¿Y dónde está el amor?-(+18)-(CAPÍTULO 11)-(24/11/14)

por **Oni** Dom Jul 13, 2014 4:49 pm

¡Hola, que tal aldeanos Narusaku! Esta vez vengo con un fic originalmente mío (se podría decir que es mi primero ahora sí) algo diferente quizá a lo que estamos acostumbrados de ver en un historia y más que nada creo que debes de tener fe y esperanza en esta historia porque obviamente terminará Narusaku.

Comentando sobre mi anterior historia; por el momento no la continuare ya que quería empezar este proyecto (ya saben, uno a la vez) pero tengo propuesto escribirla de todos modos y para tener asegurados unos cuantos capítulos y no los haga esperar mucho y si el destino me lo permite, publicar los capítulos sin afectar a ninguno de mis fic.

Bueno sin mas que decir, aquí el prólogo.

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PRÓLOGO

Todo fue una bomba del tiempo, sólo esperando detonar a causa de las circunstancias...

Unidos por distintas razones; él, escapando de su soledad y ella de su sufrimiento.

Él, siendo un magnate dueño de la empresa de comercio más grande de Japón y ella una simple mujer llena de preocupaciones.

Él, queriendo perfección en ella y esta sólo amor de cual nunca ha conocido.

Él, un hombre realista casado con ella; una mujer soñadora deseando no estar en ese lugar pero a la vez no estar lejos.

Unidos y a la vez separados; así son sus vidas, llenas de peleas y gritos desesperados dentro de sus corazones hasta explotar...

¿Y dónde esta el amor?

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¿Algo corto no? En fin, debo decir que apenas antes de empezar a publicarlo sólo tengo ya listos 2 capítulos asegurados para publicar después de hoy, mi meta era crear más de 5 pero vi que me empecé a relajar el asunto y preferi subirlo ya.

¡Gracias por leer!

por Neyli Dom Jul 13, 2014 9:21 pm

Vaya... la historia pinta bien, me gusta el prólogo.

Espero con ansias ya el primer capítulo, quiero ver un poco más como es la vida de ambos en esta situación.

¡Ya tienes una lectora más! Un saludo Onion ok

por **Oni** Lun Jul 14, 2014 2:52 am

He aqui el primer capítulo ¡que lo disfruten!

CAPÍTULO 1

–¿Y cómo esta él?–tomó la taza fina de la mesa para dirigirla hacia su boca, tomando un pequeño sorbo de el líquido.

–Bien–le limitó a decir de quien vivía con ella.

–Oh, me alegro–dijo al ver que la actitud de ella cuando hablaba de él. –¿Y tú cómo estas?

–Pues... bien–dejo por fin la taza que había permanecido en su mano desde que la sirvienta sirvió el té. –¿Y qué tal van las cosas con Saito?

–Pues, para serte sincera–imitó la anterior acción de su amiga. –Esta igual, ya hemos visitado a muchos doctores pero no han hecho mejora.

–Ya verás que se podrá mejor–le dedicó una sonrisa pequeña de consuelo. –Creo que Naruto tiene un amigo que es doctor, muy bueno en su profesión.

–Sea como sea, me gustaría que nos visitaras de vez en cuando, sabes que puedes venir cuando quieras.

–Gracias, pero no me sentiría cómoda–miró hacia la inmensa entrada empedrada que tenía la mansión.

–Saito quería venir ¿sabes?–atrajo la atención de la pelirosa. –Pero como no se encuentra bien, no pude permitírselo.

–Oh–dijo con nostalgia. –A mi me hubiera encantado verlo.

–Entonces ¿qué dices si vienes a visitarnos mañana?

–Yo no sé, Ino–miró hacia otro lado. –sabes lo...

–Bueno entonces mañana te esperamos–le levantó, bebiendo rápidamente su té servido. –No sabes cuánto se alegrará al verte.

–Ino yo..

–Debo de irme, Sakura. Saito ya casi sale del colegio y de ahí nos vamos a su cita con el doctor, hasta entonces–tomó su abrigo y en un beso en la mejilla se despidió dejándola con la palabra en la boca.

–¿Desea que recoja la mesa, Señora?–preguntó una encargada de limpieza de la casa, sacándola de sus pensamientos a la joven.

–¿Em? Sí, por favor–se retiró confundida del lugar. –Y por favor, también traeme una pastilla para el dolor de cabeza.

–Sí, señora–se limitó a contestar la sirvienta, mirándola con un semblante de lastima, ya era la 3ra pastilla que le pedía en el día, aunque no la podía culpar.

***

–¿Señora?–volvió a repetir a la ojos de jade quien se encontraba perdida mirando de nuevo la entrada de la dichosa mansión en el balcón de la habitación.

–Sí–la miró a los ojos, poniéndole atención.

–La comida ya esta lista.

–Esperaré a mi esposo, gracias –se centró de nuevo en lo que veía antes de que llegara ella.

–El señor Naruto me dio indicaciones de que iba a llegar tarde–le indicó rápidamente con temor a su reacción.

–¿Cuándo?–cuestionó extrañada.

–Esta mañana, cuando se fue–se encogió de hombros, bajando la mirada.

–Dejalo, no te hambre de todos modos–agacho su cabeza , escondiendo su ojos mientras se retiraba de su alcoba.

–Pero el señor Naruto dijo que debía de cuidarse y...

Se detuvo en la puerta y la interrumpió. –El señor Naruto no esta aquí, ya deberías saberlo.

***

–¡Muy buen trabajo Naruto!–lo felicitó al momento de salir del edificio.

–Fue fácil–ambos se dirigían hacia sus autos estacionados. –Sólo era convencerlo.

–¡Y de qué manera!–le dió una cuantas palmadas en su espalda. –Esto se necesita festejar, ven, vamos en mi auto.

–Hoy no, Kiba–dijo metiéndose, mientras su amigo lo veía por la ventana.

–¡Oh, vamos Naruto! Siempre dices lo mismo, un día de estos me voy a cansar y me conseguiré otro colega.

–Como si pudieras–sonrió levemente mientras se alejaba de él.

***

–Buenas noches, Señor Naruto–respondió al sujetar su maletín haciendo una leve reverencia.

–¿Y Sakura?–cerraba la puerta de su coche, asegurándose.

–Pues, aún no se a dormido–dijo dudando.

–¿Otra vez se quedó esperándome? Creo haberte dicho que...

–La Señora Sakura después de ser informada de su orden se quedo leyendo en la biblioteca y se le ha pedido que no se le interrumpa... Señor.

–Esta bien–miro la luz que sobresale en una ventana–ya puedes irte a descansar–dijo apretando los dientes.

–Gracias Señor–volvió a hacerle reverencia viendo como se dirigía con fuertes pasos hacia donde estaba su esposa.

***

Leyendo pacíficamente, se encontraba la joven de cabellos rosados, sentada en su sillón favorito con su cabeza recargada en su mano, leer era una de las cosas que además de hacerle olvidar todo, amaba, aunque le recordaba mucho a su madre que siempre le...

–¿Por qué sigues aún despierta?–habló con su voz dura.

–Naruto–dijo sorprendida por no darse cuenta de su presencia. –¿Por qué tardaste tanto?

–Sabes que estaba en el trabajo, aún no has contestado mi pregunta.

–Te estaba esperando–pusó una marca en el libro y enseguida lo cerró.

–No puedes seguir haciéndolo, te puedes volver a poner mal–le respondió molesto.

–Bueno pues, deja de llegar tan tarde–le sonrió con inocencia, acomodando el libro.

–Es mi trabajo Sakura, de cuál te alimento y pago todos estos lujos ¡No puedes ponerte a pedirme algo así!–empezaba a salirse de sus casillas y Sakura lo sabía.

–¡Pero ese trabajo te quita tiempo y ganas de estar conmigo!–dijo con nudo en la garganta. –¡Creeme que prefiero mil veces vivir sin todo esto y tenerte a mi lado!

–¡YO ESTOY A TU LADO! ¡¿QUÉ ACASO NO LO VES?!

–Yo no lo siento así–desvió su mirada hacia otra lado que no fuera él, mientras que este solo la miraba con furia aguantando las ganas de decirle todo lo que tenía en mente pero por suerte, sólo apretó sus puños y se dirigió a salir de la habitación.

–¿A dónde vas?–preguntó su esposa con miedo pero él la ignoró.

Sabía que de nuevo que tenía que intentar dormir sola porque él lo haría en el dormitorio de huéspedes; ya era una rutina, una en la cuál no podía evitar llorar.

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Lamento si es corto el capítulo ("¡Qué novedad!" dirían algunos) pero me excuso esta vez porque aquí esta bien para el principio, sin embargo, intentaré esta vez hacerlos mas largos si se presta el capítulo.

¡Saludos!

por Uno Lun Jul 14, 2014 3:35 am

Ohh... Vaya...

Hola!!! *-* ya tienes un hermosa lectora jajaja espero el siguiente capitulo.

¡¡Me encanta!! Me encanta esta situación rota del matrimonio, me gusta que traten de recuperar eso que antez los unios y todo se rompió por.el estupido.dinero T.T Naruto es muy frio e indiferente.... Eso me pone mal pero igual me gusta y ya me imagino lo demas!!!!!

Solo te pido que no pongas Lemon entre otro ni ifidelidades T.T o dios!!!!! Eso lo odio, lo detesto, o sea... Si pones Lemon que solo sea NaruSaku ¡¡Es la peticion de una lectora traumatizada!! *
T.T en serio... Eso me pone mal e.e.... Ok ok ya!!!!! Me encanta coml narras... Narras de maravilla Very Happy

eres muy muy genial jajajaja

bueno bueno!!!! Smile

porfis sube conti pronto, lo espero, son muy cortitos :p asdfasff chaaoo!!! Nos vemos >...<

PD: Pobre Sakura Sad

ella sí lo quiere y no su dinero... Ojalá Naruto reacciones y comprenda su error... *-* y se den besitos!! *-*/

por Neyli Lun Jul 14, 2014 10:43 am

Debo admitir que me apena mucho la situación e la que se encuentra la pobre Sakura... espero que las cosas vuelvan a irles bien a ambos, o por lo menos en cuanto a amoríos se refiere, y que Naruto se de cuenta de lo verdaderamente importante en la vida.

Muy buen capítulo, ya espero el siguiente. Un abrachote Onion bye

por **Oni** Mar Jul 15, 2014 1:27 am

¡Hola de nuevo! Gracias por leer mis aportaciones y espero que les guste tanto como a mi me gusta escribirlas.

CAPÍTULO 2

La mañana del siguiente día empezaba ser notada por cierta pelirosa que lentamente empezaba a abrir sus rojos y un poco hinchados ojos, saliendo de su posición fetal en la cual se quedó dormida por el cansancio de llorar toda la noche, se levantó con sumo cuidado mientras pudo ver lo que el espejo de cuerpo reflejaba de ella, su cabello era un desastre, la ropa de ayer que no se molestó en quitársela seguía en ella; arrugada y un poco mojada por intentar secar ciertas lágrimas y su cara aún mostraba aún más pálida por lo débil que estaba.

Se dirigió al baño a paso pesado, tenía una terrible dolor de cabeza y como siempre se dirigió a tomar una pastilla para aliviarlo para después desnudarse lentamente y meterse a la bañera que preparó en lo que hacía tal acto; se metió en ella y abrazo sus piernas intentando relajarse, preparándose para rogar que la disculpara otra vez aunque no lo sentía realmente pero así era la rutina de su vida; pelear, rogar para que no la siguiera ignorando hasta que la perdonará y vivir atemorizada de la poca felicidad que la vida le otorgaba hasta que volvieran a pelear.

Suspiró al meditar de nuevo su vida moderna mientras salía de la 'amante' bañera; así la llamo por ser su consuelo después de una pelea con él, al menos fue un buen nombre que varias veces le sacaba una sonrisa nostálgica.

Con una toalla en su cuerpo, salió del baño para vestirse; tomó cualquier conjunto de ropa interior limpia y se lo puso, buscó entre su ropa ordenada algo cómodo hasta que decidió ponerse simplemente un short y el primer blusón que se encontró.

Salió aún con el dolor de cabeza pero un poco disminuido encontrándose con una sirvienta que sacudía los muebles.

–Buenos días, Señora–dejo de hacer sus deberes, haciendo una con rapidez una reverencia.

–Te he dicho muchas veces que sólo me llames por mi nombre y sin reverencias Tenten–dijo dándose un ligero masaje en el hombro.

–Perdone Seño...Sakura, pero es la costumbre–dijo sonrojada.

–Bueno pues acostúmbrate a lo que te dijo–le sonrió como pudo dirigiéndose a la cocina, hasta que paró en seco.

–¿Mi marido ya se ha ido?–preguntó dándole la espalda con quién hablaba.

–Aún no Señora, se encuentra desayunado–dijo con lástima.

–Bien–continuó caminando y cuando iba a bajar las escaleras, la volteó a ver y le sonrió –Aunque debemos de seguir trabajando con eso– y desapareció de su vista recordándole lo que le había ordenado.

***

Ahí estaba él, con su plato casi intacto por estar concentrado al parecer leyendo algo en su celular.

–¿Naruto?–le llamó tímida al bajar las escaleras, llamando la atención de él y aunque rápidamente guardo su celular, se concentró en su desayuno, ignorándola. –¿podemos hablar?

Los empleados de ese lugar se retiraron, como era de costumbre en situaciones así que normalmente pasaban

–Naruto–insistió de nuevo. –Respon...

–¿Hablar? ¿para qué? Siempre es lo mismo contigo–dijo sin mirarla.

–Perdón–dijo con unas cuantas lágrimas en su rostro.

–¿Y cuántas veces más debo de perdonar?–la miró con molestia, como estaba acostumbrado hacerlo.

–Yo no...

–Sí, si, esta bien, te perdono–se paró de su asiento fastidiado. –Debo de irme a trabajar, no me esperes que llegaré muy tarde–y se fue dejándola con sorprendida con las lágrimas aún en su cara.

–¿Señora?–llamó una sirvienta con timidez. –¿Quiere que le sirva de desayunar?

–No...–se limpiaba los restos de su tristeza. –No tengo apetito, gracias Chiyo

–¡Pero, Señora...!–quiso acercarse pero no lo hizo. –Desde ayer no ha probado ni un bocado.

–No te preocupes, ayer, ordené que me llevarán la comida a mi habitación–mintió. –Estaré arriba.

