Amigos Con Derechos [+18] [CHAP 4/5] [22/11/2015]

¡Oh mai gosh Nathi! Es que no tengo palabras para describir tu shot c': es tan zenzualmente secsi que dioh míoh me encanta e-e
La trama es fantástica, me gustaría saber qué sucedió con Shion, y el bebé de Naruto... ¿Realmente es papá? Me intriga bastante el tema. Y esa notoria atracción sexual que tienen es tan excitante, me gusta mucho :3 ¡y mira que era el amor platónico de Sakura! Quién como ella que puede ser su amiga con derecho. ¡Maldita! XD
Por otro lado el lemon es estupendo, tiene una mezcla, ya que bastante detallado, pero a la vez queda libre a la imaginación. ¡I like it!
Bueno Nathi, espero que esta vez no tardes tanto(?) Adssdss broma~ espero la continuación, cuídate :33

me parece aberlo leido antes

Hola, probablemente si estás registrada en fanfiction (sin alusiones comerciales) lo hayas visto ahí, también lo he publicado yo. Sin embargo si llegaras a verlo en otro lado agradecería me avisaras ya que esta es una historia de MI autoría, y no le he dado el permiso a nadie para que la tome y la publique en otro lado

Mira si te dije que lo lei antes es cierto

Disculpa pero en ningún momento dije que tu mensaje era falso, por el contrario te pedí que si lo veìas en un lugar diferente al mencionado me lo avisaras

disculpa pero eso fue hace unos meses y no recuerdo donde lo vi

Pues nada, primero me tardo un montón en actualizar y ahora en menos de un mes les traigo dos capítulos, pero es que estaba inspirada y eso hay que aprovecharlo cuando sucede XD

Aclarando unos temitas, quiero que sepan que este shot que estoy escribiendo es de mi total autoría, no es una adaptación de un fic distinto, ni de un libro, ni es una traducción ni nada que se le parezca. Si llegara a existir alguno publicado previamente al cual se asemeje, ha sido por mera coincidencia.

Adicional reitero que si llegaran a ver mis trabajos en una página que no sea la del fanfiction (sin alusiones comerciales) o acá, me lo hagan saber ya que no he autorizado a nadie para que o publique en ningún otro lugar. NO al plagio

ACLARATORIA: en este universo, Karin y Naruto no tienen ningún tipo de parentesco familiar.

Disclaimer: ni Naruto ni sus personajes me pertenecen (por desgracia), este ff es publicado sin fines de lucro. OOC.

Rated: +18.

Pareja: Naruto x Sakura


Una cuarenta y tres de la madrugada y seguía sin poder pegar el ojo. Maldito Uzumaki. Maldita improvisación.

¡Malditos nervios!

Suspiró con frustración removiéndose en la cama por enésima vez (en los últimos cinco minutos), algo en su pecho hacía una extraña presión que no la dejaba tranquila, estaba absolutamente segura que el intestino delgado intentaba asfixiar al gordo y sus dedos acabarían artríticos de tanto retorcerlos. Por todos los cielos, eso era ridículo. No es como si fuera una cita… ¿Cierto?

No, por supuesto que no. Al parecer había tocado un punto sensible de Naruto que se había decidido a darle ese pequeño regalo. Un pequeño regalo que le estaba devanando los sesos. Nunca había entendido mejor que en esos instantes el dicho de “ahogarse en un vaso de agua”, estaba haciendo de esto un drama mayor del que merecía. ¡A la mierda!

—Por Dios… ¿Es mucho pedir cinco minutos de sueño? —soltó un quejido lastimero tras hacer un puchero. Necesitaba hablar con alguien con urgencia, ¿pero con quién? Ino se había ido aquella tarde a casa de su familia, viajaría toda la noche y no quería arruinar su camino con esas boberías.

Tomó el teléfono, accedió a su servicio de mensajería instantánea favorito buscando entre los contactos que tal vez no la insultarían por escribirles a tan indecorosas horas de la madrugada, y vio a la que sería su gran salvación.

—TenTen —sonrió. Ella era una chica que vivía en otro país, mayor que la pelirrosa por dos años, graciosamente cumplían año el mismo día. Con pocas personas podía hablar tan sinceramente como con ella e Ino.

Sakura: andas despierta Ten?

TenTen: elemental mi querida rosa… sabes que el trabajo no deja vivir.

Sakura soltó una pequeña risa. Ella también estudiaba medicina, sin embargo allá la manera educativa era distinta y casi de inmediato estaba sacando su especialización como alergóloga infantil. Qué envidia.

Sakura: disponible para una sesión de enredos existenciales?

TenTen: déjame terminar con un ingreso, intimidar a los menores y seré toda tuya.

No pudo evitar soltar una carcajada, esa era la mentira más grande que le había dicho, la ojijade conocía bastante bien a su morena amiga y sabía que no era así. Solo tardó diez minutos en los que aprovechó de comerse un tentempié, no podía evitar comer con los nervios.

TenTen: escúpelo todo… o mejor lo escribes, sería asqueroso que ensuciaras el teléfono.

Sakura: verás…

Ella por supuesto ya conocía los antecedentes de la Haruno con su pediatra favorito, sin embargo Sakura había estado tan metida en sus estudios y ella en su trabajo que no le había contado el gracioso desarrollo que habían tenido las cosas desde el día que decidió volverse más loco de lo que por sí ya era e invitarla a comer para luego besarle. A medio relato, tuvo que comenzar a enviarle notas de voz, escribir este tipo de cosas era sencillamente desesperantes cuando tenía el nivel de adrenalina que se había antojado recorrer su sistema circulatorio sin control alguno.

Lógicamente, TenTen estuvo al borde de uno o dos infartos, y tras unos ocho casi-insultos mientras le iba contando todo, finalmente la ojijade llegó al meollo del asunto que la tenía trasnochada.

