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La Aldea: Capitulo 1
3 participantes
NaruSaku v2.0 :: :: Fan Fic :: FF Cerrados
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La Aldea: Capitulo 1
Ok, vengo con otro fic mio. A medida que escribo empiezo a encontrar mi estilo, y esto es pruebo de aquello.
espero disfruten
La Aldea
1
Se acercaba el invierno, el frio ya se empezaba a sentir. Las delgadas telas de mi vestimenta ya no me brindaban suficiente calor, soy una kunoichi debía aguantar mucho más que el frio. Aun así tenía derecho a beber una buena taza de café caliente. Sentada sola en una mesa de un café local, leyendo informes de algunas misiones que estaban disponibles. Se me hacia tarde para pagar la renta, necesito dinero fácil.
El frio clima hacia visible el vapor que emanaba mi tasa, la misión que ojeaba solo necesitaba de una persona. Ya es un año que hago solo misiones de solitaria, prefería hacerlo así. Es necesario desde que me mude, pero son muy pocas las misiones de una persona, eventualmente tendré que ir en alguna en equipo.
Miraba por la ventana mientras tomaba un poco de mi café, habían pasado muchos años desde el equipo 7. La guerra ya había acabado, las cosas eran más tranquilas, aun así habían ciertos problemas. Nada grave.
¿Era mi soledad la que me traía a este café? Ino me dice constantemente que estoy cada vez más solitaria, la verdad me gusta estar así, no había mucho de qué preocuparse. Si no estaba en el hospital estaba en alguna misión, vivía básicamente en una aburrida rutina.
Vivía aburrida, no quiero nada emocionante por ahora.
La mesa era para dos personas pero yo siempre estaba sola, casi siempre. Justo al frente de este lugar, al otro lado de la ventana que estoy viendo esta unos de los lugares favoritos de alguien especial para mí. Al otro lado de la calle está el puesto de ramen “icharaku ramen” vengo a este café ya dos años. Me volví una adicta al café por buscarlo a él. La verdad es que mi soledad no me trajo a este café por tanto tiempo, era otro motivo.
Por casualidad un día estaba caminando por la calle con libros en mis brazos, necesitaba estudiar. Me tope con este lugar “Rossie Café” entre, tome asiento y empecé a estudiar. En algún momento escuche un “toc toc” al otro lado de la ventana estaba Naruto.
-Sakura ¿Qué haces con tantos libros?- me pregunto Naruto cuando entro, se sentó en mi misma mesa. Le explique que Tsunade me había pedido investigar sobre un jutsu médico.
-¿Tu qué haces por acá? ¿Me estabas siguiendo?- pregunte mientras seguía leyendo.
-No, Sakura mira al otro lado de la ventana- mire y ahí estaba su puesto de comida favorita.
-icharaku…-
Ese día Naruto me invito una taza de café, me contaba que su padre le había comentado que su madre amaba el café en uno de sus encuentros con su difunto padre. Naruto estuvo muy poco tiempo con sus padres pero parecía conocerlos mucho. También había adquirido el gusto del café pero prefería el ramen.
Tal vez quería que me vea aquí y se sentara conmigo, tal vez lo quería a mi lado.
Naruto…
Todo había cambiado, ya éramos niños.
Termine mi tasa, me pare y me fui donde Tsunade para aceptar la misión. Ese día Naruto no fue a icharaku.
…
-Has estado trabando muy duro últimamente Naruto.- Me dijo la vieja Tsunade.
-debo hacerlo por el bien de konoha, si quiero ser hokage debo seguir en este ritmo.-
La vieja soltó una pequeña carcajada.
-¿Qué sucede?- le pregunte.
-Hace unos años te hubieras expresado de otra manera dattebayo.- pronuncio mi típica frase, era verdad, supongo que había cambiado un poco.
-sigo siendo el mismo abuela, ¡de veras!- sin duda había sonado forzado y falso.
La vieja sonrió.
-Naruto, tu sabes que está decidido que ya serás hokage, lo sabes desde que acabo la guerra.-
-No tienes que esforzarte tanto por ganarte a los demás, eso ya lo hiciste.- decía Tsunade.
-debo hacerlo, así soy yo abuela, además…
-naruto te preocupas mucho por los demás y no tienes mucho tiempo para ti mismo.- me interrumpió.
-sabes que no me gusta estar solo abuela, siempre estoy con alguien.- dije
-no me refiero a eso, es saludable buscar tu propia felicidad de vez en cuando Naruto.-
-proteger la aldea me hace feliz.- dije Tsunade estaba por decir algo pero entro Shizune con unos papeles.
