Uzumaki: Crónicas de amor y lucha. [+16] Capítulo 11: Un nuevo y problemático "conocido". . 14-06-2017

Super Clari, como siempre, esa chica Kanna me intriga mucho ademas lo de Sasuke me deja pensando, pero bueno sin intriga no hay historia, así de sencillo, cuídate y esperando conti.

Uzumaki: Cronicas de amor y lucha.


Capitulo 5: Algo falta.






Naruto llego a casa agotado.

Todo lo que hizo fue recostarse y tratar de dormir pero ésa fue una noche especialmente incómoda, su cabeza estaba perdida en un recuerdo, aquel día en que Ino les contó del regreso de Sasuke.

***************Flashback tres meses atrás******************************


Después de despedirse se las chicas y salir corriendo, a Naruto se le borro la sonrisa, iba por la calle, no iba encima de los tejados ni moviéndose muy rápido como acostumbraba, simplemente quería correr, cuando llegó a casa abrió la puerta, entró y la cerró de golpe, se recargó en ella y bajo al suelo con la cabeza gacha, no se podía ver su mirada, solo una lágrima recorriendo su mejilla.

—Es lo mejor... Es para que Sakura-chan sea feliz— Dijo para sí mismo algo entre cortado.

El rubio se limpió la cara, se levantó de repente, dio unos saltos y sonrió otra vez.

—No me puedo deprimir... Me prometí proteger su sonrisa, si ella es feliz yo seré feliz. — Dijo ya animado, seguro de sus palabras. —y aunque duela al principio ayudaré a que sea feliz, ¡Dattebayo!


************Fin flashback**************

Esa noche realmente estaba reconsiderando si podría con ese dolor, los últimos meses fueron una tortura para él, aunque creía que ya había pasado lo peor.

Hacía ya varios años que se había prometido rendirse con ella, por fin le cumplió la promesa de regresarle a Sasuke… pero Naruto nunca se alejó, estaba ahí como un compañero, sobre todo como un muy buen amigo, por eso se convenció que lo mejor para él mismo era alejarse más de ella, hasta que ya no sintiera ese loco amor como le decía él, pero siempre es más fácil decirlo que hacerlo.

Ya no acompañarla a su casa, ya no verla por las tardes, ya no invitarle a comer ramen, eso para Naruto era difícil, así que trataba de mantenerse lejos misión tras misión, mantener la mente ocupada entrenando, simplemente soportar hasta ya no sentir esa emoción, pero ya han pasado tres meses y no parece un sentimiento fácil de olvidar. En ese momento él se preguntaba ¿Por qué esta noche pensaba en ella?.

Después de varios intentos de dormir y terminar remolineándose en la cama una y otra vez, una voz conocida interrumpió sus quejas internas.

—Naruto… ¿Cómo estás?— Kurama se notaba preocupado por su amigo.

—Estoy bien, solo no puedo dormir— Naruto respondía irritado. —Disculpa es que estoy cansado y e intentado mucho dormir— dijo tratando de hablar más tranquilo al darse cuenta de que fue muy grosero con bijuu.

—Ya me di cuenta, no me dejas dormir.

—Lo siento dattebayo— Naruto sonaba avergonzado, era extraño, Kurama nunca se había quejado de no poder dormir. —¿Los bijuus duermen?— preguntaba el rubio como niño tratando de entender.

—Si Naruto, a veces. —

— ¿Y comen?— preguntaba otra vez Naruto igual de sencillo y cómico que antes.

—No Naruto, no comemos, somos espíritus con chakra, no nos da hambre.

—Pero ¿por qué sí duermen pero no comen?

—Porque durmiendo nos recuperamos cuando gastamos mucho chakra, pero no nos da hambre porque no tenemos cuerpo físico.

—Aaaaah... y ¿cuándo tenían cuerpo físico si les daba hambre?— Naruto seguía curioso.

—Si Naruto, si nos daba hambre.—Kurama respondía fastidiado, empezaba a molestarse como papá con niño preguntando por qué esto y por qué aquello.

— ¿y si tenían cuerpo que paso con él?

—Fuimos hechos de chakra así que cuando fuimos sellados regresamos a ser chakra— si... Kurama ya estaba molesto —pero tú tendrías que saber esto cachorro.

—si... Claro... Es que tenía que preguntarte... Por curiosidad, no hablas mucho de ti y quería saber ttebayo... ¿y vez todo lo que yo hago?

—No, creo que sería incómodo para ti, además solo veo tu vida cuando tú me dejas ver.

—sería incomodo cuando estoy en el baño. ¿Y me oyes, todo el tiempo?

—a veces si, bueno... Seguido. Es difícil no oír tu chillona voz.


— Qué cruel ttebayo. —Dijo el rubio con una cara cómica triste.

—No exageres… y ¿cómo te sientes?

—Bien... algo agotado— de repente Naruto se notó triste.

—Me preocupaste.

—Lo siento.

—No vuelvas a ponerte así, te descuidaste Naruto.

—Lo siento, me puse algo fanfarrón.

—Solo no lo hagas de nuevo, casi te matan y si te hubiera hecho algo mas no me lo perdonaría, no puedo cuidarte todo el tiempo cachorro, soy poderoso pero no tanto para salir y patearles el trasero si estuvieras en problemas.— Las palabras de Kurama eran sinceras, hasta para él era extraño el cariño que le tiene a Naruto desde que se convirtieron en amigos.

—Gracias— dijo Naruto con una gran sonrisa cosa que extraño a Kurama.

— ¿Por qué agradeces si te estoy regañando?

—Por preocuparte por mí —esas palabras sonaron nostálgicas.

—No soy el único que se preocupa por ti.

—Si... pero al final del día llego aquí y no hay nadie, solo yo... Todos tienen sus vidas. Kakashi sensei está ocupado todo el tiempo, Sasuke es como mi hermano y se fue a ver el mundo y Sakura-chan... Bueno eso no importa mucho... ella será feliz conmigo o sin mí —Decía Naruto con tristeza. — pero tú siempre estás aquí, aunque no hablas te siento aquí haciéndome compañía— Naruto aun sonaba algo triste pero tomaba fuerzas para sonreírle a Kurama.

—Disculpa por no ser una mejor compañía. —Ahora Kurama estaba triste.

—Tú eres genial. ¡Dattebayo!, eres muy fuerte y valiente. — Naruto empezaba a sonar cansado— creo que debemos dormir, si sigo así despertaré muy tarde y quiero buscar a Kanna-nee por la mañana para darle un tour por la aldea, ttebayo.

—Ten cuidado con ella.

— ¿Por qué?
—Apenas la conoces.

—No se ve como alguien peligroso.

— ¿Cómo lo sabes?

Naruto se encogió de hombros—Solo lo se. —Dijo con sencillez. —Buenas noches.

—Descansa cachorro.

—No soy tan pequeño para que me digas cachorro. —el rubio se quejó con los brazos cruzados.

—Para mí si Naruto.

En poco tiempo por fin Naruto pudo conciliar el sueño esa noche.

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Caminando por los pasillos de una gran mansión estaba un hombre conocido de cabello grisáceo y ojos purpura con una yukata negra y sandalias de madera. Deslizó la puerta de una gran habitación en la que se encontraban tres personas.

Una mujer de piel blanca, alta, 180 de estatura, ojos perla peculiares, cabello muy corto con un fleco corto de lado tapando la frente sólo viéndose poco unas marcas verdes a través de él, cuerpo escultural, camisa color crema de tirantes, manga de malla hasta la mitad del brazo y pantalones negros muy ajustados, un portashurikens en la pierna izquierda, con unas sandalias de tacón alto. Una mujer imponente, bella a la vista pero con una mirada atrevida y burlona de la vez. Clara muestra de una mujer fatal.

También estaba otra mujer, 170 de altura, ojos purpura, cabello largo grisáceo recogido con una coleta de lado, una mirada sería, Chaqueta blanca de cuello alto falda larga blanca abierta de los lados, sandalias shinobi altas hasta la rodilla.

También un muchacho de unos 17 años con una perturbadora sonrisa, 165 de estatura, ligeramente morena, cabello castaño oscuro, camisa azul, pantalón gris oscuro y guanteletes cubriendo manos y muñecas.

— Sí que te dieron una paliza fukka-san— decía el muchacho en forma de burla,

—Eso le pasa por idiota y salir corriendo, si claro ¡Yo puedo! ¡Yo puedo!— le decía la ojiperla también burlándose del peli-gris sarcásticamente.

—Para que sepan, par de tarados, complicó en la misión y además el Uzumaki no salió tan bien librado que digamos— dijo Fukkatsu furioso por las burlas de sus "compañeros".

—Ya cálmense, Fukkatsu, te arriesgaste demasiado, apenas puedo usar el jutsu de velocidad y tus conocimiento de hyoton son básico, ¿qué pensabas al ir tú solo?— le reprochaba la mujer de pelo grisáceo.

—Que importa nee-san, solo lo hice y le di una paliza y pude haber terminado el trabajo si no fuera por esa entrometida.

—Fukka-kun no puede con un tonto y una mujer. —molestaba la ojiperla altaneramente.

— No sabes lo que es enfrentarse a un Jinchūriki, ¿o sí Hyuga-san?— decía el hombre en forma de burla.

—No vuelvas a llamarme Hyuuga en tu vida Fukka-kun —dijo la joven mientras se acercaba al peli-gris seductoramente— porque la próxima vez será la última en tu vida— decía la mujer al oído del hombre apareciendo atrás de él.

—Sabes que soy más velos que tú, Ren.

—Y tú sabes que soy más fuerte e inteligente que tú. — continuaba la mujer amenazando mientras sus uñas se hacían largas, puntiagudas y metálicas.

—Ren, fukkatsu, Guarde la compostura— gritaba la mujer de cabello grisáceo tratando de detener una pelea.

—Déjalos Keshin-san, es lo más divertido que he visto en semanas jejeje.—El muchacho castaño se burlaba.
—Hibiki no los alientes. — se quejaba la mujer de cabello grisáceo.

—Claro Keshin-san— el muchacho puso de nuevo esa sonrisa perturbadora.

La mujer llamada del Ren rodó los ojos frustrada —Me aburren, tengo mejores cosas que hacer que ser el entretenimiento de un enano… pero quedas advertido Fukka-kun— decía mientras se aleja del pelli-gris saliendo de la habitación cerrando la puerta corrediza de golpe.

—Está loca— decía el peli-gris observando la puerta por dónde salió la mujer

— ¿Aquí quien no lo está? dijo el muchacho burlándose sin quitar esa sonrisa perturbadora y simplemente se fue en una bola de humo.

— Ren es un problema Nee-san.

—No es algo que me preocupe… ella es leal al viejo.

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Un nuevo día en el hospital con Sakura como siempre comenzando desde temprano tratando de dar lo mejor y olvidar un rato los problemas que lo rodean.

Empieza una jornada tranquila. Su mañana no pasa de lesiones menores y accidentes.

Después de una consulta Ino llegó para llamar su atención.

—Hey frentona— dijo Ino asomándose al consultorio.

— ¿Que quiere Inocerda? preguntaba la peli-rosa enojada por la forma tan brusca de hablarle.

—Te hablan en la entrada.

—¿Quien? — Sakura preguntó extrañada.

—No lo sé, pero parece importante, es una chica muy elegante.

Sakura se quedó intrigada. Salió de la sala y del edificio.

En la entrada encontró a una joven más o menos de su edad, de cabello castaño muy claro suelto, ojos color magenta, tez casi blanca, con un kimono de seda lila con flores rosas y azules, con unos zapatos bajos negros de piso. También estaba un hombre muy alto y corpulento, de cabello negro muy largo ojos grises con un kimono verde con rayas negras, una bufanda rayada cubriendo su boca, sandalias de madera, actitud seria y aspecto rígido.

—Haruno-san ¿Cierto?— pregunta la mujer con una sonrisa.

—Si soy yo ¿que necesitan?

—Mi nombre es Mariko. Mucho gusto. Mi jefe se llama como Omoide Honokori, es un admirador de su trabajo, me pidió que hablara con usted, Honokori-sama tiene pensado ayudarla monetariamente en sus investigaciones.

—Eso es demasiado repentinos— Sakura se queda atónita por sus palabras.

—Solo déjeme continuar... Mi jefe quiere retribuirle algo a la sociedad y tiene conocimiento de lo que usted ha logrado, una de las más poderosas kunoishis y de las mejores ninjas médico que existe. Al comienzo le intereso sus nuevos avances en regeneración celular pero sobre todo quedo sorprendido con su nuevo proyecto... TEPT (Trastorno de estrés post traumático.) Es un trastorno grave y cuando se trata de infantes que no deberían vivir la vida con miedo es desolador. A mi jefe le agrada ver su decisión por ayudar a esos niños… —la joven hablaba de forma dulce.

—Espere, esto es repentino. — Sakura interrumpió a la mujer.

— Pero Haruno-san, está es una excelente oportunidad para usted. — la mujer quedo extrañada por la negativa

—Puede ser pero ni siquiera conozco a Honokori-sama, perdón pero no puedo aceptar así .

—Tal vez se lo piensa un poco.

—No creo, lo pensaré pero no le prometo nada. — Sakura trataba de terminar la conversación

— Bueno pero Honokori-sama está dispuesto a hablar con usted.

—No creo que cambien las cosas, no quiero darle falsas esperanzas. — Sakuta trataba de alejarse.

—Aún no me rendiré Haruno-san. — Sakura regreso aturdida al hospital dejando a los visitantes afuera.

—Parece que no será tan fácil convencer a esa mujer. — Por fin hablar el hombre sin una emoción en especial.

—No creo que ella se resista, aun así no se ve tan fuerte como dicen. —decía la mujer más sería.

—Mariko-chan es hora de irnos.

—Bien Seiki-san. — la mujer mostraba una sonrisa dulce.

Entre las sombras un hombre observaba a los individuos.

—No me agradan esos tipos... y si se meten con Saku-san me las pagaran— decía el hombre.

Continuara…
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He aquí el nuevo capítulo gracias por sus comentarios y por seguir leyendo esta historia.

Esta canción me gusta aunque odio el final y queda bien para el momento.

alexad_uzumaki: Gracias por seguir leyendo y por los lindos. Por lo de tu duda, lo de Kakashi destituido de su puesto es por el hecho de que antes de que Sasuke dejara la aldea Kakashi dijo que si hacia algo malo él también tendría represalias (refiriéndonos a Kakashi).

CerezoIntenso: Gracias por seguir esta historia y tus lindos comentarios.

NaruSannin: Gracias por tu comentario y espero que sigas intrigado.


Sin más me despido gracias por leer el capítulo, sigan comentando.

Matta nee.

debo de admitir clari, que me dejaste muuuy intrigada, la verdad, yo dije: esos dos no me agradan y menos esa forma "dulce" y sonrisa "dulce" de esa mariko...Pero me intriga saber el hombre que los observaba y que no dejara que les hagan algo a sakura espero pronto lal conti. Besos*

esta muy bueno espero conti...

ah clari ahora si entiendo un poco nos vemos...

quien será el hombre

Gran cap clari, fianlmente he tenido tiempo de leer los fics, veamos como se desarrolla la trama, sigue asi.

Continua igual de intrigante que el anterior capitulo, eso me agrada, ¿Quienes serán esos "enviados" para "ayudar" a Sakura? y ¿Quien los estaba escuchando? varias preguntas pocas respuestas las cuales esperare con gusto jeje. Suerte con la conti que aquí la espero con ganas. Adiós.

Hola de nuevo, aquí les dejo el nuevo capítulo, gracias a CerezoIntenso (Eres una amor, me encanta tu entusiasmo), alexad_uzumaki (Gracias por pasar a leer este fic y la curiosidad), kuramaizanagi (Que emoción que volviste a leer mi fic) y NaruSannin (me encanta mantenerte intrigado y tratare de seguir así).

Y felicidades a arminus por su próximo cumple, si lees esto feliz cumpleaños, pásatelo súper.

Sin más, aquí está el capítulo 6.

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Uzumaki: crónicas de amor y lucha.



Capítulo 6: nuevas amistades y sentimientos encontrados.







Después de una interrupción extraña y una proposición más extraña y preocupante de un completo desconocido Sakura entró al hospital y, como era de esperarse, Ino estaba justo en la entrada esperándola para saber qué había pasado.

—Hey frentona ¿qué querían contigo?— Ino tenía curiosidad por la mujer y la cara de confusión de Sakura.

—Una completa locura.

— ¿Cómo?— pregunto Ino aún más intrigada.

—Si... esa mujer me dijo que su jefe quería financiar mis investigaciones — Le contesto Sakura con molestia.

— ¿y que le dijiste?

—Claro que me negué.

— ¿y por qué no aceptaste?

—Porque era una locura Ino, es demasiado dinero y ni siquiera lo conozco.

—Creo que te complicas la vida— dijo Ino con tono de aburrimiento cosa que a Sakura no le cayó en gracia.

—Cállate Ino cerda— dijo Sakura enojada.
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Naruto se despertó animado a pesar de su insomnio.


Se puso su chaqueta naranja y sus pantalones negros casuales para pasar un mañana fresca. Salió de casa sin un lugar en especial a donde ir.

—! Que Baka...! !No le pregunte donde se iba a quedar!— se recriminaba el rubio al recordar de que no sabía dónde pasaría la noche su nueva conocida y por no preguntar siquiera si tenía un lugar donde quedarse.

Después de preguntarse por un rato que hacer decidió buscar a Shikamaru, ya que él era, al parecer, quien la conocía más.

Llego a casa de Shikamaru rápidamente y lo encontró saliendo de esta.