TenTen: mujer! Estás hecha una fiera!

Sintió sus mejillas enrojecer con furia.

Sakura: en este momento deberías apoyarme!

TenTen: a qué? Parece que lo tienes comiendo de la palma de tu mano.

Sakura: es lo extraño, está empezando a mostrarse un poco más… atento?

No sabía explicarse, y el constante zumbido que el fuerte latir del corazón enviaba a sus oídos no era de gran ayuda.

TenTen: Rosa, recuerda que Naruto tiene ya un tanto de experiencia en esto, o ya olvidaste a Karin?

Tragó en seco, ese había sido un golpe duro. Karin había sido una chica de otra universidad con la que Sakura se había vuelto relativamente cercana. Al ser ella pelirroja y Haruno con su extraño cabello color tutifruti (como a la chica de lentes le gustaba llamarle) solían emparentarlas constantemente. Estaban en el mismo grupo de guardias para ese entonces.

.-*Flash Back*-.

Sakura estaba terminando de hacer los deberes en el servicio de medicina interna, la última rotación que le tocaba del quinto año.

—Tuti —me llamó una voz femenina, compartíamos el sobrenombre.

—¿Qué sucede Fruti?

—¿Te puedo contar algo? —le preguntó con algo de timidez, cosa que se le hizo bastante extraña.

—Claro, en realidad justo iba ya a la casa. ¿Quieres pasar la tarde? Ino saldrá hoy.

—Suena perfecto —agradeció el que comprendiera que quería la mayor privacidad posible.

Llegaron al apartamento en el auto de la dueña del mismo y se pusimos cómodas, antes de llegar habían pasado por una tienda y comprado la comida así, que solo tuvieron que amontonar y acomodar muchos cojines en el suelo para hablar y almorzar, todo listo para su charla.

—Me gusta alguien —soltó de repente y Sakura sonrió ampliamente.

—¿Ah sí? —le dirigió una mirada pícara—. ¿Y quién es el afortunado?

—Alguien con el que jamás creí que sucedería algo. Y la verdad es que tenemos… algo —casi se atragantó con la comida mientras la veía revolver la suya, sonriendo con ilusión.

—¿A qué te refieres? —realmente la curiosidad la estaba matando.

—Nos… hemos besado —murmuró sonriendo, pero esa sonrisa no era una cualquiera. La pelirrosa arqueó una ceja—. ¡Está bien! Hemos… estado juntos.

—¡Por Dios Karin! —estaba realmente atónita—. ¿Estás segura de lo que haces?

—Sakura, estoy totalmente segura de que si él me buscó es porque quiere algo serio —le respondió con una ilusión envidiable en sus ojos.

—¿Entonces están saliendo? —su emoción la contagiaba y se sentía feliz muy por ella.

—No exactamente —aquello le extrañó.

—¿Qué quieres decir? —no estaba entendiendo lo que le estaba diciendo—. ¿Quién es?

—¿Recuerdas al doctor Uzumaki? —sintió una especie de puñal clavarse en su corazón, para ese entonces ya Ino le había contado lo de Naruto y su novia, ¿pero esto? —. ¿Estás bien Tuti?

La chica de ojos jade se había quedado muda, sentía como se tenía seca la boca y entendió que para ese entonces, Naruto se había colado en ella más de lo que se había dado cuenta.

—¿Sakura? —la vio, ella se veía inquieta, tal vez temiendo que la estuviese juzgando.

.-*End Flash Back*-.

Ese día decidió no permitir que ella se siguiera ilusionando igual que ella misma llegó a hacerlo, aunque obviamente ya había llegado más lejos. Mucho más lejos. Después de que le hubiera contado su experiencia ella claramente se había sentido dolida, hablaron durante mucho tiempo aquella tarde. La sorpresa vino después, e increíblemente no había sido el que aun sabiendo todo, siguiera viendo a Naruto. No.

La pelirroja chica había comenzado a intentar a manipularla para que Sakura se alejara de él (cosa innecesaria porque ya lo estaba haciendo), por ello llegó a sentirse molesta y herida por ella, por las claras intenciones que había tenido. Sin embargo a los pocos meses ella terminó finalmente su carrera, y a Sakura en cambio le quedaba un año más. Como era de esperarse, Naruto había dejado el enrollo que tenía con ella desde el momento en que se había ido y Karin se lo había dejado bien en claro cuando le escribía sumergida en la tristeza por haber sido “ilusa”.

TenTen: no caigas en sus trucos. Recuerda que eres más inteligente que él, y en planos generales, conoces lo que él cree que desconoces.

Sakura: y el conocimiento es poder.

TenTen: esa es mi Rosa! Ahora, vas a ir a esa salida, la vas a disfrutar, te lo violarás salvajemente y luego seguirás con tu vida.

Se sonrojó ante sus palabras y no pudo evitar reír a carcajadas contra la almohada, aunque Ino no estuviera no quería hacer un escándalo tampoco.

Sakura: gracias Ten, eres la mejor.

TenTen: lo sé Rosa, lo sé.

-

A la mañana siguiente y luego de finalmente tener unas pocas horas de sueño, estaba lista y arreglada para el día que le esperaba, con equipaje incluido. Había decidido irse con una sencilla falda de flores en tonos azul agua marina y blanco, combinado con una sencilla camisa blanca con detalles de encaje y unas ballerinas del mismo azul, su cabello rosa lo tenía recogido en una crineja con varios mechones rebeldes saliéndose de su lugar. Luego de que el rubio le escribiera preguntando por su dirección de habitación, no se hizo esperar mucho.

Naruto: estoy abajo Sakura-chan!

Bajó con el corazón desbocado y ahí estaba él, con su radiante sonrisa que resaltaba contra su bronceada piel, sus ojos azul cielo parecían brillar.

