ESA BRUJERIA LLAMADA INTERNET (+16) (Romance + comedia NaruSaku 12-01-14) Capitulo final

Yo digo que llegue la bese y se pongan de perver y asi asunto solucionado, hehehehehe, ok no XD. Espero que puedan hablar sin pelear y que aclaren las cosas, ambos son unos orgullosos, ambos tienen que pedirse perdon mutuamente, aclarar su relacion y dejarla de ocultarla en eso si Naruto tendra derecho a exgir, es justo y necesario que absolutamente todos sepan, para que no haya malos entendidos y cosas como esta que paso con Sai, jajajajaajajajja, todo loquillo ese Sai pero me encanta.

Conti!

Capitulo 13: Los bollos de Hinata
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Sakura revisaba ese nuevo aparato que su padre le había regalado, una computadora súper plana que se doblaba a la mitad y luego parecía una tabla.

-Esta cosa es más complicada que la otra. –se quejaba en la soledad de su habitación.

No pudo seguir en su conversación en solitario porque dos golpecito en el vidrio de su ventana llamaron su atención, allí a pesar de las sombras pudo reconocer el rostro serio de Naruto.

La chica dejo la laptop a un lado de la cama y camino hacia la ventana, lo dejo entrar y cruzándose de brazos dijo -y bien, ¿qué tienes que decirme?.

Su tono de voz hizo que de inmediato Naruto se pusiera a la defensiva, así que cruzando también los brazos respondio.

-Sakura-chan te voy perdonar, pero nunca más me vuelvas a mentir.

Ella bufo, la frialdad con que lo había dicho le quito toda la magia al momento y Sakura se lleno de rabia.

-¿Que te hace pensar que quiero que me perdones?, no te veo desde hace días, espere pacientemente sin buscarte para que no te sintieras presionado a elegir, y ahora bienes imponiendo tu voluntad, después que me dejarte creer que soy la peor persona del mundo.

La frialdad del rubio se esfumo al instante, con rostro inexpresivo se detuvo a observar a su compañera, más que molesta Sakura parecía decepcionada, y él no comprendía el porqué ella se sentía así, si la víctima era él y no ella.

-No lo hice con esa intención, además yo no te vi sufriendo mucho, ¿que hacías paseando con Sai hoy en la tarde?.

Haruno al escucharlo se indigno por el hecho de que Naruto la anduviera siguiendo y no se atreviera a dar la cara, cuando ella había estado deseando un encuentro entre ambos, también le enojaba esa necedad de estar metiéndose con el pobre Sai.

-Nada que te importe. -soltó con indiferencia luego se puso a acomodar la cama como si él ya no estuviera allí, como si fuera invisible para ella.

Naruto frunció el ceño poniéndose frente a ella y gruño -Sakura-chan.

Pero ella ya había tomado una decisión lo castigaría de la misma forma, pero Naruto no soportaba ser ignorado, era una cabezotas de primera, cuando Sakura se dirigía al closet él la tomo del brazo suavemente.

-Deja de ignorarme, te dije el otro día que no habíamos terminado.-replico ya enojado.

Haruno camino hacia la ventana y él la siguió -¿Si?, quizás lo olvide, -abrió la ventana nuevamente, -¿porque sería?, ¡ah!, ya recuerdo, PORQUE ME DEJASTE TIRADA TODA LA SEMANA.-grito empujándolo de un hombro.

-¡Sakura!, hija, ¿con quién hablas? -preguntó su madre alarmada tras la pared continua, la habitación de sus padres.

Naruto se froto el hombro adolorido en absoluto silencio y Sakura con voz nerviosa respondió.

-¡Nada mamá, solo estaba cantando!.

-Duérmete ya hija, es tarde.

-¡Si, perdón mamá!.

El rubio la miraba impresionado de verla mentir con tanta destreza, “¿desde cuándo aprendió a mentir con tanta facilidad?” Sakura lo miro severamente y Naruto trago grueso.

-Piérdete no te quiero ver.

Había algo en esas palabras que a Naruto no le parecían sinceras, el rubio se relajo al pensar que Sakura solo quería que le rogara un poco, y sabia que quien tenía que rogar era ella, pero ya no quería que estuvieran peleados.

Iba a abrazarla pero el paso atrás que dio ella lo hizo reflexionar un poco -¿No me darás un beso de reconciliación?. –pregunto confundido.

-Largo –gruño seriamente, Naruto asustado salió voluntariamente.

-¿Y mi beso Sakura-chan?, -pregunto con voz sumisa ella cerro la ventana.

-¿Estás enojada de verdad? –insistió tras la ventana pero ella solo le cerró las cortinas.

Finalmente Naruto se marcho y cuando llego a su apartamento decidió investigar un poco, abrió su facebook y al ver que solo Hinata estaba conectada le envió un mensaje privado para saludarla, evitando ganarse el rencor de la joven, Naruto creía que estando ella en mismo equipo de Shino era igual de rencoroso que este.

Naruto Uzumaki el líder: hola Hinata

Naruto minimizo la pagina del facebook para buscar en google, “como reconquistar a una chica”, cuando enseguida le llego la respuesta de la Hyuga.

Hinata Hyūga: 0.0, ¿eres en verdad Naruto-kun?

Naruto entorno los ojos pensando que Hinata era bien rara, tecleo rápidamente:

Naruto Uzumaki el líder: No, soy un Anbu venido del espacio y he tomado posición del cuerpo de Naruto, ahora me dedico a saludar a todos los idiotas que tiene por amigos.

Mientras él se carcajeo de su broma, en su casa Hinata cayó de espaldas, “no-Na-ru-to-kun”, asustada la chica no podía aceptar que su Naruto fuera sido poseído, ahora jamás estarían juntos.
-Yo te salvare Naruto-kun.

Comenzó a mandarle mensajitos de apoyo al rubio, pero él ni siquiera los leyó, Naruto había encontrado una página web que decía “como hacer que tu chica se derrita de amor por ti” y eso acaparo toda su atención, cerró el facebook y se concentro en memorizar todo lo posible.

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Al día siguiente Sakura había salido de hospital temprano por la mañana, Shizune le había encargado comparar unas hierbas medicinales, en eso estaba cuando vio a Naruto hablando con Hinata unos metros más lejos.

La pelirosada arrugo la frente al ver que la pelinegra le entregaba una cesta a Naruto “¿Que se cree esta?”, pensó viendo ahora como Hinata  se cubría la cara roja con ambas manos.

Y como si alguien le hubiese avisado que estaba siendo pillado por su novia Naruto levanto la vista y la vio, al verla le sonrió y dejo a Hinata en medio de un ataque de vergüenza para ir donde estaba Haruno.

-¡Hola Sakura-chan!, mira los bollos que me ha regalado Hinata, -dijo con su habitual alegría.

Sakura vio los bollos de arroz, todos tenían la cara de Naruto, eso hizo que una vena comenzara a palpitar en su frente, tomo del cuello al rubio y lo arrastro varios metros más lejos de la Hyuga.

-Si tu comes uno de esos bollos te matare, -gruño conteniendo la furia.

El chico parpadeo impresionado de sus palabras.
-Pero, ¿Por qué? -pregunto extrañadísimo.

-¡Que no ves que está obsesionada contigo baka!, todos tienes tu cara.

Naruto los observo bien –¡que va yo no soy tan feo!.

Sakura entorno los ojos, a veces no sabía si él se hacia el ingenuo o en verdad no notaba la obsesión de la Hyuga por él.

-Te lo advierto Naruto si te descubro en algo raro, te la cortare. –le dijo con voz amenazante.

Uzumaki trago grueso mirando hacia abajo, -la lengua, -agrego ella, miro a Hinata y esta les sonrió tímidamente.

Y Sakura supo que esa sonrisa solo iba dirigida hacia Naruto.

“Sonríele otra vez a ver si te quedan dientes” pensó la pelirosada apretando los puños, para calmar su furia tuvo que imaginarse que arrastraba a la Hinata de los cabellos por un camino de piedras filosas.

Sakura no era celosa, solo territorial, así que Naruto tendría que andarse con cuidado si quería tener hijos, digo seguir con lengua.

Sakura le sonrió a Hinata saludándola con un gesto de mano hipócritamente, luego miro a Naruto entrecerró los ojo y dijo -no me hagas enojar, cero Hinatas en tu vida, ve y devuélvele los bollos.

Naruto se rasco la nuca angustiado-pero Sakura-chan, me da pena hacer eso.

-Entonces terminamos, adiós.

Apenas se dio la vuelta para irse Naruto la tomo de la mano haciéndola girar en redondo y la abrazo cariñosamente.

-estas celosa Sakura-chan no lo puedo creer, se siente genial -dijo sonriendo con expresión divertida.

Ella rompió el abrazo ofendida –¡¿qué?¡, por Hinata, nada que ver.

-Entonces dame un beso.

-Pídeselo a tu amiguita, yo me largo.

Esta situación era demasiado divertida en la cabeza de Naruto pero intento mantenerse serio.

-Ven -la tomo de la mano y caminaron hacia donde Hinata estaba.

Pero Sakura se arrepintió, rechazar los bollos seria una grosería tremenda.

-Hinata, -comenzó Naruto pero Sakura lo interrumpió.

-Gracias por los bollos, quedaron lindas las caras de los cerditos, se los llevaremos a mis pacientes.

Naruto miro rápidamente a su novia como si esta se hubiese vuelto loca, pero Sakura sonreía con fingida amabilidad, por dentro Haruno se carcajeaba como una maniaca, felicitándose por su gran ingenio.

-¿Eh?, yo... etto, no son- balbuceaba Hinata.

-Bueno ya tengo que irme. –anuncio Haruno.

-Pero Sakura-chan yo quería estar contigo.-replico el muchacho decepcionado.

-Me pasas buscando y tendremos una cita. –soluciono rápidamente.

-¿De veras?, -pregunto alegre de que las cosas entre ellos volvieran a estar bien.

Sakura se iba pero antes se le ocurrió algo para acabar con la insistencia de Hinata de una vez por todas, si es que no le había quedado claro que Naruto ya tenía dueña.

Con toda la mala intención del mundo lo jalo de la chaqueta anaranjada y lo beso en la boca, no fue un beso dulce y tierno, fue tan apasionado que a Naruto le dieran ganas de hacer otras cosas con ella.

Así que calmo esos impulsos sucios estrechándola entre sus brazos al tiempo que disfrutaba del beso.

Lo único de lo que Sakura se arrepentía era de no poder ver la cara de Hinata, lo que ella no imaginaba era que la Hyuga ya se había marchado velozmente y ahora otra persona los veía.

-Hija, ¿qué haces?.

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N/A: cuando dije que las cosas se pondrían interesantes me refería que ahora le toca a Naruto ganarse a los padres de Sakura y eso sera divertido, no me refería al drama, esto es un NaruSaku no hay triángulos amorosos.

Espero la conti me gusto mucho todo el capitulo:3 Porfa pon ya el otra capitulo quiero ver que reaccion tendra Naruto y sus padresx3

 Capitulo 14: Mebuki Haruno
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–Hija, ¿qué haces?

Cuando Sakura escucho esa voz, se asusto, pero también supo que aun tenía salvación, su madre no veía bien de lejos sin sus lentes, lentes que no usaba por pura necedad, la pelirosada se aparto de Naruto pero no se alejo, tomo el rostro del rubio entre ambas mano y moviéndole la cabeza de lado a lado dijo.

–Yo no veo nada Naruto quizás sea solo tierra. –comento ignorando la presencia de su madre que estaba a espaldas de la joven.

Naruto no comprendió a que venía ese comentario, pero abrió los ojos como platos cuando vio a la madre de su novia.

–Sa-sa –balbuceo apartándose de la muchacha como si esta quemara.

–¡Sakura!. –chillo su progenitora caminando a zancadas hacia ellos.

Sakura se volvió en cámara lenta, Naruto dejo de respirar al instante, era como si cuerpo quisiera ahorrarle el dolor de morir en las manos de su suegra.

–¡Mamá! –Fingió sorpresa y alegría de verla, –¿andas de compras?.

Sakura estaba segura de que si mantenía la calma, podía controlar la situación, o al menos de eso se intentaba convencerse, pero la señora Haruno había visto todo, y estaba indignada con el comportamiento de su hija, sin mencionar el hecho de que lo que más la enojaba era que Sakura actuara como si nada.

Mebuki miro al rubio de manera severa y Naruto trago grueso, no quería estar allí, prefería limpiar caca de perros, comer insectos o renunciar al ramen, que enfrentar la furia de una madre que seguramente lo acusaría de violador.

“Kami-sama sálvame” imploro internamente.

–Hija tú y este muchacho estaban besando. –la acuso sin una migaja de duda.

“Oh Kami-sama adoptare un niño si me salvas de esta” rogo el muchacho.

–Entonces viste mal, solo le estaba revisando un ojo, –explico tranquilamente.

Pero su madre era terca igual que ella.

–¡No vi mal, se lo que vi!. –replico de manera tajante.

–Ves madre por eso tienes que usar tus lentes, luego ves cosas que no son y calumnias a tu pobre hija.

Victimizarse nunca le sirvió para nada, pero confiaba en que estando Naruto allí presente su madre no querría quedar como una bruja, armando un escándalo.