—Shikaaaaaaamaruuuuuuu— grito el rubio para llamar la atención del castaño.

Shikamaru volteo, lo miro con extrañes. — ¿Qué quieres tan temprano Naruto?— pregunto con cara de fastidio.

—Hola, quería preguntarte si sabías donde se quedaría Kanna-nee, es que quería verla— el castaños se extrañó más, era alguien a quien apenas conocía y estaba muy interesado en ella.

—No tengo idea Naruto no soy su niñera.

Naruto se desanimó pero luego se le ocurrió algo más. —Kakashi sensei seguros sabrá algo ¿cierto?— le dijo a Shikamaru.

—No lo sé— Shikamar le responde molesto, aun así acompañó a Naruto a la oficina de Kakashi,

Después de un corto camino hablando de cosas sin importancia y regaños de cómo el rubio eran distraído llegaron a su destino.

El Hokage se encontraba trabajando, revisando su montaña de papeleo cuando fue interrumpido por su alumno.

— ¡Kakashiiiiiiiii senseeeeeeiii!— Gritaba Naruto incluso antes de llegar a la oficina, entro corriendo como loco. —Kakashi sensei ¿usted sabe dónde se está quedando Kanna-nee?

Kakashi se quedó perplejo por la pregunta y cómo llegó el rubio, después de unos minutos de explicación Kakashi, no muy convencido, le dio la dirección donde se estaba hospedando la pelirroja.

Naruto dejó la oficina feliz porque ya sabía dónde buscar a la chica y aún tenía tiempo para el “tour”.

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En el hospital de Konoha se encontraba Sakura revisando a un jovencito que ella conocía muy bien desde hacía unos años.

—De nuevo te dislocaste la muñeca— Sakura se notaba molesta— es la tercera ves del mes que llegas con una contusión, tienes que tener más cuidado Makoto— Sakura regañaba al joven.

Un muchacho de unos 15 años, tez ligeramente bronceada, ojos azules obscuros, cabello castaño algo largo y alborotado.

-Disculpe que le dé tanto trabajo Saku-san, es que soy nuevo en esto y mi padre insiste en que aprenda la profesión, así podré seguir con la carpintería. — Le decía el joven algo avergonzado por los regaños.

—Ten más cuidado la próxima vez. Pero para ti debería ser fácil, ¿No has pensado en regresar a ser shinobi?

—No... Aunque me gustaría, ya no hay mucho que pueda hacer y mi padre está más tranquilo con que yo me encargue del negocio de la familia, sin tantos riesgos, jeje pero al parecer muchos accidentes.

El joven estaba con una mirada seria mientras hablaba, se notaba que no era algo que hiciera por gusto a pesar de que se riera. Aunque rápido puso una sonrisa muy grande.

— ¿Puedo invitarla a comer?, como agradecimiento claro. —dijo el joven Makoto.

Él se veía animado con las manos juntar rogando por que no se negara, no era la primera vez que el intentaba invitarla a algún lugar, como era de esperarse siempre se negaba pero en esta ocasión llevaba semanas sin salir a algún lugar por diversión.

—Está bien pero ¿enserio puedes invitarme? no quiero dejarte en bancarrota.

—No se preocupe Saku- san tengo mucho ahorrado, no se arrepentirá.

Por primera vez le dijo que si al muchacho y él estaba feliz de la vida.

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Naruto llego al lugar que Kakashi le dijo, toco la puerta de un departamento y nadie contestó. Le preguntó a la encargada si había visto a una mujer pelirroja con ojos café claro y muy bonita, la mujer le contestó que si se estaba hospedando en el lugar pero salió temprano en la mañana.

El pobre de naruto ya se estaba resignando hasta que una voz conocida llamo su atención.

—Naruto-sama no lo había visto por aquí antes, ¿por qué tan triste?— Le preguntaba una anciana mujer.

Era una vecina de Naruto, señora de unos 85 años aunque muy fuerte, con cabello largo y blanco recogido con una coleta, de ojos color café, era viuda y vivía sola desde algunos años atrás por que sus hijos ya habían crecido y formado sus familias.


—Buenos días Kaede baa-san, buscaba a una amiga pero no la encontré, ¿y usted que hace por aquí?

—Compras como cada semana, ¿busca a la jovencita con la que estaba paseando ayer por la tarde?— preguntaba la señora.

—Si ella ¿cómo supo?

—Los vi ayer mientras paseaba por los locales cerca del edificio del Hokage, creí que salía con Hyuga-chan.

—Le he dicho varias veces que no... Solo somos amigos. — le contestaba el rubio rodando los ojos.

Era algo molesta por que en repetidas ocasiones le había preguntado si le haría caso a “hyuga-chan” o comentaba que harían bonita pareja, a lo que que el rubio amablemente decía que solo eran amigos. La respetaba y no decía nada mas porque era una buena persona y desde antes de la guerra se preocupaba por Naruto y a le gustaba ayudarla con su jardín.

—Creo que la vi hace un momento en la academia, pero no creo que sea de su tipo Naruto-sama.

—Solo somos amigos, hasta luego Kaede baa-san, iré a buscarla, gracias. — y el rubio se fue de camino a la academia.

Llego en poco tiempo a la academia. Entro al edificio y empezó a buscar por los pasillos, la encontró rápido ablando con alguien especial para él.

— ¡Iruka sensei, kanna nee-chan, Hoooola!— gritaba el rubio mientras corría por el pasillo interrumpiendo la plática.

—Naruto no corras por los pasillos— le regañaba Iruka exaltado.

—Gomen— contestó el rubio avergonzado por el arrebato.

—Disculpe las molestias y Gracias por la ayuda Iruka-san— decía la chica.

—No es ninguna molestia— le contestaba iruka a la chica amablemente y luego volvió a ver al rubio —¿qué te trae por aquí Naruto?— preguntaba amable.

— Bueno la buscaba a ella pero es agradable verlo sensei.

—Entonces tengo que volver a dar clase, te veré luego Naruto, pero no andes corriendo como loco por todos lados. — Iruka regreso a sus labores.

— ¿Me estabas buscando?— preguntaba confundida la pelirroja.

—Sí, toda la mañana, no te encontraba— decía Naruto nervioso.

— Bueno estaba ocupada.

— ¿Y qué hacías nee-chan?—El rubio preguntaba curioso.

—Es personal. — solo eso dijo la pelirroja, Naruto se quedó intrigado pero no preguntaría más... aun.

—Bueno, ¿Estas ocupada ahora?

—Creo que ya no ¿por qué?— la chica se extraño

— Es que quiero preguntarte si quisieras dar un paseo conmigo, mostrarte la aldea, sólo como amigos... no creo que hayas ido a divertirte por aquí— Naruto estaba nervioso no había invitas alguien a pasear.

La chica se sorprendió y por un momento iba a dudar pero acepto.

—Está bien, será divertido. Como amigos está bien. — dijo la joven con una sonrisa.

Así que la llevó a todos lados, parques, tienda de ropa, dulces, tiendas de armamento, áreas de entrenamientos, casas de Té, etcétera, en el transcurso del día le contaba de la aldea y de las personas que conocía, los que ha ocurrido e incluso de los Hokage.

Después de varias horas de pasear el rubio se dio cuenta de que ya era tarde y era hora de comer.

— ¿Tienes hambre?— preguntaba el rubio a la chica, ella asintió y contestó —bastante.

—Es momento para llevarte a mi lugar favorito en todo Konoha.— decía Naruto orgulloso.

—Déjame adivinar, Ichiraku ramen.

— ¿Cómo supiste?

—Ya me habías platicado.

—A Ichiraku entonces. —

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Después de un largo día Sakura por fin terminó su turno en el hospital, se dirigía a su casa cuando de repente se encontró al muchacho.

—Sakuuuuu-saaaaan— gritaba Makoto mientras corría rápidamente hacia ella, se acercó y la tomo del brazo.

—Ya es hora de irnos, no lo olvido ¿cierto?

—Claro que no— Sakura movió las manos nerviosamente— “Rayos, si lo olvide”— pensaba La peli-rosa avergonzada— Y ¿a dónde iremos?— preguntó.

—A un lugar a tres cuadras del parque Fuji, tienen el mejor sushi que pueda probar, y el Yakisoba y el Okonomiyaki son deliciosos.

—“Es la misma calle que Ichiraku, ¿Naruto estará ahí hoy?”— pensaba Sakura con un semblante triste.

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Naruto y Kanna habían llegado a ishiraku y tomaron asiento en la barra.

—buenas tardes Naruto, ¿tú y tu amiga que van a ordenar? — preguntaba teushi.

— ¿Qué se te antoja Kanna-nee?— preguntaba Naruto a la chica.

—No lo sé, mejor ordena tú, eres el experto.

—Bueno… mmm… Dos de cerdo con Mazo no olvides el Narutomaki— ordeno muy animado el rubio lo que hizo reír a la chica.

—Parece que tienes la ramen en la sangre y no solo en el nombre.

—Mi padrino estaba buscando un nombre para el protagonista de una de sus libros y se le ocurrió comiendo ramen, luego mi padre leyó el libro y le gustó tanto que quiso que ese fuera mi nombre. —Naruto contaba feliz.

— Interesante y ¿tienes familia?

— Tristemente no, mis padres murieron poco después de que nací.

—Como lo siento, no debí preguntar.

— No hay problema, es parte importante de mi vida pero no me puedo deprimir, sé que dónde se encuentren están orgullosos de mí. ¿Y tú tienes familia? —La sonrisa del rubio era muy enérgica.

—Algo así, mi madre murió cuando nací, mi padre también cuando tenía cinco años, era muy pequeña pero lo recuerdo bien, tengo algo así como un tío sobre protector y una amiga que es como mi segunda madre, aunque no los veo seguido, viajo mucho, pero están ahí cuando los necesito, y yo igual para ellos.

—y a todo esto, ¿De dónde eres?

—Técnicamente soy de todas partes, depende de dónde me necesiten

— ¿Por qué no te había visto antes?—preguntaba el rubio con curiosidad.

— Es que no me necesitan aquí en Konoha cuando te tienen a ti y a Uchiha Sasuke— contestaba la chica como si fuera lo más obvio. — Por cierto podrías contarme de él.

—mmm... ¿Por qué?—Naruto se veía algo incómodo o molesto, no sabía si era por recordar que Sasuke se fue, o porque no está y aún preguntan por él.

—Sólo curiosidad, son celebridades en el mundo Ninja al igual que su compañera… ¿Harumo Sakura?— Kanna se quedó pensando unos segundos si ese era el nombre.

—Haruno... Haruno Sakura— Al rubio con sólo mencionar su nombre se le ilumino el rostro.

— ooooh... con que así era, mi amiga, de la que te hable, es Ninja médico pero se enfoca en el aspecto psicológico, ella no paraba de hablar de Haruno Sakura, es como su ídola, en serio. — Kanna se alegraba de hablar un poco de quién consideraba su segunda madre.

—Sakura-chan es mi mejor amiga.— Naruto empezaba a platicar de Sakura muy eufórico.— es encantadora, hermosa y muy inteligente; tiene un corazón enorme y es muy talentosa; también es un poco temperamental pero le ha servido mucho para mejorar y hacerse fuerte; es la mejor ninja médico que existe en el mundo; también es experta en crear curas para venenos, ella sabe muchos de plantas medicinales, también es hábil en el combate y ha salvado mi vida muchas veces; ella es sorprendente ¡Dattebayo!— Naruto estaba feliz de hablar de su Sakura-chan. —y Sasuke puede parecer antipático y algo soberbio, pero es alguien fuerte y mucho, ha tenido una vida difícil y cometido errores pero ha sabido cómo cambiar su vida. Como shinobi es excepcional, era el mejor de la academia y me derroto muchas veces, tiene un talento natural para esto. — Naruto contaba un poco de la vida de Sasuke con algo de nostalgia— es como mi hermano, aunque no nos llevábamos bien al principio, nos reconocimos como rivales y creó que entendimos el dolor del otro y eso nos unió, no sé dónde está en este momento, dicen que regresara pronto, podría presentártelo y a Sakura-chan... si quieres.—

—Sería interesante— decía la chica aunque se notaba triste por los sentimientos del rubio.


—Pero bueno... basta de nostalgia, hay que recordar los buenos momentos y crear nuevos. — Naruto sabia como animarse y seguir sonriendo, Kanna lo noto y le agradaba ver a alguien así.

Estuvieron un rato ablando de cosas triviales de la vida del rubio y los lugares que Kanna había visto.

En ese momento Sakura caminaba por la calle acompañada por Makoto, el muchacho estaba contento platicando de su padre y como era exageradamente bromista y sobre protector. Sakura lo miraba y sonreía, en el momento que llegaron al restaurante y antes de entrar, oyó una risa conocida, en un segundo se dio cuenta quien era.

—Makoto ¿me esperarías un momento? quiero saludar a un amigo—

—Claro Saku-san— El muchacho asintió y Sakura corrió unos locales más adelante, era obvio que estaría en Ichiraku, iba a entrar pero la imagen no era agradable y decidió esconderse a un lado del local.

— ¿Quién era ella? jamás la he visto... ¿Tiene una cita?... pero si nunca tiene citas. —pensaba la peli-rosa extrañada de lo que acababa de ver, decidió observar de nuevo, vio a Naruto muy feliz y vio con detenimiento a la chica, era bonita con rasgos delicados, se notaba ejercitada pero no con una exagerada musculatura, probablemente shinobi.

—Parece que está ocupado— pensaba seria para sí misma la peli-rosa, resignada decidió regresar al restaurante con Makoto. Él ya había escogido una mesa.

El lugar era acogedor aunque era pequeño, con pisos de madera, paredes color rosado pálido, sillas y mesas de madera y de color negro y muchas ventanas, entro al lugar intentando verse feliz.

—Y bien Saku-san ¿Encontró a quien buscaba?

—Emm... no, me confundí de persona— decía tratando de sonar despreocupada.

Minutos después Naruto y Kanna salieron de Ichiraku pasando enfrente de donde estaba Sakura, ella solo miró de reojo tratando de no ser obvia y procedió a empezar a comer.

Ella y Makoto hablaron de cosas del día y cómo iba la muñeca del muchacho, después de comer algo de Sushi y Amitsu de postre Sakura decidió que era hora de ir a casa.

— Segura que no quiere que la acompañe.

—Segura, puedo cuidarme sola y vives al otro lado, nos veremos luego, pero espero que no en consulta— Sakura se despidió sonriendo pero no se veía tan feliz

—Está bien cuídese Saku-san— Sakura asintió y el muchacho resignado la dejó ir.

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Naruto y Kanna estaban de camino al lugar donde las chicas se estaban quedando, llegaron rápido.

— bueno creo que tengo que irme. — decía el rubio con una sonrisa de lado.

— sí, es hora, pero te veré luego, no sé... tal vez mañana yo sea quien te busque— la chica decía animada.

—eso sería bueno, entonces hasta luego Kanna-nee.

— Hasta luego Naruto-nii.

Naruto se retiró del lugar con preocupación, sentía algo extraño que lo incomodaba pero siguió adelante y no le tomó importancia.

Kanna entró a la casa, cerró la puerta y una silueta oscura se hizo presente, alguien la esperaba.

—¿Dónde estabas?— la voz de un hombre enojado se hacía presente.

— Afuera.

—Sabes a lo que me refiero, los encontraste.

—Sólo al Uzumaki, Uchiha aún no aparece.— la joven sonaba de decepcionada.

— Por lo menos le explicaste que está en riesgo

— Llegué tarde, ya le hicieron algo pero necesito que me expliques qué, ¿cómo explicarle algo que ni siquiera yo sé? y Kurama quiere verte.

— ¿quien?

— El kyubi, su nombre es Kurama, quiere verte y se ve enojado.

— Bien, mañana, por ahora tienes que descansar y rehacer el sello, se está desgastando.

La sombra desapareció dejando a la mujer sola en la casa a oscuras


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Sakura entró a su casa, todos estaban dormidos, fue directo su habitación y se recostó en la cama, se sentía pesada, agotada y aturdida.

— Él se veía feliz, es algo bueno... entonces... ¿por qué me siento tan mal?—seguía recordando las sonrisas que Naruto le dedicó a esa chica— aun así sigue teniendo la más linda sonrisa— Sakura sonrió un poco antes de quedarse dormida.


Continuara...

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que bonito clariiii...que misterio el de ese hombre que se le aparece a kanna, y tambien lo que quiere con naruto y sasuke. Orale, me tienes pensativa jeje y sakura, bueno, sakura ya como que esta sintiendo ese sentimiento de cuando te duele ver que la persona que es especial para ti, le sonrie a otra que no eres tu. Quiero mas!!

-One-chan... ¿Ya leíste este cap?- me pregunto mi inner.
-Déjame, que no vez que lo estoy acabando de leer- le respondí molesto por interrumpir mi labor.
-¡¿Y que descubirste?!-
-Que enfadoso eres- dije con desgano.
-No me digas que no notaste algo-
-Si, que hada un chiquillo rondando a Sakura y Naruto anda de coqueton con esa chica Kana, ademas esta oculta algo... Contento-
-¡Exacto...!-
-Inner por favor, cállate, que va a pensar Clari...-
-Que esperamos la conti con muchas ganas para saber más-
-Bueno me disculpo por mi Inner enloquecido, adiós y tal y como dice él, esperando conti jeje-

Uzumaki: Crónicas de amor y lucha.



Capitulo 7: El inicio del asecho.


Naruto empezaba un día tranquilo, tal vez demasiado. Aun pensaba en la sensación extraña del día anterior.

Salió de la cama con todas las energías del mundo, desayunó Ramen y un vaso de leche, raro y mucho, pero así le gusta a él.