—Buenos días Naruto —le saludó en cuanto se bajó para agarrar su mochila y meterla a la maleta del carro ignorando los quejidos de la chica de que podría haberlo hecho ella misma.

—¡Muy buenos días Sakura-chan! ¡Estás hermosa! —respondió con emoción, dándole un fugaz beso y abriendo la puerta del auto.

—Que caballero tan entusiasta —dijo a forma de juego mientras tomaba asiento.

—¡Hoy será un día genial Sakura-chan! —él tomó asiento en el lugar del piloto y se pusieron en marcha.

El viaje duró cerca de hora y media, Sakura no podía recordar la última vez que había hablado tanto con alguien que no fuera de su círculo más íntimo de forma tan fluida, era sencillo y el ojiazul tenía una increíble facilidad de hacerla reír.

—¡Está caluroso! —exclamó el rubio luego de registrarse en una linda cabaña que había mandado a alquilar.

—Naruto, esto es demasiado —volvió a decirle Sakura sonrojada, aunque había insistido en pagar parte del costo de la estadía, lo que le había costado que Naruto la cargara en su hombro haciéndola sonrojar a más no poder mientras pasaban la tarjeta.

—Lamento de nuevo lo de olvidar que llevabas falda —el rubio se rascó la nuca sonriendo nerviosamente, pues luego de haberla cargado, Sakura prácticamente habría podido morir de vergüenza si no hubiera sido porque siempre procuraba llevar un short debajo de la falda.

—Solo… no vuelvas a hacerlo —respondió la chica intentando aguantar las ganas de golpearlo. Otra vez.

—Vamos a dar un paseo —la tomó de la mano y le dirigió una mirada que Sakura no supo interpretar, pero sintió la sangre acumularse en sus mejillas. Afianzó el agarre y solo ahí, en ese justo momento, fue cuando él jaló suavemente de ella para que caminaran.

La pelirrosa se dejó guiar, de un momento a otro se vio caminando sujeta de su brazo y él hablándole del lugar, era bastante pintoresco, y el calor no le afectaba demasiado por su ropa, él iba bastante casual con jeans, un polo y unos zapatos deportivos.

—…y por ese motivo trajeron este tipo de arquitectura al lugar —le comentaba, ella tenía una mirada asombrada ante el lugar, nunca lo había visitado y el rubio se deleitaba con todos sus gestos—. Luces… muy bonita así —murmuró él en voz baja, sintiéndose hipnotizado al verla.

—Gracias —Sakura notó entonces su mirada sobre ella, intensa, tan azul.

Se encontraban en medio de una plaza muy bonita, decorada con flores de todo tipo de colores que a la vez brindaban un aroma a fresco muy relajante. Naruto se acercó lentamente a ella, por un momento se olvidaron de lo que había a su alrededor, acarició con el dorso de su mano la mejilla de la chica, que comenzó a olvidar como respirar al tiempo que su corazón latía desbocado, cerró los párpados cubriendo sus jades ojos a medida que el bronceado rubio se acercaba a sus labios.

Hasta que un flash los sacó de la burbuja donde estaban.

—Lo lamento —se disculpó el fotógrafo—. Estoy en un recorrido por el lugar para una revista y la escena me pareció perfecta.

—Eh… —Sakura se quedó sin palabras, mientras veía la figura de Naruto acercarse al otro hombre a hablar.

Por supuesto, no querría salir en una revista con una niña. Sin embargo esa era la menor de sus preocupaciones, se llevó una mano al pecho sintiendo los latidos de su agitado corazón. ¿Sería posible que ella…?

—¿Vamos a comer? —le ofreció el rubio una vez hubo regresado, ofreciéndole la mano.

—Claro —le sonrió tomándola y dejándose llevar.

Comieron sin ninguna otra fotografía inoportuna y disfrutaron el resto de la tarde, con uno que otro comentario de Naruto haciendo alusión a la reciente descubierta adicción a los dulces de su joven acompañante.

—¡Ya entiendo por qué eres tan dulce! —le había comentado con una felicidad algo extraña.

Llegó la noche y finalmente regresaron a la cabaña. Sakura se metió a bañar, se sentía muy agotada y cuando salió Naruto tomó su lugar en el baño, en ese momento lo recordó.

—Que buena está el… —Naruto quedó mudo y paralizado donde estaba, con los ojos abiertos como platos, las pupilas dilatándose y cierta parte de su anatomía cobrando vida.

—El agua, lo sé —Sakura sonrió satisfecha, un babydoll de encaje color blanco “cubría” su cuerpo de forma delicada, delineando su contorneado cuerpo. A juego, solamente una panty tipo cachetero del mismo encaje,

Naruto resopló inaudiblemente, la miró de arriba abajo y se acercó a la cama, Sakura solo estaba sentada con una mirada que a él le pareció peligrosa, estaba disfrutando el sentirse deseada de aquella forma, el rubio le tendió la mano y la hizo levantarse de la cama para darle una vuelta, escaneándola completamente. Cuando la tuvo nuevamente de frente a él la acercó a su cuerpo pasando una mano por su espalda baja, Sakura pegó el pecho al del rubio y lo observó directamente a aquellos azules ojos opacados por el deseo.

—Estás… increíble —logró susurrarle él con voz ronca e impersonal, la pelirrosa como toda respuesta lo abrazó por el cuello y alzándose un poco sobre sus propios pies lo besó.

Fue suave, apenas un roce de labios que él le correspondió, después del contacto inicial el hombre aplicó más fuerza en el dorso de ella besándola con profundidad, inspirando profundamente mientras invadía su boca con su lengua, recorriendo cada recoveco casi con hambre, inspirando profundamente inhalando su dulce aroma. Ella por su parte colocándose ya de puntitas en sus pies enredó una de sus manos en las hebras del chico ejerciendo un poco de presión al mismo tiempo que correspondía a su beso con la misma intensidad, acallando un suspiro de deseo en los labios del bronceado hombre.