–Señora, esperé–la llamó al recordar algo. –La señora Ino llamó para que le recordará que debe de visitarla hoy en la tarde.

–Dile que no podré ir porque...

–Dice que no aceptaba un no por respuesta–se incómodo en el asunto.

–Bueno... gracias–suspiró y se dirigió a su habitación mientras era observada por su ama de llaves.

–Esta vez no hizo no sufrió mucho, ¿verdad?–dijo con duda una muchacha servidora de limpieza en esa casa curiosa.

–No creo que nadie pueda saber cuánto sufre–aún seguía viendo con lastima el lugar a donde se dirigió.

***

–¡Listo Seño... Perdón, Sakura ¿verdad?–pregunto sonrojada.

–Así es Katara.

–Bueno, Sakura, ¡Ya esta lista la torta!–lo sacó de horno y se la enseñó. –¡Se ve muy bueno, Señora Sakura...!–dijo sonriente.

–Ya lo creo, después de todo tú me ayudaste–habló mientras batía aún el betún.

–¿Bromea? Yo solo la guíe, usted hizo todo y con perfección.

Soltó una risita la pelirosa ante tal halago. –Pues gracias, por favor,avisarle al chofer que preparé la camioneta.

–Como usted diga–se dirigió a llamarlo mientras Sakura decoraba la tarta de chocolate con el betún y unas cuantas frutas.

–¿Quiere que lo ponga en un caja?–le preguntó otra sirvienta.

–Sí, por favor–dijo mientras se lo entregaba. –¿trajiste lo que te pedí?–preguntó comiendo un poco de betún que se había embarrado en un dedo.

–Sí, aquí está–dijo mostrándole un regalo envuelto. –Hasta me tome la molestia de envolverlo.

–Que detalle, muchas gracias–le dedicó un sonrisa de agradecimiento en lo que se quitaba el mandil.

–Se ve muy bien, Señora Sakura.

–Basta, que me voy a ruborizar, Shizune–dijo divertida, usaba el mismo short negro pero con pantimedias de encaje ademas de que tampoco se quitó el blusón que como era rojo solo se puso un cinturón color capuchino y sus botas negras favoritas, singularmente así se veía hermosa; sin ningún maquillaje y con el cabello suelto que se acomodaba a ella sin arreglarse tanto.

–Gracias, nos vemos luego–tomó el regalo y el pastel envuelto, salió mientras las servidoras de dicha casa les daba gusto al verla ocupada porque así se le olvida su realidad y así se le podía ver sonreír más seguido porque ella no merecía llorar.

El chofer caballerosamente le abrió la puerta y ella le agradeció con una sonrisa.

–Buen día Sakura–se levantó en sombrero en señal de saludo.

Soltó un risita. –¡Que tal, Kanguro! Me alegra que tú si te acostumbras a llamarme así.

–Sólo la llamó así porque usted lo quiere y sólo cuando el Señor Naruto no esta–empezando a manejar, saliendo de la mansión.

–Me alegra de que así sea, aunque debo decir que tenemos que trabajar con las formalidades–se recargó en su asiento y cerró los ojos.

–De acuerdo–sonrió al verla tranquila viéndola en el espejo, realmente era muy bella –Entonces, ¿a dónde la llevo?

–¡Oh ni siquiera aún te dicho!–abrió los ojos y se sonrojó un poco por la vergüenza. –¡Qué descuido! Perdona–sonrió apenada y corrigió su postura. –A la casa de Ino, por favor.

–A la orden, Señora Sakura.

***

–Entonces lo que podríamos hacer para convencer a...–miró al rubio que estaba mirando a la nada. –¿Naruto, me estas poniendo atención?

–¿Eh?–respondió sacado de sus pensamientos.

–¿Qué cosa te pasa hoy? ¿eh Naruto?–se sentó en la mesa a un lado de él.

–Nada, sólo que hoy no dormí bien –hundió su cabeza en su brazos.

–¿Y se puede saber el por qué?–dijo curioso. –No espera, déjame adivinar, discutiste de nuevo con tu esposa ¿cierto?

–Pues sí, así es–levantó la cara y suspiró.

–¿Y ahora qué pasó?

–No pasa nada Kiba–se levantó y se volteó recargando sus manos en la mesa. –Ese es el problema,siempre es lo mismo.

–Hum, ya veo–pasaba su mano por su barbilla. –Pues no sé, deberías dedicar más tiempo para ustedes.

–Hablas como mi esposa–bufó sonriente.

–¿Qué?¿no te da miedo que algún día se vaya con otro?–se burló dirigiéndose a retomar el tema.

–De ella no lo creo–se sentó y rió al pensar en esa idea.

–Yo no estaría tan seguro si fuera tú–acomodaba los papeles, buscando uno en específico. –Ella es una mujer muy bonita y tú más que nadie debería saber que podría traer a cualquiera entre esas piernas si quisiera... inclusive a mi.

–Sí, lo sé grandísimo idiota, lo sé–le lanzó lo primero que tuvo a su alcance: un lápiz. –Sólo por eso quizá siga tu consejo.

–¿Y ahora quién es el idiota?–rió sintiendo que lo fulminaba con la mirada.

***

–¡Mira mamá!–señaló la camioneta que se estacionaba afuera de su vivienda. –¡Es la señora Sakura!

–¡Oh que sorpresa! –dijo fingiendo.

–Sí, claro–rodó los ojos y corrió hacia la pelirosa. –¡Señora Sakura!–agitó la mano acercándose a ella.

–Saito–le dió una gran sonrisa al bajar de la camioneta con la ayuda de Kanguro. –¿Cómo has estado?

–Algo malito, pero mejor–la recibió con un abrazo.

–¡Cielos, Saito!–se separó un poco de él. –¡Vaya que has crecido!

El rió. –¿Enserio?

–Si duda alguna–rió ella también.

–¡Vez mamá! ¡La Señora Sakura lo ha notado!–le dijo una vez que la rubia se acercó a recibirla

–Lo que pasa es que hace mucho que no lo te veía–puso sus manos en su cadera haciendo un puchero. –¡Mi pequeño inmortal bebé!–lo besó varias veces en la mejilla, despeinando mientras que este se quejaba.

–¡Mamá!–bufaba. –¡Me estas avergonzando!

Sakura soltó un risita. –Por cierto, le he traído un regalo a Saito, espero y no te enojes–se dirigió a sacarlo de la camioneta.

–¡Ahí, Sakura!–suspiró. –No hemos criticado lo suficiente a los hijos de tus vecinas encaprichados.

–Sabes que la situación es muy diferente–cargó dos cajas con ambas manos.

–No debiste molestarte–le sonrió en agradecimiento. –Saito, ¡qué son esos modales! Dile las gracias a...

–¡Eso es una torta de chocolate!–exclamó emocionado.

–De triple chocolate, para ser exactos–le entregó las dos cajas.

–¡Vaya! Gracias Señora Sakura–se fue con prisa hacia su casa totalmente eufórico.

–¡Hey! ¡Saito espera! ¡Que modales...!

–Esta bien, Ino, dejalo–posó una mano en su hombro. –Es sólo un niño emocionado.

–Y sí que lo llenaste de emocion–lo miraba desde la ventana como arrazaba con la envoltura del regalo. –Gracias Sakura, en verdad, no se que hariamos sin ti, y más yo.

–Para eso estamos las amigas–le sonrió.

–Será mejor que entremos a casa antes de que devoré todo el pastel completo–dijo entre risas.

–Sí–rió. –Vamos. –se aseguró que la puerta estuviera cerrada. –¿Podrás venir por mi a las 7...?

–¡8!–exclamó divertida interrumpiendo a su amiga.

–Bueno, 8 de la noche por mi ¿Señor Kanguro?

–Sí es una orden, sí–le sonrió. –Hasta entonces Señora.

–Sí gracias –se despidió de él viendo como se alejaba.

–¡Vaya, vaya! ¿o es mucha educación o ahí algo más? –le dió un codazo burlándose.

–¡Ino cerda!–dijo riéndose. –¡¿Cómo puedes decir algo así?!

–¿Pues qué quieres que diga? Si es lo que yo veo, lo...

–Lo dices, ya sé –le rodó los ojos. –Tienes una imaginación muy grande ¿sabes?

–Aclarando, no es mi imaginación–la apuntó con un dedo.

–Claro que lo es–le sonrió divertida, cruzando los brazos, era un asunto que quería discutir.

–No es así frentona, es más, creo que sabes que traes a tu disposición todos los que te conocen–lo dijo en forma de burla.

–Si claro, debería viajar a todo el mundo para conocer a todos lo hombres de este y dominarlo–uso el tono sarcástico.

–Exacto, pero solo te quedas con uno, eso es muy tonto.

–Así es el amor, Ino–suspiró. –Y eso es lo que te hace estúpido a las cosas ¿no?

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Espero poder terminar hoy el siguiente capítulo ya que este si se presta para ser largo. ¡Saludos!

por Uno Mar Jul 15, 2014 2:11 am

¡¡No me rompas el corazón!! No lo hagas...

Bien, hola primero que nada, veo que subes capitulos rapidos!!! *-* agsgagshshd y eso es bueno ¡¡Maravilloso!!

Ok, aquí vemos a un Naruto muy frio, muy indiferente y eso es muy mal, siento lastima por Sakura, ella trata de areglar con palabras algunas cosas... Pero no lo hace, porque Naruto no la escucha... Y Kiba sólo le mete ideas a Naruto que bien tiene de razón pero Sakura no sería capaz de engañarlo y pueden darse mal entendidos.... Ya sabes... Pero seguro Naruto no lo sabrá y no lo entenderá... En fin!!! Ya hice mi petición T.T que se den mal entendidos.... Pero no infidelidades T.T Dios las odio!!! #MalasExperienciasConLasInfideliladesComprendeme.

Bueno creo que eso es todo lo ue tengo que decir sobre el capitulo Smile

y bueno... n.n me despido, besos abrazos y la manga del chaleco.

PD: En cuanto a tu pregunta de mi OS... Pues siempre hago eso con mis historias, porque sí he tenido malas experiencias y siempre dudo de mi capacidad de escribir, lo admito.... Tengo mala autoestima y en un segundo todo se me derrumba... :/ y bueno yo creo que es por eso... También como dije, he tenido mala suerte.... En cuanto a eso.

Chao!!! Creo que te contesté la duda n.n cuidate y espero el siguiente...

por Neyli Mar Jul 15, 2014 4:28 am

Me da mucha penita Sakura... la pobre solo quiere que le haga un poco más de caso, y ese Naruto tan superficial... espero que cambie por el bien de mi salud mental (no lo puedo evitar, soy muy sensible)

Espero que Naruto le haga caso a Kiba y no deje escapar a Sakura... se puede arrepentir...

¡Un saludo Oni! Onion bye

por Eri-chan Mar Jul 15, 2014 1:10 pm

Hola Oni-chan tienes otra nueva lectora, me leí los capítulos y el prologo, la verdad me gustaron.

Aquí vemos que las cosas no van muy bien entre sakura y naruto, sakura queriendo atención y naruto no se la da. Que es lo que pasa por la mente del rubio?

Espero que sakura no termine por irse con otro por la falta de atención de naruto. Que enferma tiene sakura? O.O Por cierto? Espero saberlo luego. Ojala naruto se lleve de los consejos de kiba y le preste mas atención a sakura, que al parecer si que lo ama, y mira que aguantarle discusiones, ya hay razones del porque. Y el la ama?

Espero la continuación muy pronto, que esta muy interesante la historia, sin mas me despido, cuídate, bye!

por **Oni** Vie Jul 18, 2014 7:10 am

¡Hola, que tal!

Este capítulo quizá le sirva de consuelo a algunas personas y pues más que nada espero y lo disfruten.

(Ahora si esta largo >\\\<)

CAPÍTULO 3

–Muchas gracias por los regalos–agradeció un sonriente niño de cabello negro.

–¡Hasta que te molestas en mostrar tus modales, muchachito!–regaño la rubia a su hijo.

Sakura sonrió–No fue nada, Saito–se agacho a despeinar un poco su cabello. –Ha sido un placer venir a visitarlos.

–¡Hay mujer!–la abrazó. –Hazlo mas seguido ¿sí?–su voz empezaba a tornarse sentimental.

–No llores que todavía no me muero–consoló a su amiga tallando su hombro. –¿No lo sabías? ¡Las mujeres tienen que ser fuertes para sobrevivir.

–Es cierto–se limpió una lágrima. –Bien, será mejor que te vayas antes de que te alcanze la lluvia–miró el cielo que empezaba a indicarlo.

–Sí, bien, pues nos vemos pronto– subió a la camioneta con ayuda de su chofer mientras se despedía con la mano al igual que ellos.

–¡Cuidate y saludame a Naruto de mi parte!–le alcanzó a gritar justo antes de partir de ahí.

***

–¡Señor Naruto!, ¡qué sorpresa!–exclamó con un toque de nerviosismo.

–¿Y mi esposa?–sujetaba su saco, pegado a su hombro. –Ella... salió, Señor.

–¿A dónde?

–A casa de...–dejó de explicarle al oír que la se estacionaron afuera. –Creo que justamente acaba de llegar–se dió prisa en alejarse y abrir la puerta principal, Naruto sólo se limitó a observar cómo bajaba sonriente con la ayuda de el chofer, al parecer los dos muy divertidos e inclusive se despidieron ocasionando que le hirviera la sangre y recordará las palabras de su amigo.

FLASH BACK

–¿Qué?¿no te da miedo que algún día se vaya con otro?–se burló mientras se levantaba.

–De ella no lo creo–se sentó y rió al pensar en esa idea.

–Yo no estaría tan seguro si fuera tú–acomodaba los papeles, buscando uno en específico. –Ella es una mujer muy bonita y tú más que nadie debería saber que podría traer a cualquiera entre esas piernas si quisiera... inclusive a mi.

–Sí, lo sé grandísimo idiota, lo sé...

FIN DEL FLASH BACK

–¿Naruto?–dijo entrando y a su vez alzando un ceja. –¿desde cuándo llegaste?

–No pasó mucho desde tu llegada ¿dónde estabas?–la miraba directamente a los ojos con seriedad.

Sakura sonrió. –Ino vino en la mañana de ayer, me compromete a visitarla cada que viene–lo miró con ternura al saber que aunque sea de una manera muy rara, demostraba que le interesaba.