Salió de casa a entrenar esperando que el tiempo pase rápido pero no fue así. Termino siendo medio día, agotado pero aun demasiado libre de tiempo, ya no sabía qué hacer.

— ¿Que estará haciendo Sakura-chan?— se preguntaba para sí mismo recostado en el pasto. — Tal vez debería... no, no, no... Tengo que dejar de molestarla ttebayo. — se regañaba a sí mismo.


Irónicamente desde que decidió alejarse de la peli-rosa, es cuando más falta le hacía. Cada día recuerda su rostro, sus gestos, su voz, o la forma en que sujeta su cabello cuando piensa en cómo salvar una vida, el tono de su voz cuando le esta regañando o la sensación de su puño en los músculos de rubio cuando la hacía enojar o decía algo que la avergonzará, incluso la forma extraña en que se toca la frente cuando esta frustrada, esa frente amplia y encantadora que en más de una ocasión a tenido el deseo de plantar aunque sea el más pequeño beso aunque durara solo un segundo.

Decidió ir a casa, y arreglar ese "desastre" que tenia, nunca ha sido muy ordenado que digamos pero recordaba algo que le dijo su amada peli-rosa. Casa ordenada mente ordenada, y ahora su cabeza necesitaba orden.

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Un día tranquilo para unos, para otros es un espiral ascendente de preocupaciones con ese eran tres días de presión para una peculiar peli-rosa.  

Era su día libre pero Ino decidió que lo pasarían juntas, así que ahí estaba, esperando sentada en la banca de un parque a que la rubia llegara, pensando en conflictos, proposiciones y... sentimientos.

— ¡Hey frentona!— gritaba Ino apareciendo detrás de Sakura, interrumpiendo sus pensamientos, aún así ella ni se inmuto solo rodo los ojos.

— ¿Que tratas de hacer Inopuerca?

—Nada, solo te veías pensativa y quise ver que tan distraída estabas y ¿que transcurre por esa frentesota hoy?— le contestaba Ino mientras se sentaba en la misma banca.

—Nada— le contesto Sakura suspirando.

—Como que nada, se te nota, no es como otros días. ¿Cómo le fue en su cita ayer señora asalta cunas? —Decía la rubia con una risa burlona.

— ¡¿COMO QUE ASALTA CUNAS, QUIEN CREES QUE SOY INOPUERCA?!— chillaba la peli-rosa con una cara de ira mostrando dientes puntiagudos y aterradores.

—Ya... ya... está bien, solo era una broma— Decía nerviosa la rubia pero ya estaba acostumbrada a hacer a Sakura enojar. — pero ¿cómo te fue?,— Ino aun estaba curiosa de saber que paso para que tenga ese ánimo.

—mmm... bien... creo, estaba rica la comida y estar con Makoto es divertido.— Le decía Sakura con una cara seria, con su brazo recargada en su pierna y su mano en su mejilla, las palabras de la peli-rosa  no estaban acorde a su expresión.

—Le gustas al muchacho.

—Claro que no, solo está agradecido. Lo conozco desde hace 7 años y lo he ayudado como ninja y como médico.

Ino asintió y pregunto.

— ¿Entonces qué pasó?, ¿por qué tan triste?— Ino estaba preocupada, era normal verla enojada o estresada pero no triste y menos así.

—Estoy bien— Sakura le contestaba con el mismo tono.

—mmm... no te creo nada.— Ino frunció el seño y se quejó pero luego le dedicò una sonrisa.— vamos por algo dulce, si.

—Está bien— Sakura sonrió por primera vez en todo el rato y se levantaron de la banca para buscar donde comer algo que le levante el animo a la ojiverde.

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En una casa abandonada justo en los límites de la aldea, un pergamino largo traía al lugar en una nube de humo a un joven perturbador y conocido.


— ¿Que necesitan de mi?— Decía el muchacho castaño con una sonrisa.

—Solo encuentra al jinchuriki y provócalo un rato. —Le decía una mujer con una máscara blanca de zorro con detalles rojos.
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En alguna parte dentro de la aldea, en una habitación obscura, un pergamino similar al anterior trajo en esta ocasión a una mujer.

—y ¿cuál es el objetivo?— preguntaba la mujer ojiperla con seriedad .

— Haruno Sakura... sólo pruébala, averigua si nos es útil, si tienes el talento. Haz lo que sea pero no la mates, entendido?— decía un hombre con una máscara del Zorro similar.

— Hacen que me aburro. Pero bueno, tal vez sea divertido... entendido. —

— otra cosa, no hagas tanto alboroto.

—pff— resoplaba ella rodando los ojos— está bien— respondió sin ganas.

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Ya más tarde estaba naruto terminando de limpiar, acomodando los artículos de limpieza cuando una explosión llamo su atención.

— ¿Que está pasando ahí afuera?— Se preguntaba el rubio poniéndose su ropa de entrenamiento y saliendo de su casa rápidamente.

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Una joven de cabello rojizo caoba se encontraba revisando documentos en una habitación llena de cajas y archivos.

Después de explosión,  la joven desapareció de la habitación en una nube de humo y apareció encima de un tejado para visualizar que estaba pasando.

—Se siente como el muchacho nuevo de esos locos. —  pensó Kanna.

— Le gusta crear problemas— la voz del hombre de la noche anterior se hacía notar en los pensamientos de la chica.

—tengo que detenerlo.
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Y en otro lado dos jóvenes mujeres estaban comiendo Dango con té. La rubia intentaba animar a la peli-rosa y la peli-rrosa trataba de animarse pero simplemente no podía.

Luego notaron la explosión.

— Ino... parece haber problemas.

Una preocupada peli-rosa se levanta de su asiento, Ino no dijo nada sólo se levantó con la intención de seguirla.

Sólo caminaron unos metros cuando una kunai  roso la mejilla de Sakura haciéndola detenerse. Ella volteó y observó a una mujer encima de un poste.

— ¡Sakura haruno! —gritaba la mujer de ojos perla llamada Ren— ¡Gusto en conocerte, Me han hablado mucho de ti!

—¿qué es lo que quieres?— preguntaba enojada la peli-rosa.
— Quiero una pelea... Muéstrame lo que tienes—  contestaba con altanería la joven de ojos perla activando su byakugan.

Bruscamente bajó del poste se acercó a Ino que estaba más cerca. Trató de golpear en el pecho, está lo detuvo pero la mujer giro con velocidad y dio varios golpes en la espalda de la rubia que quedó inconsciente.

— ¡Ino!—Gritaba la peli-rosa preocupada por su amiga.

—Solo tú y yo... ahora... sin entrometidos... no te preocupes, ella solo duerme.

— ¿Tu provocaste esas explosiones?

—No... Pero se quien sí.

— ¿Que pretenden?— preguntaba Sakura irritada.

—Solo jugar. — respondía la mujer restándole importancia.

—Bien, si no quieres espectadores se a donde ir.

Una sombra vigilaba lo ocurrido, solo observando.
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Un  shinobi de Konoha de gran musculatura se acercaban pero el castaño lo golpeo con fuerza y , al instante, un pico de hueso grueso y puntiagudo atravesó el  brazo al hombre de lado a lado.

— Insignificante. — dijo el muchacho burlonamente.

— ¿Quieres a alguien más hábil?, ven por mí. — Naruto llegaba al combate bajando del tejado de un edificio.

— Eso fue rápido, creí que jugaría con ellos un rato mas— pensaba el joven mientras corría hacia Naruto para dar el primer golpe.

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En la parte sur de Konoha una peligrosa área de entrenamiento fue reconstruida. El llamado bosque de la muerte fue reubicado a un área mas apartada y ampliado después de que la aldea fuera devastada.

En un punto con terreno despejado llegaron dos mujeres con la intensión de derrotarse una a la otra.

Esta vez Sakura salto con la intensión de atacar a su contrincante. Ella lo noto y esquivo el golpe, este llego al suelo dejando un enorme hueco.

Ren apareció detrás de Sakura tratando de darle una patada en la espalda. Sakura la esquivo girando.

La peli-rosa se disponía a darle un golpe en el pecho pero la mujer lo detuvo con los brazos.

Sus golpes, aquellos que rompían rocas y pulverizaban huesos parecían no provocarle daño.

— eres fuerte niña... pero no seré fácil de vencer— decía Ren con tono burlón.


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El chico era imprudente, agresivo, con golpes torpes, pero velos. Aun así para Naruto no era algo tan especial. Podía esquivarlo con facilidad, pero al rubio le perturbaba la actitud del joven, este no quitaba la sonrisa de su rostro en ningún momento.

Naruto lo golpeo en el estomago, el joven saco huesos delgados en punta de su estomago, Naruto quedo con rasguños pero aun así termino dándole una patada haciéndolo retroceder y provocándose a si mismo rasguños en la pierno.

El chico no se mostro lastimado, ni el mas mínimo gesto de dolor pero su sonrisa se hacía más grande aun.

— Alguien me conto de ti... creí que eras más fuerte.

—No te he mostrado todo— Naruto se mantenía firme, viendo a detalle todos sus movimientos, no permitiría que lo sorprendieran otra vez.
Pero algo en él lo tenía con una sensación helada en la espalda, se sentía molesto, tal vez demasiado al ver lo que el muchacho causo.

— ¿qué haces aquí niño? — Dijo una chica pelirroja llamando la atención de los involucrados.

—oooh, Kanna-san, que gusto verla de nuevo— el joven saludaba con tranquilidad.

—te repito, ¿Que quieres? — Kanna preguntaba molesta bajando de un tejado y observaba a Naruto de reojo notando una peligrosa aura.

—solo diversión, nada mas Kanna-san.- respondía con tranquilidad.

—Parece que también jugaron contigo- decía la mujer con tono serio.

—¡Chi bunshin no jutsu!- dijo el muchacho haciendo barias posiciones de manos, en una nube de humo apareció una copia de él. Sin dar oportunidad de decir nada más el muchacho y su copia se dividieron a enfrentar a sus contrincantes.

—Con que quieres jugar con clones, entonces juguemos. !Kage bunshin no jutsu!. — Naruto usaba su jutsu mas común pero muy útil. Cinco clones atacaron a su contrincante. Este  los golpeaba y para rematar los atravesaba con puntas de hueso que salían de sus nudillos y de sus codos en ocasiones.

Naruto estaba extrañado, 10 de sus clones contra uno de él y estaban a la par. Luego veía de reojo la pelea al otro lado.

Kanna lanzó un pergamino al suelo, de él salió una chokuto (espada de filo recto)con funda y mango aparentando una sola pieza, color blanca con una línea negra en el centro.  La chica tomo la espada y el pergamino desapareció. Coloco la funda en su cintura y desenfundó el arma. El joven uso los huesos de sus dedos los como proyectiles cada uno detenido por la chokuto de la joven.
—je no son más veloces que una shuriken— se burlaba la mejor cosa que a el joven no pareció afectarle. De su hombro saco una espada hecha de hueso y se dispuso a atacar. La espada no parecía afilada ni dura pero las apariencias engañan. A pesar de la fuerza que ejercía el metal a  la espada de hueso parecía estar lejos de ser atravesada y también era muy afilada.

El joven movía la espada de  un lado al otro. Kanna se defendía con velocidad, de repente la pelirroja noto una esencia diferente.

— No vienes solo cierto.

— Tendrás que averiguarlo después.

El joven movía de un lado al otro la espada. Kanna se defendía de cada sablazo . Intento desviar la espada del muchacho y trato de derribarlo dándole una patada en la pierna pero este no se movió. De su pierna salió un hueso en punta, Kanna logro moverse pero el hueso roso su piel dejando ver que el hueso era muy afilado.

Al otro lado Naruto seguía atacando al aparente clon con más de sus clones de sombras. Su paciencia se estaba acabando.


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A lo lejos en una parte del nuevo bosque de la muerte dos kunoichis estaban en enfrentamiento más brutal.

Una lluvia de golpes y padas se hacían presentes. Sakura golpeaba a la mujer con fuerza pero ella soportaba de una forma particular los ataques.

La ojiperla intentaba darle una patada a Sakura por detrás con gran velocidad. La peli-rosa lo noto y lo esquivo tratando de darle una patada en el pecho.

La ojiperla giro acertando un toque en la espalda de Sakura en el hombro izquierdo, ella se movió rápidamente empezando a sentir un dolor quemante y punzante. Empezó a sentir adormecido el brazo también apareciendo un delgado hilo de sangre en su brazo donde se origino el dolor.

La ojiperla tenia los dedos manchados de sangre ¿pero cómo? se preguntaba la peli-rosa confundida. La herida era pequeña y el ardor era razonable pero el adormecimiento no era por veneno, ella era resistente a los más letales y ninguno actuaria tan rápido en ella.

— Shanarooo— Sakura salto hacia la mujer, bajo con fuerza con su puño con chakra, preparado.

La ojiperla se movió evitando el golpe de la peli-rosa, este destruyo el suelo y varios árboles aledaños a varios metros de distancia, la mujer se movió entre las rocas removidas.

Sakura del suelo movió una gran roca y la lanzo hacia la mujer. Esta se defendió con los brazos del golpe de la roca, este no parecía afectarle.

Se acercaron la una a la otra. Empezaron a intentar golpearse. Cada golpe o patada era desviado por un tiempo.

Por un instante la mujer bajo su guardia dejando expuesto su costado derecho, Sakura la golpeo, en esta ocasión la ojiperla se quejo de dolor, a pesar de la incomoda sensación, la mujer se reincorporo rápido golpeando el pecho de la peli-rosa. Sakura empezaba a  respirar con dificultad, necesito usar chakra para recuperar sus heridas.

La situación era extraña para la peli-rosa. Por complexión, apariencia y esos ojos se notaba que la mujer era miembro del clan más conocido y respetado en Konoha pero su forma de pelea no era normal.

La mujer aprovechaba al máximo su doujitsu, tratando de acertar cada golpe en puntos vitales del flujo de chakra pero ella no usaba el puño suave como el resto de los miembros del clan Hyuga, aprovechaba toda su fuerza para, además de causar daño en el flujo de chakra, castigar lo más posible los músculos y huesos.

Pero aun habían cosas que no se podía responder, la herida que le provoco hacia unos minutos en la espalda, ¿como podía herirla así?, parresia ser provocada por una aguja pero ella no utilizó armas en ningún momento y el último golpe que Sakura logro darle no hiso el daño esperado, la peli-rosa noto algo extraño en sus costillas, especialmente duras.

—Ni siquiera me has dicho tu nombre— dijo la peli-rosa rompiendo el incomodo silencio tratando de sacar información de su atacante.

— Que grosera soy— respondió burlonamente la mujer muy sonriente- Me llamo Ren, Amaki Ren, mucho gusto, pero sigamos me estoy divirtiendo.

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Naruto continuaba peleando con el aparente "clon", un ser resistente  y demasiado emocionado, con una sed de pelea temible, se reía como loco cada vez que derrotaba a un clon de Naruto asiéndolo desaparecer, daba miedo pero a Naruto le molestaba en gran medida.

Se canso de esperar y se acercó al "clon" para acabarlo de una vez.

-¡Rasengan!- Grito el rubio saltando y preparando la poderosa técnica para atacar al muchacho.

Este logro esquivarlo, Naruto cayó al suelo enojado, desasiendo su Rasengan.

Al otro lado de la calle la pelirroja estaba defendiéndose de la espada del muchacho, la chokito de la chica era fácil de mover y afilada, pero el detalle de los huesos saliendo del cuerpo del muchacho hacían complicada la situación.

— No puedo hacer jutsus, seria demasiados daños colaterales. — pensaba la pelirroja defendiéndose con su espada, el muchacho no se detenía.

Cada rose entre las espadas era una oportunidad para acercarse suficiente y golpearlo por otro lado pero cada intento provocaba un daño grande.

Repentinamente algo llamo la atención del muchacho, la mujer con máscara de zorro blanco observaba a lo lejos dando una señal, el muchacho por un segundo se "descuidó", tiempo suficiente para que la pelirroja lograra acertar una estocada.

El joven se quejo de dolor pero con una sonrisa desapareció en una nube de humo.

En el otro combate Naruto seguía haciendo clones, de 10 fueron 15, luego 20 atacando al muchacho que ya no decía nada solo reía.

Naruto observaba el final de la pelea al otro lado. —Con que eres el original. — pensó el rubio comben sido de que ése era el motivo por el que soportaba tanto.

Naruto se acerco al muchacho, este seguía atacando a los clones que aparecían. Arto de la pelea Naruto se acerco atreves de sus clones lo suficiente para darle un golpe en la cara, el muchacho trato de detenerlo sacando tres picos de hueso afilados de su clavícula, pero no lo suficiente rápido, el golpe de Naruto acertó haciéndolo retroceder solo rosando los nudillos de Naruto.

El muchacho se cubrió de varios huesos retrocediendo bastante por la fuerza del golpe, tres clones de Naruto estaban en posición atrás de él.

-¡Uzumaki... Naruto... Renden!- Gritaba los clones pateando al muchacho uno a uno desapareciendo por el corte de los huesos.

El Naruto real aparecía- ¡Rasengan!- Gritaba desde lo alto acertando el rasengan en el pecho desasiendo los huesos que protegían al  muchacho en esa área, haciéndolo caer con  mucha fuerza al suelo, quedando inconsciente y desapareciendo en una bola humo.

-¿Cómo es posible que no fuera el original?- pensaba confundido el rubio.

Volteó a los lados y no encontró a la pelirroja, subió a un tejado y observó que la chica corría rápidamente y se apresuro a alcanzarla.

—! Kanna-nee, ¿qué fue eso y adónde vas?

—¿que hay a 15 kilómetros, al Este de aquí?

