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Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
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Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Perdón por no haber comentado antes, no sabia que
ya habías subido el capitulo
ARRGGG odio, Odio, ODIO a Hinata, de seguro ella
fue la que mato a Menma, ya vez lo que dicen que
los borrachos y los niños siempre dicen la verdad
y pobre de Sakura , me pregunto que le estarán
haciendo
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
ya habías subido el capitulo
ARRGGG odio, Odio, ODIO a Hinata, de seguro ella
fue la que mato a Menma, ya vez lo que dicen que
los borrachos y los niños siempre dicen la verdad
y pobre de Sakura , me pregunto que le estarán
haciendo
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
mio-chan- Sannin
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Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Gracias Mio-Chan! Gracias a todos! Ya con 25 mensajes (ahora 26 XD) este se volvió mi primer tema "popular"! Se los agradezco mucho ;D Este finde voy a tratar de subir mas capis, es que estoy trabajando en este, en el de "Un Amor de Pelicula" y en el nuevo con Megumi T.T
Sheik- Jounin
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Colmillo De Sangre Capitulo 7: Una cita con el destino 29/09/13!
Capitulo 7: Una cita con el destino
Esa mañana soleada era el día perfecto para mí, ya que Sakura saldría del hospital. Su casa ya estaba casi arreglada, así que le diría la verdad, e Ino nos está preparando una cena, aunque me costó tomar la decisión de no ir a Ichiraku, al final habíamos quedado en ir a casa de Ino a las 8:00, pero primero pasaríamos por el parque y descansaríamos un rato. Era perfecto, a Sakura le encantaría.
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¿En serio pensé que eso iba a salir bien? Que inútil….
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Salí de la casa de Sakura, la cual ya estaba arreglada lo bastante para disimular lo que pasó hasta que yo decidiera decírselo y caminé tranquilamente hasta el hospital. Ni siquiera tuve que entrar. Ella estaba ahí mismo, en la entrada del hospital, con un vestido blanco hasta la mitad de los muslos de encaje, unas sandalias y un sombrero blanco. Tenía su cabello atado en una coleta baja y sus ojos resplandecían con rayo de sol que tomaban prestado tímidamente.
Me acerqué a ella, todavía observando su figura delineada con ese vestido que le sentaba perfectamente, hasta que mis pensamientos se vieron interrumpidos por un ardor momentáneo.
¡Baka! ¡Acabo de salir del hospital y así me recibes! – Sakura me había pegado una cachetada pensando que yo estaba mirando…. Oh, rayos –
¡N-no! ¡No es lo que crees Sakura-Chan! – Ella se dio media vuelta y se cruzó de brazos, dándome la espalda – Etto… Lo lamento… pero… - miré mi mano izquierda y recordé - ¡Te traje esto! - había perdido la mitad de mi orgullo, así que simplemente estiré mi brazo y mirando al suelo le mostré un buqué de jazmines que había juntado para ella. Se dio la vuelta y los tomó, sonrojándose. –
Je…. Baka… - dijo mientras los acercaba a su pecho e intentaba mirar hacia otro lado tímidamente. Le hice una pequeña reverencia y luego nos fuimos caminando hacia un puesto de helados. Comimos y después nos dirigimos a su casa. Entramos y nos sentamos en el sofá, mientras hablábamos –
Y… ¿Pasó algo interesante mientras yo no estaba? – dijo pícaramente. Pero aunque reconocí que era una simple broma, pensé instantáneamente en mi “encuentro” con Hinata, y me puse cada vez más nervioso –
Eh… N-no, nada interesante… - dije con la mirada perdida –
¿Te pasa algo? – preguntó inocentemente, a lo que solo logré mover mi cabeza hacia los lados y decirle que estaba cansado –
Unas horas pasaron hasta que fueron y las 4:30. La sorpresa iba a ser muy pronto, así que decidí ir a caminar para “eliminar” los nervios. A decir verdad, había intentado ir a citas con Sakura, pero era mucho más joven y siempre las arruinaba. Pero esta vez, esta vez sería distinto. Sería la mejor cita de todas.
En el transcurso de mi caminata, decidí pasar por la casa de Kiba, a ver si se encontraba mejor. Hablé con él un rato, y mientras lo hacía, me di cuenta del dolor que escondía en esa sonrisa falsa. Casi podría decir que era una copia de la de Sai. Traté de animarlo con indirectas, pero no logré hacerlo. Unas horas después, miré mi reloj y me di cuenta de que ya eran las 6:00.
Kiba… debo irme – el alzó la mirada débilmente y luego asintió – Si necesitas algo… no dudes en pedirlo – dije esto y luego me despedí de él. En verdad me daba lástima, pero ya no sabía qué hacer y tenía que ir a buscar a Sakura, así que partí al instante –
Me había quedado hablando con Kiba 2 horas, y ahora debía distraer a Sakura hasta lograr llevarla al parque y luego a la cena. Fui a su casa y toque la campana.
¿Hm…? – abrió la puerta lentamente hasta que me vio – Ah, hola Naruto, ¿Olvidaste tu llave otra vez? –
Etto, no… - hice una pausa y me acerque a ella con cuidado – Sakura-Chan… ¿Quisieras…. Tener una cita conmigo? – le dije tímida pero decididamente –
… -
Muy bien, pero espera que me cambie – al decir esto, ahogué un grito de alegría en mi garganta, y luego me di cuenta de la ropa que llevaba puesta. Un simple juego de mi clásico buzo naranja favorito y un pantalón del mismo color con rayas negras. Fui corriendo hacia mi cuarto y cerré la puerta para que Sakura se sintiera con más privacidad y yo también. Abrí el armario y comencé a revolver toda la ropa hasta que encontré lo que quería. Una camiseta manga corta naranja con rayas negras que dejaban ver un poco de mi físico bastante trabajado, pero no mucho, a juego con un pantalón de Jean negro y unas zapatillas del mismo color marca DC. Lucía bastante bien, así que decidí salir.
Abrí la puerta y fui a la sala a esperar a Sakura. No tardó tanto como Ino cuando fuimos a ver una película con ella, Kiba, Hinata, Neji y Tenten el otro día, pero se veía radiante. Ante mí, puedo jurar que vi a un ángel. Más bien, a Sakura. Llevaba un vestido corto, un poco más alto que las rodillas, color rosa claro, el cual estaba agarrado de uno de sus hombros en forma de flor y un cinturón negro, unos tacones rosados claro y usaba su hermoso cabello rosado suelto, el cual le caía sobre los hombros.
¿Está bien así? – preguntó dudosa mientras se miraba –
T-te vez hermosa… - no se veía simplemente hermosa, se veía radiante. Parecía un ángel recién llegado del cielo. Estaba simplemente bellísima, pero mi cerebro no logró reaccionar tan rápido, así que solo le dije eso y me sonrió dulcemente – Gracias, tu también te vez muy bien – me dijo mientras me examinaba –
Comenzamos a caminar mientras hablábamos. Los hombres me daban una mirada de odio y celos que debo admitir que se sentía muy bien, y las jóvenes murmuraban cosas que Sakura ni siquiera tomaba en cuenta. Simplemente caminábamos mientras yo veía sus hermosos ojos jade y me perdía en ellos. Ya eran las 6:50, y decidí que ya era tiempo de llevar a Sakura al parque.
¿A dónde vamos? – me preguntó curiosamente –
Ya verás… - le dije con un aire misterioso –
Ella simplemente se dejó llevar hasta que llegamos a un parque rodeado de cerezos, con una gran fuente en el medio y bancos alrededor de esta. Había luces colgando de los árboles y un puente cruzando un pequeño arrollo. Sakura se quedó maravillada con el lugar, y yo, con ella. Caminamos por el puente, hablamos y tiramos monedas a la fuente. Todo era perfecto. Hasta que algo que yo no tenía planeado sucedió.
Oye, entonces que es lo que… - Sakura me hablaba animadamente. Pero en ese momento, vio algo que borró la hermosa sonrisa en su rostro – Sa… ¿Sasuke? – dijo en tono asustado, agarrándose de mi hombro. Mi cerebro procesó unos momentos sus palabras, hasta que me di la vuelta y las comprendí –
Unos metros detrás de mí, se encontraba Sasuke, con una chaqueta negra, una camisa y un pantalón de jean. Tenía un extraño tatuaje en el cuello que yo no había notado la última vez que lo vi y una expresión tranquila en su rostro.
¿¡Que haces aquí!? – Preguntó asustada Sakura mientras se posicionaba detrás de mí –
Hmp… que descortés de tu parte Sakura… viniste con alguien más… - dijo con voz relajada –
¿D-de que hablas? –
Te deje una nota… ¿No lo recuerdas? – cuando dijo esto, comprendí exactamente sus palabras –
“Necesito hablar contigo de lo que pasó.
Te veo en el parque a las 7:30, mañana.
No faltes, XXX”
¿¡El había dejado esa nota?! – pensé para mi mismo –
Aléjate Sasuke, no dejaré que le hagas daño – le dije poniéndome en posición de pelea, aunque a decir verdad, estaba muy tenso –
No vengo a hacerle daño…. Aún – al decir esto, me sentí muy frustrado. Mi corazón comenzó a latir con fuerza, y mi cabeza comenzó a doler –
Arghh… - solté un gemido de dolor, al tiempo al que Sasuke ponía su media sonrisa y se iba acercando a Sakura. Rápidamente le lanzé un golpe, pero él lo esquivó fácilmente y luego me caí al suelo débilmente, lanzando otro gemido mientras comenzaba a ver una imagen borrosa de Sakura intentando evadir a Sasuke, diciendo mi nombre. –
Desperté para ver una horrible imagen de Sasuke desmoronado en el suelo y Sakura con manchas de sangre en su cuerpo y una expresión horrorizada. Me levanté forzosamente para acercarme al instante a revisar a Sakura. Pero esta se encontraba paralizada. Más bien, pálida. Mirándome con sus bellísimos ojos, los cuales ya no estaban llenos de dulzura y compasión. Estaban vacíos. Pude verlo en su mirada. No eran nada más que el reflejo del terror puro.