–¿Y ya comiste?–suavizó su mirada, y su corbata.

–Pues... a no ser que le llames comida a una rebanada de pastel , sí–se acercó a ayudarle con con la estorbosa corbata que se le dificultaba. –Como la comida de Ino aún no es comestible, terminamos ordenando comida china pero ya se hacía tarde.

–Entonces vámonos–se alejo y abrió la puerta que conectaba con el exterior.

–¿A dónde?–preguntó sin entender.

–A comer, claro esta–sonrió levemente indicando con su mano que la invitaba a salir, la pelirosa tomó su mano y lo guió a que saliera con ella.

–Sube–le abrió la puerta de su auto, ella solo se limitó a obedecer.

–No es que esto no sea maravilloso, porque lo es, es sólo que...me gustaría saber porque hoy estás tan eufórico–dijo tímidamente ruborizada.

–Yo... tampoco lo sé–enfocó su mirada hacia adelante. –Puedes conformarte con que he conseguido un poco de tiempo hoy que no lo quise desaprovechar.

–Ya veo–sonrió con sinceridad y rió.

–¿Qué?–dijo el también divertido mientras manejaba.

–Llegas temprano, aquí estamos platicando tranquilamente y no te molestaste en llamar al chófer para que nos llevará a tu restaurante favorito, todo como una pareja normal–se abrazó a su brazo dejando al rubio sorprendido meditando por un rato sus respuestas.

–Bueno sobre el llegar temprano; ayer cerré un contrato exitosamente además creo que ya nos hacía falta salir los dos para platicar así y no tenía previsto ir a ese restaurante–respondió rápidamente. –Y empiezo a querer privacidad con mi pareja.

–Yo también pienso lo mismo–acariciaba su hombro. –Da vuelta, Ichiraku Ramen queda de ese lado.

–Creí que querías ir a uno más romántico –obedeció con una sonrisa a su esposa.

–No habra otro mejor lugar que no sea ahí para festejar tu éxito,después de todo tu amas el ramen–asomó su postura una vez que se estacionó.

–Espera que yo te abriré –salió del auto con rapidez y le abrió la puerta.

–Gracias–le tomó de la mano y miró con felicidad.

–Es un placer–no la soltó y se dirigieron adentro.

Los dirigieron su mirada hacia la entrada de ese puesto; realmente significaba muchas cosas para la pareja, mucho pasado aguarda ese dichoso restaurante...

–¡Naruto! ¡Sakura!–saludó amistosamente el dueño de aquella tienda. –¡Bienvenidos! Hace mucho que no se les veía por aquí.

–Pues he de vuelta aquí, Viejo Teuchi–le sonrió gustosamente.

–Ya veo que sí y justo a tiempo, acaba de desocupar su lugar especial, siganme–la pareja se miró entre sí y después sin soltar su agarre lo siguieron.

Y si, no se equivocaba el dueño del lugar; realmente era especial y no por ser el lugar favorito de Naruto donde preparan ramen, no, sino por ser cómplice de la proposición de Naruto, el día que le pidió matrimonio.

–¡Ayame, que gusto!–exclamó con emoción al ver el cuerpo de la chica.

–Lo mismo digo–sonrió a ambos, después de prepararles la mesa.

–¡¿Acaso tú...?!–apuntó hacía el abdomen de la muchacha inflamado.

–Si bueno, creo que sí–habló divertida y más al ver la cara de su padre que aún no lo superaba.

–¿Cuánto tiempo tienes embarazada?–su mirada también se enfocó en su vientre con ilusión.

–4 meses con 3 semanas–expecifico Teuchi cruzado de brazos y bufo. –Estos jóvenes de ahora y su calentura.

–¡Oh vamos padre, no digas eso que aquí nadie te ayudara!–posó su mano en su hombro con una sonrisa. –Naruto y Sakura son más jóvenes que yo y ya se casaron, di que por alguna razón no hay tenido hijos–habló con suma confianza mientras que ambos jóvenes volteaban a mirar distintas direcciones muy sonrojados.

–Creo que será mejor que nos vayamos a la cocina–la empujaba levemente para salir del lugar.

–Pero quiero seguir platicando de...

–El ramen no se prepara solo–regaño a su hija.–En un momento estará su orden ¿la de siempre verdad?

–Sí–gritó Naruto al ver que se había ido, suspiró al saber que no tendría que contestar preguntas que le incomodaría mucho como la de –¿por qué no quieres tener hijos?– Porque así lo era, no quería, al menos por ahora no le llamaba la atención. Volteó a ver a la pelirosa, estaba ligeramente distraída viendo el pequeño ramo de flores que decoraba la mesa, du miraba era tímida y estaba aún algo ruborizada.

–¿Naruto?–levantó la mirada hacía él.

–Dime, Sakura.

Ella la desvío con una sonrisa observando la vista que daba al estar cerca del balcón. –¿Aún recuerdas lo que vivimos en este lugar?

–¿Qué sí lo recuerdo?–repitió dudoso y lo pensó un poco. –Pues yo en ese entonces siempre venía a este lugar–hizo una pausa. –No fue difícil reservarlo ese día, después de todo, sigo siendo su cliente favorito.

–No lo dudó–su voz sonaba divertida aún analizando el lugar.

–¿Qué día fue aquél?

–El 10 de Octubre, por supuesto–levantó un ceja al oír su pregunta, contestando rápidamente. –Ese día te obsequiaste mi sí, al menos eso fue lo dijiste.

–¿Eso dije yo?–preguntó extrañado de su actitud en ese entonces.

–Sí–suspiró recargando su mentón en sus brazos que se encontraban en la mesa. –Después de todo, era tu cumpleaños.

–Vaya, tampoco recordaba eso–sonrió levemente apenado.

–No me sorprende–jugaba con una rama del florero.

–Sakura...

–¡Espero que lo disfruten!–dijo alegre entrando con un enorme plato de ramen. –Me moleste en preparar aquella especialidad que me pediste en el día que le pediste la mano a Sakura, por supuesto va por parte de la casa.

–¿Usted si se acuerda, Teuchi?–levantó la vista hasta el, regandole una sonrisa.

–¡Claro que me acuerdo!–sonrió también. –Estoy viejo, pero no tonto.

–Ya lo creo–soltó una risita, mientras Naruto lo miraba con molestia. –Veo que usted si tiene organizadas sus prioridades.

–Pues ni tanto–se entrometió su hija. –El primero piensa en lo que cree conveniente a mi futuro antes que en lo que yo quiero.

–Bueno Ayame, es tu padre–lo justificó la pelirosa. –Se preocupa por ti.

–Y me alegraría si no quisiera que me quedara como madre soltera –bufó cruzándose de brazos.

El hombre suspiró, volviendo a dirigirse con su hija a otra estancia del lugar.

Los dos empezaron a comer silenciosamente mirando solo el enorme plato de ramen, al principio Sakura solo lo observaba con nostalgia por los momentos vividos.

FLASH BACK

–¿Este es el lugar del que me hablabas?–estaba asombrada por el lugar tan especial que el rubio le prometió. –No sabía que Ichiraku Ramen tuviera un segundo piso ni mucho menos un balcón.

–Lo descubrí cuando no veía a Teuchi en el mostrador y decidí buscarlo–se rascó la nuca, mirando el lugar. –No fue fácil convencerlo pero le insistí demasiado que concordamos en que yo tendría que comer diario aquí.

–Un momento–sonrió divertida. –¿pero que no acaso tu casi siempre comes aquí?

–Ahora tendré que hacerlo diario–suspiro fingiendo desánimo.

–Pues gracias por el sacrificio–hablo con sumo sarcasmo.

–Lo que sea por ti, Sakura-chan–le guiñó el ojo haciendo el ademán de acomodar la silla para que se sentara.

–¿Y la decoración...? ¿también te encargaste de ella?–se sentó, observando como lo hacía él.

–Tuve que –rió al recordarlo. –El lugar era un desastre; exceso de polvo, cajas y cachivaches por dondequier y ni se hable de los roedores e insectos.

–¿Insectos?–se intrigó nerviosa al oír esa palabra.

–Sí–sonrió, él ya lo sabía. –Eran enormes Sakura-chan, ni te imaginas.

–¿Qué tan grandes?–los escalofríos recorrieron su cuerpo.

–Pues... ¿Vez mi mano?–la puso delante de ella mientras éste asentía con la cabeza. –De este tamaño–abrió completamente; estirando los dedos de la masculina mano. –Creo que un poco más.

–¿M-Más?–abrazó su cuerpo con los ojos más abiertos.

–¡Más! Y caminaba así...–se acercaba lentamente a la mano de la chico imitando el movimiento de una araña con su mano. –Y se acercaba más y más hasta...–con un rápido movimiento subió de su mano a su hombro y de ahí a su oreja que instintivamente la chica alejó de ella riendo, tomándolo de la muñeca para después sorprenderse de lo que guardaba su en ella.

–Naruto...–susurró anonadada.

–Y llegó a su oído para susurrarle su más profundo sueño a la bella dama a pesar de ser un cabeza hueca y desesperante–se hincó levemente para mostrarle totalmente el anillo y justo cuando se lo iba a poner dijo. –¿La pisotearas o te casaras con ella?

–Naruto–repitió su nombre emocionada. –Yo...

–Vamos Sakura-chan–se paró y tomó sus manos. –La araña no quiere dejarte ir, yo no quiero hacerlo, ella lo miró decidida pero luego se deshizo de su agarre para darle la espalda.

–No tengo palabras para esto...–dijo seriamente y luego volteó a verlo sonriente. –Pero pisar a una araña es algo que jamás haría en mi vida.

Instantáneamente el rubio salió disparado a abrazarla de alegría mientras ella sonreía.

–¿Estamos juntos en esto?–preguntó aproximándose a sus labios.

–Sí...

FIN DEL FLASH BACK

–¿No vas comer Sakura?–preguntó observando desde hace un rato su mirada.

–¿Am? Sí, claro–tomó sus palillos dándole el gusto, deseando estar en sus recuerdos.

***

–¡Vaya, si que es tarde!– dijo con un bostezo al entrara su habitación, empezando a quitarse el abrigo.

–Déjame hacerlo por ti–despojo la prenda suavemente detrás de ella cuando pudo percibir ese olor tan dulce y adictivo de ella que adoraba.

–Gracias–aún seguía en la misma posición y percibió que él tampoco se movió.

De repente Naruto la abrazó lentamente pasando sus brazos por su cintura, hundiendo su rostro en su cabello, absorbiendo el aroma que emanaba, ella no dijo nada, sólo se mantuvo a cerrar los ojos sujetando sus manos con las suyas.

Su nariz después se detuvo en su cuello aspirando y a la vez, haciendo que las piernas de Sakura flanqueaban un poco, él la sostuvo más fuerte.

–Naruto–susurró en un suspiró mientras él subía su mano hacia su boca de tal modo que quedó tapada por esta.

Sus dedos recorría su plano abdomen, mientras el torso de su mano se sujetaba y a la vez acariciaba su fina cintura, hacia mucho que no recordaba las reacciones que provocaba en él, y hoy estaba dispuesto a hacerlo, esta noche.

Con un brusco movimiento se volteó hacia él y apretó el agarre justo antes que se desmoronara en el suelo mientras ella se sujetaba de sus brazos mientras se volvía poner de pie con la ayuda de él, pero sin aún soltarla.

Se miraron a los ojos, los brillosos ojos de verdes de ella emitían sorpresa y esperanza mientras que los de él estaban empañados de necesidad y lujuria en sus profundos ojos azules e inmediatamente antes de volver a dar un necesitado respiro aprisiono sus labios con los de ella; tan cálidos y carnosos y él tan frío y hambriento, fue un reencuentro necesitado para los dos. El pasivo beso continúa ternura que poco a poco aumentó volverse más apasionado, mientras con pasos torpes se dirigían hacia la cama; ella, enredando sus dedos en el desordenado cabello rubio y él, rodeando aún su cintura, hasta que un levemente bajo para cargar de ella de tal manera que ella fuera unos centímetros más alta que él. Poco a poco la recostó en la suave colchón arreglado.

La pelirosa paso sus manos sobre su nuca y rodeó con sus piernas su cadera sin romper el beso mientras era custodiada por el cuerpo del joven que sin aplastarla esta pegado al de ella, ambos pechos junto con el de él respiraban coordinadamente; subiendo y bajando conforme empezaban la excitación.

Las manos de Naruto recorría lentamente de la cintura hacia los muslos de ella, rompiendo despacio el beso pasando de sus labios hacia su cuello besando delicadamente esa zona, aún recordaba lo delicada que era su piel.

Suspiros y susurro de su nombre era lo único que podía hacer en un mar de sensaciones que hace mucho no recordaba la ojos de jade, con ojos entre abiertos al igual que sus labios y las mejillas ya ruborizadas, meneando ligeramente la cabeza mientras con sus manos sólo sujetaba su cabello apretándolo más a ella, para que esta vez no se alejara.

Él chico quien no pretendía tampoco separarse, todo lo contrario quería mas y mas de ella, sus labios, sus caricias, su cuerpo, sus exclamaciones pidiendo más a su nombre, quería hacerla sentir mujer y a él su único hombre, quería demostrarle que era solo de él, totalmente suya.

Sin esperar más comenzó a quitarse la estorbosa ropa en el cuerpo del rubio; el saco fue fácil, lo hizo en una acto rápido besando de nuevo los labios de la chica mientras ella a ver lo que se proponía a hacer, le ayudó con su corbata velozmente y después desabrochaba los botones de su camisa con agilidad y mejor de lo que hubiera hecho el joven dejándolo con el torso bien trabajado al descubierto, impacta por la imagen comenzó a acariciar su cuerpo empezando por la su abdomen duro y firme, recorriendo cada músculo marcado al igual que en su pecho que con sólo tocarlo se sentía extasiada y memoraba el momento.

Estaba perdiendo la cordura y no sabía cuánto más iba a durar, se limitó por un momento a sentir su toque mientras respiraba con más dificultad y es que ella lo manejaba jodidamente bien y quizá sin percatarse de ello... ni en sus consecuencias.

En un suspiro sus manos se dirigieron a su cinturón que fue desabrochado instantáneamente quedado solo abajo de ella y sólo bajó un poco para meter sus manos en prenda holgada que ¡dios sólo sabe cuando agradeció que fuera así! Ya que fue en estos momentos no tenía los estribos para estar lidiar con algo apretado así que sin pensarlo manoseo la espalda de su esposa con desesperación, junta sus cuerpos a donde obtuvo los primeros gemidos de Sakura en esa noche.

