El lazo rojo del alma [+18] capitulo 2 (10- 6- 2014)

Bueno este es mi primer  Fic  aquí espero les guste

Todos los personajes  son propiedad de Masashi Kishimoto
La Historia  es mía en completo solo fueron utilizado personajes ajenos


El retorno

Cada ciudad es  única, con su arquitectura, sus costumbres, sus mitos, y cada peculiaridad que la  hace única y especial, sin embargo lo que logra  tornar a una ciudad un lugar en el mundo, son sus gentes, ese lugar  refugio al cual volver, aquellas calles colmadas de momentos que jamás se olvidan y que en algunos casos  marcan la vida de una persona para siempre, en este caso aquella era la ciudad de Tokio, capital del  país  Japón.  

En el aeropuerto de la ciudad se  apreciaba a una joven de cabellos rosas como las flores del cerezo  más hermoso, su lacia y sedosa cabellera al traerla suelta  daba  gala  no solo de su hermosura si no también de su largo llegando hasta la cintura de aquella  joven de un cuerpo exuberante en cuanto a belleza, cada línea de su cuerpo se dibujaba con suma sutileza a través de sus ajustadas prendas,  entre el tumulto rutinario del lugar  aquella joven caminaba con gran clase demostrando así  su procedencia y educación era una dama en todo esplendor, su mano derecha sujetaba la manija  de una maleta de mediano tamaño que gracias a las ruedas  en la parte  baja no le dificultaba en lo absoluto el llevarla  a aquella mujer de no mas de unos 25 años de edad, en su rostro se mostraba una serena  expresión mientras con su vista recorría el lugar como si buscara algo o ah alguien y efectivamente estaba en busca de quien debía ir a recibirla, saliendo a través de la inmensa puerta corrediza de cristal que daba hacía la calle  la joven escucho un tono de voz familiar que reconocería en cualquier lugar sin importar  cuanto tiempo  allá pasado era la voz de su madre, a quien pudo divisar entre  la los transeúntes del lugar y girando su cuerpo  pudo ver como  efectivamente su madre se aproximaba a  ella, acompañada por dos  hombres de distintas edades  - ¡¡¡Hija!!! – Exclamo la madre de la joven con un fuerte tono de voz colmado de jubilo, mientras daba unos escasos pasos para aprisionar en sus  brazos al fruto de su vientre, gesto que fue correspondido por la joven  – No creí que llegarías hoy, me sorprendió mucho tu llamado anoche, para  avisarnos que te viniéramos a buscar – Continuo diciendo la madre mientras  todos los presentes sonreían  observando el gesto de madre eh  hija que mostraban sin temor ambas mujer de la familia – Es que el vuelo se adelanto y ya no podía esperar más por  volver – Dijo la joven con un tono de voz neutral, al tiempo que  una sonrisa se dibujaba en su rostro, mirando por sobre el hombro de su madre, poso sus verdes ojos esmeralda en  un  joven adolescente que la miraba fijamente, la  mujer lo reconoció al instante que  sus ojos se posaron en él y  separándose un poco de su madre abrió sus  brazos invitándolo a  hundirse en ellos, mientras  articulo sus labios para decir –  ¿ Que acaso no saludaras a tu Onee-Chan, Kenshiro? – El joven algo tímido se aproximo a ella mientras  ahora la vista de todos se posaba en él, cumpliendo así el deseo de su hermana, dejando que esta lo envolviera en un cálido abrazo, asiendo que su rostro se pegara a su pecho, mientras que algo apenado por aquella situación  correspondía el abrazo, él joven la rodea con sus brazos y dijo – Bienvenida de nuevo Sakura Onee-Chan – los padres de no pudieron retener sus ansias y ambos abrazaron a sus  hijos los cueles, al ver este acto por parte de sus padres solo soltaron una pequeña risilla de  alegría, aquel abrazo estaba colmado de amor, de afecto, de nostalgia y anhelos por parte de cada uno, sin embargo el padre fue el primero en romper el abrazo para  tomar la  valija de la  joven, mientras le decía a  los miembros de la familia – Creo que deberíamos ir a la casa, seguramente Sakura debe estar cansada y estrezada por las horas de vuelo – La madre y su hermano comprendieron que habría mucho tiempo para aquellos gestos y para poder hablar recuperando el tiempo perdido, pero que efectivamente la joven necesitaba reposar en descanso tras su llegada, los padres  caminaron por delante de los jóvenes en dirección al lujoso automóvil, mientras que los  hermanos caminaban a la par, uno al lado del otro, aun que Kenshiro  posaba su vista al frente, Sakura la posaba en él recordando, cuando en antaño solo era un niño de primaria, sin dar tiempo a reaccionar la  hermosa mujer tomo la mano de su pequeño hermano entrelazando sus dedos en gesto de cariño, cosa que hizo ruborizar notoriamente al hombre mas joven de la familia Haruno, esto no paso desapercibido para  ella y a modo de juego acerco su rostro al de Kenhiro susurrando al  oído con una dulce voz – Muchos aquí pensaran que somos pareja tal vez, al vernos así – El rostro de su hermano  se puso completamente ruborizado y con su vista  recorría el lugar, en busca de quien los estuviera viendo, esto le causo mucha gracia a ella, por lo que inconscientemente comenzó a reír al ver que su broma había sido efectiva – Jajaja –  Aquello lo apeno mucho al joven, sin embargo en su rostro se mostró un gesto de molestia  ante la broma inocente de su hermana, la cual al ver  el efecto que había causado en su pequeño hermano le dijo – Perdón es que estabas muy rojo, pero para serte sincera si eres muy hermoso, y no solo por que seas mi hermano lo digo si no como mujer me pareces un chico atractivo – Ante tales palabras tan halagadoras el gesto de molestia se esfumo de su ostro tal como había llegado, sin embargo  sus mejillas un se ruborizaban y mirando hacía el frente esta vez  fue el quien hablo para decir – Tu eres una mujer muy hermosa en verdad.....– Dijo el joven con un bajo tono de voz para que solo ella pudiera escucharlo, mientras por efímeros instantes gurdo silencio y nuevamente retomar el habla – Y no lo digo por que seas mi hermana – Culmino diciendo, estas palabras hicieron que ahora sea ella la victima de un notorio sonrojo en sus mejillas.

- ¡¡Deprisa!! – Se escucho  decir con  suma claridad una voz, que ambos al guiar su vista en el lugar de donde provenía  vieron a su padre, quien cerraba el maletero del automóvil tras haber guardado la maleta, y les hacía un gesto con la mano para que apresuraran el paso, ambos hicieron  caso a la seña y llegaron hasta el automóvil, subiéndose los cuatro integrantes de la familia, el padre lo puso en marcha y comenzaron con  el camino de retorno al hogar, sin embargo a solo uso metros de recorrido sakura se inclino sobre el asiento delantero y le dijo a su padre – Papa, si no es molestia podemos ir  despacio...Es que quiero ver  mi ciudad nuevamente. ¿Oh tienes una reunión o algún compromiso previo al cual acudir? – cuestiono la joven al cabeza de familia, para saber si era posible su petición, sin embargo su padre, al oír la petición sonrío, y sin dejar de ver el camino por el cual conducía le respondió – No hija hoy no tengo nada mas que hacer que estar con mi familia, ya mañana me encargare de los asuntos de trabajo en la oficina  – Al escuchar  la aprobación ante su pedido, por parte de su padre, Sakura nuevamente retomo su lugar mientras, con sus ojos veía el paisaje a través  de la ventanilla.