-Aquí están las misiones que deben ser completadas.- decía mientras ponía los papeles en la mesa de la hokage.
- ¡Genial! Busquemos alguna misión interesante.-
Tsunade y Shizune me miraban, ¿tenía algún bicho en mi espalda o algo?
-Aquí hay una y parece que llenara mi bolsillo.- era una misión en solitario, la ojeaba, era perfecta para hacer buen dinero rápido, ¡esta es mía!
Shizune me quito el papel rápidamente.
-Está ya está tomada-
-oh, ¡diablos! ¿Quién la tomo?-
-Sakura-
-oh, Sakura chan.- Era de esperarse, tenía que ser alguien muy hábil, no era una misión muy fácil.
-Por cierto Sakura ha estado haciendo misiones en solitario por mucho tiempo.- comento Shizune.
-¿ah, sí?- decía con curiosidad.
-es verdad, parece que Sakura se esta aislando mucho, dios que chica, ¿desde cuando se puso tan antisocial?- ¿Sakura chan? ¿era cierto esto?
-¡No es cierto! Sakura es la misma.- me incomodaba que hablaran así de ella.
-Naruto ¿Cuándo fue la última vez que hablaste con ella?- la última vez…
No logre recordar.
-siempre está en el café al frente de icharaku-
-¿cuándo?- volvió a preguntar.
-…- no sabía que responder.
Me quede en silencio, no recordaba cuando. Olvide lo anterior y vi el montón de hojas, busque alguna misión interesante por ahí, la mayoría me parecían aburridas pero me traían recuerdos del equipo 7, lo que una vez parecía un poco atemorizante ahora parecía un mal chiste.
-Naruto, tomate un descanso.- dijo Tsunade poniendo su mano encima del pilar de papeles que revisaba.
-Pero Tsunade…-
-Naruto tomas 13 misiones por semana, ¡¡son casi dos por día!! Sé que estas lleno de energía pero te estás excediendo, por tu bien tomate un descanso esta semana.
-Tsunade no te preocupes por mí, la mayoría son pan comido- trataba de parecer lo mas fresco posible para que se notara mi seguridad.
-¡¡Naruto, Es una orden!!-
¡Maldita sea! Realmente quería una misión, no estaba cansado ni nada, podía seguir y seguir. Pero no podía desobedecer a la vieja, esta vez parecía ir enserio.
-Está bien, bueno me voy cuídense ¡adiós!- dije mientras salía por la puerta de su oficina.
Salí de la oficina del hokage de mal humor, no tenía una misión y me había enterado que Sakura se comportaba de manera diferente.
No lo entendía, Sakura…
Di todo para que seas feliz Sakura, aun así…
Perplejo era una buena palabra para describir lo que sentia.
Al ir caminando decidí pasar por la casa de Sakura. Quería saber de ella, y estaba al paso de mi casa.
Saltaba de techo en techo hasta llegar al edificio donde vivía Sakura.
Su nuevo departamento era bastante grande para una sola persona, ser héroe de guerra le había dando un impulso económico para independizarse.
Había dejado abierta su ventana, dormía afuera de su cama, nada la abrigaba del frio, destapada y estaba en ropa interior, chica descuidada. Puede agarrar un resfrió así.
Busque entre sus cosas una manta, al buscar por sus cajones me encontré la foto del equipo 7, estaba vieja y empolvada, la guarde y encontré una manta entre sus cosas después la tape.
-…zzz…zzz
Quería hablar contigo Sakura, pero al parecer estas cansada, es hora de irme.
-Naruto.- Sakura había despertado.
-Sakura chan- dije mirándola, la luz de luna bañaba su cuerpo, su hermosa piel blanca tenía un brillo especial, en sus pupilas se podía ver el reflejo de la luna que estaba a mis espaldas, no podía recordar imagen donde la vi más hermosa que ahora.
-Pasaba por acá y te vi durmiendo con la ventana abierta y con ropa interior, puedes resfriarte sabes-
-me dormí sin darme cuenta.- dijo mientras se paraba para encender las luces de su cuarto.
-sabes, hace un par de años te golpearía por verme así.- decía Sakura mientras buscaba su pijama.
-¿a que te refieres con así?-
-En ropa interior.- no pude evitarlo, mi cara probablemente estaba roja, pero apreciaba cada segundo viéndola así, era de una sensualidad elegante. La forma de su silueta despertaba en mi vehemente lujuria, pero mis demonios y pensamientos impuros estaban domados.