Apegado a su cuerpo y con las manos ya en acción, hizo que por momentos saliera de la realidad para estar en un profundo lugar de sentimientos reencontrados con placer, donde sólo ellos dos existían.

Con ganas de más, su toque ahora rosaba su busto aún cubierto por el blusón y el brassier, sintiendo en encaje y el volumen de estos y de vez en cuando como subían y bajan conforme era su respiración, la cuál le costaba por la excitación del momento que incitaba más a hacerla suyo tan pronto pudiera pero a la vez quería que esto durará.

Tomando iniciativa de desprenderse de la inservible prenda, tomó las manos del chico y las guió para que la despojara que instintivamente la complació de manera lasciva.

Ya descubierta la dicha parte, se elevó un poco para apreciar tanto su abdomen plano, su pequeña cintura y su busto perfecto cubierto aún por el bra de encaje negro, subiendo la mirada para encontrarse a la pelirosa mas sonrojada recuperando la respiración moviendo sus labios rojos e hinchados y mostrando poco a poco sus oscuros y verdosos ojos, encontrándose con los suyos expresando todo sin poder asimilar nada, una frustración tranquila que albergaba en ella y una saciedad hambrienta en él.

Inmediatamente se erradicó un ataque hacia sus labios, abriendo paso a la cavidad, invitando a la batalla a su lengua mientras alejaba de ella la única prenda inferior que le quedaba con un poco de molestia hasta que por fin desnudó sus pechos.

Firmes, blancos, redondos y de buen tamaño; perfectos, sus manos lo comprobaron al tocarlos, recordando lo fabuloso que siente tocarla y la razón por la cual no lo hacía y seguir pensando se apoderó de ellos con besos desesperados mientras que al otro seguía acariciándolo con una lujuria delicada.

Gemidos, gemidos más fuerte y gemidos diciendo su nombre, la pobre Sakura no sólo se limitaba a hacer eso, su fuerte toqueo se hizo presente dejando marcas en su piel que aunque solo era presión, seguro y se quedaba marcadas por varios días.

Aunque aún les excitaba el excitante apego de sus pechos entre sí, no soportaban más los roces de sus intimidades, sobre todo porque en cierta parte ya empezaba a abultarse de tal modo que hacía más una cruel tortura de placer que se podía arreglar sin complicaciones e inmediatamente para solucionarlo Sakura y bondadosamente ayudó a quitarle el pantalón de vestir que agradecía que fuera cómodo mientras el chico fácilmente con la ayuda de cada pie se quitó los zapatos.

Sin embargo, el rubio quien sólo le quedaba una prenda, le pareció injusto que aún siguiera vestida con dos más que él, bueno si es que a esas pantimedias contaban como una que aunque le daban un toque sensual estaba seguro que se veía mejor sin estas... sin nada.

Levantó lentamente una por una de sus piernas y aprovechando de su flexibilidad le quitó la botas, recorrió desde sus pies cubiertos solo por un bordado hasta su cadera y haciéndolo despacio, arrastraba todas las prendas con su pulgar abajo de estas a los costados hasta llegar al final de sus piernas que un suave agite de sus pies se deshizo de estas quedando totalmente desnuda.

Su blanca, firme y suave piel descubierta por él lo hechizó, tan vulnerable y sonrojada intentó cubrir su cuerpo pero en medio acto la sujetó de sus muñecas y estiro sus brazos. Se acercó a ella besándola lentamente, con delicadeza y paciencia, sorprendiendola por un momento y perdiéndola en ese misma, se tranquilizó más y abrazó su cuerpo mientras que él después de acomodarse entre sus piernas entró en ella.

Inesperadamente sintió una punzada de dolor que la despertó del placer para entrar a una etapa más profunda de esta. Él gruñó y ella gimió, los dos se tensaron al momento de sentirse, siguieron respirando agitados hasta que vieron llegar el placer, ella arqueando la espalda y el agachando su cabeza hasta que empezó a moverse, sentía que todo el mundo se evaporaba al estar unido a ella, no podía igualar ni siquiera el disfrute que ella le daba, se sentía increíble estar dentro, hacerla suya, completamente de él.

Sakura sin palabras, el paraíso había llegado a ella sin previo aviso y que ni siquiera la dejaba ni pensar que se sentía, era único, él era único.

No era de esperar tanto para que llegaran a una velocidad brusca y pasional en que sólo los tenía en el momento los gritos de placer que producían ambos, sudaban y exclamaban el nombre de su amante y la situación empezaba llegar a el clímax dejaron llevar por este pero sin siquiera acabarse Naruto estaba a punto de retirarse antes de que concluyera, pero la pelirosa lo detuvo abrazandolo con todas la fuerzas posibles eyaculando dentro de ella.

El sorprendido joven gruñó de con más fuerza a la nueva sensación mientras que ella lo sentía con una sonrisa y aunque era de lo más placentero en todo el sexo que ha tenido con ella lo evita por una sencilla razón; embarazarla.

Agitado se retiró después del proceso tumbandose a un lado de ella, queriendo sentir el enojo hacia ella pero sin conseguirlo se dirigió a descansar, abrazándola en lo que se quedaba dormido, esperaría hasta mañana para poder hacerlo,mientras que la ojos de jade se abrazó instantáneamente a su pecho recuperándose de dicho acto, escondió su rostro en el de felicidad aunque sabía que quizá había hecho el peor error de su vida.

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Quizá me tarde más en publicar el próximo capítulo ya que ahora si no tengo nada porque se supone que este esta a la mitad cuando publique el anterior pero ya saben, creo que el lemon lo intento hacer detalladamente pero más que nada especial.

¡Saludos!

por mio-chan Vie Jul 18, 2014 8:44 am

Nuevaaaa Lectoraaa!!!

Jiji Oa Oni, otra vez yo aqui leyendo otro de tus Fics *---* y wow llevas 3 capitulos y ya me eh enamorado *-*

Se ve muuuy interesante :3, mooo maldito Narutoooo!!!; porque cambio tanto??, antes era un amorsh de persona y ahora, ahora es una maldita persona que solo piensa en trabajar y no le importa que Sakura este llorando grr

Y porque rayos Naruto no quiere tener hijos??!?!?!, y y y si Sakura queda embarazada:s, mooo cada vez se pone mas interesante *--*

espero que pronto subas el siguiente capitulo :3

por Neyli Vie Jul 18, 2014 7:48 pm

¡Oh este capítulo si me ha gustado! ¡Menos mal que Naruto al fin reaccionó! Me hubiera muerto de la tristeza si Sakura hubiera estado sumida en la tristeza un capítulo más... aunque algo me dice que la felicidad no va a durar mucho... espero equivocarme.

¡Espero ansiosa el siguiente capítulo! Chauu Onion bye

PD: Me encanta como relataste el lemon Globo

por Eri-chan Dom Jul 20, 2014 4:35 pm

El capitulo estuvo increíble, por fin naruto entro en razón. Y luego las cosas se pusieron mejor cuando llegaron a la casa, jaja vaya momento que tuvieron ambos, pero al parecer naruto no quiere embarazar a sakura, supuestamente no esta interesado. Que malin, no quiere hijos o que? Ah sakura, me pregunto que pasara al día siguiente?. Espero y naruto no vaya discutir otra vez con ella. Pero seria genial que quede embarazada jeje.

Espero la continuación pronto, cuídate y nos leemos.

por Uno Lun Jul 21, 2014 2:53 am

Ohhh Oni!!! Lamento mi tardanza en comentar >.....< ¡¡Pero ya estoy aquí!!

Bueno, este capitulo es tan triste... O sea, cuando Naruto estaba por casarse era muy lindo ¿Y entonces? ¿Qué pasó? ¿Por que ahora es ese ogro feo qie lastima a Sakura? Sad

en fin.... Incluso el sexo fue eso, sólo sexo pasional sin amor T.T tal vez ella sI y.él un poco... Pero fue un acto mas por necesidad qie por amor ¡¡Prrrrrr!! Supongo que sí esta embarazada eso es inevitable sin prottección Smile

y aunque saliera antes, igual al probabilidad que la pre-yaculación la embaraze... Smile

asi que no hay culpas ¡¡No lo hay!!

Bien chaoo?!

PD: un consejo... Confundes el tiempo presente con el.pasado al narrar y aveces lps dialogos confunden, ,me pierdo... Seria bueno que arreglaras eso, Smile

PD2: no tardes querida!! *-* chao!!

por **Oni** Miér Jul 23, 2014 6:55 am

¡Gracias por su atención! Tanto como en sus comentarios como al leer solamente y sobre todo su paciencia, tranquilos, no se desesperen porque no tienen ni idea de lo viene próximamente en esta historia.

CAPÍTULO 4

El amanecer pronto había llegado aquel día, la luz de sol estaba traspasando las delgadas cortinas y las aves comenzaba anunciando la llegada, después de la tormenta de anoche ahora sólo quedaba la frescura de esta en la mañana resaltaba los colores en especial los de la misma naturaleza, definitivamente la madrugada era muy buen estimulante para un buen día...

–Naruto, espera por favor...

O bueno, para cualquiera que se detuviera a verla.

–¡Por favor Naruto, no me ignores!–seguía al enojado rubio que se preparaba para salir con prisa bajando de las escaleras mientras ella la seguía con sólo una bata puesta. –Naruto, detente ¡tenemos que hablar!–rogaba con un nudo en la garganta, brotando lágrimas sin parar. –Naruto, escuchame.
–¿Escucharte?–la miró con molestia. –¡¿Qué no lo entiendes?! ¡¿Qué acaso eres estupida?!
–No me insultes por favor–bajo la mirada evitando esa mirada que tanto la lastimaba.
–¡¿Y cómo quieres que reaccione con la idiotes que hiciste?! ¡¿TE DAS CUENTA QUE LO QUE HACES O ERES IMBÉCIL?!–le gritaba con furia.
–Ya basta por favor–impidió el llanto en ella.
–¡¿ESO NO PENSASTE AYER, VERDAD?!–exclamaba apretando los dientes. –¡¡¡SE TE HIZO FÁCIL Y MIRATE!!! HACIÉNDOTE LA VÍCTIMA Y ARREPENTIDA COMO SIEMPRE!!!
–Naruto, sólo...
–¿SÓLO QUÉ?–se alejó de ella con los puños apretados. –No esperes que te perdone esta vez–y salió de la casa dejándola destrozada en llanto como siempre, como la rutina lo indicaba.

***

–¿Señora Sakura?–tocaba ligeramente la puerta de la habitación en la que se encontraba encerrada. –¿Señora Sakura?
–¿Qué pasa, Katara?–su voz se escuchaba destrozada a pesar de intentar sonar mejor.
–Abra por favor, le hará daño y más si aún no ha desayunado–insistió.
–No tengo apetito, en verdad... estoy bien.
–Señora, por favor...
–¡Sakura! ¿dónde esta Sakura?–preguntó angustiada la rubia acercándose a la sirvienta.
–Esta en su habitación, encerrada–musitaba para ella, señalando la puerta, Ino negó con la cabeza y habló.
–¡Sakura! ¡Soy yo, Ino! ¡Abre la puerta!–exclamó dando fuertes golpes a la puerta.
–¿Qué h-haces aquí?–sonó sorprendida y en otro mal intento en su voz para que no sonará como estaba...devastada.
–Vine a ver a mi mejor amiga, ¿me dejas pasar?–miró firmemente la puerta, espero y le dijo que se retirará a la servidora que estaba presente.Siguió esperando pegando su oreja a la puerta, escuchó su llanto y luego un suspiro, distinguió el sonido de pasos lentos y pesados que la hicieron alejarse, después quitó el seguro y abrió la puerta.
–Hola–le dijo con lástima, que no quiso hacer notar.
–¿Tan mal estoy, Ino?–le habló a punto de llorar.
–¡No, no, claro que no!–la abrazó con culpa. –Es sólo que... ¿esta vez qué pasó?
–Paso que soy una estúpida, eso es lo que pasa–se separó de ella, dándole la espalda.
–No digas eso, Sakura...
–¡Eso es lo que soy! ¡¿Qué no lo ves?!–le exclamó sentándose en la cama con las manos en la cabeza. –Yo... sabía que no quería, yo no debía pero...–la miró desesperada por comprensión. –... todo estaba tan bien que creí que... él y yo...–soltó el llanto una vez más. –Soy una tonta.
–Ya, ya, aquí estoy yo ¿sí?–se sentó a su lado mientras la guiaba a recostar su cabeza en sus piernas. –Todo va a estar bien ya–acariciaba su cabeza en señal de apoyo mientras ella lloraba hasta que se quedó dormida, quizá era lo único que la reconforía porque en sus sueños siempre era de recordar.

