Los Artistas

por alvich Lun Oct 21, 2013 7:01 pm

Despues de un tiempo de inactividad vuelvo con un fic que diria que es un tanto mas maduro que mis anteriores fics y no digo maduro en un sentido pervertido sino que siento que madure un poco como escritor, espero les guste

Los artistas

Capitulo 1: Senderos paralelos

Relajado, acomodado en la barra, pausadamente mirando a la gente en el bar y con un vaso de exclusivo whiskey en la mano. Su otro brazo descansaba cerca del cenicero, observaba y daba pequeños sorbos dándole la espalda al bar tender. Blazer color plomo que encajaba justo con su forma, pantalones que se considerarían mas apretó que el pantalón estándar, cinturón negro combinado con su caro reloj del mismo tono, camisa blanca con 2 botones desabrochados revelando un poco de su pecho. Lo describirían como una persona elegante y con mucho estilo, joven y atractivo. Un dulce a la vista para el que aprecia la tendencia de la moda, con un estilo elegante sin relevancia en el tiempo que se encuentre. Su costosa armadura de selecta tela no era lo único en su arsenal, este era su hábitat y estaba a punto de ir a cazar. El era dueño del lugar, este era su ambiente pero también podía hacerlo de día, al atardecer y de noche, el tiempo era irrelevante para la caza. En la comunidad de artistas lo conocían como “León” por su pelo que a veces podía ser muy rebelde, hoy sin embargo estaba bien peinado con el pelo hacia atrás, probablemente con la ayuda de una fina crema de peinar, aun así algunos mechones rebeldes caían sobre un costado de su frente. Esta era su apariencia habitual y una de sus mejores armas.

Era una persona selectiva, alguna vez comió de las sobras pero esa época ya había pasado hace mucho. Para él era muy obvio quienes habían caído tan solo con su primera arma, el aspecto físico y forma de vestir. Algunas chicas en el elegante bar lo observaban y soltaban tímidas risas. Algunas más atrevidas pasaban lentamente dentro del rango de visión de nuestro cazador para tratar de llamar su atención.

Hoy no había nada interesante, juzgando por looks, aun así el relajado artista esperaba que alguien entre que llamara su atención.

Se abrió la puerta del bar, entro una chica con un abrigo que mostraba su resistencia ante el tiempo, se acerco a la guardarropía y revelo un caramelo visual para el hombre.

Lo que estaba dentro del abrigo era una hermosa dama con un ajustado vestido rojo con detalles blancos, tacos no muy altos del mismo color, su figura de reloj de arena llamo la atención de muchos hombres. Camino lentamente con un movimiento de péndulo en las caderas atrayendo más atención masculina y celos femeninos, tomo asiento con sus amigas pero antes se saludaron haciendo ciertos ridículos movimientos, las chicas también podían hacer esos saludos tontos.

El ahora interesado “león” la observaba con detenimiento. Había algo en ella ¿tal vez ya había pasado una velada con ella antes? O la conocía de algún lado. Había sucedido pocas veces esta intensa curiosidad de parte del galán de plomo.

La mesa que observaba estaba siendo usada por cuatro atractivas chicas, la que encajaba más en su gusto era sin duda la chica de rojo, la mayoría de los hombres del bar miraban la mencionada mesa, a cualquier hombre le gustaría estar sentado allí.

Los vasos llegaban a la mesa y algunos audaces trataban de hablar con ellas, el rubio noto que la mayoría de las chicas se deshacían de los indeseados invitados de manera rápida pero la chica de rojo siendo educada y un poco tímida los despachaba con una sonrisa y un poco de vergüenza. Destrozando cualquier fantasía que tuvieran con ella.

Sentada y ocasionalmente moviendo su pelo rosado la bella mujer hablaba tranquilamente con sus amigas.

Realmente era una chica interesante, observo que cuando un chico era demasiado insistente ella se ponía irrespetuosa y lo mandaba a volar con algún rotundo movimiento de negación o alguna hiriente oración que provocaba la retirada del individuo.

“que gracioso…” pensaba mientras miraba luego tragaba un poco del caro whiskey. El observar este interesante grupo de chicas formo una sonrisa en el rostro del joven “león” que se encontraba a un par de metros de la mesa.

Naturalmente las amigas informaron que había un atractivo hombre que estaba solo, ninguna con el valor de hablarle ni acercarse. La muchacha de pelo rosado lo busco con la mirada y lo encontró. El contacto visual con él le dio una incómoda sensación, volteo rápidamente la cabeza en otra dirección. Aun así en el transcurso de la noche ella continuaba buscando la mirada de nuestro artista aun si fuese incomodo para ella. Se arreglaba con más frecuencia el pelo, sus tacos ahora apuntaban en la dirección de nuestro héroe y su forma de hablar era más elevada.

Se hacia un poco tarde y no se podía ir con las manos vacías a su casa especialmente si había una chica tan lindas como las que estaba observando, se acerco a la mesa caminando de forma consistente, ahí donde estaban las cuatro chicas. Para él era algo normal acercarse a un “set” de esta naturaleza, no le intimidaba el hecho de afrontar a cuatro hermosas mujeres.

Llego lentamente pero la estela que debajo al caminar era notoria, tanto hombres como mujeres observaban como él se acercaba a la mencionada mesa.

“cómo pudiste estar con ese nerd, solo jugaba y jugaba” comentaba una de las chicas todas reían menos la pelirosa.

Se reían momentáneamente y luego cedían el turno para que hable otra.

“aun si era alguien así me hizo muy feliz, es una lástima que le he dejado” decía una rubia que estaba al lado de la sexy mujer del vestido rojo. Hablaba con sarcasmo.

“la verdad no entiendo que le ven a esos videojuegos, son para niños” comentaba la rubia.

La conversación había llegado a los oídos de nuestro jugador que ya estaba muy próximo a esa mesa.

“¿para niños?” exclamo de forma contundente, puso su vaso en la mesa, hubo un momento de silencio y todas se enfocaron en él.

“mira yo juego bastante y muy pocas veces me llaman niño” luego sonrió, jalo una silla y se acomodo en la mesa.

La chica que lanzo el comentario justificaba su comentario y trataba de recibir un “perdón”

“si, jugábamos de pequeñas con nuestros hermanos pero eso fue ayer, ahora ya estamos grandecitos no podemos seguir con esas cosas” decía una de las chicas.

“¡oh, vamos! Uno tiene que cuidar su niño interior, pero claro con ese escote que tienes uno se olvida del niño interior” dijo sonriendo y las chicas se rieron.

“tu pareces ser divertida, ¿también juegas no es cierto?” decía mientras apuntaba a la chica de rojo.

Las 3 chicas la miraron y soltaron una carcajada, la rubia rápidamente arrebato su cartera la otra desesperadamente trataba de recuperarla. Del bolso blanco saco un pequeño artefacto.

Era un Nintendo 3DS de la última versión de pokemon.

