pero ya se sabe lo que trae las navidades con ella... Familiares, amigos, etc etc etc. No he tenido tiempo ni para respirar y la verdad es que he acabado harto de estas navidades, así que una vez terminadas me he tomado unos días de descanso mental/corporal, así pues, paso al capítulo sin más tardanza, suficiente retraso ha tenido como para alargarla por unas palabras, solo unas últimas: Gracias por los comentarios.
Las voces eran lejanas, al igual que aquello que podía sentir en cuanto a sensaciones corporales, se podía decir que su mente estaba volando por otros lugares hasta el momento en que escuchó una potente explosión, ¿Cuánto tiempo había estado en aquél estado? Para él habían sido horas, pero habían sido apenas segundos, los que le habían tomado para caer del árbol semiconsciente y ser atacado por Naruto, extrañamente, creía que la explosión provenía de él, pero no había dolor alguno. Con algo de esfuerzo levantó la cabeza y abrió el ojo en el que no poseía su sharingan, Kakashi pocas veces podía ser sorprendido, pero esa era una de las veces que haría que se confirmase la más absoluta de las excepciones. Tendido en el suelo levantó la mirada, sobre él estaban las piernas de Naruto, pero de torso para arriba estaba todo lleno de humo negro, un humo que pocos elementos naturales de la tierra podían provocar, se trataba de pólvora. Un sello explosivo seguramente, eso explicaba porqué en sus oídos había un fuerte pitido que le estaba dejando sin sentido de nuevo, era gracioso, ni en la guerra ninja con su maestro se había sentido así nunca.
Delante del rubio, de pie, se encontraba una chica de pelo castaño, ojos igualmente castaños, piel bronceada y un kimono de combate completamente blanco, sujetando un pergamino prácticamente más grande que ella, a su lado, agachado un joven con traje de Jounnin, pelo recogido en una coleta, ojos negros y mirada sumamente aburrida, los dedos índice y corazón de cada mano estaban alineados de forma vertical, formando un sello. La chica por su parte parecía estar terriblemente afectada por el panorama que se presentaba ante ella, no por miedo, ni por nauseas o nerviosismo, no, se trataba de ira, porque sus compañeros estaban en aquél estado más que lamentable. De todas formas, no se permitía bajar la guardia, después de todo las piernas no habían caido hacia atrás sin la parte superior del cuerpo, de hecho, cuando el humo se disipó, se pudo ver que la parte superior del cuerpo del rubio se encontraba dentro de una esfera hecha a partir de las colas que antes había usado para dejar inconsciente a Sakura, aunque por la explosión estas habían resultado gravemente dañadas, además del desgaste de chakra, pues ya estaba en sus límites.
Poco a poco la colas fueron disolviéndose en el aire como si de llamaradas rojas se tratasen, siendo que estas ya no podían mantener la forma física y mucho menos regenerar los daños que la explosión había provocado, estas dejaron ver a un Naruto con el rostro pálido, después de todo, pese a que su chakra fuese monstruoso él ya apenas podía hacer nada con este pues estaba en unos límites muy bajos. Por su parte podía seguir luchando, pero de una forma muy básica. De todas formas no iba a ser tan fácil pues aunque hubiese tratado de moverse, algo le estaba fijando al suelo, al mirar hacia este pudo ver que un hilo parecido a una sombra se dirigía desde la suya propia hasta la del tipo de la coleta.
-Mantenlo quieto.- Dijo la chica mientras desenrollaba el pergamino de un tirón, se mordía el dedo y pasaba el mismo por la superficie de papel. De esta aparecieron dos katanas de un tamaño poco normal, cuando las katanas normales la hoja medían entre 60 y 73 centímetros, estas medían 2 metros cada una, de repente la chica comenzó a avanzar de golpe, casi como una bala salida de un cañón con una explosión provocada por sus pies y su chakra.
Por su parte Naruto reunió fuerzas y logró romper el agarre del chico, después de todo conocía las técnicas de los Nara, aunque no conocía las limitaciones del cuerpo de su enemigo, pero is que sabía una cosa, en fuerza física pocas personas normales eran capaces de igualarlo, así que romper aquella atadura no era muy difícil. Dio un salto hacia atrás, al tiempo que tomaba un par de kunais de tres hojas cada uno, ambos impactaron contra las katanas con el simple hecho de haber colocado una posición de combate bastante parecida al boxeo, pues ambos sables estaban dirigidos a cortarle el torso con un golpe horizontal a la altura del pecho. Una patada ascendente voló por parte de la chica, asestando de lleno en el rostro de Naruto, quien no pudo evitar salir literalmente disparado hacia el aire, soltando ambos kunai haciendo que con un golpe sordo cayeran con la empuñadura sobre la cabeza de Kakashi, despertándolo un poco más. Este fue levantado de repente.
-Shikamaru... Habeis tardado demasiado.- Comentó con los ojos cerrados el peliplateado y aunque no se viese, un gesto de alivio por debajo de la máscara.
-No podemos ir más rápido, Tenten no sigue el ritmo con el pergamino.- Dicho esto lo recostó sobre el primer árbol alejado que vio, mientras se llevaba las manos a los bolsillos, sacando una veintena de sellos explosivos. -Veamos que tanto resiste este tipo.-
En la pelea, Naruto se estaba viendo obligado a esquivar, no por nada, sino porque no podía usar su cuerpo para detener un par de katanas de ese tipo, y mucho menos con su cantidad de chakra actual se podía permitir el lujo de darle la espalda a la mujer, quien, parecía verle las intenciones de ir a recoger la espada de Zabuza, definitivamente estaba acorralado, pero ella estaba siendo por otra parte muy descuidada, ya había medido el largo de las espadas, y había podido comprobar el tiempo entre golpe y golpe, pues ambas espadas siendo de ese tamaño no eran precisamente ligeras, y, se había dejado llevar por las emociones, por lo que en su mente solo había una orden de ataque y su cuerpo no podría reaccionar ante un contraataque que le lanzase, no había defensa posible en la mente atrapada y llena de ira de nadie.
Cuanto se equivocaba.
Cuando intentó contraatacar tras un corte horizontal hacia el lado derecho con ambas katanas, lo hizo avanzando con todo su cuerpo en un salto, intentando asestar un codazo en la cara de Tenten, pero el rubio no pudo prever ningún tipo de respuesta por parte de aquella maestra con las armas, lo normal habría sido intentar protegerse o retroceder como reacción, pero la chica no hizo nada de eso, avanzó en diagonal con un pequeño salto haciendo que Naruto le diese la espalda, esta giró rápidamente sobre su propio eje en medio del aire y propinó un par de profundo cortes en la espalda al rubio haciéndole hincar la rodilla izquierda en el suelo por el propio shock del dolor que las espadas le habían proporcionado, no lo podía ver, pero estaba notando la sangre correr por su espalda como una cascada, ya por no decir que notaba la carne ligeramente despegada de los músculos lo que le hacía sentir un dolor atroz.