Naruto ya estaba azul y comenzaba a ponerse verde, sus pulmones seguían sin funcionar, y por extraño que pareciera no se sentía ofendido, ya Sakura le había explicado en otra oportunidad, que cuando le informaran el noviazgo a sus padres debían ser a los dos a la vez. Y si su novia decía eso por algo debía ser.

–¿Ya se te quito la molestia del ojo? –le pregunto Sakura al rubio.

Sus pulmones al fin funcionaron y él hizo un sonido exagerado tomando una bocanada de aire.

–Err… si… yo, hum… señora, etto, yo no. –comenzó a tartamudear al estilo de Hinata.

Pero la señora solo apretó los dientes diciendo:

–¡Sakura nos vamos a casa ahora mismo!.

–No puedo, solo salí de permiso a comprar estas hierbas medicinales. –respondió enseñándole lo que había comprado.

–Oh, y te entretuviste limpiándole el ojo a tu amigo. –comento con sarcasmo y enojo.

Naruto respiraba de manera tan imperceptible, que tal vez ya estaba muerto y solo era el fantasma que aun seguía ligado a este mundo, lo cierto es que Uzumaki comenzó a esforzarse en pensar algo que decirle a su futura suegra, si es que tenía un futuro y no moría ese día.  

–Eso surgió repentinamente, ya sabes la brisa levanta el polvo, ¡y zass!, y te cae la maldita tierra.

–¡Sakura no digas malas palabras!, –la regaño severamente pero al ver que muchas personas voltearon a verlos bajo la voz, –ya veo que este chico te ha corrompido de todas las manera que no que quiero ni imaginar, camina para la casa.

–Madre ya te dije que tengo que regresar al hospital, y Naruto no me ha corrompido yo ya decía la palabra con “M” de hecho la aprendí en la casa.

–¡En la casa no la aprendiste! –se enfureció la mayor.

–Err… Sakura-chan –murmuro el chico para recordarle a su novia que aun seguía allí y que no debía hacer enfurecer a su madre, no cuando él estuviera presente.

Lo que él no sabía era que Sakura solo llevaba la conversación a otro plano, para que su madre temporalmente olvidara el asunto del beso.

Mebuki miro nuevamente a Naruto y él supo que desgraciadamente no era un fantasma, seguía vivo y la mujer podía verlo perfectamente, entonces Uzumaki se aclaro la voz y cuando iba a reconocer que si hubo beso, y que lo había porque Sakura era su novia, la mayor de las Haruno hablo primero.

–Ya que tu amigo es mudo, quisiera invitarlo a comer esta noche a la casa, tal vez tu padre lo haga hablar.

Naruto se enderezo como un soldado.

–Sera un placer señora Haruno –respondió el rubio, aun estaba nervioso pero no era un cobarde.

La mujer se fue y Sakura se volvió hacia Naruto, –No te preocupes, cuidare de que no te envenene.

–¡Sakura-chan! –protesto en un lloriqueo.

–Solo estaba jugando, iré a tu casa antes de ir a la mía.

–Yo puedo llegar solo a tu casa. –protesto, no quería que Sakura lo creyera un cobarde o débil.
–Era para pasar tiempo juntos, pero si no quieres, no importa. –camino dejándolo atrás.

–¡Eh!, hey… ¡Sakura-chan!.

Se fue tras la chica, pero no sirvió de nada Sakura estaba de nuevo molesta, y él tuvo que dejar de perseguirla antes de que lo mandara a volar con uno de sus puños, cuando la pelirosada entro al hospital vio a Kiba sangrando con una cortada en el pecho.

Enseguida se acerco a donde estaba, pero este no quiso que lo atendiera, –No te lo tomes a mal Sakura, pero quiero que Ino me atienda.

–La señorita Ino Yamanaka está ayudando en una operación –comento uno de los enfermeros.

–Entonces esperare. –dijo tercamente el castaño.

–Si esperas mas te desangraras hasta morir. –le advirtió Sakura.

Kiba se lo pensó, luego le hizo una seña a la pelirosada y esta se acerco más. –No quiero morir desangrado, ayúdame a que Ino venga.

–¿Harás un acto romántico o algo? –le pregunto con una sonrisa en los labios.

–¡Diablos claro que no!, –se asqueo el chico, –solo quiero decirle algo, pero ella está enojada y no quiere hablarme, así que me aprovechare de esta situación.

Akamaru ladro como si quisiera apoyarlo y Sakura dijo. –bien veré que puedo hacer.

Minutos después cuando Ino salió del quirófano, se dirigió con cara de malas pulgas hasta el cubículo donde se encontraba el castaño, abrió la cortina como si estas la fueran insultado, y las cerro como si fuera a cometer un crimen.

Kiba al verla tan enojada casi se arrepiente de haberla solicitado, el chico se aferro de los tubos de la camilla.

–¡¿Qué te pasa?!, –le grito y Kiba enseguida se escudo con la almohada, pero ella no le golpeo como esperaba –¿crees que no tengo nada que hacer?, ¡¿porque demonios no dejas que te atiendan las enfermeras?!.

Kiba bajo la almohada lentamente y comenzó a decir aquello que tanta vergüenza le había producido en sus pensamientos.

–Porque solo confió en ti, Ino creí que moriría, –al decir eso ella noto la herida sangrante de joven, tenía la chaqueta rasgada como si lo fuera atacado un animal enorme, –y eso me hizo reflexionar sobre nosotros.

Ella resoplo –¿pero qué dices?, no hay un nosotros.

Dolido por sus palabras apretó la almohada e insistió –Lo hay cuando nos molestamos a diario por internet.

–Es solo ficción como tener un amigo imaginario –le aclaro ella.

–¡Pero soy real! –replico ofendido.

–¿Y qué?. –Contesto encogiéndose de hombros como si no le interesara en los más mínimo escucharlo. Y eso lo hizo enojarse.

–Y también es real el que no pueda ni tener una cita porque estoy queriendo regresar a casa y chequear que  me has escrito… ya no lo haces, ¿porque no me escribes?

Ino enmudeció sorprendida de las palabras del Inuzuka, era la primera vez que la dejaba si argumentos.

La razón porque ella estaba enojada con Inuzuka era precisamente esa, lo había visto paseando del brazo con una chica, es decir en una cita.

Y Kiba sospechaba que era ese el motivo por el que la rubia dejo de hablarle por internet, ni siquiera criticaba las fotos que él subía, era como si quisiera anularlo de todo su ciber mundo.

Yamanaka no respondió y Kiba dijo algo que la dejo más sorprendida.

–Estoy enamorado de ti, y no lo repetiré nunca más.

–¿Qué?, -musito insegura de haber escuchado bien.

El castaño frunció el ceño mirando hacia la cortina azul –no lo repetiré. -gruño apenado.

Akamaru ladro y Kiba dijo con voz aburrida. –lo se Akamaru a eso voy.

Se sentó dolorosamente en la camilla, –¿Qué haces?, te perjudicaras la herida. –le regaño la rubia.

–¿Me vas a curar sí o no? –refunfuño.

Ino se ruborizo y comenzó a usar su chakra para curar la herida del joven, pero él era necio y se puso de pie antes de que ella terminara.

–No soy tu amiguito imaginario Ino, -musito con una voz extrañamente suave, –soy real y quiero hacer cosas reales.

–¿Cosas reales? –pregunto aun con el destello verde entre ellos y la vista fija en la herida que comenzaba a cerrarse.

Kiba no era tímido, ni romántico, ni respetuoso, pero se esforzó en ser delicado cuando acaricio con su pulgar la mejilla de la joven, ese gesto hizo que ella lo mirara a los ojos entonces la beso.

La beso lento, fue tierno durante tres segundos pero apenas ella comenzó a responderle, dejo de ser sumiso. Le mancho el traje con sangre, cuando la estrecho entre sus brazos.

Akamaru comenzó a comer la cola como si celebrara, luego soltó un ladrido tan fuerte que Ino se asusto rompiendo el beso.

–Y ahora hay un beso, quiero que salgamos.
Gran forma de pedir las cosas, “quiero esto”, “quiero aquello”.

–Humm... y yo quiero ganarme la lotería, no doy citas a cualquiera, si quieres una cita, ¡gánatela!. –replico alterada.

Estaba indignada y enojada consigo misma por haberle respondido al beso, había jurado hacerle implorar por un beso, ahora estaba herida en su orgullo.

La rubia abrió la cortina y tropezó con Sakura que fingió estar leyendo los informes de un paciente, Yamanaka frunció el ceño con la sospecha de que la pelirosada debía haber visto o escuchado todo, eso la hizo ruborizarse intensamente.

–¡Pues me las ganare todas!. –respondió Kiba tras las cortinas.

–¿De qué habla kiba? –pregunto Sakura.

–Ni idea, volveré a la operación. –Respondió rápidamente.

–Mejor no lo hagas, mírate estas toda nerviosa podrías confundirte y matar a tu paciente. –se burlo Haruno.

–No fastidies, soy una profesional.

–Ino, ¿sigues allí?. –pregunto Kiba quien estaba tumbado en la camilla con una sonrisa socarrona, aun pensado en el beso.

–Y me voy ahora mismo, –anuncio la rubia, dio varios pasos y al ver que la pelirosada no se movía, se devolvió para llevarla del brazo, –y tu vienes conmigo.

–Pero iba a saludar a Kiba. –replico.

–Olvida a Kiba, ya está curado –dijo arrastrando a la pelirosada.

–Claro, con un beso cualquiera se cura, -se mofo señalando la mancha de sangre que tenia la rubia en su traje blanco.

–¡Déjame en paz frentesota! –replico avergonzada, Sakura se rió con más ganas y la rubia le amenazo, –cuando sigas riéndote le diré a Naruto lo de aquel paciente y el baño de esponjas.

–¡No harás tal cosa si valoras tu vida!.
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Ya a eso de las seis de la tarde cuando Sakura se dirigía a su casa, se encontró con Naruto sentado en un banco a una cuadra de la casa de la pelirosada. Él había pasado la tarde en casa de Iruka-sensei, su antiguo maestro le había dado algunos consejos de cómo debía comportarse con los padres de Sakura, pero era tanta información, que no había memorizado casi nada y había confundido casi todo.

–¡Sakura-chan! –la saludo alcanzándola.
Sakura se fijo en las cosas que llevaba y sin dejar de caminar le pregunto –¿y esas flores?.

–Son para tu mamá y aquí le llevo licor de Sake a tu padre, –le enseño una botella envuelta en papel marón, de esas donde venden los panes, –el señor Teuchi me la obsequio para que se la diera a mi suegro, dice que le gusta mucho jeje –rió rascándose la nunca.

–¿Y a mí que me traes? –pregunto al ver que no llevaba nada mas.

–¿Eh?... hum, –se rasco la nuca con una sonrisa que solo lo delato, –¡un beso! –exclamo haciéndose el tonto.

Ella resoplo y adelanto el paso dejándolo atrás, –¡Espera Sakura-chan!, no te enfades, no creí que quisieras un obsequio.

Sakura continuo su camino, más que molesta se sentía herida, “hombre tenía que ser”, “rosas rojas para mi madre, como si quisiera ligársela, Sake para alguien que está intentando dejar la bebida y para mí que soy la novia, NADA”.

Cuando la casa de Sakura se visualizo frente a ellos, Naruto trago grueso y ella dijo.

–Solo relájate y se tu mismo, no mejor solo compórtate bien y muestra respeto como si estuvieras hablando con la Hokage, no mejor olvida ese ejemplo, ¡solo no hagas tonterías!.

Naruto sonrió confiado –Tranquila Sakura-chan tratare a tus padres como si fuera emperadores.

–Hum… tampoco vayas a exagerar.

O-----o Pobre naruto.. Ahora que pasara:O!? Olle pregunta pondras lemon mas adelante e.e?

Que miedo! Naruto conocera a sus suegros oficialmente! Espero no sea tan complicado, aunque quien sabe los suegros siempre son dificiles de ganar.

Conti!

Cap. 15: En casa de Sakura-chan
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Antes de entrar a la casa de su novia ella le quito la botella de Sake, –Mi padre tiene cierta debilidad por algunas bebidas alcohólicas, dejemos esto por acá, –la escondió entre una plantas de la casa de al lado, –cuando te vayas recuerda llevártela.

Naruto se rasco la nuca, –¡déjamelo a mí!, la desapareceré cuando me vaya, ¡no quedara ni rastro! –Exclamo con demasiados ánimos, luego se puso serio, –no sabía eso de tu padre, perdón.

Sakura tomo la mano del chico y empujo la puerta, era la primera vez que Naruto entraba a la casa de la pelirosada, había estado muchas veces en su cuarto, pero nunca había entrado por la puerta.

Gracias a Kami-sama la señora no sabía eso, de saberlo Naruto estaba seguro que no saldría vivo de allí.

Las paredes de la casa eran de color crema, el hogar tenía grandes ventanas de vidrio lo que hacía que la casa estuviera bien iluminada por la luz natural, aunque ya no quedaba mucho del sol, porque comenzaba a anochecer, Sakura cerró las persianas y encendió las luces de la sala.

Entonces Naruto se fijo en las fotos familiares enmarcadas en la pared, sentía cierta envidia, aun así se alegraba mucho de que ella sí tuviera una infancia normal, sonrió, “Sakura-chan fue feliz”, un arrebato de ternura lo invadió al ver una fotografía donde Sakura debía tener como tres añitos de edad, la niña le chupaba la oreja a un conejo de peluche blanco.