-a mi aun me incomoda.- dije dando unos cuantos pasos hacia atrás.
-¿incomoda? Naruto tu siempre querías ver a todas las chicas desnudas.- fue una costumbre que adquirí de Jiraiya.
-hmmp….- mire rápidamente a otro lado, exactamente hacia la ventana por donde entre, la luna ahora estaba frente a mí, no quería incomodarla aun si deseaba verla así por un poco más.
-aun si te viera desnuda y dormida no te haría nada Sakura.- pronuncie mientras observaba la inmensa luna.
-Lo sé, por eso ya no te golpeo.- dijo mientras se ponía su pijama celeste.
-ya puedes mirar, no era necesario que mires a otra parte, somos de confianza Naruto.- trate de interpretar eso como amigo, pero el pensamiento de poder ser su amante estallo en mi cabeza, no debía pensar así.
- es por buena educación Sakura, por más que seamos de confianza.- al decir eso Sakura me miro y alzo una ceja, no entendí que quería expresar aquella gesticulación.
-Supongo que maduramos un poco ¿no crees Sakura?- de alguna manera sentí que lo dije transmitiendo un poco de nostalgia.
-sí, eso creo…- hablo fríamente.
-es verdad, el próximo año cumpliremos 22.- dije, Sakura mientras tanto se sentó en la cama, la seguí y me senté a su lado.
Ella miraba en silencio hacia la ventana, en sus ojos se podía apreciar nuevamente la luna, su pálida piel parecía ser suave y frágil.
Aun la amo.
-Sakura…- se me salió mientras admiraba su belleza.
-¿qué sucede Naruto?- había girado su cabeza y sus ojos se conectaron con los míos, atónito por la magnitud de sus hermosos ojos, no pude pronunciar una palabra.
Paso un inquietante segundo en el cual nos mirábamos fijamente, recordé el motivo por el cual quería hablar con ella.
-estás haciendo otra misión en solitario, me preocupa que estés sola, ya vas casi un año y medio haciendo misiones en solitario y ya no sales con los demás de la academia.- hablaba mientras Sakura miraba sus rodillas luego me miraba a los ojos.
-estoy bien así, no te preocupes por mi.- dijo mientras ponía su mano en mi hombro.
-pero Sakura…- lo sentía, alguien que había pasado momentos en solitario podía saber cuando alguien se sentía desolado.
He renunciado mi propia felicidad para que tú seas feliz, he cumplida nuestra promesa para que seas feliz, te amo y no puedo verte así.
En su rostro podía leer soledad, no había duda. ¿Sakura porque no eres feliz si hice todo eso por ti?
Ojala hubiera tenido el coraje para decirle eso. ¡Sí! Todavía la amo ¿Por qué no puedo decirle lo que pienso?
-mañana tienes una misión, mejor me voy o iras con sueño.- dije cobardemente, Sakura no respondió.
-adiós Sakura chan duerme bien- dije mientras salía por su ventana, deseaba con ansias que me pidiera que me quedara un rato mas, no sucedió.
…
Lo vi salir por mi ventana, saltaba de techo en techo, cada vez más lejos.
Quería que se quede conmigo.
No.
Estoy bien así, al menos puedo seguirme mintiendo sínicamente a mi misma. Después de la visita de Naruto no pude conciliar el sueño. Estaba simplemente sola, lentamente me daba cuenta como se desgastaba mi relación con Naruto, ¿no era eso lo que realmente quería? ¿Olvidarlo? Pero si fuese así, significaría que no lo deseo a mi lado. Si estuviese ahí para él ¿podría hacerlo feliz? Es decir el es una leyenda viviente, será hokage. Y yo haciendo misiones en solitario.
No era nada, a comparación de él, era una ninja promedio, no podía estar con él.
Ha dado tanto por mí, ¿Qué podría hacer yo por él?
Dio su felicidad por mí…
A la mañana siguiente me fui a la misión, al volver voy proponer a Naruto que vayamos a una misión juntos, solo si tengo el valor de hacerlo. Lo hare ¡sin duda alguna!
espero disfruten
La Aldea
1
Se acercaba el invierno, el frio ya se empezaba a sentir. Las delgadas telas de mi vestimenta ya no me brindaban suficiente calor, soy una kunoichi debía aguantar mucho más que el frio. Aun así tenía derecho a beber una buena taza de café caliente. Sentada sola en una mesa de un café local, leyendo informes de algunas misiones que estaban disponibles. Se me hacia tarde para pagar la renta, necesito dinero fácil.