Soltando un pequeño gemido de sorpresa cuando sintió que la levantaba del suelo, Naruto la observó con una sonrisa distinta, no era coqueta ni peligrosa, no había malas intenciones. Era sencillamente… extraña. La dejó con sumo cuidado nuevamente en las sábanas blancas del mullido colchón y se montó él sobre ella, apoyándose con los codos para no aplastarla con su peso, la volvió a besar con suavidad y varias veces, pasó una mano a uno de sus costados enviándole escalofríos a todo su cuerpo.

¿Qué estaba haciendo?

Sintió sus labios posicionarse sobre su frente, sus mejillas, sus párpados, bajando hacia la delicada piel de su cuello la cual besó y lamió con cuidado, a medida que subía la tela lentamente para quitársela dejando al descubierto sus pechos. La pelirrosa soltó un suspiro ahogado cuando sintió su húmeda lengua rozarle uno de sus pezones que automáticamente se puso erecto, momentos después se vio arqueando la espalda mientras gemía con suavidad al tener al rubio mordiendo y succionando el mismo punto. Siguió bajando sus caricias hasta el abdomen, lamiendo suavemente su ombligo para luego soplarle un poco haciendo erizar su piel.

Bajó un poco más, tomando el elástico de la última prenda que le quedaba y retirándola con lentitud sin dejar el camino de besos.

—Quédate así —la detuvo al ver que se levantaba, Sakura no entendía muy bien lo que sucedía pero le hizo caso al tiempo que se retiraba el paño que tenía amarrado a la cintura, quedando ambos en igualdad de condiciones.

—¿No tengo derecho a hacer nada? —preguntó ella con tono juguetón.

—Claro que sí, Sakura-chan —le respondió el, nuevamente sin malicia, mientras se acomodaba entre sus piernas—. A disfrutar —Sakura se esperaba una invasión repentina a su cuerpo, cosa que no llegó.

Por el contrario, él se dedicó a volver a besarla con lentitud sin dejar de acariciar sus brazos, su cintura, bajando hasta sus piernas, tomando una a una haciéndola rodearle la cintura con las mismas, rozando su miembro erecto contra su feminidad. Él la sujetó firmemente de la cintura contra la cama cuando la sintió moverse.

—No seas impaciente mi pequeña —le susurró con una sonrisa y volvió a besarla. La pelirrosa se encontraba algo confundida, aquello no era a lo que estaba acostumbrada con el rubio, que se resumía a sexo alocado y un poco salvaje de vez en cuando.

Por el contrario, estaba siendo pausado y atento, recorriendo cada rincón de su cuerpo, sintió que en esos momentos él conocía hasta los lunares que ella misma ignoraba en su anatomía, sentía la excitación a flor de piel con cada roce, cada lamida y mordida, sentía que su centro se contraía con doloroso deseo, expectante y a la vez extasiada. Parecía, que él estuviera haciéndole el…

—¡Aaah, Naruto! —no sabía de dónde había surgido aquel gemido, pero no pudo evitar que escapara de sus labios cuando sintió que la penetraba lentamente, sin prisa alguna.

—Eso pequeña —le susurró al oído con voz ronca el ojiazul.

Ella cerró los ojos al sentir su miembro separar sus húmedas paredes con una calma excitantemente exasperante, embistiéndola con igual calma, deliciosa calma. Ella sintió la necesidad de apretar más el agarre de sus piernas alrededor de la cintura del rubio, acariciando y rasguñando con suavidad la ancha espalda del hombre que la estaba poseyendo con una increíble pasión. Él construía con calma el orgasmo de su acompañante femenina, Sakura casi le agradeció que le permitiera finalmente mover sus caderas al ritmo de las suyas, jamás había disfrutado tanto de un encuentro sexual como aquel.

El rubio atacó inmediatamente el cuello de la chica hasta bajar a sus pechos nuevamente, sintiéndose cerca de su propio éxtasis, el cual solo se vio precipitado al sentir las fuertes contracciones de las paredes vaginales alrededor de su miembro, se derramó dentro de ella casi sin poder evitarlo, cerrando ambos los ojos con fuerza, ella gimiendo con algo de fuerza mientras él ahogaba los suyos contra su nívea piel, deleitándose con su voz.

Luego de bajar del cielo de placer al que habían llegado, Naruto salió de su cuerpo y se acostó a su lado, ella se acomodó sobre su pecho, acariciándolo con una mano.

—Sakura-chan —le susurró luego de unos segundos silenciosos.

—¿Hnm?

—Deberíamos hacer esto… más seguido —su diálogo se vio entrecortado por un bostezo, la pelirrosa no le respondió.

Se dio cuenta que el rubio se había dormido al notar su respiración acompasada, los dedos que habían estado jugando en su espalda haciéndole cosquillas también se habían detenido, ella sin embargo se sentía incapaz de conciliar el sueño. Algo dentro de su pecho se sentía cálido y lleno, escuchaba el acompasado ritmo del corazón de su amante mientras pensaba.

¿Qué había sido aquello? ¿Por qué tanta atención y detalle? ¿Por qué tanta calma? Y lo más importante de todo, ¿por qué ella lo había disfrutado tanto? ¿Por qué se sentía…?

Un ronquido hizo que ella volteara a verlo con cuidado y sus señales de alarma se encendieron al escucharse a sí misma suspiras con una tonta sonrisa en los labios. ¡Oh no!

Casi sintiéndose entrar en pánico se levantó con cuidado de entre sus brazos, recogió del suelo el babydoll y se acercó al banco que estaba en el alfeizar de la ventana a observar el cielo nocturno. Se pasó una mano por la frente y el suspiro que dejó escapar esta vez estaba cargado de frustración. ¿Es que acaso estaba empezando a sentir algo nuevamente por el Uzumaki?