–Ven, mamá debe estar en la cocina.

Naruto hubiese preferido quedarse allí a contemplar las imágenes, pero debía enfrentar la realidad y ser valiente.

Justo sobre la puerta que conducía hacia el comedor estaba un reloj de aguja que marcaba las 6:33 P.M. pasaron bajo el arco y el rubio vio a la madre de Sakura cocinando con un delantal puesto.

–Mamá ya llegamos.

Naruto se enderezo como un soldado y dijo lo que había ensayado un montón de veces –Señora, ¿como esta?, gracias por invitarme a comer, –la mujer le lanzo una mirada desconfiada y él recordó las flores que llevaba en la mano izquierda, dividió el ramo a la mitad. –estas son para Sakura-chan y estas para usted.

Las dos felinas se sorprendieron, –chico te falta mucho por aprender, no se le regalan rosas rojas a tu suegra, –Naruto sonrió como una hiena y Sakura miro a su madre sorprendida y esta se apresuro a corregir, –es decir a la madre de tu novia, que te quede claro que para mi eres solo un simple aspirante.

–Lo tengo claro señora. –respondió aun con una sonrisa, Sakura le dio un codazo en las costillas y él se puso serio. –si quiere le ayudo a cocinar.

–Eso ni pensarlo, sabrá Kami-sama que has tocado con esas manos.

–Madre. –Intervino Sakura avergonzada, –te dejo con Naruto un momento iré a cambiarme.

Él se mordió el labio como un gatito asustado no quería quedarse solo con la mujer, ¿de qué le iba a hablar?. –Sakura-chan vuelve pronto. –susurro.

Ella le dedico una sonrisa tierna y los dejo solos, cuando la chica desapareció de su campo visual el rubio volvió su atención hacia la mujer mayor y noto que esta lo miraba con ceño.

–Entonces eres el novio de mi hija. –comento fríamente.

–¡Si señora el legal y el único!. –respondió enérgico con el pecho inflado con una paloma.

–Ya veo que estas muy orgulloso de eso.

–Vaya que sí, pero no se preocupe Sakura-chan también quiere.

–¿Quiere qué?. –pregunto seria.

–Jeje, pues ser mi novia, ¿no está hablando de eso?. –se rasco la nuca confundido.

–Que confianzudo eres muchacho, –comento mirándolo con asombro, estaba decepcionada de no haberlo podido aterrorizar por más tiempo, suspiro y agrego –al menos Sakura no me salió como la hija de Kamiki.

–¿Quién es Kamiki? –pregunto con interés.
–La hija de la verdulera, esa chica es lesbiana.

–comento torciendo la boca con desagrado.

De nuevo una palabra que Naruto no conocía, se mordió el labio preguntándose si debía preguntar o esperar a llegar a su casa y buscarlo en google,

–¿Que es lesbiana?

La mujer se pregunto si él se hacia el ingenuo o en verdad era estúpido, antes de que ella pudiera hacer un comentario desdeñoso una voz masculina y divertida dijo.

–Son mujeres malas a las que les gusta jugar a tocarse entre ellas y no invitan a los hombres.

–Kizashi –gruño su esposa en tono de advertencia.

–¡Papá! –Protesto Sakura quien lo había escuchado cuando salía de su habitación, –no me avergüences.

El rubio lo miro, el hombre de cabello rosado-grisáceo con la forma de una flor de cerezo y ojos azules claros, estaba detenido en las escaleras, al parecer recién salía de la habitación, Kizashi pasó un brazo por los hombros de su hija y apretándola de manera juguetona dijo con una sonrisa boba.

–Pero si es la verdad, son mujeres MUUUY malas, mira que jugar sin nosotros.

Soltó una risotada y Naruto sonrió, no había entendido el chiste, pero el hombre se veía mucho más amigable que su suegra.

–A ver si te da gracia saber que tu hija ya tiene novio. –soltó la mujer sin anestesia.

El hombre dejo de reír en seco, Sakura se sintió apenada y Naruto contuvo la respiración, –¿y quién es el atrevido?, ¿a quién es que debo matar?.

Naruto abrió los ojos como platos y el hombre comenzó a carcajearse, bajo las escaleras caminando hacia el muchacho no tenía que ser muy inteligente para deducir quien era el supuesto novio.

–Eh, muchacho vayamos a dar una vuelta.

Apretó el hombro del rubio y Naruto camino como si fuera directo al matadero, salieron a la calle y Sakura miro a su madre, –No tenías porque decírselo de esa manera.

La mujer sonrió, –no me niegues el placer de verlo asustado.

Cuando Naruto regreso parecía más relajado, ambos hombres se sentaron en la mesa donde ya estaban servidos varios platillos, Yakimeshi (Arroz frito), Butaniku (Carne de cerdo),  Kushiage (Banderillas de pescado y mariscos), Miso (Sopa).
A Naruto le falto poco para soltar un chorro de babas, todo se veía delicioso, como si la mujer no quisiera envenenarlo, todos se sentaron alrededor de la mesa. Naruto se dijo a sí mismo, que se arriesgaría con el Yakimeshi, Butaniku, Kushiage y por último el Miso.

Sakura quien estaba a su lado le dio un codazo, –quita esa cara de muerto de hambre. –Se rió entre dientes y luego recordó –¿qué te dijo mi padre?, –susurro.

–Después te cuento.

El rubio tomo los dos palillos para atacar la comida pero antes de que pudiera engullir algo el Señor Kizashi llamo la atención de todos, se aclaro la voz y dijo.

–Naruto Uzumaki, quiero en nombre de mi esposa y mío darte la bienvenida a esta casa y posiblemente a esta familia.

Sakura abrió los ojos como platos nunca espero algo así tan pronto, el rubio se sintió muy feliz.
–Muchas gracias señor Kizashi, no lo defraudare.

Tomo la mano de la chica bajo la mesa y cuando esta lo miro se ruborizo levemente, al parecer Naruto había hecho buen uso de su gran poder para influenciar en el corazón de los demás con el padre de su novia.

–¡Hey, no hables por mí!. –se quejo la mujer propinándole un coscorrón a su marido, el hombre solo se echo a reír.

–Mebuki, Naruto es buen chico. –insistió tratando de convencerla.

Ella levanto ambas cejas –¿Que paso con lo de que masacrarías a cualquiera que quisiera llevarse a tu hija?.

–Eso aun no pasa, además mujer piénsalo, nuestras amistades nos envidiaran cuando se enteren que emparentaremos con el héroe de Konoha. –la mujer gruño.

–Mebuki fue mi única novia, me espanto toda mujer que intento salir conmigo.

–¡Papá! –se quejo Sakura avergonzada pues ya su padre iba a comenzar con sus historias ridículas.

La señora resoplo, –los años te están haciendo perder la memoria, eras tú quien hacia eso conmigo.

El hombre rió, le gustaba hacer molestar a su mujer cambiando las versiones de lo ocurrido, Sakura movía la cabeza de manera negativa, hubiese preferido tener unos padres más normales.

–Cuéntanos, ¿cómo fue que convenciste a Pain de devolverle la vida a todos los que fueron asesinados?. –pregunto con interés el señor Haruno.

–Él lo decidió por sí mismo, apenas tuve que ver. –respondió calmadamente el joven.

–No seas tan modesto Naruto, todos aquí queremos escuchar tu historia. –insistió Sakura comenzando a comer.

La señora Haruno no replico y Naruto se convenció de que relatar un poco de sus hazañas tal vez la convencería de que era suficientemente bueno para su hija.

Uzumaki les hablo de cómo fue su entrenamiento en la tierra de los sapos, y como se entero de que la aldea estaba siendo atacada, luego les conto la conversación con Nagato.

El resultado fue que su suegro estaba orgullosísimo de tener un futuro yerno tan habilidoso y fuerte, Sakura lo admiraba más, lo que luego, luego le podría resultar beneficioso, pero la señora Mebuki seguía reacia a dejarse caer bajo el encanto del chico.

–Voy por el postre. –anuncio cuando todos habían terminado de comer.

La mujer se levanto llevándose varios platos vacios y Naruto aprovecho para tomar otras bolitas de carne, –oye yo nos las he probado, te las has comido casi todas. –replico Sakura moviéndole la mano, eso provoco que la bolita se le callera y los tres vieron rodara a la pelotita por el blanco mantel dejando una larga mancha de salsa.

–Oh, esto la hará enojar. –comento el hombre seriamente.

La señora regreso con una bandeja, traía cuatro tazas de pudin de chocolate, Naruto se apresuro a poner el brazo sobre la mancha, pero estando en esa posición le sería imposible seguir comiendo, y obviamente ocultarla durante tanto tiempo.

–Mebuki olvidaste el siro de chocolate. –le recordó su esposo.

Sin sospechar nada la mujer se devolvió a la cocina –Quita el brazo.

Naruto obedeció, Sakura se apresuro a poner varias servilletas sobre la mancha y mover algunos platos, para que estos pisaran las servilletas. Uzumaki estaba impresionado con la complicidad de padre e hija.

–Sakura-chan –murmuro conmovido.

–Descuida papá la distraerá para que yo pueda lavarlo.

El señor Haruno sonrió con suficiencia, –Así es mi hija tan buena como un pan dulce.

Mebuki regreso con el fulano siro de chocolate, lo coloco en medio de la mesa y repartió las tazas.
–Con esto terminaremos la cena y podrás irte a tu casa muchacho. –anuncio Mebuki.

Naruto probo el pudin, por más que la mujer intentara fastidiarlo, a él le estaba gustando mucho estar allí, era como tener una familia propia.

–Esta sabroso y no lo digo por querer halagarla señora, de verdad sabe bien.

La mujer solo asintió con la cabeza, removió el dulce con la cucharilla y luego mirando al jinchuriki dijo –ya que estas tan interesado en mi hija, ¿puedo saber que planeas hacer con tu vida futura?

Naruto no dudo en responder con la verdad, –mi principal meta es traer a Sasuke de vuelta a la aldea, mi sueño es ser Hokage, y cuando eso suceda estableceré la paz con todas las naciones, luego cuando este viejo, escribiré un libro con mis jutsus, para que otras generaciones puedan aprenderlos.

–Oh, eso suena grandioso, pero… ¿y mi hija donde queda en todo esto? –pregunto sagazmente Mebuki.

Kizashi esta vez no opino y Naruto busco la mirada de la chica pero no la encontró, ella dejo la taza en la mesa y mirando a sus padres dijo.

–Yo también tengo mis propios planes que nada tienen que ver con Naruto –comento orgullosa.

El rubio se pregunto si se había enojado por aquella tontería de no mencionarla, para él era obvio que para poder realizar todas esas cosas tenía que tenerla a su lado dándole su apoyo como siempre.

–Sakura-chan sería mi esposa si ella aceptara.

–Oh, ser lo último en la vida de un hombre no es buena señal. –comento la mujer con dramatismo irónico.

Sakura se encogió de hombros –Eso es porque Naruto piensa que yo me casaría con él, como decía tengo mis planes sin él –respondió mirando lo ojos azules del joven.

–Sakura-chan –lloriqueo dolido y por primera vez la señora sonrió con diversión.

–Yo jamás seré lo último en la vida de nadie, menos de un hombre. –aclaro la pelirosada.

Y eso lo había aprendido con todos los desplantes de Sasuke, –¡Así se habla hija!, –la felicito su padre, luego miro al rubio –los Haruno somos fuerza e inteligencia muchacho, no te metas con estas dos, porque siempre perderás.

Tras ese comentario Kizashi dio por terminada la cena, el rubio dio las gracias, se despidió de los que posiblemente ya no serían sus suegros, porque estaba seguro de que había decaído ante los ojos de ambos padres.

–¿Como lo hice? –le pregunto Naruto cuando estaban bajo el marco de la puerta de la salida.
–Todo genial, ahora vete, tengo que resolver lo de la mancha.

El rubio no se quería ir sin un beso o algo que confirmara que Sakura no estaba enojada con él.
–¿Sakura-chan de veras no te casarías conmigo?.

La pelirosada miro hacia todos lados para ver si no estaban ninguno de sus padres al no verlos dijo. –eres un baka Naruto, al menos frente a mis padres debiste fingir que estaría en tu futuro, la próxima vez me incluyes en algo.

–Sa…

La frase quedo incompleta porque la chica lo beso aprovechando la ausencia de sus progenitores, no lo besaba desde esa mañana cuando su mamá los pillo en la calle, Naruto la abrazo con miedo a que los descubrieran nuevamente, pero Sakura se soltó de sus brazos, ella menos que nadie quería un sermón del tipo “se que sienten deseos de tocarse”.

–Tengo que lavar ese mantel, adiós. –lo apuro para que se fuera.

–Sakura-chan, lo se hace rato yo no…

–¡Sakura ven a ayudarme a lavar los platos!

–exclamo su madre llegando a la mesa, mesa

donde ignoraba que su mantel favorito estaba manchado, un regalo heredado de la bisabuela de Sakura a la madre de esta.

La chica abrió mucho los ojos asustada, –No vemos mañana.

La joven ninja cerró la puerta en las narices del rubio y respondió. –¡Mamá ya es hora de tu programa favorito!, ¡los lavare todos no te preocupes!.

Camino hacia el comedor y Mebuki al verla nerviosa contesto.

–Estas muy sospechosa, ¿que fue te estabas besuqueando con ese Naruto?.

La chica se ruborizó, –te advierto que soy muy joven para ser abuela.