FLASH BACK

–¡Oye Sakura, ven aquí! –le exclamó una de sus hermanas.
–¿Qué pasa Yuno?–bajo de las escalera para llegar al gran comedor donde se encontraba la pelirosa de dos coletas.
–¡Mira! ¡Otro ramo de flores!–le señaló con alegría las rosas rojas que se encontraban en agua.
–¿Y ahora quién es?–dijo de lo más normal en lo que se sentaba en una silla mientras se disponía a aplicar labial.
–Pues aquí dice–tomó la tarjeta con la que venía el regalo en lo que se sentaba en la mesa –'Las flores se ponen celosas al ver tu belleza y yo solo suspiro por esta... de Lee', bueno eso dice aquí–señaló la nota.
–Ah sí Lee–hablo indiferente mientras se ponía la última capa de color a sus labios y luego la miró para explicarle. –Es otro chico que conocí en la discoteca.
–Pues si siguen así, pronto tendremos una gran florería y sin surtir–se pusó de pie llevándose las rosas mientras pasaba a un lado de su otra hermana mayor que acababa de bajar.
–Otro regalo–bufó esta sería, negando con la cabeza.
–Así es, Luci–se detuvo a presumir la pequeña las flores que ahora era de ella. –Y esta vez son mías.
–Sakura, ¿ahora de quien se trata?–preguntó con tono estricto.
–De un chico que conoció ayer cuando salió en la noche–informó desde arriba la pelirosa menor.
–¿Eso es cierto?–bajo su mirada de ver donde provenía la voz hacía Sakura para después apoyarse en la silla donde estaba sentada la ojos de jade.
–Sí–guardaba el maquillaje en su bolso.
–Sabes bien que si te regalan cosas es porque...
–Quieren algo más–terminó la frase y suspiró. –Sabes que igual y no les voy a corresponder.
–¿Entonces por qué no rechazas sus regalos y dejas de crearles falsas esperanzas?–se cruzó de brazos esperando respuesta.
–Bueno, yo soy nadie para impedir que se enamoren de mí–se encogió de hombros en lo que se ponía de pie.
–No tienes remedio–esbozo una pequeña sonrisa viéndola. –¿Y ahora a dónde te diriges?
–Voy a salir con unas amigas –se miraba por última vez al espejo.
–¿Nuestro padre lo sabe?
–Nuestro padre no lo sabrá y si pregunta, dile que estoy dormida.
–Ahí Sakura–suspiró en modo de resignación. –No se ni siquiera porque te ayudó en esto.
–Porque somos hermanas y me quieres mucho ¿no?–la abrazó y le propició un beso en la mejilla. –Y si ese no fuera a necesario para convencerte solo me basta llamar a tu novio para decirle lo bipolar que eres.
–Creo que lo hago por amor ¿sí?–dijo divertida mientras le revolvía el cabello. –Cuidate ¿sí? Y no me causes muchos problemas.
–Nos vemos hermanita–se despidió saliendo de la casa.
Caminó rapidez hasta la esquina donde un grupo de chicas la esperaban; todas arregladas vistiendo su mejor ropa.
–¡Vaya! ¡Hasta que te dignas en aparecer!–exclamó levantando las manos la peliazul de vestido morado entallado que resaltaba totalmente su fenomenal y voluminoso cuerpo, hasta la última curva con cierto maquillaje llamativo y peinado extravagante llamada Hinata.
–Bueno, ya esta aquí ¿qué no?–habló la de cabello claro llamada Temari con un vestido rojo carmesí de tirantes que aunque no estaba tan entallado como la anterior se podía notar su femenino cuerpo que se veía muy trabajado además de llamar más la atención sus largas pestañas en un atrevido peinado.
–¿Qué tal si en vez de discutir nos dirigimos a divertinos?–preguntó eufórica sujetando su cintura la pelirosa de cabello suelto con solo labial rojo y un poco delineado sus ojos que portaba un vestido negro sin escote pero pegado a su cuerpo aunque era más delgada que ellas tenía dotes en ciertas partes de su cuerpo sobre todo en las caderas.
–Bueno es que tú siempre nos haces esperar–dijo la pelirroja haciendo un puchero reluciendo un vestido tipo strapless blanco con lentejuela que subían más sus atributos y su cabello agarrado y maquillaje con sombras oscuras.
–Bueno es que menudo lugar el que escogieron para reunirnos–encogió los hombros divertida. –Cualquiera podría pensar mal de ustedes en una esquina.
–Mejor cállate y vámonos mujer que hoy es día de ligar–mencionó al ver que llegaba el taxi.

Para Sakura no eran sus amigas ya que sabía que conforme pasó el tiempo cambiaron las cosas entre ellas de una forma ya no muy amistosa aunque todas ellas vivían en la misma cuadra y se conocían desde la infancia y bueno cabe decir que era casi todas, a excepción de Karin, ella aún conservaba su amistad.

–Espero y nos dejes por lo menos un galán ¿eh Sakura?–exclamó guiñandole un ojo al comentar.
–Lo intentaré Karin, pero no prometo nada–dijo entendiendo su señal; a Hinata por alguna razón siempre le molestaban los comentarios buenos que no fueran hacia su persona.
–Ustedes dos ya dejen de hablar y empecemos a divertirnos–habló la rubia al ver sus intenciones. –Porque obviamente como a Sakura no le interesan siempre tendrá una hermosa amiga soltera.
–¡Quieren callarse! Como si todos los chicos se murieran por ella–exclamó molesta adelantándose al lugar mientras ellas se reían en voz baja siguiéndola.

La fiesta se encontraba en un discoteca (antro, boliche, nightclub, boîte, disco, etc.) muy famosa del centro de la ciudad donde las personas comunes tenían que esperar a entrar que aún hubiera lugar mientras gente de familia prestigiosa, famosos o simplemente hermosa era más bienvenida en el dichoso lugar, por suerte Sakura tenia una de las características para pasar sin problemas; era una de las chicas mas hermosa que alguien pudiera ver, o bueno, es lo que la gente decía: su exótico cabello de tonalidad rosa que resaltaba perfectamente en su blanquecina piel además de combinar con sus ojos color verde jade, sin duda era una belleza peculiar y aunque no poseía fuertes riquezas como sus amigas que no eran nada feas, si se distinguían por el poder de sus familias.

El lugar estaba a punto de reventar, la gente ya no quería estar de sentada y empezaba a seguir el ritmo de la música lo que era una suerte porque así consiguieron una mesa más fácilmente.

–¿Entonces nos rolamos o qué?–propuso Temari sentándose, mientras se retocaba de nuevo el maquillaje.

–Bueno pues yo me voy a bailar–les guiñó el ojo a las chicas la ojos de jade y jalo consigo a la pelirroja antes de que las demás pudieran decir algo.
–¡Hay esa estúpida rosada! ¡¿quién se ha creído?!–habló molesta mientras la miraba con odio.
–No sé por qué te molesta tanto su presencia, si se supone que son amigas–continuó maquillándose sin mirarle.
–Desde que ella se volvió una vanidosa presumida–mordió su labio del enojo causándole una sonrisa sínica o su acompañante. –Bueno que yo recuerde tu fuiste la que la ayuda a subirle la autoestima.
–Ashh mejor cállate y observa cómo te quedas sola–se despidió mandándole un beso a su amiga mientras ella la ignoraba resignandose fácilmente.

Sakura y Karin se divertían bailando solas; la pelirroja empezaba a mover las caderas sensualmente mientras sujetaba su cabellos y Sakura solo seguía el ritmo energéticamente, poco a poco la gente se les empezaba a unir haciendo un círculo en el cual cada uno por turno mostraba sus mejores pasos pero de repente empezó una canción lenta y todos se unieron con sus respectivas parejas y otros aprovechaban para descansar pidiendo bebidas en la barra.

–¿Y Hinata?–elevó el volumen de su voz para que la rubia aún sentada la escuchara, ella en respuesta sólo señaló un grupo de hombres que la rodeaba, provocándole risa a ambas.
–Anda, ve a a baila–la ayudó a levantarse.
–¿Segura?–cuestionó entusiasmada.
–Claro, esta también es tu noche–la empujó hacia la rueda que empezaba a formarse por el cambió de canción.
El lugar estaba muy animado, se podía notar. Le gustaba mucho venir aquí porque nunca estaba aburrido; a veces organizaban diferentes temáticas o traían a grupos musicales o DJ muy buenos que no dejaban la diversión tanto como hoy, que iba a tocar el famoso DJ 'Kyubi', y ese era un motivo más para venir, sobre todo para Hinata que estaba obsesionada con él que inclusive presumía de haber conocido.

–Sakura–la saludó cortésmente un muchacho con grandes cejas. –¿recibiste mis flores?
–Sí–respondió cortante. –Y es de muy mala educación investigar los nombres de la gente.
–Me disculpo por eso, pero quería saber el nombre dicha flor más hermosa que he visto–tomó su mano y la besó. –¿Puedo sentarme?
–¿Lo harías?–levantó una de sus cejas.
–Sin duda alguna–mostró una coqueta sonrisa.
–Que bien–se levantó una vez que él se sentó. –Sirve de que cuidas la mesa.
–Pero...
–Así yo podré salir a bailar ¿no te molesta que te deje solo, verdad?
–Bueno la intención era que...
–¡Oh qué gentil! ¡gracias!–lo interrumpió con una sonrisa falsa y se fue a la pista en busca de alguien conocido.
–¡Oye Sakura! ¡por aquí!–levantó la mano la rubia junto con la pelirroja, al captarlas la joven se dirigió hacia ella.
–¿Dejaste la mesa sola?–le susurró casi en su oído.
–No hubo necesidad–empezó a bailar con ellas.
–¡¿No me digas que Hinata...?!
–Nah, tampoco dije que se trataba de un milagro–las tres rieron a su comentario.
–¿Entonces?–preguntó la ojos de rubí curiosa.
–Deje a un chico cuidándola–explicó. –¿Recuerdan al tipo de ayer... amm ¿cómo se llamaba?
–Lee, se llama Lee–dijo rápidamente la de vestido rojo, atrayendo las miradas confusas de sus amigas.
–¿Qué?–encogió los hombros. –Fue muy lindo.
–Sí, como digas–rodó notoriamente los ojos la de cabello claro. –¿Entonces aprovechaste de su amabilidad?
–Bueno, a ambos nos convenía–dijo con una sonrisa burlona. –Él se quería sentar.
–¿Te han dicho que eres una cabrona?–le dió un codazo en su brazo a la pelirosa.
–Aprovechada, yo diría–se burló la de vestido blanco.
–¿Alguna vez se han preguntado el por qué estan solteras?–respondió con el objetivo de molestarlas.
–¡Eres un perra, Sakura!–dijo a carcajadas contagiando a las demás.
–Por cierto–se limpió una lágrima a causa de tanto reír. –¿Ya vieron como tienen a Hinata?–señaló con sus dedo a la peliazul ya sentada en el regazo de un chico.
–¡Venimos a bailar Hinata, no ha andar de puta!–le gritó una de ellas sabiendo que no la iba a escuchar provocando que la otra se riera.
–¡No le digas así! –dijo Karin aún entre risas. –Que ella no cobra.
–Ahora sabemos porque insistió en que la esperáramos en un esquina–las tres se echaron a reír aún más hasta que una voz la interrumpió.
–Señorita–llamó la atención de las chicas al parecer uno de los trabajadores del lugar. –Ha sido cortésmente invitada a la sala vip por el anfitrión de la fiesta.
–¿Anfitrión? No sabía que era una fiesta personal–cuestionó curiosa la de chica de vestido negro.
–Así es, sólo que el verdadero festejo esta en la dicha sala. –informó a la brevedad. –Y le agradaría que le acompañará en su cumpleaños.
–¿Cumpleaños?–preguntó Karin dudosa.
–¿Acaso lo conoces, Sakura?–sonó no muy convencida de la propuesta su otra acompañante.
–¿La invitación es personal?–ignoró a ambas y preguntó al encargado.
–Así me lo hizo saber, señorita–respondió no muy seguro.
–Entonces dile que no estoy dispuesta a ir sin mis amigas–se mostró decidida sorprendiendo a los que estaba escuchando. –¡Ah! Y dile que si tanto le interesa algo que se moleste en hacerlas él mismo.

El informante sólo escucho lo que decía y con ademán se alejó de las jóvenes mientras estas se le que quedaban viendo.

–¿Qué?
–¿¡Te das cuenta de lo que acabas de hacer?!–preguntó desesperada.
–Rechace una invitación –respondió diciendo lo más obvio y observando las caras de sus amigas bufó. –Chicas deben de entender que algo llamado 'no-voy-a-ir-con-el-primero-que-me-invite'–mencionó rápidamente.
–Aunque...
–No Karin, no importa si este es millonario o es muy guapo.
–Y que...
–No eso tampoco te asegurará que sea gentil en la cama–bufó para la rubia mientras ellas se decepcionaron de sí mismas.
–¡Oigan chicas!–se acercó la peliazul muy triunfante. –¡Puaj!¿Y esas caras con las que se cargan?
–Ignora eso, ¿qué pasa?–contestó rápidamente Temari, mas que nada evitando el tema.
–¿Adivinen quién fue invitada a la sala vip?–presumió posando su cuerpo.
–¿Sakura?–habló la pelirroja aún deprimida.
–¿Qué cosa?
–Nada, ignorala–sonrió tapando la boca de la ojos de rubí. –Haber Hinata, dinos de quién se trata.
–¡Pues yo, claro esta!–se señaló a sí misma. –¿Que a ustedes no?–preguntó con lastima, jugando con su cabellos.
–No, que suerte tienes–rodó los ojos la pelirosa mientras le dedicaba una sonrisa fingida. –Espero y te diviertas mu...
–¿Señorita Sakura?–le llamó una voz masculina detrás de ella, la chica sólo suspiró resignada se dirigió hacia él.
–Si–habló con indiferencia.
–Disculpa por molestarte–dejo los formalismos. –Pero me han informado que se negó a rechazar mi invitación.
–¿Hay algún problema con eso?–se cruzó de brazos mirándolo con desafío.
–De ninguna manera–rió interesado. –Sólo me gustaría oír la razón de su provocativa boca así como le resalto de nuevo la invitación personalmente.
–Como ves, no vine sola–hablaba más calmada mientras sus amigas la miraba con los ojos abiertos. –Te seré directa; vine con ellas, salgo con ellas.
–Hum ya veo–dijo analizando a las mencionadas y luego la miró directamente a los ojos. –Por eso no hay problema, también pueden venir.
–¡¿EN VERDAD?!–gritó entusiasmada Karin.
–¡¡¡SÍ!!!–gritó de alegría Temari.
–Siganme, por favor–les invito a que guiarlas.
–Esperen, chicas... –intentó llamar su atención pero estaban tan entusiasmadas que pasaron a su lado mientras seguían anonadadas al muchacho bufando por la conversación olvidada que había tenido con ellas también procedió a seguirlo mientras una cabreada chica peliazul no tuvo más opción que tomar a cualquier chico y seguirlas.

Miraron a su alrededor asombradas por el dichoso lugar en el que ya habían llegado; ya tenía la idea de que sería lujoso pero al parecer era muy ligera comparada con la realidad; aislada en el núcleo principal y dotada de todo tipo de servicios,contaba con un pista de baile , sala de juegos y jacuzzi, todo ello perfectamente comunicado.