Sakura… ¿Estás bien…? – le pregunté débilmente. Esperé unos momentos, pero no me contestaba. Simplemente me miraba con sus ojos bien abiertos – Sakura-Chan… ¿Qué pasa? –
Reaccionó bruscamente cuando mencioné el “Chan” detrás de su nombre. Pero no me habló. Simplemente se largó a llorar y me abrazó con todas sus fuerzas. No entendía que pasaba, estaba completamente perdido.
Na-Naruto… - dijo por fin, limpiándose las lágrimas – T-tu…. – en ese momento se detuvo –
¿Qué? ¿Qué pasó Sakura-Chan? – ella me miró, seriamente. Tenía la respiración entrecortada y su vestido estaba un poco roto y desgastado –
S-Sasuke tomó mi muñeca y se acercó a mi… - Sakura miró a Sasuke – intenté alejar mi rostro de él, pero tomó mi barbilla con la otra mano y me hizo un pequeño corte en el cuello. Luego comenzó a… lamer mi cuello – mi corazón se estrujó un poco al oír esto último – Pero en ese momento… t-tú te levantaste y te lanzaste sobre Sasuke… -
N-Naruto… - decía débilmente Sakura mientras Sasuke miraba a Naruto quien comenzaba a levantarse sin soltarla –
Hmp… - dijo desinteresado mientras acercaba un pequeño cuchillo al vientre de Sakura –
En ese momento, Naruto lanzó un extraño gemido, como si fuera un rugido mezclado con dolor, y se abalanzó sobre Sasuke. Intentó golpearlo, aunque a este al principio no le importaba mucho luego se aterrorizó cuando esquivó un golpe que fue a parar a una pequeña pared de cemento. El puño del rubio sangraba, pero no parecía importarle. Tenía una mirada sádica y asesina. Sasuke me soltó, dejándome tumbada en el suelo e intentó pelear con Naruto, pero era imposible. Naruto le dio dos golpes que fueron los suficientes para acabar con el joven en el piso, sangrando. Al terminar con este, miró a Sakura y se acercó a ella.
N-Naruto… Por favor… no… - dijo mientras temblaba la joven –
Naruto comenzó a gemir de dolor y se agarró la cabeza, mientras lo hacía, llegó a rasguñar a Sakura, dejándole un gran tajo en la pierna, ya que, de una forma extraña, a parte de su personalidad “salvaje”, le habían crecido más las uñas y otros rasgos faciales, sin mencionar sus dientes, los cuales se habían convertido en colmillos. Después de esto, se desmayo en el suelo y….
E-eso fue lo que pasó… - dijo comenzando a llorar de nuevo, El joven, solo pudo ver otro de los colmillos que había encontrado, hundido en la sangre de Sasuke. Solo que ahora, había comprendido todo… -
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Cha-Chaaan! Si, se que no es muy largo, y que les debo mas, pero estuve trabajando muy duro en este. Espero que les hayan gustado las imágenes que les dejé :3
Como siempre acepto todo tipo de sugerencias y comentarios ;D
Esa mañana soleada era el día perfecto para mí, ya que Sakura saldría del hospital. Su casa ya estaba casi arreglada, así que le diría la verdad, e Ino nos está preparando una cena, aunque me costó tomar la decisión de no ir a Ichiraku, al final habíamos quedado en ir a casa de Ino a las 8:00, pero primero pasaríamos por el parque y descansaríamos un rato. Era perfecto, a Sakura le encantaría.
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¿En serio pensé que eso iba a salir bien? Que inútil….
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Salí de la casa de Sakura, la cual ya estaba arreglada lo bastante para disimular lo que pasó hasta que yo decidiera decírselo y caminé tranquilamente hasta el hospital. Ni siquiera tuve que entrar. Ella estaba ahí mismo, en la entrada del hospital, con un vestido blanco hasta la mitad de los muslos de encaje, unas sandalias y un sombrero blanco. Tenía su cabello atado en una coleta baja y sus ojos resplandecían con rayo de sol que tomaban prestado tímidamente.
- Vestido:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
- Sombrero y peinado de Sakura:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Me acerqué a ella, todavía observando su figura delineada con ese vestido que le sentaba perfectamente, hasta que mis pensamientos se vieron interrumpidos por un ardor momentáneo.
¡Baka! ¡Acabo de salir del hospital y así me recibes! – Sakura me había pegado una cachetada pensando que yo estaba mirando…. Oh, rayos –
¡N-no! ¡No es lo que crees Sakura-Chan! – Ella se dio media vuelta y se cruzó de brazos, dándome la espalda – Etto… Lo lamento… pero… - miré mi mano izquierda y recordé - ¡Te traje esto! - había perdido la mitad de mi orgullo, así que simplemente estiré mi brazo y mirando al suelo le mostré un buqué de jazmines que había juntado para ella. Se dio la vuelta y los tomó, sonrojándose. –
Je…. Baka… - dijo mientras los acercaba a su pecho e intentaba mirar hacia otro lado tímidamente. Le hice una pequeña reverencia y luego nos fuimos caminando hacia un puesto de helados. Comimos y después nos dirigimos a su casa. Entramos y nos sentamos en el sofá, mientras hablábamos –
Y… ¿Pasó algo interesante mientras yo no estaba? – dijo pícaramente. Pero aunque reconocí que era una simple broma, pensé instantáneamente en mi “encuentro” con Hinata, y me puse cada vez más nervioso –
Eh… N-no, nada interesante… - dije con la mirada perdida –
¿Te pasa algo? – preguntó inocentemente, a lo que solo logré mover mi cabeza hacia los lados y decirle que estaba cansado –
Unas horas pasaron hasta que fueron y las 4:30. La sorpresa iba a ser muy pronto, así que decidí ir a caminar para “eliminar” los nervios. A decir verdad, había intentado ir a citas con Sakura, pero era mucho más joven y siempre las arruinaba. Pero esta vez, esta vez sería distinto. Sería la mejor cita de todas.
En el transcurso de mi caminata, decidí pasar por la casa de Kiba, a ver si se encontraba mejor. Hablé con él un rato, y mientras lo hacía, me di cuenta del dolor que escondía en esa sonrisa falsa. Casi podría decir que era una copia de la de Sai. Traté de animarlo con indirectas, pero no logré hacerlo. Unas horas después, miré mi reloj y me di cuenta de que ya eran las 6:00.
Kiba… debo irme – el alzó la mirada débilmente y luego asintió – Si necesitas algo… no dudes en pedirlo – dije esto y luego me despedí de él. En verdad me daba lástima, pero ya no sabía qué hacer y tenía que ir a buscar a Sakura, así que partí al instante –
Me había quedado hablando con Kiba 2 horas, y ahora debía distraer a Sakura hasta lograr llevarla al parque y luego a la cena. Fui a su casa y toque la campana.
¿Hm…? – abrió la puerta lentamente hasta que me vio – Ah, hola Naruto, ¿Olvidaste tu llave otra vez? –
Etto, no… - hice una pausa y me acerque a ella con cuidado – Sakura-Chan… ¿Quisieras…. Tener una cita conmigo? – le dije tímida pero decididamente –
… -
Muy bien, pero espera que me cambie – al decir esto, ahogué un grito de alegría en mi garganta, y luego me di cuenta de la ropa que llevaba puesta. Un simple juego de mi clásico buzo naranja favorito y un pantalón del mismo color con rayas negras. Fui corriendo hacia mi cuarto y cerré la puerta para que Sakura se sintiera con más privacidad y yo también. Abrí el armario y comencé a revolver toda la ropa hasta que encontré lo que quería. Una camiseta manga corta naranja con rayas negras que dejaban ver un poco de mi físico bastante trabajado, pero no mucho, a juego con un pantalón de Jean negro y unas zapatillas del mismo color marca DC. Lucía bastante bien, así que decidí salir.
- Camiseta de Naruto:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Abrí la puerta y fui a la sala a esperar a Sakura. No tardó tanto como Ino cuando fuimos a ver una película con ella, Kiba, Hinata, Neji y Tenten el otro día, pero se veía radiante. Ante mí, puedo jurar que vi a un ángel. Más bien, a Sakura. Llevaba un vestido corto, un poco más alto que las rodillas, color rosa claro, el cual estaba agarrado de uno de sus hombros en forma de flor y un cinturón negro, unos tacones rosados claro y usaba su hermoso cabello rosado suelto, el cual le caía sobre los hombros.
- Vestido de Sakura :
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Es como este pero mas clarito :3
- Zapatos:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
¿Está bien así? – preguntó dudosa mientras se miraba –
T-te vez hermosa… - no se veía simplemente hermosa, se veía radiante. Parecía un ángel recién llegado del cielo. Estaba simplemente bellísima, pero mi cerebro no logró reaccionar tan rápido, así que solo le dije eso y me sonrió dulcemente – Gracias, tu también te vez muy bien – me dijo mientras me examinaba –
Comenzamos a caminar mientras hablábamos. Los hombres me daban una mirada de odio y celos que debo admitir que se sentía muy bien, y las jóvenes murmuraban cosas que Sakura ni siquiera tomaba en cuenta. Simplemente caminábamos mientras yo veía sus hermosos ojos jade y me perdía en ellos. Ya eran las 6:50, y decidí que ya era tiempo de llevar a Sakura al parque.