¡Bingo!, al parecer era material más que para un “one night stand”

Al observar la consola todas las chicas soltaron una gran carcajada, la bella muchacha se encogía y sus mejillas se ruborizaban.

El muchacho solo sonrió.

Las muchachas comentaban que ella no era tan rara como el ex de la rubia, entre cumplidos y críticas las chicas reían.

“¡¡no fue a la graduación porque era una antisocial!!” decía la rubia luego reía.

“¡cállate, yo no me acosté con un profesor!” la cosa se ponía un tanto incomoda.

Finalmente se calmo la riña, el muchacho estaba sentado relajado pasando un buen momento con las divertidas chicas.

“así es nuestra linda amiga nerdsita” decía la rubia.

“¿tú también juegas estas tonteras?” pregunto la rubia picando con su dedo índice el pecho del rubio.

“irónicamente tengo la otra versión en mi casa” la cara de la pelirosa se ilumino. La rubia hizo una mueca, le estaba facilitando el juego para la pelirosa.

Con un poco mas de ilusión la pelirosa se inclino hacia el muchacho tratando de cruzar la mesa con su torso, entonces pronuncio.

“¿hablas enserio?” no podía ser cierto, esto era raro muy raro, más raro que encontrar un shiny pokemon en el juego eso era uno a 8192, era realmente apuesto, intrigante y sobre todo él ¡jugaba pokemon!

“te hablo muy enserio, deje el juego durante unos años, pero volví y ahora son demasiados”

Las muchachas estaban perplejas, la gente normal no habla de pokemon en un bar.

Sonó el celular del apuesto chico.

“¿reunión de emergencia? ¡Son las 2 de la mañana! ¿Qué los inversionistas japoneses qué? Está bien voy en camino” el hecho de escuchar aquella conversación había cautivado mas a todas las chicas, mientras hablaba el rubio gesticulaba su rostro expresando desagrado.

“lamento esto pero debo retirarme, sucedió una emergencia” las chicas aprovecharon para decirle el divertido rato que pasaron con él siguiendo sus hormonas dieron cumplidos que indicaban ganas de estar con él en el futuro. Se despidió de cada uno de ellas y dejo al último a la chica de rojo.

Antes de irse se poso sobre los hombros de la chica de pelo rosa, se acerco a su oreja mientras agarraba sus hombros.

“te importa si te molesto un momento” le dijo sonriendo.

“claro que no” respondió y luego devolvió la sonrisa, lo que encontró en la sonrisa fue algo que no había sentido en mucho tiempo, que raro sentimiento pero que familiar se sentía.

“acompáñame a que tome un taxi, quien sabe tal vez hay alguna violadora cerca y me iría mejor si tengo una guardaespaldas” decía con tono juguetón, la chica rio discretamente, al decir todo esto el chico había pasado de tocar sus hombros a posar sus manos cerca de la cintura de la chica, conocía bien lo que tenía que hacer.

Las chicas miraban como los dos se retiraban, entre sus sentimientos se encontraba el orgullo por su amiga, que estaba siendo acechada por tremendo galán y por supuesto también celos porque ninguna de ellas estaba con tremendo galán.

Hacia frio afuera, y mientras se divertían en el bar la lluvia había reclamado las calles para sí. Recogieron sus abrigos del guardarropía, el caballero ayudo a la dama a ponerse su antiguo abrigo. El chico después se puso su abrigo trenca, o mejor conocido como un abrigo Montgomery, de mucha elegancia. Y el efecto de lujo se amplifico cuando el muchacho se puso sus guantes de cuero negro. La mujer observaba al hombre que hacia todo eso de forma muy natural.

Los dos salieron juntos, el frio los recibió con una fría briza.

“hace mucho frio” dijo la chica.

“puedes abrazarme, eso nos calentara a los dos” el chico levanto su brazo aclarando que se refirió a su brazo. La muchacha hizo caso y agarro su brazo, la tela del abrigo era muy suave, realmente era una prenda de mucha calidad.

Caminaron un poco, no pasaba ni un solo vehículo por las calles, caminaron un poco más, el frio se hacía más intenso y la presión que se ejercía en el brazo del artista también aumentaba.

“nunca abrace el brazo de un extraño” pronuncio la mujer mientras enterraba su cara en el abrigo del chico. Su abrigo no la protegía mucho del frio, tal vez porque su ajustado vestido no era tan abrigado y el frio simplemente se auto-invitaba dentro del abrigo.

El artista paro repentinamente, se saco su abrigo y lo puso en los hombros de la chica.

“nunca le di mi abrigo a una extraña” la chica simplemente sonrío, ya no necesitaba sostenerse del brazo, el abrigo era bastante abrigado.

Caminaron un poco más.

“tengo novio” dijo la chica con un poco de inseguridad, no quería verlo a los ojos tras decir eso, pero al final no pudo evitarlo, lo miro.

Lo que vio fue indiferencia, esperaba alguna reacción, pero no encontró nada. Después de un momento el chico paro.

“ya llegamos” dijo, luego la miro y sonrío cerrando un poco los ojos.

El tomo de las manos a la mujer manteniendo contacto visual, de alguna forma la chica se sintió un poco desilusionada, ella quería sentir sus manos, sus dedos, pero los guantes de cuero no le permitían.

“dile que tiene buen gusto, muy buen gusto” decía mientras la miraba fijamente.

“¿decirle a quien?” respondió intrigada.

“a tu chico” el cuerpo de la chica reacciono con un dulce sonrojo en sus mejillas.

“gracias…” ella no soporto mas y termino con la conexión que tenia con los ojos del chico, miro al suelo, pero aun se tenían de las manos.

No decía nada, la vergüenza empezó a invadir a la chica, se estaba poniendo incomodo, se empezaron a formar preguntas en la cabeza de la chica ¿y ahora que digo? ¿Qué hago? ¿Me voy corriendo?

Suavemente se soltaron de las manos del otro.

“¿qué te parece si seguimos con esta conversación en otro momento?” dijo el chico mientras buscaba algo en su bolsillo, de ahí saco unas llaves. Lentamente le dio la espalda a la chica y apretó un botón en las llaves, las luces de un Lexus deportivo se encendieron.

El muchacho se acerco al auto y la muchacha se quedo donde estaba, sin seguirlo, aun si quería ver el interior del llamativo auto.

Se alejaba lentamente, aproximándose al auto sin decir una palabra, ella no podía decir nada, es decir había seguido con el juego del chico aun si tenía novio, pero era tan incomodo que todo acabe así.

La estaba abandonando, y ese terrible sentimiento no lo quería cerca de ella, no lo quería en su cabeza ni en ninguna parte de su cuerpo. Y todo acompañado con un poco de culpa.

El rubio abrió la puerta del auto.

La chica estaba con la desesperación más rara que había sentido en su vida ¿ni siquiera lo conozco? ¿Por qué debería sentirme así? Luego recordó algo.