Sus  ojos  se posaban en el marco escénico de aquellas calles que supo recorrer con sus  amistades, por cada lugar que pasaban con el automóvil, en el rostro de ella se  dibujaba una sonrisa, mientras que en su mente  como si fuera una película revivía los momentos vividos en esa ciudad, donde paso los mejores años de su vida, dentro de ella se formaba un remolino de emociones que la invadían, fue  hasta que paso por una esquina en particular, donde se  encontraba una cafetería, que  su rostro se torno con un gesto de gran tristeza y en su pecho sintió una angustia punzante que hizo que sus verdes ojos esmeralda se tornaran vridreosos, por unas lagrimas amenazadoras en busca de ser liberada, y en su mente  revivió el recuerdo tal vez mas doloroso y aquel  que al parecer aun la atormentaba. En su mente se reconstruía el recuerdo donde se la podía ver a ella parada en aquella  esquina con su uniforme de instituto y frente a sus ojos un joven con el mismo uniforme solo que  masculino, el joven tenia una cautivadora sonrisa y unos hermosos ojos en los cuales  ella no podía evitar perderse sujetando su mano, como si pudiera oír aun la voz de él  recordó aquellas palabras que siempre la acompañaban  quedándose grabadas en su mente, su alma y en lo mas profundo de su corazón –  Al fin terminamos el instituto Sakura–Chan, tal como soñamos iremos a la universidad y tras graduarnos nos casaremos formando nuestra familia, te amo –  En aquel momento no atino a nada, no supo que decir o más  bien no supo como decirlo, fue un acto infantil y cobarde pero no soportaba la idea de verlo sufrir en ese momento, por lo que solo afirmo con la cabeza mostrando una  sonrisa como siempre y sin mas lo beso, sus  labios  parecían en llamas, sin poder contener la pasión y el frenesí que su ferviente deseo despertaba, su lengua busco la del joven sin reparo alguno para entrelazarse en un feroz juego de roces apasionados entre ellas, no importaba nada  solo estaban ellos  aquel beso estaba  cargado con todo su amor el joven correspondía con la misma pasión y  deseo abrazando su cuerpo, de forma protectora y posesiva  eso le encantaba ser suya, sentirse deseada amada  y protegida por él, el beso no disminuía de intensidad y pasión, sin embargo  tras un momento se separaron de mala manera para tomar aire y él pego su frente a la de ella mirándola a los ojos, aquellos ojos  no poseían duda alguna  cuando Sakura los  veía sabia que solo la observaban a  ella, la  joven  con su mano acaricio su mejilla de forma tierna mientras cerraba sus párpados con un nudo en la garganta  y una lagrima que eran contenidas con todas sus fuerzas, dijo – Te amo con todas las fuerzas de mi alma  jamás lo dude eres el hombre de mi vida y el único que siempre estará  aquí – Termino de decir tomando la mano del joven con la suya y colocándola  en su pecho a la altura de su corazón sin despegar sus frentes, mientras continuaba acariciando su mejilla con total ternura, él no comprendía por que le decía aquello de esa forma, sin embargo la  rodeo con sus brazos como si quisiera introducirla dentro suyo, asiendo que su rostro se pegue a su pecho, y  gracias a ello escucho el latir de aquel corazón que le pertenecía cerro sus  ojos y correspondió el abrazo mientras escuchaba  la voz del joven diciéndole - Siempre serás la única mujer en mi vida, no podría amar a ninguna otra, eres todo mi mundo y todo lo que siempre había soñado te amo Sakura Haruno – Tras aquello se despidió con un beso  lleno de  amor, dejando en los labios de él su  alma y se alejo del lugar como siempre  mientras oía  su  voz   diciendo – Mañana te esperare aquí amor, para  ir juntos a nuestra cita te amo -  Sin contestar solo continuo su camino, sin poder decirle que  no llegaría, por que en la mañana  siguiente se iría del país, aquella  tarde  dejo su amor y su alma en aquella  esquina.

El  viajé  continuo tranquilamente sin embargo  hundida en aquel recuerdo reviviéndolo una y otra vez, no  se pudo percatar de apreciar el resto  del paisaje que el recorrido le ofrecía y así  sin poder  notarlo  solo sintió que el automóvil dejo de andar,  sin comprender el motivo por el cual  esto sucedió pregunto al resto – ¿ Qué sucedió, por que nos detenemos? – Al oír aquellas  palabras,  todos se sorprendieron, ya que habían llegado a su destino,  fue  la madre quien mirándola a través del  espejo retrovisor le respondió  a su hija quien esperaba una respuesta, con una expresión de confusión en sus ojos   – Ya hemos llegado hija, estabas tan absorta perdida en tus pensamientos que no lo notaste al parecer – Ante  las palabras de su madre quien había saciado sus  dudas la  joven solo  sonrió aun algo confusa y  se escucho la risa por parte del  resto de la  familia al ver la confusión de la joven, los cuatro integrantes  bajaron del vehículo,  encaminándose  a la puerta de la gran casa de la familia Haruno, aquella casa poseía un  hermoso diseño arquitectónico moderno,  y un jardín con diversas especies de plantas, con un  verde césped cortado de tal manera que pareciera  cortado por una pequeña tijera. Tras subir los tres escalones para alcanzar  la perilla  de la gran puerta de una fina y costosa madera, el padre de la familia  giro  su rostro mirando por sobre su hombro a su hijo menor quien caminaba   mas rezagado del resto y  girando la perilla le  dijo  – Kenshiro trae las maletas de tu hermana – Algo ofuscado ante el mandato el joven acato la orden dada por su padre, cuando se iba a  encaminar hacia el maletero  Sakura soltó una risilla  que llamo la atención del menor, mirando a su hermana el joven pregunto algo confuso a que se debía  esa risa – ¿Por qué  te estas riendo de esa manera  Onee-Chan? – ante  aquellas palabras la joven mujer detuvo su risa para contestar la pregunta conformada por  su hermano – Es que eres un despistado, como  abrirás el maletero si esta cerrado con llave – Efectivamente,  aquellas palabras estaban cargadas de razón y verdad,  el joven miro a su padre quien  los estaba  observando y metiendo las mano en el bolsillo del pantalón tomo el llavero  y se lo lanzo  con cuidado al menor quien  tomo las llaves  en el aire  con sus manos,  y  de forma tranquila los tres entraron a la casa mientras él abría el maletero y tomaba la valija  para como el resto encaminarse al interior de la residencia.
La madre les había dicho que  les prepararía algo para almorzar, efectivamente poseía un nivel social que le permitía tener una persona  que pudiera cocinar para la familia sin embargo,  ella era muy  celosa en esos  temas, solo ella podía  ocuparse  de los  asuntos  gastronómicos para su familia  eso era agradecido por los Haruno, sus comidas  tenían un gusto especial que ni el mejor chef  pudiera  recrear  no se trataba de  un ingrediente  en especial, solo era  por el simple echo que ponía  todo su amor en cada platillo que preparaba  para  degustar con su  amada familia. Por su parte, el cabeza de familia  se  metió en su estudió para relajare  aquel  era su refugio en el mundo según él, su hermano le  subió la maleta  hasta la puerta de su habitación alojada en la primera planta de la casa, mientras Sakura lo escoltaba, tras dejar las  maletas en el  umbral de la puerta,  el hermano  menor   la saludo  con una sonrisa  mientras la  dejaba frente  a su recamara y emprendía el camino de descenso por  las  escalera  para regresar  a la sala.

Tras ver  como su  hermano se alejaba, la joven Sakura respiro hondo y mientras exhalaba giro la perilla de su habitación adentrándose dentro de la recamara que supo hospedarla en  sus años pasados, como si pudiera  volver a  revivir  su espíritu  se lleno de  nostalgia y  alegría, con su  vista recorrió cada rincón  apreciando los detalles de aquel  lugar, mientras   notaba  como  todo permanecía  tal cual ella lo  había dejado aquella ultima vez que la  habito.  Dejo la maleta  a un lado de la cama, se metió a la ducha en verdad necesitaba  refrescarse, las horas sentada en  el avión la  fatigaron  físicamente y la  habían estrezado mentalmente lo mejor sería relajarse y despejar  la  mente para pensar  que  haría  a continuación, comenzó a  desvestirse despojándose de sus prendas dejando que estas  cayeran al suelo, revelando un cuerpo que pareciera esculpido por el  mejor artesano, el cual era bañada por la suave luz de aquel lugar,  mientras daba unos escasos  pasos adentrándose dentro de la tina, el agua  tibia la envolvía completamente y sin darse cuenta siquiera, se le escapo un suspiro de relajación  mientras sus párpados se cerraban de forma pesada, inclino hacía atrás su cabeza recostándola en la esquina de la tina y sus brazos  a  los bordes.  En verdad la había relajado aquello tanto que en varios momentos  había dormitado no mas de unos  instantes, el dormir en el avión era tan incomodo que  no se lo deseaba ni a sus  enemigos, los segundos se tornaron en minutos  mientras las manecillas del reloj seguían avanzando tras varios minutos, de pronto se   incorporo en la  tina y extendió su brazo derecho para con su mano tomar  la  bata que tenía su nombre  bordado,  aquella le quedaba  apenas corta, debido a que su cuerpo no era  el mismo, que cuando era una adolescente,  saliendo de la tina  el agua recorría aquella piel de porcelana tan hermosa y  frágil  tan suave. Se puso la bata y salió del baño tomo la maleta donde estaba su ropa y la  coloco sobre la  cama  para abrirla y sacar del  interior  que estaba   ordenado de forma tan simétrica que dejaba en evidencia  su obsesión por  el  orden,  tomando un pantalón de jeans azul ajustado que le encantaba sin  embargo en pocas ocasiones lo  pudo  lucir ya que comúnmente usaba un tipo de ropa mas formal, y una remera negra con un escote  algo pronunciado más no tan revelador,  y en el pecho tenía un estampado dorado de una mariposa algo pequeño y unas frases en ingles, junto aquellas prendas  también había  extraído del interior de la maleta un sexy conjunto de ropa interior de color negro con  encaje. Tras vestirse salió de la recamara para   dirigirse a la planta baja, comenzó a  recorrer los escalones de la escalera, apreciando con su  vista las  fotografías  familiares en los cuadros que  colgaban a lo largo de la pared acompañando el  camino de aquellos escalones,  al  terminar de  bajar por la escaleras, se  encontró con su madre quien estaba  por ir  a buscarla  para que   bajara  a  almorzar  pero al verla  solo sonrío de forma casual  gesto imitado por la joven al mismo  tiempo y  juntas se  encaminaron hacía el comedor donde los hombres de la familia las esperaban junto a la deliciosa comida humeante, el aroma de los platillos  tradicionales invadía el lugar, Sakura inhalo aquel aroma que invadió sus  fosas nasales deleitándose con el sutil aroma de las  variadas exquisiteces que esperaban en la mesa, al  ver aquello la madre  solo la miro algo confundida por  la reacción mostrada, era sabido que  para  la joven los platillos de su madre eran  un manjar digno de los reyes,  pero era la primera  vez que mostraba  algo como eso, para  saciar sus  dudas le pregunto algo confundida  - ¿ Qué sucede hija, acaso tanto es el apetito que tienes ? ...¿Estuviste alimentándote correctamente no hija?- Cuestiono la madre a la  joven, quien  ante aquellas palabras, pudo percatarse de lo que  había echo y algo ruborizada  respondió, mientras su rostro era invadido por  un gesto de vergüenza – Si claro que si mamá – Sentencio la  joven con total convicción, y con sus ojos contemplo el marco familiar  con un  gesto de nostalgia  y  mientras la  vista de la familia se posaba en ella, retomando el  habla  rompió el silenció que invadía el lugar – Es solo que extrañaba esto mamá, estar en casa con ustedes,  comer tu comida, y sentirme nuevamente en mi  hogar  en mi país –  Aquellas palabras  fueron dichas desde lo mas  hondo de  su corazón y sin poder contenerse  su madre la  aprisiono en sus brazos, esto sorprendió por un momento a la  joven sin darle tiempo a reaccionar la madre hablo nuevamente  - Estas en casa hija,  nosotros también  te extrañábamos mucho en  verdad – Sakura solo pudo abrazarla  esas palabras la confortaron en verdad,  no podía enumerar las veces que deseo oírlas en sus largos y solitarios días.    