–¡¿Queeee ya tan pronto seré abuelo?! –Chillo alarmado Kizashi, –¡pero si no tengo ni canas!. –se escandalizó tirando de sus cabellos.

Sakura se desinflo estresada, esos dos juntos eran para volverse loco.

–Tienes un montón de canas. –le aclaro Mebuki.

–y Sakura no está embarazada, –miro la inexistente pansa de la chica y esta se ruborizo mas, al pensar en lo que tenía que hacer con el rubio para poder estar en ese estado –o eso creo yo.

–¡POR SUPUESTO QUE NOOO! –Sakura grito ofendida.
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N/A: No le fue tan mal después de todo al rubio, antes de que vayan a chillarme recuerden que aunque Naruto tiene muchas cualidades, sigue siendo un chico de 16 años, y aunque ha madurado muchísimo, cuando no está en batallas la mayoría del tiempo es un cabezotas. XD
El próximo capítulo se llamara “Sakura vs internet” a ver qué hace la chica para despegar a su necio novio de la computadora.

¿Qué tal el capítulo de hoy?, Nos leemos en el siguiente. Alguien me pregunto si habria lemmon, pues algo de eso habra.

Tu fic me gusta cada vez mas...
Naruto sobrevivió a su cena con los suegros, y me agrada mucho lo realista que es en el sentido de que a pesar de que Naruto madura día a día sigue siendo un chico de 16 y tiene mucho que aprender, hay fanfic en que lo hace ver como el super de todo y el simplemente no es asi...

Siguelo pronto ya quiero saber las estrategias de Sakura para derrotar la Internet.

Yo fui la que pregunte lo del lemon e.e soy tremenda, me encanta tu manera de escribir, uff Naruto por fin se quito de carga a los suegros ahora solo le toca ser feliz, pero... como le hara Sakura para quitarle el visio de la internet e.e no se si sea lo que estoy pensando e.e mi mente "inocente" esta en modem ON <3 Porfas conti

ufff! A Naruto le fue bien con los suegros
Que hablaria con Kizashi?
Y que hara Sakura para ganarle al internet?!!

Conti!

           Cap. 16: Sakura vs Internet

Cuando Naruto llego a su apartamento lo primero que hizo fue conectarse al Facebook, estaba impaciente por poner en su estado que había sobrevivido a la primera cena con sus suegros. El rubio vio que tenía varias notificaciones y una solicitud de amistad, curioso entro en esa última, y que sorpresa fue leer.

Kizashi Haruno “agregar a mis amigos” o “Ignorar”

–¡Ahhhh! –grito jalándose los cabellos.

Era una difícil decisión, no podía ignorar al padre de su novia, pero tampoco quería tenerlo en su Facebook, si lo hacía ya no tendría libertad de poder escribir lo que quisiera.

Eso tenía que consultarlo con sus amigos, marco varias teclas en el teléfono y llamo a casa de Kiba, pero el castaño no estaba, según la hermana estaba en una cita.

Se froto la barbilla replanteándose la idea de llamar a la propia Sakura pero imagino que ella se sentiría ofendida. Shikamaru era una buena opción pero según la mamá estaba dormido, Naruto sospechaba que había fingido estar dormido solo para no levantarse de la casa.

Entonces marco el número de una persona que jamás se le hubiera pasado por la cabeza sino por el hecho de estar desesperado.

–¿Naruto tu llamándome?, ¿a mí?... seguro te has equivocado. –respondió una voz muy seria del otro lado de la línea.

–Shino no tengo tiempo para ponerme a platicar, escucha lo que te voy a decir, si tú tuvieras una novia, y ella tiene un papá.

–Naruto… todas las novias tienen un papá. –analizo el de gafas oscuras.

El rubio se desespero –Grrrrss, déjame hablar, ¿agregarías a su padre a tu facebook?

–Mi tío es mi suegro y lo tengo agregado desde hace meses y no he tenido ningún problema, o quizás sea porque ya no uso eso de internet, me aburrí de eso, tu deberías también superarlo. –le recomendó aun con su voz seria.

Naruto chillo del otro lado, no sabía que lo sorprendía más, ¿Qué Shino tuviera novia? o ¿que se fuera aburrido del internet?.

–Y nos vamos a casar porque está embarazada.
–seguía explicado.

–QUEEEEEE. –chillo Naruto escandalizado.
Definitivamente eso lo sorprendió más que las anteriores.

–Cuando lo vayas a hacer tienes que ponerte el gorrito, yo ahora tengo que casarme por no saber.

–¡¿Que gorro?!, ¡¿que nada?!…

Corto la llamada frustrado, –seguro que me está tomando por idiota, ¿desde cuándo tiene novia?.
Uzumaki sin darle más vueltas al asunto acepto la solicitud de amistad del padre de Sakura, y sonrió mientras escribía en su propio muro.

Naruto Uzumaki el líder: Cene en casa de Sakura-chan, mis suegros son geniales.

Apago la computadora y se tumbo en la cama, se durmió al poco tiempo, en su casa Sakura había terminado de lavar el mantel, entro a su habitación y cuando se acerco a la ventana para cerrar las cortinas, visualizó una figura frente a su casa, sentada en un banco.

Desde donde estaba no podía verlo, pero su corazón se acelero. –Sasuke.

No podía ser Sasuke, su mente debía estarle jugando una mala pasada, se froto los ojos y volvió a mirar, pero la figura seguía allí, la pelirrosa le grito – ¡Sasuke!.

Entonces la figura echo a correr y ella salto por la ventana, lo siguió, cuando llegaron a un área solitaria y oscura, el chico volvió a su forma real y ella le salto con un kunay en mano pero no para matarlo, sino para golpearlo.

–¡Sai maldito!, ¡¿qué diablos te pasa no juegues de esa manera?!.

Él sonrió con su sonrisa fingida –lo siento Sakura, sabía que esa era la única forma de que saliera de tu casa a esta hora.

Haruno noto el estado acongojado del chico y se preocupo, –¿Te sientes bien?, pareces triste.

–Quizás lo estoy, en este libro dice que estoy celoso.

–¿Celoso? –Se extraño ella, –¿Celoso de qué o quién?

Sai se encogió de hombros, –es que tu y Naruto se la pasan juntos todo el tiempo y ya ni me hablan.

Sakura se sintió culpable y lo único que se le ocurrió decirle fue –la próxima vez que salga con Naruto te llevaremos y nos divertiremos. ¿Quieres desayunar mañana en mi casa?

–¿Naruto también vendrá?.

–Mis padres ya tuvieron suficiente Naruto por hoy.

–rió entre dientes pero el pelinegro no entendía el chiste.

–A él le encantaría, siempre sonríe cuando estas cerca, ¿tú ya no amas a Sasuke?
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Cuando Naruto despertó a eso de las once de la mañana, se aseo y desayuno su ramen instantáneo y se instalo frente a la computadora, Sakura le había dicho que se verían hoy así que pensaba pasarla buscando cuando saliera del hospital, mientras iba revisar que había de nuevo en el facebook.

Al entrar en su muro pudo ver que varios de sus amigos habían comentado su estado.

Naruto Uzumaki el líder: Cene en casa de Sakura-chan, mis suegros son geniales. (Publicado ayer)

Kiba el buenote: Chupamedias (publicado ayer)

Princesa Ino-sin-rival: al menos Naruto si tuvo el valor de ir a casa de Sakura, tu ni que acercaste a mi casa.

Kiba el buenote: Hey, estamos hablando del chupamedias de Naruto, si no te acompañe es porque no quiero que tu padre se meta en mi mente. (Publicado ayer)

Princesa Ino- Ino-sin-rival: así de sucia la tendrás. (Publicado ayer)

Kiba el buenote: (Publicado ayer)

Solo Tenten: hey ustedes dos vayan a hablar en privado, Naruto felicidades tu y Sakura son la mejor pareja. (Publicado ayer)

Gaara de la arena: Felicidades Naruto, bien por ti amigo (publicado ayer)

La grandiosa Temari no teme a nada: Naruto Noño.  (Publicado ayer).

Rock lee ahora soltero y buscando novia: como puede ser que te hayan aceptado tan rápido? T.T (Publicado ayer).

Shikamaru Nara: ahora sí que te fastidiaste tú mismo, cuando menos te lo esperes ya estarás casado y con hijos (Publicado ayer).

La grandiosa Temari no teme a nada:¿no había dicho que ya no tenías facebook? (Publicado ayer).

Shikamaru Nara: estoy esperando a que me cancelen la cuenta por no usarla (Publicado ayer).

La grandiosa Temari no teme a nada: por Kami-sama eres tan perezoso que te da flojera darte de baja, sinceramente tu florera da flojera (Publicado ayer).

Papas fritas: Naruto, ¿cuándo te cases van a servir cerdo asado o frito?, ojala sea frito, humm… ya me lo imagino humm… voy a comer y luego te escribo un comentario más largo (Publicado hace 30 minutos).

–¿y estos que se han creído para hablar tanto en mi muro sin que yo esté presente?.
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En casa de Sakura ya habían desayunado, y Sai ahora veía Televisión  mientras le sujetaba un bollo de estambre a la madre de la chica. La pelirosada no sabía cómo su amigo había terminado en esa situación.

–¿Sai puedes venir un momento? –le dijo intentando liberarlo de su tarea.

El chico camino hacia la cocina donde estaba ella, –No tienes que hacer eso, eres libre de decirle que no a mi madre o a quien sea.

Sai se encogió de hombros. –a mi no me importa, prefiero ser útil que estar encerrado en mi casa, anoche leí hasta las tres de la mañana.

–No hagas eso, dañaras tu vista.

–La conclusión es que, por más que lea, hay cosas que nunca entenderé, –Sakura suspiro estresada, –quiero besar a alguien.

Ella levanto ambas cejas, –mejor que sea a una chica y no a “alguien” –recalco soltando un risita burlona.

–Tú eres una chica, ¿puedo besarte?. –paro la trompita inclinándose hacia los labios de su amiga.

–¡Kyaaaaaaaaaaaaaaaaaa! –grito propinándole un puñetazo en la cara.

–Me dolió. –gimió levantándose del suelo con la mejilla hinchada y una lagrima. –¿porque me golpeas tan duro?.

Sakura estaba completamente indignada, –¿CÓMO QUE PORQUE?, ¡ibas a besarme baka, baka, baka!. –le grito alterada por poco el pelinegro la beso, y ahora se comportaba como si nada, eso era demasiado para su equilibrio mental.

–Solo era un experimento. –se excuso.

–¡Pues vete a hacer tus experimentos a otro lado!.

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Eran las dos de la tarde cuando Sakura llego al apartamento del rubio, toco la puerta y Naruto se extraño.

–¿Eres tu Sakura-chan?, –pregunto sin despegarse del computador ella respondió y él volvió a gritar, –¡la puerta está abierta pasa!.

Sakura entro y entorno los ojos cuando lo vio allí frente a la computadora, –¿no fuiste a trabajar?.

–Ayer te dije que estoy de vacaciones.

–¿De veras?, entonces tenemos que tener muchas citas, ya estoy terminando Sakura-chan espera un momento.

Sakura se sentó en la orilla de la cama, recordó lo del casi beso con Sai y ni en un millón de años se le ocurriría mencionárselo al rubio, porque sabía que haría todo un drama de esa tontería.

–¿Y qué te pareció mi familia? –le pregunto, desde donde estaba podía escuchar los sonidos provenientes de la computadora, él estaba jugando un videojuego.

–Tu padre es muy simpático, a tu madre le caigo mal, pero creo que es por lo del kyubi.

–No es por lo del Kyubi es por el beso, cree que eres una saco de hormonas.

Naruto grito un –¡Yahoo, estoy a punto de vencer mi record!.

Sakura entorno los ojos, espero a que Naruto ganara el dichoso juego, pero el continuo jugando por varios minutos más, era de ese tipo de jugos que no guardan las partidas y él no podía abandonar, no cuando le faltaba tan poco para ganar todos los niveles.

–Ya me aburrí me voy. –anuncio ella poniéndose de pie.

–¡Espera Sakura-chan!, solo es un momento y ya.

La chica se acerco y lo vio luchando con perros endemoniados y toda clase de monstros satánicos, y eso no le pareció interesante, de hecho le molestaba verlo pegar alaridos cada vez que ganaba bonos.

–Salgamos a dar una vuelta. –insistió la chica.

–Si supero este nivel iremos a donde tú quieras Sakura-chan-linda.

Ella bufo, –apúrate.

Intentaba ser paciente y comprensiva con la afición de Naruto con esa cosa del internet, pero tener que esperarle era molesto, sin mencionar que estaba acostumbrada a tener toda la atención del rubio, ¿aquella cosa como le iba a ganar?, era cuestión de honor no dejarse ganar con una maquina.

–A ver explícame como se juega eso.

Naruto comenzó a parlotear cosas del bendito juego que ella ya odiaba y Sakura que estaba de pie tras él, comenzó a jugar con el cabello del chico, peinándolo con los dedos, para hacerlo perder la concentración y perder el juego.

Caricias que hacían que a Naruto se le enchinara la piel, –Sakura-chan –musito alzando la cara, y entonces ella acaricio sus mejillas y lo beso en los labios, Naruto abrió la boca y se besaron un rato en esa posición, (ella de pie y él sentado), se besaron hasta que un escandaloso ruido en el computador le indico que su personaje había sido asesinado.