¿A caso… Naruto le había hecho el amor aquella noche?

Luego de dar vueltas en su cabeza una media hora, solo la sacó de su ensimismamiento unas manos grandes y fuertes masajeando sus hombros.

—¿Problemas para dormir? —le preguntó el rubio con suavidad.

Sakura dirigió sus verdes orbes a él, divisando su silueta iluminada tenuemente por la luz de la luna, él le sonreía nuevamente sin malicia a pesar de estar completamente desnudo frente a ella, sus ojos tenían ese extraño brillo otra vez que le hizo alterar el pulso.

—No lo hagas —fueron las palabras que salieron de su boca. El rubio la observó entonces confuso.

Ella tomó la iniciativa sin tener intenciones de aclararle nada, lo hizo sentarse en el centro del banco y se montó sobre él rozando su intimidad descubierta contra su miembro, lo besó ardientemente, con deseo… con desesperación. Enredó nuevamente las manos en la mata de cabello rubio y él le correspondió con la misma pasión, dejándose hacer esta vez al antojo de la mujer, un gemido de placentera sorpresa se vio suprimido por ella que no se permitía abandonar sus labios, una vez lo había sentido totalmente erecto lo había tomado suavemente con una mano y lo deslizó en su interior con algo de facilidad. Naruto tomó las caderas de Sakura con ambas manos sin embargo la dejó llevar su ritmo al tiempo que ella se sujetaba a sus hombros, liberando finalmente sus labios para menear sus caderas de forma sensual.

Él solo la observaba, era como una erótica sirena que lo estaba poseyendo sin una pizca de vergüenza (o piedad), el destello de la luna la hacía lucir misteriosa, mítica e hipnotizante. Le encantaba totalmente.

Esa noche se unieron físicamente tres veces más, y para uno de los dos, estaba claro que esa conexión estaba llegando a un nivel sentimental.

Y no sabía si eso sería bueno o malo.

.-*---------------*-.
Continuará
.-*---------------*-.

... -inserte aquí drama por no avisarme que estabas con un proyecto entre manos!-

No me dijiste;-; no me comentaste que planeabas escribir, NO ME AVISASTE PARA SER LA PRIMERA EN COMENTAR! SNIFFFFFFF -llora en un rincón- Al menos me di cuenta antes de que lo finalizaras ;_;   me vengaré (?) aunque será difícil ya que eres mod y ves todo >:c no puedo burlar tu omnipresencia >:c, algo se me ocurrirá (?)

Ok, fuera de drama :'D cofcof... JOULIMODEROFMIAUMIAUÑAU OWO dsalkfdskadsak querida, tu sabes los efectos que me causas al escribir, esa escritura tan característica tuya me encanta, me parece extraño que el fic haya sido visto en otro lugar... de hecho, esta es una idea bastante Nathalie para que otra persona la haya usado.

Me gusta la trama que le das, la ambientación, y las cosas realistas como agregar el wassap, el trabajo duro en el hospital, que a las mujeres no siempre les gusta rico y suave, si no que también les gusta salvaje y rudo (?), por eso y muchas cosas más, tu shot se vuelve único. (normalmente no se ven muchos shots de la vida real real, siempre leo cosas como "se conocieron, van de citas, con suerte hablan por teléfono, se casan y son felices por siempre") No señores! vivimos en un mundo moderno donde la tecnología nos tiene como zombies a su disposición! Donde se trabaja más de 8 horas por un sueldo que solo sirve para llorar!, Donde los estudiantes de medicina son sobre-explotados! Donde las mujeres quieren rudo y les dan suave!(?) por eso, voten por mi para reina de Narnia y todo esto acabará! -momento de publicidad electoral, ¿Qué rayos dije?-

cofcof, ahora si, me concentro >:c

La historia me parece bastante realista, no sé, al imaginarme el hospital tal como lo describes me parece que todo esta en orden (cuadra con la realidad), sé que pasas la mayoría de tu tiempo allí, lo que explicaría el trabajo bien logrado del hospital en su totalidad. Me agrada el toque que le das a tus fics al agregarle la temática de la medicina, los hace tuyos y logras adecuarlos a la perfección.

¿Faltas de ortografía? Por favor! en lo que leí no divisé ninguna falta notoria u oculta, eres un diccionario con cuerpo(?)

La narración es hermosa, ligera y no se hace difícil de leer, además tus toques de no seriedad al escribir me gustan mucho, los usas en momentos precisos y con su medida adecuada (ej: Lógicamente, TenTen estuvo al borde de uno o dos infartos, y tras unos ocho casi-insultos mientras le iba contando todo), lo que hace que la lectura te transmita el sentimiento vivido en ese momento por los personajes.

¿El lemmon?        Pues, es lemmon escrito por ti, ¿cómo no habría de gustarme? xDDDDDDDD fdnsajkf

Siento que me estoy pareciendo a estos tipos que evalúan las cosas con cada detalle ;_; iugh. Buano, yo sé que te gusta que te den críticas constructivas y a la vez que te digan cuando algo no esta funcionando, guiándome por eso, el consejo que te daré es: "Sigue tal como lo haces querida, tu fic va por un excelente camino."

Me deja muy a la expectativa que sucederá con la relación de Naruto y Sakura, al parecer ambos se están gustando más de lo que deberían, pero... ¿La pelirrosa le perdonará -u olvidara- su pasado de P-E-R-R-O?, ¿Se enterará alguien inadecuado? ¿Los pillaran en el acto? OMG! ya quiero el siguiente capitulo!!! Avísame cuando lo subas o te golpearé ^^

Mucho lov para ti

Espero el siguiente capítulo! Dedícamelo!

Buen capitulo, no lo lei... pero debe ser bueno :v

Mentira, si que lo lei, de hecho me quedo con esta frase de Tenten.