La sangre salpicó a varios metros por el suelo, ya no solo la que estaba echando Naruto de la herida, sino porque Tenten sacudió ambas katanas haciendo que quedasen ambas en posición vertical, con los brazos extendidos a cada lado de su cuerpo, lo cierto es que con aquella posición parecía completamente una mantis. Esta miró hacia Naruto con un gesto completamente serio, el hecho de que hubiese acertado no quería decir nada en absoluto, de hecho la energía que estaba saliendo de Naruto y como se estaban curando aquellas heridas no eran para nada normales, aunque las mismas no se pudieron curar del todo, seguramente por la falta de chakra que estaba mostrando el rubio, aun así, para como estaban aquellas heridas antes, ahora no eran mas que un par de surcos sanguinolientos en la espalda y lo único que había colgando era un trozo de piel que no había logrado adherirse a la carne.
-Acabas de firmar tu sentencia de muerte...- Susurró Naruto mientras su chakra se volvía cada vez más inestable, hasta el punto de desaparecer por completo, lentamente se levantó mientras tomaba un par de kunais, iba a usar lo poco que le quedaba de chakra prácticamente a la desesperada. Lanzó ambos, uno a los pies de Tenten y otro a los pies del mandoble, finalmente terminó por desaparecer en un destello rojizo, para luego aparecer delante de la chica con su espada en alto, con una mirada completamente inyectada en sangre.
-Kage nui.- Y estas palabras escuchadas tras Naruto, en los alrededores solo se pudo escuchar una monstruosa explosión, antes de que esta se dispersase, tanto humo como fuego, Shikamaru se lanzó hacia este con un papel en la mano y de un fuerte golpe, lo colocó en la frente del aun de pie, pero malherido Naruto, al hacer contacto dicho papel con la frente del mismo, una onda expansiva de aire los tiró a ambos, tanto a Tenten como a Shikamaru hacia atrás mientras el cuerpo de Naruto empezaba a llenarse de tatuajes con formas de cadenas de fuego. Este estaba más inconsciente que consciente, así que tampoco pudo luchar mucho contra el jutsu antes de caer presa del mismo y de las llamas que estaban saliendo de dichas cadenas de tinta, llamas que no eran precisamente de mentira y estaban haciendo que el rubio se doblegase si es que aún quedaba algún tipo de intención de resistencia, hasta él sabía que ya no podía luchar más.
-Lo conseguimos...- Murmuró Kakashi en la lejanía sorprendido del resultado de aquella batalla, nadie de Konoha había muerto por suerte, aunque Lee, Shino y Kiba, Akamaru incluido, estaban sumidos aún en aquél genjutsu que, aunque su usuarío había sido incapacitado, seguía funcionando.
Dentro de la prisión de alta seguridad de Konoha, había un inusual silencio que inundaba los corredores de las celdas, era como si todos los que estuviesen por los alrededores hubiesen muerto por alguna razón, pero no, el sonido de las respiraciones eran suficiente para dejar ver que efectivamente estaban vivos, pero dormidos, menos la habitante de una de las celdas. Aya era la única que se mantenía despierta por una simple razón, había tenido acceso a la enfermería, alegando un dolor de estómago, había tomado los somníferos más potentes que había logrado encontrar y los había vertido en la depuradora de agua, le había costado y no precisamente poco, horas incluso para llevar a cabo aquél plan. De todas formas era algo que tampoco sabía si funcionaría o no, se encontraba sentada con las piernas cruzadas sobre su..."cama" en la celda, ambas manos puestas completamente juntas, palma con palma, a su alrededor no había nada, pero era como si la vida que tenía el lugar estuviese rodeándola, las piedras que hacían el pequeño compartimento estaban empezando incluso a brillar en color dorado porque la energía natural estaba escapando de ellas, dirigiéndose hacia Aya.
Esta, una vez terminó de acumular energía, se levantó de golpe sabiendo de antemano que la técnica de los tatuajes de tinta se había activado y se había manifestado en varias serpientes que estaban a punto de empezar a destrozarla empezando por la cara, por su parte liberó toda aquella energía que había acumulado creando una onda expansiva que, literalmente, desintegró las serpientes, deformó el pequeño rectángulo que era su celda en una amplia esfera y se llevó por medio la puerta de la misma, además de la mitad del cuerpo de un guardia que había quedado dormido delante de su celda. Lentamente salió, mientras se colocaba bien la ropa de la prisión, pues tras la explosión había quedado un poco estropeada, únicamente rasgones a la altura del estómago, pues desde ahí había liberado toda la energía, y de rodillas hacia abajo por el hecho de que por ahí había estado soltando la energía restante para que su cuerpo no se desintegrase con la celda.
Daba por hecho que allí no estarían sus cosas, después de todo si había un amotinamiento el hecho de que algún ninja traidor encontrase algún artilugio que le ayudase a destruir el lugar era algo que se podía concebir y desde luego algo que se podía evitar, y sabiendo lo preparada que le gustaba estar a Tsunade, sinceramente le parecía de lo más normal del mundo. No se tomó las mayores de las prisas para salir de allí, rebuscó entre los guardias, las llaves de las puertas principales, pues no quería hacer ningún ruido por si habían aún guardias despiertos, cosa que seguramente habrían pues los cambios de turno eran bastante frecuentes. Tomó una bolsa con kunais y shurikens y se la ató a la pierna derecha, tomando uno con la mano derecha por su acaso.
Estuvo varios minutos atravesando pasillos, hasta que la primera luz del sol acudió a sus ojos, y con ella un dolor de estómago legendario, miró hacia la derecha, pues desde allí había podido percibir un único sonido, se trataba de Tsunade, quien había enterrado su puño en el diafragma de Aya con una facilidad absurda, cosa que había hecho pensar a la peliblanca... ¿Cuánto tiempo llevaba en aquella prisión? ¿Cuánto le había afectado a su capacidad de reacción aquella oscuridad tan infinita que le daba su celda. No cayó inconsciente, pues la rubia no había usado por completo su fuerza, pero si usó la suficiente para hacerla caer tosiendo.
-Sinceramente, esperaba que intentases algo como esto. Tu tío era un escapista nato, ¿Porqué no su discípula?- Comentó la rubia mientras la tomaba del cuello de la camisa y la levantó con una falta de esfuerzo apabullante. -¿Qué debería hacer contigo?-
Aya no podía responder, el agarre estaba, literalmente, asfixiándola, mas no por ello era inútil en aquél estado. Levantó su pierna y asestó una potente patada en el costado de Tsunade, quien, sorprendida se alejó de la peliblanca y esta cayó con una rodilla en el suelo con la respiración acelerada, le había privado del oxígeno dos veces seguidas de una forma bastante bruta. Temblando casi, tomó el kunai y se levantó... Sinceramente sabía que no tenía muchas oportunidades contra la Hokage, la última Sannin y mucho menos si esta se trataba de Tsunade, podía esquivar dos, tres golpes, pero el único que le diese sería definitivo para ella.
-Apártate... No quiero seguir en este lugar... No puedo...- El tono de voz de la chica estaba roto, realmente estaba desesperada, su alma clamaba venganza, aquél maldito asesino le había arrebatado todo lo que tenía, incluida su libertad, no se había permitido exteriorizar sus sentimientos, pero con el miedo y la adrenalina casi estaba perdiendo la compostura. -Tengo que matarlo... Tengo que vengarme... Vengar a mi tio.-
-¿Y luego qué?- Dijo la rubia mientras se colocaba en posición de combate. -Vivirás una vida vacía, se que queda bien en tí Aya, pero lo que has hecho, lo que has provocado hasta ahora... Es imperdonable.-
-No fue culpa mía... ¡Me tendieron una trampa! ¿¡Cómo iba a saber que aquello empezaría una guerra!?- Chilló desesperada Aya, mientras caía de rodillas al suelo, moralmente destruida.