¿A dónde vamos? – me preguntó curiosamente –
Ya verás… - le dije con un aire misterioso –
Ella simplemente se dejó llevar hasta que llegamos a un parque rodeado de cerezos, con una gran fuente en el medio y bancos alrededor de esta. Había luces colgando de los árboles y un puente cruzando un pequeño arrollo. Sakura se quedó maravillada con el lugar, y yo, con ella. Caminamos por el puente, hablamos y tiramos monedas a la fuente. Todo era perfecto. Hasta que algo que yo no tenía planeado sucedió.
Oye, entonces que es lo que… - Sakura me hablaba animadamente. Pero en ese momento, vio algo que borró la hermosa sonrisa en su rostro – Sa… ¿Sasuke? – dijo en tono asustado, agarrándose de mi hombro. Mi cerebro procesó unos momentos sus palabras, hasta que me di la vuelta y las comprendí –
Unos metros detrás de mí, se encontraba Sasuke, con una chaqueta negra, una camisa y un pantalón de jean. Tenía un extraño tatuaje en el cuello que yo no había notado la última vez que lo vi y una expresión tranquila en su rostro.
¿¡Que haces aquí!? – Preguntó asustada Sakura mientras se posicionaba detrás de mí –
Hmp… que descortés de tu parte Sakura… viniste con alguien más… - dijo con voz relajada –
¿D-de que hablas? –
Te deje una nota… ¿No lo recuerdas? – cuando dijo esto, comprendí exactamente sus palabras –
“Necesito hablar contigo de lo que pasó.
Te veo en el parque a las 7:30, mañana.
No faltes, XXX”
¿¡El había dejado esa nota?! – pensé para mi mismo –
Aléjate Sasuke, no dejaré que le hagas daño – le dije poniéndome en posición de pelea, aunque a decir verdad, estaba muy tenso –
No vengo a hacerle daño…. Aún – al decir esto, me sentí muy frustrado. Mi corazón comenzó a latir con fuerza, y mi cabeza comenzó a doler –
Arghh… - solté un gemido de dolor, al tiempo al que Sasuke ponía su media sonrisa y se iba acercando a Sakura. Rápidamente le lanzé un golpe, pero él lo esquivó fácilmente y luego me caí al suelo débilmente, lanzando otro gemido mientras comenzaba a ver una imagen borrosa de Sakura intentando evadir a Sasuke, diciendo mi nombre. –
Desperté para ver una horrible imagen de Sasuke desmoronado en el suelo y Sakura con manchas de sangre en su cuerpo y una expresión horrorizada. Me levanté forzosamente para acercarme al instante a revisar a Sakura. Pero esta se encontraba paralizada. Más bien, pálida. Mirándome con sus bellísimos ojos, los cuales ya no estaban llenos de dulzura y compasión. Estaban vacíos. Pude verlo en su mirada. No eran nada más que el reflejo del terror puro.
Sakura… ¿Estás bien…? – le pregunté débilmente. Esperé unos momentos, pero no me contestaba. Simplemente me miraba con sus ojos bien abiertos – Sakura-Chan… ¿Qué pasa? –
Reaccionó bruscamente cuando mencioné el “Chan” detrás de su nombre. Pero no me habló. Simplemente se largó a llorar y me abrazó con todas sus fuerzas. No entendía que pasaba, estaba completamente perdido.
Na-Naruto… - dijo por fin, limpiándose las lágrimas – T-tu…. – en ese momento se detuvo –
¿Qué? ¿Qué pasó Sakura-Chan? – ella me miró, seriamente. Tenía la respiración entrecortada y su vestido estaba un poco roto y desgastado –
S-Sasuke tomó mi muñeca y se acercó a mi… - Sakura miró a Sasuke – intenté alejar mi rostro de él, pero tomó mi barbilla con la otra mano y me hizo un pequeño corte en el cuello. Luego comenzó a… lamer mi cuello – mi corazón se estrujó un poco al oír esto último – Pero en ese momento… t-tú te levantaste y te lanzaste sobre Sasuke… -
N-Naruto… - decía débilmente Sakura mientras Sasuke miraba a Naruto quien comenzaba a levantarse sin soltarla –
Hmp… - dijo desinteresado mientras acercaba un pequeño cuchillo al vientre de Sakura –
En ese momento, Naruto lanzó un extraño gemido, como si fuera un rugido mezclado con dolor, y se abalanzó sobre Sasuke. Intentó golpearlo, aunque a este al principio no le importaba mucho luego se aterrorizó cuando esquivó un golpe que fue a parar a una pequeña pared de cemento. El puño del rubio sangraba, pero no parecía importarle. Tenía una mirada sádica y asesina. Sasuke me soltó, dejándome tumbada en el suelo e intentó pelear con Naruto, pero era imposible. Naruto le dio dos golpes que fueron los suficientes para acabar con el joven en el piso, sangrando. Al terminar con este, miró a Sakura y se acercó a ella.
N-Naruto… Por favor… no… - dijo mientras temblaba la joven –
Naruto comenzó a gemir de dolor y se agarró la cabeza, mientras lo hacía, llegó a rasguñar a Sakura, dejándole un gran tajo en la pierna, ya que, de una forma extraña, a parte de su personalidad “salvaje”, le habían crecido más las uñas y otros rasgos faciales, sin mencionar sus dientes, los cuales se habían convertido en colmillos. Después de esto, se desmayo en el suelo y….
E-eso fue lo que pasó… - dijo comenzando a llorar de nuevo, El joven, solo pudo ver otro de los colmillos que había encontrado, hundido en la sangre de Sasuke. Solo que ahora, había comprendido todo… -
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Cha-Chaaan! Si, se que no es muy largo, y que les debo mas, pero estuve trabajando muy duro en este. Espero que les hayan gustado las imágenes que les dejé :3
Como siempre acepto todo tipo de sugerencias y comentarios ;D
Sheik- Jounin
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En mi esquinilla, comiendo helado en Narnia ?)
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Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
eh ? que rayos es naruto ? creo que fue con loa de hinata ?
moi-06yoyo- Sennin
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cuarto de sakura en su cama con ella
102064
Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Wow te juro que con cada capitulo me dan mas
ganas de leer mas y mas, cada vez se pone mas
interesante, y porque le habrá pasado eso a Naruto?
y porque fue el $$&%$ Sasuke? ashh tenia que
arruinar la cita de Naruto y Sakura
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
ganas de leer mas y mas, cada vez se pone mas
interesante, y porque le habrá pasado eso a Naruto?
y porque fue el $$&%$ Sasuke? ashh tenia que
arruinar la cita de Naruto y Sakura
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
mio-chan- Sannin
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Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Aww, Mio-Chan, tu siempre tan al tanto! Jaja XD
Ya se los explicaré todo amigosh ?)
Ya se los explicaré todo amigosh ?)
Sheik- Jounin
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En mi esquinilla, comiendo helado en Narnia ?)
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Colmillo de Sangre Capitulo 8: Revelaciones del pasado 12/10/13
Capitulo 8: Revelaciones del pasado
Llevé a Sakura hacia el hospital ya que podría haber tenido alguna herida y me alejé tanto como pude, dejándola en manos de Ino y Tsunade. Tenía tanto que pensar…
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No puedo creer que haya tardado tanto en darme cuenta….
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Me dirigí hacia mi apartamento y cerré la puerta con llave para eliminar toda distracción. Luego, fui a mi habitación y abrí la compuerta del techo que daba al ático, desplegando unas escaleras de madera polvorientas. Subí por ellas y me hundí en una profunda oscuridad hasta que encontré el interruptor de la luz. Solo había estado en ese cuarto unas 3 o 4 veces. Era como algo nuevo para mí. El lugar era una habitación no muy grande, llena de cajas y objetos viejos desparramados por doquier, dejando a penas espacio para caminar. Me acerqué cuidadosamente a una estantería y de ella saqué una caja, la cual contenía un par de fotos, documentos, cuadernos y algunos álbumes de fotos. Tomé uno de los álbumes y de un soplido una ráfaga de polvo voló por los aires. Lo abrí y pude ver unas cuantas fotos de mis padres, pero muy pocas de ellos conmigo. Luego, lo cerré intentando ahogar alguna que otra lágrima que amenazaba con salir de mis ojos. Después revolví un poco la caja mientras me sentaba en el suelo hasta que encontré el diario de mi madre.
“Querido diario:
Hoy uno de los idiotas de la clase me molestó, como siempre. ¡Y lo peor es que el debilucho de Minato se burló de mí! Igualmente, les dí una paliza… ¡Ja! ¡Nadie puede conmigo! ¡ttebane! ¡Mañana serán los exámenes Chunnin y voy a ganarles a todos! ¡De veras!”
Deje de leer un momento para pasar a la siguiente página mientras una pequeña sonrisa nostálgica se me escapaba de las manos, seguida por unas cuantas lágrimas agridulces.
“Tengo que admitir que… siento algo cuando Minato está cerca… ¡Pero no me gusta! ¡Solo es un inútil debilucho! Como sea… tuvimos los exámenes Chunnin y…”
Volví a pasar de página varias veces hasta que encontré lo que quería.