Nathi escribió:...Ahora, vas a ir a esa salida, la vas a disfrutar, te lo violarás salvajemente y luego seguirás con tu vida.

Gran consejo xDDD

Aunque por como se esta desarrollando las cosas, parece que no va ser tan sencillo para Sakura hacer eso... debido esencialmente por como se comporto Naruto en este capitulo con ella.

Espero la conti y ademas espero que avises cuando salga, que ahora lo vi de pura casualidad :v

Hermoso... Que notable este último capitulo Lima... No tienes idea como lo disfrute... narracion perfecta, transmitiste muy bien como se encuentra la pelirosa en estos momentos, gran dilema. Creo percibir que lo que sienten ambos ya es mucho más que "diversión". La pregunta es... ¿habrán dado cuenta?.
Sakura al parece ya lo hizo... Esperemos que el rubio tambien. Quiero creer que si.

En fin, notable cap, de verdad estuvo inspirada. Como siempre eigo: estare atento a sus updates, estimada.
Saludos!

Excelente la historia aunque desde cierto punto, al paso que lo veo, esto ya no seria un OneShot xD
Destacablemente no tiene muchas fallas ortográficas, y bueno el lemon... meno ni comento

Mil años más tarde traigo la actualización de esto ;-; lamento de verdad muchísimo la tardanza pero finalmente soy libre de cargas académicas, prometo terminarlo!!

Disclaimer: ni Naruto ni sus personajes me pertenecen (por desgracia), este ff es publicado sin fines de lucro. OOC.

Rated: +18.

Pareja: Naruto x Sakura


Últimamente había estado de muy buen humor, no dejaba de sonreír y su curiosa relación con Naruto seguía un cauce más curioso todavía; el rubio doctor ahora se preocupaba de enviarle mensajes de buenos días, buenas noches, le daba dulces e incluso habían salido varias veces bien fuera al cine o simplemente por un helado; la ayudaba en lo académico (se lo pidiera ella o no) y en su cumpleaños le había dejado un hermoso ramo de rosas y un peluche que ella adoró, así habían pasado casi ya siete meses, aunque Naruto no llegó a salir con ella y sus amigos, siempre la pasaban muy bien en las guardias e incluso llegó a comer varias veces con ellos en la azotea.

La ojijade sencillamente andaba en una pequeña nube de felicidad, estando ya a pocos días de culminar sus estudios sentía que no existía cosa en el mundo que pudiera opacar su estado anímico. Como si fuera poco, hacía segundos acababa de culminar su última evaluación de clínicas y aunque iba montada en unos tacones de 15cm, sentía que podría saltar y no romperse el cuello en el intento (aunque por mero cuidado, decidió no tentar al destino).

Caminaba felizmente por los pasillos en dirección a su habitación con el fin de buscar las llaves del auto, iría con sus compañeros por una justa celebración… ¡Sí señor! Era lo mínimo que se merecía después de tanto estrés y sacrificio.

—Sakura-chan —ese apelativo solo podía ser de él.

—¡Naruto! —lo miró con una sonrisa radiante, su estado de felicidad fue lo que tal vez le hizo ignorar el gesto estresado que llevaba consigo el rubio—. Iré con los muchachos al apartamento y nos alcoholizaremos hasta que no sepamos ni siquiera qué es un hueso —comenta la pelirrosa de manera entusiasta, ambos sabían que era mentira, ella en su vida había conocido lo que era una borrachera—. ¿Vienes?

—Sabes que estoy de guardia Sakura-chan —Naruto hizo una pequeña mueca y su tono sonó algo disgustado, sin embargo nuevamente pasó desapercibido.

—¡Lo olvidé! Bueno, te veo mañana ¿sí? —Sakura se acercó y le plantó un pequeño beso antes de irse sin esperar respuesta alguna.

Al día siguiente despertó con un cansancio enorme encima cerca de las tres de la tarde, había un pequeño desastre en la sala del apartamento, Ino se encontraba en uno de los sofás durmiendo de forma un poco indecorosa, sus amigos se habían ido del lugar cerca de las 6 de la mañana y ellas no habían podido con el agotamiento, ni siquiera se habían cambiado o retirado el maquillaje. La pelirrosa fue al baño a arreglarse de forma casera para cocinar un almuerzo rápido y ordenar el lugar, solo entonces se dio cuenta que su teléfono estaba apagado y lo puso a cargar.

Al regresar al estar, Ino estaba también con ropa casera y ambas se dispusieron a ordenar con un poco de música de fondo, agradecían al cielo no tener resaca alguna o la tarea se hubiera hecho imposible, al terminar fue a su cuarto y antes de seguir durmiendo encendió su móvil. Se sorprendió un poco al ver que no tenía ningún mensaje de Naruto desde antes de que lo viera el día anterior en el hospital, sin embargo lo atribuyó a que tal vez quiso dejarla disfrutar de su celebración, así que lo dejó a un lado y volvió a dormir cómodamente esta vez en su cama.

Se levantó nuevamente en la madrugada, se preparó un tentempié y volvió a tomar su celular. Nada. Decidió escribirle ella primero.

Sakura : espero que hayas tenido una buena guardia tontico.

No se le daba muy bien eso de tiernos apelativos, Naruto, por el contrario parecía tener todo un repertorio de nombres cariñosos por los cuales poder llamarla.

-

Eran las 2 de la mañana, no esperaba que le respondiera en realidad. Fue hasta su escritorio y abrió una de las gavetas sacando dos sobres distintos, uno de Konoha y otro de Suna.

El de la Ciudad de la Arena era una oferta laboral y de estudio, podría realizar su especialización de forma inmediata y con una beca que cubriría el 50% del total de la misma y con el sueldo que tendría, podría pagar con ciertas comodidades su estadía sin tener que acudir a sus padres si lograba moderarse.