-¡Esta increible!-dió brinquitos de alegría.
-No, Karin, ¡Esto es de lo mejor!-agregó la rubia, mirando los servicios y formas para divertirse.
-Esto no es nada-habló con indiferencia Hinata, mientras guiaba al chico que había traído ‘voluntariamente’ con ella. -He visto mejores lugares.
-Son sólo cosas materiales, chicas-se cruzaba de brazos mientras las veía.
-Con que ¿esto no te impresiona?-se puso a un lado de la pelirosa con una encantadora sonrisa.
-No, esto es tan…
-Estas no son de las cosas que me asombran-lo miró a los ojos, interrumpiendo a la de vestido morado quien conteniendo su furia se alejo de ellos con chico en mano. En cambio las otras ignoraban a todos en lo que elegían con que entretenerse.
-¿y cuáles son esas envidiables cosas que te sacan una sonrisa?-la invitó a sentarse con la cortesía de acomodarle la silla.
-Quiza sean cosas menos sofisticas y más sencillas-acomodó su barbilla en el dorso de su mano mientras esta se apoyaba con el codo en el mesa.
-Sencillas ¿eh?-la chica pudo notar la concentración que él tenía en sus labios. -¿Y cuál es tú nombre?
-¿Cuál es el tuyo?-dicha pregunta le causó gracia a el jóven.
-Sasuke, Sasuke Uchiha-sonrió coquetamente.
-Sakura, Sakura Haruno-sonrió amistosamente.
-Te queda muy bien el nombre, Sakura-llamó la atención de un mesero y este inmediatamente se acercó. –¿Deseas beber algo?
–Un vodka nuvo, por favor –se dirigió al mesero.
–¿Un vodka nuvo?–preguntó con risa. –¿No eres de las que bebe, cierto?
–Lo pedía para ti–respondió cortantemente y luego miró de nuevo al servidor. –A mi sirveme una copa de cognac–habló con total seguridad mientras la miraba totalmente impresionado su acompañante, el mesero asintió y se retiró. –¿Te pasa algo?–cuestionó al ver que su mirada seguía en ella.
–Eres la primera chica que veo que sabe lo que quiere–en ese momento el servidor llegó a traerles sus pedidos y el pelinegro le hizo sin despegar los ojos a ella una señal para que se retirara.
–Eso es tan triste–tomó un poco de su bebida, saboreandola. –Deberías salir a conocer mas personas.
–Puede que sí–respondió con una sonrisa, tomando su bebida. –Porque contigo ya me maravillado.
–Definitivamente tu caso es una pena–le dedicó también una sonrisa.
Las voces afuera empezaron a sonar en especies de gritos eufóricos; con mucha emoción mientras se podía distinguir una que hablaba al parecer en un microfono, saludando a la gente y animando a la gente.
–Ya es hora–dirigió la mirada hacia afuera, se levantó de su lugar y le ofreció la mano como apoyo. –Ven, quiero presentarte a alguien.
–¿Bromeas?–tomó su apoyo y se puso de pie. –El DJ ya esta en presentarse.
–Precisamente–le esbozó otra sonrisa. –Es mi amigo.
–Oh–digo algo asombrada.
–¡¿Conoces a el DJ 'Kiuby'?!–preguntó más impresionada aún la pelirosa que salvajemente apareció cerca de ellos. –¡¡¡Eres grandioso!!!
-¡¿Y qué estamos esperando?! ¡¡¡Vamos con quien también es mi amigo!!!–se lució Hinata y luego se dirigió a su acompañante. –Ouh, que pena amm...
–Komi–jadeó el chico quien estaba fastidiado de estar siendo arrastrado por ella.
–Sí, como sea–rodó sus ojos y habló con lastima. –Hasta aquí llegaste conmigo, nos vemos–lo despidió con la mano egocéntrica y él sólo se fue suspirando por su libertad.
–Eres muy maldita Hinata–negó con la cabeza entre risas la rubia. –Ya mejor, vamos a conocerlo–Y todas se dirigieron hacia donde señalaba el chico mientras este se atrasaba para ir en compañía con Sakura quien caminaba tranquilamente.

Las tres chicas entraron rápidamente a la habitación donde les dirigía el joven, buscando desesperadamente al famoso.
–¡¡¡Naruto-kun!!!–exclamó la peliazul acercándose para abrazarlo apasionadamente.
–¿Quién te dejó entrar?–preguntó sorprendido. –Esta área está prohibida para los fans.
–Naruto–sonrió nerviosa y con vergüenza. –Soy yo, Hinata ¿no me recuerdas?
–¿Hinata?–cuestionó confundido mientras se la quitaba de encima. –Hum, yo creo que no.
–¡Ahi Naruto!–reía falsamente nerviosa. –No has cambiado en nada.
–Vienen conmigo, dobe–le sonrió acercándose.
–¡Ah! ¡Ya decía yo que aquí olía a Teme!–respondió divertido. –¡¿Qué hay?!–le saludo con una palmada en la mano.
–No, mucho–le devolvió el golpe. –Me gustaría que conocieras a unas fans tuyas–se apartó de la vista para mostrar la presencia de estas. –Bueno a decir verdad, ni yo sé sus nombres, así esta sería una autopresentación.
Sakura bufó y luego rió. –La pelirroja es Karin, la de vestido rojo es Temari, y la de...
–Ella es Hinata–interrumpió a la pelirosa con una sonrisa zorruna.
–¡Lo recordaste, Narutin!–festejó acercándose a él.
–No, bueno...–tomó su distancia. –Hace poco acabas de decírmelo–respondió apenado mientras los demás se rían dejando a la chica totalmente apenada y roja.
–Y ella Sakura, mi acompañante–presentó Sasuke a la de vestido negro.
–Es un gusto conocerte–saludo el rubio mientras ella fulminaba con la mirada al pelinegro. –Aunque debo decir que no tanto sabiendo que sales con el feo del teme.
–Ouh no–respondió la chica con rapidez. –Si apenas nos conocemos.
–Ahi teme–lo miraba triunfante. –Apenas la conoces y ya te quieres adueñar de ella–provocó la risa de la mencionada mientras que su amigo sólo se encogía de hombros apenado.
–Sin duda, es un gran placer conocerte, sakura–habló interesando el ojos azules.

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También quería agradecer los consejos que han dado algunos que sin duda los seguire.
¡Saludos!

por mio-chan Miér Jul 23, 2014 10:41 am

Ohhh que buen capitulo *---*

Aunque te juro que casi mato a Naruto al ver como trato a Sakura Grr, mooo porque cambio tanto, se nota que cuando conoció a Sakura no era así.

Aunque debo de admitir que también me cayo un poquito mal Sakura al tratar a todos tan mal, nunca creí que algún día diría esto pero, me dio lastima Lee :s

Espero que pronto subas el siguiente capitulo:3

por Neyli Miér Jul 23, 2014 8:44 pm

Ya sabía yo que la la alegría no iba a durar mucho (malditos presentimientos...)

La verdad es que Naruto se comporta como un verdadero bloque de hielo con Sakura, que por lo visto no era como lo es ahora, parece ser que los dos han cambiado bastante respecto a como eran antes... solo espero que Naruto abra los ojos y vea como se está comportando, porque esto no me da buena espina, y más después de flash back... espero equivocarme.

¡Espero conti! Un abracho Oni Onion bye

por **Oni** Jue Jul 31, 2014 8:49 am

Hola, perdón por la demora y bueno he aquí la continuación.

Recuerden que aun sigo en FLASHBACK.

CAPÍTULO 5

-Sí, sí, sí, como sea-habló rápidamente el sonrojado amigo de Naruto,mirándolo con recelo. -¿Qué no tienes un concierto que dar?

-Es verdad-sonrío como si se tratara de un reto. -Chicas-asentó con un ademán con la cabeza pasando a un lado de ella hasta que se detuvo a un momento estando en frente de la pelirosa. -Espero hacerlas vibrar… con mi música-le guiño el ojo y se alejo.

-Ese dobe y su sentido de… humor-soltó un risa.

-Yo diría otro sentido-dio una risita la pelirroja.

-Pues vayamos a disfrutar de la estancia ¿no?-sugirió la rubia adelantándose hacia la vista de un balcón que era perfecta para contemplar el dichoso momento.

Desde ahí se podía ver la repleta pista que esperaba con ansias la presencia de el famoso DJ prometido en aquella discoteca en gritos eufóricos y saltos llenos de adrenalina, la mayoría de chicas que exclamaban fuertemente el apodo de dicho joven. No tardó mucho en escuchar al presentador animando de nuevo al público con sus típicas preguntas de ánimo y sobre todo pidiendo más gritos hasta que le dieran la indicación de que podía para con tremenda estupidez y dejará espacio para el verdadero espectáculo mientra la música paraba y la oscuridad acechaba el lugar provocando aún más gritos y chiflidos de la gente.

-¡...traído desde la vegas y soltero chicas! ¡Con ustedes, el magnífico y único DJ más joven y guapo!¡EL DJ KIUBY!-accedió señalando al rubio posicionarse en su equipo básico -cabe decir que esto es pura modestia- y la mica se volvía retomar al igual que las luces especialmente sobre él haciendo emoción en toda el lugar.

Empezando por una muy buena y conocida mezcla suya que sin pensar hizo bailar a todo el mundo a dentro.

Nuestras queridas chicas en el balcón tampoco eran la excepción; Karin bailaba a gritos eufóricos como una loca que a pereciera que recibió justo ahí el milagro de caminar, Temari que a su modo bailaba emocionada y a risas, Hinata pues, ella bailaba muy provocativamente llamando mucho la atención en aquel sitio y Sakura se movía disfrutando el ambiente feliz viendo como todo el mundo se divertía.

-¿Qué te parece la vista desde aquí?-preguntó el pelinegro relajándose un poco de bailar.

-Esta perfecta-le sonrió un poco sin dirigirle la mirada. -Él es muy bueno.

-Sí-desvió la mirada hacia su amigo ocupado animando a la gente desde abajo. -Por algo lo contrate.

-Pues me parece genial-aún no le quitaba la mirada de encima mientras se recargaba en el barandal.

-¿Enamorada?-dijo con una sonrisa un tanto falsa.

Rió. -No.

-Sakura nunca se enamora-la abrazó su compañera de vestido blanco. -Ella es toda un dama de hierro.

-Pues es la dama de hierro más hermosa que he visto-le sonrió acercándose más ella.

-Eres muy cursi ¿te lo han dicho?-bufo para él haciendo que su amiga se riera.

-Se me olvido decir que es la toda una dama de hierro... grosera-besó la mejilla de su amiga.

-Gracias por tu reconfortante apoyo, Karin-le miró molesta mientras ellos se reían.

La fiesta seguía en aquel lugar que sin ningún descanso siguió el chico hasta altas horas de la madrugada, despidiéndose de la mejor manera que el podía ser con el más grande éxito mientras la mayoría pedía más sin importar el cansancio hasta que se convencieron de salir de aquel lugar todos satisfechos y sin olvidar quizá una de sus mejores noches.

Las chicas que bajaban a la estancia normal a risas y también con fatiga después de aquello.

-¡Fue de lo mejor!-alzó su puño hacia el aire recargada en su amiga pelirosa.

-Sí, ya lo dijiste, Karin-lo llevaba casi arrastrado sin poder borrar la sonrisa que le causaba la cara de su amiga.

-¡La mejor noche de mi vida!-recalcó. -¿O no, chicas?

-Definitivamente-aseguró Temari. -¿Y a ti qué te pareció, Hinata?

-He tenido mejores noches pero, no esta mal-hablaba indiferente mostrando un poco de alegría al poder ver al rubio. -Aunque creo que ya me alegraron el día.

-¿Qué hay chicas?-saludó llegando hacia ellos.

-¿Qué te gusto o qué?-gruño Sasuke al ver el plural que había tomado su amigo.

-Lo siento teme pero eres la mujer mas fea que he visto-habló rascándose la nuca con cara de hasta mientras las demás se reían.

-¡Sakura-san!-exclamó un chico con cabello en forma de hongo.

La chica llamada bufó. -Ahora vengo-se quitó el brazo de su hombro que tenía puesto de su amiga y se dirigió al chico.

-¡Me saludas a tu novio!-gritó la pelirroja hacia ella, ganándose una mirada asesina de ella.

-¿Es su novio?-preguntó curioso el rubio.

-No, sólo quiso molestarla-explicó la rubia sonriendo por la maldad de -Ella es una chica muy cotizada-soltó una risita al ver de lejos a Sakura.

-Y difícil-sonrió el pelinegro viendo también y al chico rechazando.

-Y grosera-mencionó también la peliazul queriendo quitar el interés que le hacían a ella.

-Hum, cotizada, difícil y grosera-enumeró. -interesante-sonrió de manera zorruna.

-No tiene caso seguir hablando de ella-abrazó el brazo de chico bronceado. -Qué te parece mejor si salimos de aquí-propuso mejor la de vestido morada coquetamente. -Y tú y yo…-interrumpió otra voz más gritona y llamativa que se oía fuertemente estando algo alejados de ellos.

-Vaya parece que ese chico rompió el récord de sacar de quicio a Sakura-afirmó la rubia de brazos cruzados mirando la escena que hacia la pelirosa.-Perdiste la apuesta, Karin.

-¡Ya sé, ya sé!-bufó la chica sacando una billetes que recibió con mucho gusto Temari.

-¿Una apuesta?-sonrió divertido Sasuke. -¿Qué apuesta?

-Temari y yo siempre apostamos que en las noches que salimos sobre chicos que seguro le sacarán de sus casillas-explicó acercándose al chico pálido.

-Karin apostó por ti-chismió la de vestido rojo enrojeciendo la cara de esta encogiéndose de hombros por vergüenza.

-Me temo que la tienes difícil, Sasuke-habló entre risas el rubio posando su mano en su hombro viendo como se unía de nuevo a ellos la chica.

-Ahora que le dijiste a este-preguntó con burla la pelirroja.

-Sólo le dije la verdad -hizo un mueca parecida a un puchero.

-¿Y bien?-también cuestionó la rubia. -¡Queremos saber! ¡Habla ya!

-Le dije que no podía salir con él-desvió su mirad, cruzada de brazos. -¿Y por qué no?

-Porque… no me gustan las cejas gruesas-se expresó con cara de asco causando de nuevo risa entre todos.

-¡Ahí Sakurita, esta vez si te pasaste!-decía su amiga a risas.

-!Soy sincera! ¡No puedo salir con alguien que ni siquiera me gusta!-bufó molesta.

-Eso es cierto-habló el rubio dejando de reírse para sólo sonreírle.

-Y bien, ya dejando esto-se limpió una lágrima que salio a causa de las carcajadas.-Será mejor que ya nos vayamos.

-¡Es verdad, aun no he terminado el proyecto de final!-exclamó desesperada Karin.

-¿Quieren que las lleve, chicas?-se ofreció caballerosamente el pelinegro.

-Claro-dijeron en conjunto Temari y Karin.