— Es un área de entrenamiento, el bosque de la muerte. ¿Por qué?

—Hay una pelea también ahí.
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Sakura y Ren estaban una frente a otra, intentando acertar un golpe más.

Para la peli-rosa dos golpes era su límite, no dejaría que acertara un golpe más, estaba decidida.

Repentinamente Ren salto varios metros atrás, observando entre los árboles algo en particular.

—Creo que nuestro tiempo se acabo, me estaba divirtiendo pero será en otra ocasión, — dijo Ren asiendo pucheros.

La joven corrió entre los árboles.

— ¡Alto, espera! — gritaba la peli-rosa corriendo tratando de atraparla.

Ren saco un pergamino explosivo y lo activo.

—Dije que nos veremos después. — contestaba la mujer.

El pergamino exploto en la mano de la joven. Sakura se detuvo para alcanzada por la explosión. Observó que había pasado, pero no había nadie, ni rastro de la mujer.

La sombra que vigilaba a Sakura se fue después de la desaparición de  la contrincante.


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Aquí el capitulo 7 espero que lea allá gustado y vuelvo con One Ok Rock, me encantan.

Gracias a ceresointenso y NaruSanin por sus comentarios, ánimos y la emoción para seguir este fic, espero que les guste este capítulo, cuéntenme que les pareció, no quise hacer súper wuuau la peleas por que aun no es tiempo, pero espero que no se les haga aburrida y los deje con intriga para seguir leyendo el siguiente capítulo.

Gracias a todos los que lean este capítulo, y volveré pronto con mas.

Matta nee.

Clari-chan muy buen capitulo, cada vez me dan ansias de saber el que estavigilando a sakura... ¿que planearan esos? Espero la conti, saluditos ^_^

Clari excelente, aun que te advierto que por favor que no le pase nada malo a Saku-chan por que después Naru se queda sin pretendienta jeje. De lo demás super. Saludos y esperando la conti.

Hola mundo... he vuelto con un nuevo capítulo mas de ese lindó fic.

Gracias a Ceresointenso y NaruSannin por sus comentarios tan lindos, hacen que me emocione al escribir.

Ahora quería empezar a dar respuestas pero faltan muchas más. Con mucho cariño espero que les guste y de ante mano gracias por leerlo ya sean nuevos lectores o de los que sigen desde el principio.

Les dejo de nuevo canción de one ok rock, dos versiones y con letra abajo.

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Uzumaki: crónicas de amor y lucha.

Capítulo 8: Respuestas que traen mas preguntas.

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Answer is near subtitulos en español:

Un guerrero redimido luchando con determinación contra decenas de hombres. Todos atacando con ferocidad sobrehumana sin siquiera señas de cansancio.

Eran horas de combate, horas de cansancio contra lo que parecían demonios a simple vista. Pero con el poderoso ojo del mangekyou se revelan la verdad.

Títeres vivientes controlados y reforzados. Arterias llenas de chakra mandando fuerza extra a sus músculos. Mentes controladas por una sombra a lo lejos con grandes cantidades de chakra para mantener a tantos individuos.

¿Pero porque atacaban? Uchiha Sasuke no lo sabía.

Sus enemigos seguían levantándose.

Eran shinobis con vida pero sin control de su mente y cuerpo. A pesar de tantos errores, Sasuke Uchiha nunca ha sido del tipo de hombre que derrame sangre innecesaria, por eso no tomaba la vida de estos hombres.

Pero había algo mas... un agotamiento excesivo... falta de chakra... un desgaste físico... su cuerpo parecía rendirse.

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Un mes antes de lo ocurrido en konoha, el sueño de un joven de cabello oscuro era interrumpieron como casi cada noche después de su encuentro. De nuevo la misma persona atacando con el mismo método y de nuevo el mismo resultado.

Estaba frustrado, saliendo apenas con vida. De nuevo tratando de hacerlo solo.

— ¡Auch!— se quejaba de dolor al tratar de levantarse de la cama. Ya llevaba horas en esa habitación, ya era de noche.

Unos minutos después alguien abrió la puerta.

— Tienes que descansar Sasuke-kun — decía una mujer con lentes muy conocida para él, ojos y cabello rojos.

—Karin... ya estoy mejor, debería....— Sasuke no pudo terminar, el dolor aun era fuerte.

—No quisiste morderme, así que la medicina tradicional es más tardada. Aunque conociéndote en unos días ya estarás corriendo. Por ahora descansa. — Karin sonaba melancólica no había visto a Sasuke así en años.

—Tengo que volver a Konoha pronto.

— ¿Porque eres tan terco? Tienes que cuidarte. — lo regañaba la mujer con preocupación.

—Sólo unos días. —Advertía el Uchiha — Karin…

— ¿Si?

—Gracias. — Sasuke sólo dijo eso y volvió a dormir.

—No hay porque.
~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~~•~•~•~•~•~

Después del encuentro con el muchacho que causa un alboroto en la entrada de la aldea, Naruto y Kanna se dirigieron al Bosque de la muerte.

Una explosión hizo que Naruto acelerara el paso pero el combate había acabado.

Sakura bajo de un árbol y se quedó un rato pensativa. No había rastro de Ren, esa mujer escapó y la peli-rosa no supo cómo, tal vez una invocación inversa o teletransporte pero lo único seguro era que no se le encontraría rápido.

—¡Sakura-chan... ¿estás bien?!— un grito llamo la atención de la peli-rosa.
Sakura no tenía ni siquiera que voltear para saber quién era.

—Estoy bien— Sakura respondió con una sonrisa —pero llegas tar…— luego volteó confirmando sus sospechas pero no terminó de hablar por una imagen incómoda.

— “¡otra vez con ella!, lo que me faltaba”— chillaba una parte de Sakura que no había salido en varios años. Sakura interna aparecía moviendo los brazos, exageradamente molesta.

Ahí estaba Naruto con una sonrisa, luego llegó la misma chica de la noche anterior.

—Cof...— Sakura se aclaró la garganta —ya todo acabó— trató de hablar con normalidad.

—Qué bien, me preocupé porque estabas aquí ¿qué pasó?— Naruto preguntó curioso por lo ocurrido.

—Nada en especial, me las arreglé sola —Sakura trataba de sonar despreocupada pero luego un flechazo llevó su mente. —"Dejé a Ino inconsciente"— pensaba La Peli-rosa preocupada porque sólo la dejó en el local y se fue.

—Sakura-chan quería presentarte a...

—No tengo tiempo para presentaciones. — Dijo Sakura sin dejar terminar a Naruto— Hola y lo siento, tengo algo urgente que hacer— dijo mirando a la pelirroja, estás sólo asintió. — perdona Naruto, dejé a Ino esperando y me urge ir. — decía mientras retrocedía unos pasos.

—Yo podría acompañarte.

—No es necesario puedo cuidarme sola— y Sakura salió corriendo dejando a Naruto preocupado, éste se sentó en el suelo pensando en lo ocurrido.


Kanna veía a su alrededor. —Haruno-san es brutal. — dijo la chica mientras observaba.

—Si... ¿Porque?—pregunto Naruto distraído.

—Aquí fue la explosión pero la pelea fue allá— dijo señalando varios metros del otro lado. —Por los daños se ve que fue una muy fuerte pero Haruno-san no se veía agotada, sólo se veía con la ropa desgastada.

—Ella es muy fuerte— dijo el rubio con una sonrisa.

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~

— ¿La conseguiste?— Preguntaba una mujer de largo cabello blanco.

— Claro ¿Quién crees que soy?, fue fácil— contestaba Ren altaneramente.

—Más le valía Ren-sama, de lo contrario se vería muy mal. —decía Hibiki, el muchacho de cabello castaño.

— Cállate enano, si hubiera sido por ti hubiéramos fayado— se quejaba la ojiperla muy molesto.

—no fue mi culpa Itami-sama lo ordenó —dijo el muchacho sin quitar su sonrisa perturbadora.

—Tenían órdenes de hacerlo rápido.— Explicaba Keshin, la mujer de cabello blanco. —pero, ¿Y lo que te pedí?

Ren le entrego una placa pequeña de vidrio con una mancha roja al centro.

—Como dije, no fue tan difícil— se jactaba la ojiperla de su labor.

—Esperemos que la obsesión del viejo por esa chica sea útil. — Decía repentinamente al entrar a la habitación el joven de cabello grisáceo que peleo contra Naruto la primera vez.
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Sakura saltaba entre los tejados tratando de llegar rápido con Ino y ver cómo seguía.

—"Ese baka"— pensaba la Peli-rosa con los cachetes inflados. —"ayer cenaron juntos y ahora esto, seguro es una trepadora que quiere tener el logro de salir con él "famoso" Naruto .— pensaba con rabia al imaginarse a esos dos.

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(En la imaginación de Sakura.)

— Naruto-Kun, cuéntame más de cómo salvarte al mundo tú sólo— decía la pelirroja hablando chillonamente como niña.

—Claro linda dama— decía el rubio hablando exageradamente masculino, sonriendo y enseñando los blancos dientes.

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(Fuera de la imaginación a Sakura.)


—Ese baka— Decía de nuevo enojada para sí misma la peli-rosa.

Pero sus pensamientos fueron interrumpidos al llegar al lugar donde estaba Ino.

— ¡Frentona malvada!— Gritaba Ino sentada en una silla al notar a Sakura llegar. —Me dejaste aquí sola e inconsciente.

—Disculpa Ino, tenía que correr, no iba a permitir que hiciera algo malo esa mujer. — decía sakura mientras se acercaba a Ino.

—Me siento terrible— Hablaba Ino con pesadez.

—Déjame te reviso— Le decía la peli-rosa mientras la revisaba con chakra en su espalda, preocupada por la salud de su amiga. —No noto nada raro—dijo con extrañes

—Me siento horrible, eso fue humillante frentona— Contaba Ino enojada para sorpresa de Sakura. —Me dejo en KO, — ahora se veía triste. —pero no dejare que vuelva a pasar, solo dime donde esta esa bruja y la haré pedazos ahora mismo.— Ahora era ira lo que se veía en la cara de Ino.— Y ¿Que paso contigo, le ganaste?

—Salió huyendo, Ino, no tendrás tu revancha muy pronto.

—Odio estar abajo de ti pero algún día seré más fuerte que tu. — Decía Ino con enojo cosa que extraño a Sakura.

—Creí que estabas enojada con esa mujer y ahora me regañas a mí.

—Pfuu... Está bien... Lo siento es que estoy furiosa —Dijo Ino avergonzada por su rabieta. —Y ¿Que paso, como que no le ganaste?

—De repente se fue sin decir mucho, pero no pienso quedarme así, la voy a encontrar.— Dijo Sakura decidida sentándose a un lado de Ino, luego se quedó viendo un punto fijo en el suelo.

—Supongo que ella provoco la explosión— Dijo Ino solo para llamar la atención de la peli-rosa.

—No, pero quien fuera, Naruto ya se encargó de ello. — Dijo Sakura dándole poca importancia.

— Naruto siempre salvando el día. — dijo Ino para picar a Sakura.

Ella solo levanto la vista con molestia. —Sí... claro... como digas.

— ¿Y ahora qué te hizo para que estés enojada?— preguntaba Ino por la reacción de su amiga.

— nada... no estoy enojada.

— Sí claro —Ino rodó los ojos. —Entonces le preguntare a él que pasa.

—¡Dije que no pasó nada¡— la peli-rosa estaba sobresaltada, no sabía que planeaba hacer Ino —Además está ocupado ahora.

— ¿cómo sabes.

— Sólo lo sé.

— ¿y con qué?

—Estaba con una chica— comentaba Sakura para cambiar de parecer Ino —ayer salió con ella y ahora seguro están juntos, ha de estar ocupado— decía Sakura algo molesta cosa que Ino noto.

—"con que eso fue"— pensada Ino al darse cuenta del epicentro del caos de la peli-rosa. —Creí que no salía con nadie— Ino quería saber más así que siguió insinuante.

—Pues te equivocarse — Contesto la peli-rosa con pesar.

—Bueno... no querías que se quedara esperándote toda la vida. —Dijo Ino para molestar a Sakura.

— ¡¿DE QUE HABLAS INOPUERCA?!— Sakura se empezaba a enojar.

—Nada... Nada...—dijobIno con nerviosismo para calmar a la enojada Sakura.

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Esa misma noche en un lugar dentro del bosque de la muerte.

—¿Seguro que es un lugar tranquilo para hablar?.— Preguntaba Kanna sentándose en la rama de un gran árbol.

—Por ahora solo usan este lugar para exámenes y entrenamientos así que casi nadie entra... además que es muy grande.—Dijo Naruto con una sonrisa de lado sentándose también.

—Son árboles grandes para un lugar que lleva pocos años aquí.

—Yamato-taicho ayudó a que crecieran rápido y son más fuertes de lo normal.— contaba Naruto con gusto.

—Suena a alguien interesante.— de repente Kanna se puso seriea —Por cierto antes de que nada debo pedirte una disculpa.— decía mirando hacia el frente.

Naruto la miro con extrañes —¿porque?— preguntó confundido.


—Tengo que explicarte algo pero no sólo a ti.— Después de varias posiciones de manos, kanna tomo el hombro de Naruto, en un parpadeo estaban parados justo en frente del Biju de nueve colas.

Kurama estaba dormido y acurrucado pero con un semblante de incomodidad.

Naruto de nuevo estaba confundido, ¿Como podían estar ambos ahí?

Una sonrisa macabra se dibujaba en la cara de la mujer. —¡HEY... TU, ZORRO PULGOSO!— Kanna gritaba muy fuerte con una extraña y grabe voz combinada con su voz, luego empezó a reír frenéticamente

Naruto veia con los ojos como platos y la boca abierta por la reaccion de la chica.

Kurama despertó malhumorado, se levantó de a poco con un semblante de fastidio y estiró el cuerpo, se tronó el cuello y bostezó.

Kanna dejó de reírse, empezó a mover su muñeca derecha, luego los dedos, un poco el brazo. De repente dio un codazo fuerte hacia atrás.

Separándose entre relámpagos de su cuerpo, aparecía un hombre de tez bronceada, ojos negros muy penetrantes, cabello negro rojizo. Vestía un samue azul marino.

Samue:

—¡KUUUURO!— Grito la pelirroja furiosa.—¡Te he dicho que no me gusta que me uses así!—regañaba al hombre de pie enfrente de ella.

Él la mirada con nerviosismo, luego reaccionó y también se enojó.—¡Oye... ¿y el respeto?!

—Eso era antes de usarme como megáfono— seguía furiosa la chica que al terminar de hablar le sacó la lengua haciendo refunfuñar al azabache.

Kanna volteo —Kurama-Sama disculpe a este grosero por los gritos.— se dirigía con respeto al bijuu disculpándose.

Kurama los veía con gracia tratando de no reír.

—Emm... si... claro... pero no me digas "sama", no soy tan viejo.—Dijo Kurama mientras trataba de contenerse.

—¡Pero si eres un anciano!— Gritaba kuro para molestar.

—No tanto como tú, lobo sarnoso.

—¿quieres pelea zorro pulgoso?—Decía el hombre mientras sus ojos se ponían completamente negros.

Repentinamente, en una nube de humo, el hombre se transformo en una criatura gigantesca, casi del mismo tamaño que Kurama. Un lobo negro, con enormes garras y dientes afilados, colmillos muy grandes y unos ojos completamente negro, con una gran cola. No tenía pelo, lo cubrían llamas negras que parecía que consumirían todo a su paso.

—No soy un cachorro como antes lobo sarnoso, ya soy más fuerte que tú.— Kurama hablaba con ferocidad pero se veía agotado, sudando y jadeando un poco antes de empezar.

Kana se puso seria. Se sentó en el suelo con las piernas cruzadas y se quito la chaqueta. Traía una camisa de tirantes negra ajustada, con la parte alta de la espalda descubierta. En su espalda se mostraba un remolino rojo sin llegar al centro.

Kana empezó a hacer posiciones de manos.
De el suelo, debajo de la criatura, empezaron a salir muchas cadenas rodeándolo de las patas y el pecho. Empezaron a presionarlo hacia el suelo. El sólo se quejaba y movía tratando de liberarse.

—¡Dejame moverme!— Gritaba la criatura pero Kanna no le hacia caso. Luego en una nube de humo volvió a tomar forma humana con las cadenas rodeando su pecho y brazos. El individuo fruncía el seño.

—Me estas avergonzando.— Se quejaba Kuro entre dientes.

—El sentimiento es mutuo.— Kanna lo regañaba con los ojos entre cerrados.

—Ya quitame esto niña.

—Solo si te portas bien.

—Phff... Esta bien.. me calmare...— Decia el hombre restandole importancia.

—Lo siento Kurama, ¿se encuentra bien?— Preguntaba Kana con curiosidad al verlo agitado.


—Solo es una molestia.— Dijo el bijuu con disgusto. —¡Ehy lobo!— llamaba la atención del individuo. —Explicame por que esos tipos tenían tu chakra.

—Phff... tuve un incomodo momento en un jarrón —contaba el hombre mientras lo liberaban de las cadenas. — y aprendieron como usarme.

—¡Un segundo... ya no entiendo nada...¡— Se quejaba Naruto con fuerza. —¿Como llegamos aqui?... Kanna-nee y ese tipo conocen a Kurama, Ese tipo se convierte en una bestia gigante y Kurama los conose a ustedes y no me dijo nada. ¡Que alguien me explique ttebayo!— Naruto estaba incomodo y confundido.