El de Konoha, era también una oferta de empleo para quedarse como residente en el hospital. Podría estar con Naruto, tal vez no en la misma área (ella DETESTABA pediatría), pero podría cuadrar su horario para que coincidieran en guardias.

Su corazón latió con emoción, no le había dicho nada a su rubio, quería darle la sorpresa, no tenía ninguna prisa en sacar la especialización, quería disfrutar su tiempo como médico general, firmaría el contrato una vez obtuviera el título y tal vez, se enseriara un poco más su relación.

—¿Qué me has hecho, tontico? —preguntó a la nada, sonriendo como tonta enamorada, guardó los papeles en espera de ser respondidos y se puso a estudiar para su presentación de tesis.

-

La vibración del teléfono sobre su cómoda de noche la hizo saltar en el lugar donde estaba, estaba demasiado concentrada en lo que leía, se habían hecho ya las 6 de la mañana, llevaba cerca de 4 horas estudiando sin cansancio.

Naruto : estuvo bien.

La pelirrosa arqueó una ceja.

—Que respuesta más seca —dijo en un murmullo.

Sakura: mucho trabajo?

Naruto: más o menos. Hablamos después Sakura

—¿Sakura? —repitió ella con cierta incredulidad, ¿dónde había quedado su chan? ¿Habría pasado algo? Decidió no molestarlo más hasta que él se considerara en un humor apto para hablar y sencillamente dejó su móvil de lado.

Tac-tac-tac-tac…

El sonido del lapicero al golpear contra la base de madera fue lo único que ocupaba su mente mientras releía por quinta vez el párrafo donde explicaba la importancia del factor de necrosis tumoral como mediador de la inflamación.

Maldición.

Tomó el teléfono y mordiendo su labio inferior tecleó con lentitud. Insegura. ¿Debería mandarlo? Era algo que en ese momento le nacía pero ¿sería correcto?

Sakura: está bien…

No, no podría enviarlo. Se sentiría ridícula.

Sakura: te quiero.

Maldición.

En el preciso instante en el que lo mandó quiso morir, ¿en qué carajos estaba pensando? Te quiero…

—¡Por favor Sakura Haruno! —ahora sí luciría como la propia estúp…

Naruto: yo también te quiero pequeña.

Su corazón se saltó un latido y creyó que moriría en ese preciso instante.

¿Él también? ¿¡Él también!? ¡Sakura respira! Un leve quejido salió de su boca al recordar que para vivir, debía consumir el vital oxígeno para sus pulmones. A la mierda la concentración.

Sakura: TEN!!!

Ten-Ten: qué sucede rosa???

Sakura no pudo evitar contarle con una adolescente emoción lo que acababa de ocurrir.

Ten-Ten: Rosa, no quiero pinchar el globo de ilusiones en el que estás metida, solo quiero recordarte que Naruto tiene un pasado bastante oscuro

Sakura: lo sé Ten, pero todos tenemos un pasado y creo que vale la pena darle el beneficio de la duda

Sakura: si así lo piensas… pero sabes que igual te diré “te lo dije” si el caso llegara a ameritarlo

Sakura sonrió, por supuesto que lo sabía. A las pocas horas, Naruto le había escrito una disculpa y le explicó que estaba teniendo problemas con la madre de su hijo, era una de las pocas veces que hablaban del tema de forma directa, y Sakura sintió que su vínculo se afianzaba un poco más.

-

Pasaron 2 semanas, Sakura finalmente había culminado de forma académica y luego de una excitante celebración privada con su rubio pediatra favorito, y una pública que fue la primera vez que salieron al público y en compañía de amistades, había elegido un día que sabía, Naruto no estaría en el hospital para ir a firmar el contrato.

—Sakura —una voz la detuvo, se volteó al reconocerla de inmediato.

—Karin —dijo casi en un susurro.

Las dos se encuentran sentadas una frente a la otra, algo en el pecho de la ojiverde la hacía sentirse intranquila, se removió incómoda en el asiento esperando a que la de lentes le hablara, pero en vista de que no parecía tener la menor intención de hacerlo, decidió comenzar ella.

—¿Dónde has estado?

—En Kiri —respondió secamente la pelirroja—. Sakura, necesito pedirte un favor —los ojos se le inundaron en lágrimas, Haruno no supo que hacer.

-

Sakura: necesito que vengas al apartamento.

Naruto: claro pequeña, sucedió algo malo?

Con una mirada un tanto sombría, Sakura aguantó la respiración mientras escribía que le urgía que fuera a verla, el rubio no se hizo esperar.

—Sakura-chan, ¿pasó algo? —preguntó nada más llegar, angustiándose un poco al ver el gesto de su pequeña pelirrosa que lo esperaba en el marco de la puerta.

—Pasa —ella se hizo a un lado sin verlo directo a los ojos. Naruto con gesto preocupado le hizo caso.

—¿Vas a decirme qué sucede? —intentó suavizar el ambiente, brindándole una de aquellas sonrisas tranquilizadoras que a ella la volvían loca mientras la tomaba por las manos, ella sintió el contacto de su cálida piel acariciar el dorso de sus manos, lo miró a los ojos con algo de temor, el color celeste pareció resplandecer ante la tenue luz del recibidor, estaba genuinamente preocupado.

No pudo responder, sencillamente se lazó a sus brazos, rodeando su cuello y besándolo con pasión y tanto arrebato que lo hizo retroceder hasta tumbarlo sobre el sofá, agradeció que Naruto no hiciera preguntas y sencillamente le siguiera el juego.

Casi no lo dejaba respirar entre beso y beso, quitó con premura su camisa y la tiró al vacío al tiempo que se quitaba el corto vestido que llevaba puesto, el rubio la tomó por la cintura y con presteza la dejó debajo de su cuerpo recostada a lo largo del sofá, mordió su cuello haciéndole soltar un gemido al tiempo que metía las manos debajo del brasier para aprisionar sus senos, Sakura encajó sus uñas en la espalda del rubio, sabía que eso lo volvía loco y una corriente de excitación la recorrió a través de su espina dorsal al sentir como el hombre desgarraba su ropa interior e invadía su húmedo sexo con los dedos para juguetear con ella.