-¡Era la hija del feudal del país del viento! ¿¡Cómo podías no saber que ibas a meter a tu país en una guerra!?- Lanzó un puñetazo, pero no fue a por Aya, si no a la pared centímetros a la derecha del rostro de a misma, había fallado el golpe a propósito.
Ninguna de las dos habló, hasta que Aya finalmente tendió el kunai hacia Tsunade.
-Entonces mátame, prefiero morir a vivir sabiendo que fui engañada y que he provocado la muerte de miles...- Pero solo un manotazo al kunai fue lo que obtuvo cono respuesta.
-Prefiero que me cuentes lo que pasó, la verdad, y luego ya decidiré.- Era la primera vez, en mucho tiempo, que la Hokage se había permitido sonreir, tal vez no era su sobrina, pero sabía lo especial que era Aya para Jiraiya, así que prácticamente era como si lo fuese.
Se hizo el silencio, Aya estaba sorprendida, estaba pensando que todavía quedaba esperanza para ella, al menos hasta que una puerta abierta de golpe llamó la atención de ambas.
-¡Lo han capturado! ¡El equipo de Shikamaru lo ha conseguido!-
Y de repente, un gesto indescriptible se apoderó del rostro de Aya, gesto que ni Tsunade ni el ninja pudieron ver.
Espero que os haya gustado, y lo dicho, perdón por la tardanza >_<
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Capítulo 8.- Cadenas falsas.
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Capítulo 8.- Cadenas falsas.
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Las voces eran lejanas, al igual que aquello que podía sentir en cuanto a sensaciones corporales, se podía decir que su mente estaba volando por otros lugares hasta el momento en que escuchó una potente explosión, ¿Cuánto tiempo había estado en aquél estado? Para él habían sido horas, pero habían sido apenas segundos, los que le habían tomado para caer del árbol semiconsciente y ser atacado por Naruto, extrañamente, creía que la explosión provenía de él, pero no había dolor alguno. Con algo de esfuerzo levantó la cabeza y abrió el ojo en el que no poseía su sharingan, Kakashi pocas veces podía ser sorprendido, pero esa era una de las veces que haría que se confirmase la más absoluta de las excepciones. Tendido en el suelo levantó la mirada, sobre él estaban las piernas de Naruto, pero de torso para arriba estaba todo lleno de humo negro, un humo que pocos elementos naturales de la tierra podían provocar, se trataba de pólvora. Un sello explosivo seguramente, eso explicaba porqué en sus oídos había un fuerte pitido que le estaba dejando sin sentido de nuevo, era gracioso, ni en la guerra ninja con su maestro se había sentido así nunca.
Delante del rubio, de pie, se encontraba una chica de pelo castaño, ojos igualmente castaños, piel bronceada y un kimono de combate completamente blanco, sujetando un pergamino prácticamente más grande que ella, a su lado, agachado un joven con traje de Jounnin, pelo recogido en una coleta, ojos negros y mirada sumamente aburrida, los dedos índice y corazón de cada mano estaban alineados de forma vertical, formando un sello. La chica por su parte parecía estar terriblemente afectada por el panorama que se presentaba ante ella, no por miedo, ni por nauseas o nerviosismo, no, se trataba de ira, porque sus compañeros estaban en aquél estado más que lamentable. De todas formas, no se permitía bajar la guardia, después de todo las piernas no habían caido hacia atrás sin la parte superior del cuerpo, de hecho, cuando el humo se disipó, se pudo ver que la parte superior del cuerpo del rubio se encontraba dentro de una esfera hecha a partir de las colas que antes había usado para dejar inconsciente a Sakura, aunque por la explosión estas habían resultado gravemente dañadas, además del desgaste de chakra, pues ya estaba en sus límites.
Poco a poco la colas fueron disolviéndose en el aire como si de llamaradas rojas se tratasen, siendo que estas ya no podían mantener la forma física y mucho menos regenerar los daños que la explosión había provocado, estas dejaron ver a un Naruto con el rostro pálido, después de todo, pese a que su chakra fuese monstruoso él ya apenas podía hacer nada con este pues estaba en unos límites muy bajos. Por su parte podía seguir luchando, pero de una forma muy básica. De todas formas no iba a ser tan fácil pues aunque hubiese tratado de moverse, algo le estaba fijando al suelo, al mirar hacia este pudo ver que un hilo parecido a una sombra se dirigía desde la suya propia hasta la del tipo de la coleta.
-Mantenlo quieto.- Dijo la chica mientras desenrollaba el pergamino de un tirón, se mordía el dedo y pasaba el mismo por la superficie de papel. De esta aparecieron dos katanas de un tamaño poco normal, cuando las katanas normales la hoja medían entre 60 y 73 centímetros, estas medían 2 metros cada una, de repente la chica comenzó a avanzar de golpe, casi como una bala salida de un cañón con una explosión provocada por sus pies y su chakra.
Por su parte Naruto reunió fuerzas y logró romper el agarre del chico, después de todo conocía las técnicas de los Nara, aunque no conocía las limitaciones del cuerpo de su enemigo, pero is que sabía una cosa, en fuerza física pocas personas normales eran capaces de igualarlo, así que romper aquella atadura no era muy difícil. Dio un salto hacia atrás, al tiempo que tomaba un par de kunais de tres hojas cada uno, ambos impactaron contra las katanas con el simple hecho de haber colocado una posición de combate bastante parecida al boxeo, pues ambos sables estaban dirigidos a cortarle el torso con un golpe horizontal a la altura del pecho. Una patada ascendente voló por parte de la chica, asestando de lleno en el rostro de Naruto, quien no pudo evitar salir literalmente disparado hacia el aire, soltando ambos kunai haciendo que con un golpe sordo cayeran con la empuñadura sobre la cabeza de Kakashi, despertándolo un poco más. Este fue levantado de repente.
-Shikamaru... Habeis tardado demasiado.- Comentó con los ojos cerrados el peliplateado y aunque no se viese, un gesto de alivio por debajo de la máscara.
-No podemos ir más rápido, Tenten no sigue el ritmo con el pergamino.- Dicho esto lo recostó sobre el primer árbol alejado que vio, mientras se llevaba las manos a los bolsillos, sacando una veintena de sellos explosivos. -Veamos que tanto resiste este tipo.-
En la pelea, Naruto se estaba viendo obligado a esquivar, no por nada, sino porque no podía usar su cuerpo para detener un par de katanas de ese tipo, y mucho menos con su cantidad de chakra actual se podía permitir el lujo de darle la espalda a la mujer, quien, parecía verle las intenciones de ir a recoger la espada de Zabuza, definitivamente estaba acorralado, pero ella estaba siendo por otra parte muy descuidada, ya había medido el largo de las espadas, y había podido comprobar el tiempo entre golpe y golpe, pues ambas espadas siendo de ese tamaño no eran precisamente ligeras, y, se había dejado llevar por las emociones, por lo que en su mente solo había una orden de ataque y su cuerpo no podría reaccionar ante un contraataque que le lanzase, no había defensa posible en la mente atrapada y llena de ira de nadie.