“Querido diario:
Llevo años escribiendo aquí ya que es mi única fuente de privacidad ahora. Las guerras continúan y me preocupa Minato y nuestro hijo… Además, la misión que se le ha dado es muy peligrosa, y temo que pueda afectarlo… “
Pase una sola página más, la última escrita muy lentamente y con los ojos abiertos esperando respuestas a mis preguntas.
“No… no es posible…. Minato tendrá que sellarlo dentro de Naruto… Dejaré los papeles por si alguien los encuentra o necesita… Lo extrañaré mucho… Y si algún día vez esto… quiero que sepas que te amamos, hijo”
Tomé el sobre que estaba en la hoja y las lágrimas comenzaron a correr a cataratas por mi rostro. Intenté secarlas y luego abrí cuidadosamente el sobre. En el estaban todos mis documentos. Los leí al pie de la letra hasta que encontré el que decía la respuesta que yo necesitaba.
“Uzumaki Naruto Namikaze, clase B, sangre AB+, Clasificación: Contenedor. 鞍馬,Kyuubi…”
No necesitaba ver nada más. Mi cabeza comenzó a dar vueltas después de esa revelación de la cual solo había oído unas veces y no pude controlar el llanto. El dolor se apoderó de mí y todos mis pensamientos se borraron. Me había transformado de nuevo, solo que esta vez, estaba despierto.
No podía moverme. En efecto, mi cuerpo se movía, pero yo no lo controlaba. Me dolía todo y a pesar de que podía ver a mí alrededor, veía borroso y no podía fijar una dirección. El cuerpo caminó de forma extrañamente rápida por la casa, tirando y destruyendo cosas al pasar. Por un instante pude ver mi reflejo en el espejo al pasar por ahí. Pero ese ya no era yo. Era otra cosa, que poseía mi cuerpo. Mis ojos estaban completamente rojos y tenía un aspecto raro. Abrí la boca para soltar un tipo de rugido y logré ver unos largos colmillos asomándose de mi dentadura. Pero lo que me llamó la atención, fue que había dos faltantes. Después recordé los dos colmillos ensangrentados que había encontrado luego de mis constantes desmayos y un extraño escalofrío recorrió mi cuerpo.
En eso, la puerta sonó en el peor momento, porque mi cuerpo se acercó a la puerta y de un puñetazo la hizo pedazos, revelando a Shizune detrás de la puerta, quien salió disparada cayendo al suelo luego de un golpe. Grité e intenté ayudarla pero mi voz no sonó y no podía moverme en absoluto. Las personas que pasaban por ahí se acercaron a ella con horror y luego mi cuerpo golpeó a uno de los hombres.
Arghh… Naruto… - decía Shizune en su intento de no desmayarse por el impacto mientras las demás personas corrían a buscar ayuda –
Mientras ellos iban a buscarla, el cuerpo se lanzó contra un árbol, aterrizando sobre este y partiéndolo a la vez que caía intacto sobre el suelo. Luego, comencé a correr por la aldea, atropellando a todo el que estuviera en mi camino sin importar quien fuese. Hasta que, me topé con la persona que menos esperaba. Sakura.
Al intentar “atropellarla”, a pesar de que se encontraba de espaldas, de alguna forma se dio cuenta de que iba para allá y me detuvo con su increíble fuerza, posando su mano en mí pecho, lo cual, lamentablemente, no pude sentir, ya que no controlaba el cuerpo ni lo poseía en ese momento.
Na…ruto? – Miro a mis ojos con curiosidad y un poco de temor a la vez, y sentí como su mirada penetraba mi alma –
Las otras personas simplemente se quedaron mirando asustadas mientras la kunochi detenía a mi otro “yo” y lo investigaba bruscamente.
Sa…Sakura-Chan… - exclamé con la poca voz que tenía, ya que no podía sentir mi garganta tampoco –
De alguna manera, Sakura escuchó mis débiles palabras, pero las demás personas no lo hicieron.
¡Naruto! – tomó el cuerpo por los hombros y comenzó a sacudirlo levemente hasta que este reaccionó con un gruñido y con sus garras arañó a Sakura, haciendo saltar varias gotas de sangre de ella. Pero sin embargo, a Sakura no le importó e intentó mantenerme quieto –
Mientras Sakura luchaba por mantener mi cuerpo en su lugar, Tsunade llegó rodeada de ninjas. Se veía extrañada y sin dudarlo se acercó rápidamente hacia el centro del círculo de gente que se había formado a nuestro alrededor.
¡Sakura! ¿¡De que se trata este alboroto!? – Tsunade se abrió paso entre la gente a codazos –
Hokage-Sama, Naruto está teniendo algún tipo de… convulsiones – Shizune apareció con una venda en el brazo y respondió antes de que Sakura pudiera decir palabra –
Tsunade se acercó al cuerpo y lo miró con una mirada aterradora. Luego lo examinó de pies a cabeza, hasta que lanzó un extraño rugido que la desconcertó un poco. Luego, se alejó unos pasos sin quitar su mirada de mí y le susurró algo a Shizune.
Varias personas se acercaron a mí y me ataron forzosamente las manos detrás de la espalda para luego guiarme hacia el laboratorio.
Me posicionaron contra una tabla de metal, boca arriba y me apuntaron con unas fuertes luces. Mi cuerpo se retorcía y de un momento a otro sentí un fuerte pinchazo. Al cabo de unos segundos comencé a ver borroso hasta que todo se desvaneció lentamente y me hundí en un profundo silencio. Todo lo que pasaba por mi mente en ese momento se borró durante unos minutos, hasta que mi vista regreso y, milagrosamente, mi cuerpo, también.
Me desperté a adolorido, pero pude sentir al instante que ya no me encontraba sobre el frío metal. No, ahora estaba sobre algo suave… era una cama. Me encontraba en casa de Sakura-Chan. Cuando pude ver más claramente, logré verla parada en frente del espejo, de espaldas a mí. Estaba sosteniendo una foto de “El equipo 7” contra su pecho mientras de sus hermosos ojos esmeraldas salían lágrimas agrias.
¿Sa…Kura-Chan? – dije débilmente –
Una sonrisa se dibujó en el rostro de Sakura mientras sus ojos se llenaban de lágrimas otra vez. Se dio media vuelta y se abalanzó hacia mí, estrujándome con su increíble fuerza contra su pecho mientras lloraba sobre mí.
Sakura-Chan… ¡! – Dije mientras intentaba detener con todas mis fuerza un sangrado de nariz. Sakura se encontraba en ropa interior y no se había dado cuenta de que estaba aplastando sus pechos los cuales estaban vestidos solamente con un fino sostén color crema contra mi cabeza –
Ella detuvo las lágrimas de sus ojos por un segundo sin abandonar su hermosa sonrisa de felicidad y se separó de mí.
Lo lamento Naruto, yo…. – al alejarse, pudo verme completamente rojo e hipnotizado mientras admiraba su bella figura –
… -
¡BAKA! – Sakura me pegó una cachetada mientras se tapaba rápidamente con sus sabanas. Ahora su mirada era una mezcla de vergüenza y felicidad –
¡Lo lamento Sakura-Chan, yo no quise…! – No me dejó terminar cuando, aún tapada con las sabanas, por supuesto, me dio un fuerte abrazo al cual yo correspondí -
Ja… Pensé que nunca te volvería a ver… - dijo ocultando un poco su rostro sonrojado –
¿Eh? ¿De qué hablas? – le pregunté volviendo a la normalidad –
Bueno… estuviste dormido por una semana y dos días… -
¿¡Que!? –
Je... – Sakura bajó su mirada un poco – Te extrañé baka… -
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Hola a todos! Se que no fue muy largo pero trabajé un montón en el u,u
Espero que les haya gustado, como siempre acepto todo tipo de criticas y comentarios. Ah y, felicitaciones a los nuevos moderadores!
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Llevé a Sakura hacia el hospital ya que podría haber tenido alguna herida y me alejé tanto como pude, dejándola en manos de Ino y Tsunade. Tenía tanto que pensar…
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No puedo creer que haya tardado tanto en darme cuenta….
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Me dirigí hacia mi apartamento y cerré la puerta con llave para eliminar toda distracción. Luego, fui a mi habitación y abrí la compuerta del techo que daba al ático, desplegando unas escaleras de madera polvorientas. Subí por ellas y me hundí en una profunda oscuridad hasta que encontré el interruptor de la luz. Solo había estado en ese cuarto unas 3 o 4 veces. Era como algo nuevo para mí. El lugar era una habitación no muy grande, llena de cajas y objetos viejos desparramados por doquier, dejando a penas espacio para caminar. Me acerqué cuidadosamente a una estantería y de ella saqué una caja, la cual contenía un par de fotos, documentos, cuadernos y algunos álbumes de fotos. Tomé uno de los álbumes y de un soplido una ráfaga de polvo voló por los aires. Lo abrí y pude ver unas cuantas fotos de mis padres, pero muy pocas de ellos conmigo. Luego, lo cerré intentando ahogar alguna que otra lágrima que amenazaba con salir de mis ojos. Después revolví un poco la caja mientras me sentaba en el suelo hasta que encontré el diario de mi madre.
“Querido diario:
Hoy uno de los idiotas de la clase me molestó, como siempre. ¡Y lo peor es que el debilucho de Minato se burló de mí! Igualmente, les dí una paliza… ¡Ja! ¡Nadie puede conmigo! ¡ttebane! ¡Mañana serán los exámenes Chunnin y voy a ganarles a todos! ¡De veras!”