—¡Naruto…! —gimió moviendo la pelvis al compás de sus movimientos.

—¿Qué deseas pequeña? —le encantaba que le hiciera saber que lo deseaba, ¡y Dios como lo deseaba en ese momento!

—Te deseo a ti —se mordió el labio inferior al tiempo que le desabrochaba el pantalón, pero él la detuvo con un aire juguetón asomando por sus orbes—. Naruto —casi le rogó.

Su mirada de repente tomó un aire un tanto siniestro, ella se sintió contraer de forma involuntaria y casi sin aviso, se vio dulcemente invadida por el hombre que estaba con ella; no pudo hacer nada más que dejar salir un pequeño grito de satisfacción y aferrarse al borde del mueble.

—Sakura… Dios —Naruto comenzó su decadente ritmo, poseyéndola como sabía que a ella le gustaba, no muy rápido, con fuertes penetraciones e inundándola de besos y caricias, posesivo y cariñoso.

La estaba volviendo loca.

Finalmente sintió su vista nublarse y se desvaneció en un océano de placer mientras sentía a Naruto gemir su nombre, había llegado también a su propio orgasmo, recostando la cabeza sobre su pecho con su agitado respirar, ella de manera inconsciente, casi por reflejo, lo abrazó para colar sus dedos entre sus rubias hebras y juguetear un poco.

—Sakura-chan —la llamó luego de haberse quedado unos pocos minutos en aquella posición, finalmente levantó el rostro del espacio entre los senos de ella, la pelirrosa le dio su atención—. Sé que tienes algo que decirme pero de verdad me estoy muriendo por hacerte una pregunta —Sakura sintió como su garganta se cerraba—. ¿Quisieras ser mi novia, Sakura-chan?

.-*Flash Back*-.

—Sakura, necesito pedirte un favor —La voz de Karin sonó débil, y Sakura pudo ver reflejado en sus ojos un sentimiento de temor.

—Dime —su voz sonó algo impersonal.

—Verás…

.-*Fin Flash Back*-.

Sakura se levantó haciéndolo a un lado sin decir una palabra, el ojiazul la observó confundido mientras ella se vestía.

.-*Flash Back*-.

—Hace unas dos semanas… fui al hospital y me encontré con Naruto cerca del cuarto de especialistas —a Sakura todo aquello le dio mala espina—, no lo tenía planeado, él simplemente estaba de mal humor —recién notó que el día de su última evaluación de Pediatría, él en realidad no había mostrado entusiasmo alguno sino hasta después de dos días cuando se reunieron para almorzar—, yo intenté animarlo un poco… pero al final terminamos en el cuarto y…

—Entiendo —Sakura tuvo la imperiosa necesidad de impedir que Karin terminara la frase, de no ser por el labial que cargaba sabía que en ese momento luciría tan blanca como una hoja, y sentía como dentro de su pecho algo se rompía.

.-*Fin Flash Back*-.

—¿Sakura-chan? —Naruto no sabía de qué forma reaccionar, Sakura cerró los ojos con fuerza notando cómo las lágrimas comenzaban a salir, siendo incapaz de voltear a verlo.

.-*Flash Back*-.

—Tengo un retraso —la voz de la pelirroja se quebró.

La ojijade no supo qué hacer, sentía que no podía respirar, parecía una pesadilla o una bruma sumamente pesada.

.-*Fin Flash Back*-.

—Vete Naruto —no pudo hacer que su voz sonara firme como lo hubiera deseado.

—¿De qué hablas? Pequeña no compr…

—NO ME DIGAS PEQUEÑA —gritó dándole por fin la cara, con las mejillas húmedas. Él se acercó preocupado al tiempo que se vestía.

—¿Por qué estás llorando? Sakura por favor, explícame —su voz sonó a súplica y Sakura solo logró atinar a acercarse a la puerta para abrirla.

—Tú y yo nunca tuvimos una relación Naruto, ni la tendremos —le dijo lo más firme que su estado emocional le permitió.

—No comprendo Sakura —respondió con voz derrotada mientras se acercaba a ella con lentitud, intentando no alterarla.

—Nunca hubo nada que comprender Naruto, lo nuestro fue sencillamente algo platónico, solo sexo y ya.

—Te equivocas Sakura, para mí es algo verdaderamente serio —le replicó con voz dura.

—Díselo a Karin la próxima vez que te la encuentres en el hospital —soltó con toda la furia y el dolor que pudo de forma pausada y clara, el hombre que tenía frente a ella palideció y se quedó sin palabras.

.-*Flash Back*-.

Karin salió del baño con la prueba de embarazo en la mano, no miró a otro lado, parecía en shock.

—¿Karin? —Sakura se temió lo peor, y al ver que no reaccionaba le quitó el aparato.

.-*Fin Flash Back*-.

—Y a la próxima vez usa condón, le ahorras a ella el susto de pensar que estaba embarazada y a mí el mal rato de que me busque para eso —le dijo con resentimiento.

Naruto supo que en el momento lo más sabio era irse, y así lo hizo. Sakura cerró la entrada de un portazo y no pudo evitar llorar, sintiendo parte de sí romperse de forma lenta y dolorosa.

.-*Flash Back*-.

Negativo… No estaba embarazada.

.-*Fin Flash Back*-.

.-*---------------*-.
Continuará
.-*---------------*-.

Un intenso capitulo....

Justo cuando su relación estaba en su mejor momento, sucede lo de Naruto con Karin... me dio tristeza por Sakura.

Falta un capitulo para que termine esta historia no tan corta... estoy intrigado para ver como lo terminas.