“mierda aun tengo su abrigo” pensó mientras agarraba el abrigo que estaba en ella.

“¡¡Hey espera!!” grito mientras corría en dirección al chico. El chico reacciono y la miro.

“¡¡tu abrigo!!” dijo al llegar frente a él.

“¡oh mierda! ¡Casi mi lo olvido!” expreso con sorpresa, en realidad él podía ser un chico muy descuidado”

“muchas gracias, hubiera muerto de hipotermia sin esto” después de decir eso la atractiva mujer se saco el abrigo y lo puso en los brazos del muchacho.

El chico se aproximo a la puerta del co-piloto de su auto, la abrió.

“entra, te llevare hasta el bar, sino morirás de frio y la verdad no hay ningún centro pokemon cerca que pueda ayudar con un congelamiento” dijo el rubio, de alguna forma la chica se sentía aliviada, soltó una tímida risita.

Entraron al auto, por dentro era muy lindo, asientos de cuero, una pantalla en el panel que indicaba donde estaban, música que sonaba muy claramente.

“¿a qué rayos te dedicas?” dijo la pelirosa tocando los detalles del auto. Sin duda tenia un buen trabajo o unos padres muy ricos.

“soy artista”

“no te creo” respondió rápidamente la chica. Ya estaban cerca del bar.

“créelo” dijo el muchacho, el auto paro. Ya estaban en el bar.

“bueno supongo que aquí me bajo, gracias nuevamente…” era algo raro que aun no sabía su nombre, en su cabeza pensó “¡dios que soy maleducada no le pregunte su nombre!”

“ehm.. Perdón no se tu nombre, yo soy Sakura” dijo con una sonrisa que impactaba.

El rubio agarro una de sus manos y se saco ambos guantes de cuero. Extendió su mano y pronuncio.

“Naruto, un gusto conocerte” la chica por fin sintió la cálida mano, el saludo duro más de lo normal y se volvió a dar la conexión visual.

“el gusto es, digo fue mío” ¿había algún problema con sentir esto con tanta naturalidad? Parecía como si todo esto hubiera sido planeado desde un principio, de alguna forma ambos sentían que tenían que conocerse de alguna forma.

El auto arranco y ella miro como desapareció dejando la huella de las llantas en la mojada calle, el frio ya no importaba. Había algo que molestaba mucho más a Sakura.

Había dejado ir a ese chico sin sacar nada más que su nombre, no consiguió un beso, un legítimo abrazo, apenas pudo sentir su mano y realmente la sintió. Nació un enorme remordimiento en su ser. Se pregunto y se insulto por mencionar que tenía chico, pero había hecho lo correcto.

“Como deje que se fuera, ni siquiera me pidió mi numero” pero en su interior ella sabía que alguien como él debía tener muchísimas chicas a sus pies, chicas muchísimo más interesantes y atractivas que ellas, con mucho más dinero que ella y estatus que ella.

Desganada Sakura entro lentamente al local, pero antes de entrar pronuncio.

“¿así que Naruto eh?”

“¡Mierda! ¡Tiene chico! ¿Por qué rayos no le pregunte eso desde un principio?” Naruto aceleraba, podía haberla seducido y haberla llevado a su casa pero era su código, su ley no meterse con chicas con novio o casadas, lo había hecho en el pasado pero no lo iba a hacer ahora.

Conducía con apuro, la reunión ya casi comenzaba y el estaba lejos del lugar. Después de mucho tiempo sintió que había perdido una gran oportunidad, debió haber roto sus propias reglas, realmente quería llegar a conocerla más.

Finalmente llego, entro al ascensor, apretó el botón 21, la música del ascensor lo relajo un poco. La puerta se abrió y lentamente entro la luz. Antes de salir miro su reloj.

“Justo a tiempo” aun no lograba sacar de su cabeza la sonrisa que había visto.

“ojala nos volvamos a encontrar” salió del ascensor lentamente.

“Sakura…”

por Leon Mar Oct 22, 2013 6:30 am

Esta mas que interesante, Naruto es un super galán, pero no me que sea frívolo, parece un ser romántico y culto, propio de una persona dedicada al arte, además de que no tiene ningún apuro económico, aunque parece que no siempre fue así.

Sakura, una belleza genuina, el lienzo en blanco en el que Naruto quiere crear su arte, pero desgraciadamente tiene novio y estorba.

Y la impresión que se hubiesen conocido en el pasado, porque se creó un sentimiento de familiaridad muy notable, quizá fueron amantes en otra vida.

por alvich Mar Oct 29, 2013 4:11 pm

segundo capitulo, lleno de sentimiento.
espero los disfruten, saludos!

Capitulo 2: Padre

Ya habían pasado 2 semanas que no salía a divertirme, el trabajo me dejaba muy cansado, la empresa había perdido algunos inversionistas, aun así los japoneses estaban interesados.
Tenía apenas un poco de tiempo para tocar guitarra y componer pequeñas frases. Aun así sabía que era necesario esforzarme un poco hasta que las cosas se calmen en este negocio, era lo que siempre quise, mi propio negocio. Mis padres me habían dejado como propietario de otras dos empresas, aquellas no necesitaban mi supervisión había gente más preparada que yo, yo me concentraría en lo mío.

Miraba la ciudad desde el pent-house que me había comprado hace tres años, el vidrio mostraba mi reflejo, estaba yo ahí, sosteniendo un vaso de whisky. Estaba sobrio pero el sabor de la bebida aun se mantenía en mi lengua. Estaba descansando, había traído trabajo a casa, tenía que ver algunos procesos y asegurarme que las cuentas cuadraran, además de eso necesitaba más dinero moviéndose en la empresa si quería que crezca, pero no quería que alguien se apropiara de mi esfuerzo, este era mi negocio, mi empresa. Claro que no era tan grande como las otras dos que me dejaron mis padres, pero ya empleábamos a 14 personas, me sentía orgulloso de eso por más pequeño que sea.

Tome un poco más del whisky, decidí acabar el vaso, este iba a ser el ultimo. Desde este punto se podía observar el bar que normalmente frecuentaba, donde fui por última vez para distraerme hace 2 semanas. Ese mismo día me dieron buenas noticias, había gente interesada en este riesgoso negocio. La noticia me había caído tan bien que me había olvidado de todo lo demás que paso aquel día.

Recordé que había encontrado a una bella e interesante chica, sabía que había olvidado algo importante que no tenía que ver con el trabajo.

“Sakura…” pronuncie sin darme cuenta, me dieron ganas de tomar un poco más, tal vez por remordimiento, debí haber conseguido su número, eso por lo menos.

Regrese a mi escritorio, me puse los lentes, y leí los informes que habían escritos algunos empleados, debía pensar en algunas soluciones.

Escribí posibles opciones en una hoja de papel, tenía hambre, era muy tarde, no creo que haya nada abierto a estas horas. Mi perro me miraba moviendo la cola, no podía seguir trabajando necesitaba un descanso, decidí sacar a mi perro mientras buscaba algo de comer.