Luego de aquello el almuerzo continuo de forma  tranquila entre charlas que ponían al  tanto de lo que  había pasado en  el tiempo que Sakura no estuvo en el país, como lo que  fue de sus amistades y algunos asuntos de la familia, por su parte   Sakura les contó sobre como   fue su vida en el extranjero, la mayoría eran aneglotas con un toque de comedía que le  toco vivir, incrédula trataba de asimilar lo que su padre le acababa de contar  
- ¿Cómo es posible papá? -  El  hombre  solo asintió con su cabeza reafirmando lo que le contó, tras aquel gesto ella continuo hablando mientras con su mano tomaba  la  taza de café  guiándola hasta sus labios y antes de  beber un sorbo dijo – Vaya,  no sabía que estuviste al borde de la quiebra por culpa de  tu antiguo socio... Pero veo que ahora todo marcha bien  en tus negocios – El padre tomo el  habla  ante aquellas palabras, para darle un mejor panorama de lo que sucedió - Si ya por suerte todo esta bien,  eso sucedió a los dos años de que  te marchaste, al parecer mi antiguo socio de toda la vida  malverso fondos de la  empresa y quedamos con una deuda  que no podíamos  cubrir, la suma a pagar era tan ostentosa que  debía no solo entregar la   compañía si no todos mis patrimonios para saldarla – Dijo el hombre ante su hija quien escuchaba con suma atención aquello, guardando silenció nuevamente mientras tomaba un sorbo de café, Sakura cuestiono a su padre para  saciar su duda - ¿ Y si la deuda era tan grande, como la saldaste papá? -  Dijo la joven con un tono expectante ante la posible respuesta que le pudiera dar, sin embargo el cabeza de familia antes de responder  coloco el pocillo en el pequeño pato de porcelana y cerro sus ojos  por un  instante, para abrirlos nuevamente y mirando a su hija,  le respondió con un tono neutral – Cuando ya estábamos por firmar los papeles, apareció el y  saldo la deuda comprando la compañía entera -  La joven aun no comprendía muy bien lo sucedido, si no que a medida que su padre le contaba mas interrogantes le surgían, por lo que no soporto las ansias por saciarlas y pregunto - ¿Entonces si perdimos la compañía familiar  verdad?  solo cambio de acreedor la deuda ... – Dijo con un tono desganado aquella  había sido la compañía fundada por su abuelo y ella fue testigo del esfuerzo de su padre por mantenerla,  era evidente que  perderla fue un duro golpe para ella y mas aun por no haber estado en ese momento, aun que sabía  que su presencia no  cambiaría  nada  en aquel entonces el remordimiento la atormentaba, esto no paso desapercibido para su padre  quien extendió su mano para  tomar la de su hija sentada a su derecha y le dijo con una sonrisa en su rostro – No te preocupes hija,  te agradezco el sentimiento y las intenciones pero eso ya esta en el pasado, no debes amargarte por ello – Concluyo  el hombre, sin embargo Sakura algo alterada  al escuchar aquellas palabras  dijo – No papá !!!... – La joven  notando su exabrupto retomo la compostura y prosiguió hablando de forma calmada – Perdón por elevar la voz, es que la compañía la fundo el abuelo y tu luchaste toda la vida para mantenerla, y ahora por culpa de un deshonesto socio la compañía esta en manos de un desconocido, eso en verdad me desagrada – Su padre se sorprendió ante aquellas palabras,  lo lleno de orgullo  la actitud de su  hija sin embargo nuevamente retomo el  habla – Es por eso que dije que  no te preocupes, la compañía si fue comprada por un nuevo dueño, sin embargo ese mismo día que la compro, nos visito para hablar, eso nos sorprendió pero lo que si no me espere  es que me diera un contrato de sociedad para firmar cuando la  compañía ya era suya – Al escuchar aquello Sakura quedo muy sorprendida, sin embargo  el hombre  omitió aquello y continuo hablando -  Dijo que la compañía no podía caer en manos extrañas a la de nuestra familia por culpa de alguien como mi antiguo socio, y por ello la compro para que siguiera perteneciendo a nuestra familia, así que  solo es un socio mayoritario y yo soy el director de la compañía así como también tengo su voz y voto en todo, en otras palabras el es dueño del sesenta  por ciento de la compañía y yo del cuarenta, pero en si  usa  sus ganancias para invertir en la compañía nuevamente y expandirla  mientras  mi parte  de las ganancias las deja en limpio – Culmino el hombre, mientras por su parte su hija se sorprendió aun mas quien haría algo así en un mundo de los negocios  donde cada uno busca sacar un beneficio mayor,  esto fue notado por su madre quien  permaneció apacible escuchando la charla mientras su mente recordaba  aquello, anticipando lo que su hija pudiera  decir la mujer  acoto con un calmado tono de voz - Descuida  hija el no es como todos esos tipos de negocios que conoces, es  muy distinto y dinero es lo que menos le falta,  tampoco le importa las cosas materiales -  Eso si que era una sorpresa,  jamás  había encontrado a alguien así, no lo  conocía  pero ya le agradaba muchísimo, durante su charla no  habían notado la hora y la tarde  ya  había arribado en el día, por lo que su padre se retiro a su estudio, mientras Kenshiro  dijo que saldría tenía una cita con una compañera del instituto y sakura aprovecho para decirle que lo llevaría en el automóvil  hasta el centro ya que ella iba en la misma dirección debía comprar algunas  cosas, sin embargo solo quería dar un paseo por  su ciudad natal, los hermanos Haruno se subieron al automóvil  y juntos  comenzaron el camino hacía el centro, el viaje estuvo colmado de platicas sin sentido entre bromas en  verdad se llevaban muy  bien entre ellos, al  llegar  en el lugar donde la chica lo esperaba   Kenshiro bajo del automóvil y saludo a Sakura para luego cerrar la puerta del vehículo,  ella lo miraba  alejarse unos metros a través del vidrio del parabrisa hasta que este se  acerco ah una  hermosa  joven de cabello castaño en verdad  era  una chica muy  bonita,  esto la sorprendió bastante,   como si hablara para ella  misma en realidad es lo que hizo – Ese si es mi hermanito,  la mas bonita eh picaron -  Dijo para luego soltar una pequeña risa  por un momento y sin mas puso nuevamente en marcha el motor pensando donde debía ir  primero, tantos lugares era los que deseaba   recorrer y así lo hizo estaciono el automóvil  en una cochera, se  encamino en su propio turf por las calles deteniéndose para ver las vidrieras de la tienda, compro unos bocadillos  en una  pastelería, entre los anuncios había uno que llamo su atención aquel anuncio era  mas  grande que el resto y en el  se mostraba  la fotografía de un hombre de su  misma edad aparentemente,  de negros cabellos azulados una blanca piel  perfecta y unos ojos negros intensos, la sonrisa  de aquel  hombre en el anuncio asía que  toda las mujeres  que lo vieran dieran un pequeño suspiro, Sakura  lo conoció al instante era  su artista preferido en el anuncio decía “ Concierto en  vivo de  Sasuke  Uchiha “ Esto la  alegro bastante ya que   la vez que el se presento  en la ciudad  donde la joven residía  en el extranjero por  cuestiones laborales no  pudo ir a verlo y  se había quedado con muchas ganas de verlo, por lo que pensó que  estaba de suerte al haber regresado  justo en fechas próximas  a su nueva presentación en  verdad esta vez no se lo perdería por  nada  del mundo.