Deje de leer un momento para pasar a la siguiente página mientras una pequeña sonrisa nostálgica se me escapaba de las manos, seguida por unas cuantas lágrimas agridulces.
“Tengo que admitir que… siento algo cuando Minato está cerca… ¡Pero no me gusta! ¡Solo es un inútil debilucho! Como sea… tuvimos los exámenes Chunnin y…”
Volví a pasar de página varias veces hasta que encontré lo que quería.
“Querido diario:
Llevo años escribiendo aquí ya que es mi única fuente de privacidad ahora. Las guerras continúan y me preocupa Minato y nuestro hijo… Además, la misión que se le ha dado es muy peligrosa, y temo que pueda afectarlo… “
Pase una sola página más, la última escrita muy lentamente y con los ojos abiertos esperando respuestas a mis preguntas.
“No… no es posible…. Minato tendrá que sellarlo dentro de Naruto… Dejaré los papeles por si alguien los encuentra o necesita… Lo extrañaré mucho… Y si algún día vez esto… quiero que sepas que te amamos, hijo”
Tomé el sobre que estaba en la hoja y las lágrimas comenzaron a correr a cataratas por mi rostro. Intenté secarlas y luego abrí cuidadosamente el sobre. En el estaban todos mis documentos. Los leí al pie de la letra hasta que encontré el que decía la respuesta que yo necesitaba.
“Uzumaki Naruto Namikaze, clase B, sangre AB+, Clasificación: Contenedor. 鞍馬,Kyuubi…”
No necesitaba ver nada más. Mi cabeza comenzó a dar vueltas después de esa revelación de la cual solo había oído unas veces y no pude controlar el llanto. El dolor se apoderó de mí y todos mis pensamientos se borraron. Me había transformado de nuevo, solo que esta vez, estaba despierto.
No podía moverme. En efecto, mi cuerpo se movía, pero yo no lo controlaba. Me dolía todo y a pesar de que podía ver a mí alrededor, veía borroso y no podía fijar una dirección. El cuerpo caminó de forma extrañamente rápida por la casa, tirando y destruyendo cosas al pasar. Por un instante pude ver mi reflejo en el espejo al pasar por ahí. Pero ese ya no era yo. Era otra cosa, que poseía mi cuerpo. Mis ojos estaban completamente rojos y tenía un aspecto raro. Abrí la boca para soltar un tipo de rugido y logré ver unos largos colmillos asomándose de mi dentadura. Pero lo que me llamó la atención, fue que había dos faltantes. Después recordé los dos colmillos ensangrentados que había encontrado luego de mis constantes desmayos y un extraño escalofrío recorrió mi cuerpo.
En eso, la puerta sonó en el peor momento, porque mi cuerpo se acercó a la puerta y de un puñetazo la hizo pedazos, revelando a Shizune detrás de la puerta, quien salió disparada cayendo al suelo luego de un golpe. Grité e intenté ayudarla pero mi voz no sonó y no podía moverme en absoluto. Las personas que pasaban por ahí se acercaron a ella con horror y luego mi cuerpo golpeó a uno de los hombres.
Arghh… Naruto… - decía Shizune en su intento de no desmayarse por el impacto mientras las demás personas corrían a buscar ayuda –
Mientras ellos iban a buscarla, el cuerpo se lanzó contra un árbol, aterrizando sobre este y partiéndolo a la vez que caía intacto sobre el suelo. Luego, comencé a correr por la aldea, atropellando a todo el que estuviera en mi camino sin importar quien fuese. Hasta que, me topé con la persona que menos esperaba. Sakura.
Al intentar “atropellarla”, a pesar de que se encontraba de espaldas, de alguna forma se dio cuenta de que iba para allá y me detuvo con su increíble fuerza, posando su mano en mí pecho, lo cual, lamentablemente, no pude sentir, ya que no controlaba el cuerpo ni lo poseía en ese momento.
Na…ruto? – Miro a mis ojos con curiosidad y un poco de temor a la vez, y sentí como su mirada penetraba mi alma –
Las otras personas simplemente se quedaron mirando asustadas mientras la kunochi detenía a mi otro “yo” y lo investigaba bruscamente.
Sa…Sakura-Chan… - exclamé con la poca voz que tenía, ya que no podía sentir mi garganta tampoco –
De alguna manera, Sakura escuchó mis débiles palabras, pero las demás personas no lo hicieron.
¡Naruto! – tomó el cuerpo por los hombros y comenzó a sacudirlo levemente hasta que este reaccionó con un gruñido y con sus garras arañó a Sakura, haciendo saltar varias gotas de sangre de ella. Pero sin embargo, a Sakura no le importó e intentó mantenerme quieto –
Mientras Sakura luchaba por mantener mi cuerpo en su lugar, Tsunade llegó rodeada de ninjas. Se veía extrañada y sin dudarlo se acercó rápidamente hacia el centro del círculo de gente que se había formado a nuestro alrededor.
¡Sakura! ¿¡De que se trata este alboroto!? – Tsunade se abrió paso entre la gente a codazos –
Hokage-Sama, Naruto está teniendo algún tipo de… convulsiones – Shizune apareció con una venda en el brazo y respondió antes de que Sakura pudiera decir palabra –
Tsunade se acercó al cuerpo y lo miró con una mirada aterradora. Luego lo examinó de pies a cabeza, hasta que lanzó un extraño rugido que la desconcertó un poco. Luego, se alejó unos pasos sin quitar su mirada de mí y le susurró algo a Shizune.
Varias personas se acercaron a mí y me ataron forzosamente las manos detrás de la espalda para luego guiarme hacia el laboratorio.
Me posicionaron contra una tabla de metal, boca arriba y me apuntaron con unas fuertes luces. Mi cuerpo se retorcía y de un momento a otro sentí un fuerte pinchazo. Al cabo de unos segundos comencé a ver borroso hasta que todo se desvaneció lentamente y me hundí en un profundo silencio. Todo lo que pasaba por mi mente en ese momento se borró durante unos minutos, hasta que mi vista regreso y, milagrosamente, mi cuerpo, también.
Me desperté a adolorido, pero pude sentir al instante que ya no me encontraba sobre el frío metal. No, ahora estaba sobre algo suave… era una cama. Me encontraba en casa de Sakura-Chan. Cuando pude ver más claramente, logré verla parada en frente del espejo, de espaldas a mí. Estaba sosteniendo una foto de “El equipo 7” contra su pecho mientras de sus hermosos ojos esmeraldas salían lágrimas agrias.
¿Sa…Kura-Chan? – dije débilmente –
Una sonrisa se dibujó en el rostro de Sakura mientras sus ojos se llenaban de lágrimas otra vez. Se dio media vuelta y se abalanzó hacia mí, estrujándome con su increíble fuerza contra su pecho mientras lloraba sobre mí.
Sakura-Chan… ¡! – Dije mientras intentaba detener con todas mis fuerza un sangrado de nariz. Sakura se encontraba en ropa interior y no se había dado cuenta de que estaba aplastando sus pechos los cuales estaban vestidos solamente con un fino sostén color crema contra mi cabeza –
Ella detuvo las lágrimas de sus ojos por un segundo sin abandonar su hermosa sonrisa de felicidad y se separó de mí.
Lo lamento Naruto, yo…. – al alejarse, pudo verme completamente rojo e hipnotizado mientras admiraba su bella figura –
… -
¡BAKA! – Sakura me pegó una cachetada mientras se tapaba rápidamente con sus sabanas. Ahora su mirada era una mezcla de vergüenza y felicidad –
¡Lo lamento Sakura-Chan, yo no quise…! – No me dejó terminar cuando, aún tapada con las sabanas, por supuesto, me dio un fuerte abrazo al cual yo correspondí -
Ja… Pensé que nunca te volvería a ver… - dijo ocultando un poco su rostro sonrojado –
¿Eh? ¿De qué hablas? – le pregunté volviendo a la normalidad –
Bueno… estuviste dormido por una semana y dos días… -
¿¡Que!? –
Je... – Sakura bajó su mirada un poco – Te extrañé baka… -
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Hola a todos! Se que no fue muy largo pero trabajé un montón en el u,u
Espero que les haya gustado, como siempre acepto todo tipo de criticas y comentarios. Ah y, felicitaciones a los nuevos moderadores!
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Sheik- Jounin
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En mi esquinilla, comiendo helado en Narnia ?)
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Posesiones :
Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Asi que Naruto no sabia que tenia al Kyubi dentro de
el? debió haber sido malo enterarse desde el diario de
Kushina, y que bien que Sakura no lo abandono y
sigue con el apoyándolo
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
el? debió haber sido malo enterarse desde el diario de
Kushina, y que bien que Sakura no lo abandono y
sigue con el apoyándolo
Espero que pronto subas el siguiente capitulo
mio-chan- Sannin
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Posesiones :
Colmillo de Sangre Capitulo 9: El Regreso 16/11/13 Nuevo capitulo
Capitulo 9: El regreso
Sakura se limpió un poco las lágrimas e intentó mantener la compostura.