Me puse un buzo, y pensaba que necesitaríamos un encargado en programación, teníamos gente talentosa en la empresa pero necesitaba un encargado, con eso los procesos serian menos desordenados y tendríamos más dirección. Había encontrado la solución más adecuada pero ahora aparecía otro problema, donde iba a encontrar a una persona así.

Debía tener algún conocido por ahí que programe, necesitaba alguno de esos chicos que vivía al frente de su computadora y podía hacer lo que le pida.

Vivía en el piso 30 de un exclusivo edificio, bastante cerca de mi oficina, todo el piso era mío y para mi perro de 3 años Kurama. Es una zona metropolitana, muchos edificios, pero me agradaba el lugar porque hay mas arboles que en otras partes. Mientras caminaba mi perro orinaba en los arboles que olía. Inconscientemente había llegado a una pizzería que traía viejos recuerdos. Papá y mamá solían comprar pizza de ahí, al ir a casa pasaban por ahí y recogían una pizza para llevarla a casa y podamos cenar bien esa noche. Eso pasó hace como unos 18 años, tenía 6 años, el año siguiente ambos murieron en un accidente.

Realmente los extrañaba, cuanto desearía haber pasado más tiempo con ellos. Sé que aun me cuidan desde algún lado.

“dame un pizza de jamon, queso, champiñones y pimiento morrón” pedí a la cajera.

“aquí tiene su vuelto” dijo mientras me pasaba unas monedas.

Ellos dos no eran los únicos con los que compartía esta pizza, también estaba la persona que se encargo de mi cuando mis padres murieron. Solía comer esta pizza también con Jiraiya, nos sentábamos en una de las mesas y él me contaba cómo era trabajar en otros países, las clases de personas que encontró, y sobre todo me hablaba de mujeres. Nunca se caso y nunca tuvo hijos. Yo era la única familia que tenía el viejo, solía contarme con mucha tristeza que había amado una vez hace mucho, pero jamás pudo ganarse su corazón. Había trabajado en muchos países y tenía mucha experiencia, en sus últimos años vivía conmigo y trabaja como profesor en una universidad de acá.

Cogí la caja que contenía la pizza, volvía a mi casa con mi perro que andaba olisqueando todo lo que veía.

Al regresar recordaba como básicamente había vivido sin mucha compañía. Tenía a mi tío Jiraiya y los amigos del colegio. Al salir del colegio había quedado completamente solo, Jiraiya sucumbió ante una enfermedad repentinamente. Y el año que salí bachiller del colegio veía a mis amigos con sus familias. Claro mis amigos me ayudaron esas épocas pero eventualmente nos distanciamos, muchos se fueron del país para estudiar lo suyo.

Tenía una enorme casa para mí solo, tenía una enorme fortuna que me habían dejado mis padres y mi tío para mí solo.

Al caminar por la entrada del edificio, vi como Kurama se quedo unos cuantos metros lejos de mi sentado, me miraba, intente llamarlo pero no hacía caso, se quedo mirándome mientras movía la cabeza, como si le extrañara algo. Me acerque a él y vi en sus pies había una pequeña ave, me extrañaba que Kurama no se la haya comido ¿habrá sentido pena por la criatura? Deje la caja de la pizza en el piso por un momento y agarre a la pequeña ave, parecía ser uno de esos pájaros que viven por el parque que está por acá. Decidí llevarla al apartamento y mañana la llevaría al veterinario.

Una vez dentro del departamento busque una caja donde poner a la pobre ave, la deje ahí. Trabajaba mientras comía pizza, le di una porción a Kurama que normalmente estaba echado detrás de mi silla. Ordene unas cuantas cosas y pensé que ya era hora de descansar.

Cuando salí del colegio entre a la escuela de negocios, iba a estudiar emprendedurismo, similar a lo que Jiraiya y mi padre habían hecho. Podía pagarlo todo tranquilamente, aun si era una de las universidades más caras de la región. Deje la casa donde viví con Jiraiya y mientras estaba en la universidad vivía en los dormitorios de la universidad. En esa época, era un antisocial, la vida me había rasgado el alma. Tenía miedo de volver a querer a alguien y que después lo perdiera. Jiraiya había muerto días antes de cumplir 18, estuve mucho tiempo casi sin contacto humano, melancólico y en depresión. Por algún motivo tenía que recoger algunas cosas de mi antigua casa. Donde viví con mis padres 7 años y después 10 años junto Jiraiya. El hecho de ir a ese lugar era muy doloroso, tan solo al ver la casa mis ojos se humedecían. La casa estaba empolvada, y la mayoría de las cosas que quedaban estaban en cajas. Era finales del segundo semestre de la universidad, más o menos por noviembre. Subí al cuarto donde dormían mis padres, me quede ahí un rato tratando de recordar lo poco que viví con ellos. Al lado de ese cuarto estaba el cuarto de Jiraiya, estaba igual que cuando me fui, idéntico cuando él vivía. No había cambiado nada, tal vez había un poco mas de polvo pero se mantenía igual. Nunca me anime a entrar después de su muerte, el dolor se mantenía ahí pero no era tan intenso. Vi que el armario estaba entreabierto, al abrirlo grande fue mi sorpresa. Había una repisa donde había muchos libros, muchos papeles y notas de él.

“El artista” leí entre muchos libros.

Encontré lo que parecía ser un diario, bastante corto.

Básicamente lo que había encontrado eran métodos de seducción, diferentes estudios hecho por diferentes personas, en estos libros/textos que encontré estaban diferentes formas de mejorar la interacción con las mujeres. Indague un poco más al respecto, la mayoría de estos textos eran escritos por un tal “Mr.Toad” en internet había mucho de este individuo. La mayoría de los “PUA” o “pick-up artists” por sus siglas en ingles o Artista del ligue en español se hacían pasar por sobrenombres, para que evitar problemas. Lo que había encontrado era básicamente una comunidad de hombres que se dedicaban exclusivamente a seducir mujeres y usar diferentes métodos para seducirlas. Me quedaba día y noche leyendo todo esto. Algunos autores usaban rutinas, otros sugerían optar por un “juego interno” donde se implantaban cosas como confianza y diferentes tipos de maniobras que mejoren la personalidad del individuo para seducir mejor a las mujeres.

Finalmente encontré una foto de este “Mr.Toad” de quien tenía toda su colección escrita.
Era Jiraiya.

Jiraiya siempre hablaba de mujeres pero jamás lo vi con una, siempre se concentraba en mi más que en mujeres, más que enseñar en la universidad incluso. Y si llegábamos a hablar de mujeres él siempre hablaba de esta única mujer a quien él legítimamente amo.

El era uno de los mejores artistas, nunca pude imaginarlo, siempre lo vi como un adulto medio torpe.