Cuanto se equivocaba.
Cuando intentó contraatacar tras un corte horizontal hacia el lado derecho con ambas katanas, lo hizo avanzando con todo su cuerpo en un salto, intentando asestar un codazo en la cara de Tenten, pero el rubio no pudo prever ningún tipo de respuesta por parte de aquella maestra con las armas, lo normal habría sido intentar protegerse o retroceder como reacción, pero la chica no hizo nada de eso, avanzó en diagonal con un pequeño salto haciendo que Naruto le diese la espalda, esta giró rápidamente sobre su propio eje en medio del aire y propinó un par de profundo cortes en la espalda al rubio haciéndole hincar la rodilla izquierda en el suelo por el propio shock del dolor que las espadas le habían proporcionado, no lo podía ver, pero estaba notando la sangre correr por su espalda como una cascada, ya por no decir que notaba la carne ligeramente despegada de los músculos lo que le hacía sentir un dolor atroz.
La sangre salpicó a varios metros por el suelo, ya no solo la que estaba echando Naruto de la herida, sino porque Tenten sacudió ambas katanas haciendo que quedasen ambas en posición vertical, con los brazos extendidos a cada lado de su cuerpo, lo cierto es que con aquella posición parecía completamente una mantis. Esta miró hacia Naruto con un gesto completamente serio, el hecho de que hubiese acertado no quería decir nada en absoluto, de hecho la energía que estaba saliendo de Naruto y como se estaban curando aquellas heridas no eran para nada normales, aunque las mismas no se pudieron curar del todo, seguramente por la falta de chakra que estaba mostrando el rubio, aun así, para como estaban aquellas heridas antes, ahora no eran mas que un par de surcos sanguinolientos en la espalda y lo único que había colgando era un trozo de piel que no había logrado adherirse a la carne.
-Acabas de firmar tu sentencia de muerte...- Susurró Naruto mientras su chakra se volvía cada vez más inestable, hasta el punto de desaparecer por completo, lentamente se levantó mientras tomaba un par de kunais, iba a usar lo poco que le quedaba de chakra prácticamente a la desesperada. Lanzó ambos, uno a los pies de Tenten y otro a los pies del mandoble, finalmente terminó por desaparecer en un destello rojizo, para luego aparecer delante de la chica con su espada en alto, con una mirada completamente inyectada en sangre.
-Kage nui.- Y estas palabras escuchadas tras Naruto, en los alrededores solo se pudo escuchar una monstruosa explosión, antes de que esta se dispersase, tanto humo como fuego, Shikamaru se lanzó hacia este con un papel en la mano y de un fuerte golpe, lo colocó en la frente del aun de pie, pero malherido Naruto, al hacer contacto dicho papel con la frente del mismo, una onda expansiva de aire los tiró a ambos, tanto a Tenten como a Shikamaru hacia atrás mientras el cuerpo de Naruto empezaba a llenarse de tatuajes con formas de cadenas de fuego. Este estaba más inconsciente que consciente, así que tampoco pudo luchar mucho contra el jutsu antes de caer presa del mismo y de las llamas que estaban saliendo de dichas cadenas de tinta, llamas que no eran precisamente de mentira y estaban haciendo que el rubio se doblegase si es que aún quedaba algún tipo de intención de resistencia, hasta él sabía que ya no podía luchar más.
-Lo conseguimos...- Murmuró Kakashi en la lejanía sorprendido del resultado de aquella batalla, nadie de Konoha había muerto por suerte, aunque Lee, Shino y Kiba, Akamaru incluido, estaban sumidos aún en aquél genjutsu que, aunque su usuarío había sido incapacitado, seguía funcionando.
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Dentro de la prisión de alta seguridad de Konoha, había un inusual silencio que inundaba los corredores de las celdas, era como si todos los que estuviesen por los alrededores hubiesen muerto por alguna razón, pero no, el sonido de las respiraciones eran suficiente para dejar ver que efectivamente estaban vivos, pero dormidos, menos la habitante de una de las celdas. Aya era la única que se mantenía despierta por una simple razón, había tenido acceso a la enfermería, alegando un dolor de estómago, había tomado los somníferos más potentes que había logrado encontrar y los había vertido en la depuradora de agua, le había costado y no precisamente poco, horas incluso para llevar a cabo aquél plan. De todas formas era algo que tampoco sabía si funcionaría o no, se encontraba sentada con las piernas cruzadas sobre su..."cama" en la celda, ambas manos puestas completamente juntas, palma con palma, a su alrededor no había nada, pero era como si la vida que tenía el lugar estuviese rodeándola, las piedras que hacían el pequeño compartimento estaban empezando incluso a brillar en color dorado porque la energía natural estaba escapando de ellas, dirigiéndose hacia Aya.
Esta, una vez terminó de acumular energía, se levantó de golpe sabiendo de antemano que la técnica de los tatuajes de tinta se había activado y se había manifestado en varias serpientes que estaban a punto de empezar a destrozarla empezando por la cara, por su parte liberó toda aquella energía que había acumulado creando una onda expansiva que, literalmente, desintegró las serpientes, deformó el pequeño rectángulo que era su celda en una amplia esfera y se llevó por medio la puerta de la misma, además de la mitad del cuerpo de un guardia que había quedado dormido delante de su celda. Lentamente salió, mientras se colocaba bien la ropa de la prisión, pues tras la explosión había quedado un poco estropeada, únicamente rasgones a la altura del estómago, pues desde ahí había liberado toda la energía, y de rodillas hacia abajo por el hecho de que por ahí había estado soltando la energía restante para que su cuerpo no se desintegrase con la celda.
Daba por hecho que allí no estarían sus cosas, después de todo si había un amotinamiento el hecho de que algún ninja traidor encontrase algún artilugio que le ayudase a destruir el lugar era algo que se podía concebir y desde luego algo que se podía evitar, y sabiendo lo preparada que le gustaba estar a Tsunade, sinceramente le parecía de lo más normal del mundo. No se tomó las mayores de las prisas para salir de allí, rebuscó entre los guardias, las llaves de las puertas principales, pues no quería hacer ningún ruido por si habían aún guardias despiertos, cosa que seguramente habrían pues los cambios de turno eran bastante frecuentes. Tomó una bolsa con kunais y shurikens y se la ató a la pierna derecha, tomando uno con la mano derecha por su acaso.
Estuvo varios minutos atravesando pasillos, hasta que la primera luz del sol acudió a sus ojos, y con ella un dolor de estómago legendario, miró hacia la derecha, pues desde allí había podido percibir un único sonido, se trataba de Tsunade, quien había enterrado su puño en el diafragma de Aya con una facilidad absurda, cosa que había hecho pensar a la peliblanca... ¿Cuánto tiempo llevaba en aquella prisión? ¿Cuánto le había afectado a su capacidad de reacción aquella oscuridad tan infinita que le daba su celda. No cayó inconsciente, pues la rubia no había usado por completo su fuerza, pero si usó la suficiente para hacerla caer tosiendo.