-Adelanto, por aquí esta mi camioneta-señaló la salida. -¿Tú vienes Sakura?

-Amm no, gracias-dijo distraída. -Yo aún tengo que ver a alguien, nos vemos chicas.

Se encogió de hombros. -¿No quieres que te esperamos?

-No-hablo cortante algo fastidiada.

-¿Y tú no vienes Hinta?-preguntó Temari.

-No yo me quedaré con Naruto-dijo abrazando su brazo aún más, posesivamente.

-Oh perdona ammm ¿Hinata? pero yo también necesito ver algo-respondió liberándose de su agarre.

-Bueno pero ¿no te puedo acompañar?-insistió.

-No lo creo-habló Sasuke. -Él es muy profesional con su trabajo-la chica bufó y sólo le dedicó un lento y apasionado beso en la mejilla abarcando un poco la comisura de sus labios. -Nos vemos pronto, Naruto-kun-le susurró sensualmente en su oído, dirigiendo con los demás, mientras los dos observaban como se iban.

Sakura suspiró, negando con la cabeza y se alejó de él.-¿A dónde vas?-le preguntó alcanzándola.

-¿Qué no tenías algo que hacer?-le preguntó parando su paso.

-Realmente no, sólo quería deshacerme de ella-le guiñó de nuevo el ojo.

-Que grosero eres-le dedicó una sonrisa.

-Descuida que no estoy ni a tus talones para quitarte el puesto de ruda que tienes-sonrió muy zorrunamente causándole una verdadera risa a ella.

-¿Y bien?-paró de reír. -Ya eres libre, ya te puedes ir.

-¿Sabes que Sasuke se ofreció sólo para saber donde vives?

-Sí, justo por eso yo me quede-se cruzó de brazos.

-¿Quieres que te lleve?

-Aguarda, ¿por qué habría de aceptar tu ofrecimiento si no lo hice con Sasuke?

-Porque yo te he hecho reír de verdad, me atraes y soy mas guapo que él ¿necesitas otra razón?

-¿Crees que es así de fácil?-sus manos se dirigieron ahora hacia su cintura.

-Tómalo como quieras, sólo que te recomiendo que lo pienses bien y aceptes mi ofrecimiento, porque sino…

-¿Por qué sino qué?-interrumpió retadoramente.

-Porque sino tendré que llevarte a la fuerza.

-¿llevarme a la fuerza? ¿tú a mí?-se burló.

-Realmente no quieres que ponga en práctica mi oscuro pasado de violador profesional-sonrió coquetamente. -Y a decir verdad ni yo, así que o lo hacemos a lo lento o…

-Esta bien-dijo secamente.

-¿Esta bien?

-Sí.

-¿Dónde quedó la chica difícil que me prometieron?

-Tampoco te emociones-lo miró con indiferencia mientras salía del lugar. -Esta vez accederé por pura conveniencia, tienes suerte.

-Vaya que sí-sonrió.

-¿Te piensas quedar ahí o es que tengo que enseñarte a caminar?

-Siempre eres así de arrogante-dirigió su pasos hacia ella.

-Sí.

-¿Y de cortante?

-Si.

-¡¿Qué no sabes otra palabra?!-fingió enfado.

-Sí; vé, apurate-dijo escondiendo una sonrisa divertida mientras escuchaba a su acompañante reírse.

-¿Sabes? Pensándolo bien, me hubiera gustado llevarte con la segunda opción-dijo detrás de ella escuchando la risa que soltaba. Definitivamente había tenido suerte aquel día.

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¡Gracias por leer!

¡Saludos!
PSD: Ya sé, ya ni tiene caso de discúlparse por lo cortos que son.

por Uno Jue Jul 31, 2014 1:58 pm

Woow... ¿Que pasó? T.T. ..

Primero que nada, perdon por no comentar el capitulo anterior, ahora... :3 aqui me vez leyendo este fic-Dolor-De-Cabeza-Y-Tristeza.

¿Que pasó?... ¡¡Detesto la actitud de Naruto!!--Ojo,no a Naruto <3 Nunca jamas podría odias ni detestar a esa ternurita de personaje, aunque sea cruel--. ¿Por que es asi? ¿Que lo hizo tan frio? Tan indiferente.... ¡¡Detesto su actitud y ya quiero verlo pagar porr ello!! Vale.. Usualmente no deseo ver sufrir a Naruto, pero ahora sí que se lo está ganando... ¿Como puede gritarle asi a Sakura? ¿A su esposa? ¿Al amor de su vida...?, ok!!! Ella hizo algo que le molestaba... No debia tal vez, ¿Pero gritarla y.decirle estupida y dejarla llorando?.... Horrible!!! Y Sakura... Tan enamorada que sigue ahi sufriendo y sintiendose mal... Es triste... Quisiera que, aunque amo el NaruSaku, ella lo dejara... ¿Desde cuando es amor eso? T.T hasta siento feo... Tal vez si lo deja y se vuelve esa chica de hierrro nuevamente, él sepa valorarla.

Vale vale... Dejo es asi porque si no, chillaré del coraje... Alto!!! -.- ¿Me dices cruel a mi mientras escribes esta historia? ¡¡Dios!! Es lo mas triste que he leido en fan fic T.T.... Eres cruel, mas que yo en los fan fic... T.T jamas lo superare!!!!!

Bueno... ¡¡Adore a Naruto DJ!! *-*/ ahdhahd ese.... Ese es mi Naruto <3 ese que gusta de Sakura, alegre y para nada, cruel ¡¡Ese es el que todos quieren!! El otro es un ogro en el cuerpo de el T.T.... ¿Que pasó? ¿Por que se perdio esa magia?....

Al principio pensé que Naruto era un empresario, ya sabes, trajes y empresas... ¿Pero DJ? Woooow!!! Lo adoré!! *-* esa manera popular y coqueta que mira a una sola Chica y una hinata Per... Abusada y viva, y amigas--Ahi donde esta Ino???--. *-* ahdhahshs vale.. Vale me gusta ¡¡Quisiera que subieras toda la historia para leerla ya!! Necesito saber que pasará!!! Por que todo cambio??? Y el bebe de Sakura?? Porque seguro esta embarazada!!!! Es obvio!! *-* y como dije, quiero leer cuando Naruto se arrepienta y reflexione tal crueldad ¡¡Sakura solo lo ha Amado!! T.T....

Vale... Vale me voy Oni *-* besos cuidate, espero conti, en serio ¡¡Chaoo!! ¡¡Y la manga del chaleco!!

PD: Ruego ante ti, oh poderosa creadora... Que nada de infidelidades... ¡¡Las odio!! T.T

PD2: *-* si me complaces hare lo que quieras!!! ahdhahshs

PD3: Me gustan las posdatas :3 chao!!

por mio-chan Jue Jul 31, 2014 5:06 pm

Que bonita relacion tenian Sakura y Naruto
Mooo porque tuvo que cambiar grrr
ahora quizas Naruto ya ni le quiera hablar a
Sakura por que quizas queda embarazada T///T
Definitivamente tuvo que pasar algo para
que Naruto cambiara tan drasticamente

Espero que pronto subas el siguiente capitulo:3

por Neyli Jue Jul 31, 2014 7:29 pm

Esto me deja con muchas dudas... ¿qué fue lo que pasó con estos dos para que cambiaran de una manera tan estrepitosa?... En fin, parece que no es lo mismo cuando dejas tú el suspense que cuando lo dejan los demás...

Espero que lo continúes pronto, me dejaste con un mal sabor de boca, necesito saber más.

Un abrazo Oni Onion bye

por Kira Uzumaki Sáb Ago 02, 2014 3:51 pm

Siéndote sincera me encanta tu fan fic aunque en este momento estoy odiando a naruto, me desagrada como trata a sakura Onion estrés

ME DAN GANAS DE GOLPEARLO!!!!! Onion hit

y porque sakura no lo deja por ser así?, porque no se divorcian?. Pero aunque sakura se sienta herida por naruto aun siente amor por el Mesapalm

Pero no estoy tan segura que naruto sienta lo mismo Sudor

yo pienso que solo es deseo lo que siente por sakura no amor.
Pero en fin, espero contii!!! Onion**

por **Oni** Dom Ago 10, 2014 1:21 pm

¡Hola aldeanos NaruSaku! Antes que nada gracias por leer y sobre todo comentar.
Debo aclarar que como seguidora de historias -NaruSaku en especial- que yo no soy mala, ni mucho menos cruel, más bien realista.
Y bien, los dejo leer y recuerden que aún sigue en FLASHBACK.

CAPÍTULO 6

–¡¿Enserio?! ¡¿Nunca?!–manejaba aquel rubio que la acompañaba.
–No, Naruto–suspiró algo avergonzada. –Eso fue lo que dije.
–¿y...? ¿Te gustaría hacerlo ahora?
–¿Qué? No, además prometiste llevarme a mi casa.
–Oh vamos–esbozaba una sonrisa sin despejar la vista al frente. –Será divertido.
–El hecho de que nunca lo halla hecho no quiere decir que tenga que hacerlo contigo–miró hacía el lado de la ventana algo sonroja.
–Anda, ¡será divertido! Además...–la miró de reojo. –... sólo conmigo tienes derecho a comer en Ichiraku Ramen.
–¿Sólo contigo?–se rió burlescamente. –¿Qué te hace pensar así?
–Pues no sé si lo has notado pero estamos en plena madrugada y no creo que te atienda a ti en estas horas–explicó divertido.
–¿En cambio que si voy contigo sí? –levantó un ceja dirigiendo su mirada hacía a él.
–¡Por supuesto! No por nada soy su cliente favorito–sonrió orgullo, frenando el coche.
–¿Dónde estamos?–preguntó la chica observando a su alrededor mientras un rubio travieso se acercaba a ella, hasta que esta misma se percató. –¿Qué rayos haces?
–Creo que ya te había advertido; soy una violador–se alejó sonriendo zorrunamente.
–Esa ni tú te la crees–lo miró seriamente. –A menos que quieras demostrarlo y yo te muestre a qué saben tus entrañas.
–Prefiero el sabor a ramen–dijo bajando rápidamente de coche para abrirle la puerta a ella. –Baja.
–No voy a bajar hasta que me digas dónde estamos–se cruzó de brazos y miró hacía el otro lado.
–Vamos a que pruebes el ramen que te prometí–abrió más la puerta y le ofreció la mano. –¿Necesitas ayuda?
–¡Te había dicho que no!–exclamó molesta. –Vaya que das miedo en plena oscuridad enojada–se rió hasta que sintió la mirada fulminante de la pelirosa. –Lamento no haberte escuchado, ya baja que no tienes opción.
–¿Prometes que después me llevaras a mi casa?–suavizó su semblante.
–Es un trato–le sonrió sin apartar su mano quien con un manotazo rechazó la chica apartándolo y bajando por sí sola.
–Chica ruda ¿eh?–la siguió hacia la entrada del establecimiento cerrado. –Ven, es por atrás–él, tomó su mano girándola hacia ese lugar, donde estando en frente de la puerta, golpeó tres veces y después entró.
–¿Seguro que...?
–Shh–chitó a la chica molestándola.
–¡No me chi...!–susurró enojada cuando de nuevo fue interrumpida.
–Shhh.
–¡Deja de hacer...!
–Shhhhhh... haces mucho ruido–Sakura agradeció de la oscuridad que ocultaba su rojo rostro.
–¡Eres un...!–unos dedos en su boca la callaron bruscamente.
–No me hagas que te caye de otra manera–los pensamientos de él no eran nada buenos o eso creyó la chica quien estaba aún roja pero no de coraje.
–¿Viejo Teuchi?–se asomó a la cocina.
–¡Naruto! Te estaba esperando–saludó amistosamente el hombre. –¿Qué tal la noche?
–Bien, por cierto traje compañia.
–Buenas noches, señorita–hizo una pequeña reverencia hacia ella. –¿No me habías contado que ya tenías novia? ¿eh? Pillón (N.A: ya saben, frases de los mayores)
–Sí, bueno algo así –se masajeaba el cuello mientras sonreía.
–¡¿Qué?! ¡¡¡No!!!–se ruborizaba totalmente, negando con la cabeza nerviosa. –¡¡¡Él y yo no somos nada!!!
–Hum–sonreía viéndolos. –Ya decía yo que era demasiado bonita para ti, Naruto.
El chico rió. –Bueno, no somos exactamente novios pero no por mucho...–y golpe directo fue a su cabeza. –Auch–se quejó sobándose la parte adolorida. –Eso dolió, Sakura-chan.
El dueño del puesto rió. –Yo mejor los dejo solos mientras voy por sus platillos.
–¡Asegúrese de ponerme doble ración de carne!–gritó a espaldas de este.
–¡¿Por qué rayos dijiste eso?!–le reclamó enojada mientras se aseguraba que el señor ya se había retirado.
–Verás, una de las cosas que más me gustan del ramen es la carne además de...
–¡No me refiero a eso!–exclamó molesta amenazado con su puño en alto.
–Bueno porque tú me gusta Sakura-chan, me gustas mucho–sonrió mientras dirigía sus manos a su cabeza. –Y juro por mi vida que te enamorare, de veras–le sonrió zorrunamente con el pulgar arriba dejando perpleja a la chica. –Bueno ya Sakura-chan, ¿podrías bajar el brazo? Me asusta mucho tu fuerza descomunal.

FIN DEL FLASHBACK.

–Y si que lo logró–susurró débilmente la pelirosa ya despierta en la misma posición.
–¿Qué dices, Sakura?–cuestionó percatándose que ya había despertado.
–¿Cuánto dormí?–se levantó tallandose los ojos.
–Como 3 horas–le acomodó el cabello. –Sabes, me gustaría seguir contigo pero...
–Esta bien, Ino–la miró a los ojos asintiendo con la cabeza.
–¿Vas a estar bien?–le mostró una sonrisa chueca de preocupación.
–Sí, descuida–se paró acompañándola afuera. –Saludame a tu hijo ¿sí?–vió que aún la miraba preocupada. –Prometo estar bien ¿de acuerdo? No te preocupes.
–Te quiero como una hermana ¿lo sabes?–la abrazo con mucha ternura.
–Yo también te quiero y gracias.
–No hay de que, si necesitas algo me llamas y si no...
–Igual te llamo, ya vete que se te va a hacer tarde–le daba empujoncitos hacia la salida.
–Si no fuera porque me dijiste que me amas diría que me estas corriendo–ambas rieron.
–Sí, claro, hasta luego–se despidió con la mano mientras veía a su amiga subir a su auto, mandándole un beso antes de desaparecer de su vista al adentrarse a este.