Regresando a  la  residencia  Haruno tras su  paseo por la ciudad, la  joven  estaba muy relajada, pero en su mente  pasaban muchas preocupaciones de un futuro próximo,  y la mas preocupante era la búsqueda de un empleo, no podía pedir a su padre que la  empleara  ya que esa fue  una de las  razones de su viaje, si le pedía eso  el viaje   hubiera sido en vano aun que  en realidad  así  lo fue, conducía el automóvil por el camino mientras pensaba  en voz alta -  Debo ponerme en marcha y buscar un empleo lo mas pronto posible, de lo contrario sería volver al inicio si le pido a  mi padre que me  de un empleo en la compañía....- Dijo la joven en voz  baja callando por un momento, en su mente se formo una nueva conjetura del panorama – Pero  tampoco puedo estar segura que me lo de  la compañía  no es suya ahora aun que es  un socio y toma las decisiones, no puedo estar cien por ciento segura de  un empleo fijo  allí..... "- ¡Reacciona Sakura! –" Se dijo para si misma  elevando un poco la voz por un momento y retomo la compostura – No le pedirá empleo a mi padre sin importar que, soy una mujer echa y derecha ... Además  ¿quien es ese nuevo socio?  ¿que intenciones tiene y por que  hace esto por mi familia ? – Se  preguntaba  en su mente aun sabiendo que las respuesta a  esas interrogantes no las tendrá en ese  momento, pero algo le parecía muy peculiar sobre todo esto.
Sin notarlo  ya se encontraba  estacionando el automóvil en el garaje, tras aquello salió del vehículo y se encamino a la casa entrando por la puerta principal  fue su padre el primero en recibirla ya que  justo estaba cruzando hacía la cocina  - Regresaste Hija, bienvenida nuevamente – Dijo el jefe de la familia;  con una cálida sonrisa – gracias  papá; kenshiro dijo que regresaría solo – Respondió la joven, mirando a su padre  esperando la aprobación por parte de el ante la decisión del menor – Ya veo, descuida hija si  no regresa es por que se quedara a dormir  con él  seguramente – Y sin mas solo dejando aquellas palabras continuo su camino hacía la cocina,  en verdad muchas cosas  cambiaron desde su partida, pero confiaba en el criterio de su padre después de todo  la había criado a ella misma como toda  una dama.  Las manecillas del reloj continuaron andando y los minutos pasaban sin temor  así  ya se había echo la hora para preparar la cena, en esta ocasión  Sakura  había decidido  ayudar a su madre  aun que ella se ocupaba de  preparar la comida, les gustaba charlar  juntas de mujer a mujer como madre eh hija  mientras lo hacía y la  joven siempre la ayudaba en algunos casos,  y sin mas se encamino a la cocina del hogar, donde encontró a su madre pelando algunos vegetales, al verla entrar le dijo mientras  terminaba de pelar el ultimo vegetal sin levantar la vista - ¿Cómo estuvo tu paseo hija? – Pregunto la madre de forma natural – Muy  bien,  han cambiado tantas cosas,  me divertí muchísimo y al parecer  ando de racha – Dijo la  joven con un tono alegre - ¿De racha? – Cuestiono incauta la madre – Si mamá, es que Sasuke Uchiha se presentara en Tokio en unos días  y podré ir a  su concierto – Respondió la joven  saciando las dudas de  su madre quien levanto la  vista mientras cortaba  ahora los vegetales con una mirada  de sorpresa ante las palabras de su hija – ¿Y eso que tiene de especial hija? – Ante aquellas palabras no dudo en responder con  una pequeña euforia de emoción en su voz - ¿Cómo que tiene de especial? – Pregunto de forma retórica, para continuar  hablando con el mismo tono – Es Sasuke  Uchiha un cantante internacional, cuando se presento en la ciudad  donde estaba no pude ir a su concierto por cuestiones de trabajo, pero esta vez sin falta no me lo perderé por nada, es muy difícil conseguir entradas para sus  conciertos ya que se agotan muy rápido y  muchos la compran con anticipación así que tendré que estar alerta – Culmino con total convicción en sus palabras, ante la mirada de su madre , la cual  continuo cortando los vegetales para la cena  guiando su vista nuevamente a la  tabla donde estos estaban y mientras lo hacía dijo de manera natural – Si tanto lo quieres ir  a ver solo pídele a tu padre o a tu hermano que le pidan  unas entradas  a él por si vas con algunas amigas, seguramente  no tendrá problema – Al escuchar aquello la joven Sakura no comprendió muy bien de lo que estaba hablando, por lo que algo confundida dijo – ¿Pedírselo a ellos, para que se lo pidan a  él?- Pregunto, esperando una respuesta  a su incógnita, justo en ese momento  el padre entro en la cocina y abrió la nevera para sacar de ella una botella de jugo de naranja  y servirse en un baso, por lo que  esta vez Sakura poso su  vista en su padre quien la miraba sin entender la situación mientras tomaba  el jugo que se había servido en el baso, apoyándose  en la mesada, tras terminar de beber coloco el  baso en la mesada y  modulando sus labios le cuestiono para entender lo que sucedía - ¿Qué sucede hija por que me vez así? – Sakura guardo silencio un efímero momento y dijo – Es que  le  conté a mamá sobre el anuncio donde Sasuke  Uchiha daría un concierto, y que seria difícil conseguir entradas debido a su popularidad, pero ella dijo que te lo pida a ti o a Kenshiro  para que se lo pidieran a él que seguramente no tendría problemas ¿Acaso conoces  a alguien del ambiente artístico papá? – Ante aquello dicho por su  hija  el hombre solo respondió con un tono de sorpresa  – Así que eso es lo que quieres hija, entradas para el concierto de Sasuke descuida te las conseguiré, es que mi nuevo socio pertenece  a ese ambiente,  por cierto ¿Estabas por empezar a buscar empleo verdad? -  Ciertamente no le  había dicho nada sobre eso a su padre pero,  el ya   pudo anticipar las intenciones de su  hija quien quiso poner las cosas  claras para no generar una discordia – Si, estaba por empezar a buscar empleo, pero no trabajare en tu compañía, gracias por pensar en ayudarme dándome empleo pero no quiero depender de ti papa – Aquellas palabras eran las de una mujer   que sabia lo que quería,  ella sin duda ya no era  la niña de su padre  había madurado, sin embargo el hombre solo soltó una pequeña risilla y dijo – Descuida  hija ya me  imagine que dirías algo así, por ello le pedí a mi socio que te concediera una entrevista para trabajar con él, justamente termine de hablar por teléfono hace unos instantes y me dijo que no tendría problema, sin embargo es tu decisión si quieres aceptar  o no toma – Culmino diciendo, mientras le  entregaba un tarjeta de presentación donde  tenia  inscrita una dirección en el reverso – Si quieres  ir  te estará esperando mañana  a las  diez en su oficina – Y tras aquello salió de la cocina no sin antes tomar una rebanada de  zanahoria de entre los vegetales, Sakura  se quedo pensando un momento sobre aquella  propuesta seguramente aquel socio seria un hombre entrado en años, que lo único que quería era  verle el trasero  usando una ajustada falda corta,  como  su antiguo  jefe aun que opto por aceptar aquella entrevista al menos de forma momentánea  trabajaría allí hasta encontrar algo mejor, sin embargo  lo que no noto fue la mirada de su madre quien la veía como si adivinara lo que ella estaba pensando y en un bajo tono de voz  para que la joven no escuchara dijo - Puede que te lleves una gran y grata sorpresa  hija -  Aquellas palabras pasaron desapercibidas para la joven quien se  guardo la tarjeta que su padre  le entrego en el bolsillo y  se dispuso a colaborar con su madre preparando la cena. Tal como el  almuerzo la cena paso entre charlas agradables de la familia eran un momento muy intimo una atmósfera que  anhelaba con todo su corazón tras su partida y sin mas cada uno se dirigió a su recamara, Sakura fue la ultima en marcharse a sus aposentos, el día había estado lleno de sorpresas y algo agitado siquiera tuvo tiempo de llamar a su  mejor amiga  Ino  con quien jamás había perdido contacto ya que frecuentemente hablaban por computadora a través de las redes sociales, ya mañana se pondría en contacto con ella,  por ahora necesitaba  descansar y ordenar ideas además quería estar en perfectas condiciones para la cita de trabajo del día siguiente, y así lo hizo se coloco su ropa de dormir, acostándose  apenas apoyo su rostro en la almohada  callo presa en los  brazos de Morfeo, sin saber lo que le aguardaba en el día que se avecinaba.          


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por que sitno que el nuevo socio es un chico de rubios cabellos

Pues creo que fue demasiado obvio, sin embargo no intente ocultarlo ya que la historia girara en torno ah otros sucesos de mayor influencia que se revelan a medida que la historia avanza, pero gracias por ser el primero en comentar   

kyaaa muy bueno tu fic me gusta mucho como redactas espero pronto conti.  

Muy interesante el Inicio de este Fic Amigo(a). Esperemos a ver como sera la reacción de Sakura al ver a al jefe Mayoritario de la Empresa de su familia (Xq como dijiste anteriormente en tu mensaje, el Dueño Mayoritario es un Chico de cabellos Rubios)

Espero q pronto actualices; Suerte y Ja-Ne.

Hola!!
Bueno tu fic se ve muy interesante   
Pobre Naruto :c ya me imagino todo lo que sufrio por Sakura u.u espero que ella le explique todo bien cuando lo vuelva a ver, que no sé porque me parece que sera pronto    jaja tendrá algo que ver con que parece que en siguiente cap aparecera el misterioso socio del padre de Sakura?   