–¡Mierda, maldito perro!. –se quejo.

Pero su rabia no era mayor que se excitación por aquel beso, giro en la silla para quedar frente a la chica, –Sakura-chan, quiero besarte un montón de veces.

–¿Que tantas? –le pregunto mordiéndose el labio inferior, ella también se sentía como rara.
–Muchísimas, –murmuro, estiro la mano hacia ella y Sakura se sentó en sus piernas.

Ella lo beso y Uzumaki profundizo en su boca, era un beso diferente a todos los que habían compartido, este era particularmente lujurioso, tanto que Naruto no podía controlar sus manos, acariciaba la espalda de la joven mientras ella sin romper el beso le alborotaba el cabello ladeando la cabeza del joven a su antojo.

–Sakura-chan. –Susurro en su boca, –tu padre me dijo.

–Ya imagino lo que mi padre te dijo… pero no se lo diremos.

Volvieron a besarse y el rubio no volvió a hablar, no era como que Sakura estuviera pensando, o como que Naruto fuera a detenerla cuando ella comenzó a acariciarle el abdomen bajo la franela, tampoco era como que la silla fuera a soportar tanto peso. Un feo ruido se escucho, Sakura chillo y de un momento a otro cayeron al suelo.

–¿Estás bien Sakura-chan?. –le pregunto preocupado y enojado con la maldita silla.

–Mi codo, –se quejo frotándose el brazo.

Sakura se sentó en el borde de la cama y el rubio se sentía demasiado acalorado como para poder quedarse quieto, –déjame ver. –Se arrodillo y reviso su codo, –se ve normal.

–Pero duele, usare mi chakra.

–Llorona, –la fastidio Naruto, –yo te curo, –le dio un besito en el codo y luego busco sus labios y volvieron a los besos de antes.

Se recostaron en la cama, él sobre ella, –Naruto me tengo que ir. –se alarmo ella, en realidad no tenía que ir a ningún lado, pero tenía miedo de lo que podían hacer si se quedaba allí.

–Ahora te acompaño… solo espera un tantito.

–susurro en su oído, la mantenía bajo su cuerpo.

El rubio no sabía qué demonios le pasaba pero no podía controlar su cuerpo.

–Naruto–murmuro sorprendida cuando el rubio comenzó a besar su cuello por primera vez, sabía que debía detenerlo, pero era una sensación tan placentera que lo dejo.

Sakura puso una mano sobre el pecho del chico y él entendió que quería que se apartara, pero grande fue su sorpresa cuando Haruno solo quería sacarle la franela negra, él alzo los brazos y la prenda quedo a un lado de la cama.

Ahora ella tomo el control quedando arriba, la chica se bajo el cierre de la blusa y los ojos de Naruto brillaron maravillado, ella llevaba un sostén color negro que contrastaba con su piel clara, sus pechos no era muy grandes, pero si muy bonitos y firmes. –Sa-sakura-chan, yo, yo, ¿puedo tocarte?. –balbuceo.

Ella se ruborizo, tomo la mano del chico, y Naruto casi murió de un paro cardiaco cuando sintió la suavidad de la piel del abdomen de la joven, –Sakura-chan tu piel es tan suave y tu tan bella.

–Chiss… no sigas hablando, porque si lo haces estoy segura que lo arruinaras.

Uzumaki soltó una risita, se sentó quedando frente a ella y dijo, –entonces no hablare.

Ni siquiera le había hecho nada cuando Sakura pego un chillido de dolor que la hizo caer de la cama. –que, que, ¿qué te paso Sakura-chan? –le pregunto saltando de la cama.

–Este maldito reloj me ha dado un choque eléctrico. –lloriqueo frotándose la muñeca.

–¿El reloj?. –pregunto sin entender.

Sakura reviso el objeto y frunció el ceño, la Hokage les había repartido uno para cada integrante de los escuadrones médicos, pero se suponía que solo tenían que darle un pequeño y casi insignificante pinchazo eléctrico cuando su maestra o el hospital requiriera de sus servicios.

–Maldita Ino, eso era lo que estaba haciendo con mi reloj ayer en la tarde. –murmuro Sakura entre diente.

–Sakura-chan no entiendo nada. –comento Naruto quien seguía sin camisa y algo muy abultado en su pantalón, la chica lo miro y aparto la vista enseguida.

Haruno se acomodo la ropa y le dijo, –tengo que ir al hospital o a la oficina de la Hokage.

–Pero. –se quejo haciendo un puchero.

–Me voy, lleva la silla con mi padre, te dará una nueva.

Sakura se marcho y Naruto se sentó en la cama frustrado, y una voz en su interior no tardo en hablarle.

–Hey mocoso al fin haces algo interesante, me ha gustado mucho y creo que a ella también.

Naruto se apretó el estomago enojado. –cállate maldito zorro, ni siquiera pienses en Sakura-chan, ella es mía.

–Como sea, cuando lo hagas yo estaré allí. –rugió la bestia de las nueve colas.

Después de que Naruto calmara su enojo e impotencia de saber que el zorro tenía razón, se fue a dar una ducha para resolver “ese problemita” con parte de su cuerpo.

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Kizashi Haruno atendía unos clientes en su tienda cuando Naruto llego con la silla rota, espero a que su suegro terminara de atender a los clientes y luego se acerco para saludarlo y le explico que necesitaba comprar una silla.

–Que buen porrazo te llevaste chico, ¿cómo se te rompió esa silla?.

Naruto abrió los ojos como platos y Kizashi se rió, el pobre hombre no tenía ni idea de lo que paso, pero el rubio se asusto de solo imaginar ser descubierto. Uzumaki se rasco la nuca riendo nerviosamente.

–Jeje… me deje caer con todo mi peso y se rompió, ¿Cuánto me costara la silla?.

–Te la dejare gratis porque ya casi somos familia.
Naruto no tuvo tiempo de insistir en pagar porque la madre de Sakura que venía saliendo del depósito dijo. –Nada de eso, aquí todo el mundo paga.

–Pero mujer, es Naruto.

–Yo insisto en pagar. –aclaro Naruto sacando su monedero con forma de sapito.

La mujer al ver su monedero levanto ambas cejas, quizás pensando en lo infantil que era el héroe de Konoha.

–guarda tu dinero muchacho, tengo una idea mejor, estoy haciendo labores de caridad en un asilo, me gustaría que me ayudaras a cuidar a los ancianos.

–¡Claro que si señora!, ¡con mucho gusto la ayudo!. –exclamo con mucha energía.

El pobre Naruto no tenía idea de lo que lo esperaba, Mebuki sonrió y hasta Kizashi sintió lastima por él.

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N/A: Lamento la demora, aviso que quedan dos capítulos y termina el fic. Por cierto aclaro que aquí Naruto y Kurama aun no se llevan bien, como ya lo notaron.

                                                                           

 Cap. 17: El internet de Konoha
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–Sensei del hospital me enviaron aquí, ¿tiene alguna misión para mí? –pregunto Sakura de pie frente a la Hokage en la oficina de esta.

Su maestra tamborileo una pierna con impaciencia, algo que Sakura no podía ver por que la mayor se encontraba tras el escritorio, la rubia se aclaro la voz antes de responder.

–Sakura, ¿sabes porque tu equipo lleva meses sin una misión?.

Sakura no había pensado mucho en eso y Naruto menos, Sai era el único que se aburría como una ostra.

–Usted nos dijo que aguardáramos a su llamado, pero no nos ha pedido nada, me ha parecido raro, y Naruto ha estado tan distraído con el internet que solo piensa en eso.

Oh, sí era más fácil culpar a Naruto, la rubia levanto ambas cejas, sabía perfectamente en que andaban ese par y prefería no profundizar en el asunto.

–Yo mande a instalar esa tecnología para poder mantener a Naruto aquí en Konoha, tú y el internet lo han mantenido a salvo. –confeso Tsunade.

Haruno que hasta ahora no había prestado mucha atención a la plática, pues seguía pensando en ese arrebató de pasión que había sentido por el rubio, frunció levemente el ceño.

–¿Yo?, no entiendo nada.

–Te hiciste novia de Naruto en el mejor momento. –comento con seriedad Tsunade. –hasta parece que lo hubieses sabido. –sonrió levemente.

–Sigo sin entender.

La rubia cruzo los dedos sobre la mesa, pose que tomaba cuando iba a decir hago más serio y Sakura lo sabía por eso se preocupo.
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Cuando el sol se oculto y el cielo fue adornado con una luna en cuarto menguante, Naruto se encontraba asechando la casa de los Haruno, quería hablar con Sakura, pues necesitaba información extra sobre la señora Mebuki, el rubio espero a que su novia apagara la luz de la ventana de su cuarto y salto hasta su balcón.

–Sakura-chan. –susurro bajito del otro lado del cristal. –Sakura-chan.

La joven ninja al escucharlo salió de la cama, ahora que sabía que los Akatsuki en cualquier momento volverían a Konoha por Naruto, tenia los sentidos al 100%, salió de la cama y abrió la ventana.

Uzumaki se sorprendió cuando ella lo abrazo, –Sakura-chan, ¿estás bien?. –pregunto preocupado.

Ella lo soltó frunciendo el ceño, –¿acaso me tiene que pasar algo para poder abrazarte?.

–¿Eh? –Balbuceó el chico rascándose la cabeza.
Nunca iba a comprender porque Sakura buscaba cualquier motivo para regañarlo, pero eso no le molestaba en absoluto, porque cada vez que ella se enojada con él, Sakura no veía a nadie más, en esos minutos Sakura-chan era solo para Naruto Uzumaki.

–Tú me puedes abrazar todo lo que quieras, –agrego acercándose a ella, –y me puedes besar muchas veces como hoy en la mañana. –añadió rodeando la cintura de la joven con ambos brazos.

Sakura se ruborizo en la oscuridad de la habitación, pensar que Naruto y ella estaba allí solos con la cama cerca, la puso inquieta y cuando el rubio estaba a punto de besarla giro la cabeza.

–¿No me has dicho porque estás aquí?

Naruto recordó la razón de su visita y libero a Sakura, –¿esa puerta tiene seguro verdad? –Pregunto asustado, –porque si tus padres me encuentran aquí me matan.

–Hace un momento no te daba miedo cuando intentabas besarme, –se burlo y para jugar con los nervios del chico pasó ambos brazos por los hombros del joven.

–Uh, Sakura-chan estas muy cerca. –balbuceo mirando la puerta con el temor de que esta se abriera en cualquier momento y él quedarse, sin novia, sin suegros y sin familia.

El otro día hablando con Kiba por facebook, el castaño le había preguntado sin nunca le había gustado otra chica, la respuesta inmediata de Naruto fue no, siempre le había gustado Sakura-chan, de hecho ya no le gusta, la ama, por eso era de vital importancia para él, ganarse la confianza a la madre de su novia.

–Pues me acerco lo que quiera, –respondió, lo beso en los labios y Naruto no se atrevió a cerrar los ojos por si acaso la puerta se abría, ni respondió al beso, eso la ofendió, –que gallinazo eres.

–¡Eh!, eh, ¡Sakura-chan no soy gallinazo!. –se quejo con su voz chillona.

Sakura le tapo la boca con la mano, –no hagas ruido mis padres están en la habitación en el otro cuarto.

–¡Sakura!, ¿con quién hablas? –le pregunto su madre deteniéndose frente a la puerta que estaba cerrada.

Naruto abrió los ojos como platos y Sakura esta vez no respondió para que su madre pensara que estaba dormida. –¡hija! –insistió la señora.

El corazón del rubio latía como un tambor, –ya mujer la vas a despertar, –hablo su padre, –ahora vente que hoy es viernes y me toca.

Sakura entorno los ojos apenas escucho eso, –¡cállate! –le grito Mebuki.

–¿Pero que hice? –se quejo su progenitor.

–Puedes callarte, creo que el chico estaba allí.

Ahora si Sakura se asusto y Naruto estaba a punto de sufrir un infarto, –ven mujer, te hare un masaje y ya sabes.

–¡Que te digo que el chico esta allí!. –insistió tercamente.

–Paranoillas mujer, Naruto es el chico más inocente que he conocido, ya olvidaste que ni siquiera sabía que era una lesbiana, seguro todavía cree que Santa Claus existe.

Escucharon un gruñido de la madre de la joven y luego pasos alejándose, iban a la sala, para ver la Tv. juntos, los viernes era el día que Kizashi podía apoderarse de la televisión y ver lo que él quisiera sin que Mebuki pudiera cambiarle el canal, era un acuerdo que habían hecho por escrito.

–No puede ser Santa Claus no existe. –dijo Naruto con dramatismo apenas ella le destapo la boca, Sakura entorno los ojos y él soltó una risita.

–solo bromeaba Sakura-chan, ya me voy, mañana tu madre me llevara a un lugar donde viven los viejos.

–Entonces quiere probar tu paciencia, Naruto trata de controlarte, hazlo por mí.

Los dos sabían que la paciencia no era una de las virtudes de chico.

–Jeje… confía en mi Sakura-chan, te hare sentirte orgullosa, –le aseguro con esa determinación que tanto lo caracteriza.

Ella sonrió levemente, confianza era lo que más había entre ellos, de hecho Naruto es la persona en que más confía, por eso le sabía tan mal ocultarle la información que la Hokage le había contado.