Kanna se levanto y se acercó a él. Con una sonrisa de lado se dispuso a hablar.
—Naruto.... no se por donde empezar... tengo que explicarte... en los últimos días te has sentido especialmente triste o violento... ¿Cierto? —Preguntaba la pelirroja con un semblante triste.

—Tal ves pero ¿como sabes...?.—preguntaba Naruto sin poder terminar.

—En parte es culpa nuestra.— Dijo Kanna con pesar.

—Muchacho, un grupo de personas con poder y recursos está tras de ti y el zorro.— Empezaba a hablar el hombre. —Según averigüé eran dos planes, el primero era saber si podías generar un doujutsu en especial. El conocido rinnegan. El último registro de alguien que generara un rinnegan, claro que de forma natural, era un Uzumaki hace unos años. Eso los llevó a buscar por el mismo camino. Cosa que es imposible, cuando ya eres poseedor de uno kekengenkai... El método que usaron era peligroso, a un humano normal lo mataría en segundos. El segundo plan era que, si llegabas a morir, el Kyubi seria liberado y, según creían, destruiría todo a su paso.

Naruto se quedo en shock. No sabia que pensar. solo escuchaba.

El hombre continuo.—Tu capacidad de controlar la energía natural, tu kakengenkai y el apoyo del Kyubi son aspectos que te mantuvieron con vida.

Un flechazo llegó a la cabeza de Naruto. —¿ Cómo sabes de la energía natural y esa cosa del kekengenkai?—Preguntó. Naruto se veía aturdido y confundido por todo.

—Se te nota en los músculos, la energía natural deja secuelas positivas y negativas, fortalece el cuerpo y la habilidad mental con el uso constante, y se nota que lo has usado mucho pero no hay cambios negativos en tu anatomía como los cambios estéticos. Claro tu kekengenkai ayuda.— decía Kuro con tranquilidad.

—bien pero aún no comprendo de que kekengenkai hablas.— Decía Naruto negando con la cabeza

— la barrera de sangre de tu clan, Shinseina Fune (Recipiente Sagrado), creo que ese era su nombre, es el motivo de tu gran cantidad de chakra, tu herencia genética.— Dijo Kurama como si fuera obvio.

—Aún no entiendo.— Naruto se quedo extrañamente pensativo —¡Como sabes todo eso tu tipo extraño!— grito.

—¡A quien dices extraño muchacho insolente!— gritaba Kuro enojado.

—¡No hay muchas personas que se conviertan en bestias gigantes, ttebayo!— Se quejaba Naruto moviendo exageradamente los brazos.

Kanna veía con gracia lo sucedido. No podia evitar reír por tan extraña situación, apenas se conocian y ya se estaban peleando. Mientras, Kurama veía todo con cansancio recostado en el suelo.

—Que ruidosos son.—Se quejaba Kurama.

—Creo que se llevan bien.— comentaba Kanna con una sonrisa.

—El problema es que no sabes explicar ttebayo.—Seguia quejándose Naruto.

—El problema es que eres un Baka… muchaco impertinente.

—A quien dijiste Baka, tu baka extraño.

—Por lo menos déjame continuar BAAAAAAKA. — Kuro seguía refunfuñando. — Si no fuera por ella no estaría aquí. — Dijo el hombre entre dientes.

— ¿Qué dijiste Extraaaño?

—Muchacho insolente… Lo que dije es que si ella no creyera que eres importante— dijo señalando a Kanna— yo no te contaría nada en primer lugar.

Naruto se quedo pensativo viendo a la chica que, aún que apenas conoció, le tomo confianza. —Bueno continúa. — dijo Naruto con tranquilidad y se sentó en el suelo.

Kuro ya iba a replicar pero Kanna lo interrumpió. — Tienes que ser más directo, lo confundes.

—No lo ayudes niña. — Se quejaba Kuro, luego suspiró con cansancio.

—Desde hace mucho tiempo me llaman Kurotamashi no Ohukami, Puedes decirme Kurotamachi-sama…— Dijo dirigiéndose a Naruto.

— ¡Solo dile Kuro! — Dijo con sencillez la pelirroja.

El hombre se molesto.

—Suena mejor…— Comentaba Naruto. —Igual de sombrío pero fácil de recordar, Dattebayo.

Un recuerdo curioso llego a la mente de Kuro.
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—Más sencillo— Dijo un chico de revuelto cabello castaño de unos 12 años, ojos grisáceos oscuros y una gran sonrisa. Estaba tranquilamente recostado en el lomo de un enorme lobo negro.

—Pero me quita respeto.— Dijo el lobo.

—Sigue siendo sombrío e impactante… pero es más fácil de recordar.

—Lo recordarías si no fueran tan baka.
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—Esta bien… Dime Kuro…¡Y deja de decime extraño! —Dijo exaltado. —Ya me dejarás continuar…— Naruto asintió. — No te contaré todo de mi… solo que de donde yo vengo el chakra no se encuentra en estado “Puro” como lo está aquí en los humanos y animales. Es una combinación entre la energía natural y chakra. Yo me alimentaba de esta esta energía y eso me dio habilidades particulares que supieron utilizar pero ¿Sabes lo que pasa cuando hay energía natural descontrolada?

—el individuo se convierte en piedra, ¿no?

—Cierto, pero hay casos en que no es demasiada para combertirte en piedra, pero el individuo no tiene el control. En ese caso la parte instintiva del ser empieza a hacerse más fuerte. Depende del individuo el cambio. Unos son mas agresivos, otros mas celosos y otros paranoicos. Es lo que mas ocultas lo que quiere salir para obtener lo que mas anhelas. No pedo explicar bien como pero usaron mi "energia" para trasplantar kekengenkais pero por consiguiente se tiene ese efecto... Solo lo digo para que estés preparado, ella esta empecinada en regresarte a la normalidad, pero necesitamos que seas fuerte hasta que sepamos cómo.
Naruto se quedo pensativo unos segundos
— ¿Cómo te hirieron? — pregunto kuro después de un rato de silencio.

—¿Que? — decía Naruto con condición.

—El zorro tiene una herida en el costado, de ahí entro la energía, esa herida le trae algo de dolor… el soporta… pero tienes que tener cuidado, lo que el protege es tu vida. Si esa energía se propaga en tu cuerpo más… morirás.


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Gracias de nuevo y hasta luego.

Orales, quede sorprendida por esas revelaciones. Y también sobre na obsesión del viejo, que aun es un misterio, que habló ren y y los otros dos. Espero con ansias la contiii, clari-chan

Muy pero muy interesante lo que narras en este capitulo Clari, tal y como veo las cosas la historia que manejas se complicara muy pronto y eso me agrada. Muy bien logrado en este capitulo, sigue así. Sin más me despido y cuídate.

¡HOLA DE NUEVO... VOLVÍ!


FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO 2017

ME ADELANTO A LAS FIESTAS.

Después de tanto tiempo, festejos y un bloqueo  de dos meses por fin termine este capitulo.

Disculpas por el largo tiempo de no escribir y leer fics y agradecimientos especiales a cerezointenzo y Narusannin y a o-gale-o en fanfiction.net por los comentarios que hacen que me anime a seguir escribiendo

Solo como comentario, en esta historia tendremos Neji para rato. Su muerte fue lo mas injusto que aya visto y simplemente lo quise omitir por un fin mayor.
La musica entrará mas adelante.

"No hay vuelta atrás" de Camila.

Sin más les dejo el capítulo nueve de esta historia, espero que les guste y dejen su comentario.

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Uzumaki: Crónicas de amor y lucha.

Capítulo 9: Rompiendo un corazón.


—¿Cómo estas hoy? —Preguntaba Naruto mientras se sentaba a un lado de Kurama.

Llevaba varios días haciendo lo mismo, visitándolo temprano en la mañana y antes de ir dormir.

—Estoy bien, no exageres, no estoy desahuciado. —Dijo Kurama molesto, recostado en el suelo.

—Disculpa... es solo que me preocupo.

—Te sientes culpable, por eso no me mantienes la mirada. —Continuó Kurama con un ojo entreabierto para saber como reaccionaba Naruto —Ó ¿es que me tienes miedo?— dijo con un tono tétrico.

—Que... no... es solo que... no debí de. — Naruto balbuceaba nervioso. Dio un largo suspiro. —Me descuide... y luego como me porté, me dio escalofríos.

—Te portaste como un tonto, pero esta bien. No te preocupes de un zorro cascarrabias, soy más resistente de lo que crees. Tienes que cuidarte tu.

Naruto sonrió. —Gracias

—¿Por que? —Pregunto el biju levantando la cabeza.

—Por preocuparte por mi.

—Siempre eres tu quien se preocupa por todos, aunque a veces necesitas que se preocupen por ti. — Kurama se oía preocupado. —Solo entrenas. No hablas con nadie. Ni siquiera vas a Ishiraku. Uno no puede vivir de ramen instantánea. No hablas con amigos y menos has hablado con la pelirroja y el viejo zorro. ¿No confías en ellos?

—¿Tu sí?

—Yo casi no confío en nadie y menos en ese loco. Pero importa lo que tu pienses.

—No se que pensar.

—¿Por qué?

—Por que no me siento normal.

—¿y?

—No se so devería confiar.

—Aquí sentado no tendras reapuestas.
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Sakura estaba enfrente de la mansión Hyuuga acompañada por Neji.

—Disculpa por no poder ayudar más.—  Dijo Sakura algo decaída —El sello es fuerte, pero seguiré investigando. Mi maestra debe de tener información.

—Gracias Sakura.

—Pero Neji-kun, hay alguien a quien tengo que encontrar y necesito su ayuda.

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—Te ves horrible frentona—grito Ino con exageración.

— No grites Inopuerca— dijo Sakura con molestia.

Sakura estaba en su hora de descanso en una banca en los jardines del hospital. Ino estaba llegando.

—¿Que no dormiste bien? te ves acabada, esos turnos nocturnos te van a hacer polvo— Dijo Ino sentándose a la banca.

—Eso no tiene nada que ver.— Sakura la vio con molestia.

—Entonces estabas jugando al gato y al ratón.

—Estuve buscando un rastro.

Sakura empezó a recordar la plática con Neji.

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—Lo siento Sakura, no conozco ese nombre pero puedo buscar.
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—¿y encontraste...?

—Nada... pero lo encontraré.

— Deberíamos pedir ayuda.

—Ya tengo la ayuda que necesito .— se quejó Sakura —Yo la voy a encontrar, volverá y cometera un error.

— ¿Es para detenerla o por orgullo? —Ino pregunto con seriedad, Sakura Sólo miro al otro lado y no contestó.

—Bueno no digas nada pero hoy iremos al festival.

—No ire.

—Como que no, ya me dijiste que si.

—No estoy de humor.

—Pero no tienes nada que hacer, o ¿Vas a seguir buscando? Porque si es así tienés que relajarte.

—¿Porque no vas con Sai?

—Estoy enojada, no me invita a nada , no me hace caso, no le gustó.— dijo con resignación —Así que iré contigo frentona.

Sakura se veía fastidiada, ya no tenía caso renegar. —Está bien— dijo con molestia — pero tú pagarás.

—¡ESO NOOOOOO! — Grito Ino.

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Un conspirativo plan se estaba empezando a orquestar en la cabeza de una hermosa rubia.

Toc... Toc... El sonido de la puerta llamó la atención de Naruto. Al abrir la puerta su sorpresa fue grande al ver a Ino enfrente de él, con una gran sonrisa en la cara.

—¿Cómo has estado Naruto-kun? Hace mucho que no te veía.

—Hola... bien... sí mucho tiempo.—Dijo Naruto con nerviosismo tocándose la cabeza.— que te trae por aquí Ino.

— Quería pedirte un gran favor.— Ino se veía eufórica, cosa que a Naruto preocupo.
—¿De qué se trata?— preguntó el rubio con curiosidad.

— Es que tengo un problema enorme — Dijo Ino con exageración. luego sus ojos se empezaron a humedecer.

Naruto veía a Ino con los ojos llorosos y enormes.

— Él idiota de Sai no me hace caso, ni siquiera me ve, parece como si no existiera.— dijo Ino sollozando exageradamente.

—¿Y qué tiene que ver conmigo?— Preguntó Naruto con nervios.

—Él es tu amigo, ayúdame a que me quiera. —Dijo Ino suplicante.

Naruto se ríe con nervios. —Lo siento Ino, no sé cómo podría...

—No tenés que hacer mucho. Sólo ayudarme a que el tonto vaya al festival de hoy, por favor.

— No creo ser la mejor persona para ayudarte en este momento— Naruto se veía apagado, inseguro. —¿porque no le dices a Sakura-chan.

— Esa ingrata dijo que no me iba a ayudar. — Ino hacía pucheros. —Además tienes que salir, no es como si tuvieras mucho que hacer estando de vacaciones.

Un golpe bajo para su situación laboral y sus mega vacaciones obligadas, pensó que tal vez lo mejor era pasar una noche tranquila. Suspiro resignado.

—Está bien. ¿Qué quieres que haga?

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Llegaba una hermosa noche, con una luna enorme y brillante, muestra del inicio del otoño, con un clima cambiante, para ese momento acogedor después del brutal verano en el país del fuego.
En ese momento una joven Kunoishi  salía de casa advertida por parte de sus padres de portarse bien y no llegar tarde, como acostumbraba con su amiga rubia, por tratar de ser "solidario".

Sakura se veía elegante con una yukata rosa pálido con pequeñas flores y un listón blanco, el cabello agarrado con una coleta.

Mientras caminaba se veía cansada fastidiada por tener que ir con Ino.
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Por otro lado Naruto estaba neutral, caminando por la calle acompañado de Sai, estaban dirigiéndose al lugar donde lo Ino lo citó.

Sai estaba sorprendido, llevaba un rato caminando sin decir nada, solo veía a Naruto muy serie.

El rubio sólo lo interceptó afuera de la oficina del hokage y lo invitó a cenar, por los viejos tiempos.

—¿Tengo algo en la cara? — Preguntaba Naruto al ver de reojo a  Sai  observándolo tan atentamente.

—Nada sólo te ves extraño.— dijo el palido sonriendo sencillamente.

Naruto sólo miro al frente. —No me siento muy bien, tal vez estoy enfermo.— Dijo el rubio restándole importancia.

— Entonces deberías ir con Sakura a que te...

—No la necesito.— dijo Naruto interrumpiendo a Sai. —Mejoraré pronto, siempre lo hago.

— Y ¿a dónde vamos a comer?

—Al lugar de siempre.

----------------------Flashback---------------------

Naruto empezó recordar lo que le dijo Ino.

—Llevarás al tonto de tu amigo a comer, no sospechara nada si lo llevas a Ishiraku.— Ino empezó contar su plan con entusiasmo. —Luego llegaré yo casualmente, platicaré con él un rato se dará cuenta que soy encantadora y me invitará a salir.

—"¿Tenía que saber eso? En qué me metí"— Preguntó Naruto para sí mismo con una gota en la frente.
---------------------Fin Flashback---------------------
—Bien... tú puedes... sólo tienes que hablarle.— Hinata estaba nerviosa pero decidido de hablarle, llevaba semanas intentando iniciar una conversación con Naruto sin éxito. Siempre se iba y la cortaba de tajo con que tenía algo que hacer, entrenar, una mision, etcétera  y muchos etcéteras más.

Vio a Naruto caminando por la calle acompañado de Sai, se dirigían a la calle principal de de la aldea. Los siguió por algunas cuadras sigilosamente (como acostumbra).

—Alguien nos sigue.— Dijo Sai con una sonrisa, gesto característico de él.

De repente Naruto desapareció en una bola de humo.

Hinata se encontraba en la esquina de una calle, escondida a varios metros. Se quedó extrañada unos segundos, luego sintió algo cerca.

— AAAAAAH!— Hinata lanzó un grito enorme al ver a Naruto en frente de ella.

— Hinata... ¿Porque nos sigues?— preguntó Naruto extrañado de que fuera ella.

—Yo... es que...— Hinata estaba nerviosa, fue embarazosamante descubierta.— Sólo quería hablar contigo Naruto-kun, pero no sabía sí estabas ocupado.— dijo avergonzada.

Naruto se sintió algo culpable, cada vez que Hinata se acercaba la rechazaba.

—Iba a comer con Sai, si quieras venir podríamos platicar un rato.

A Hinata le brillaban los ojos y sólo asintió con una sonrisa.

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—Dijiste que iríamos a ver artesanías.— Sakura estaba fastidiada. Ino la empujaba para obligarla a que la acompañe.

—Yo tengo hambre.— Decia Ino mientras hacía fuerza para mover a Sakura.

—Bien... pero déjame caminar sola.

—Que bien— dijo Ino mientras soltaba a Sakura —Sé a donde podríamos ir.— Ino tomó a Sakura de la mano para apresurarla.

—Te dije que me sueltes

Después de unos minutos de caminar Ino se detuvo buscando algo.

—Veamos qué podemos comer.— De repente  encontró lo que buscaba, esos colores naranja inconfundibles. —Vamos ahí — dijo mientras jalada de nuevo a Sakura sin decir a dónde.

Entraron a un lugar conocido.

—Mira nada más a quiénes encontré.— dijo Ino tratando de sonar sorprendida (no muy bien).


—"¿Porqué aquí?".— se preguntó Sakura para sí mismo refiriéndose a  Ichiraku ramen.

Naruto estaba comiendo en medio de Sai y Hinata, tenía un gran bocado de ramen. Volteó a ver a Ino pensando que ya era hora que llegara.

Su sorpresa fue grande al ver a Sakura con Ino, al punto de atragantarse con la comida.


Ino se le acercó al rubio, lo golpeó en la espalda para qué parara de toser.

—Qué sorpresa.— dijo Ino con una sonrisa.