Suspiro, mientras cerraba la reja rápidamente y luego se recargo en está, pensando por un momento en todos y a la vez en nada hasta que un rafaga de pensamiento se adentro en ella; abriendo totalmente los ojos con un temblor que recorría su cuerpo poco a poco por aquel pensamiento, ágilmente dejó su reposo gracias a la adrenalina y corrió hacia adentro de aquella mansión.

***

La mayoría de veces lo había hecho cosas que a pesar que le molestaran no era algo del cuál la pudiera odiar pero esto había pasado los límites del todo o al menos así lo creía él, el chico que iba totalmente enfurecido caminando con paso pesado y la mandíbula apretada enfocando su mirada hacia al frente, a pesar de la actitud que se cargaba este mismo, nunca la mostraba en público pero esta vez no podía hacer mucho, sentía que cualquier cosa o persona podía ser el detonante de su explosiva ira y era precisamente lo que quería evitar así que en un paso veloz se dirigió a su despacho encerrandose lo más sigilosamente posible que además para no ser notado, pretendía no desquitar su coraje con la dichosa puerta que lo separaría de los demás. Se paro enfrente de su escritorio lleno de papeles y otros artículos de oficina tratando de inhalar y exhalar para que entrara un poco de calma y así la razón que; poco iba llegando y siendo así se dirigió a sentarse a su cómoda silla de trabajo, reposando su cuerpo en esta y dándose un ligero masaje en el tabique de la nariz, cerró un momento los ojos y los abrió, pero como si la vida quisiera reírse de él en ese mismo momento, sus ojos se encontraron con la pequeña chispa de fuego que lo hizo prender; en un pequeño marco que portaba la única foto de esa habitación que mostraba a él y a su querida esposa abrazados en un día de viaje que aseguraban ser un un buen rato impregnado en tiempos de la foto ya que aunque los dos sonreían, Naruto era el que más destacaba en mostrar su radiante sonrisa zorruna.
Llegando la ira a su cuerpo de un momento a otro se levantó y con un fuerte maniobra, mando todo al suelo haciendo que los papeles salieron volando, que los lápices y la demás papelería se estrellara con el piso y que el vidrio que protegía la foto se hiciera trizas. Respiraba agitadamente y al ver el desastre que había provocado en un acto de desesperación camino por toda aquella habitación tomando con sus manos su rubio cabello revolviéndolo más hasta que se detuvo por el crujido que provocó al pisar, su mirada se enfocó en que sus pies que también además de pisar el marco roto, pisaba la foto, hizo que se retirará un poco y la recogiera para verla aún más de cerca, mirándola con molestia al principio que pronto se convirtió en nostalgia hasta que se dió cuenta de que hace mucho no sonreía como solía hacerlo en aquella foto y nisiquiera habia una risa parecida en Sakura como a la de antes ¿Qué había cambiado? Sacudió la cabeza varias veces al encontrarse en aquel paradigma o más bien a darse cuenta de aquello, se sentó por un momento en su escrito al meditarlo sin escuchar unas cuantos golpes que hace rato yacían en su puerta.

–¿Naruto?–dijo una voz varonil, asomándose por la puerta viéndole con él, todo el desastre que había a su alrededor. –Creí que había entrado un perro pero veo que se trataba de un ciclón.
–Perdón, ¿Qué pasa, Shikamaru?–preguntó dirigiendo la poca atención que tenía hacia el chico de la misma edad que se encontraba en la puerta, éste se adentro, cerrando la puerta a sus espaldas. –Más bien, ¿Qué te sucede a ti?–se sentó en aquel escritorio a un lado del rubio.
–No es nada–desaparto la vista mientras la bajaba al piso.
El joven de coleta posó una mano en su hombro. –El hecho que sea tu superior profesionalmente no quiere decir que no puedas mandarme a la mierda si no quieres hablar–ambos sonrieron a su comentario. –O hablarlo conmigo si te sirve de desquite.
El rubio le vió con sorpresa, después meditó un poco para resignarse en un suspiro.
–Mi esposa y yo tenemos problemas–miró a aquella imagen de ellos que tenía en sus manos.
–¿Es ella?–señaló con la mano la cual miro con más atención. –¿Sakura?
–Sí–respondió y segundos despues lo miro con confusión. –¿Cómo...?
–¿Qué cómo sé su nombre?–interrumpió y después suspiró con fatiga. –Pues es famosa en todo el edificio por ser tu esposa, ya sabes, por rumores, por envidia o por... lujuria–el chico de ojos azules se quedó perplejo sobre lo último. –Es muy problemático pero es de lo he escuchado hablar.
–¿Y cómo saben de ella? Es decir, ella nunca viene aquí y...
–Bueno Naruto, sinceramente teniendo una esposa ex-modelo y escritora demasiado hermosa es difícil no enterarse.
–¿Has dicho escritora?–interrogó confundido.
–Sí, Sakura es una de las mejores... ¿por la pregunta?–interrogó. –Espera, ¿No me digas que no lo sabias?–el rubio solo se encogió de hombros. –Con razon tienes problemas, hermano– le dió una no tan liviana palmada en la espalda. –Ven, te invito un trago–le golpeó de nuevo la espalda y se dirigió a la puerta parando en seco al ver que el moreno sólo lo observaba. –Podrás no hablarme de tu vida pero no puedes negarle un trago, así que empieza a mover tu pesado trasero que no tienes opción.
–¿Por qué haces esto?
–Porque tus problemas son un jardín de flores para mi, pequeño saltamontes y además se por experiencia propia que es mejor un trago acompañado que solo–abrió la puerta con el ademán de esperar a que el saliera primero en lo que miraba hacia afuera. –Hinata, cancela cualquier compromiso que tenga hoy el Sr. Uzumaki.
–E-el señor Uzumaki tiene una importante junta sobre...–respondió la peliazul parándose de su asiento para mostrarle la agenda a éste quien rechazó con la mano. –
–Diles que se fue a desestresarse de su hermosas caras que enferman a cualquiera que los ve–dijo tranquilo mientras el rubio la veía saliendo de la oficina, hasta él sabía que Hinata a pesar de una no muy eficiente secretaria no sería tan tonta como para entregar ese recado.
–Como usted diga–tomó su lugar en lo que se disponía a reacomodar la agenda de su jefe.

Los dos salieron del lugar, justo hasta llegar al estacionamiento abarcó de automóviles de lujo; dignos de empresarios de buen bolsillo. La empresa que estaba demás decir relacionada la economía del país para darse cuenta de su gran importancia donde trabaja Naruto en un puesto de gran categoría en dicho lugar.

–Ven, sube–le miró en la ventanilla de su carro último modelo color negro.
–Yo traje el mío.
–No te estoy preguntando solo sube–se escuchó el pequeño 'clic' que hace al momento de quitar el seguro.
–¿Así eres siempre de terco?–obedeció a la petición sin ninguna emoción.
–Tsk–sonrió mirando al frente. –Que problemático.

***

–¿Señora?–preguntó al ver con la rapidez que se preparaba para salir. –¿Acaso saldrá?
–Así es–respondió sin molestarse a mirarla. –Saldre un momento.
–¿No cree que...?
–Estaré bien–esta vez sí la miró por un momento y se dio más prisa. –Pásame mi bolso.
–¿Qué le informo...–hizo silencio incómodo mientras le se lo daba en la manos. –...si el señor vuelve y no esta?–de repente la mirada de la pelirosa se dirigió abajo sin mostrar su rostro.
–Estoy segura que no llegará, al menos no a estas horas–respondió secamente en lo que a pasos grandes se dirigía al ropero y tomaba un saco negro, caminando con un paso veloz hacia la puerta mientras se acomodaba la ropa y sujetaba su bolsillo impregnado con ligeros toques dorados en su negra tela, su fiel sirvienta la acompañó afuera ofreciéndole un sombrilla mientras la chica ojos de jade tomo y su acoplamiento con una reverencia se adentró a la dicha vivienda. En medio de una llovizna no tan tosca como otros días pero si concurrente en aquel día, pisaba con cuidado el piso mojado con sus prudentes botas mientras se encontraba a punto de subir a una de las camionetas.

–Buen día, Sra. Uzumaki–llamó una voz casi detrás de ella que la asustó un poco, y volteó hacia esta. –Disculpe que la moleste pero me preguntaba por su esposo.
–Descuide–respondió mirándolo, era un hombre con alto con un traje oscuro formal impecable a pesar del clima, a pesar de tener ese cabello negro algo largo estaba peinado de una extraña manera que así que se viera joven y serio a la vez al igual que su oscuro mirada que no podía observar tam detenidamente teniendo también él una paraguas que lo protegía de la lluvia. –Él no se encuentra en casa.
–Ya veo–habló como si ya lo tuviera previsto. –¿Acaso se vera con él?–ella simplemente negó con la cabeza.
–Mil perdones por mi comportamiento–se inclinó un poco en señal de perdón. –Mi nombre es Itachi, 'amigo' de su esposo–estiró su mano hacia a ella.
–Sakura–lo imitó sin esperar a que pasara de un apretón de manos.
–Es un nombre hermoso; Sakura–la sorprendió dirigiendo su mano a sus labios con un pequeño beso sin dejar de mirarla. –Si me permite decirle.
–Em gracias–retiró lentamente de su cercanía.
–Veo que va de salida, Sra. Sakura–la lluvia no era inconveniente para la vista de él.
–Sí–se limitó a decir y formar un pequeño silencio entre los dos hasta que se decidió a hablar, después de todo quería distraerse lo más que pudiera. –Por favor,solo llamame Sakura.
–De acuerdo, Sakura–sonrió levemente. –Creo que estoy retrasando–cortó su mirada y miró hacia abajo pero con la misma sonrisa.
–Sólo un poco–dijo y al ver la reacción de éste,soltó un risita.
–Graciosa–sonrió aún más. –¿Y se dónde diriges en un día así?–su comentario hizo que reaccionará y esperó a que no se notara.
–Amm, voy a comprar algo–hablo intentando no cambiar su tono de voz.
–Se nota que es importante–ella bajó la vista sintiendo la de él. –¿Puedo llevarte?
–¡Ouh no, gracias!–respondió al instante mirándolo para después arrepentirse. –Yo creo poder ir sola.
–Que una dama como usted salga a estas horas con un clima así en una ciudad como esta y sin acompañamientos es una de las cosas que no puedo permitir, piénselo bien–una vez más, bajó la vista y se dispuso a meditar su proposición; después de todo él era agradable y parecía buena persona y en lo personal; no le vendría mal un poco de compañía.
–De acuerdo–suspiró. –Pero sólo si vamos en...
–Disculpe usted–bajo la mirada con la mano metida en un bolsillo. –Pero sería de mala educación subir con una señora en el auto de su esposo–le sorprendió el que no haya notado ese detalle a la vez, alegró internamente qué pensará así, ella tampoco quería problemas... más problemas.
–Tiene razón–sonrió. –Disculpe si lo incomode.
–De ninguna manera–también mostró una sonrisa. –Para mi suerte, mi coche está estacionado afuera ¿la molesto si me acompaña hacia éste? –estiró una vez más su mano esperando la de ella quien le correspondió con más rapidez.
–Me parece bien, vamos.

***

Era su segunda copa de vino mientras se encontraba en el departamento de su compañero de trabajo que aunque pequeño tenía sus lujos como aquella barra de bebidas tan surtida y fina como el jacuzzi. Se encontraba sentados en el living de dicho lugar mientras Shikamaru le servía su probablemente suero de la verdad hecho vino que muy pronto haría efecto pero qué más daba si igual lo necesitaba.

–Lindo lugar–habló primero el tomando la copa medio llena hacia su boca.
–No me quejo, es muy cómoda–se encogió los hombros con tranquilidad mientras él se servía también. –Mi modesta cueva te da la bienvenida cuando quieras–jugaba con el líquido alejando y acercando la botella a la copa salpicando la barra.
–Salud por eso–estiró su mano con un copa en el aire y volvió a beber de ésta. Poco a poco empezaba sentir que su cuerpo se relajaba y lengua su lengua se soltaba.
–Ahora dime–se sentó dejando una bandeja de quesos cortados en cubos de diferentes tipos en la mesa que quedaba enfrente de ellos -Shikamaru sentado enfrente también-. –¿Cuál es tu 'problema', hermano?–asentuó la frase, recargándose en en el sueve sillón color chocolate mientras despejaba los cojines en éste.
–¡Ah! Problemas,problemas–cantó mientras dejaba su copa en la mesa y ponía sus manos en su cabeza. –Creo que el problema es que ni siquiera sé cuál es.
–Eso es estúpido–se burló. –Tú más que nadie debe de saber cuál es.
–¿Y se puede saber por qué yo?–habló con suma confianza en un tono de burla también.
–Porque para tú mala suerte amigo mío–jugó con su copa y después lo miró a los ojos. –Tienes finta de ser el malo en tu propia historia.

-------------------------
Acabo de notar algo curioso de mis historias (aunque sean sólo dos por ahora)
• Siempre hago odiar alguno de la pareja.
• Y siempre los hago sufrir mucho con más momentos problemáticos -como diría Shikamaru-.
¡Saludos!

por mio-chan Lun Ago 11, 2014 2:43 pm

Awww Naruto realmente era un amor antes *---*,porque tuvo que cambiar??, hasta Shikamaru se dio cuenta de que el era el problema es su relacion con Sakura :s

Y ahora aparecio Itachi, jajaja no se porque pero siempre me ha encantado Itachi *--*,espero que este fic no sea la excepcionan

Espero que pronto subas el siguiente capitulo:3

por Neyli Mar Ago 12, 2014 8:03 am

Umm... esto no me da buena espina.
Si mal no recuerdo lo he dicho alguna que otra vez en tu historia, pero está vez es de verdad. Algo muy malo va a suceder para ambos, y me temo (o es lo que mi instinto me dice al menos) que lo que suceda los va a separar y a distanciar, y para terminar de confirmármelo tuvo que venir aquí Itachi...

Itachi, Itachi... me parce que vas a jugar un papel interesante en esta historia, espero que no sea lo que yo creo jajaja

Sin más que decir, como siempre un gran capítulo Oni. Un abrachote Onion bye

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