Lo acompaño hasta la ventana y antes de que Uzumaki saliera se giro y la beso en los labios apegándola a su cuerpo y adentrándose en su boca…

–Y no soy un gallinazo. –le aclaro.
–Ya vete. –le dijo sacándolo.
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Desde muy temprano Naruto paso por casa de Sakura en busca de la señora Haruno, la mujer rubia y candidata al puesto de suegra del Uzumaki, lo llevo a una casa hogar, ahora se encontraban frente a la gran construcción toda hecha de madera, al ninja le recordó a las casas que hacia el capitán Yamato.

–Chico trata de comportarte, esta gente no tiene familia.

–Entonces son como yo, ¡descuide señora soy un experto en el trato con las personas!. –exclamo en un derroche de energía.

–Ya veremos que tan experto eres.

Una hora después los clones de Naruto limpiaban todo el lugar como locos, unos limpiaban el polvo, otros trapeaban el piso, unos lavaban ropa, otros las tendían al sol, el original tomaba té tranquilamente con los ancianos que escuchaban con interés una de las aventuras del rubio.

Esto no era para nada lo que Mebuki tenía en mente, Naruto estaba disfrutando estar allí, ¿y qué clases de suegra seria ella sino es capaz de torturar un poco al novio de su hija?, “este chico este resistente”.

–Chico ven acá. –lo llamo Mebuki.

Naruto enseguida se puso de pie y camino hacia la mujer, –señora Haruno si necesita algo solo dígamelo. –se apresuro a decir.

–Tus clones están poniendo nerviosos a los abuelos, haz que desaparezcan.

–Pero yo no los he visto quejarse. –Replico.

–Eso es porque no se atreven a decírtelo.
Naruto no muy convencido dijo:

–Hum, está bien.

Hizo desaparecer todos los clones y la mujer dijo, –tienes que terminar con todas las tareas antes de las cinco de la tarde.

Eso no iba a detener a Naruto Uzumaki, con una energía envidiable, barrió el piso, trapeo, lavo y tendió, eran las cuatro de la tarde cuando estaba tendido en el suelo de madera, las labores del hogar no era algo a lo que Naruto le prestara mucha atención, por algo tenía el apartamento hecho un chiquero.

–Aquel anciano necesita que le corten las uñas de los pies. –le comunico Mebuki conteniendo las ganas de reírse.

–¡¿Que?!, –chillo Naruto.

–Las uñas de los pies.

Naruto vio al viejo que levanto un pie moviendo sus dedos, Naruto batallo con la idea de mandarla al diablo, pero luego recordó las palabras de su novia, “hazlo por mi”, “hum, me deberás una grande Sakura-chan”.

–Enseguida voy.

Enfrentarse a las uñas apestosas de ese viejo fue la cosa más asquerosa que Naruto había hecho, para soportarlo no dejo de pensar en Sakura mientras realizara el trabajo, cosa que casi provoco que le cortara un debo el anciano.

–Gracias chico esa uña me dolía mucho al caminar.
Bueno al menos el viejo fue agradecido, ya cuando comenzaba a anochecer, Mebuki tuvo que reconocer para sí misma que Naruto es un buen chico, hacer todo eso solo por ganarse su buena voluntad era halagador.

–Vamos Naruto ya es hora de irnos.

El rubio sonrió, era la primera vez que la mujer le llamaba por su nombre, –Claro suegra.
–respondió con aire presumido.

–¡No me llames suegra! –le grito pero nunca logro alcanzarlo.
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Naruto llego a su pequeño apartamento, se ducho comió algo y salió a la calle, se encontró con Kiba y Shino que paseaban con Akamaru, los saludo y el chico de los insectos le invito a su boda que se realizaría dentro de dos semanas.

–Quee, ¿hablabas en serio con aquella historia de tu prima? –chillo escandalizado.

–Yo no digo mentiras. –respondió seriamente el de gafas oscuras.

–Sí, claro, como si yo no fuera escuchado cuando tu tía te amenazo de cortártela si no te casabas. –se burlo Kiba.

Shino se ruborizo bajo sus gafas y Naruto se doblo de la risa.

–No es cierto, tu ni siquiera estabas allí.–replico Shino.

–Lo ves, acaba de confirmarlo. –comento el castaño.

Cuando se hicieron las ocho de la noche Naruto se despidió de sus amigos y decidió pasar por casa de Sakura, como de costumbre salto hasta el balcón y la ventana estaba extrañamente abierta.

–Sabía que vendría –comento la joven leyendo un libro en la cama.

–¿Y cómo lo sabías? –pregunto sentándose en la orilla de la cama.

Ella cerro el libro, –entre tu desordenada vida, te has hecho la rutina de venir aquí casi todos los días, y eso es porque no puedes vivir sin mí.

–comento como si nada, él levanto ambas cejas sorprendido de la modestia de su novia, y ella se mordió el labio conteniendo las ganas de reír.

Naruto se quedo mirando sus labios con ganas de besarla, –Sakura-chan, eres una presumida.

Ella negó con la cabeza y le hizo un lado en la cama para que se tumbara con confianza, Naruto no dudo en acostarse a su lado –cuéntame, ¿qué te hizo mi madre?.

–Darme mucha lata, pero yo no me rendí nunca, hice todo lo que me pidió, y creo que ahora me quiere un poco.

–Seguro que tu optimismo la hizo enfurecer.

–Un poco, ¡pero nadie puede con Naruto Uzumaki, yo nunca me rendiré! –exclamo alzando un puño hacia el techo.

–Cierra la boca mequetrefe, ¿acaso quieres que te descubran aquí?.

Naruto la miro desde arriba y sonrió.

–Cállame con tus labios Sakura-chan. –susurro tomando el rostro de la joven entre sus manos, se elevo un poco, la beso y se besaron, lento y apasionados.

Tener el cuerpo se su novia sobre él era fascinante, reconfortante y cálido, solo por ese momento volvería a repetir la horrible tarea de cortar las uñas apestosa.

–Debes estar cansado, si es que eso es posible.

–comento Haruno, el rubio acaricio su rostro y Sakura lo beso en los labios, el rubio abrió la boca y sin soltarle el rostro se fusionaron en un beso ardiente y largo…

–No deberíamos de besarnos de esa manera, es peligroso. –comento ligeramente agitada.

–See, –la apoyo decepcionado, –estoy muy cansado Sakura-chan, ¿me dejarías dormir contigo aquí?.

La ninja se aparto de él como si quemara, –jo, ¡¿qué te crees atrevido?!.

–¡Hija la comida ya está servida ven a comer, antes de que tu madre se moleste!

–Voy papá.

Le lanzo una mirada rabiosa al chico y murmuro, –¿ya comiste?

El negó y Sakura salió de la habitación, al poco tiempo le trajo un plato de comida escondido, –Sakura-chan, gracias. –agradeció sorprendido.

–Gracias nada, no se te ocurra comer en mi cama.
Salió y Naruto devoro la comida, luego se volvió a tumbar en la cama y abrió el libro de medicina que leía su novia, cogió un lápiz y escribió unas palabras en la hoja que ella leía. Al rato cuando la chica regreso el rubio se había quedado dormido de tanto esperar.

“Este Naruto, no está ni tibio si cree que lo dejare dormir aquí”.

–Eh Naruto despiértate.

Lo empujaba pero el rubio no despertaba, con semejante hamaqueó cualquiera despertaría, y él lo hizo, que fingió estar dormido, el libro cayó al suelo y cuando lo recogió leyó las palabras del chico se enterneció.

–Ese baka. –murmuro sonriendo levemente, lo iba a extrañar muchísimo cuando la Hokage lo enviara al país del Rayo para protegerlo, ella había intentado convencer a su maestra para que la dejara acompañarlo, pero la Hokage insistió en que la necesitaba con ella, Sakura todavía no sabía porque, ni para qué.

Vio al rubio con los ojos cerrados que dormía inocente de todo lo que le faltaba por vivir, –Tienes un gran destino Naruto. –murmuro arropándolo.

Guardo le libro y comenzó a ponerse la pijama a espaldas de él, aunque Naruto abrió un ojo para verla cambiarse, no logro ver nada porque justo en ese momento la chica apago la luz, luego sintió que la cama se hundía de un lado y ella se metía bajo las sabanas junto a él. Uzumaki sin ningún disimulo la abrazo por la cintura y ella gruño.

–No te pases de listo o te romperé la cara.

–Naruto aparto el brazo y ella se apego a él, Uzumaki soltó el aire de sus pulmones ahora sí que le costaría mucho poder dormirse.
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Es fantástico... Cada momento que viven es muy tierno y todo lo que se viene suena muy emocionante
Sigue pronto con la conti...

N/A: Aquí el capitulo final





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Cuando Sakura abrió los ojos, Naruto aun dormía profundamente, aparto la almohada que los separaba y se acerco al jinchuriki, –Naruto despierta tienes que irte a tu casa. –le susurro moviéndole la cabeza de lado a lado.

El rubio abrió los ojos perezosamente y sonrió al encontrarse con los ojos verdes de su novia, él había dormido muy poco, porque había pasado la mayor parte de la noche sintiéndose acalorado con la respiración de la chica sobre su cuello, finalmente a las tres de la mañana puso la almohada en medio, le dio la espalda a la joven e imagino que estaba durmiendo en su propia casa, solo así logro quedarse dormido.

–Buenos días Sakura-chan.

–Buenos días Naruto, ¿Cómo dormiste?

El muchacho se froto la cara para quitarse el sueño y respondió con sinceridad, –Err, no muy bien, quise despertarte un montón de veces, quise tocarte y besarte.

Ella levanto ambas cejas, –¿quieres que te golpee, como me dices algo así? aunque yo también seré sincera, te deje dormir aquí solo para ver que tan caballero eras y pasaste la prueba… la próxima vez, seré yo quien duerma en tu casa.

–Sakura-chan… –musito ruborizado.

–¡Sakura hija!, ¿ya te levantaste?, recuerda que prometiste echarme una mano en la tienda.

Los dos se miraron, la puerta tenía seguro pero ahora que todos estaban despiertos seria más difícil que Naruto saliera sin que lo vieran.

–¡Me estoy alistando papá!.

El hombre se alejo de la puerta y Naruto dijo.

–Yo también quiero ayudar.

–Entonces márchate sin que nadie te vea salir de mi balcón, ve a tu casa desayunas algo y nos vemos en la tienda.

“Sakura-chan es tan buena”

Haruno salió con la pijama a desayunar y al rubio le costó salir por la ventana sin que lo vieran los vecinos, después del desayuno familiar Sakura y su padre se dirigieron a la tienda de Kizashi, dos horas después cuando ella creía que su novio ya no venia Naruto apareció muy contento, saludo a su suegro y no lo resistió mas.

–¡Sakura-chan la abuela Tsunade me ha pedido que me encargue de una misión rango S y yo seré el líder! –exclamo eufórico.

La chica sabía perfectamente que eso era un pretexto para ocultarlo en el País de Rayo sin que Akatsuki lo descubrieran, pero por nada del mundo podía decirle a Naruto que pronto se iniciaría una guerra contra los shinobi para que les entregaran al Jinchuriki del kyubi. Sabía que si el rubio se enteraba de eso correría hacia el campo de batalla y arruinaría los planes de todos los Kages aparte de poner su vida en riesgo.

–¡Qué bien Naruto!, ¿y donde será la misión?, ¿cuándo partimos? –tenía que fingir alegría e ignorancia.

Naruto se rasco la nuca, –Errr Sakura-chan, tu no vienes no sé porque demonios, pero regresare pronto ya verás.

–Oh, ¿y entonces cuando te marchas?.

–Dentro de tres días, porque voy a viajar en barco y están haciéndole unas reparaciones.
El señor Haruno que hasta entonces no había intervenido en la conversación los estrecho a ambos de los hombros y dijo.

–Felicidades por tu nueva misión Naruto, rango S es ultra peligroso pero tú eres el héroe de Konoha eso no es nada para ti, ahora ayúdenme a limpiar y ordenar este alboroto, Sakura estaba esperando a que llegaras y tu hicieras el trabajo sucio.

–¿De veras?, jeje entonces perdón por tardar, –hizo una posición de manos –¡Kage Bunshin no Jutsu!, –cinco clones aparecieron, –ustedes hagan todo lo que diga el señor Kizashi, Sakura-chan y yo –tomo la mano de la joven, –tendremos una cita.

–¡Naruto!. –lo regaño la ninja medico ruborizándose.

–Vayan y diviértanse. –los alentó el hombre mayor.

Al rato los dos entraron en Ichikaru-ramen, Naruto ordeno un ramen y ella solo un jugo no tenía hambre con tantas preocupaciones, además se sentía como una hipócrita ocultándole la verdad al rubio que andaba de lo mas ilusionado con la falsa misión.

–¿Qué te sucede Sakura-chan?

Ella parpadeo, –¿Eh?... nada, es que estoy preocupada por Sai. –invento rápidamente.

–¿Por Sai?, ¿qué le sucede a Sai? –pregunto con interés.

–Hace unos días andaba deprimido, porque tú y yo ya no le prestamos mucha atención.
Naruto arrugo la frente –hmp… ¿y qué es lo que estas planeando hacer?

Sakura sonrió ese Naruto la conocía más que sus propios padres, –ir al cine y llevárnoslo.

–¡Pero Sakura-chaaan!, luego no me harás caso a mí, como la vez pasada. –protesto como un niño.