—" Sí... claro"— Pensaban Naruto mientras se recuperaba del ataque de tos.

—Hinata... no te vi ahí, lo siento, con el revoltoso de Naruto no te haces notar.—dijo Ino con "tranquilidad". —"Esto podría ser un problema"— Pensó al ver a la ojiperla ahí. — Sai-kun, hola que tal tu día.— Ino se acercó al palido con una sonrisa enorme en plan de seducción.

— Hola.— Contestó Sai con sencillez y continúa comiendo.

Sakura seguía de pie, incómoda por el momento.

—Hola Sakura-chan— Dijo Naruto con seriedad. — ¿Que las trae por aquí?

—Ino insistió mucho que veníeramos aquí, yo quería ver ropa y algunas artesanías.

—¿No se ve linda con esa yukata, eeh Naruto? Cuando se esmera hasta la frentona se ve linda.— dijo Ino con gracia. —No como yo... Claro.. pero se acerca.— Dijo a un lado de Sai sentandose en en una silla.

Naruto no dijo nada— "Pero sí Sakura-chan se ve hermosa siempre".—Solo pensó.

Sakura se sentó a un lado de hinata.
Hola Ayame-san, qué gusto verla.— Saludo Sakura con una sonrisa. —Y su padre donde está.


— Hola Sakura-san, mi padre está en casa, descansando. Insistió en que yo viniera hoy y me encargara del negocio para prepararme cuando él no esté.

—Pero si a Teushi-sama le faltan muchos años.

—Eso dígaselo a él, mi padre está necio en qué le falta poco desde que se le empezó a caer el cabello. Comenzó a decir que estaba envejeciendo y que necesitaba cuidarse más. Preparar todo para cuando esté viejo, calvo y que tenga que usar bastón.— Decía Ayame con pena.

Sakura rió. —Mi papá está igual, cada vez que le duele la espalda llega con ganas de platicar, hablarme de la familia, que debería de darle nietos y qué pasará cuando él se vaya. Creo que es por la edad, les da miedo cuando no se sienten jóvenes.

Ambas reían, Naruto veia de reojo la sonrisa de Sakura.

—Tiene razón— comentó Ayame con una sonrisa. —Bueno, que va a pedir.

—Solo ramen de cerdo.

—A la orden.— Ayame se retiró y de repente se quedó todo callado. Ino trataba de sacar plática a Sai pero él sólo la ignoró.

Hinata hacia lo mismo pero con mas exito. Platicaba de la ultima mision que tuvo, de lo mucho que a mejorado. Aunque Naruto no hablaba mucho, lograba sacarle varias sonrisas.

Sakura no podia evitar escuchar la platica. Le entregaron su palato y sólo se puso a comer..

—"Como sospeché , Hinata es un problema"— Pensaba Ino observando la situación.

—Sakura-san de qué hablaba con Neji-Niisan esta mañana, los vi muy serios.— Pregunto Hinata.

—El necesitaba ayuda para quitar el sello de su frente.

—"pero entonces..."— Naruto se quedó impactado.

—Neji Niisan logró que no existiera la rama secundaria del clan.

—Despues de la aliansa shinobi no había razón para que la rama secundaria existiera.— Explico Sakura con algo de tristeza. —Pero el problema que permanece es que ni los miembros más viejos del clan saben cómo quitar el sello de su frente. No hay registro de su creación incluso pocos miembros saben cómo activarlo, es por eso que Neji-kun me pidio ayuda.— dijo Sakura sonriendo de lado. —Logró algo impresionante... pero aún no podrá estar del todo libre.

—Impresiomante, Neji lo logró... bien por él, sé que tú podrás quitar el sello, Sakura-chan— Dijo Naruto con una sonrisa.

Luego el silencio se hizo de nuevo. Ino se levantó y se aserco al lugar donde estaba Sakura.

—¡Frentona!— Grito Ino con fuerza recargandose en la mesa, moviendo un plato de ramen "sin querer",justo en las piernas de Hinata. Ella estaba tan distraida por estar platicando con Naruto que, cuando se dio cuenta, ya era tarde. La chica se levantó con rapidez. Esta quedó con el pantalón empapado.

— Disculpa Hinata no fue mi intención.— Ino se reía avergonzada.

—No hay problema.

—Déjame ayudarte.

—Está bien.

Ino y Hinata se fueron dejando en el lugar a los demas. Sakura se quedó callada unos segundos y luego no se pudo quedar con la curiosidad.

—No sabía que salias con Hinata.—Comento Sakura tratando de encontrar una respuesta.

Naruto se extraño, trago el bocado y habló.—No salgo con Hinata, sólo somos amigos.

—¿Enserio?— Dijo Sakura con molestia. —Porque platicaban con mucha confianza.

—Es mi amiga...— Naruto empezaba a sonar molesto.—La encontré de camino y la invité a come con nosotros, nada mas.


—Entonces si estabas saliendo con la pelirroja de la otra vez.—Sakura empezaba a sonar sarcástica.— No te culpo por salir con chicas y aprovechar que las tienes rendidas a tus pies. Pero no es justo que ignores a alguien que siempre se a preocupado por ti.—Sakura estaba empesando a hablar de más.

—¿De que estas hablando?— Pregunto Naruto confundido.

—De Hinata, obvio. Siempre a querido llamar tu atención y creí que te habías dado cuenta... pero parece que no.

Naruto se terminar la comida, se levantó del banquillo y pagó la cuenta. Iba en dirección a la salida cuando Ino y Hinata entraron al local. Se extrañaron al ver a Naruto con una cara tan seria.

— Naruto-kun, ¿Que pasó?— pregunto Hinata.

—Tengo que irme— Dijo el rubio rascándose la nuca. —No me siento muy bien , disculpa Hinata, nos veremos después, lo prometo.— Dijo con una sonrisa y se despidió.

—Está bien Naruto-kun, cuídate.— respondio la ojiperla con una pequeña sonrisa.

—Lo siento Ino, no pude ser de mucha ayuda.

—Esta bien, no te preocupes.

Y Naruto se fue en dirección a su departamento.

Sakura no aceptaría un error tan fácilmente, no acostumbraba a equivocarse, pero por la forma que Naruto se fue, era obvio que algo hizo mal. Meditando unos segundos salió corriendo detrás de él esperando que no fuera tarde para arreglarlo.
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—"Quién se cree que es, se enoja por esto y luego por lo otro. Cree que voy a aguantar sus regaños todo el tiempo."— Pensaba el rubio para si mismo refunfuñando. Iba caminando por la calle quejándose. A pesar de eso logro notar una presencia acercándose.

—¿Qué quieres Sakura-chan?— Dijo Naruto con molestia volteando hacia atrás.

—Sólo hablar— Dijo Sakura apareciendo enfrente de él. —¿Qué haces?.

—Sólo me voy— Naruto volteó y se disponía a continuar su camino.

—Baka... ya...— dijo Sakura tomándolo del brazo.—Lo siento, no debí decir eso... sólo quería ayudar. —dijo tratando de sonar despreocupada.

Algo en lo que dijo Sakura lo hacía sentir destrozado y, en ese momento, Naruto no pudo ocultarlo.

—No me trates como si fueras mi hermana... o mi mamá.—dijo enojado soltándose el agarre de Sakura. —No lo eres y no quiero que lo seas.— Dijo sin voltear a verla.


Sakura se queda en shock, Naruto se fue y algo en ella se rompió, no sabía porque, pero dolía más que nada.
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—No esperaba que ella lo arruinara.

Ino y Sai estaban caminando por una calle de la aldea.

—No parece que le guste. Los libros dicen que una mujer tiende a tener la barbilla hacia el sujeto en señal que le interesa su conversación.— Dijo Sai algo extrañado.

—Quienes escriben esos libros no saben de mujeres— refunfuñaba Ino.

—Pero contigo tenian razón.—dijo Sai como una sonrisa.

—Eso no cuenta— Se quejó Ino ruborizada .

—Y porqué no decirle a Naruto de tu idea.

—Ese baka no me haría caso,creí que sólo necesitaba un momento juntos pero tendré que darles un empujón mas grande. —Dijo Ino decidida.

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Naruto corria por la calle en busca de algo de ayuda.

Su corazón se rompió, dijo cosas de las que estaba arrepintiéndose. Secandose las lágrimas tocó una puerta.

—Kuro-san, ¿Kanna-nee está aquí?

—No está, pero dijo que volverá pronto. Puedes esperar aquí.— Dijo Kuro dejándolo pasar.

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Asechando una pequeña caballa en el bosque, Kanna meditaba su siguiente paso

—Es hora de ver de que es capas este Uchiha.

Naruto y Sakura no pueden ocultar lo que sienten o en el caso de Sakura cree sentir por Naruto, en resumidas cuentas creo que alguien va a llorar y mis sospechas están fundadas según las palabras de tu fic que es muy bueno. Que bueno que estas de vuelta y reitero tus buenos deseos de feliz navidad y prospero año nuevo para ti también. Saludos y espero leer la continuación próximamente.

Clari, es bueno ver a continuacion del fic y como van las cosas se nota que va haber lagrimas y llanto,es bueno verte de vuelta y tambien te deseo una feliz navidad.

Hooola mundooooo volví con un nuevo capítulo (Después de siglos)

Gracias a  NaruSannin y
kuramaizanagi por sus lindos comentarios. Espero que les guste éste también .

Tema entre el capitulo.

Sin más a leer.




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Uzumaki: Crónicas de amor y lucha.


Capítulo 10: Sin fuerza de voluntad.



En una cabaña entre alguno de los bosques del país del fuego dos mujeres platicaban con aparente tranquilidad.

— Sasuke-san está mejorando muy rápido,  recuperó el apetito.— Comentó una muchacha de cabello castaño y ojos café. Vestía un pantalón azul marino, una blusa de manga larga gris y  zapatos negros bajos.

—Si, es necio. No deja que nada lo detenga, así que se recupera rápido.— Dijo Karin con seriedad.

—Se ve deprimida ¿Que tiene Karin-san?—  preguntó la mujer castaña con preocupación.

—Nada.— Dijo la pelirroja de lentes restándole importancia —¿Has visto alguien extraño en los pueblos cercanos?

—No... creo...— Dijo tratando de hacer memoria. — Había una mujer, aunque parecía amable. Habló con Baa-san y luego en el pueblo del norte.  

—Creo que deberías regresar a casa, es tarde.

—¿En serio?— Dijo viendo la hora en un reloj en su muñeca. —Aún no es tan tarde.

—Okashi-sama debe estar preocupada.— Dijo Karin viendo a la ventana.

—Pero es temprano—Se quejó la muchacha haciendo pucheros.

—En serio, es por su bien Kaori-san, no sería bueno que algo te entretuviera.

— Bien— La joven sono resignada y tomó una mochila —Dígale a Sasuke-san que vendré mañana— y salio de la casa por la puerta de atrás  dejando a Karin  pensativa mirando la ventana.

Pocas cosas pueden ocultarse a los sentidos de un ninja sensor y mucho menos a alguien con los ojos de Kagura.

En el bosque alguien lo intentaba sin éxito, pero ¿Que quería? era lo que se preguntaba Karin, llegando sólo una respuesta, a Sasuke, pero la interrogante real era si vivo o muerto.

Empezaron a oírse pisadas ligeras. Karin salió de la casa por una puerta corrediza.

—Oye tú. ¿Sabes que es de mala educación llegar sin ser invitado? ¿Quién eres?— Gritó Karin con molestia.

—Mis asuntos no son contigo— Dijo una mujer  haciendole frente, Kanna caminaba en dirección a la cabaña.

—¿Te pregunté quién eres? ¿Qué quieres?

Kanna se detuvo en unos pocos metros de la cabaña. —Quién soy no te incumbe. ¿Dónde está Sasuke Uchiha?

—¿Y si yo no quiero contestar?— Con varios movimientos de manos 8 pergaminos grandes fueron activados entre los árboles, sacando una lluvia de armas entre shurikens, kunais y sembons. Muchos dieron en el blanco.

Kanna estaba de pie con muchas heridas en el cuerpo y la cabeza gacha, luego una sonrisa se dibujó en su rostro.

Una explosión se creó esparciendo cientos de plumas blancas, Karin se quedó impactada, luego todo se nubló y calló al suelo.

Kanna estaba atrás de ella,  no había armas en  el cuerpo de la chica ni en el suelo.

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Kanna entró a la cabaña. Se veía al entrar una mesa pequeña y algunos tatamis. Luego fue caminando por un pasillo oscuro con cautela.
Al poco tiempo el ambiente empezó a sentirse pesado.

—Eres difícil de encontrar Uchiha Sasuke. Sólo vengo a hablar.— Dijo levantando las manos mostrando que no tenía armas.

— Eres demasiado ruidosa.—  Dijo el Uchiha apareciendo detrás de ella. Kanna se sorprendió un poco. —Los gritos afuera no dejan dormir.— Se quejó mirándola con frialdad. — ¿Donde esta la mujer? —Preguntó.

—Tomando un descanso  afuera, se veía agotada.

—¿Que le hiciste?

—Sólo está tomando un descanso. Al parecer es un muy buen sueño.


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En un agradable sueño...

Sol, arena, la cálida brisa salada y el sonido de grandes olas movidas por el viento. Un paraíso.

Una pelirrojo estaba en el paraíso. Solo con lentes oscuros y un bikini violeta, sentada en una cómoda silla de playa con una sombrilla grande tapándola del encandilante sol.

A su lado, un joven muchacho de cabellos oscuros, con lentes de sol y un traje de baño azul marino, también recargado cómodamente en una silla de playa. Su  respiración se oía profunda, mostrándose en un apacible descanso.

Karin bajo los lentes oscuros para ver al hombre de sus sueños a su lado, sonrió con entusiasmo y dio un largo suspiro de tranquilidad.


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En la realidad...

—Dices que vienes a hablar, así que habla.— Dijo el Uchiha con frialdad recargándose en una pared del pasillo.

Kanna se cruzó de brazo. Volteó viendo al joven Uchiha. Era cierto lo que había oía en Konoha, Sasuke Uchiha era de carácter imponente. Aunque parecía desalineado, con el cabello algo largo y con algunos ojeras, demasiado pálido, casi con un fantasma.

Pero lo mas intrigante eran sus ojos, oyó múltiples historias de sus doujutsus. Aunque  solo era visible su ojo derechos algo no paresia encajar en su mirada.

—Los Kages quieren respuestas creíbles o tu cabeza. Te metiste en problemas y supongo que ya sabes por qué.

Sasuke sólo resoplo con molestia  y volteo a otro lado.
—Y me pregunto, ¿Qué paso contigo?.— Continuo Kanna con ironía. —Empezaste siendo un shinobi solitario llevando a la justicia a aquellos que se aprovechaban de su poder, ayudando a las personas de los poblados a los que llegabas.

—Hacia su trabajo sucio y aun asi no están conformes.

—Y luego ¿Que paso? Te cansaste. Tal ves pensaste. "Esto es demasiado lento, son solo escoria, por qué no ahorrarles más el trabajo con estas alimañas"—Kanna molestaba con sus insinuaciones, viendo si algo afectaba al Uchiha, pero no se veía cambio. —Estás en problemas ¿Y aún así no piensas decir nada, ni siquiera defenderte?—Kanna empezaba a molestarse.

—Solo dijiste que venias a habla, yo no me comprometí a decir nada.—Dijo el pelinegro con molestia.

—257 shonobis muertos por tu mano y ¿No dirás nada?

—Es todo lo que tienen que saber.

—Se acabo... tienes dos opciones para salir bien librado de esto...— Dijo la joven con severidad— o
hablas... o matas al mensajero.— sonaba retadora, tal ves demasiado
confiada, cosa que en Sasuke provocó una reacción peculiar.

--¡ja,ja,ja!... ¿Eres del tipo de persona que no se informa de su misión... o eres optimista al punto de lo ridículo? — Una carcajada, Sasuke Uchiha riéndose como si de un chiste se tratara, cosa que alegró a la joven.

-- Bien... -- Kana sonrió-- Quiero ver que intentes lo segundo.--- Y Kanna desapareció en una bola de humo.

El lugar se encontraba en silencio, Sasuke permaneció unos segundos pensando en lo siguiente. Se dispuso a seguirla y desapareció.

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Estaban dentro del bosque, algo alejado de la cabaña.


—Tardas demasiado... Uchiha-- Kana estaba sentada en el piso con las piernas cruzadas.—Pero me encontraste.

—No sabes esconderte.—Dijo Sasuke seriamente.

De el suelo surgieron dos enormes serpientes negras que rodearon el cuerpo se la chica fuertemente. El cielo se tornó rojo intenso y los árboles negros.

—Eres un fastidio— Dijo el Uchiha en tono bajo pero tétrico  mostrando su sharingan.

Con paso lento caminó hacia la chica empuñando una Katana negra.—Tengo que quitarte las ganas de pelear contra mí.— Quedando en frente de la chica, Sasuke levanto un poco su arma hasta quedar a la altura de su cabeza  para terminar con el problema.

Físicamente el Uchiha se acercaba a paso firme  en dirección a la chica. Cuando estaba a punto de agacharse para levantarla y llevarla a otro sitio, en la ilusión las serpientes seguían haciendo presión.

Luego kanna sonrió. En una explosión desapareció entre plumas blancas y un fuerte viento.

Todo se quedó quieto en ese instante.

Afuera, en un parpadeo un kanji con la palabra vida ( 生 ) grabada en la mano derecha de la chica se encendió en un rojo anaranjado. En una bola de humo la shokuto de la chica apareció en su mano derecha, la sacó de la saya, la cargó de electricidad y la agitó hacia el Uchiha.