-Sinceramente, esperaba que intentases algo como esto. Tu tío era un escapista nato, ¿Porqué no su discípula?- Comentó la rubia mientras la tomaba del cuello de la camisa y la levantó con una falta de esfuerzo apabullante. -¿Qué debería hacer contigo?-
Aya no podía responder, el agarre estaba, literalmente, asfixiándola, mas no por ello era inútil en aquél estado. Levantó su pierna y asestó una potente patada en el costado de Tsunade, quien, sorprendida se alejó de la peliblanca y esta cayó con una rodilla en el suelo con la respiración acelerada, le había privado del oxígeno dos veces seguidas de una forma bastante bruta. Temblando casi, tomó el kunai y se levantó... Sinceramente sabía que no tenía muchas oportunidades contra la Hokage, la última Sannin y mucho menos si esta se trataba de Tsunade, podía esquivar dos, tres golpes, pero el único que le diese sería definitivo para ella.
-Apártate... No quiero seguir en este lugar... No puedo...- El tono de voz de la chica estaba roto, realmente estaba desesperada, su alma clamaba venganza, aquél maldito asesino le había arrebatado todo lo que tenía, incluida su libertad, no se había permitido exteriorizar sus sentimientos, pero con el miedo y la adrenalina casi estaba perdiendo la compostura. -Tengo que matarlo... Tengo que vengarme... Vengar a mi tio.-
-¿Y luego qué?- Dijo la rubia mientras se colocaba en posición de combate. -Vivirás una vida vacía, se que queda bien en tí Aya, pero lo que has hecho, lo que has provocado hasta ahora... Es imperdonable.-
-No fue culpa mía... ¡Me tendieron una trampa! ¿¡Cómo iba a saber que aquello empezaría una guerra!?- Chilló desesperada Aya, mientras caía de rodillas al suelo, moralmente destruida.
-¡Era la hija del feudal del país del viento! ¿¡Cómo podías no saber que ibas a meter a tu país en una guerra!?- Lanzó un puñetazo, pero no fue a por Aya, si no a la pared centímetros a la derecha del rostro de a misma, había fallado el golpe a propósito.
Ninguna de las dos habló, hasta que Aya finalmente tendió el kunai hacia Tsunade.
-Entonces mátame, prefiero morir a vivir sabiendo que fui engañada y que he provocado la muerte de miles...- Pero solo un manotazo al kunai fue lo que obtuvo cono respuesta.
-Prefiero que me cuentes lo que pasó, la verdad, y luego ya decidiré.- Era la primera vez, en mucho tiempo, que la Hokage se había permitido sonreir, tal vez no era su sobrina, pero sabía lo especial que era Aya para Jiraiya, así que prácticamente era como si lo fuese.
Se hizo el silencio, Aya estaba sorprendida, estaba pensando que todavía quedaba esperanza para ella, al menos hasta que una puerta abierta de golpe llamó la atención de ambas.
-¡Lo han capturado! ¡El equipo de Shikamaru lo ha conseguido!-
Y de repente, un gesto indescriptible se apoderó del rostro de Aya, gesto que ni Tsunade ni el ninja pudieron ver.
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Próximo capítulo.- Peor imposible.
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Próximo capítulo.- Peor imposible.
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Espero que os haya gustado, y lo dicho, perdón por la tardanza >_<
narusaku4real- Genin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
espero con ansias el proximo capitulo a ver que pasa. jejeeje espero que no tardes mucho es subir el proximo capitulo
enriqueminato- Chunnin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
al fin conti! Siiiii!
No pense que fueran a capturar a Naruto, aunque teniendo en cuenta su falta de chackra, las heridas y falta de reposo, creo que esta vez tuvieron suerte, en condiciones optimas las cosas hubiesen sido diferentes y mas complicadas.
Yo quiero saber que paso con lo de Aya, para que provocase una guerra.
Que pasara con Naruto? Podra escapar? Empezara los preparativos para el futuro Narusaku?
Conti!
No pense que fueran a capturar a Naruto, aunque teniendo en cuenta su falta de chackra, las heridas y falta de reposo, creo que esta vez tuvieron suerte, en condiciones optimas las cosas hubiesen sido diferentes y mas complicadas.
Yo quiero saber que paso con lo de Aya, para que provocase una guerra.
Que pasara con Naruto? Podra escapar? Empezara los preparativos para el futuro Narusaku?
Conti!
hikari uzumaki- Sennin
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Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Gracias por los comentarios =)
Sinceramente, siento no poder poner los capítulos más seguidos, pero mi cuerpo y mente tienen límites muy humanos, espero se entienda.
Aquí va el 9 =D
Ese día, Konoha era una tumba, el día en que habían logrado atrapar al contenedor del Kyubi, como era una noticia importante era cierto que no había tardado en correr entre ninjas y luego entre aldeanos, sinceramente nadie sabía que iba a pasar, nadie sabía que estaba tramando tanto la Hokage, como los miembros del consejo, como el propio Jinchuriki, pero una cosa era cierta...Había miedo, miedo e inquietud por parte de las personas que tenían que vivir entre los muros de aquella villa, y no precisamente por falta de razón, todavía estaban latentes las imágenes del Kyubi arrasando la aldea el último día que vieron vivo al cuarto Hokage.
En la prisión, los mejores shinobis y más expertos en técnicas de sellado estaban encargándose de hacer su trabajo, sellos desde los más básicos hasta los más complicados del clan Uzumaki, habiendo sido autorizados por la Hokage y los miembros del consejo en conjunto, había sido una decisión unánime en cuanto al destino del rubio incluso antes de haberlo capturado, aquella iba a ser su prisión personal, de por vida. Kakashi había estado presente en el sellado, e incluso había participado debido a que varios de los sellos usados los había aprendido él del propio cuarto Hokage, ya por no hablar de Kushina, además de sumir en un genjutsu bastante potente al rubio con su sharingan, tendrían a un Jinchuriki aletargado hasta que se decidiese que hacer con él y su bijuu, y aquello le daba en cierta forma un cargo de conciencia pues como había conocido pocos días atrás, se trataba del hijo de su maestro.
Pero el deber era el deber.
En el hospital de Konoha, los ninjas que habían ido a pelear estaban ya todos despiertos y estabilizados, aunque algo alterados porque mientras el resto habían estado luchando ellos habían estado en el infierno, en sus mentes habían sido despedazados innumerables veces y reconstruido de tal forma que incluso a Lee, quien entrenaba su cuerpo a diario, le costaba siquiera mover los brazos del propio shock. Sus mentes estaban bien, pero sus cuerpos iban a necesitar recuperación, cosa que a los médicos les llamaba la atención pues hacía tiempo que no habían visto aquellos síntomas viniendo de un genjutsu medianamente fácil de romper, ni la propia Kurenai era capaz de alterar tanto la mente de una persona como para que le afectase al cuerpo de una forma tan directa.
Así bien, la noche se había hecho con Konoha, y el manto nocturno era parcialmente eliminado de las calles por las luces de las casas, en la oficina de la Hokage, esta estaba delante de cinco figuras encapuchadas que parecían estar carentes de cualquier movimiento. Bajo estas capuchas se podían ver claramente cinco máscaras ANBU, aunque eran difíciles de ver por la oscuridad de las mismas, todas compartían una característica... Estaban imitando las caras de un lobo.