Leí absolutamente todos sus libros y textos. Su pequeño diario que detallaba algunos signos de atracción en las mujeres, muchos datos interesantes. En un abrir y cerrar de ojos mi interacción con la gente había mejorado.

El conocimiento me había emborrachado, podía sentir como las chicas se sentían atraídas ante estas técnicas, ante las palabras que decía, ante mis movimientos, ante mi nuevo estilo de vestir.

En poco tiempo había perdido mi virginidad, y tenía varias chicas que siempre podía llamar para poder satisfacer mi apetito sexual.

El último libro que Jiraiya había escrito era “el artista”

Libro donde detallaba como ser un poco más “natural” como hacer que el encanto resbale y atraigas a las mujeres con facilidad.

La última parte del libro era una reflexión de la forma de vivir que tenía Jiraiya y los demás artistas.

Decía lo siguiente:

“durante el transcurso de mi carrera como artista he dormido con muchas mujeres, he llegado al punto donde las mujeres ruegan para que les haga el amor. Se desvisten en mi cama para que les facilite placer, muchos desearían estar en esta situación. Muchos desean poder acostarse con cualquier mujer que deseen. Yo ya me canse de esta vida, tengo mujeres pero no encontré la felicidad. ¿Quieres ser un artista del ligue?, ten cuidado, puede que esto solo sea el inicio de una vida vacía. Es momento para Mr.Toad de sentar cabeza.

Futuro artista, la vida debe mantener un equilibrio. Realmente no caigas en una vida de lujuria y excesos, recuerda que si los PUAs escribimos todas estas cosas son para que puedan encontrar a la pareja perfecta, no vuelvan a las mujeres en un objeto sexual, no pasen por lo que yo pase. Al final se que si me caso nunca podría serle fiel a mi esposa, no podría serle fiel a ninguna mujer, me sería muy fácil seducir a otra y acostarme con ella.

Prefiero no herir a nadie estando como estoy. No soy más que un soltero.

Este será mi último libro porque también he entrado a otra etapa de mi vida, he encontrado alguien a quien cuidar y proteger, alguien a quien guiar mientras tenga vida. No es una mujer al contrario, es un niño de 7 años, de quien espero poder funcionar como un buen padre, por ahora siento que es una esperanzadora luz en mi vida.

Es una nueva etapa y me estoy emocionado.

Joven artista que también atraviesa una nueva etapa mantente despierto, mantente joven.
Fue un lindo viaje, pero es hora de actuar como un verdadero ejemplo para este niño.”

Esa página se lleno de mis amargas lagrimas, no podía contener el dolor. Grite de dolor, el llanto era mi única forma de votar todo ese amargo sentimiento, ahora todo tenía sentido, las últimas palabras de Jiraiya, eran ambiguas, pero con esa parte del libro que leí había logrado entender.

Mi cumpleaños es el 10 de octubre, era septiembre y el próximo mes iba a cumplir 18 años. Jiraiya iba internado cinco días, lo iba a visitar todos los días después de colegio. Nunca dejo de sonreír, las enfermeras decían que el único momento cuando lo veían sonreír era cuando yo llegaba. Ya era octubre y se acercaba mi cumpleaños. Jiraiya aun seguía internado. No deseaba aceptarlo, pero Jiraiya había contraído el virus del VIH sida hace mas de 10 años, estaba en estado crítico, no iba a vivir por mucho tiempo más.

Sentía como Jiraiya se contenía por decirme ciertas cosas. Los doctores me avisaron que su hora estaba por llegar y que en cualquier momento iba a colapsar, esos días estuve las 24 horas con él.

Dos días antes de mi cumpleaños Jiraiya me hablo en la madrugada, el sol estaba por salir.
“Es bello ¿no te parece? El amanecer, escuchar como las aves despiertan y algunas alzan vuelo”

“Naruto, acércate” me dijo. Puso una de sus manos en mi mejilla y empezó a hablar.
“Gracias” hablo mientras me miraba, las lagrimas empezaron a recorrer mi rostro, entendía que ya era hora.

“nunca imagine la felicidad que me traerías, ni mil mujeres ni todo el dinero que tuve me han dado tanta felicidad como tú lo has hecho. Veras cuando acepte hacerme cargo de ti yo estaba perdido, no tenía un norte, tú me brindaste felicidad y paz. Vi como creciste y estoy tan orgulloso de ti Naruto.” Agarre su mano y mientras lloraba la apretaba fuertemente, pronunciaba silenciosos “no” repetidas veces.

“Prométeme una cosa, no seas como yo. No cometas los errores que he cometido. He vivido una vida de fracasos, no pude conquistar a la mujer que amaba, no pude hacer nada por tu madre y padre. Tuve una patética vida. Tenía tanto pero me sentía tan vacio, hasta que llegaste tú.”

En ese momento me puse sobre su pecho, yo lloraba con más intensidad.

“gracias por hacer la vida de este viejo algo mejor, siento no estar ahí para tu cumpleaños”
Murió con una dulce sonrisa.

Su último libro había sido escrito el año que murieron mis padres, la última parte, la reflexión la había escrito el primer mes que viví con él.

Después de entender todo busque gente que había conocido a Jiraiya, deje la universidad para viajar a buscar a los colegas en seducción de Jiraiya, no los busque para convertirme en un el perfecto Casanova sino para sabes mas de Jiraiya. Conocí a sus amigos y escuche sus hazañas. En el transcurso del viaje yo mismo me convertí en un experto seductor, pero no intencionalmente. En el momento en el que sentía que me absorbía la vida de sexo, mujeres, fiestas descontroladas recordaba las últimas palabras de Jiraiya. Pase un semestre, 6 meses viajando encontrando distintos amigos de Jiraiya a quienes me presentaba como su hijo. Todos preguntaban si había encontrado lo que buscaba, respondía a todos que tuvo 10 años de paz y felicidad, los diez años en los fue que mi padre.

Recordar todo eso me traía gratos recuerdos, realmente era tarde y tenía que ir a trabajar mañana, llame a Kurama para dormir. Me metí en la cama y recordé el primer día que pasamos juntos después de la muerte de mis padres. Llego con sus cosas directo a la casa, entro por la gran puerta de madera. Yo me encontraba llorando porque acababa de perder a mis padres. Jiraiya dejo unas cajas por ahí y se acerco a mí.

“Así que tu eres Naruto” pronuncio mientras buscaba algo en su bolsillo.

“te traje esto, tu papá me decía que te gustaba mucho” extendía su mano para darme un helado, se lo quite y mientras lo chupaba pregunte.

“¿Quién eres?”

“Soy Jiraiya, y desde ahora yo te cuidare, espero que nos llevemos muy bien” dijo luego extendió su mano la cual sujete y sacudí, en ese momento su vida cambio junto a la mía.

Esa noche soñé con toda mi familia.