Bueno… Debes tener hambre… ¿Pero que estoy diciendo? ¡Hace mucho tiempo que no comes! Te traeré algo… - dijo a punto de levantarse. Pero antes, me miró seria y me dijo – Naruto, date la vuelta –
¿Qué? – pregunté inocentemente, como si no supiera lo que estaba insinuando –
No te hagas el tonto, sé que me entiendes. Ahora, date la vuelta – me dijo señalándome con un dedo. Yo, muy a mi pesar, le obedecí y me di la vuelta. Obviamente sabía perfectamente a que se refería. No quería que la volviera a ver en ropa interior –
Luego, tomó un poco de ropa y se fue. Pude notar el ruido de la puerta del armario abriéndose y sus pasos en la fría madera. Cuando se fue, decidí recostarme. Había dormido por un largo tiempo, pero por alguna razón me sentía un poco cansado. Pero antes de que pudiera apoyar mi cabeza sobre la almohada, mi mirada se dirigió hacia la mesa de luz. En ella, solo había una lámpara, una foto de los padres de Sakura y una caja de pañuelos. Así que bajé un poco más la mirada y, contra el borde de la cama, pude ver una caja con un moño naranja y una nota y una más pequeña, con un forrado de tazones de rámen. Así que deduje que eran para mí y decidí echar un vistazo.
En la primera, la nota decía:
“Esperamos que te mejores pronto, cuidate. Con amor:
Ino, Hinata y Tenten”
Dentro de la caja, se encontraba una camisa negra perfectamente doblada junto con una colonia y un ramo de orquídeas ya un poco marchitadas. Nunca iba a usar esa camisa así que cerré la caja y me dirigí hacia la siguiente, la del forrado de rámen.
En esta había una etiqueta un poco doblada la cual decía:
“Te extrañamos Naruto, esperamos que vuelvas a hacer tus tonterías
Shikamaru, Neji, Kiba, Sai, Shino, Chouji ySasuke Lee”
Lo que me extrañó fue un nombre tachado el cual no logré divisar bien. Abrí la pequeña caja y me encontré con un tazón, un par de cuchillas, un brazalete con dedicatoria y otra nota:
“Gracias por todo, esperamos que te mejores.
Atte: Tsunade, A, Killer Bee, Gaara y Mei”
Me había quedado perplejo. Casi todos mis amigos me habían dejado cosas esperando para que me mejorara, incluyendo a los Kages que conocía.
Entonces, Sakura entró balanceándose con una bandeja, sacándome de mis pensamientos. Apoyó la bandeja cuidadosamente en la cama y me ayudó a sentarme para que pudiera comer. Lamentablemente, ya estaba vestida. Se sentó a mi lado y se acomodó.
Te traje caldo de pollo… espero que esté bien – me dijo un poco avergonzada –
¡Claro que está bien Sakura-Chan! – le dije mientras tomaba la cuchara y daba un sorbo a el caldo que acababa de dejarme –
Oh, qué alivio porque no soy muy buena cocinando que digamos… - Y ya veía porque. Cuando probé el caldo, mi estómago se revolvió. Lo hubiera escupido si no hubiera sido porque ella se encontraba mirándome. Así que decidí simplemente fingir –
Mmm… - dije nervioso, aguantándome las náuseas – Delicio-so… - ella simplemente sonrió –
Bueno, que suerte que te guste… te dejaré un rato a solas – me dijo despidiéndose con la mano –
En el instante en el cual salió de cuarto escupí todo el líquido que invadía mis papilas gustativas. Luego, abrí levemente la ventana y lo tiré todo cuidadosamente sin salpicar ni una gota sobre la cama. Después de unos minutos, Sakura volvió a entrar curiosa.
¡Oh! Veo que tenías hambre… - dijo mirando mi plato vacío - ¿Te traigo más? –
¡No! Digo, no gracias Sakura-Chan, ya estoy bien… - dije intentando sonar realista, algo que no me salió muy bien –
Como digas… - dijo mirándome de una manera extraña – Vístete, hay mucha gente que estará feliz de verte – dijo mientras tiraba una pila de ropa frente a mi –
Le hice caso y me vestí con la ropa que me había dejado, la cual era algo similar a lo que solía usar normalmente. Me miré al espejo y pude ver unos cuantos pelos crecidos en mi barbilla, así que decidí afeitarme. Digamos que nunca me gustó mucho el bello facial, a diferencia de Shikamaru quien, en algún momento pensó en dejarse la barba. Así que me dirigí hacia el baño de Sakura. Comencé a buscar algo en su tocador que pudiera ayudarme con mi pequeño inconveniente, ya que no podía dejar que me viera así. Pero no encontré nada. Abrí uno de los cajones y revolví un poco a ver si, con algo de suerte, encontraba algo. Hasta que al fin lo encontré.
Naruto… ¡estás tardando un milenio! ¿Qué haces ahí? –
Oh, lo lamento Sakura-Chan, pero ya termino, ¡Me estoy afeitando! – Le dije fuerte y claro para que me oyera –
Ah, muy bien… en ese caso, ¿Puedo pasar? Necesito cepillarme el cabello… -
Eh… sí, claro – dije un poco avergonzado por el tiempo que estaba tardando -
Deposité la crema sobre mi rostro y comencé a afeitarme. Recuerdo el día que me “mude” a su departamento, había traído algunas de mis cosas, y eso, por supuesto estaba entre ellas. Cuando terminé, note que la toalla no se encontraba en su lugar y necesitaba secarme con algo, así que volví a explorar el cajón hasta que encontré un extraño tipo de toallas. Tenían la textura de un pañal y eran muy suaves. Dude un poco hasta que decidí secarme con ellas. Tomé una, pero en ese momento Sakura abrió la puerta.
¡N-NARUTO BAKA! – gritó ella, y luego me estampó contra la pared de un puñetazo. Lo admito, Sakura tiene mucha fuerza… -
Sacó las toallas de mis manos, extrañamente sonrojada.
S-Sakura-Chaan… ¿A que vino eso? – dije sobándome la mejilla con delicadeza –
T-te he dicho que no revisaras mis cosas… - Sakura miró las toallas una vez más y luego me miró con el seño fruncido - ¡BAKA! – dijo, y luego se fue del baño. Yo la seguí con mi cara aún empapada –
Sakura-Chan, no sé que hice, pero por favor ¡Perdóname! – Dije posicionándome frente a ella con la mejor cara de perrito mojado que logré articular en ese momento –
Argh… - Sakura soltó un largo suspiro – Solo te lo preguntaré una vez Naruto… ¿Qué hacías con mis…? T-toallas sanitarias… - esto último lo dijo en un tono muy bajo y muy sonrojada, casi igual que antes –
Toallas… ¿sanitarias? – dije confundido - ¡Pero de esas ya no había Sakura-Chan! – le dije con una sonrisa, pero ella se dio la vuelta y me miró… furiosa –
¡SHANNAROOO! – gritó de nuevo, plantándome uno de esos golpes brutales en mi pobre rostro. Extrañaba eso… a decir verdad, casi ni me acordaba como se sentía. Y, espero no sentirlo nunca más – Ya vámonos – dijo un poco más tranquila, pero aún así, sin abandonar su estado de ánimo enojado –
Abrió la puerta y los dos salimos. Era un precioso día, la brisa de primavera balanceaba suavemente los arboles y el olor a pasto mojado inundaba mis fosas nasales, mezclado con la deliciosa fragancia de Sakura, logrando un olor irresistible y placentero. Me costó un poco acostumbrarme a los nuevos rayos de luz de la mañana hasta que logré abrir mis ojos completamente. Caminamos por un rato, siempre por el mismo sendero rocoso mientras le iba sacando de a poco alguna que otra pequeña sonrisa a Sakura para que abandonara su estado malhumorado, algo de lo que me sentía orgulloso y disfrutaba de ver.
¡Oh, Naruto! – escuché un grito pronunciando mi nombre desde lejos, y unos segundos después, Oba-Chan se encontraba envolviéndome con sus brazos como a un niño pequeño, pero, estaba mucho más baja de lo que la recordaba… No la había visto desde que llegué a la aldea. Correspondí felizmente al abrazo intentando evadir sus siempre presentes pechos de gran tamaño –
¡Tsunade-Obachan, cuánto tiempo! – le dije separándome y con una gran sonrisa. Ella era como una madre para mí, como Shizune una hermana –
Te dije que no me llamaras así imbécil… - me dijo intentando no golpearme al ver la marca en mi rostro por parte de Sakura-Chan – Como sea, quiero que vengas un momento por favor, hay alguien que ha de verte… - me dijo guiándome de la mano mientras le hacía una seña a Sakura de que se quedara en su lugar –
Me dirigió hasta el hospital y luego habló con la recepcionista. No alcancé a oír nada, pero me llamó la atención que Tsunade golpeara su puño contra la barra y la volteara, tirando todo en ella y volteándose hacia mí con una sonrisa. No cabe duda de que Sakura es la aprendiz de la abuela Tsunade…
Naruto, ven por aquí – dijo como si nada hubiera pasado mientras me llevaba hasta un ascensor –
Subimos unos… no sé, tres pisos y luego recorrimos pasillos hasta llegar a una de las habitaciones.
¿Oba-Chan, que está pasando? – pregunté, confuso –
Solo… entra. Hay alguien a quien temo que debes ver – dijo soltando un suspiro y haciéndose para atrás. Su comentario me sorprendió bastante. Así que tomé la perilla y entré –
Era… Sasuke. Estaba reposando en una camilla y dormía quejoso mientras se movía de un lado a otro. Nunca lo había visto de esa manera… tan… inofensivo. Pero, eso no me haría cambiar de opinión. Me enfermaba su forma de ser…. Me asqueaba estar a su lado sabiendo de sus acciones y de lo que hizo en el pasado. No podría perdonarle fácilmente lo que le había hecho a Sakura-Chan… Mi, Sakura-Chan.