Ella entorno los ojos, después de dormir juntos él aun seguía de celoso, “este Naruto es imposible” –iremos mañana y punto.

Ante esa orden Naruto no volvió a replicar, al siguiente día cuando tocaba ir al cine, el rubio antes se sentó frente a su computadora y escribió en su facebook.

Naruto Uzumaki el líder: A punto de ir al cine con Sakura-chan y el salió de Sai.

El rubio fue a ducharse y cuando regreso ya habían comentado su estado.

Ino-está soltera y disponible: que suerte tiene Sakura, Sai es muy guapo.

–Pero Sakura-chan me eligió a mí y yo dormí en su cama con ella. –refunfuño Naruto entre dientes, cruzándose de brazos continuo con la lectura.

Lo mejor de lo mejor simplemente Kiba: jaja.. Ino, el nombre que te pusiste es deprimente y Sai es gay. Jajaja..

Ino-está soltera y disponible: el deprimente eres tú, ¿mejor en qué?, en nada que yo sepa, ni siquiera sabes besar.

Temari la reina de la arena: Veeer, quien lo diría, siempre imagine que un beso tuyo seria todo salvaje y erótico. Jajaja…

Lo mejor de lo mejor simplemente Kiba: SOY SALVAJE Y EROTICO, INO SOLO ESTA CELOSA.

Papas fritas: ¿erótico? jajaja.. Debo ir a comer, al rato vuelvo.

Ino-está soltera y disponible: ¡¿Celosa yo?!, ¡ni en mil años estúpido!, tu puedes revolcarte con la Hinata si te da la gana, poco me importa lo que hagas con tu puta vida de mierda.

Shikamaru Nara: Temari creí que te gustaban los chicos inteligentes.

Lo mejor de lo mejor simplemente Kiba: YO SOY INTELIGENTE, SOY INTELIGENTE.

Hinata Hyuga: ¿Kiba-kun no dijiste que Ino-san te había terminado?

Ino-está soltera y disponible: lo termine y lo re-termino.

Papas fritas: ¿porque siempre están hablando de romance?, ahora un trió amoroso, mejor hablemos de comidas, a mi me gusta en cerdo frito, el pesado frito y el pollo frito.

Ino-está soltera y disponible: Chouji, querido, un trió seria si me la montara con esos dos y eso no va a pasar JAMAS.

Lo mejor de lo mejor simplemente Kiba: mala idea no sería seguro que ya te lo estas imaginando XD

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Ino-está soltera y disponible: ¡VETE AL INFIERNO ESTÚPIDO!.

Lo mejor de lo mejor simplemente Kiba: No me mandes tan cerca de ti.

Naruto arrugo la frente y escribió.

Naruto Uzumaki el líder: vayan escribir sus pasiones a otro lado, me importa un pimiento que si Ino y Hinata se lo monta con Kiba, ¡BORREN SUS COMENTARIOS DE MI MURO!
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Sakura en su casa, añadió las ultimas hierbas al agua que hervía en la pequeña olla sobre la cocina, luego se puso a remover la mezcla con una cuchara de madera, tenia los nervios de punta, y cada vez que escuchaba algún ruido se asustaba pensado que eran alguno de sus padres.

–Jo, un día inventare alguna pastilla que suplante este proceso.

Sintió un gran alivio cuando apago el fuego, pero el pánico la ataco cuando escucho el ruido del seguro que provenía de la puerta de la calle, con un pañito de cocina agarro la olla y corrió hasta su cuarto.

Escondió la humeante evidencia bajo la cama, se seco el sudor de la frente con el dorso de la mano y luego bajo a ver quién era.

–Huele raro. –comento Kizashi sirviéndose un vaso de agua junto a la nevera.

Sakura se asusto y dijo, –¿sí?, a mi no me huele a nada.

–Huele así como a...

–¡Ya se!, –exclamo Sakura con tanta energía que su padre se asusto dando un brinco –estaba arreglando la despensa y mamá tenía unas hierbas rara allí que ni yo conocía, estaban secas así que las saque a la basura.

–A mi me olía a pizza, pero creo que es porque me la estoy imaginando, jeje... voy a comprar los materiales para que hagamos una pizza como en los viejos tiempos, padre e hija.

Sakura respiro aliviada, –entonces anda, que yo te espero.

Saco a su padre de la cocina hasta la calle, luego regreso a la cocina y con una bandeja comenzó a ventilar el lugar agradecida de que fuera su papá y no su madre.

–Demonios casi me descubre.
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En la tarde cuando Naruto paso por casa de Sakura resulta que Sai ya estaba allí con la pelirosada, eso lo enfado un poco, –¿nos vamos?. –comento serio.

–Entra un momento, te guardamos pizza. –lo invito Sakura.

–¿Comieron pizza sin mí?, Sakura-chan no me excluyas, soy tu novio y tengo derechos.  

Sakura le enterró el puño en la cabeza, –¡deja de ser tan baka!, la hice con mi papá, Sai ni siquiera la ha probado.

–Err… Sakura-chan. –lloriqueo frotándose la cabeza.

–Parecen un matrimonio de años. –comento Sai con una extraña sonrisa, Sakura y Naruto se ruborizaron.

–¡Tú también eres un baka!.

Ahora los dos chicos entraron a la casa con un chichón en la cabeza.

–Sakura-chan es la mejor pizza que he comido, ya quiero que estemos casados para comer de tus comidas.

–¡Naruto no digas esas cosas delante de Sai! –lo reprendió ella.

–¿Porque no?, yo soy su amigo, ¿o no? –pregunto el de pelo negro.
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La estadía en el cine fue casi igual a la anterior, no los echaron del cine, Sai tampoco tomo la mano del rubio, pero si se robo toda la atención Haruno, y eso tenía furioso a Naruto. Después de la película Sai se fue por su cuenta y el Uzumaki acompaño a Sakura hasta su casa.

–Oh, deja de ser tan infantil –replico Sakura –esa seriedad no te queda bien.

Naruto se encogió de hombros, –ya te traje ya me voy.

Haruno lo tomo de la manga de su traje naranja besó su mejilla y le dijo. –no te duermas todavía.

–¿Eh?, ¿porque dices eso?.

–Solo márchate.
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Naruto se acostó en la cama y miro el techo aun pensativo, “¿porque Sakura-chan no quiere que me duerma?” tocaron la puerta y el rubio se puso de pie de un salto. Tomo un kunai y se fue cauteloso, él nunca recibía visitas y menos de noche, se tiro al suelo para ver por la ranura, vio un par de pies conocidos y abrió la puerta inmediatamente.

–¿Sakura-chan?, ¿paso algo? –pregunto preocupado.

Sakura entro cerró la puerta y lo beso en la boca mientras avanzaba empujándolo hasta que él tropezó con la cama y cayo tendido, –¿Eh?, ¿Sakura-chan? –balbuceo sin entender nada.

Sakura entro en la cama y Naruto no opuso ninguna resistencia cuando ella lo beso nuevamente de manera posesiva, más bien la atrajo de la nuca y le respondió con la misma pasión…

–No sé que tienes pero esto me está gustando y mucho. –comento con una sonrisa zorruna.

Ella apoyo ambas manos sobre el torso del chico y ruborizada dijo –Mañana te irás a tu viaje, antes de que te vayas quiero… hum… saber que se siente hacer… ya sabes… hacer el amor.

Esas palabras hicieron que Naruto comenzara a toser de la impresión, fue como que un cohete estallara en su cabeza y todo el humo de quedara allí nublando toda su capacidad de razonamiento.

Con la mandíbula en el piso y los ojos como platos movía la boca sin que las palabras tuvieran sonidos estaba demasiado impactado. Sakura omitió la parte de la inminente guerra, de que llevaba dos días sin dormir casi nada desde que Tsunade-sama le conto todo, también que no quería morir siendo virgen, porque era posible que muriera antes de volver a verlo.

–Sakura-chan –murmuro enrojeciendo con una cereza, cuando al fin salió de su asombro susurro para sí mismo –yo creo que escuche mal.

–No lo repetiré. –replico con firmeza aunque ya tres Sakura en su cabeza había muerto de la vergüenza de haber dicho algo tan directo.

Naruto se rasco la nuca ruborizándose más –Err… Sakura-chan yo también quiero, pero… pero tu padre me hizo prometer que no lo haríamos hasta casarnos. –comento arrepentido de esa promesa.

Ella arrugo la frente apartándose del joven –¿Porque prometes algo sin preguntármelo?, ¡no prometas cosas que me involucren!, ¡demonios tanto sacrificio que hice para venir aquí!.

Salió de la cama, se sentía ridícula, abrió la puerta para marchase, porque si Naruto Uzumaki promete algo, nunca retrocede a su palabra, dio un paso fuera de la casa y los brazos de Naruto la envolvieron, la metió de nuevo dentro del apartamento, cerró la puerta y la besó en la boca apoyándola contra la pared…

–¿Qué pasa con tu promesa? –le pregunto apenas tuvo un respiro.

–Cruce los dedos cuando la acepte, porque yo no deseaba esa promesa, yo… a veces sueño con que tú me dejas verte desnuda. –confeso con voz bajita, espero el golpe pero no llego.

Sakura no sabía si reírse o enojarse.

–Eres un pervertido –susurro de manera sensual en el oido del joven, la piel del muchacho se erizo al contacto de los labios de su novia, Sakura tomo ambas manos del chico y le dijo.

–puedes tocarme pero no abuces.

Las manos de él se posaron en su cintura y deslizo una lentamente bajo la blusa blanca de la joven haciéndola sentirse acalorada, ella no llevaba puesto el chaleco vinotinto. Y aunque todo de pronto parecía tan erótico Naruto con ese gorro con dientes en la cabeza hacia que Sakura perdiera la concentración.

–Por kami-sama quítate ese gorro estúpido. –murmuro sobre los labios del chico, le quito el gorro y Naruto devoro la boca de la joven.

Sakura le quito la parte de arriba de la pijama y con sus manos acaricio el torso esbelto de su novio, mientras Naruto besaba lentamente su garganta, seguían pegados a la pared.

El calor de sus cuerpos aumento varios grados y Naruto tan entregado a cada causa, no lo era menos a la hora de amar, se estaba dejando llegar por sus instintos y a Sakura le estaba cansando estar de pie.  

Lo aparto un momento y Naruto creyendo que había hecho algo mal se disculpo, se froto la cara tratando de calmarse, estaba arrepentido de nunca haber escuchado los consejos del sabio pervertido sobre como seducir a una mujer.

Sakura se mordió el labio ya había visto a Naruto con el torso desnudo, pero el cabeza hueca no tenía idea de lo sexy que se veía en ese momento, con el cabello rubio revuelto y respirando agitado.

–¿Podemos seguir? –pregunto inquieto.

–Deja de ser tan impaciente, –respondió con diversión lo empujo en la cama por segunda vez, pero Naruto revoto y cayó al suelo torpemente.

“Mierda use mucha fuerza” pensó ella.

–¡Estoy bien, estoy bien!. –se apresuro a responder levantando una mano y subiendo a la cama. “demonios debí escuchar al menos como se quitaba el sostén” pensó preocupado.
Sakura se replanteo la idea de si deberían olvidar el asunto, porque los dos siendo tan inexpertos podían echarse una mala experiencia y dejarlos traumatizados.

Sentado sobre la cama espero a que Sakura se desnudara o hiciera algo, ella apago la luz, se metió en la cama y se tapo de pie a cabeza, eso lo dejo muy confundido.

–¿Eh?, ¿Sakura-chan? –le toco el hombro sobre la sabana –¿te vas a dormir? –pregunto decepcionado.

–Me estoy desnudando baka, hazlo tú también. –respondió sacándose la ropa y dejándola caer al suelo por la orilla de la cama, no quería que Naruto la viera desnuda, le daba mucha vergüenza.

Naruto casi tuvo una hemorragia nasal al saber que estaba desnuda en su cama, tramito saliva y nervioso comenzó a quitarse el pantalón de la pijama, luego sus calzones, tapándose su hombría con ambas manos miro al techo, una cosa era besarse como locos y otra tocarse y llegar a las últimas.

“Si lo hago mal Sakura-chan me mandara al diablo, demonios porque nunca escuche al viejo ninfómano”.

Sakura asomo la cabeza bajo las sabanas se miraron a los ojos, él le sonrió y las dudas de la chica se dispersaron, porque Naruto jamás le haría daño y ella confiaba plenamente en él, además si igual terminarían casándose que de malo había si se entregaban ahora o en un par de años.  

–¿Puedo compartir tu sabana?

Ella asintió y destapo la sabana para que él entrara en lo que parecía una pequeñísima tienda de campaña, Naruto se coló bajo la sabana y situándose a su lado le dijo.

–Sakura-chan debes saber qué si tienes dudas y ya no quieres hacerlo por mí no hay ningún problema, esperare hasta que nos casemos o tú quieras hacerlo.

La habitación no quedaba completamente oscura así que podía ver en la cara del joven que hablaba con el corazón, acaricio el rostro de su novio y le dijo.

–Se que te amo por eso no tengo dudas, –el corazón del rubio se acelero al instante, era la primera vez que Sakura le decías esas palabras, –¿tienes miedo o qué?.

–¿Eh?, yo no le temo a nada –contesto fingiendo estar ofendido, ella sonrió leventemente y el chico se puso serio, –lo que temo es a perder la cabeza y no medir mi fuerza, no quiero hacerte daño Sakura-chan.