Al despertar me di cuenta que el pájaro ya no estaba, había una ventana abierta y una solitaria pluma blanca estaba encima de la caja.

por Leon Mar Oct 29, 2013 5:12 pm

Naruto ha tenido una vida muy solitaria; la pronta partida de sus padres, después la muerte de Jiraiya, aunque sea rico y este rodeado de mujeres hermosas, estoy seguro que cambiaría todo a cambio de su familia.

Jiraiya fue su gran mentor, al Artista que le enseño lo que significa la sublime obra llamada Mujer, pero también le enseño que la felicidad no se encuentra entre muchas mujeres, más bien en una sola y la comunión con esta.

En cuanto a tu narrativa me parece muy buena, ligera, fluida y sobre todo cautivadora. Espero la continuación y que no abandones la historia.

por alvich Mar Nov 05, 2013 4:45 pm

ok les traigo este crudo episodio, bordeando traumas y cercano a lo que puede pasar en la vida. Todos tenemos problemas, algunos mas complejos y traumaticos que otros. Espero disfruten de mi narracion!

Saludos!

Capitulo 3: Flor Marchita

“nada, aquí viendo tele”

“si”

“saldré a tomar un café con mis amigas”

“¿es un chiste no?”

“¡¡No puedes prohibirme, soy tu novia no tu esclava!!”

“¡¡No estoy para estas estupideces!!” termine la llamada y luego lance mi teléfono hacia el otro lado de la cama.

No salía con mis amigas desde hace como 2 semanas, él era posesivo y muy inseguro. La gente cambia cuando se está en una relación. Al principio todo era lindo, era un chico muy dulce y tierno. Todo indicaba que esta iba a ser una linda relacion, pero paso 1 mes y se volvió posesivo.

Me maquillaba para salir con mis amigas. Íbamos a tomar un café y hablar un rato. Mi chico básicamente me dijo que no podía hacer eso, ya había salido y que no debería salir.
Era hijo de padres divorciados, su madre le había sido infiel a su padre, su padre desde entonces maltrato física y psicológicamente a su mamá, el trauma nunca lo pudo superar y por eso pienso que es tan inseguro y posesivo. Sé que teme perderme pero no puedo vivir así.

Además de eso el solo quiere que ande solo con él y sus amigos. Cuando esta con sus amigos me usa, menciona que ninguno de ellos podría tener una chica como yo, se vuelve un pedante. En el fondo lo hace para rellenar su baja seguridad, ¿Cómo termine con este tipo?
Quería que mis amigas me den unas palabras que me motiven a terminar con esta relación enferma.

Aun mas incomodo era que él últimamente insistía en “llevar nuestra relación al próximo nivel” yo simplemente no lo deseo, es mi chico pero el acto de tener sexo me da asco. Me enferma solo pensar en eso.

Agarre mi abrigo y lo lleve conmigo, cogí el primer taxi que vi y me dirigí al café donde estaban las chicas. En el transcurso del viaje miraba la ciudad. Es bastante fría de cierto modo, muchos edificios muchas sombras y oscuridad. Tenía muchísimo miedo a la oscuridad, la detestaba.

“mierda…” había olvidado apagar la computadora en la que trabajaba, no había actualizado el antivirus y la seguridad de mi computadora era baja. Solo esperaba que al volver no encontrara nada malo. Había estado trabajando por unos días, me contrato un banco, me pidieron que encontrara algún tipo de error en su sistema, todo para fortalecer su seguridad y que no haya algunos hackers que intentaran hacer fechorías con su información. Había mucho por hacer, por suerte habían acudido con la persona indicada. La paga era buena, lo mejor era que me pagaban por algo que podría hacerlo en una semana, ya casi estaba por terminar. He estado en esto por un año más o menos, ayudando a cualquiera que me pague para fortalecer su seguridad, algunos pedían que les fabrique algún tipo de software sencillo que facilite algún trabajo, había bastante demanda de mis habilidades.

Sentí que había olvidado algo más. Revise en mis bolsillos, había olvidado mis pastillas.
El taxi llego le pague y baje, entre al café y busque la mesa donde estaban las chicas.
No habían llegado, siempre era la misma historia.

Odiaba esperar, me estresa, no llegaba nadie y para calmar mi estrés golpeaba la mesa con mis dedos yendo del meñique al índice, hacia el movimiento cada vez más rápido, la gente me miraba, su mirada me puso mucho mas incomoda detuve el movimiento que había logrado molestar a muchos en el café decidí pedir un vaso de agua, para calmarme un poco más.
Sentía todos los ojos de las personas encima de mí, la gente sin duda me estaba mirando, sentía muchísimo peso en mí, trate de distraerme jugando con mi celular. Apretaba con mucha fuerza la pantalla táctil, ¿estaba sudando? ¡Por favor que alguien llegue ya! ¡Por este tipo de situación no podía salir sola, prefería mi cuarto con mis computadoras! Ahí nadie me miraba.

Nadie…

Mis nervios se calmaron cuando vi a Tenten.

“perdón por el retraso, ¿no llego nadie más?” pregunto mientras miraba por todas partes. Yo estaba aliviada, tome un gran sorbo.

“no, esas tardonas deben estar saliendo de sus casas” respondí.

“¿cómo has estado?” pregunto Tenten con curiosidad. Justo en ese momento vino el mesero a dejarnos la carta, pedí una taza de té para aliviar los nudos en mi cabeza.

“bien, pero un poco estresada” dije cerrando los ojos, mis amigas eran conscientes de la facilidad con la que llegaba a estresarme.

“eso es normal en ti, ¿Cómo vas con tu novio?” pregunto, supongo que se arrepintió de la pregunta cuando hice una mueca de molestia.

“la verdad no va bien, ya no lo soporto” dije mirando hacia la ventana, quería evitar verla a los ojos.

“hahaha Sakura no logras tener una relación por más de 5 meses, ¿Cuánto tiempo vas con este chico?” la verdad no sabía cuánto tiempo iba con él ¿eran 4 ó 5 meses?

“4 meses creo, confundo fechas, no tengo idea cuando es nuestro aniversario de mes” decía.

“me imagino, tuviste tantos novios en poco tiempo recientemente que debe ser difícil” decía sonriendo.

“tú vas 3 años con tu novio ¿verdad?” al parecer Tenten había encontrado al indicado.

“¿pensaste que responder si te propone matrimonio?” pregunte mirando a sus ojos, note que se emociono, una sonrisa se formo en su rostro.

“la verdad le diría que sí pero me gustaría vivir con él antes de casarme” respondió

pestañeando soñolientamente, personalmente yo no me veía ni casada ni con hijos.

“¿tu Sakura?”

“¿yo qué?”

“si llega el indicado estarías …” sabia a donde iba esto, el matrimonio, las mujeres soñaban con eso desde siempre, yo personalmente no lo veía como algo de en sueños.

“No lo sé” respondí.

“he estado con muchos hombres y empiezo a perder las esperanzas de encontrar a alguien para mí…” Ino llego repentinamente a interrumpir mi conversación con Tenten.

