Un sensei que me ayude a desarrollar mis ideas....

Nick: Nakyu-Kazemaki

Texto:
~ El despertar tranquilo ~

El frió árido de la mañana y las aves cantoras que revoloteaban por los cielos fueron las que dieron un amanecer espectacular a aquel día espléndido un poco nublado pero aun así no tenia por qué ser un día peor a los otros, donde en aquella cama no parecía haber nadie dormía allí un joven que jamás imagino que su vida iba a dar un fuerte giro.


Se escucho un fuerte golpe que había espantado a las aves que estaban en los barrotes de las ventanas, del suelo frió y húmedo se levanto una sombra encorvada que rascaba su cabeza, al abrir los ojos con claridad vino por su mente como un rayo al cielo ~este va a ser un día duro~ abrió la puerta, salió al pasillo y asomo su cabeza hacia el espejo que se encontraba al final del largo y angosto corredor casi como un reflejo involuntario, luego tomo la decisión de salir y camino hacia el cuarto de ropas que se encontraba al final del pasillo, era un pasillo corto pero en ocasiones se hacia largo ¿será el espejo al final del corredor que lo hacía interminable? o ¿la sugestión de cada persona al verse caminar en frente a un espejo?, cuando paro en frente de la puerta habían manchas de sangre en la manilla de esta, al joven no le preocupo de ninguna manera, abrió la puerta y entro a una habitación muy desordenada con ropa por todos lados y una secadora a la esquina del cuarto, tomó una camisa de mangas largas de color naranja con detalles en blanco y unos jersey negro. Salió de la habitación y en un estante a un lado del pasillo cogió unos zapatos negros muy anchos con unas líneas blancas en la parte inferior del zapato.

Ya vestido decidió avanzar hacia la puerta principal de aquella casa, mientras avanzaba algo en su mente le decía que algo no andaba bien el ambiente no se veía como el de siempre es como si algo hubiera ocurrido mientras él estaba por así decirlo “dormido” ya que su mente estaba en blanco no recordaba mucho es como si hubiera quedado en coma un largo tiempo…

Y en efecto sus malos presentimientos eran ciertos el mundo que él conocía ya no existía , ya pronto se daría cuenta al abrir esa puerta…