-Normalmente no os suelo mandar este tipo de trabajos, pero quiero que me hagáis un favor.- El silencio fue la respuesta, una que dejaba pasar a la petición de la Hokage. -Esta no es una misión, así que si en algún momento decidís retiraros, será comprensible.- De nuevo, el silencio, ella sabía que si no hubiesen estado dispuestos a hacerlo simplemente habrían desaparecido. -Vigilad al consejo, ahora que el Jinchuriki del Kyubi está sellado, seguramente querrán aprovechar para poner sus manos sobre él y realizar un pacto, uno de vosotros igualmente deberá infiltrarse en las lineas de la raíz, no sabemos que movimientos realizará Danzô, otro vigilará al Jinchuriki, si intenta escapar, matadlo.- Tras estas palabras, las figuras simplemente desaparecieron entre la oscuridad.
Tras sus palabras, Tsunade se quedó pensativa, pero no por lo que había dicho, sino intentando analizar la situación tal y como se había dado, tenía a Naruto Uzumaki entre rejas, aislado del mundo y sellado bajo los más poderosos sellos conocidos en lo alto de la faz de la tierra, y sin embargo estaba preocupada, porque no sabía hasta que punto Aya estaba dispuesta a dar su brazo a torcer sabiendo que Naruto había sido quien había matado a Jiraiya, de hecho ella misma quería devolverle el favor al Jinchuriki, pero tampoco podía evitar pensar que todo aquello había sido tanto culpa suya, como de Jiraiya, como del tercero y del cuarto, no porque hubiesen hecho algo mal en sus formas de pensar o de actuar, sino porque habían dejado a aquél muchacho a la deriva en sus primeros años, si lo pensaba de forma detenida, seguramente él no había conocido lo que era el bien y por ello se había convertido en tal aberración para la humanidad, ahora más bijuu que persona.
Dentro de la prisión, justo delante de la celda de Naruto, se encontraba Kakashi completamente quieto, con su sharingan activado mirando hacia la crisálida que se había formado con la cantidad de sellos que habían puesto para ver como se encontraba el rubio, por lo que podía ver, el poder que absorbía del Kyubi era tan grande que tanto las heridas y el chakra se habían regenerado, e incluso se habían vuelto más grande, y no solo eso, sino que también se encontraba consciente. Si decía algo, lo escucharía y seguramente podría responder pues aquellos sellos no afectaban en nada a la voz.
-¿Qué fue lo que te llevó a convertirte en lo que eres ahora?- La pregunta tuvo su reacción inmediata, el chakra, rojo de por sí, que podía ver de Naruto se estaba tiñendo de matices negros, siendo que este estaba descontrolándose poco a poco. -Tus padres no habrían... -
-Callate...- Fue casi como un gruñido animal el que salió del capullo. -...En cuanto salga de aquí serás el primero en morir Hatake, recuerda mis palabras...- Incluso dentro de aquélla marabunda de sellos, las palabras consiguieron helar la sangre del ninja copia. -¿Qué tal si matamos el tiempo un rato? Te responderé, pero tú me responderás a mi.-
-No estás en posición de exigir tal cosa.- Dijo el ninja fingiendo seguridad en sus palabras, pero la verdad es que no quería escuchar la versión de otra persona basada en seguramente mentiras que tratasen de ocultar la verdad. -Responde.-
-Tienes cojones para hablarme así... Aunque estés temblando.- Una pequeña risa se escuchó por todo el lugar, al mismo tiempo que los sellos empezaban a temblar levemente, como si estuviesen siendo forzados todos al mismo tiempo, hasta el punto que empezaron a alumbrarse en un color completamente rojo. -¿Quieres saber?- El suelo empezó a resquebrajarse. -Te lo enseñaré-
Y de repente, Kakashi cayó al suelo como si fuese un muñeco de trapo con los ojos completamente en blanco.
Dentro de su mente, Kakashi no se lo explicaba, estaba bastante consciente de que había caido en un genjutsu, pero por otra parte no se explicaba como dicha habilidad había podido ser realizada por alguien que estaba tan exageradamente sellado como para haberle afectado incluso en el Sharingan, el cual no había podido ver a través de dicho genjutsu. De hecho, lo único que podía ver era un espacio en negro con una luz muy pequeña al final, justo en el centro había una figura que se acercaba hacia el peliblanco.
-Dijiste que querías saber, lo sabrás, y lo entenderás... Pero tu destino ya está sellado, morirás junto con todo aquél que sepa la verdad... La curiosidad mató al gato, Hatake.- Kakashi empezó a caer de repente, hasta que se dio de cara contra el suelo, parecía estar justo delante del tramo medio de las escaleras de la torre de la Hokage, pero no entendía porqué estaba en el suelo y le dolía todo, al mirar hacia arriba pudo ver a dos ninjas con trajes de jonin riéndose orgullosos. -Ahora mismo, eres yo hace diecisiete años. Esos ninjas que ves, me lanzaron desde esa altura, y por culpa del Kyubi sobreviví incluso aunque se me rompieron prácticamente todos los huesos de mi cuerpo.- Cuando Kakashi calculaba, se le helaba la sangre, pues estaba diciendo que a un niño de 3 años lo habían tirado desde la mitad de la torre del Hokage y había sobrevivido sin quedar lesión alguna en él. -Y esto es solo la antesala.-
Conforme pasaba el tiempo y las imágenes, algo oscuro se estaba apoderando de los sentimientos de Kakashi, estaba sintiendo asco hacia los aldeanos de Konoha, estaba empezando a comprender porqué Naruto era sí de forma progresiva, poco a poco, estaba llenándose de culpabilidad, pues él si hubiese sabido algo al respecto sin duda hubiese intervenido, pero todo aquello había estado en secreto para él desde el día del Kyubi, dicho de otra forma, la existencia de Naruto hasta hacía dias apenas había sido completamente desconocida.
Cuando el Genjustu se terminó, pudo verse a sí mismo rodeado por 4 ninjas, uno de ellos era bastante reconocible para él.
-Kakashi-Sensei, al fin despierta.- Dijo Sakura aliviada, puesto que había estado intentando romper el genjutsu pero no había podido, de hecho por un momento incluso pensó que se había desmayado o se había quedado dormido, pero su actividad neuronal había estado constante siempre. -¿Qué ha ocurrido?-
-Cansancio, el sharingan activado demasiado tiempo me ha provocado un colapso.- Era mentira, pero por una vez no estaba mintiendo para que se le notase, de hecho esa vez nadie había podido notar que había sido una mentira.
Hubo un silencio colectivo al ver hacia la crisálida en la que había sido encerrada Naruto, pues pese a que había un silencio sepulcral, la maldad se podía incluso sentir en el ambiente.
-A todo esto, ¿Qué haces aquí Sakura?- Preguntó Kakashi mientras se levantaba. -Se supone que deberías estar en el hospital.-
-Me han pedido que venga a comprobar la salud del preso.- Aunque lo cierto es que no tenía muchas ganas de hacer eso, puesto que por ella él podía pudrirse. -¿Algo que deba saber?-
-...- Se mantuvo en silencio unos segundos, pero al final no dijo nada. Solo una cosa. -Me voy a descansar.-
Sakura, inocentemente asintió, luego se dirigió hacia la jaula y una vez allí realizó varios sellos y un pentagrama apareció en el suelo, debía retirar uno de los sellos para poder dejar pasar el ninjutsu médico unicamente para examinar las heridas del Uzumaki, pero al hacerlo, algo rojizo empezó a manifestarse en el ninjutsu de Sakura, ninjutsu normalmente verde, aunque eso no llamó la atención pues todos creyeron que simplemente se trataba del chakra del Kyubi intentando salir para romper los sellos. Una vez se aseguró, realizó del nuevo el sello y salió de la celda, cerrándola con llave y colocando otro sello sobre dicha cerradura.