Me di media vuelta e intenté abrir la puerta, pero instantáneamente me di cuenta de que tenía cerrojo. Miré por la ventanilla que daba al pasillo y logré ver a la abuela Tsunade mirándome. Ahí fue cuando entendí todo. Estaba rogando ayuda con su mirada avellana. Necesitaba que yo hiciera algo… ¿Pero qué es lo que podría hacer?
Tch – logré oír a mis espaldas. Sasuke había despertado. Volví a darme la vuelta y evité su mirada –
Sasuke… - le dije en voz calmada - ¿Por qué lo hiciste? –
Creo que la pregunta es… ¿Por qué lo hiciste tú? – Dijo arrogante – Quiero decir, mírame… - involuntariamente lo miré a los ojos luego de oír esa frase ronca. En serio dolía. El tenía razón. Yo lo había lastimado… -
Pero tu... lastimaste a Sakura-Chan… - le dije un poco… ¿Asustado? - ¿Por qué Sasuke…? ¿Por qué lo hiciste? Ella fue tu amiga, tu compañera… tu amante… ¿Por qué le hiciste eso? – le dije más firme –
Es fácil. Por mi, dobe. Tu estas cegado por ella, por eso no sabes lo que sucede, simplemente no lo entenderías – me dijo arrogante mientras me daba la espalda y se acomodaba en la camilla –
Lo… ¿Qué sucede? – Susurré casi para mis adentros - ¿De qué hablas? –
Sasuke me miró, notablemente complacido por mi comentario, pero antes de que me respondiera, alguien tocó la puerta.
Pase – dijo secamente Sasuke, dejando entrar a una Shizune un poco apurada –
Naruto-Kun, tu tiempo se acabó. Además Hokage-Sama te espera en su despacho, ahora – me dijo al tiempo que me tomaba de la mano y me llevaba por los pasillos, sin darme la oportunidad de escuchar las palabras de Sasuke -
¿Qué sucede Shizune? – dije intentando no chocarme con masetas, paredes, sillas, puertas y todo tipo de objetos que se encontraran en mi camino –
Pero ni siquiera me contesto. Se le veía preocupada y apurada… ¿Qué pasaba? Dejé me llevara mientras analizaba las posibles opciones. Pero mientras lo hacía, me di cuenta de que habíamos llegado.
Aquí estamos Naruto-Sama… la Hokage lo está esperando en su oficina – me dijo mientras se alejaba. Así que me dirigí hacia donde me indico y toqué suavemente la puerta –
Adelante… - logré escuchar a la abuela Tsunade en tono bajo –
¿Qué sucede Tsunade-Obachan? – dije mientras entraba y cerraba la puerta tras de mi -
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Y AQUI EL CAPITULO TAN ESPERADO! ;okno; T.T Y ya se, no fue muy largo, pero no falta taaanto para el final y estoy dejando cosas para ese momento.
Espero que les haya gustado, como siempre acepto todo tipo de críticas y comentarios.
Ah y, para mis "lectores" (se siente bien decir eso) necesito que me ayuden con algo. Quiero que me digan que prefieren que actualice primero:
Videojuego
Un amor de pelicula
Gracias ^-^
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Sakura se limpió un poco las lágrimas e intentó mantener la compostura.
Bueno… Debes tener hambre… ¿Pero que estoy diciendo? ¡Hace mucho tiempo que no comes! Te traeré algo… - dijo a punto de levantarse. Pero antes, me miró seria y me dijo – Naruto, date la vuelta –
¿Qué? – pregunté inocentemente, como si no supiera lo que estaba insinuando –
No te hagas el tonto, sé que me entiendes. Ahora, date la vuelta – me dijo señalándome con un dedo. Yo, muy a mi pesar, le obedecí y me di la vuelta. Obviamente sabía perfectamente a que se refería. No quería que la volviera a ver en ropa interior –
Luego, tomó un poco de ropa y se fue. Pude notar el ruido de la puerta del armario abriéndose y sus pasos en la fría madera. Cuando se fue, decidí recostarme. Había dormido por un largo tiempo, pero por alguna razón me sentía un poco cansado. Pero antes de que pudiera apoyar mi cabeza sobre la almohada, mi mirada se dirigió hacia la mesa de luz. En ella, solo había una lámpara, una foto de los padres de Sakura y una caja de pañuelos. Así que bajé un poco más la mirada y, contra el borde de la cama, pude ver una caja con un moño naranja y una nota y una más pequeña, con un forrado de tazones de rámen. Así que deduje que eran para mí y decidí echar un vistazo.
En la primera, la nota decía:
“Esperamos que te mejores pronto, cuidate. Con amor:
Ino, Hinata y Tenten”
Dentro de la caja, se encontraba una camisa negra perfectamente doblada junto con una colonia y un ramo de orquídeas ya un poco marchitadas. Nunca iba a usar esa camisa así que cerré la caja y me dirigí hacia la siguiente, la del forrado de rámen.
En esta había una etiqueta un poco doblada la cual decía:
“Te extrañamos Naruto, esperamos que vuelvas a hacer tus tonterías
Shikamaru, Neji, Kiba, Sai, Shino, Chouji y
Lo que me extrañó fue un nombre tachado el cual no logré divisar bien. Abrí la pequeña caja y me encontré con un tazón, un par de cuchillas, un brazalete con dedicatoria y otra nota:
“Gracias por todo, esperamos que te mejores.
Atte: Tsunade, A, Killer Bee, Gaara y Mei”
Me había quedado perplejo. Casi todos mis amigos me habían dejado cosas esperando para que me mejorara, incluyendo a los Kages que conocía.
Entonces, Sakura entró balanceándose con una bandeja, sacándome de mis pensamientos. Apoyó la bandeja cuidadosamente en la cama y me ayudó a sentarme para que pudiera comer. Lamentablemente, ya estaba vestida. Se sentó a mi lado y se acomodó.
Te traje caldo de pollo… espero que esté bien – me dijo un poco avergonzada –
¡Claro que está bien Sakura-Chan! – le dije mientras tomaba la cuchara y daba un sorbo a el caldo que acababa de dejarme –
Oh, qué alivio porque no soy muy buena cocinando que digamos… - Y ya veía porque. Cuando probé el caldo, mi estómago se revolvió. Lo hubiera escupido si no hubiera sido porque ella se encontraba mirándome. Así que decidí simplemente fingir –
Mmm… - dije nervioso, aguantándome las náuseas – Delicio-so… - ella simplemente sonrió –
Bueno, que suerte que te guste… te dejaré un rato a solas – me dijo despidiéndose con la mano –
En el instante en el cual salió de cuarto escupí todo el líquido que invadía mis papilas gustativas. Luego, abrí levemente la ventana y lo tiré todo cuidadosamente sin salpicar ni una gota sobre la cama. Después de unos minutos, Sakura volvió a entrar curiosa.
¡Oh! Veo que tenías hambre… - dijo mirando mi plato vacío - ¿Te traigo más? –
¡No! Digo, no gracias Sakura-Chan, ya estoy bien… - dije intentando sonar realista, algo que no me salió muy bien –
Como digas… - dijo mirándome de una manera extraña – Vístete, hay mucha gente que estará feliz de verte – dijo mientras tiraba una pila de ropa frente a mi –
Le hice caso y me vestí con la ropa que me había dejado, la cual era algo similar a lo que solía usar normalmente. Me miré al espejo y pude ver unos cuantos pelos crecidos en mi barbilla, así que decidí afeitarme. Digamos que nunca me gustó mucho el bello facial, a diferencia de Shikamaru quien, en algún momento pensó en dejarse la barba. Así que me dirigí hacia el baño de Sakura. Comencé a buscar algo en su tocador que pudiera ayudarme con mi pequeño inconveniente, ya que no podía dejar que me viera así. Pero no encontré nada. Abrí uno de los cajones y revolví un poco a ver si, con algo de suerte, encontraba algo. Hasta que al fin lo encontré.
Naruto… ¡estás tardando un milenio! ¿Qué haces ahí? –
Oh, lo lamento Sakura-Chan, pero ya termino, ¡Me estoy afeitando! – Le dije fuerte y claro para que me oyera –
Ah, muy bien… en ese caso, ¿Puedo pasar? Necesito cepillarme el cabello… -
Eh… sí, claro – dije un poco avergonzado por el tiempo que estaba tardando -
Deposité la crema sobre mi rostro y comencé a afeitarme. Recuerdo el día que me “mude” a su departamento, había traído algunas de mis cosas, y eso, por supuesto estaba entre ellas. Cuando terminé, note que la toalla no se encontraba en su lugar y necesitaba secarme con algo, así que volví a explorar el cajón hasta que encontré un extraño tipo de toallas. Tenían la textura de un pañal y eran muy suaves. Dude un poco hasta que decidí secarme con ellas. Tomé una, pero en ese momento Sakura abrió la puerta.
¡N-NARUTO BAKA! – gritó ella, y luego me estampó contra la pared de un puñetazo. Lo admito, Sakura tiene mucha fuerza… -
Sacó las toallas de mis manos, extrañamente sonrojada.