Este... porque el viaje de Sakura fue en vano?   

Nos leemos    

<< Antes que nada muchísimas gracias por sus palabras, en verdad son muy alentadoras, también  gracias  a todos lo que leen la  historia  aun que no comenten,  aquí les dejo el  segundo capitulo, espero les guste y lo disfruten,  como un punto aparte perdón seguramente  hallaran en el  algunas faltas de ortografía, pero no pude corregirlo ya que estuve algo ajetreado,  espero sepan disculpar  ya sin mas  aquí  el capitulo>>

Capitulo 2
                       Encuentro y rencuentro

La mañana   daba  nacimiento a un  nuevo día, que ya transitaba sus primeras horas de vida , en una  de las recamaras de la residencia Haruno una hermosa joven  reposaba en un profundo sueño mientras su cuerpo  era  cubierto por las  sabanas de seda  blanca, de pronto se escucho el sonido  de la  alarma del despertador, que  hacía que aquella mujer  comenzara a despertar  pesadamente, y de un  brusco movimiento  guiara su  brazo derecho hacía  la  alarma apagando el interruptor para que cesara el molesto ruido, y comenzara a desperezarse desacomodando aun mas las  sabanas de la cama, se  incorporo poniéndose de pie, y se encamino  hacía la  ventana que daba a su  balcón el cual proporcionaba una privilegiada  vista  hacía el jardín de la parte de atrás de  la  casa,  con sus manos  tomo  ambos   extremos de las cortinas   y  las  deslizo, dejando que  los rayos del astro rey   invadieran  la  habitación  bañándola con  su calidez,  esbozando una   gran sonrisa sin duda  el día   estaba  hermoso con un cielo despejado, un clima templado y primaveral, tras aquello se dirigió al baño para darse una ducha  ya que la esperaba una importante cita de trabajo,  en la ducha termino de despabilarse y al salir  envuelta en la  bata, abrió el  inmenso placard  de donde extrajo una falda negra  aquella  falda le quedaba   muy  sensual   en verdad  atraía  las miradas de  todos los hombres  que  la  vieran pasar y eso la  hacía sentir muy segura,  también extrajo una  camisa   blanca y un saco siendo este el conjunto de la  falda, unas  medias  color  carne  y  unos  hermosos zapatos de unos tacones no muy altos, tomo del cajón de ropa intima  un conjunto tan sexy  como el que se  había puesto solo que este era de color   rosa,  sin mas  comenzó a  vestirse y  dejando sus hermosos  cabellos  suelto aquellas prendas  le quedaban como si  hubieran  sido echas  solo para  ella, la falda  era  ajustada dibujando la  línea de su cuerpo de forma perfecta,  no era tan larga  ya  que le  llegaba  hasta  por  encima de las  rodillas y  en la parte derecha  traía un pequeño tajo dándole la  libertad  limitada para poder caminar sin problema, las medías  al ser color carne  daban la impresión que no las  traía  puestas, la  camisa blanca la  traía con los  últimos dos  botones desabrochados dejando  ver  apenas  el nacimiento de sus pechos  a modo de un juego de provocar  la imaginación de quien la  viera,  su saco desabrochado, en su muñeca izquierda un  fino y costoso  reloj  de un diseño simple y sencillo con un color  plata. Ya  vestida   aun con  tiempo para llegar a la cita, en verdad era una mujer muy ordenada  en sus tiempos no  lo gustaba  llegar  con los tiempos justos,  se dirigió a la planta baja  donde encontró a su  pequeño hermano vestido con el mismo uniforme del instituto donde ella termino sus estudios y  a sus padres  desayunando al llegar  al comedor donde la  familia desayunaba,  dejo que  una  cálida  sonrisa se mostrara en su  rostro y saludo de  forma muy animada – Buenos días familia – Dijo  la joven mientras se dirigía a su lugar donde el desayuno la esperaba y sentándose, mientras  los presentes devolvían el saludo mañanero, su padre  quien  estaba leyendo el periódico,  lo doblo por la mitad y lo coloco en la mesa a un lado de  su taza de café  para mirar a su hija  y decirle de forma natural – Si quieres hija te llevo hasta la puerta de su compañía, es que  justamente me queda de paso, debo llevar  a  tu  hermano al instituto,  pero  no creo poder llegar  a  traerte de nuevo – Culmino diciendo el padre a la joven que lo escuchaba  atentamente mientras  tomaba  un sorbo de café, y colocando la taza  en su lugar nuevamente  respondió,  ante la propuesta  de su padre – Claro,  me vendría muy bien en verdad y descuida me  tomare un taxi de regreso no te preocupes...Pero ¿ Kenshiro no llegara  tarde? -  Pregunto guiando su  vista al mencionado que   comía una tostada,  este la miro  y respondió de  forma normal – No descuida hoy tengo un viaje de estudio y  debo estar  a las diez treinta en el colegio ya que no  tendremos clases  no  hay problema – Tras  aquella  palabras continuo comiendo su tostada, ya  todo ordenado terminaron el desayuno familiar  y se dirigieron de  salida  siendo despedidos por su madre desde la  puerta agitando su  brazo,  los tres   correspondieron el gesto y se subieron al automóvil  mientras sakura  ponía en sus piernas una carpeta donde  tenia dentro unos  papeles, su padre la miro mientras  encendía el  motor  y pregunto - ¿Y esa carpeta hija? – guiando su  vista   por instinto  a la carpeta al escuchar  a su padre y respondió algo sorprendida ante la pregunta -  Es mi  currículo y algunos documentes,  si  voy a una entrevista de trabajo creo que es lo mas normal ¿no? – su padre solo sonrió mientras el automóvil comenzaba  a  andar y desde el asiento trasero esta vez fue su hermano quien  hablo  -  Pero  no creo  que lo necesites – Sin comprender  sakura  guardo silencio  al  igual que  el resto y  continuo el viaje   solo escuchándose  el sonido  bajo de la canción en la radio, y  así  su padre  se estaciono  por un momento en el destino de la joven  quien se desabrocho el cinturón de seguridad  y se bajo despidiéndose de su padre  y hermano  quien le  deseo suerte.

La joven Sakura Se encontraba de pie  ante aquel inmenso edificio   de  grandes ventanales espejados, una suave brisa  hizo danzar sus  cabellos mientras miraba con asombro el edificio frente a ella, respiro  hondo y se  encamino  avanzar  hacía la puerta  principal sin mas  mientras se decía  mentalmente “ Tranquila, todo  ira bien “ y  así  entro al lugar recorriéndolo con la vista, en verdad parecía un lugar de mucha clase, y al  final del salón halló con su  vista  un gran escritorio con dos mujeres  que al parecer  eran las recepcionistas,  por lo que sin mas  se dirigió  hasta  ellas  y  la saludo  amigablemente – Buenos días, disculpen la molestia me llamo Sakura Haruno y tengo una cita  hoy  por una entrevista de trabajo -  Las jóvenes la escuchaban atentamente  hasta que  termino de hablar y  entonces  una de ella con  gran amabilidad  le respondió -  Claro  señorita Haruno,  se nos pidió que si llegaba le indicáramos  que  se dirija al despacho del presidente  ya que el mismo  quería hablar con usted -  Aquello  había despertado la curiosidad de Sakura, tal vez su sospechas  eran ciertas sobre la clase de hombre que era el nuevo socio de su padre, así que  prefirió recavar la información que mas  pudiera antes de conocerlo y sin  temor  en su voz   dijo – Ya veo, seguramente  el presidente debe ser un hombre entrado en años, digo para ser dueño de una compañía tan grande, no habrá sido de la noche a la mañana – Las  dos  jóvenes soltaron una pequeña risilla, ante la especulación de la joven,  la misma que hablo anterior mente, le  respondió de nuevo – Tranquila no es nada de eso, de echo el presidente es un hombre joven y no es de esa clase de hombres que imagina,  la compañía si bien es la más importante  en  todo Asía no tiene muchos años desde su fundación -  En verdad  eso la asombro, no lo esperaba y no pudo ocultar su expresión de asombro que se apodero de su rostro por un momento, aun que retomo la compostura nuevamente y  continuo hablando – Ya veo, muchas gracias entonces  me dirigiré a  su oficina – Culmino diciendo con una sonrisa mientras la recepcionista le indico el camino al elevador y que debía dirigirse al ultimo piso del edificio, asiendo caso a las indicaciones  Sakura  se dirigió  a elevador oprimiendo el  botón del piso,  su mente  era invadida  por   incógnitas de que  tipo de persona encontraría en aquella oficina, sin embargo no podía saberlo hasta estar frente  a él, entre sus pensamientos    no se dio cuenta si no hasta  que la puerta se  abrió que  ya había llegado al piso donde debía bajar y rápidamente lo hizo  viendo que en aquel  lugar  había tres pasillos alfombrados  uno a la derecha  otro a la izquierda  y uno al centro, en el final de este último se podía  ver una  puerta  espejada con una perilla  dorada, sin embargo no sabía  que camino  tomar por lo que miraba  continuamente en las  tres direcciones.