-Iré a dar mi informe a la Hokage.- Pero cuando iba a salir, una figura la detuvo pues no se esperaba que aquella persona estuviese allí. -Eres Aya, ¿verdad?- Aya asintió levemente, estaba mirando hacia la celda con los puños apretados. -No puedes estar aquí, si quieres te llevaré hacia el despacho de Tsunade-sama.-
Pasaron unos segundos, segundos de tensión absoluta, pues todos habían olvidado que la chica aún permanecía en la prisión, un grave error que no deberían haber competido, y ella precisamente no tenía ahora mismo las energías para obligar a la peliblanca a salir de allí, estaba molida físicamente por la pelea con el prisionero.
No hubo respuesta, pero tampoco negativa... No se podía saber que era lo que pasaba en la cabeza de la chica, y eso era altamente contraproducente pues no sabían las reacciones que podría tener.
Sinceramente, siento no poder poner los capítulos más seguidos, pero mi cuerpo y mente tienen límites muy humanos, espero se entienda.
Aquí va el 9 =D
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Capítulo 9.- Peor imposible. [1/2]
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Capítulo 9.- Peor imposible. [1/2]
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Ese día, Konoha era una tumba, el día en que habían logrado atrapar al contenedor del Kyubi, como era una noticia importante era cierto que no había tardado en correr entre ninjas y luego entre aldeanos, sinceramente nadie sabía que iba a pasar, nadie sabía que estaba tramando tanto la Hokage, como los miembros del consejo, como el propio Jinchuriki, pero una cosa era cierta...Había miedo, miedo e inquietud por parte de las personas que tenían que vivir entre los muros de aquella villa, y no precisamente por falta de razón, todavía estaban latentes las imágenes del Kyubi arrasando la aldea el último día que vieron vivo al cuarto Hokage.
En la prisión, los mejores shinobis y más expertos en técnicas de sellado estaban encargándose de hacer su trabajo, sellos desde los más básicos hasta los más complicados del clan Uzumaki, habiendo sido autorizados por la Hokage y los miembros del consejo en conjunto, había sido una decisión unánime en cuanto al destino del rubio incluso antes de haberlo capturado, aquella iba a ser su prisión personal, de por vida. Kakashi había estado presente en el sellado, e incluso había participado debido a que varios de los sellos usados los había aprendido él del propio cuarto Hokage, ya por no hablar de Kushina, además de sumir en un genjutsu bastante potente al rubio con su sharingan, tendrían a un Jinchuriki aletargado hasta que se decidiese que hacer con él y su bijuu, y aquello le daba en cierta forma un cargo de conciencia pues como había conocido pocos días atrás, se trataba del hijo de su maestro.
Pero el deber era el deber.
En el hospital de Konoha, los ninjas que habían ido a pelear estaban ya todos despiertos y estabilizados, aunque algo alterados porque mientras el resto habían estado luchando ellos habían estado en el infierno, en sus mentes habían sido despedazados innumerables veces y reconstruido de tal forma que incluso a Lee, quien entrenaba su cuerpo a diario, le costaba siquiera mover los brazos del propio shock. Sus mentes estaban bien, pero sus cuerpos iban a necesitar recuperación, cosa que a los médicos les llamaba la atención pues hacía tiempo que no habían visto aquellos síntomas viniendo de un genjutsu medianamente fácil de romper, ni la propia Kurenai era capaz de alterar tanto la mente de una persona como para que le afectase al cuerpo de una forma tan directa.
Así bien, la noche se había hecho con Konoha, y el manto nocturno era parcialmente eliminado de las calles por las luces de las casas, en la oficina de la Hokage, esta estaba delante de cinco figuras encapuchadas que parecían estar carentes de cualquier movimiento. Bajo estas capuchas se podían ver claramente cinco máscaras ANBU, aunque eran difíciles de ver por la oscuridad de las mismas, todas compartían una característica... Estaban imitando las caras de un lobo.
-Normalmente no os suelo mandar este tipo de trabajos, pero quiero que me hagáis un favor.- El silencio fue la respuesta, una que dejaba pasar a la petición de la Hokage. -Esta no es una misión, así que si en algún momento decidís retiraros, será comprensible.- De nuevo, el silencio, ella sabía que si no hubiesen estado dispuestos a hacerlo simplemente habrían desaparecido. -Vigilad al consejo, ahora que el Jinchuriki del Kyubi está sellado, seguramente querrán aprovechar para poner sus manos sobre él y realizar un pacto, uno de vosotros igualmente deberá infiltrarse en las lineas de la raíz, no sabemos que movimientos realizará Danzô, otro vigilará al Jinchuriki, si intenta escapar, matadlo.- Tras estas palabras, las figuras simplemente desaparecieron entre la oscuridad.
Tras sus palabras, Tsunade se quedó pensativa, pero no por lo que había dicho, sino intentando analizar la situación tal y como se había dado, tenía a Naruto Uzumaki entre rejas, aislado del mundo y sellado bajo los más poderosos sellos conocidos en lo alto de la faz de la tierra, y sin embargo estaba preocupada, porque no sabía hasta que punto Aya estaba dispuesta a dar su brazo a torcer sabiendo que Naruto había sido quien había matado a Jiraiya, de hecho ella misma quería devolverle el favor al Jinchuriki, pero tampoco podía evitar pensar que todo aquello había sido tanto culpa suya, como de Jiraiya, como del tercero y del cuarto, no porque hubiesen hecho algo mal en sus formas de pensar o de actuar, sino porque habían dejado a aquél muchacho a la deriva en sus primeros años, si lo pensaba de forma detenida, seguramente él no había conocido lo que era el bien y por ello se había convertido en tal aberración para la humanidad, ahora más bijuu que persona.
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Dentro de la prisión, justo delante de la celda de Naruto, se encontraba Kakashi completamente quieto, con su sharingan activado mirando hacia la crisálida que se había formado con la cantidad de sellos que habían puesto para ver como se encontraba el rubio, por lo que podía ver, el poder que absorbía del Kyubi era tan grande que tanto las heridas y el chakra se habían regenerado, e incluso se habían vuelto más grande, y no solo eso, sino que también se encontraba consciente. Si decía algo, lo escucharía y seguramente podría responder pues aquellos sellos no afectaban en nada a la voz.