El frio clima hacia visible el vapor que emanaba mi tasa, la misión que ojeaba solo necesitaba de una persona. Ya es un año que hago solo misiones de solitaria, prefería hacerlo así. Es necesario desde que me mude, pero son muy pocas las misiones de una persona, eventualmente tendré que ir en alguna en equipo.
Miraba por la ventana mientras tomaba un poco de mi café, habían pasado muchos años desde el equipo 7. La guerra ya había acabado, las cosas eran más tranquilas, aun así habían ciertos problemas. Nada grave.
¿Era mi soledad la que me traía a este café? Ino me dice constantemente que estoy cada vez más solitaria, la verdad me gusta estar así, no había mucho de qué preocuparse. Si no estaba en el hospital estaba en alguna misión, vivía básicamente en una aburrida rutina.
Vivía aburrida, no quiero nada emocionante por ahora.
La mesa era para dos personas pero yo siempre estaba sola, casi siempre. Justo al frente de este lugar, al otro lado de la ventana que estoy viendo esta unos de los lugares favoritos de alguien especial para mí. Al otro lado de la calle está el puesto de ramen “icharaku ramen” vengo a este café ya dos años. Me volví una adicta al café por buscarlo a él. La verdad es que mi soledad no me trajo a este café por tanto tiempo, era otro motivo.
Por casualidad un día estaba caminando por la calle con libros en mis brazos, necesitaba estudiar. Me tope con este lugar “Rossie Café” entre, tome asiento y empecé a estudiar. En algún momento escuche un “toc toc” al otro lado de la ventana estaba Naruto.
-Sakura ¿Qué haces con tantos libros?- me pregunto Naruto cuando entro, se sentó en mi misma mesa. Le explique que Tsunade me había pedido investigar sobre un jutsu médico.
-¿Tu qué haces por acá? ¿Me estabas siguiendo?- pregunte mientras seguía leyendo.
-No, Sakura mira al otro lado de la ventana- mire y ahí estaba su puesto de comida favorita.
-icharaku…-
Ese día Naruto me invito una taza de café, me contaba que su padre le había comentado que su madre amaba el café en uno de sus encuentros con su difunto padre. Naruto estuvo muy poco tiempo con sus padres pero parecía conocerlos mucho. También había adquirido el gusto del café pero prefería el ramen.
Tal vez quería que me vea aquí y se sentara conmigo, tal vez lo quería a mi lado.
Naruto…
Todo había cambiado, ya éramos niños.
Termine mi tasa, me pare y me fui donde Tsunade para aceptar la misión. Ese día Naruto no fue a icharaku.
…
-Has estado trabando muy duro últimamente Naruto.- Me dijo la vieja Tsunade.
-debo hacerlo por el bien de konoha, si quiero ser hokage debo seguir en este ritmo.-
La vieja soltó una pequeña carcajada.
-¿Qué sucede?- le pregunte.
-Hace unos años te hubieras expresado de otra manera dattebayo.- pronuncio mi típica frase, era verdad, supongo que había cambiado un poco.
-sigo siendo el mismo abuela, ¡de veras!- sin duda había sonado forzado y falso.
La vieja sonrió.
-Naruto, tu sabes que está decidido que ya serás hokage, lo sabes desde que acabo la guerra.-
-No tienes que esforzarte tanto por ganarte a los demás, eso ya lo hiciste.- decía Tsunade.
-debo hacerlo, así soy yo abuela, además…
-naruto te preocupas mucho por los demás y no tienes mucho tiempo para ti mismo.- me interrumpió.
-sabes que no me gusta estar solo abuela, siempre estoy con alguien.- dije
-no me refiero a eso, es saludable buscar tu propia felicidad de vez en cuando Naruto.-
-proteger la aldea me hace feliz.- dije Tsunade estaba por decir algo pero entro Shizune con unos papeles.
-Aquí están las misiones que deben ser completadas.- decía mientras ponía los papeles en la mesa de la hokage.
- ¡Genial! Busquemos alguna misión interesante.-
Tsunade y Shizune me miraban, ¿tenía algún bicho en mi espalda o algo?
-Aquí hay una y parece que llenara mi bolsillo.- era una misión en solitario, la ojeaba, era perfecta para hacer buen dinero rápido, ¡esta es mía!
Shizune me quito el papel rápidamente.