“¡Sakura! ¿Cómo puedes decir eso? si ni siquiera hiciste el amor con ninguno de tus novios”
sus comentarios me irritaban frecuentemente, pero la perdonaba siempre porque es mi
hermana. Elegantemente manteniendo su seductora forma de ser colgaba su cartera en la silla en la que luego se sentó, cruzo las piernas y se acerco a la mesa.

“Sakura siempre te digo lo mismo, eres hermosa y los hombres que fueron tus novios no son de tu talla, alguno que otro tenía su encanto, pero puedes conseguir realmente galanes, como él de ese día del bar” se podía notar sus asquerosos pensamientos en sus ojos, supongo que con galanes se refiere a gente con dinero.

“¡verdad! Sakura ese chico realmente estaba interesado en ti, y vaya que estaba buenísimo” era raro escuchar a Tenten referirse así sobre otro hombre que no sea su novio.

“eres una tonta Sakura, yo me hubiera ido en su auto, a su departamento, lo que te perdiste” dijo Ino, llego el mesero con nuestros pedidos. Ino le pidió un pie de limón mientras sonreía coquetamente al mesero, que es algo atractivo.

“¿cómo pudiste decirle que tenias novio? Tienes novio, es cierto pero la verdad no lo quieres” Tenten tenía un buen punto, y la verdad siempre me lamentaba no haber conseguido más información del tal Naruto. Solo sabía su nombre, parecía ser un chico educado y caballeroso, ¿Quién sabe? ¿Podría ser diferente a la escoria de hombres que siempre encuentro?

Solté un gran suspiro mientras agitaba la cuchara para que se disuelva la azúcar en mi té.

“¡Wow! Sakura ese suspiro me da a entender que tu también te arrepientes el no haber conocido mejor a ese chico”

“¿Y decías que estabas perdiendo la esperanza de encontrar un buen hombre?” dijo Tenten.
“si Sakura ten un poco mas de fe en los hombres” jamás tendría fe en ellos.

“no todos son malos” todos son iguales, son la misma basura, solo tengo novio para tener un poco de compañía.

“hay hombres buenos”

“¡No es cierto!”Grite enfadada, vi como sus rostros cambiaron expresando un poco de sorpresa.

“la verdad es que ningún hombre es bueno…ninguno…”susurre batiendo mi té, ellas entendían porque estaba así, pero con frecuencia suelen olvidarlo.

“Sakura…” pronuncio Ino y luego toco mi manó.

Sus dedos se posaron en mi rostro acariciando delicadamente mi rostro, no me di cuenta, pero yo estaba llorando.

Inconscientemente mi cuerpo expresaba gran dolor pero yo me sentía normal, tal vez un poco molesta con su insistencia pero me sentía normal. El psiquiatra me comento que estaba enterrando cosas, como si no hubiera pasado nada, me dijo que eso no era saludable.

“No es nada…solo no tome mis pastillas antes de venir…” Mi psiquiatra me había dado unas pastillas, que había olvidado tomar. Mejoraran tu estabilidad emocional me dijo.

Tome mi té, estaba tibio.

“Por cierto Hinata me dijo que no podría venir, tenía que estudiar para un examen para su maestría” dijo Ino.

“Por cierto, Sakura tú podrías optar por una beca, es decir fuiste excelente alumna y en el campo laboral eres una de las más conocidas” eran lindos cumplidos de parte de Tenten.

“Sería el colmo que te den otra beca completa, ya te dieron una al salir del colegio. ¡Y me dejaste aquí por 3 años!” decía Ino.

“¡¿3 años!?” expreso con sorpresa Tenten.

“¿acabaste tu carrera en 3 años? Sakura no solo eres bella sino también inteligente” recibía otro cumplido de parte de Tenten.

“no es para tanto, muchas de las cosas que “enseñaban” en mi universidad ya las sabia” trate de ser un poco humilde.

“Es verdad, eras una chica bastante aislada, cambiaste bastante. Era impensable que tengas un chico en las épocas de colegio, básicamente vivía en su cuarto y solo se quedaba en su computadora, día y noche, ahora por lo menos duerme” comentaba Ino.

“Ahora que lo recuerdo, en colegio siempre te veía con unas ojeras bastante feas” dijo Tenten.

“fue hasta que llegamos a tercero de secundaria, cuando teníamos como 17, ahí resolví su problema de ojeras gracias a unas cremas y yendo a dormir a su casa” era cierto literalmente Ino dormía conmigo bastantes días a la semana, necesitaba alguien y Ino se acerco mucho a mi en esos momentos, esos meses mi popularidad dio un salto de cero a cien en un abrir y cerrar de ojos, todo porque Ino me enseño a maquillarme mejor, vestirme mejor, bajar un poco de peso y también fue gracias a que se desarrollaron ciertas partes de mi cuerpo.

“Cuando estábamos en el último año de colegio, yo había hecho de Sakura una bomba sensual, pero siempre prefirió charlar con los niños raros que solo hablaban de juegos ó computadoras” La verdad era que Ino era la única amiga que tenía en colegio, después me hice amiga de Tenten y Hinata cuando volví de estudiar en el exterior. En colegio mis amigos eran muchos geeks con los que podía hablar de las cosas que me interesaban, lo buena era que yo era demasiado linda para que intentaran coquetearme y siempre los mandaba al friendzone, no hería sentimientos, aun siguen siendo mis amigos.

“luego empezó a salir con chicos lindos pero que no valían la pena, la verdad Sakura tu mereces un chico que sea bello y sea también interesante” lo que decía Ino era cierto, mi historial de novios solo eran caras bonitas, normalmente no tenían empleo o seguían estudiando.

“esa clase de hombre sin duda te hará feliz” comentaba mi rubia amiga.

Pero aquel chico, parecía ser mucho más que una cara linda, o tal vez sus padres eran ricos y él era un mantenido. ¿Pero lo llamaron de su trabajo para una reunión de emergencia? Eso quiere decir que es exitoso ¿verdad?

Naruto…

Me había distraído pensando en aquel chico que sin duda había dejado una buena impresión en mí. Miraba la taza de té, que ahora estaba mas vacía, también estaba más fría.

Levante mi cabeza para mirar a Ino, observe que estaba mirando fijamente detrás mio. Ino estaba con la misma expresión. Sus expresiones no eran de alegría sino de molestia. Sentí una mano en mi hombro, gire para ver quién era.

“Sakura, tenemos que hablar” era el imbécil de mi novio.

Salimos juntos del café, nos fuimos unos metros hacia la esquina de la cuadra.

“Sakura, no quiero que andes con ellas” se atrevió a decir el cretino.

“¡¿perdón?! ¿¡Se puede saber que mierda haces aquí!?” grite mirándolo fijamente a los ojos, mi expresión sin duda debía reflejar la molestia que me causaba.

“Sakura, cálmate, mira sé que esto no fue…”

“¡cómo quieres que me calme si no me dejas un puto segundo en paz!”