Ella entorno los ojos, –¿crees que me quedare quieta?, te detendré con un puñetazo si te sales de control.

Muy a su pesar los dos se rieron, pero con tanta charla ya la pasión había sido aplacada y la erección de Naruto había desaparecido. Atrajo al jinchuriki hacia sus labios y se besaron un rato, acariciaba el torso de Naruto dándole pequeños mordiscos eso comenzó a excitarlo y al poco tiempo ya la besaba con ardor, el cuello y la clavícula.

Con la mano temblorosa el rubio se atrevió a tocar con delicadeza un seno apretándolo ligeramente sintiendo su textura suave, ella se estremeció ante su contacto, pero no fue nada comparado con lo que sintió cuando él recorrió con los labios sus pechos.

Sakura jadeo de placer y quito la sabana que los arropaba necesitaba ver lo que hacían, lo que él le hacía y le causaba tanto gusto, con un movimiento suave Naruto abrió la boca y abarco con toda su boca parte del pecho, chupo suavemente el pezón y Sakura volvió a estremecerse.

–Por kami, ¿qué me estás haciendo?. –jadeo sofocada.

–Si no te gusta lo dejo de hacer –se apresuro a decir.

Ella negó con la cabeza y momentos después Naruto succionaba y masajeaba sus pechos con más intensidad, Sakura creía volverse loca, el chico continuo besando y acariciado cuanta piel se presentaba ante sus ojos. Uzumaki también recibió caricias y besos, pero en mejor cantidad pues él estaba centrado en hacerla sentir cómoda, amaba y segura.

Casi una hora después a falta de experiencia y algo de impaciencia Naruto le dijo, –avísame cuando ya pueda... hum... ya sabes.

Sakura se sintió insegura de nuevo, sabía que dolería y eso le causaba cierto temor, pero ella no era alguien cobarde y realmente si tenía que pasar por esa experiencia, quería que fuera con Naruto, no podía imaginarse con nadie más, a ese punto había llegado su amor por él que ni siquiera nunca llego a imaginarse con Sasuke haciendo eso y en cambio con Naruto sí.

–Hazlo ahora,–respondió con firmeza. –pero lento.

Naruto se situó entre sus piernas desde hace un rato sentía que su miembro dolía de lo duro que se había puesto, con lo excitado que estaba apretó los dientes mientras con su mano colocaba la punta de su pene en los labios vaginales de la chica, ella estaba bastante húmeda y Naruto se mordió el labio excitándose todavía más, pero de pronto recordó algo que le dijo Shino.

–Sakura-chan… ¿y si te dejo embarazada?, no tengo eso que se ponen en el pene.

Sakura se ruborizo intensamente la sinceridad y honestidad del chico a veces llegaba a puntos abrumadores –eso no va a pasar, no soy idiota, me tome un té anticonceptivo.

Ahora Naruto estaba sorprendido –¿entonces lo planificaste? –pregunto con algo de perplejidad.

–Ya no dañes el momento.

Más tranquilo pues sabía que Sakura lo mataría si la dejaba embarazada, empujo un poco el miembro en su cuevita y ella sentía dolor pero no dijo nada, cuando Naruto llego a la barrera se detuvo.

–¿Estás segura?.

Segura estaba, lo que no quería era que le doliera. –Solo hazlo de una vez, un solo dolor y listo. –lo dijo como si estuviera enojada, pero estaba tensa, asustada y él lo noto.


Sin salirse de ella Naruto se recostó sobre su cuerpo para reiniciar los besos haciendo que Sakura olvidara él asunto de la penetración o al menos eso creía él, volvió a besar sus pechos y su boca con pasión, cuando ella menos lo esperaba hizo un solo movimiento con su pelvis y Sakura grito, había dejado de ser virgen.

–Sakura-chan perdón por hacerte daño, te llevare al médico para que te revisen.

La chica respiro hondo y lo tranquilizo acariciando la espalda del rubio –yo soy médico, estoy bien, es normal, solo deja que me acostumbre.

Naruto preocupado y culpándose mentalmente por causarle ese dolor no se movió hasta que ella le dio unas palmaditas en la espalda y le susurro que continuara. Lentamente comenzó a moverse sin salirse del todo, el dolor que ella sentía fue remplazado por un placer desconocido para ella. Naruto lo estaba disfrutando tanto que se sentía mal por eso, ya que suponía que Sakura seguía sintiendo dolor, pero eso fue hasta que ella dijo.

–Demonios esto se siente… se siente demasiado bien, hazlo mas fuerte, mas rápido.

Él obedeció y la cama comenzó a rechinar por todos lados, esa noche quedaría grabada en su memoria para siempre, durmieron abrazados y cuando despertaron de madrugada lo hicieron otra vez y fue mejor que la primera, sin miedos.  

Desayunaron a las cinco de la mañana y Sakura regreso a su hogar no sin antes discutir con el rubio porque estaba empeñado en acompañarla, igual Naruto la siguió camuflado como un árbol, como si no fuera sospechoso que un árbol caminara.
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En el muelle frente al barco donde se marcharía Naruto, la familia Haruno se despedía del Uzumaki, sobra decir que nadie se entero de que Sakura no durmió esa noche en su casa.

–¡Vuélvete más fuerte en esa misión!, aquí te esperaremos. –lo animo Kizashi palmeándole la espalda en un gesto paternal.

–¡Lo hare ya se enteraran!. –respondió enérgico y alegre.

Se hizo un silencio y la madre de Sakura se acerco para despedirse, Naruto abrió la boca para hablar pero ella con un gesto lo hizo callar.

–Tengo que admitir que me sacaste de quicio el otro día, tu fuerza de voluntad es irritante, estoy segura que lograras todo lo que te propongas en tu vida, si aun quieres pertenecer a mi familia te doy la bienvenida, Naruto Uzumaki.

Sakura y su padre sonrieron alegremente, Naruto se puso como loco.

–¡Yahoo! –exclamo pegando un salto de la emoción, pero se tuvo que controlar al ver que estaba exagerando, hasta la señora Haruno no pudo reprimir una leve sonrisa. –de veras, ¿de veras me acepta para su hija?.

–Ya te lo dice, si mi hija en el futuro te acepta como esposo ya tienes mi aprobación.
–contesto Mebuki tranquilamente.

–¡Mamá no le digas eso!, luego quien lo aguanta. –intervino Sakura apenada.

–Vamos Kizashi dejemos que los chicos se despidan.

La pareja de esposos se alejaron para darles privacidad y Sakura se acerco a Naruto, le entrego una mochila que contenía una caja de primeros auxilios, píldoras soldados, vacunas contra varios venenos, entre otras cosas, comida en especial ramen instantáneo, pero a Naruto lo que más le sorprendió fue ver entre las cosas la sabana color beige con que ella acostumbraba a arroparse, se la llevo al rostro y la olfateo.

–¡Deja eso allí!, que no la vean mis padres. –lo regaño guardándola de nuevo en la mochila.

–Huele a ti Sakura-chan, me drogare con ella cada que me arrope. –comento con una sonrisa boba.

Se miraron un instante, había llegado la hora de despedirse, para Naruto solo era una misión mas, una donde pensaba sobresalir, para ella era más complicado porque sabía la verdad sobre el viaje, pero confiaba en Naruto, sabía que la sorprendería con sus nuevos poderes y que los salvaría de la guerra.

–Naruto, esfuérzate, no hagas tonterías obedece al capitán Yamato y no hagas muchos berrinches.

–¡Sakura-chaaan yo no hago berrinches!.

–Escúchame bien, quiero que te cuides, no pongas tanto tu vida en riesgo, recuerda que aquí tienes una novia que te amaba y una familia que te espera.

–Sakura-chan, –murmuro conmovido ella no tenía idea de lo que significaban esas palabras para él.

–No sé cuando nos veamos otra vez, pero mucho cuidado con andar de puto por allí. –le advirtió mirándolo con ojos entrecerrados.

–¿De puto?. –repitió ingenuamente.

–Si, tu novia soy yo que no se te olvide. –le dijo puyándole el hombro con un dedo, el rubio sonrió levemente.

–No se me olvida, –respondió abrazándola por la cintura, –eres más que eso, –se acerco al oído de la joven y le susurro, –tengo muchas ganas de repetir lo de anoche.

–¡Cállate! –se escandalizo porque sus padres estaban aun cerca, echo una mirada a sus padres que estaban entretenidos mirando las palomas en el muelle y le susurro a Naruto.

–no te dejes morir en esa misión y lo repetiremos cuando regreses.

Era una promesa, un susurro de promesa, algo que tendría que esperar todo su entrenamiento con Killer Bee y la guerra entera, pero Naruto creía que sucedería apenas regresara de su misión.

–¡¿De veras Sakura-chan?! –pregunto emocionado.

–Ya dejas de ser tan chillón. –lo reprendió jalándole una oreja.
–¡Ay, ay Sakura-chan me duele!.

Kizashi y Mebuki los miraron y apartaron la vista cuando su hija beso a Naruto, luego se abrazaron despidiéndose, Naruto se preguntaba si Sakura iría a despedirlo cada vez que tuviera una misión él solo. Porque le gustaba todo eso, hasta los golpes.

–Regresare pronto Sakura-chan, ve con tus padre y pórtate bien.

–Baka yo siempre me porto bien.

Yamato apareció cuando Naruto aun tenía un brazo por los hombros de su novia, había deseado durante mucho tiempo ser el líder de una misión, pero ahora que la tenia, no quería irse sin Sakura, no entendía porque si era el líder no lo dejaron elegir su propio equipo.

–No quiero ser aguafiestas, pero ya nos vamos. –les comunico Yamato.

–Cuide a Naruto. –le pidió Sakura con voz firme.

Yamato lo entendió como una orden y sonrió porque no sería un trabajo fácil.

–Tranquila lo cuidaremos.


–Sakura-chaaan no soy niño y menos después de lo de ano...

–¡Baka, cierra el pico!. –le grito enterrándolo en el suelo.
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El barco comenzó a moverse y Naruto grito, –¡Sakura-chan, cuídate te voy a extrañar!... ¡señora Mebuki será un placer tenerla de suegra!... ¡señor Kizashi, le traeré algún regalo exótico!.

Durante un rato el chico rubio les dijo adiós con la mano hasta que dejaron de ser visible, "me esforzare para hacerme más fuerte, los protegeré, quiero ser parte de esa familia, lo seré, lo juro."
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10 años después…

En el país del agua frente al inmenso mar azul y con la brisa acariciando su piel, el sexto Hokage de Konoha se encontraba de vacaciones acompañado de tres personas, el rubio aplicaba el protector solar en los hombros de su amada esposa y ella leía una revista de medicina mientras a cada rato levantaba sus gafas oscuras para echare un vistazo a los dos niños que construían un castillo de arena en la orilla de la playa.

Todo era tan natural y pacifico hasta que el sonido de la laptop que estaba sobre una silla sonó con un pitido. Los dos mellizos de cinco años dejaron lo que hacían para correr hasta el aparato, Sakura entorno los ojos.

–Ni siquiera estando de vacaciones dejan esa cosa en casa. –murmuro sin alterarse, estaba bastante relajada con los masajes de su marido.

–Ya no pelees Sakura-chan, es un estupendo día. –comento Naruto sentándose en la orilla de la silla donde estaba Sakura recostada.

–¿Qué caso tiene?, quieren esa cosa más que a mí, –se llego una mano a la boca y bostezó de puro sueño.

–Eso no es verdad, –respondió Naruto acariciando el cabello de su esposa la cual el embarazo la tenía bastante sentimental, –hijos guarden eso o se los decomisaré estamos de vacaciones. –les advirtió con voz seria.

–Un momento. –respondieron con voz aburrida.

Sakura bufo al ver que no hacían caso a Naruto.

–Te lo advierto Naruto, a ella –se toco el vientre de cuatro meses –no la van a enviciar con esas cosas de internet.  

Naruto sonrió, a pesar de los años Sakura no se dejo seducir por esa tecnología a la cual seguía llamando brujería, los dos niños rubios trajeron la laptop y se la presentaron a su madre.

–Mami, a tía Karin ya le exploto la panzototota.  

Sakura se sentó y tomo la laptop entre sus manos, observo la foto de la bebé recién nacida, su tercera sobrina, porque Ino ya tenía dos con Kiba.

–Vaya es idéntica a Sasuke.

Naruto quien ya había visto la foto se puso de pie para que sus hijos se sentaran junto con su madre, el rubio saco de la hielera una bebida gaseosa, la destapo bebió varios tragos y luego los observo en silencio con una sonrisa en su rostro.

Lo logro, conquisto el corazón de Sakura-chan, gano la guerra con ayuda de los demás, trajo a Sasuke de vuelta a Konoha y es el Hokage, incluso logro más que eso.
Miro al cielo y recordó el rostro de sus padres, Minato y Kushina.

“Mamá… papá mírenme desde donde estén, tengo una familia propia y soy muy feliz, ya no deben lamentarse por mí, porque nunca más estaré solo”.

Nota final: Aquí termina la historia, creo que todos se fueron a leerla en fanfiction, pero no importa, gracias a los que leyeron por acá, espero que disfrutaran tanto como yo lo hice escribiéndola. XD

*-*v me gusto y no se que mas decir soy terrible dejando comentarios   

Me super encanto y el final fue simplemente maravilloso muchas felicidades.