Por la velocidad, Sasuke no tuvo más remedio que usar su rinnegan para retroceder.

Kanna se levantó del suelo con seriedad en su mirada sujetando la saya en su cintura. —Te dije que sólo había dos opciones.

—¡Eres una molestia!— Sasuke cargó un chidori en su mano tratando de acertar a la pelirroja. Está se movió unos pasos, tocando el suelo y haciendo un muro de roca con un pergamino explosivo que se activó con el golpe. Ambos retrocedieron.

Kanna se acercó a Sasuke haciendo que esté sacara su arma. Ambas espadas chocaros  sacando chispas al separarse, seguían moviendo su arma chocando una y otra vez. Kanna trato de darle un golpe en la cara pero el Uchiha lo esquivó.

Sasuke pateó a la chica en una pierna, esta sólo se movió unos centímetros al costado. Luego Sasuke canalizó chakra en la pierna apoyada  el suelo, dio un salto para impulsarse y patear a la chica en la cara.

Kanna detuvo con el brazo el golpe pero fue tan fuerte que la lanzó varios metros golpeándose contra el suelo.

—Katon: Goukakyuu no jutsu. [Estilo de fuego: Jutsu Bola gigante de fuego]— Sasuke creo su más antiguo jutsu para  para acabar con la chica.

—Suiton: Suiryūdan no Jutsu [Elemento Agua: Jutsu Misil Dragón de Agua ]— Dijo Kanna lanzando una gran cantidad de agua en forma de dragón que al colisionar con la bola de fuego creó una gran cantidad de vapor que ella aprovechó. —Kirigakure no jutsu. [Jutsu de ocultarse en la neblina]— Con el jutsu creo una neblina tan espesa que no permitía ver más allá del suelo que están pisando.—Tengo que encontrarlo antes de que él me encuentre a mi— Kanna cerro los ojos, esperando notar algo.—Ahí esta. — y desapareció entra la neblina.

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Sasuke observaba a todos lados. Esperando un movimiento, algo que le mostrara qué atacar.

Luego la sorpresa fue grande al sentir una afilada hoja atravesando desde arriba de su nuca saliendo a su pecho. El pelinegro calló el suelo al instante y la chica apareció a su espalda.

—Clásico de un Uchiha — Dijo Kanna girando hacia atrás — Hacerte creer que tienen la ventaja.— Movió su espada,  esta ves con chakra tipo viento, repeliendo cientos de shurikens en el aire y quitando la neblina. —Y luego atacarte con la guardia baja. Necesitas mejores trucos.

—Maldita molestia ¡¿Aun crees que puedes ganarme?!— Sasuke apareció.

—Hice mi tarea Uchiha Sasuke, no creó que alla algo de ti que no conozca.

—Probemos eso. ¡Amaterasu!— Llamas negras aparecieron alrededor de la chica, poco a poco acercándose y aumentando su tamaño. —Ríndete ya. Éstas llamas no se detendrán hasta consumirlo todo.

—No lo haré— Dijo la chica con determinación guardando su arma.

—Yo me largo.—  Sasuke dijo con enfado dando la vuelta.

A unos segundos de caminar una fuerte ráfaga de aire se desató empujando a Sasuke adelante unos centímetros, él cerró los ojos resoplando con  molestia. —Es peor que una cucaracha.— Musito.

Kanna estaba en el aire con las mangas quemadas. —Katon: Karyū Endan [Estilo de fuego: Misil flama de dragón]— Pensó aspirando fuertemente, al exhalar una gran llamarada de fuego se dirigió a Sasuke, las llamas lo rodearon por completo, no había rastro de él hasta que empezaron a disiparse.

Poco a poco la visibilidad era más clara mostrando un enorme brazo esquelético púrpura enfrente de Sasuke. Susanoo hacia acto de presencia.  Empezaba a tomar forma completa, tenía el doble de tamaño de Sasuke, no era tan colosal como en otras ocasiones pero era de temer. La criatura preparó su arco y una enorme flecha.

—Susanoo es imposible de esquivar.— Kanna colocó sus brazos protegiendo su pecho con las palma al frente. Tenía muchos kanjis en hilera tatuados alrededor de sus brazos.

La flecha fue lanzada, en poco segundos ya estaba cerca de su objetivo.

Kanna cerró los ojos. —Absorción— Dijo para sí misma. La flecha empezó a emanar un brillo azul volviéndose chakra, de a poco empezó a hacerse más delgada.
Las marcas de los brazos de la chica tomaron el mismo tono azul y luego la flecha desapareció por completo. Ella cerró sus manos poniendo sus puños al frente.
—Fūton: Atsugai. [Elemento Viento: Daño de Presión]— Kanna lanzó una gran masa de aire en dirección al Uchiha, la presión era tan grande que una gran cantidad de arboles eran arrancados y hechos pedazos.

Sasuke se protegió con los brazos del Susanoo. Repentinamente el Susanoo empezó a agrietarse, el viento seguía desatado,  provocando más grietas y rupturas.

Después de unos minutos el viento seso. El susano parecía desmoronarse hasta que desapareció.

Sasuke se veía agotado, intentó dar un paso al frente pero sus piernas flaquearon, desplomándose de rodillas, deteniéndose con los brazos.


—Estas acabado, no tienes chakra, ni fuerzas para continuar y a mí aun me queda suficiente para acabar contigo... pero prometí que no te haría mucho daño.— Dijo Kanna con molestia, miró a Sasuke a los ojos unos segundos por fin podía ver su rinnegan. Resopló y continuó hablando. —"Arrogante... irrespetuoso... antipático... oportunista... frío...  despiadado... peligroso..." Es la opinión general que tiene la gente de tú aldea de ti. Mujeres, hombres, ancianos, shinobis; te consideran una amenaza, incluso niños te consideran un personaje de miedo.
Alguien extrañamente me dijo: "Puede parecer soberbio o antipático pero es fuerte" "Aunque a cometido errores a sabido cambiar su vida" "Nació para esto." me contó de un shonobi talentoso. más que eso, de quien considera su hermano, "Entendimos el dolor del otro y eso nos unió", dijo con tanta seguridad que era imposible no creerle. Luego, en el pueblos de aquí cerca la misma historia se repetía. La mayoría desconfiando, tienen  miedo de ti. Pero una mujer mayor te llama héroe, pensé que algo debiste hacer bien... Pero yo no veo a él héroe, ni siquiera a la amenaza... Ahora veo a alguien cansado, desconectado y solo.—Kanna resopló. —  Sólo lo diré una vez, regresa a tu aldea y coopera, por que ya no tienes otra opción. Si esto continua no solo tu tendrás problemas, también los que creen en ti.— Y Kanna desapareció en una bola de humo dejando a Sasuke agotado y confundido.

Continuará...

Genial! Me encanta tu fic, esperaba la continuación! Sigue asi! Saludos!

Uzumaki: Crónicas de amor y lucha.

Capitulo 11: Un nuevo y problemático "conocido".

Soundtrack: "Soredewa, mata ashita" de Asian Kung Fu Generation

~•~•~

Anteriormente, un joven rubio corría por velocidad por la calle buscando una forma de tener tranquilidad. Dijo cosas de las que se arrepentía y que rompieron su corazón.

Al tocar una puerta un hombre abrió.

—Kurotamashi-sama.— Dijo haciendo una reverencia. —¿Kanna-nee está aquí?.

—No está, pero dijo que volvería pronto. Puedes esperar aquí si quieres.— Dijo el hombre dejándolo pasar. Naruto entró a la casa.— Sólo dime Kuro, ella lo hace, ya me acostumbré.— Dijo con fingida molestia.

Naruto se sentó en el sillón con cara melancólica jugando con sus manos y mirando al suelo.

—Muchacho, ¿Quieres té?

—No gracias.— Contestó Naruto con el mismo semblante.

—Creo que lo necesitas. Te ofrecería café pero no te ayudara.— Kuro se fue a la cocina después de unos minutos regresó con dos tazas de té, las dejó en la mesita y se sentó a la otra esquina.
—No aceptaré un no, sólo es té verde, ayuda a relajarse.

Naruto no sé quejó, sólo tomó la taza y le dio un sorbo. Unos minutos y todo estaba de nuevo en silencio.

Muchacho ¿Puedo ser honesto contigo, verdad?— Dijo Kuro moviéndose de lado para ver a Naruto, éste sólo asintió sin voltear a verlo. —Te ves horrible, no es como que me afecte mucho pero no me gusta ver tan depresivo a nadie. Si necesitas hablar puedes hacerlo.

—No quiero hablar de nada.— Naruto se veía tan triste que no parecía en nada al muchacho que conoció antes.

Kuro se levantó del sillón, entró a un cuarto. Estuvo unos minutos moviendo cosas y salió del cuarto con varias cajas.

Se puso enfrente de la mesita y se sentó en el suelo con las piernas cruzadas con una caja de madera, la abrió, sacó piezas y las acomodó.

—Imagino que estás más familiarizado con el shoji que con el ajedrez así que por qué no jugar un rato.— Naruto lo miro confundido.— Vamos esto no es divertido con sólo una persona, tú comienzas.

Naruto no dijo nada, sólo lo miro y se acerco a la mesita, se sentó en el suelo y empezaron a mover piezas uno a la vez. Pocos minutos después el juego terminó
—Tengo tu rey yo gano, realmente eres malo para esto.— Dijo Kuro tratando de jactarse.

—No me gusta el shoji.— Dijo Naruto con algo de molestia.

—Bueno, puedo encontrar alguna otra cosa.

Damas, Batalla naval, Scrable, incluso en gato el Uzumaki fue aplastado totalmente.

—Si... eres malo para esto.— Kuro seguía molestando.

Naruto se levantó harto de perder. —¡Puedo asegurarte que el siguiente juego lo ganaré yo, Dattabayo!.— Gritó con emoción exagerada y rabia asesina.

Kuro estaba muriendo de risa. —Je,je,je Quiero ver eso... pero no tengo dinero.

~•~•~
2:00 AM. Todo en calma en Konoha. Una joven regresaba a su departamento después de una noche ajetreada.

Al abrir la puerta su sorpresa fue grande al oír a su compañero quejarse con fuerza.

—¡Chikusho! Nunca había visto a alguien con tanta suerte.— Se quejó con molestia y gruñendo.

—¡Je, je, je!— Naruto reía como loco recostado en el suelo y pataleando.

Kanna observó al lado del sofá, parecía irreal. Naruto estaba sin camisa, con un zapato y sus pantalones. Kuro estaba peor, sólo tenía unos boxer de rayas azules y nada más.

Ambos volvieron a ver a la chica, estaban rojos de vergüenza y ella los veía con los ojos como platos.

—Si interrumpo iré al cuarto y creo que ustedes deberían cambiarse. Tengo que hablar contigo.—Señalo a Kuro y entró a la recamara sonrojada e incómoda.

Ambos hombres estaban avergonzado y no pudieron decirme una palabra solo se pusieron la ropa lo más rápido que pudieron.

Ya con ropa Kuro corrió a la recámara y tocó la puerta.

—¿Puedo pasar?— Pregunto Kuro con nervios.

—Pasa.

El hombre abrió rápido la puerta y entró. Miro confundido una chaqueta quemada y un pantalón maltratado en la cama. Kanna estaba a un lado de la ropa, estaba recostada en la cama viendo el techo, solo tenia puesta una camisa de tirantes purpura y un pantalón corto negro.

—Parece que te divertiste.

—Si... claro...

—Creí que me necesitarías, ¿Qué ocurrió? ¿Es tan fuerte como dicen?

—Fuerte si... pero no como lo cuentan, estaba como perdido, desubicado tal vez.

—Te ves agotada, si no era tan fuerte ¿Que paso?

—Me excedí. absorbi mucho chakra, lo transformé y lo expulse, mis canales de chakra están resentidos.—La chica seguía viendo el techo.

—Evitarías estos problemas... pero no... la niña quiere hacerlo espectacular, alocarse con los jutsus, probar su genialidad, y no solo expulsar chakra en bruto.

—Su Susanoo me atacó, era demasiado chakra, si lo regresaba así le habría hecho mucho daño.

—Mmm... —Exclamo tocándose la barbilla. —Susanoo, habilitad de alto nivel ¿Que tan grande era?

—Dos, tal vez tres metros, nada sorprendente.

—y ¿Crees que está con ellos?

—No... dos mujeres y una anciana lo cuidan. No había rastro de nadie de Kushikutai. No seria lógico dejarlo a su suerte.

—Eso aclara las cosas.

—Aunque había algo en sus ojos que no encajaba... pero a la vez era familiar.

—Debe ser el parentesco, todos se ven igual.

—Pero buena esto aun no acaba, tendré tiempo para descubrirlo.—Kanna se levantó de la cama.

—Bueno, por cierto el muchacho llego hacer algunas horas, estaba algo deprimido, quería verte.

—Se veían entretenidos.

—No podía dejarlo así, pero dejo de ser divertido cuando pase de aplastarla con mi estrategia a deberle una dotación de un mes de ramen y no tener ropa. Nunca había visto a alguien con tanta suerte, un póker de Ases sin cambiar cartas, incluso revise por si hacía trampa y nada, fue pura suerte.—Se quejó el hombre exageradamente.

Cuando fueron a la sala Naruto estaba recostado en el sillón, con un brazo tapando sus ojos, respirando pausadamente, estaba profundamente dormido.

—Bueno, hay que dejarlo descansar, traeré una manta y sera mejor dormir también.— Dijo Kanna morando a Kuro.

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Muy tarde ya, después de unas horas de descanso, Sasuke Uchiha por fin tuvo la fuerza para levantarse del suelo .

Su contrincantes hacía ya varias horas que se fue, dejando como prueba de su encuentro una destrucción impresionante el bosque.

Caminó poco a poco sin prisa a la cabaña. Aún esa gigantesca luna de otoño iluminaba su camino.

Su mente estaba confundida. Vagando entre lo que había pasado y tratando de darle sentido. Pero aún había muchas piezas que no encajaban y preguntas que hacer.
¿Como salió del Genjutsu? ¿Porque sabía tanto? y ¿Quién era? Pero sólo había una forma de contestar.

Llego a la cabaña. Karin estaba recostada de lado en una mecedora, Sasuke se acercó a ella para conocer su estado, pero, al inclinarse, los brazos de la chica rodearon su cuello dejándolo inmóvil.

—Sasuke-kun— Dijo tiernamente entre sueños, levantó sus labios con intenciones obvias pero Sasuke interrumpió.

—Karin... despierta.—Dijo con incomodidad.

La voz del Uchiha la despertó, pasaron unos segundos y vio lo que estaba haciendo.Alarmada y sonrojada lo soltó.


Aunque sus sentimientos sean claros para él, no son cosas que ella haría en plena conciencia. Lo soltó con velocidad y volteó al otro lado.


—Disculpa por eso Sasuke-kun.

—¿Estas bien?— Pregunto el Uchiha reincorporándose.

—Estoy bien, porque no lo... estaría...— Karin empezó a recordar lo ocurrido, una mujer y luego un hermoso pero largo sueño. —¡Donde esta esa bruja!— Gruño con rabia —A ella la mato. ¿Donde esta?.

—Se fue, ve a dormir, tienes que descansar.—Dijo Sasuke secamente.— Karin, ¿Recuerdas que te dije que iría a Konoha? Partiré mañana.

—Claro... podríamos...—Karin no pudo continuar.

—Gracias... pero sólo yo. —Dijo Sasuke con seriedad, tanto que Karin no pudo refutar nada.

~•~•~

Ya habían pasado 4 días desde que el incidente en Ishiraku.

Una joven pelirrosa caminaba por el bosque con un objetivo en particular.

=•=•=
—Flashback—

Unas horas antes Neji Hyuuga se encontró con ella.


—Hace unos dias hubo un incidente con ex shinobis, miembros rebeldes de la extinta raíz. Atacaban comerciantes y viajeros a las afueras de Konoha. Fueron rastreados pero murieron en fuego cruzado.

—¿Y qué tiene que ver en todo esto?

—Que las armas que tenían concuerdan con las que usó la atacante misteriosa.

—¿Quien estaba a cargo de la búsqueda?

—Según se, Shikamaru-san era el líder de la misión. Se encontró a 2 kilómetros de la pelea una bodega subterránea llena de estas armas. Fue vaciada y no encontraron nada aparte de dichas armas y explosivos, pero quizá podamos encontrar algo más. Si me permite podríamos ir mañana temprano y...

—Lo siento neji, iré sola hoy mismo, así sera más rápido.

—Podría ser arriesgado.

—Yo puedo, estaré bien.
•=•=•
Sakura llevaba caminando un rato. Sabia que la seguían desde que salió de la aldea pero no dijo nada tratando de averiguar hasta donde llegaría.


Apresuró el paso y el individuo hizo lo mismo. Caminó entre los árboles, saltando de un lado para otro con velocidad, pero el individuo no se rendía.

Al salir del bosque sólo faltaba un kilómetro para llegar al lugar que Neji le indicó.

—¡Mariko-San!— Gritó. —Esperaba que desistiera antes.

—Disculpe Sakura-san, tenía curiosidad, creí que no me notaría.— Dijo la mujer saliendo de su escondite.

—Será mejor que regrese. Podría ser peligroso.— Dijo la pelirrosa con molestia.

—¿A dónde va Sakura-sama? ¿Si es tan peligroso porqué va sola?

—Yo estoy acostumbrada a misiones peligrosas, y esta es una de ellas, así que regrese sin quejas. — Sakura se veía molesta, esa muchacha era demasiado insistente con el asunto de su jefe, día tras día, pero llegar al punto de seguirla era ridículo.