-Está ya está tomada-
-oh, ¡diablos! ¿Quién la tomo?-
-Sakura-
-oh, Sakura chan.- Era de esperarse, tenía que ser alguien muy hábil, no era una misión muy fácil.
-Por cierto Sakura ha estado haciendo misiones en solitario por mucho tiempo.- comento Shizune.
-¿ah, sí?- decía con curiosidad.
-es verdad, parece que Sakura se esta aislando mucho, dios que chica, ¿desde cuando se puso tan antisocial?- ¿Sakura chan? ¿era cierto esto?
-¡No es cierto! Sakura es la misma.- me incomodaba que hablaran así de ella.
-Naruto ¿Cuándo fue la última vez que hablaste con ella?- la última vez…
No logre recordar.
-siempre está en el café al frente de icharaku-
-¿cuándo?- volvió a preguntar.
-…- no sabía que responder.
Me quede en silencio, no recordaba cuando. Olvide lo anterior y vi el montón de hojas, busque alguna misión interesante por ahí, la mayoría me parecían aburridas pero me traían recuerdos del equipo 7, lo que una vez parecía un poco atemorizante ahora parecía un mal chiste.
-Naruto, tomate un descanso.- dijo Tsunade poniendo su mano encima del pilar de papeles que revisaba.
-Pero Tsunade…-
-Naruto tomas 13 misiones por semana, ¡¡son casi dos por día!! Sé que estas lleno de energía pero te estás excediendo, por tu bien tomate un descanso esta semana.
-Tsunade no te preocupes por mí, la mayoría son pan comido- trataba de parecer lo mas fresco posible para que se notara mi seguridad.
-¡¡Naruto, Es una orden!!-
¡Maldita sea! Realmente quería una misión, no estaba cansado ni nada, podía seguir y seguir. Pero no podía desobedecer a la vieja, esta vez parecía ir enserio.
-Está bien, bueno me voy cuídense ¡adiós!- dije mientras salía por la puerta de su oficina.
Salí de la oficina del hokage de mal humor, no tenía una misión y me había enterado que Sakura se comportaba de manera diferente.
No lo entendía, Sakura…
Di todo para que seas feliz Sakura, aun así…
Perplejo era una buena palabra para describir lo que sentia.
Al ir caminando decidí pasar por la casa de Sakura. Quería saber de ella, y estaba al paso de mi casa.
Saltaba de techo en techo hasta llegar al edificio donde vivía Sakura.
Su nuevo departamento era bastante grande para una sola persona, ser héroe de guerra le había dando un impulso económico para independizarse.
Había dejado abierta su ventana, dormía afuera de su cama, nada la abrigaba del frio, destapada y estaba en ropa interior, chica descuidada. Puede agarrar un resfrió así.
Busque entre sus cosas una manta, al buscar por sus cajones me encontré la foto del equipo 7, estaba vieja y empolvada, la guarde y encontré una manta entre sus cosas después la tape.
-…zzz…zzz
Quería hablar contigo Sakura, pero al parecer estas cansada, es hora de irme.
-Naruto.- Sakura había despertado.
-Sakura chan- dije mirándola, la luz de luna bañaba su cuerpo, su hermosa piel blanca tenía un brillo especial, en sus pupilas se podía ver el reflejo de la luna que estaba a mis espaldas, no podía recordar imagen donde la vi más hermosa que ahora.
-Pasaba por acá y te vi durmiendo con la ventana abierta y con ropa interior, puedes resfriarte sabes-
-me dormí sin darme cuenta.- dijo mientras se paraba para encender las luces de su cuarto.
-sabes, hace un par de años te golpearía por verme así.- decía Sakura mientras buscaba su pijama.
-¿a que te refieres con así?-
-En ropa interior.- no pude evitarlo, mi cara probablemente estaba roja, pero apreciaba cada segundo viéndola así, era de una sensualidad elegante. La forma de su silueta despertaba en mi vehemente lujuria, pero mis demonios y pensamientos impuros estaban domados.
-a mi aun me incomoda.- dije dando unos cuantos pasos hacia atrás.
-¿incomoda? Naruto tu siempre querías ver a todas las chicas desnudas.- fue una costumbre que adquirí de Jiraiya.
-hmmp….- mire rápidamente a otro lado, exactamente hacia la ventana por donde entre, la luna ahora estaba frente a mí, no quería incomodarla aun si deseaba verla así por un poco más.