“¡¿Qué?! ¡¡Piensas que me iré con otro hombre apenas me aleje de ti!!”

“…”

“¿¡porque no te crecen las bolas de una vez!? ¡Mierda! ¿¡Puedes volverte hombre y demostrar un poco de puta dignidad!?”

“¡di algo imbécil!” no decía nada, no era primera vez que le gritaba así, pero antes podía hablar.

Podía verlo en sus pupilas, él había actuado sin pensar, como siempre inseguro de sus acciones. No podía seguir con esta mierda.

“¡nunca más vuelvas a llamarme, ni joderme!” le di la espalda dirigiéndome hacia el café, pero sentí como me agarraba la mano.

“¡no puedes dejarme Sakura!” dijo agarrando con mucha fuerza, me lastimaba.

“¡no vas a hacerme pasar por todo esto y irte así!” trataba de zafarme pero su fuerza era mayor.

“¡¡sueltame!!” trataba de zafarme desesperadamente.

“no me vas a humillar asi y irte sin que haga nada” dijo

“¡¡suéltame, maldito fracasado!!” le grite.

Ante lo último que dije el reacciono golpeándome en la cara con su mano, caí al suelo, mi brazo derecho estaba contra el frio concreto de la calle, cuando levante la cabeza vi como se acercaba, me arrastre hacia la pared que estaba a mis espaldas en desesperación.
Se acerco lentamente, el sol estaba detrás de él solo podía ver una silueta. Tenía miedo. Sucedía de nuevo, me abrace fuertemente, hundí mi cara entre mis brazos.

Mi respiración se acelero, no podía hacer nada estaba acorralada. Escuchaba sus pasos lentos.

“no…no…puede ser...” susurraba tartamudeando mientras lloraba silenciosamente. Iban a maltratarme otra vez, iban a lastimarme de nuevo.

¡¡Yo no quiero esto, realmente no quiero esto, por favor no quiero esto!!

Sentía que estaba justo frente de mí, pero no quería ver nada, no quiero nada.

Déjenme en paz

¡¡Déjenme en paz!!

¡¡Por favor!!

No podía gritar, me iba a hacer más daño, mucho más daño, no quiero eso. ¡No más!

Sentí como jalaba de mis pelos, me levanto de ahí, tirando de mis pelos, me puso contra la pared y me miro directo a los ojos.

“Sakura no creas que he acabado, nadie me denigra, ¿me entiendes?”

Seguía llorando sin decir nada.

Me soltó del pelo solo para bofetearme con mucha fuerza.

Miedo, tengo miedo.

“¡¡¿Entiendes mierda!!?” agarraba mis hombros lastimándome.

Asentí invadida por el miedo.

“ahora nos vamos de aquí, y vas a hacer lo que yo te diga” decía fríamente jalo de mi mano.

Di tres pasos y escuche la voz de Ino y Tenten. Estaban con el mesero del café que venía corriendo, antes de que pudiera correr conmigo el mesero le planto un puñete en su quijada haciéndolo caer, llegaron Ino y Tenten. Tenten me abrazo, se sentía tan cálido abrazarla, llore en sus hombros mientras la apretaba fuertemente.

“tranquila Sakura, ya paso, este pelotudo va a pagarlas” decía en mi oreja mientras me abrazaba.

El mesero lo tenía sostenido en el piso, Ino lo golpeaba con sus tacones en la cabeza, llegaron otras personas para ayudar. En el café habían llamado a la policía que ya estaba en camino, la mayoría había visto el incidente.

No vi como se lo llevaron, nos fuimos al departamento de Ino mientras lo agarraban al imbécil hasta que llegue la patrulla.

Todo había ocurrido tan rápido, las chicas habían visto todo, la gente no pudo evitar lo sucedido porque no estaban muy cerca, tenía un lado de mi cara hinchado y un ojo un poco morado. Aun me sentía en pánico, no deseaba hablar, no quería recordar.

“no te preocupes Sakura, yo voy a encargarme que ese desgraciado pase un mal rato en la cárcel” decía Ino mientras llamaba por su celular.

“ven, vamos a ponerte esto en tu rostro, aliviara tu hinchazón” decía Tenten mientras me ponía una crema en la cara, yo me acurrucaba en la cama de Ino, me senté para que Tenten me pusiera la crema.

Mis ojos estaban rojos.
No por los golpes sino por tanto llorar, no pare de derramar lágrimas durante todo el tiempo que estaba con mis amigas, no pude hacer nada.

“¿Por qué siempre…?” decía mientras mi voz se quebraba por el llanto, Tenten me miro a los ojos, acariciaba mis hombros.

“Tenten, me volvió a pasar… ¿verdad?”

“recordé el miedo que sentí, lo recordé, me sentí igual, no podía hacer nada, ¡no podía hacer nada!¡¡Nada!!” lloraba desconsoladamente, mis lagrimas mojaban el pecho de Tenten, Ino me agarro en ese momento, la angustia había pasado.

“esta vez te pudimos ayudar, esta vez llegamos a tiempo” decía Ino.

Esa noche me quede a dormir con Ino, el individuo ya estaba detenido, Ino se contacto con algunos conocidos, iba a estar con detención preventiva, íbamos a ir a juicio. Según Ino iba a ser fácil, había muchos testigos, me prometió que se iba a quedar dos meses en la cárcel.
Dormi con Ino, trate de dormir. No podía conciliar el sueño, estaba oscuro.

Todo era oscuro, hoy como nunca recordé lo que yo había sufrida en la oscuridad, encerrada sin luz, era de día pero no había luz.

Encerrada en un cuarto, sin luz, solo podía sentir golpes, solo podía sentir eso…

Solo tenía 15 años, ¿¡que podía haber hecho para defenderme!?

Mis gritos no llegaban a ninguna parte, mis lágrimas no las podía ver nadie. La puerta estaba cerrada con llave, no podía salir, no podía hacer nada.

En la oscuridad trate de defenderme, trate y trate, grite y grite, pero no paraba, nada lo detenía, llego un momento en el cual me rendí, solo esperaba a que se cansara y que el tiempo pasara más rápidamente para que se acaba el dolor.

En aquella ocasión nadie llego a tiempo, nadie pudo prevenirlo, nadie me ayudo, mi padrastro me violo.

“ya no llores Sakura, estás conmigo” decía Ino luego me acercaba a su corazón.

por Leon Mar Nov 05, 2013 5:46 pm

Que dolor el de Sakura, un pasado tormentoso lleno de miedos y suplicios, espero que ese imbécil tenga su merecido, lo que si no entiendo como Sakura haya estado con alguien así, una persona tan diferente a ella, comprendo que buscaba un poco de compañía, un refugio, pero con esto su fe en los hombres se derrumbó todavía más.

Pero Naruto alegrará su vida, le hará conocer lo dulce que es el amor, será el bálsamo que cure sus heridas aún sangrantes.

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