En un instante su semblante cambió. Volteó y a unos metros delante aparecieron siete individuos con capaz grises de mangas anchas y sombreros grandes de paja, con la boca tapada y no se les veían los ojos.

Los individuos levantaron los brazos en dirección a las chicas luego lanzaron como proyectiles un centenar se sembons.


Sakura corrió hacia la jovencita, la cargó con fuerzas y se escondió entre los árboles.

Vio una herida en su brazo a causa de las agujas. —¿Estás bien?— le pregunto a la muchacha que tenía los ojos cerrados.

—No lo sé, me duele la pierna.— contestó la muchacha algo asustada.

Sakura trataba de observar de reojo a los individuos que seguían lanzando sembons. Luego uno a uno empezaron a caer atravesados a la mitad.

Un joven apareció. Alto, de ojos azules oscuros, de cabello castaño oscuro algo largo cayendo de lado derecho, llevaba camisa negra sin mangas y pantalones azul marino, con un porta shuriken en la pierna. Guardaba un ninjato en una funda en su espalda.

—Señoritas, ¿Están bien?— Gritó el muchacho.

Sakura se acercó a Mariko, sacó una aguja con un líquido verde de su porta shuriken y con más fuerza de la necesaria la clavó en el brazo de la joven sin siquiera subir la manga.

La pobre mujer gritó con fuerza. —No es justo.—se quejó lloriqueando. —Es mala Sakura-sama.

Era necesario, además tal vez así reconsidere seguirme.— Hablaba Sakura con tono de burla.

El desconocido se acercó con velocidad, cuando estuvo cerca Sakura esta se levanto de golpe sacando una kunai de su bolsillo y la puso en el cuello del individuo. Esté solo levantó las manos.

—Sólo le preguntaré una vez. ¿Quién eres y qué haces aquí?.

—Que amable.— Dijo el hombre con sarcasmo.

—¡Contesta la pregunta! — Gritó apretando la kunai.

—Bien.—El hombre resopló. —Sólo estaba entrenando por aquí cuando oí su alboroto y traté de hacer algo amable salvando sus vidas. Por cierto... de nada.

—No necesitaba tu ayuda.— Furiosa le reclamó. —Y te falta contestar una pregunta.— Sakura podía ser aterradora cuando se lo proponía.

—Mi nombre es Isamu, y según tú brazo si necesitabas ayuda.

—Es sólo algo leve.— Sakura le quitó la Kunai del cuello.

—Tiene veneno.

—Era sólo acónito, é lidiado con cosas peores.

—Para un ninja médico de su nivel supongo que esto es como un juego de niños.

—A... si...y según tú ¿Qué nivel tengo?— Pregunto Sakura con desconfianza.

—No es como si fuera muy difícil de saber.— Explico con nervios.—No soy un acosador o un fanático sólo se que usted es una muy talentosa ninja médico y todo el mundo lo sabe. Yo sólo soy un shinobi retirado.

—Si está retirado, ¿Por qué los entrenamientos?

—Costumbre, puedo estar retirado pero no muerto.

—Eres muy joven para estar retirado.

—El mundo es así, ya no necesitaban a alguien como yo y me despidieron.

— ¿Y cómo son las personas como tú?— preguntó la pelirrosa cruzando los brazos.

—Haces demasiadas preguntas Sakura-sama, creo que eso se dice para la tercera cita.— Dijo el joven con gracia.

Un hombre llegó de repente. —Mariko-sama, le he dicho muchas veces que no desaparezca asi sin decir nada.— Dijo con seriedad.—Disculpe si le causo molestias Sakura-sama.— Tomó a Mariko en el hombro y simplemente desapareció.

—"Un problema menos."— Pensó la pelirrosa. —Tengo trabajo que hace, así que tú también deberías irte.

Sakura se disponía a continuar.

— No creo que deba ir sola— Replicó el muchacho— Yo podría acompañarla, una dama no debería ir sola a ningún lado.

—Eso no aplicá conmigo .

—Puede necesitar un respaldo.

—No.— Contesto secamente.

—Puedo cubrir su espalda.

—No confío en ti para darte siquiera la espalda.

—Entonces usted cuidara mi espalda.

—¿Y si tú estuvieras en esto?

—Claro que no, cómo cree que yo...

—Qué tal si tú activaste las marionetas.— Comento con desconfianza.

— Claro que no.

—Yo me largo, tengo mejores cosas que hacer.— La pelirrosa caminó al frente.

El joven confundido la siguió. —Creí que no me daría la espalda.

—Eres un tipo molestó y te voy a ignorar, así que aléjate.— Dijo sin siquiera mirar atrás.

—¿Que acaso Sakura Haruno no era una amable kunoishi con un gran corazón?

— Te mintieron.— Contestó con molestia.

Al llegar al punto que Neji le indicó, Sakura buscaba la dichosa bodega con esmero.

Por un largo tiempo nadie dijo nada. Sakura estaba analizando el territorio y el muchacho solo observaba.

—Y ¿qué esta buscando Sakura-sama?

Sakura no dijo nada, solo siguió observando.

—Porque que a unos metros por allá hay algo.— Continuó el castaño.

—¿Por dónde?— Sakura se impresiono olvidando su molestia por un momento.

El joven la guió al lugar, movió algo de tierra del suelo, había una pequeña placa con un kanji grande (Apertura) y varios pequeños alrededor.

—¿Cómo lo viste?

—Me di cuenta de la tierra suelta.

—Pero ¿Cómo se abriría?

—Yo se. — Hizo varias posiciones de manos y tocó la placa, al instante enfrente de la placa la tierra se movió. Piezas de roca empezaron a hundirse colocándose en forma de escalera.—Ya esta— Mencionó contento hasta que volteo en dirección a Sakura.
Estaba con los brazos cruzados y moviendo la pierna derecha, lo miraba con intriga y molestia. —¿Qué?— contesto con ingenuidad, luego capto la razón de esa mirada.—Son sellos de un escuadrón que conozco, nada mas... yo no tengo nada que ver.— contesto preocupado por lo que pensaba Sakura.

—Entrá— Dijo secamente Sakura con molestia.

—Entonces cuidara mi espalda Saku-chan.

—Camina calladamente y no me digas Saku-chan.— Gruño la pelirrosa.

~•~•~
Entraron al lugar, éste estaba completamente oscuro.

Sakura sacó una linterna de su mochila y comenzaron a caminar por un pasillo largo. Habían varias habitaciones de paredes claras pero no tenían nada.

— Y¿quién te hizo enojar Saku-chan?

—Quién te dio permiso de decirme "Saku-chan".— respondió con enojo.

—No se contesta una pregunta con otra pregunta.— Dijo el muchacho con simpatía pero a la pelirrosa no le dio gracia, el muchacho suspiro. —He oído tanto de usted que ahora que te vi en persona me emocioné y tal vez me porte demasiado familiar. Disculpe por el atrevimiento.— Su semblante cambio, ahora se veía triste y avergonzado.
—Éste lugar se ve demasiado solitaria, si me dice que busca Sakura-sama podría ayudarla mas.

—Ni siquiera yo sé que busco.— Respondió con el mismo semblante de seriedad.

—Todo se ve extrañamente vacío.

—Chunins lo revisaron antes, sacaron armas y explosivos.

—Entonces limpiaron bien, aquí no hay más que polvo. ¿Para qué mandar a alguien a un lugar vacío?

—Nadie me envió.— Contestó cortante.

Fueron a la última habitación, era más pequeña que las demás pero también estaba vacía.

Sakura entró, revisó cada rincón de la habitación pero sólo eran cuatro paredes grises y nada más.

—¿Esto es todo? No hay más.— Se preguntó quejándose de la situación.

El muchacho entró, sólo dio un paso y su semblante cambio a uno pensativo.

Empezó a mover los pies dio saltos y paró, fue a otra parte del cuarto y saltó igual, fue a la puerta y empezó a saltar de afuera adentro con entusiasmo.

Sakura lo observó con vergüenza. —"Está demente"—pensó con la mano en la frente.

—¿Oíste eso?

—¿Oír qué?— Contestó confundida.

—Metal crujiendo, hay algo abajo.

Isamu movió a Sakura unos pasos de dónde estaba parada, empezó a dar saltos otra vez. —Aquí está la entrada.— El muchacho empezó a revisar el suelo quitando una baldosa negra. Había un pergamino grande bloqueando la una entrada. El joven Isamu lo arrancó esperando a ver que sucedía.

Cinco bolas de humo aparecieron detrás de ellos. Al despejarse mostraron cinco marionetas como las que aparecieron en el bosque.
Isamu no tubo tiempo para reaccionar. Las marionetas levantaron los brazos pero cierta kunoichi no dejaría a esas marionetas enteras.
—¡SHANARO!— Con una poderosa patada golpeo a una de las marionetas. Le destrozó el brazo de madera y metal, luego el resto de ella fue lanzada a la siguiente y la siguiente, las 5 fueron lanzadas con fuerza y clavadas en una de las paredes de concreto. —Inútiles juguetes, te dije que podía yo sola.

El muchacho la vio con los ojos como platos, luego con una sonrisa nerviosa. —Eres impresionante.— Dijo con miedo. —"Ya entiendo lo de Fuerza Aterradora. Será mejor que no la haga enojar."— Pensó para sí mismo. —Bien vayamos abajo.— Abrió la compuerta. —Diría que las damas primero pero podría ser peligroso así que...

Sakura cruzó los brazos otra vez. —¿Peligroso para quién?

—Nada, sólo olvide lo que dije.— Comento.

Con un salto bajó Isamu seguido de la pelirrosa, sólo iluminados por la linterna. Era una habitación pequeña, con pergaminos y archivos organizados en estantes en las paredes.

Empezaron a buscar. Después de un rato revisando documentos irrelevantes para ella. De shinobis y dinero Sakura se tiró al suelo y se recargo en una pared.

Estaba rendida, con cansancio y frustración. Nada tenía sentido. no decían nada después de tanto tiempo esperando.

—Estás bien.

—Si.— Respondió secamente.

Debajo de un estante un papel se asomaba apenas visible, una fotografía de una mujer con una coleta corta y alborotada, con una banda de Kumogakure colgada en el cuello.
Una mujer hermosa pero con un semblante serio como si se tratara de una fotografía oficial. Al voltear la imagen se veía algo escrito "Aspirante a Reina. Deceso 5 días en La Colmena."

—¿Qué es La Colmena?

Tres explosiones, una detrás de otra llamaron abruptamente la atención de ambos. Salieron aprisa del lugar.

—Las explosiones fueron afuera. Parece que llegaron a dañar los soporte. — Dijo Isamu.

El techo empezaba a caer a pedazos. Concreto y rocas se veían cayendo a su espaldas. Mientras corrían para salir del lugar, complicándose por la oscuridad, empeoraba la situación, el pasillo a varios metros enfrente de ellos también empezaba a caer. Se detuvieron.

Sakura mostró el diamante de su frente y rápidamente el sello Gin ya estaba en su cara. Saltó ya con chakra en el puño dando un golpe fuerte en el techo.

Lo que eran rocas y concreto sólido en un segundo se convirtió en grava y arena. El golpe fue tan fuerte que no sólo destruyó el techo también creo un enorme cráter destruyendo lo que quedaba del lugar.

Cayó en el suelo de rodillas, ya cansada por el ataque. —"Me he descuidado con el tiempo."— Pensó Sakura al notar su cansancio.

Isamu sólo salió de los escombros lleno de tierra, tosiendo por culpa del polvo. Lanzó un silbido de impresión. —Cuánta fuerza. Juro por el amor que le tengo a mi vida que no te haré enojar Saku-chan.— Dijo con un entusiasmo sacandole una sonrisa a la pelirrosa.

—Lo estás haciendo mal—Comentó con diversión después del caos.

A lo lejos una conocida mujer observaba el destruido escenario.

—Es poderosa pero no me sorprende.

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—Ren mandó un mensaje, Sakura-sama sobrevivió. Al parecer no fue problema.

—Mariko-sama disculpe si no fui suficientemente duro.

—No te preocupes, aún habrá tiempo para ver si sólo fue suerte.

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Con la respiración agitada y el cuerpo cansado, Kanna se levantaba del suelo húmedo. En una habitación oscura con una ligera luz naranja la pelirroja se defendía de un enemigo poderoso.

Por una ráfaga de kunais, shuriken de viento endemoniado, una gran lluvia de golpes y patadas la pelirroja ya estaba retrocediendo.

Una sombra humana con intenciones de acabar con el enfrentamiento apareció tras de ella como un relámpago naranja, en su mano lleva una kunai que no titubeo en usar contra la joven clavandola en su espalda. Kanna se sorprendió y sólo cerré los ojos.

~•~•~

En una habitación grande con varias ventanas pequeñas que permitían la entrada de luz, estaba Kanna sentada en el suelo con los ojos cerrados.

Despertó alteradas y se recostó en el suelo recuperándose, también estaba un rubio sentado en el suelo viéndola con preocupación.

—¿Estás bien Kanna-nee?

—Si...— Contestó ella con dificultad. —Sólo no es muy cooperativo pero estoy bien.

—¿Te dijo algo?— Preguntó Naruto con preocupación.

—Antes de querer matarme...— Respondió con una risa. —Sólo que no hablara con nadie más que contigo, lo siento, en su mundo no puedo hacer nada más.

—No pienso hablar con él, está loco.— Cruzando los brazos Naruto negaba con la cabeza como un niño pequeño.

—Bueno... intentaremos otra cosa.— Kanna se levantó del suelo, se limpió el pantalón y se estira un poco. —Es cansado estar tanto tiempo en esa posición. No sé meditar muy bien.

Naruto se puso más serio y algo triste. —Te acostumbras con el tiempo he pasado días así, cuando aprendí el Modo Sannin.

—¿Porque tan triste?.

—Porque recordé a mi maestro. Murió hace un tiempo. Tambien era mi padrino, de quien te conte.

—Lo siento. Suena a un hombre impresionante.

Interrumpiendo la plática, entre una nube de humo llegó Kuro con un semblante serio al otro lado de la habitación.

—Parece que tiene noticias. Si quieres seguimos mañana.—Dijo Kanna mirando a Naruto y camino hacia Kuro.

—Parece que se metieron a una lavadora en doble ciclo. — Se burló Kuro del semblante de la muchacha.

—Muy graciosos, ahora haces chistes.

—¿Algo nuevo?

—No... su alter ego se niega a hablar y no puedo convencerlo, es el amo de ese lugar. Pero no llegarías así para saber cómo vamos.— Kanna lo vio con curiosidad.

—Hay noticias. Hubieron explosiones cerca de aquí y la Hyuuga está rondando, la chica Haruno estaba en medio y tu amigo, el necio, también está inmiscuido.

—Yo le dije que estuviera atento, pero parece que hay más ¿Verdad?

—Uchiha está cerca.

—Si que es lento, pero que bien... un problema menos.

~•~•~

El regreso a konoha fue mejor de lo que Sakura esperaba. Después de la que consideraba una decepcionante incursión a terreno enemigo, una compañía peculiar e inesperada la acogía.

Isamu trataba de animar a cada paso que daba y a pesar de que Sakura se resistía a reír no lo logró.

Desde accidentes entrenando, bromas pesadas y comentarios de cualquier cosa.

— No puedo creer que no hayas entrado a algún casino, pero por lo menos has apostado La ruleta o jugado Blackjack.— Dijo el joven burlón.

—No pienso ir a esos lugares jamás, lo más cercano a apostar que é llegado es a un lugar de máquinas tragamonedas, y perdí mi salario de una semana. No vuelvo a apostar en mi vida.

—Bromeas... cierto... la adrenalina, la energía de la competencia. Se tiene buenas y malas pero vale la emoción del juego.

—Suenas a un adicto.— Se burló Sakura.

—Claro que no. Hay reglas para no llegar a eso. Jamás gastar más de lo que tienes, no pidas prestado, aprende cuando retirarte sin importar si estas bien o mal en el juego y la más importante es... no beber.

—¿Porqué no beber?— Preguntó con curiosidad.

—Es el origen de los problemas, lo mejor que te puede pasar cuando estás borracho es perder todo tu dinero.

—A... si... y ¿qué es lo peor?

—Despertarte con un anillo en tu dedo, con un hombre en bikini a tu lado y un horrible y obsceno tatuaje con el nombre Jass-chan.

Sakura rio tan fuerte por el comentario. —Que cosas se te ocurren.

—No son inventos míos, a un colega le pasó y fue horrible. Es lo más triste ver a un hombre llorar.

— ¿Tan traumático fue para tu amigo?

—No... Jass-cha fue quien lloró cuando le pidió el divorcio je, je, je.

Entre risas llegaron a la aldea. Pararon en frente a la puerta de entrada.

—Podríamos vernos después Saku-chan.

—No creo que pueda pero...— Sakura volteó por reflejo la vista hacia los árboles, afuera de la aldea. —Espera un momento.— En el camino a la entrada logro observar una figura. Un hombre con capa negra que iba acercándose de a poco, a unos metros de llegar a la aldea Sakura logró ver su rostro, ese rostro inconfundible por la pelirrosa, provocando en ella un choque de emociones. Su corazón latía a mil por hora y sus manos empezaban a temblar. Trataba de controlarlo, controlar su respiración para que no se notará agitación.

Aquel que fue su primer amor, pero también le trajo grandes dolores y actualmente sospechas. Villano para unos, héroe para otros. Después de casi dos años Sasuke Uchiha volvía a la aldea que lo vio nacer.

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Hola gente , vuelvo después de tanto tiempo, estoy emocionada, no abandono este fic solo me tardo. Gracias mateeens por seguir esta historia eres un amor.

Sin mas me despido, gracias por leer y hasta luego.