S-Sakura-Chaan… ¿A que vino eso? – dije sobándome la mejilla con delicadeza –
T-te he dicho que no revisaras mis cosas… - Sakura miró las toallas una vez más y luego me miró con el seño fruncido - ¡BAKA! – dijo, y luego se fue del baño. Yo la seguí con mi cara aún empapada –
Sakura-Chan, no sé que hice, pero por favor ¡Perdóname! – Dije posicionándome frente a ella con la mejor cara de perrito mojado que logré articular en ese momento –
Argh… - Sakura soltó un largo suspiro – Solo te lo preguntaré una vez Naruto… ¿Qué hacías con mis…? T-toallas sanitarias… - esto último lo dijo en un tono muy bajo y muy sonrojada, casi igual que antes –
Toallas… ¿sanitarias? – dije confundido - ¡Pero de esas ya no había Sakura-Chan! – le dije con una sonrisa, pero ella se dio la vuelta y me miró… furiosa –
¡SHANNAROOO! – gritó de nuevo, plantándome uno de esos golpes brutales en mi pobre rostro. Extrañaba eso… a decir verdad, casi ni me acordaba como se sentía. Y, espero no sentirlo nunca más – Ya vámonos – dijo un poco más tranquila, pero aún así, sin abandonar su estado de ánimo enojado –
Abrió la puerta y los dos salimos. Era un precioso día, la brisa de primavera balanceaba suavemente los arboles y el olor a pasto mojado inundaba mis fosas nasales, mezclado con la deliciosa fragancia de Sakura, logrando un olor irresistible y placentero. Me costó un poco acostumbrarme a los nuevos rayos de luz de la mañana hasta que logré abrir mis ojos completamente. Caminamos por un rato, siempre por el mismo sendero rocoso mientras le iba sacando de a poco alguna que otra pequeña sonrisa a Sakura para que abandonara su estado malhumorado, algo de lo que me sentía orgulloso y disfrutaba de ver.
¡Oh, Naruto! – escuché un grito pronunciando mi nombre desde lejos, y unos segundos después, Oba-Chan se encontraba envolviéndome con sus brazos como a un niño pequeño, pero, estaba mucho más baja de lo que la recordaba… No la había visto desde que llegué a la aldea. Correspondí felizmente al abrazo intentando evadir sus siempre presentes pechos de gran tamaño –
¡Tsunade-Obachan, cuánto tiempo! – le dije separándome y con una gran sonrisa. Ella era como una madre para mí, como Shizune una hermana –
Te dije que no me llamaras así imbécil… - me dijo intentando no golpearme al ver la marca en mi rostro por parte de Sakura-Chan – Como sea, quiero que vengas un momento por favor, hay alguien que ha de verte… - me dijo guiándome de la mano mientras le hacía una seña a Sakura de que se quedara en su lugar –
Me dirigió hasta el hospital y luego habló con la recepcionista. No alcancé a oír nada, pero me llamó la atención que Tsunade golpeara su puño contra la barra y la volteara, tirando todo en ella y volteándose hacia mí con una sonrisa. No cabe duda de que Sakura es la aprendiz de la abuela Tsunade…
Naruto, ven por aquí – dijo como si nada hubiera pasado mientras me llevaba hasta un ascensor –
Subimos unos… no sé, tres pisos y luego recorrimos pasillos hasta llegar a una de las habitaciones.
¿Oba-Chan, que está pasando? – pregunté, confuso –
Solo… entra. Hay alguien a quien temo que debes ver – dijo soltando un suspiro y haciéndose para atrás. Su comentario me sorprendió bastante. Así que tomé la perilla y entré –
Era… Sasuke. Estaba reposando en una camilla y dormía quejoso mientras se movía de un lado a otro. Nunca lo había visto de esa manera… tan… inofensivo. Pero, eso no me haría cambiar de opinión. Me enfermaba su forma de ser…. Me asqueaba estar a su lado sabiendo de sus acciones y de lo que hizo en el pasado. No podría perdonarle fácilmente lo que le había hecho a Sakura-Chan… Mi, Sakura-Chan.
Me di media vuelta e intenté abrir la puerta, pero instantáneamente me di cuenta de que tenía cerrojo. Miré por la ventanilla que daba al pasillo y logré ver a la abuela Tsunade mirándome. Ahí fue cuando entendí todo. Estaba rogando ayuda con su mirada avellana. Necesitaba que yo hiciera algo… ¿Pero qué es lo que podría hacer?
Tch – logré oír a mis espaldas. Sasuke había despertado. Volví a darme la vuelta y evité su mirada –
Sasuke… - le dije en voz calmada - ¿Por qué lo hiciste? –
Creo que la pregunta es… ¿Por qué lo hiciste tú? – Dijo arrogante – Quiero decir, mírame… - involuntariamente lo miré a los ojos luego de oír esa frase ronca. En serio dolía. El tenía razón. Yo lo había lastimado… -
Pero tu... lastimaste a Sakura-Chan… - le dije un poco… ¿Asustado? - ¿Por qué Sasuke…? ¿Por qué lo hiciste? Ella fue tu amiga, tu compañera… tu amante… ¿Por qué le hiciste eso? – le dije más firme –
Es fácil. Por mi, dobe. Tu estas cegado por ella, por eso no sabes lo que sucede, simplemente no lo entenderías – me dijo arrogante mientras me daba la espalda y se acomodaba en la camilla –
Lo… ¿Qué sucede? – Susurré casi para mis adentros - ¿De qué hablas? –
Sasuke me miró, notablemente complacido por mi comentario, pero antes de que me respondiera, alguien tocó la puerta.
Pase – dijo secamente Sasuke, dejando entrar a una Shizune un poco apurada –
Naruto-Kun, tu tiempo se acabó. Además Hokage-Sama te espera en su despacho, ahora – me dijo al tiempo que me tomaba de la mano y me llevaba por los pasillos, sin darme la oportunidad de escuchar las palabras de Sasuke -
¿Qué sucede Shizune? – dije intentando no chocarme con masetas, paredes, sillas, puertas y todo tipo de objetos que se encontraran en mi camino –
Pero ni siquiera me contesto. Se le veía preocupada y apurada… ¿Qué pasaba? Dejé me llevara mientras analizaba las posibles opciones. Pero mientras lo hacía, me di cuenta de que habíamos llegado.
Aquí estamos Naruto-Sama… la Hokage lo está esperando en su oficina – me dijo mientras se alejaba. Así que me dirigí hacia donde me indico y toqué suavemente la puerta –
Adelante… - logré escuchar a la abuela Tsunade en tono bajo –
¿Qué sucede Tsunade-Obachan? – dije mientras entraba y cerraba la puerta tras de mi -
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Y AQUI EL CAPITULO TAN ESPERADO! ;okno; T.T Y ya se, no fue muy largo, pero no falta taaanto para el final y estoy dejando cosas para ese momento.
Espero que les haya gustado, como siempre acepto todo tipo de críticas y comentarios.
Ah y, para mis "lectores" (se siente bien decir eso) necesito que me ayuden con algo. Quiero que me digan que prefieren que actualice primero:
Videojuego
Un amor de pelicula
Gracias ^-^
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Sheik- Jounin
- Mensajes : 481
Edad : 29
En mi esquinilla, comiendo helado en Narnia ?)
3625
Posesiones :
Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Amor de pelicula dije!!!!! *-* sabes esta historia me gustaba... Pero no recordaba que era tuya o del.titulo y deje de leerla pero ya me actualice U.U lo siento... seguire leyendola, me gusta n.n chao! (Ya me cae mas mal Hinata) te quiero besos y cuidate espero tus historia yaaaaaa actualizadas n.n
Uno- Sannin
- Mensajes : 526
Edad : 27
¿Qué te importa?
15400
Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Ohhh... eso se agradece?) TE MATARÉ POR HABERLA DEJADO DE LEER ;okno;
Pues... supongo que si no hay mas votos por ahora... A TRABAJAR EN ESE FIC SE HA DICHO! ?)
Pues... supongo que si no hay mas votos por ahora... A TRABAJAR EN ESE FIC SE HA DICHO! ?)
Sheik- Jounin
- Mensajes : 481
Edad : 29
En mi esquinilla, comiendo helado en Narnia ?)
3625
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Re: Colmillo De Sangre 16/11/13! Capitulo Nuevo ^-^
Holaaaa Querida Sheik, no se si te acuerdas de miXD
Bueno como sea... me he leido tu fic y te digo que me ha gustado mucho. Tienes nueva lectora^_^
Tengo algunas dudas que supongo que las detallaras en los siguientes capitulos sobre estos personajes naruto, hinata, tzunade, neji, sasuke, sakura y el kiuuby, ellos estan entrelazados con las preguntas que digo.
Me dio tristeza con naruto cuando leía el diario de kushina:'(
Naruto si que hisó un desastre en la cocina de sakura por su preocupacion por ella que se olvido de lo que hacia en casa de sakura, pero fue lindo que haya decidido buscar trabajo para ayudar en el arreglo de la casa de su sakura-chan.
Bueno mejor dejo mis comentarios hasta aqui, y espero que continues los siguientes capitulos faltantes pronto, cuidate y bye!
Bueno como sea... me he leido tu fic y te digo que me ha gustado mucho. Tienes nueva lectora^_^
Tengo algunas dudas que supongo que las detallaras en los siguientes capitulos sobre estos personajes naruto, hinata, tzunade, neji, sasuke, sakura y el kiuuby, ellos estan entrelazados con las preguntas que digo.
Me dio tristeza con naruto cuando leía el diario de kushina:'(
Naruto si que hisó un desastre en la cocina de sakura por su preocupacion por ella que se olvido de lo que hacia en casa de sakura, pero fue lindo que haya decidido buscar trabajo para ayudar en el arreglo de la casa de su sakura-chan.
Bueno mejor dejo mis comentarios hasta aqui, y espero que continues los siguientes capitulos faltantes pronto, cuidate y bye!
Eri-chan- Sannin
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