- Buenos días, veo que estas perdida -  Dijo una  voz  a su espalda,  esto  hizo alarmar  a Sakura  quien se giro rápidamente para encontrarse con  una joven  de su edad  o  eso es lo que aparentaba, aquella mujer de  cabello  castaño recogido en dos pompones, quien vestía  una blanca  camisa   ajustada  y unos pantalones de vestir, y en sus pies un hermosos  zapatos asiendo juego, sin embargo noto que en sus manos sostenía unas carpetas  colmadas de papel, dando se cuenta de su descortesía Sakura  la saludo algo avergonzada ya que había acertado en su suposición - Muy buenos  días mi nombre es Sakura Haruno  y  si  creo que acertaste estoy perdida, tengo una entrevista  de trabajo con el presidente pero no encuentro su oficina -  la joven la escucho atentamente, para luego  decirle – Mucho gusto Sakura mi nombre es  Ten Ten y soy la jefa del departamento contable de la compañía, en otras palabras  hago el trabajo aburrido de los números jaja – Bromeo al final sobre su trabajo, cosa que   hizo relajar  a  Sakura soltando una pequeña risa, sin embargo Ten Ten continuo hablando mientras se dirigía a la  oficina  al final del pasillo  central – Sígueme esta es su oficina, en estos momentos  el no se encuentra pero esta por llegar, tuvo que atender unos asuntos de trabajo antes de venir  a la oficina – Sakura la seguía por detrás mientras escuchaba  las palabras de Ten Ten , esto le daba una buena impresión de su presunto nuevo jefe ya que era un hombre muy aplicado y responsable  en cuanto al trabajo a pesar de ser  tan joven como ella, la  mujer de  castaños cabellos  abrió la puerta de la  oficina haciéndose  a un lado dando paso a  la joven, quien  ingreso al lugar, al entrar a la oficina  noto que  era bastante espaciosa   y frente a la puerta se encontraba un amplio escritorio de fina madera labrada   y  detrás un sillón de cuero, a través del inmenso ventanal  detrás del sillón se tenia una privilegiada  vista de la ciudad   junto a la torre de Tokio, el suelo  estaba cubierto por una alfombra persa, y en el aire se podía  oler  un dulce aroma  floral,  Sakura quedo algo atónita ante lo ordenado de la oficina, Ten Ten se dirigió  al escritorio dejando  sobre el las carpetas que  traía en sus manos y sonrió viendo como Sakura  recorría cada rincón con la oficina, sine  embargo en un costado encontró otro  escritorio muy fino  y moderno  con un sillón  de cuero negro,  lo que llamo su atención fue  ver un ramo de flores, por lo que se acerco sin vacilación  se acerco y noto que  entre las flores había una tarjeta, su curiosidad  fue mas que  su razón y prudencia, sin  pensarlo tomo la  tarjeta para poder leerla, esto  también despertó la intriga en Ten Ten quien se arrimo para leerla, al abrir la tarjeta  pudieron leer el mensaje que decía

                                          “ Este ramo de flores es para ti a modo de bienvenida
                    Espero sean de tu agrado, pido excuses mi comportamiento al no poder recibirte
                                      Sin embargo es un placer y honor el poder contar con tigo          
          También me tome  la libertad de escoger tu escritorio, el cual me pareció muy bonito
                                        Atentamente :  Tu compañero de Trabajo “


Aquello la dejo muy sorprendida, era la primera vez  que   le daban esa bienvenida en un trabajo, en el anterior solo tenia un pequeño  y viejo escritorio en el pasillo, el único regalo de bienvenida fueron horas extras, constantemente debía soportar  las miras pervertidas de  su jefe y compañeros de  trabajo. Con sus manos tomo el  ramo de flores,  mientras  era cautivada por el  dulce aroma de ellas, la mujer castaña  sonrío al ver esto y el rostro de Sakura fue invadido  por un pequeño sonrojo, pero algo la saco de aquello por lo que miro a  Ten Ten  algo sorprendida y  pregunto - ¿Eso quiere decir que estoy contratada, aun sin tener la entrevista? -  La mujer escucho sus palabras y afirmo con la cabeza, se dirigió al escritorio tomando una carpeta y de ella extrajo un papel que extendiendo la mano  se lo alcanzo a Sakura la cual  sostuvo el ramo de flores con una mano y con la otra la hoja de papel  al leerla supo que se trataba de su contrato el cual  era muy bueno a decir verdad y con un ostentoso sueldo –  ¿este contrato es para mi? – Pregunto incrédula -  Claro solo falta tu firma si estas de acuerdo con las pautas, lo puedes firmar y  unirte  a nosotros, claro puedes leerlo con calma para que me digas si tienes alguna modificación que hacerle – Respondido la mujer a la pregunta – Claro aun que por lo que  veo, es un justo contrato -  Culmino  la  joven mientras continuaba leyendo el contrato y al terminar  Ten Ten le ofreció  una pluma, la cual gustosa  tomo Sakura para firmarlo.

Ambas se  encontraban tan entretenidas en su charla, que no se percataron  cuando la puerta se abrió para que un joven alto  ingresara, aquel  poseía una rubia cabellera dorada, como los campos de trigo, un bronceado natural en su piel, y vestía un traje  gris  liso de estilo europeo, una camisa negra, unos zapatos del mismo color y un cinturón con una pequeña hebilla, sus ojos  azules poseía una intensidad increíble en su mirada  firme y determinada, solo se  detuvo observando como ambas continuaban su charla sin notar su presencia, solo se cruzo de  brazos para decir con un  amigable tono de  voz desde la espalda de Sakura – Veo que ya  has conocido a Ten Ten – Al escuchar  esas palabras  ambas mujeres notaron que alguien mas había entrado en la oficina,  sin embargo la primera en ver de  quien se trataba fue  TenTen debido a que  ella estaba de frente al hombre, Sakura se giro rápidamente aun con las flores en las manos, pero al ver  aquella persona  se quedo petrificada, su mente en blanco, su corazón  salió disparado como potro salvaje corriendo libre sin barrera  en los prados, no podía   razonar con claridad ni articular palabra  alguna, dentro suyo  se creo un remolino de  sentimientos,   nuevamente  aquellas lagrimas  se  hicieron presente  en sus ojos amenazando con  buscar libertar recorriendo el mas triste de los caminos  a través de su rostro, siquiera podía mirarlo a los  ojos le faltaba el    valor,  aun que  sus ojos  solo se cruzaron por un efímero instante le vasto para  revivir en su mente nuevamente todos  aquellas  momentos  y sentimientos que  en vano intento reprimir en lo mas recóndito de su corazón,  nuevamente habían aflorado  en ella, había tanto que quería  decir, tanto que  quería  explicar  pero simplemente no sabia  como, sin embargo  nuevamente aquella  voz  que  tanto  extraño,  aquel dulce sonido del que hubiera dado todo por  escuchar   un simple susurro siquiera  en sus noches de soledad  en aquella  ciudad  donde se sentía una completa extraña, - Veo  que  si recibiste mis  flores, perdón el atrevimiento  al elegir tu escritorio si no es de  tu agrado lo puedes cambiar-  Dijo mientras se encaminaba  hasta su escritorio – Espero el contrato sea de tu agrado, creo que las pautas  en el son muy favorables  y  no abra problemas con el dinero  supongo también – Culmino diciendo el hombre ya del  otro lado del escritorio mientras extendía su mano  derecha  hacía Sakura quien lo escuchaba  hablar  de forma tan distante  como si no la conociera, como si aquello  que  existió en  el pasado solo  hubiera sido una mala jugada de la imaginación de la joven, esta por instinto al ver  la mano extendida   hizo lo propio  con la suya  para darle un apretón aun algo incrédula  por lo que estaba  pasando, su rostro no podía ocultar  aquello que  sentía,  esto no paso desapercibido para la mujer de cabello castaño  que observaba  los  sucesos y  como ambos habían reaccionado de forma tan distinta  ante aquella  situación, preocupada pregunto al ver los  ojos  de sakura que luchaban por contener las lagrimas
- ¿Te encuentras  bien? – La  voz de  Ten Ten  fue como su cable  a tierra,  devolviéndola  a la realidad de un  golpe, intentando ocultar  lo que le sucedía sonrió de forma poco creíble, pero cuando quiso  hablar el nudo en su garganta  se lo impidió, por un momento  el silencio  fue  absoluto en  la  oficina hasta que su nuevo jefe  hablo para sacar  a la  joven de aquella incomoda situación  -  Descuida Ten Ten ella esta bien, se  debe sentir conmocionada  por  este encuentro ya que  ella  y yo fuimos pareja en  el  pasado -  Aquello  sorprendió  mucho  a  la joven que pregunto, quien no tardo en comprender  todo, en verdad  se  había tornado una  atmósfera  muy  tensa, pero la forma  en  que lo había dicho  restando importancia  a eso que para  Sakura  era tan importante hizo que la joven de rosa cabellos  sintiera una  punzada al corazón, sabía  que no tenia derecho a reclamarle pero no podía evitar sentir  como su alma se partía como el mas frágil de los  cristales -  Ya veo Naruto,  esto ...Tengo  algo de trabajo atrasado  así que los dejo para que charlen -  Dijo  la joven  castaña  mientras se  encaminaba  hacía la puerta,  todos  en aquella habitación sabían que solo era una excusa  para que estuvieran solos  y de ese modo poder  hablar, sin embargo todos   dieron por verdad  aquella  mentira  y  mientras  cerraba  la puerta   dijo antes de marcharse – Sakura cualquier cosa que necesites  me avisas -  y sin mas  solo se escucho el ruido de la puerta al cerrarse.