-aun si te viera desnuda y dormida no te haría nada Sakura.- pronuncie mientras observaba la inmensa luna.
-Lo sé, por eso ya no te golpeo.- dijo mientras se ponía su pijama celeste.
-ya puedes mirar, no era necesario que mires a otra parte, somos de confianza Naruto.- trate de interpretar eso como amigo, pero el pensamiento de poder ser su amante estallo en mi cabeza, no debía pensar así.
- es por buena educación Sakura, por más que seamos de confianza.- al decir eso Sakura me miro y alzo una ceja, no entendí que quería expresar aquella gesticulación.
-Supongo que maduramos un poco ¿no crees Sakura?- de alguna manera sentí que lo dije transmitiendo un poco de nostalgia.
-sí, eso creo…- hablo fríamente.
-es verdad, el próximo año cumpliremos 22.- dije, Sakura mientras tanto se sentó en la cama, la seguí y me senté a su lado.
Ella miraba en silencio hacia la ventana, en sus ojos se podía apreciar nuevamente la luna, su pálida piel parecía ser suave y frágil.
Aun la amo.
-Sakura…- se me salió mientras admiraba su belleza.
-¿qué sucede Naruto?- había girado su cabeza y sus ojos se conectaron con los míos, atónito por la magnitud de sus hermosos ojos, no pude pronunciar una palabra.
Paso un inquietante segundo en el cual nos mirábamos fijamente, recordé el motivo por el cual quería hablar con ella.
-estás haciendo otra misión en solitario, me preocupa que estés sola, ya vas casi un año y medio haciendo misiones en solitario y ya no sales con los demás de la academia.- hablaba mientras Sakura miraba sus rodillas luego me miraba a los ojos.
-estoy bien así, no te preocupes por mi.- dijo mientras ponía su mano en mi hombro.
-pero Sakura…- lo sentía, alguien que había pasado momentos en solitario podía saber cuando alguien se sentía desolado.
He renunciado mi propia felicidad para que tú seas feliz, he cumplida nuestra promesa para que seas feliz, te amo y no puedo verte así.
En su rostro podía leer soledad, no había duda. ¿Sakura porque no eres feliz si hice todo eso por ti?
Ojala hubiera tenido el coraje para decirle eso. ¡Sí! Todavía la amo ¿Por qué no puedo decirle lo que pienso?
-mañana tienes una misión, mejor me voy o iras con sueño.- dije cobardemente, Sakura no respondió.
-adiós Sakura chan duerme bien- dije mientras salía por su ventana, deseaba con ansias que me pidiera que me quedara un rato mas, no sucedió.
…
Lo vi salir por mi ventana, saltaba de techo en techo, cada vez más lejos.
Quería que se quede conmigo.
No.
Estoy bien así, al menos puedo seguirme mintiendo sínicamente a mi misma. Después de la visita de Naruto no pude conciliar el sueño. Estaba simplemente sola, lentamente me daba cuenta como se desgastaba mi relación con Naruto, ¿no era eso lo que realmente quería? ¿Olvidarlo? Pero si fuese así, significaría que no lo deseo a mi lado. Si estuviese ahí para él ¿podría hacerlo feliz? Es decir el es una leyenda viviente, será hokage. Y yo haciendo misiones en solitario.
No era nada, a comparación de él, era una ninja promedio, no podía estar con él.
Ha dado tanto por mí, ¿Qué podría hacer yo por él?
Dio su felicidad por mí…
A la mañana siguiente me fui a la misión, al volver voy proponer a Naruto que vayamos a una misión juntos, solo si tengo el valor de hacerlo. Lo hare ¡sin duda alguna!
alvich- Novato
- Mensajes : 37
Edad : 32
La Paz
0
Re: La Aldea: Capitulo 1
Que Linda la historia quiero conti!!!!
Sayo!! Cuidate
Kathita Haruno- Novato
- Mensajes : 21
Edad : 28
Konohagakure
0
Re: La Aldea: Capitulo 1
Esta buena la historia, algo confusa, sobre todo por la forma de aislarse de Sakura, parece que solo es una armadura para no salir lastimada, pero de que, de Naruto?
En cuanto a él, sigue amando a Sakura, sin embargo pareciera que estar lejos de ella es lo mejor y porque dices que sacrifico su felicidad por ella, tendrá que ver con sasuke?
Al final Sakura decidió hacer misiones con Naruto, solo espera su regreso, ojalá no pase algo y no se porque pienso que sí sucederá algo.
Leon- Sennin
- Mensajes : 1085
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