-¿Qué fue lo que te llevó a convertirte en lo que eres ahora?- La pregunta tuvo su reacción inmediata, el chakra, rojo de por sí, que podía ver de Naruto se estaba tiñendo de matices negros, siendo que este estaba descontrolándose poco a poco. -Tus padres no habrían... -
-Callate...- Fue casi como un gruñido animal el que salió del capullo. -...En cuanto salga de aquí serás el primero en morir Hatake, recuerda mis palabras...- Incluso dentro de aquélla marabunda de sellos, las palabras consiguieron helar la sangre del ninja copia. -¿Qué tal si matamos el tiempo un rato? Te responderé, pero tú me responderás a mi.-
-No estás en posición de exigir tal cosa.- Dijo el ninja fingiendo seguridad en sus palabras, pero la verdad es que no quería escuchar la versión de otra persona basada en seguramente mentiras que tratasen de ocultar la verdad. -Responde.-
-Tienes cojones para hablarme así... Aunque estés temblando.- Una pequeña risa se escuchó por todo el lugar, al mismo tiempo que los sellos empezaban a temblar levemente, como si estuviesen siendo forzados todos al mismo tiempo, hasta el punto que empezaron a alumbrarse en un color completamente rojo. -¿Quieres saber?- El suelo empezó a resquebrajarse. -Te lo enseñaré-
Y de repente, Kakashi cayó al suelo como si fuese un muñeco de trapo con los ojos completamente en blanco.
Dentro de su mente, Kakashi no se lo explicaba, estaba bastante consciente de que había caido en un genjutsu, pero por otra parte no se explicaba como dicha habilidad había podido ser realizada por alguien que estaba tan exageradamente sellado como para haberle afectado incluso en el Sharingan, el cual no había podido ver a través de dicho genjutsu. De hecho, lo único que podía ver era un espacio en negro con una luz muy pequeña al final, justo en el centro había una figura que se acercaba hacia el peliblanco.
-Dijiste que querías saber, lo sabrás, y lo entenderás... Pero tu destino ya está sellado, morirás junto con todo aquél que sepa la verdad... La curiosidad mató al gato, Hatake.- Kakashi empezó a caer de repente, hasta que se dio de cara contra el suelo, parecía estar justo delante del tramo medio de las escaleras de la torre de la Hokage, pero no entendía porqué estaba en el suelo y le dolía todo, al mirar hacia arriba pudo ver a dos ninjas con trajes de jonin riéndose orgullosos. -Ahora mismo, eres yo hace diecisiete años. Esos ninjas que ves, me lanzaron desde esa altura, y por culpa del Kyubi sobreviví incluso aunque se me rompieron prácticamente todos los huesos de mi cuerpo.- Cuando Kakashi calculaba, se le helaba la sangre, pues estaba diciendo que a un niño de 3 años lo habían tirado desde la mitad de la torre del Hokage y había sobrevivido sin quedar lesión alguna en él. -Y esto es solo la antesala.-
Conforme pasaba el tiempo y las imágenes, algo oscuro se estaba apoderando de los sentimientos de Kakashi, estaba sintiendo asco hacia los aldeanos de Konoha, estaba empezando a comprender porqué Naruto era sí de forma progresiva, poco a poco, estaba llenándose de culpabilidad, pues él si hubiese sabido algo al respecto sin duda hubiese intervenido, pero todo aquello había estado en secreto para él desde el día del Kyubi, dicho de otra forma, la existencia de Naruto hasta hacía dias apenas había sido completamente desconocida.
Cuando el Genjustu se terminó, pudo verse a sí mismo rodeado por 4 ninjas, uno de ellos era bastante reconocible para él.
-Kakashi-Sensei, al fin despierta.- Dijo Sakura aliviada, puesto que había estado intentando romper el genjutsu pero no había podido, de hecho por un momento incluso pensó que se había desmayado o se había quedado dormido, pero su actividad neuronal había estado constante siempre. -¿Qué ha ocurrido?-
-Cansancio, el sharingan activado demasiado tiempo me ha provocado un colapso.- Era mentira, pero por una vez no estaba mintiendo para que se le notase, de hecho esa vez nadie había podido notar que había sido una mentira.
Hubo un silencio colectivo al ver hacia la crisálida en la que había sido encerrada Naruto, pues pese a que había un silencio sepulcral, la maldad se podía incluso sentir en el ambiente.
-A todo esto, ¿Qué haces aquí Sakura?- Preguntó Kakashi mientras se levantaba. -Se supone que deberías estar en el hospital.-
-Me han pedido que venga a comprobar la salud del preso.- Aunque lo cierto es que no tenía muchas ganas de hacer eso, puesto que por ella él podía pudrirse. -¿Algo que deba saber?-
-...- Se mantuvo en silencio unos segundos, pero al final no dijo nada. Solo una cosa. -Me voy a descansar.-
Sakura, inocentemente asintió, luego se dirigió hacia la jaula y una vez allí realizó varios sellos y un pentagrama apareció en el suelo, debía retirar uno de los sellos para poder dejar pasar el ninjutsu médico unicamente para examinar las heridas del Uzumaki, pero al hacerlo, algo rojizo empezó a manifestarse en el ninjutsu de Sakura, ninjutsu normalmente verde, aunque eso no llamó la atención pues todos creyeron que simplemente se trataba del chakra del Kyubi intentando salir para romper los sellos. Una vez se aseguró, realizó del nuevo el sello y salió de la celda, cerrándola con llave y colocando otro sello sobre dicha cerradura.
-Iré a dar mi informe a la Hokage.- Pero cuando iba a salir, una figura la detuvo pues no se esperaba que aquella persona estuviese allí. -Eres Aya, ¿verdad?- Aya asintió levemente, estaba mirando hacia la celda con los puños apretados. -No puedes estar aquí, si quieres te llevaré hacia el despacho de Tsunade-sama.-
Pasaron unos segundos, segundos de tensión absoluta, pues todos habían olvidado que la chica aún permanecía en la prisión, un grave error que no deberían haber competido, y ella precisamente no tenía ahora mismo las energías para obligar a la peliblanca a salir de allí, estaba molida físicamente por la pelea con el prisionero.
No hubo respuesta, pero tampoco negativa... No se podía saber que era lo que pasaba en la cabeza de la chica, y eso era altamente contraproducente pues no sabían las reacciones que podría tener.
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Continuará...
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Continuará...
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narusaku4real- Genin
- Mensajes : 150
Edad : 33
0
Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Se te comprende y lo importante es que continues con el fic, ya ira avanzando poco a poco.
Que crueldad! Naruto era un niño y Kakashi no debio pasarla nada bien. Me intriga ese genjutsu para que todos terminen asi.
Conti!
Que crueldad! Naruto era un niño y Kakashi no debio pasarla nada bien. Me intriga ese genjutsu para que todos terminen asi.
Conti!
hikari uzumaki- Sennin
- Mensajes : 1432
en mis pensamientos
10924
Posesiones :
Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
muy buen capitulo pobre naruto lo tubo que pasar mal cuando era niño
espero la conti con ansias
saludos
espero la conti con ansias
saludos
nacho666- Genin
- Mensajes : 218
Edad : 39
1554
Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Muy buena la historia. Ya quiero saber que va a pasar y comonse va a dar el narusaku ya que naruto guarda mucho odio y pues tambien comprensible por la forma en la que lo trataron, aventar a un niño desde esa altura..... Espero la continuacion de la historia.
orion83- Novato
- Mensajes : 32
0
Re: [+18]Spiritus tenebrae[Capítulo 9] [22-Enero-2014]
Esta buena la historia (bien escrita y narrada) quisiera saber si habra acercamiento Narusaku. (y si Naruto deja la oscuridad de su corazón)
Sonnie- Aprendiz
- Mensajes : 81
recorriendo la selva XD
0
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