El lugar se  hallaba en completo silencio,  ninguno de los dos   había emitido palabra alguna  tras la ida de Ten Ten,  Naruto como si nada pasara  se  sentó en el sillón de cuero negro, posando su vista  en la  joven  contemplándola  allí de pie estática, como si se hubiera detenido en el tiempo, como si solo fuera una imagen,  aquello se  estaba tornando algo incomodo para ella parecía estar siendo juzgada, como si  el analizara cada  cosa  en ella, pero aun que quisiera hablar no podía no sabía como  hablarle, que decirle y para su suerte fue el quien rompió aquel silencio  -  Por lo visto ya  firmaste el contrato, si no tienes inconveniente  me gustaría que pudieras empezar  hoy – Dijo con un tono  neutral, aquello  fue como una gota  de  agua en el desierto, no calmaría su sed  pero  podría engañar  su mente por un momento,  relacionarse mediante el trabajo solamente podría ayudarla  a librar  ese momento que estaba pasando – Claro, no tengo inconveniente  gracias por esta oportunidad – Fueron las palabras de la joven mientras se inclinaba  un poco hacia delante haciendo una pequeña reverencia, sin embargo era tapar el sol con un dedo y eso lo tenia muy presente,  no podía  apartar su vista de el, en verdad ya no era aquel joven del pasado,  era todo un hombre. Naruto revisaba atento los papeles de las carpetas que  Ten Ten  le había dejado, ella permanecía  de  pie  aun  allí, tras  varios  minutos, el solo elevo por un momento la vista de aquellos papeles para mirarla, ella por su parte  lo observaba con  suma dedicación a cada detalle, esto le dio curiosidad ya que   estaba tan absorta  observando que  no se percato que a su vez ella era observada  y  nuevamente  el hablo  -  No es necesario que te quedes de pie frente a mi escritorio Sakura  -  Aquellas palabras  habían sido dichas con un tono algo burlón, pero inofensivamente, la  joven noto su comportamiento y un rubor se apodero de ella por la  vergüenza  de la situación, pero había caído en cuenta de que aun no se le  dijo específicamente en que consistía su trabajo, por lo que sin notarlo pregunto de forma natural - ¿Y cuales  serían mis funciones a cumplir dentro de la  empresa ? – Naruto al escuchar la interrogante  dejo  completamente su lectura de aquellos papeles y se acomodo  en el sillón mirándola, guardo un  silencio tan efímero como  un parpadeo y  dijo -  Es  verdad  aun no te lo eh dicho... Pero antes dame un momento – Con su dedo  oprimió una de las teclas del teléfono en su escritorio y solicito un florero con agua, a los segundos de aquello una joven mujer ingreso con lo que había solicitado  y lo coloco  en el escritorio de  Sakura quien a su  vez  deposito las  flores en el interior, tras  aquello nuevamente  habían quedado solos y Naruto prosiguió

- Bueno  tus funciones en la empresa es  llegar a donde yo no puedo, en otras palabras de veras de revisar los contratos, papeles, atender  algunos asuntos sociales, coordinar eventos, como sabrás somos una gran productora y sinceramente  muchas veces no  doy  abasto con el  trabajo -  Sakura lo escuchaba  atentamente pero  aun seguía sin comprender completamente, por lo que formulo una  pregunta  para tener un mejor panorama  de sus deberes, ante todo ella  era una profesional - ¿Es decir que  debo  cubrir  tus  huecos  en los asuntos de menor  importancia donde tu presencia no sea muy necesaria y tu puedas atender  asuntos de índole mayor? – El joven la escucho con absoluta  atención y al terminar le respondió con el mismo tono de voz– Algo parecido,  en si  para sintetizar  tu serás mi mano derecha dentro y  fuera de la compañía, tiene  libertad para tomar decisiones propias ante los asuntos que sea necesario, tu palabra y firma  en la productora tendrán la misma validez que la mía – Sin duda era una gran responsabilidad  aquella compañía  era una productora internacional ni mas ni menos  que  la  de mayor renombre en todo Asía,  pero  ¿Por qué, le daría ese puesto a  ella? ¿ En verdad  confiaba tanto en ella  aun después de lo  ocurrido  en el pasado, o  solo se lo daba por  su pasado juntos?  Era lo que ella no podía evitar cuestionarse,  pero antes de poder preguntar  como si pudiera leerla, así como  a un libro abierto el hablo anticipándose a sus palabras – Descuida no es lo que piensas, cuando tu padre me  llamo la verdad me sorprendí  mucho  ante su pedido, pero antes de contratarte y confeccionar  tu contrato llame  a ciertos conocidos y revise tus trabajos en verdad  me pareció que tienes lo necesario como profesional para cubrir este puesto,   me  han dado muy buenas referencias y  por ello te contrate, si eso es todo quisiera pedirte que revises estos documentos por favor – Dijo mientras  que con su  mano  le   alcanzaba una de las carpetas de  su escritorio – Cualquier consulta puedes  decirme si  hay algo que no comprendas – Ella solo  tomo la carpeta y el continuo con su lectura concentrando en los documentos que leía, mientras Sakura se  acomodaba en su escritorio, y  comenzaba  ah  leer los documentos de  la carpeta,  concentrándose  en  su trabajo  poniendo total dedicación, esta vez al menos  en lo  laboral y profesional no quería fallarle  a el, aun que sabia que  en la vida de Naruto ella no ocupaba mas espacio que el de una ex.

Las  manecillas del reloj  avanzaban sin  temor   dando paso a los  segundos que se transformaban en minutos y los minutos en horas, ambos en sus respectivos escritorios  trabajaban sin mas,  su concentración era absorbida en cada papel que  analizaban  el silencio solo era roto por el ruido de las teclas de los ordenadores  y las hojas de papel,  pero  casi  sin quererlo la joven no podía retener sus impulsos  de  verlo  lo tenia tan cerca, si solo tuviera el valor de ponerse de  pie de contarle la verdad, de  decirle todo, de  intentar reparar  lo irreparable, su lógica y sus  emociones  tenían una lucha sin cuartel,  no lo podía evitar  como si el emanara un poder  hipnótico los ojos de  ella se posaban  cada tanto en el, pero  cada vez que lo hacían veía  la cruda realidad  de que el no le prestaba atención, aquellos  ojos  de un  azul  tan  puro  como el del firmamento en su día más  hermoso y  tan profundos  como  el mismo mar, ya no la veían  ya no podía  alcanzarlo, solo podía  contemplarlo  así  como un niño que vez tras el cristal de una juguetería aquel juguete que  tanto añora y sabe que  no puede  tener, que no lo  merece, aquellos labios  de los cuales  supo  deleitarse con el sabor del mas dulce  néctar de  amor   en cada beso, cada roce,  aun sus  labios podían sentir la tibieza de  los de él como si  la  acabara de besar,  su corazón no podía controlarse debido  a que su  dueño aquel a  quien siempre perteneció, ese que siempre  supo como hacerlo salir disparado hacia los cielos, que rompió  toda  frontera penetrando  en lo mas profundo de  el para  quedarse  allí por toda la eternidad, se  encontraba  a  solo unos metros, daría su vida por  oír nuevamente  un simple te  amo  de sus labios, o solo una  mirada   como  en antaño cuando  ella   podía verse en sus  ojos cuando sabia que solo era ella su mas  grande tesoro, pero los sueños no se  hacen realidad, y  ella  había renunciado a luchar por ese sueño,  aquella  tarde  cuando se marcho.

Tras  terminar de leer  el documento en su mano  el joven   miro el reloj de su muñeca, ya era medio día  por lo que dijo sin mas con un tono despreocupado -  Ya es hora del  almuerzo, ¿ Quieres  ir  a  almorzar? – aquellas palabras  alegraron a la  joven, pasar tiempo con él era un privilegio para  ella, pero por otro lado, cada vez que le hablaba  parecía dejarle  en claro que  él ya no la veía como antes, le dolía el saber que ni siquiera le pedía una explicación, que la tratara de esa forma como si  no significara nada lo que  paso  entre ellos, como si  ella  solo fuera alguien que acababa de conocer,  en un momento llego a pensar  que  hubiera preferido una  bofetada un insulto  o enojo eso le dejaría saber que al menos ella fue y era importante, pero  la forma en la que el actuaba solo  le dejaba en claro que  ya no le importaba  ni ella ni el pasado. No podía juzgarlo no  tenia el derecho de hacerlo, por lo que solo se limitaba a disfrutar lo poco que podía de  él  y con un tono amigable respondió – Claro, me encantaría -  Tras  sus palabras esbozo una  sonrisa que  fue correspondida por el hombre, este le indico que tomara su cartera y lo siguiera, ella sin replicar  hizo caso y lo siguió llegando hasta el  garaje de la compañía, se quedo de pie esperando que él le mostrara el camino hacía su automóvil, por su parte el  comenzó a  caminar  hacia un lujoso  vehículo muy moderno  y deportivo de color  gris, introdujo la mano dentro del bolsillo de su pantalón, saco las llaves desactivo la  alarma y abrió la puerta del acompañante
- Sube por favor – Dijo con total caballerosidad, esto impacto a la joven en verdad era un hombre un caballero de esos  que  no se encuentran todos los días y sin mas algo tímida se subió al  automóvil, al ver que  ya  se encontraba  sentada cerro la puerta  y  por la otra entro él, poniendo el motor  en marcha se puso a manejar  ella solo  miraba  con nerviosismo  hacía el frente, al salir de la cochera  comenzó a  conducir  por  la calle  de forma natural, como si  hiciera ese mismo recorrido cada día,  ella no sabía   que hacer no le gustaba estar en silencio los recuerdos la invadirían nuevamente, así que  intento buscar un tema de conversación  - Pareces muy acostumbrado a  recorrer este camino, ¿Siempre almuerzas en el mismo lugar?- Al escuchar la pregunta, solo hizo la mueca de una sonrisa sin quitar la vista del camino  y respondió – Si, creo que ya se nos hizo costumbre- Un hombre de su clase, de su categoría seguramente frecuentaría lugares muy sofisticados, era lo que ella pensaba por lo que  algo nerviosa comenzó a  acomodarse la  camisa, de verdad no  traía un atuendo adecuado según ella para  ir  a esa clase de lugares, seria observada y juzgada por lo comensales y empleados del lugar,  su nerviosismo no paso desapercibido para él, que  la  veía de  reojo acomodarse su ropa, y nuevamente se anticipo a su pensamiento, tratando de clamarla  dijo – Tranquila, donde vamos no es  esa clase de lugares, para ser sincero no me gusta frecuentar lugares como esos, prefiero un ambiente mas familiar un lugar donde nadie este juzgándome o adulándome a cada momento – Dijo  con un tono que dejaba claro,  cuan acostumbrado estaba  ha  vivir esas situaciones, sin embargo eso la tranquilizo, ya mas  tranquila  miro por el cristal de su ventanilla  y  reconoció aquellas calles,  en repetidas  ocasiones camino con él y sus  amigos por allí.

El vehículo freno frente a un restaurante que en  verdad no era sofisticado ni mucho menos,  el desabrocho su  cinturón de seguridad y se bajo, mientras ella  observaba  atónita  aquel lugar que  conocía era el mismo, en verdad estaba en casa en su ciudad,  desabrocho  su cinturón  y la puerta fue  abierta por  naruto quien  le extendió la mano para ayudar  a  bajar  ella  la  tomo   dando un  profundo suspiro,  no quería soltarla  nunca más pero debió hacerlo al   bajar del coche,   el la soltó de la  mano, de forma muy respetuosa mientras  le  abría la  puerta del restauran, por su parte  ella  solo  se sentía halagada  y deleitando los  ojos de quien  posara su vista  en ella,  atravesó la puerta de entrada y tras de  ella,  Naruto hizo lo propio, al ingresar   fueron recibidos de forma  muy amigable y familiar los comensales que se  encontraban en ese momento almorzando  eran gente  de un nivel mucho mas bajo  del que sakura esperaba   pero estaban a tono al lugar,  naruto no había cambiado en ese sentido, el dueño del lugar y su mujer   recibieron al joven de forma muy amigable y con mucha confianza   incluso  en varios momento de la charla soltaron bromas,  pero ella  estaba callada  no  fue reconocida  por   los dueños  y   lo guiaron hasta la mesa habitual que utilizaba,  el almuerzo paso  tranquilo por su parte el parecía  indiferente al momento  como si no fuera nada especial, ella casi no probo bocado,  no podía controlar sus emociones   apetito era lo menos que tenia, charlaron de cosas de oficina sobre el trabajo  eso la hizo  olvidar de ah momentos lo que  tanto la  angustiaba, nuevamente   el miro su reloj  era ora de volver al trabajo  solo dejo el dinero en la mesa  y salió del lugar despidiéndose de con un gesto con su mano y realizo los mismo actos de caballero que anterior mente había  hecho

Tras su regreso del almuerzo nuevamente  no hablaron, no se dirigieron la palabra  solo  se concentraban en el trabajo   aun que  por la parte de  ella  solo fingía, su concentración estaba puesta solo en  él,   debía aclarar  todo debía decirle   reunió todo su valor  y se incorporo de su silla con toda su determinación lucharía con uña y dientes  para  aclarar todo, no estaba dispuesta   a renunciar no así de fácil, pero cuando se  disponía  a dar el primer paso aquella puerta se  abrió  de un brusco  golpe  esto  llamo la  atención de  ambos, pero lo que dejo atónita  fue  que   a toda prisa  entro una pequeña niña  de  unos  7 años de  edad de  rubios cabellos,  con una hermosa cara angelical,  vistiendo un  vestido  blanco  con un listón sujetando sus dorados  cabellos  mientras  gritaba   con todas sus  fuerzas - ¡¡¡ Papá, papá !!! -  mientras  corría  a los  brazos  de naruto quien la  alzaba  sonriendo ambos, una  segunda  voz se escucho diciendo  - Ya no soportaba  más, quería ver a su  papá  y es una tramposa  jugando a los  videojuegos -  .....

Muy Bueno e Interesante este Cap; Y de paso se vio q Sakura esta "Dolida" x haber hecho lo q le hizo a Naruto en dejarlo Plantado en su cita en q se fue de Viaje y Solo sin una llamada... mmmm Pobre Sakura y de paso tiene q Aguantarse la Indiferencia de este para con ella.

Aunqe no me esperaba el q Naruto fuese Padre de una Niña de 7 Añitos, y mas aun saber qien es la Mujer q entro y dijo esas palabras.... Espero q pronto actualices para asi saber mas sobre estos hechos q conciernen en la Vida de Naruto xq sin dudas este Sufrió un Cambio bastante Drástico.

Suerte y Ja-Ne.

Primero que nada decirte que me gusta tu fic y que tienes nuevo lector.

Bueno, ahora el primer capitulo me dejo bastante interesado de como sería el reencuentro de esos dos y la verdad me imagine que seria algo parecido, por que debería ser mucha la expectativa de ver a naruto igual que antes y aun dolido por lo que le hizo sakura, por que, de buena o mala manera, naruto no se quedaría lamentandose por el resto de su vida...........y si apareció otra mujer en su vida, pues mucho menos.

Y lo de su "hija", al ver el comportamiento de naruto con sakura en el segundo capitulo presentia que iba a suceder algo como eso, naruto ni siquiera le hablaba o de perdida la volteaba a ver y eso si que fue raro, aunque ya la hubiese superado por lo menos tuvo que dar indicios de que aun siente algo por sakura, decepción, enojo, tristeza, dolor, no se pero algo debió demostrar.

Pero cuando aparecio la pequeña niña entendí por que fue ese el comportamiento de naruto, el la olvido y siguió con su vida y la verdad el hizo lo correcto y por ese lado sakura se va a tener que tragar su orgullo y aceptar que naruto ya no es suyo.

Aunque si debo mencionar algo, la ultima persona en aparecer no se quien pueda ser, lo más logico es que sea la madre de la niña, pero la verdad no creo que eso sea por varias razones, pero mejor no me adelanto y me espero para saber que sucedera después, por que en estos dos capitulos me demostraron que este fic va a estar lleno de cosas muy interesantes.

Un saludo, nos vemos.

Hola de nuevo!!!
Me gusto mucho este nuevo cap   

La actitud de Naruto me hace pensar que sufrió demasiado cuando Sakura se fue (y que tal vez no la haya olvidado del todo) y que actúa así para continuar su vida tal y como lo hizo el tiempo que estuvo fuera. Aunque si la olvida por completo esta en TODO su derecho ya que ella no tuvo la valentía de decirle nada, si le decía sus razones, que parecen importantes, el hubiera comprendido y esperado, pero ya que.

Ok, respecto a la niña tengo 3 ideas rondandome la cabeza. Y respecto a la persona que sale al final del cap tengo 1 teoría, la cual es que tal vez no sé una mujer sino un hombre (tal vez sasuke). Sabes? En verdad me alegro y tranquilizo mucho el no saber el color de ojos de la niña, es un detalle que me deja en más intriga porque hay 2 colores en especial que me darían una idea de quien es la madre ya que como solo dijistes que es rubia y que Naruto es su padre entonces uno dice "di si lo heredó de él", en otras palabras no diste ninguna pista de la madre   (o eso me pareció, tal vez si lo hiciste y no lo note  )  
El capítulo también me dejo un deseo... si la madre tendra un papel importante (ya que existe la posibilidad de que este muerta) que la madre sea Ino!!!    el NaruIno es lo mejor (obviamente después de nuestro amado e insuperable NaruSaku)

Y creo que eso es todo!    
Hasta luego!! Nos leemos

PD: tu fic va muy bien y creeo que tiene lo necesario para ser uno fantástico con muchos lectores, solo recuerdame entre tantos porque estoy aquí desde el cap 1